La primavera siempre había sido su época favorita del año en Japon, en especial caminar bajo la sombra de los arboles de cerezo, pero ahora no sería así, estaba en parís desde hace un mes, aun no lograba acostumbrarse se sentía muy dolido, en especial porque a pesar que sabía que sus madre estaría molesto y lo mataría, le daba la impresión que no le importo menos el que hubiera huido, pues no había siquiera llamado para gritarle por su irresponsabilidad, en verdad nunca le importo, a su madre solo le interesaba Hiyo, nunca se lo dijo y nunca tuvo nada en contra de su hermana pero en verdad, el sintió eso siempre y más cuando su hermana dejo la casa.
Vamos Tatsu mis clases empiezan en 10, minutos- dijo Hiyori
Claro- mientras seguía a su hermana
-“En verdad nunca creí que mi hermana le fuera tanto el arte, aunque creo que no debería ser tan raro al fin nuestro padre es editor de manga” mi hermana era artista en todo sentido, lo suficientemente buena para dar clases en una prestigiosa escuela de arte.
“Me invito a acompañarla a clases hoy, y acepte porque en verdad estaba aburrido de estar encerrado llorando mis penas, además de seguro no sería bueno para mi bebe tampoco, Así que decidí aceptar y ayudar un poco a mi hermana, si es que no resulto más que un estorbo.”
Pero creo que resulte lo segundo después de los primeros 40 minutos de clases, mi estómago estaba más que revuelto, este bebe quería que pasara en el cuarto de baño aparentemente, Salí en silencio del aula y corrí al sanitario, cuando mi estómago consiguió asentarse decidí salir a refrescarme un poco en el campus de la escuela.
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En verdad a mis 20 años creí que solo conocía la belleza de dos personas mis padres, no es por ser presumido pero mi madre para la edad que tiene aparenta estar en sus 30, cuando ya está en los 50, pero ni quiera alguien mencione su edad y mi padre “príncipe de manga shojo” como lo llama mi mama es eso exactamente, así que hasta el día de hoy no había suficiente belleza que me impresionara de un rostro hasta que lo vi sentado como un ángel etéreo su piel blanca como la nieve y cabello medio rizado de color castaño claro y su ojos grises, era prefecto
Me acerque más de lo que debía captar esa hermosa imagen
El chico era hermoso
Tan delicado
Sus ojos denotaban tantos sentimientos
“Añoranza, soledad y sobre todo tristeza”
Vio como miraba a lo lejos, y una lagrima rodo por sus mejillas
Impulsos lo movieron
Se acercó y sin aviso limpio la lagrima
¿Pero qué?- dijo sorprendido Tatsuya
Disculpa mi atrevimiento, pero alguien tan hermoso no debe manchar su rostro de lágrimas- mientras lamia la lagrima en su mano
Yo disculpa-sonrojado- no pasa nada- se levantó Tatsuya, pero fue sujetado del brazo
Por favor déjame terminar de dibujarte- y fue cuando por primera vez vio lienzo de papel en la manos del chico, que por cierto tenía un boceto casi a terminar de el
Solo te dibujare por favor- repitió
Tatsu, suspiro- está bien no veo el problema
Había sido los 10 minutos más rápido que habían pasado, fue como un cerrar y abrir de ojos, el hermoso ángel había aceptado, y casi en un suspiro se fue.
Hermana- dijo el castaño
Termine nos vamos- dijo Hiyori
¡Si!- respondió sonriendo Tatsu
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Había pasado 2 años desde que no veía a Kyo, 2 años desde que dejo su casa, 2 años desde que su vida había cambiado totalmente, pero no podía arruinarle la vida a su castaño apenas era un niño cuando el examen dio positivo, y en realidad no es que el fuera un adulto ni menos pues solo tenía 19 pero igual Kyo tenía 15 años cuando paso, la noche en que había quedado embarazado de un completo desconocido.
Porque eso era Kyo, solo un nombre de una noche, del cual supo su edad, e historia familiar 2 meses después cuando por casualidad, la madre de Kyo fue alumno de mi papa. Las vueltas que da la vida no es cierto al fin que probabilidad hay de ese encuentro casi nulo.
Kyo Masamune- 15 años, cuando lo supo se reí hasta llegar a las lágrimas, llevaba un hijo de un niño y que iban a pensar si él era el codiciado Cari Yo, no podía ser verdad.
Y ni decir cuando su madre se enteró casi se muere del susto, aunque siempre le preocupaba más su padre, lo apoyaron en todo, pero sabiendo que podría volverlo a ver aunque sea por accidente y enterarse de su hijo pidió irse a corea
Ahora estaba de vuelta con su pequeño de año y medio, pero la situación era igual el tenía un hijo con un chico de 17 años que de seguro no recordaba esa noche menos su cara, más las consecuencias de esa noche