Pov Zico
Al despertar me encontré solo en la cama, a pesar de toda la seguridad que pedí en el lugar me asusté y rápidamente busqué a Zelo…lo encontré en el baño tomando una ducha, al verme me sonrió, suspiré tranquilo
-¿te sientes mejor?- pregunté sentándome en la orilla de la bañera asintió
-dormimos todo el día – dijo
-el cambio de horario- respondí acariciando su espalda – hay un restaurante bonito por aquí…este cerca de la playa podríamos ir a cenar ahí
-o podrías llevarme al súper y poder comprar algo para preparar en casa…he estado leyendo algunas recetas y me despejaría un poco
-si es lo que quieres – respondí , pasaron unos minutos después lo ayude a salir de la bañera y tras una hora pudimos salir finalmente de casa, siempre tardar mucho vistiéndose.
El super estaba a 15 minutos en auto así que no tardamos en llegar, tomó un carrito de compras haciendo “malabares” con las muletas para no caerse
-¿Cómo va a caminar con eso? Vas a cansarte- pregunté viéndolo pensar en cómo sujetarlo al mismo tiempo que a las muletas
-¿una mejor idea?- sonreí y me acerqué a él , lo tome por la cintura tomándolo en mis brazos
-¡zico!- me regaño , lo senté dentro del carro para que sus piernas descansaran -la gente me verá raro, bájame
-no me importa
-a mi si ¡bajame! – lo rete con la mirada
-Entonces llamare a Park kyung y le pediré que compré el super y lo cierren mientras compramos – saque mi celular pero él me detuvo
-¡no, no, no! …-suspiró - está bien, tu ganas…no me quejare – sonreí y entramos , ciertamente no había gente , era muy tarde ya…era de esperarse. Dimos vueltas por los pasillos y básicamente me dedicaba a colocar todo lo que Zelo de pedía en el carrito, pastas, galletas, helado, fruta y nuestra perdición fue pasar por panadería…llevamos dos bolsas llenas…
-no nos comeremos todo esto – dijo viéndome llenar una bandeja de macarons
-yo me encargare que así sea – dije sonriendo, vi que bajo la mirada y se sonrojo un poco
-tu…tu recuerdas que –
-¿los comimos en nuestra primera cita? Si, lo recuerdo – sonreí al adivinar su pensamiento
-cuando te extrañaba…los comía …YongJae solía decirme que me haría diabético si seguía así– esta vez fue yo quien se sonrojo…es cierto que pasamos mucho tiempo lejos uno del otro –ne-necesitaremos aceite de oliva también- cambió el tema, asentí colocando la bandeja en el carrito y dándole un beso en la frente
-yo también los comía – me dedico una sonrisa tierna
Una hora y nuestras compras habían terminado, las subí al auto y ayude a Zelo a bajarse para volver a casa, tome un camino alternativo donde podía verse la costa, con un botón bajo la capote del coche y se acercó a mi recargando su cabeza en mi brazo para disfrutar de la vista, lo vi con ternura ¿podía ser más hermoso?
Al llegar a casa llevé todo a la cocina y me quede sentando…eso me había agotado
-preparare la cena – dijo tomando uno de los paquetes de pasta, me indicó que cortara el pan y algunos vegetales, debo decir que doy lastima en la cocina…en lo que acabe de cortar el pan de cilandro la pasta estaba ya terminando de cocerse…cortó los vegetales demasiado rápido que no me di cuenta…suspiré viéndolo hacer equilibrio para colocarle queso a la pasta. Me levante y serví los platos en lo que él se sentaba
Nos serví un poco de jugo y me senté a su lado
-te quedo deliciosa- dije tras probar alguno bocados, él solo sonrió,es cierto que tiene un don de la cocina eso explica por que aumente 6 kilos cuando comenzamos a salir y por que al separarnos adelgace tan rápido, tras la cena fuimos a la sala y vimos una película recostados en el sillón aunque al poco tiempo Zelo se durmió,probablemente se había cansado con la ida al super pero era una buena señal, que pudiera dormir tranquilo sin medicamentos, terminé de ver la película y con Zelo en mis brazos fui a nuestro cuarto lo dejé en la cama y fui al cuarto de baño, no tenía sueño pero si me sentía cansado y un baño de burbujas sonaba perfecto.
En cuanto a bañera estuvo lista me sumergí en ella disfrute los minutos del agua tibia, pensar en todo lo que nos había pasado hasta ahora …me tenían agotado, si no fuera porque sé que a Gd se le está acabando el tiempo y su jueguito no seguiría por mucho más.
Estaba disfrutando del olor a lavanda cuando un grito me interrumpió
-¡Jihoo! – salí de la tina y apenas del cuarto con un intento de toalla amarrando a mi cadera , Zelo sudaba frío en medio de la cama , en cuanto me tuvo a su lado me abrazo
-¿estás bien, te duele algo? – pregunté tocando su frente no parecía tener fiebre
-estas aquí – susurro temblando
-no me he ido a ninguna parte –conteste apretándolo contra mi pecho, se veía asustado
-fue-fue una pesadilla – suspiró mientras seguía llorando –Soñé que él te alejaba de mi…que hacía que te echaran de Francia – tome su rostro con una de mis manos y con la otra guié la suya a mi pecho – si te vas de aquí yo…- tartamudeaba temblando , me rompía el corazón
-no hará eso…no lo dejare nunca alejarnos de nuevo- dije mirándolo a los ojos en un intante choco sus labios con los mios, me sorprendió su brusquedad pero correspondí, de a poco comenzó a subirse sobre mi, no trate de detenerlo pero de vez en cuando abria los ojos para asegurarme que su pierna estuviera bien, a él parecía no molestarle así que lo deje seguir, puse mis brazos en su cadera acariciando su nívea piel , alzó sus brazos y quite su playera enseguida volvimos a besarnos, sus manos tocaban mi abdomen paseándose por todo mi cuerpo…el hecho de que su bien formado trasero estuviera sobre mi pelvis no ayudaba en nada…
-no...no quiero lastimarte – dije cortando el beso, aún era tiempo pero poco le importo volvió a unir nuestra bocas mientras se movía contra mi pelvis…habíamos estado en abstinencia muchos meses ya nos merecíamos esto, me levante dejándolo en la cama sin querer la toalla había quedado también a su lado
-Jihoo – escuche que me llamaba, estaba en la cama sonrojado con algunas marcas en su pecho que yo acababa de hacer y se movía rápidamente por la sesión de besos de hace un momento…volví a la cama quedando arriba de él, con cuidado quite su pantalón junto con el bóxer para poder verlo por completo, robe su labios una vez más y comencé a bajar dejando mordidas y chupetones por todo el camino , su abdomen seguía marcado a pesar del poco ejercicio que hacia últimamente delineé cada uno de sus cuadritos con la lengua escuchado sus gimoteos con mi nombre en ellos.
Seguí mi camino hasta llegar a su miembro, lo tome en mi manos y comencé a masajearlo para dejar un beso en la punta, Zelo se mordía el labio mientras se aferraba a las sabanas, no podía ser más hermoso, seguí mi trabajo lamiendo y besando su extensión para al final meterlo en mi boca dando pequeñas succiones…
-ahh- eleve la vista encontrándome con sus ojos suplicantes, seguí succionando mientras masajeaba con la mano su miembro- hyung…no puedo más ahh- aumente mi ritmo lamiendo la punta mientras mi mano seguía subiendo y bajando - ahh Ji hoo - sentí aquel liquido en mi boca …¿sonara mal decir que sabía un poco dulce? me encanta
Me relamí los labios ante la mirada sonrojada de mi novio, que enseguida volvió a besarme , con cuidado lo levante para que quedara sentado sobre mi, su pierna herida estaba estirada me alegra que se haya puesto el vendaje hoy así no podría doblarla ni por accidente, su otra pierna estaba rodeando mi cintura ,limpie la saliva que se había escapado de sus labios con mi dedo índice y lo guié entre sus trasero moviéndolo y adentrando otro par , había pasado un tiempo desde nuestro último encuentro en un par de minutos los saque y me acomode entre sus piernas
-¿está bien?- pregunté con la respiración entre cortada, él asintió estaba ansioso y se le notaba, coloque mi miembro en su entrada y comencé a entrar lentamente en él, siempre tan estrecho, di un par de estocadas lentas para que se acostumbrara un poco
-más jihoo – lo vi morderse el labio inferior , sonreí inclinándome más sobre él, lo besé aumentando el ritmo, sabía perfectamente donde era su punto y me apresure a tocarlo, de nuevo sus gimoteos se escuchaban por la habitación, bajé mi mano a su miembro y volví a tocarlo al ritmo que lo embestía, no iba a aguantar mucho más- ya…ya no aguanto – enterró sus uñas en mi espada justo en el momento en el que se venía en mi mano, unas cuantas estocadas más y me vine dentro suya…
-¿todo bien amor? – Zelo asintió sonriendo, con cuidado me coloque a su lado enseguida se acomodó en mi pecho, nos quedamos hablando un momento hasta que mi teléfono sonó…muy a mi pesar tuve que ir a contestar.