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Spiteful Fate por carina_mew12

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Notas del capitulo:

hola a tod@s!! owo/

debo admitir que este capitulo está listo desde hace casi una semana pero no pude subirlo porque tuve un pequeño problemilla familiar u.u y el problema sigue ahí, pero es un poco menos grave así que me escapé para traerles el capi

nos vemos abajo~

14. Operación: Encubierto part 2

Momentos antes…

Sus brazos se sentían adormecidos al igual que sus piernas y el calor comenzaba a asfixiarle pero se sostuvo todo el camino como Sanji había dicho. Se pegó más al cuerpo del rubio y contuvo la respiración cuando escuchó que estaban dentro de la habitación y las voces comenzaban a rodearle; debía mantenerse sumamente quieto hasta que encontraran la oportunidad de seguir con su plan.

- necesito ir a refrescarme- Luffy abrió los ojos, esa era la señal. Esperó unos minutos mientras el cocinero se movía de la habitación hasta el baño, en donde finalmente abrió su pesado abrigo- listo Luffy, puedes salir- el pelinegro se asomó por un costado, viéndose reflejado en el espejo; sus piernas y brazos rodeaban el cuerpo de Sanji, manteniéndole escondido debajo de su abrigo para que pudiera entrar sin ser detectado- ¡suéltate de una vez mocoso! ¡Estás muy cerca!

- ¡ah, sí!- se deslizó por las largas piernas del mayor y se dejó caer de sentón en el suelo, soltando finalmente al otro- hacía mucho calor ahí dentro, shishishishi

- ¡no hagas eso idiota!- se podía notar que tenía erizado los vellos del cuerpo, sin mencionar esa palidez que de pronto invadió su rostro, parecía enfermo- ser tocado así por un hombre… qué desagradable…

- pero si Zoro…

- el marimo es otro asunto- le interrumpió y se dirigió hacia el lavabo, donde comenzó a mojarse la cara- parece que nadie sospecha, podemos seguir- tras refrescarse un poco golpeó la puerta tres veces y en pocos segundos la puerta se entreabrió- ¿lo encontraste pingüino?

- no me llames pingüino- gruñó Penguin del otro lado de la puerta- y sí, lo encontré. Andando- el rubio abrió la puerta y salió junto a Luffy. Tras caminar unos cuantos metros, el pelinegro señaló hacia arriba, donde se podía ver una reja de metal.

Penguin se agachó para subir al menor de los tres a sus hombros y ayudarle a llegar a la reja, la cual zafó sin problemas. La abertura de la ventilación tenía apenas el tamaño exacto para que Luffy pasara por éste; se impulsó en sus brazos y entró al estrecho lugar, estornudando unas cuantas veces debido al polvo acumulado. Una vez estuvo dentro, Sanji y Penguin colocaron de nuevo la rejilla.

- ya conoces el plan Luffy- le habló el rubio- en cuanto veas la señal llévate a Ace y salgan de la mansión, nosotros los alcanzaremos después

- ¿qué hay de Torao?

- no te preocupes, Shachi y yo salvaremos al jefe- le aseguró el pelinegro con una sonrisa antes de marcharse con el cocinero.

Y ahí estaba Luffy, solo dentro del ducto de ventilación. No sabía cuánto tiempo tenía pero debía moverse o no encontraría a su hermano mayor. Se deslizó por el pequeño ducto metálico, esquivando telarañas y bichos muertos mientras miraba por cada rendija que se encontraba en su camino; vio al menos unas cuatro habitaciones distintas antes de encontrar a su hermano sentado a la orilla de la cama vestido de una forma elegante, como si fuera a una fiesta. Se vio tentado a llamarle pero pronto se dio cuenta que no estaba solo, había tres hombres con él. pronto la puerta principal de la habitación se abrió y aquellos hombres se llevaron a su hermano a otro sitio.

Rápidamente avanzó por el ducto para seguir a su hermano hasta otra habitación, en donde había mucha más gente. Reconocía a todos los presentes de los informes que le había mostrado su abuelo como los más buscados en el bajo mundo.  Aunque el único que le interesaba en esa sala era Doflamingo, el cual tenía justo debajo de él. La sangre de Luffy hirvió al ver que ese desgraciado trataba a su hermano mayor como un muñeco de trapo, golpeándole contra la mesa. No pudo hacer más que apretar los puños y morderse el labio inferior… tenía que esperar, se lo había prometido a Sanji.

De su conversación no entendía mucho, no sabía quién era ese tal Roger del que hablaban y tampoco sabía qué eran esos papeles que pasaban de mano en mano… ¿y esas cajas de madera? Sus ojos se abrieron como platos al ver todas esas armas, y peor aún al saber que cada bala estaba destinada para su hermano mayor… no lo permitiría, ninguna de esas balas atravesaría a su hermano, iba a salvarlo a como diera lugar…

- un momento, aún no abrimos el sobre- escuchó la voz de Sanji- nada nos asegura que sea hijo de Roger

- no se le escapa nada, Don Sanjino. Quien abra el sobre no seré yo, sino el hombre de mi entera confianza, mi hermano Corazón, pero ya que aún no aparece… ¿le gustaría una pequeña ventaja, Don? considerando su… escasa visión, dejaré que dé el primer disparo. Claro, no será en algún órgano vital, pero tendrá una ventaja si el ganador se determina por el número de balas- puso atención a lo que pasaba, si se distraía demasiado podía perderse la señal; tan sólo debía esperar.

Se suponía que era él aquel bulto que estaba en el suelo y al cual Doflamingo acababa de dispararle sin reparos así que no sospecharía que estaba justo arriba de su cabeza… sólo tenía que esperar a que Sanji leyera ese papel y lo tirara al suelo para poder irrumpir en la habitación y tomar a su hermano… y de pronto entró alguien más, un rubio muy parecido a Doflamingo, ¿quién era él? no lo había visto jamás en los archivos pero a simple vista no parecía una mala persona… un momento, ¿ese que acompañaba al rubio era Torao? No pudo esconder una amplia sonrisa, Torao estaba en la habitación así que sería más fácil para ellos sacar a ambos de ahí y escapar, o al menos eso creyó…

Tan pronto los invitados leyeron el papel algo denso cubrió el ambiente, era tan pesado que hacía que respirar fuera más difícil… algo andaba mal. Doflamingo repentinamente estaba hecho una ira y le gritaba a Ace, quien por estar atado no podía responder o defenderse; y luego arrojó la hoja al suelo antes de que Sanji pudiera sostenerlos siquiera. Eso no estaba en el plan, ¿qué se supone que debía hacer ahora? Aunque siendo técnicos, la señal había sido dada sólo que por una persona diferente; los papeles ya estaban en el suelo, esa era la señal…

- ¡¡MINGO!!- gritó con todas sus fuerzas mientras maniobraba dentro de la ventilación. Se las ingenió para maniobrar y quedar de cuclillas dentro del ducto, empujó con sus manos hacia arriba a la vez que impulsaban sus pies hacia abajo, botando la rejilla y ayudándole a salir para caer sobre aquel sujeto, incrustándole sus pies en su cara hasta derribarlo- ¡¡DEVUÉLVEME A ACE!!

- ¡¿Luffy?!-  el médico esperaba que ese que aplastaba a Doflamingo fuera una especie de alucinación a causa del estrés porque no había forma de que su querido Luffy estuviera ahí. Parpadeó algunas veces, pero no, la imagen no desaparecía, ¿cómo diablos había llegado ese mocoso a la mansión?- [[esos idiotas…]]- sus subordinados y Kuroashi estaban ahí, podía reconocerlos a través de sus ridículos disfraces, ¿qué hacían en ese lugar y cómo es que se atrevían a llevar al menor de los D. a un sitio tan peligroso?

Y no sólo Law, todos los presentes no cabían en su sorpresa al ver a aquel chiquillo salir de algún sitio; había sido tanto el desconcierto que nadie sabía qué hacer, incluso parecían haber dejado de respirar.

- ¡es el nieto de Garp!- gritó alguien entre el singular grupo de gente reunida, logrando así que los demás despertaran del extraño trance en el que estaban

- imposible- al caer en cuenta que efectivamente ese era Monkey D. Luffy, Monet se acercó al bulto del suelo y le quitó el saco de la cabeza para identificarlo; efectivamente era un cuerpo pero obviamente no era de aquel mocoso sino un cuerpo que reconoció al instante… era el mercenario que Vergo había enviado a asesinar al rubio y compañía, y por la piel pálida y lo rígido que estaba el cadáver debía tener varias horas en ese estado; su sangre debía estar seca ya, la sangre vertida en el suelo no podía ser del cuerpo y el par de ratas que escaparon desde adentro del saco en ese momento así lo confirmaron; su pelaje estaba empapado y el caminito de huellas que habían dejado dejaba ver el tono rojizo del líquido sobre ellas… su jefe le había disparado a unas simples ratas.

Un atronador disparó no sólo atrajo la atención de Monet sino también del resto de los presentes; aún en el suelo Doflamingo había levantado un brazo y disparó contra el chico encima suyo, pero Ace notó enseguida sus intenciones y soltó una patada al antebrazo del rubio, haciendo fallar su tiro por apenas unos milímetros, los suficientes para dejar tan sólo un rasguño en la mejilla de su hermano menor y además logrando que soltara el arma, la cual rodó por el suelo hasta que chocó contra el pie de alguien

- ¡¿qué esperan?! ¡¡Disparen!! ¡¡Que alguien dispare!!- gritó enfurecido Doflamingo antes de moverse con violencia, sacándose de encima al chico.

Los chasquidos de las pistolas cargándose se escucharon una tras otra y fueron apuntadas contra el invasor. Mas antes que alguien pudiera tirar del gatillo, un sorpresivo silbido detuvo el fuego, un sonido tan claro que se escuchó en varias partes de la mansión segundos antes de que las luces se apagaran completamente. Las armas comenzaron a ser disparadas una tras otra en todas direcciones sin importar en qué o quién fueran a chocar… los quejidos y gritos no tardaron en escucharse junto al eco de varias cosas rompiéndose, todo se había vuelto una verdadera zona de guerra.

Y entre aquella nube de balas perdidas, Law no sólo logró sacar a Luffy de ese lugar, también había literalmente arrastrado al hermano mayor de éste fuera de aquella habitación. Los tres salieron del sitio en una sola pieza, aunque el hombro del moreno había sido alcanzado por una de las tantas balas. Entre la oscuridad logró abrir la puerta de una habitación cercana y entró con los hermanos para ponerse a salvo al menos un momento

- ¿estás herido Luffy?- el médico encendió una pequeña lámpara que Corazón le había proporcionado para iluminarse un poco. Se aseguró de mantener su pequeña fuente de luz lejos de su hombro o notarían que estaba sangrando.

- estoy bien, ¿y Ace?- el pecoso gruñía y pataleaba en el suelo pues Law lo había tomado del cuello del saco y le había arrastrado por el suelo hasta ese lugar- ¡Ace!- el rostro del menor se iluminó enseguida al ver a su hermano a salvo; le arrancó la mordaza de un tirón justo antes de abrazarle con fuerza mientras comenzaba a moquear y a llorar cual cascada- pensé… pensé que no volvería a verte…

- ¿crees que dejaría solo a un mocoso como tú?- lo único que pudo hacer fue recargar su mentón en el hombro del otro. Tenía ganas de llorar también pero se contuvo, debía mantenerse fuerte para su hermano menor- jamás te abandonaría

- lamento interrumpir su ridícula reunión pero deben apresurarse y salir de aquí- odiaba admitirlo pero verlos así de cursis le estaba poniendo algo celoso. El moreno buscó entre sus ropas, sacando una pequeña llave que entregó al menor- Luffy, libera a tu hermano, yo sostendré la luz para que puedas ver- el chico sólo asintió y enseguida hizo lo que el moreno dijo

- creí que estabas atado- el pecoso miraba con resentimiento a Law, no terminaba de agradarle por completo ese hombre a pesar de haberle salvado

- no lo estaba, sólo mantenía las manos tras la espalda para que diera esa impresión. Todo fue plan de Corazón; el que se apagaran las luces, que yo te sacara de ahí, todo menos que esos idiotas trajeran a Luffy y a Kuroashi a este lugar- cuando el pecoso estuvo libre le entregó la lámpara junto con un par de armas de fuego que sacó de su abrigo- vayan al final del pasillo, luego tres puertas a la derecha, una a la izquierda y a la derecha otra vez. Encontrarán la puerta que lleva directo a la piscina, la policía ya debe estar afuera. Yo iré por Penguin y los demás

- ¡pero Torao, acabamos de reunirnos! ¿por qué debemos separarnos de nuevo?- el menor infló las mejillas en un puchero- se supone que vine a rescatarte también

- no voy a seguir las órdenes de un criminal- Ace separó a su hermano de sí sólo para ponerlo junto al cirujano de la muerte; odiaba admitirlo, pero si había alguien que pudiese sacar a su hermano de ese sitio era Law- tú llévate a Luffy, yo iré a buscar a Sanji y a los otros. Si algo llega a pasarle Zoro nunca me lo perdonará

- al único lugar que vas a ir es afuera. Sacarte de ahí fue una verdadera hazaña, no permitiré que regreses sólo porque tu estúpido ego no quiere recibir ayuda

- ¡¡No necesito TU ayuda!!

- ¡Me importa poco lo que necesites! ¡Todo esto es específicamente para sacarte de aquí con vida así que será mejor que lleves tu trasero fuera o yo mismo lo…!

- ¡cállense los dos!- Luffy irrumpió en la conversación de los mayores con un grito- ¡yo vine a salvarlos, así que los dos vienen conmigo!

- ¡ustedes no debieron venir a buscarme! ¡¡Nadie debió venir!!

- Portgas, ¿no lo escuchas? Hay una batalla allá afuera y si te quedas ellos ganarán, ¿cuántas vidas más piensas poner sobre tus hombros?- esas palabras pegaron duro en Ace, tanto que no supo cómo responderle- Luffy, llévate a tu hermano. Iré por los demás y nos veremos afuera, ¿de acuerdo? No te separes de él- tomó a los hermanos por la muñeca y juntó sus manos- no lo sueltes Luffy- tras colocar un beso en la mejilla del menor, Law salió de nuevo al pasillo y despejó el camino para que los hermanos D. pudieran escapar… Corazón había sido muy específico, los hijos de Roger no podían morir a manos de la mafia…

****************************

La policía y los refuerzos especiales acababan de llegar hace diez minutos y ahora rodeaban completamente la mansión de la familia Donquixote. Tras la indicación de su superior procedieron a entrar al sitio; un grupo se encargó de llegar al sistema de seguridad para desactivarlo mientras otros inmovilizaban a cuanto criminal se encontraban en el camino. Pero entre el basto grupo de policías estaban dos que parecían no conocer el plan que cuidadosamente se había trazado, mas bien actuaban como sus instintos les indicaban, aunque uno era más cuidadoso que el otro

- después de esto pediré que hagan un examen de aptitud a todo policía en servicio- se quejaba Smoker más para sí que para el que le acompañaba; sólo había bastado con noquear a un par de agentes y ponerse su ropa para burlar la “estricta” seguridad que les custodiaba e infiltrarse con los policías a cargo de la misión en la residencia de la familia Donquixote

- sólo acéptalo, la policía no sirve absolutamente de nada- se burlaba el pelirrojo junto a él- bueno… tal vez para dirigir el tránsito…

- cierra la boca Eustass o te arresto aquí mismo- sabía que con esa amenaza no le intimidaría, mucho menos considerando el estado en el que estaba, pero unas cuantas palabras duras no estaban de más

- ¡ustedes dos!- les llamó otro oficial- dejen de perder el tiempo y presten atención a la señal que el comandante nos dará- todos los oficiales yacían escondidos en algún rincón o detrás de autos y arbustos esperando a que les llegara la orden.

Tras un par de minutos el silbido del comandante se escuchó desde el interior del edificio; uno de los oficiales dio otra señal hacia la única cámara que seguía en funcionamiento, avisando al equipo en la sala de control. Los especialistas movieron manos y dedos a una velocidad impresionante hasta que finalmente apagaron el sistema de cámaras y cortaron la luz. En ese momento la policía se movilizó hacia la mansión mientras otro grupo iluminaba desde afuera con las luces de un helicóptero y de las mismas camionetas… el ensordecedor sonido de las armas de fuego al dispararse se hizo más intenso al igual que los gritos; sabían que no tenían mucho tiempo, así que comenzaron a usar los altavoces

- ¡¡Esta es la policía de Dressrosa, ríndanse y no tendremos que usar la fuerza!!- gritaba un policía por un megáfono mientras dirigía a sus hombres al mismo tiempo

- tenemos que ser precavidos- ambos estaban heridos, sin fuerzas y a unos cuantos pasos de caer rendidos, pero no habían llegado hasta ese sitio para tirar la toalla- será mejor si tratamos de no…

- he cumplido con traerte hasta la mansión de Doflamingo- le interrumpió el pelirrojo- Tú encárgate de tus asuntos, yo tengo los míos

- como quieras entonces, pero recuerda que en cuanto Trafalgar esté fuera tú irás tras las rejas- a pesar de que Eustass Kid le estaba ayudando no podía dejarle libre como al cirujano de la muerte, sus crímenes ya no tenían perdón a esas alturas- y será mejor que no mueras

- esa es mi línea- sonrió amplio y salió de su escondite para correr directamente a la mansión; a unos cuantos metros de llegar un sujeto intentó cerrarle el paso pero le tumbó de un solo golpe y siguió su camino

- eres una maldita bestia- Smoker prosiguió con más calma que el otro puesto que no contaba con la misma brutalidad física. Ayudado por la oscuridad y su sigilo, el comandante se coló en la mansión en cuestión de minutos sin ser detectado por nadie.

La única pista que tenía para encontrar a Ace entre ese caos era el estruendoso sonido de las balas y el aroma a pólvora que se hacía más fuerte conforme se acercaba al epicentro de la pelea, estaba seguro que el pecoso debía encontrarse en ese lugar. Mientras avanzaba no podía evitar esa sensación de deja-vù, sólo que en vez de un casino estaba en la mansión de uno de los más buscados; y además de Doflamingo y su familia, otros altos mandos del bajo mundo estaban reunidos también; salir sin un rasguño sería un verdadero milagro.

- ¡no pueden haber escapado aún!- escuchó unas voces, por lo que se escondió detrás de un pequeño mueble de madera- ¡¿en dónde están los hijos de Roger?!

- ¿aún crees en eso? Es obvio que Doflamingo nos engañó, toda la farsa del hijo de Roger fue para reunirnos aquí y liquidarnos. Aunque apoyo la idea de matar a esos mocosos; Garp y su nieto puños de fuego han encerrado y acribillado a muchos de mis camaradas

- ¿qué importan las razones? Dispararle a alguien nunca es aburrido- aquel pequeño grupo de hombres pasó de largo sin percatarse de la presencia del peliblanco; ahora más que nunca deseaba encontrar a Ace antes de que alguien más lo hiciera.

Herido como estaba, Smoker aceleró el paso, no quería perder a nadie más. Aún recordaba la primera vez que había visto al pecoso; era tan sólo un niño asustado queriendo proteger a su hermano recién nacido, sus enormes ojos oscuros mirándole con rabia le hicieron sentir como la peor escoria del mundo, por lo que ni siquiera había dudado en apuntar su arma a ellos para que dejara de mirarle de esa forma… si les hubiera disparado ese día, ¿qué habría sido de él sin Ace? No, imposible, esa era una vida que no quería vivir.

Sus pisadas se detuvieron en seco al ver una pequeña luz acercándose a él, no estaba en las mejores condiciones para atacar a alguien así que repitió lo de hace unos momentos y usó esta vez una pilastra del corredor para esconderse. Mas esta vez parecía que la suerte le había abandonado pues las pisadas de aquellas personas se acercaban, y lo que era peor, acababan de girar justo en el pasillo donde estaba. Al parecer no tenía opción, tendría que pelear; tomó el revólver de la funda de cuero que llevaba puesta en el cinturón y esperó, no podía darse el lujo de fallar. Smoker contuvo la respiración al distinguir las siluetas de aquellos sujetos en el suelo… ya estaban lo suficientemente cerca… aguantando el dolor de su cuerpo se giró con rapidez y apuntó su arma hacia el primero de ellos que tuvo cerca. Cuál fue su sorpresa al toparse de frente con el cañón de otras dos pistolas; tenía que disparar antes que el otro… pero su dedo no fue capaz de jalar el gatillo, no cuando vio el rostro de aquel sujeto…

- Ace…- parpadeó unas cuantas veces, asegurándose que la oscuridad no le estuviera jugando una mala broma. Y en ese momento pasó, la pequeña fuente de luz que llevaba el pecoso cayó al suelo mientras se colgaba a su cuello con uno de sus brazos para poder acercarse a él y unir sus labios. Reconocería esa calidez en cualquier lado, ese definitivamente era su amado Ace

- ¡ah, lo siento!- el menor rompió el beso al caer en cuenta de lo que estaba haciendo, no era ni el momento ni el lugar para hacer eso, pero su cuerpo había reaccionado solo al reconocerle; el hermano de Doflamingo había dicho la verdad, Smoker estaba con vida… la dicha que sentía en esos momentos no le cabía en el pecho- perdóname Smoker, yo…

- espero que eso signifique que me has perdonado

- no tengo nada que perdonarte idiota, soy yo quien… debería…- al sentir cómo el mayor le sujetaba por la nuca para acercarlo de nuevo se quedó sin palabras y antes de darse cuenta lo estaba besando de nuevo. Los dedos del otro pronto comenzaron a jugar entre las hebras oscuras de su cabello a la vez que sus bocas chocaban entre ellas ansiosas, reconociéndose después de todo ese tiempo

- ¡no es justo!- saltó sorpresivamente Luffy, quien iba bien sujeto a la mano de su hermano mayor- ¡tú no me dejas besar a Torao, ¿por qué tú sí puedes besar a humitos?!

- tu hermano tiene un punto- muy a su pesar Smoker tuvo que deshacer el beso, ignorando ese infantil apodo con el que el chiquillo le había nombrado- no es algo que no desee, pero tendremos tiempo después. Por ahora hay que salir de…- se quedó callado de golpe- ¡¿qué está haciendo tu hermano aquí?!

- shishishi, me trajo Sanji

- ¿Kuroashi también?- se abofeteó mentalmente, ese grupo de idiotas lo mataría de un coraje uno de esos días- pasar tanto tiempo con Roronoa ha comenzado a afectarle la cabeza. Yo iré por él, ustedes salgan de aquí

- por supuesto que no, ¿acaso no te has visto?- era obvio que el peliblanco no estaba en las mejores condiciones; tenía vendas prácticamente en todas partes, pero la que más llamaba la atención era la que cubría la mayor parte de su cara, ni siquiera estaba seguro que pudiera ver a través de ellas; sin mencionar que se notaba que hacía un esfuerzo enorme por seguir moviéndose- una brisa podría tumbarte

- ya peleé con ese imbécil en estas condiciones, uno más no me matará- aunque conocía sus propios límites y sabía que no podía hacer mucho- los dejaré ir conmigo con una condición. Si por alguna razón ya no puedo pelear o moverme, ustedes huirán- los hermanos se miraron entre sí antes de asentir con la cabeza- entonces vamos- se colgó a los hombros del pecoso con un brazo para usarlo como apoyo y comenzaron a adentrarse de nuevo en la mansión.

- Smoker, ¿es verdad?- la voz de Ace era sólo un murmullo que evitaba que su hermano lo escuchase pero a la vez permitía que Smoker lo hiciera- sobre el por qué estoy aquí;  si ese sujeto en verdad era…

- te lo contaré cuando salgamos de aquí

****************************

- ¿están seguros de eso?- en otro lado de la mansión, Sanji y compañía avanzaban por los corredores con cautela, noqueando a quien se atravesaba en su camino, incluyendo a esos sujetos que parecían policías- yo no he visto nada

- confía en nosotros, el jefe definitivamente tenía un plan- le aseguró el pelinaranja que corría junto a él- sólo pude verlo unos segundos, pero ese brillo en sus ojos decía que confiáramos en él; Luffy y Portgas ya deben estar a salvo con el jefe

- hay que reunirnos con ellos afuera y salir de aquí- Penguin miró a través de la cerradura de una puerta para asegurarse que no hubiera nadie antes de abrirla y seguir avanzando hacia las escaleras- la forma más segura es escapar por la planta alta; Kuroashi, ¿crees que puedas…?- mas no terminó su frase cuando sintió algo pasar volando detrás suyo. Su cabeza giró apenas lo necesario para ver qué había sido, y al verlo sintió su estómago retorserse- ¡¡JEFE!!- el cirujano de la muerte yacía en el suelo, temblando ligeramente por el dolor que suponía golpearse la espalda de lleno contra una maciza pared de concreto

- ¡¡Jefe!!- Shachi reaccionó también al verle y corrió junto con su compañero a ayudar al moreno, pero antes de llegar se escucharon varios disparos mientras el cuerpo del moreno se contorsionaba en el suelo por el dolor. Al escuchar pasos aproximándose volvieron a detenerse y por inercia miraron hacia la dirección de donde habían venido las balas… Doflamingo se acercaba a ellos con una amplia sonrisa y una pistola apuntándoles directamente

- fufufu~ pero si aquí están las otras escorias que estaba buscando- el rubio se relamió los labios con malicia- les haré un favor y acabaré con ustedes rápidamente- el cartucho vacío de las balas cayó al suelo, mas no permaneció así por mucho tiempo, Doflamingo las reemplazó con increíble rapidez y volvió a disparar.

Penguin no estaba acostumbrado a usar un arma de corta distancia pero aun así siempre llevaba un revólver consigo y ese día no fue la excepción; tras rodar en el suelo sacó su pequeña arma y comenzó a disparar contra el rubio quien esquivaba las municiones con increíble agilidad pese a su gran tamaño. Shachi tampoco perdió tiempo, se lanzó directamente a su enemigo con su par de cuchillas en mano, confiaba plenamente en el pelinegro como para saber que no le dispararía por error y así fue, ninguna de sus balas le alcanzó pero tampoco alcanzaron a Doflamingo. No importaba qué tan veloces fueran, aquel hombre parecía simplemente inalcanzable para los dos.

La mano libre de Doflamingo se abrió completa antes de moverse y alcanzar a Penguin, usando toda su palma para cubrirle el rostro. Sus dedos se fueron enterrando con rapidez en su cabeza, haciendo que el pelinegro soltase su arma e intentara liberarse; sus fuertes dedos estaban exprimiéndole como si se tratase de una tierna y frágil fruta. Pronto la presión sobre su cráneo le hizo gritar del dolor mientras escuchaba algo crujir dentro de su cabeza

- ¡¡suéltalo bastardo!!- el pelinaranja se abalanzó contra su atacante tratando de taclearlo con su cuerpo; lo sujetó con fuerza de la cintura con ambos brazos y empujó con toda su fuerza… mas el rubio no se movió ni un solo centímetro, era como una pequeña hormiga tratando de derribar un oso. El pelinaranja pudo ver cómo arrojaba a Penguin sobre su jefe antes de darle un certero golpe con el codo, logrando que su agarre se hiciera más flojo.

Aprovechando esa momentánea ventaja, el rubio sujetó a Shachi por sus cabellos y le asestó un rodillazo en el estómago, sacándole todo el aire de una sola. Y no se conformó con un solo golpe, su rodilla se encajó en su vientre al menos cuatro veces más antes de estamparlo contra la pared. En ese momento el llamado Don Sanjino atacó también; apoyó firme una de sus piernas y giró sobre ella para darle impulso a su patada. El golpe le movió un par de centímetros y le distrajo lo suficiente como para que Shachi pudiera soltarse de su agarre. Shachi volvió a sacar sus cuchillas para atacarle a la vez que el cocinero le atacaba también con patadas; tal vez no había logrado golpearle de gravedad pero al menos había dejado de atacar a los otros dos.

Pero ni dos atacando a la vez lograban distraer la mente de Doflamingo. Mientras esquivaba una de las patadas del rubio apresó su pierna con uno de sus brazos comenzando a doblarla a base de fuerza bruta pura. Una risilla escapó de sus labios al sentir algo crujir en la pierna de Kuroashi, eso le motivó a seguir defendiéndose. El arma que aún estaba en su mano apuntó hacia Shachi y disparó; el pelinaranja retrocedió unos pasos por la fuerza del impacto de la bala… no fue consciente de lo que había pasado hasta que se llevó una mano al abdomen a causa del dolor

- ¡¡SHACHI!!- su compañero intentó llegar a él pero fue rápidamente derribado con el propio cuerpo de Sanji, el cual cayó encima del pelinegro hasta dejarlos en el suelo de nuevo.

- es divertido jugar con ustedes pero no tengo tiempo- Doflamingo volvió a cargar el arma, mas antes de poder dispararla, el cuerpo tembloroso del pelinaranja se interpuso entre ésta y sus compañeros

- no dejaré… que toques a mis amigos…- a pesar del dolor y la rápida pérdida de sangre, Shachi extendió los brazos frente al enemigo para cubrir a los tres a sus espaldas- mucho menos… agh… tocarás a mi… mi amado Penguin…

- suéltalos Doffy- una voz profunda interrumpió la pelea junto con el chasquido de un arma cargándose. Al girar levemente los ojos pudo ver el resplandor metálico de una pistola a centímetros de su sien junto a una pálida mano sosteniendo el gatillo- ellos no tienen nada que ver contigo

- Rocinante…

Continued…

Notas finales:

saben que soy mala en las escenas de acción xD así que si alguna parte no se entendió díganme con confianza y modificaré el capi cuantas veces sean necesarias hasta que quede bien uwu

lograrán nuestros protagonistas salir de la mansión de Doflamingo en una sola pieza? al fin la policía de apoyo hárá algo útil para variar? Kid se habrá perdido dentro de la mansión? Corazón morirá también en esta historia? cuántas familias de ratas destruyó Sanji con su plan? por qué lees esto con voz de narrador de tv?? no se pierdan el siguiente capitulo!!... que también tendrá acción xD así que acepto sugerencias para mejorar las peleas

nos vemos en el siguiente capi, los adoro <3


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