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Caminos Entrelazados por Anabella Noviembre

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Notas del capitulo:

Hola, bueno aquí estoy como cada viernes. Quiero agradecer a todas mis lectoras por tan sólo leer, eso me hace muy feliz. Bueno por fin ahora la historia tomará vuelo y falta muy poco para que culmine, así que agárrense!!


Los dejo con el fic n.n

Naruto dio la vuelta en su cama muchas veces. Estuvo en ella toda la mañana, después de todo, es su día libre. Gira nuevamente y mira su celular, que estaba sobre la cómoda. Tres llamadas perdidas de su novia. Mira el reloj aun medio dormido, son las dos de la tarde, y el calendario marca el día veintitrés de Julio.

 

—Ay, no puede ser...

 

Da un salto de la cama y lo recuerda: hoy era su primer aniversario de noviazgo con Hinata.Y también, el cumpleaños de Sasuke. Afligido, envía un mensaje de texto, como todos los días, a quien fuera su amigo, luego se sienta en la cama, pensativo. “¡Ah, sí, Hinata!” pensó, y apurado vuelve a tomar su celular disponiéndose a llamar a su novia, quizás no sea muy tarde para invitarla a cenar... pero justo en ese momento, suena el timbre de su casa. Con el aparato en la mano abre la puerta.

 

—Gaara.

 

—Naru...to. —se sonroja totalmente al ver que Naruto está sin camiseta—.

 

—¿Necesitas algo?

 

—Yo... vine a hablar contigo. —dijo el pelirrojo mirando al suelo—.

 

—Mira Gaa, no quiero ser grosero, pero recién me levanto de dormir y la verdad... mira, si es por lo que pasó en tu casa, está todo bien, no estoy enojado ni nad...

 

—En realidad, esa vez yo hice lo que hice, porque yo quería....

 

—No pasa nada, en serio Gaa, ya te dije que no estoy enojad-

 

—¡Te prometo que no te robaré más tiempo! Pero déjame pasar cinco minutos.

 

—Oh, qué carácter. Está bien, pasa. —Naruto pensó que hoy Gaara estaba de peor humor que de costumbre. Olvidando para qué lo tenía en la mano en un principio, deja el celular en la mesa.— ¿Te sirvo algo?

 

—La verdad, no. Prefiero que hablemos de una vez.

 

Naruto se sentó en el futón de la sala. Pensaba qué cosa podía ser tan grave. Gaara tomó una silla de por ahí y se sentó frente a su amigo.

 

—Bueno, dios que suspenso. ¿Te pasa algo?

 

—Naruto, ese día que pasó eso, que te fuiste de mi casa. Yo... yo hice eso porque necesitaba decirte algo. Algo importante.—Para este punto Gaara ya estaba completamente rojo—.

 

—¿Qué? ¿Que cosa?

 

Sin pensar demasiado, Gaara se inclinó unos centímetros hacia el rostro inerte del rubio. Tomó su rostro suavemente y lo besó con ternura. No pudo resistirlo. Naruto se quedó inmóvil por unos segundos, Gaara pensó por un momento que su amigo correspondía el beso, pero de pronto sus bocas se separaron bruscamente y el pelirrojo recibió una fuerte bofetada en la cara que lo arrojó al suelo.

 

—¿Qué...? ¡¿Que haces?! —Dijo el rubio toocando sus labios.

 

Gaara estaba tirado en el suelo, temblando, tocando su mejilla. Ese golpe fue duro. Con lágrimas en sus ojos, sólo atinó a responder en tono muy suave:

 

—Amarte. Lo único que hice durante todo este tiempo... fue amarte. Te amo Naruto. Lo siento.

 

Naruto lo miró con detenimiento. Ahí estaba, tan frágil, tan sombrío, nunca se había puesto a pensar en ello pero... Gaara tenía la piel tan blanca, y sus ojos, son como dos piedras de jade. Es tan... tan pequeño, sí, justamente esa era la palabra. “Frágil”.

 

—Gaa, lo siento.—Dijo el joven rubio acercándose a su amigo—. ¿Te duele? —Se agacha para ayudarlo, pero recibe un fuerte empujón.

 

—Ya, déjame en paz—dijo Gaara levantándose aún con la mano en su rostro, que ya empezaba a enrojecerse—. Ya dije lo que tenía que decir.—Empezó a caminar hacia la puerta.

 

—Gaa... —Naruto lo tagarró fuerte de la mano.

 

Pasó un instante y Gaara no sabía bien cómo reaccionar. Su amigo lo tomó de la mano y luego, nada. Los dos se quedaron en stand by. Después, aún sin saber bien el porqué, el rubio tiró fuerte del brazo de Gaara y ambos quedaron frente a frente. Lo próximo, fue un beso apasionado.Naruto lo tomóo del rostro y lo besó reiteradas veces. Luego se miraron y en un arranque imparable de lujuria, el Uzumaki tiró a su compañero en el sillón. Comenzó por su cuello, besándolo suave pero apasionadamente. “

 

-Gaa, tu piel es tan blanca- dijo Narut, y quiso despojarlo de sus ropas., deseaba recorrerlo de punta a punta.


Ese jovencito frágil de cabello rojo y ojos de jade, oh dios, ¡era un chico! Sí, Naruto sabía perfectamente que ese cuerpo era el de un hombre, pero por alguna extraña razón se dejó llevar por ese “algo” inexplicable, que lo hacía querer fervientemente que ese delicado muchacho fuera suyo, y ese sentimiento era correspondido.  Los besos eran interminables, y Naruto comenzó a bajar con su lengua, bajó hasta la cadera de su compañero y desabrochó el primér botón de su pantalón. Allí mismo, el rubio se detuvo. Jadeó unos momentos, y luego se apartó.

 

—Naruto... ¿Te pasa algo?—Preguntó Gaara aún exhausto.

 

—Yo... lo siento. —respondió Naruto claramente aturdido y arrodillado en el suelo— No sé que pasó.. Me siento mal.

 

—Naruto... — Gaara trató de ayudarlo, pero Naruto lo apartó nuevamente.

 

—Gaara... todo esto... yo...

 

—Naru... ¿que pasa?

—Que no tengo claro mis sentimientos y esto... No lo sé. No sé... Simplemente no entiendo nada ahora. No lo tomes a mal pero... necesito que te vayas. Necesito aclarar mis pensamientos.

 

—Pero no puedo dejarte solo, mira como estás, estás pálido y agitado.

 

—No... no. Vete, estaré bien. Vete por favor, déjame solo.

 

Un poco ofendido, Gaara se levantó enseguida y se puso su camisa. Tomó su mochila, volvió a besar a su compañero en la mejilla y antes de irse le dijo:

 

—Sasuke o Hinata. No me importa. Voy a pelear por tí, contra quien sea, no importa lo que pase, Naruto.

 

 

Gaara se fue. Naruto miró a su alrededor. ¿Que demonios acaba de pasar? Se levantó como pudo y se recostó, instantáneamente cayó dormido.

 

Horas más tarde, lo despierta un sonido. Nuevamente tocaron a la puerta. “Debe haber olvidado algo”. Con un poco de fastidio, abre la puerta.

 

 

—Hinata... —Dijo sorprendido, luego hizo una pausa por un momento, al ver la expresión de tristeza en el rostro de su novia—. Lo siento, yo...

 

—Naruto. Tenemos que hablar.

 

 

Hinata entra directamente al comedor y se sienta a la mesa. Naruto, con clara incomodidad, pregunta:

 

 

—¿Quieres un té? O quizás café...

 

—Naruto... siéntate frente a mí.

 

 

Naruto obedeció sin chistar, pero no podía mirar a su novia a los ojos. Aún estaba pálido.

 

 

—Quiero que escuches lo que te voy a decir.

 

—E... está bien. ¿Pero por qué tanto misterio?

 

—Vine porque me cansé de esperar tu llamada. Hoy era nuestro aniversario.

 

—Lo siento, es que... —Claramente no podía decirle lo que había sucedido, pero no se le ocurrió nada.

 

—No Naruto, ya no puedo aguantar más excusas. Necesito saber que lugar ocupo en tu vida, que soy yo para tí. Necesito saber si me amas. Quiero saber tus verdaderos sentimientos.

 

 

Naruto se quedó helado. Definitivamente no era su día, el muchacho no esperaba ese planteo, de hecho, no esperaba nada de lo que pasó ese día, ni tenía ninguna excusa para no estar con su novia el día de su aniversario. Luego de procesar un momento en su mente, el joven entendió que todo se tornaba cada vez mas peligroso. Hinata era una buena chica, ella era gentil y dulce. Definitivamente no se merecía lo que él le estaba haciendo.

 

—Hinata... sabes bien que yo te quiero.

 

—Me quieres pero... ¿Me amas? O... ¿quizás hay alguien más?

 

Naruto miró a Hinata a los ojos y se quedó en silencio. Él no quería mentirle, pero tampoco quería seguir lastimandola. Ante ese silencio, algo se transformó en la cara de la chica.

 

— Sé que generalmente yo no diría esto, pero estoy cansada de llorar. Voy a pelear por tí, no importa quien sea ella. Naruto, yo sí, yo sí te amo. Piensa en ello, por favor.— La chica se levantó y rápidamente se dirigía a la puerta.

 

—Hinata, no... por favor espera, no te vayas...

 

La joven se fue cerrándole a Naruto su propia puerta en la cara. Él se quedó petrificado. Ya en la calle, ella rompió en llanto. “Kiba, ¿será que hice lo correcto?”

 

continuará...

Notas finales:

Bueno espero que les haya gustado. Como siempre, nos leemos el viernes que viene. Que tengan una estupenda semana!! :D


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