Eran casi las doce del mediodía, pronto sonaría la campana para ir al comedor, aunque yukio y Rin comían comida casera debido a los precios inflados de dicho comedor, el gemelo menor seguía con su clase y, aunque no lo demostrara, esperaba con gran nerviosismo que el periodo terminara para ver si la ansiada conversación se daba y...
*(campana)*
yukio no sabia si bendecir a la campana por dar por finalizado su trabajo o maldecir la por la misma razón.
*para la próxima clase quiero que traigan la formula desarrollada de distintos compuestos*
*¡yuki-chan! ¿que compuestos?*
*los que quieran, eso sera a su elección, pero deben ser como mínimo cinco*
no estaba seguro de que todos lo hubieran oído, pero la mayoría ya estaba fuera del aula, yukio suspiro, "supongo que ya no se puede hacer nada" tras dar una ultima mirada al salón vacío noto que su ni-san aun seguía aquí, no era extraño ya que mientras uno de los hermanos okumura (el mayor) deseaba que suguro se acercara para poder halarle, el otro no dejaba se rogar lo contrario, aunque al final gano la predicción se rin.
*profesor, ¿podemos hablar? de preferencia a solas*
desafortunadamente el momento había llegado, desde que le prometió a su hermano mantener alejado a suguro por lo menos un mes, rin no había dejado de insistir con que debían hablar con el bicolor, sabia que esto seria incomodo pero uno promesa es una promesa, después de todo el trato fue, nada de tener ningún acercamiento amoroso con cualquier persona hasta que finalice el mes o por un lapso indefinido de tiempo en caso de que si se enamorara de rin, "como si eso fuera a pasar" aunque si se llevo una sorpresa al enterarse de que su ni-san era celoso, estaba seguro de que seria la ultima, o al menos eso esperaba.
*¿Profesor?*
"diablos, ¿cuanto tiempo estuve divagando? debo dejar de ausentarme de esa manera, ¡idiota!"
*¿quieres algo?*
"dime que no"
suguro tubo una mirada de desconcierto por un momento pero rápidamente cambio hacia una de picardía pura, como un niño que trama una travesura.
*no se haga el tonto* acercándose a yukio *usted sabe lo que quiero*
*no se de lo que estas ablando*
el bicolor no dejaba de avanzar, cada paso ponía aun mas nervioso al menor, como consecuencia termino acorralado contra el escritorio.
¿como era pocible que Rin estuviera mirando sin decir nada?
"esta muy cerca, ¡ni-san! haz algo"
Miro con cara se suplica a su hermano, "¡¿porque no me ayuda?! ¡¿que no era el quien quería esto?!"
estaba desesperado, no es que no le gustara suguro, es que no quería hacer este tipo de cosas con su hermano en frente, escuchando cada maldito suspiro que diera.
"¡¿en que estará pensando?!"
*ni-san, si tu no ayudas ya no abra trato!* "¿porque no me escucha?" *¡ni-san!*
*si ya no hay trato ¿porque debería ayudarte?*
"maldito, te estas divirtiendo mucho con esto ¿verdad?"
*¿de que están ablando ustedes dos?*
suguro no entendía nada, se le notaba en la cara, yukio no pudo evitar sentirse un poco aliviado "que bueno, mientras mas personas sepan de esto, mas penoso será" se sentía mal pensar así, pero era la verdad, "porque no hay forma de que rin gane esto, no hay forma de que me vuelva a enamorar de mi hermano"
*bien, pero después no te quejes*
"¿quejarme? un momento ¡¿que va a hacer?!"
*¡¿que pasa?! ¡oye! explicame*
al parecer no era el único con preguntas, el rubio reñido también parecía tener barias pero iban dirigidas hacia la persona equivocada, ya que el tampoco tenia idea de lo que sucedia.
*yukio explícame, no entiendo na... ¡oye!*
rin había empujado a suguro (se forma brusca) y ahora iba hacia el menor
*¿Ni-san?*
"¿que vas a hacer?"
*te dije que no te quejaras*
yukio sabia que su hermano era impulsivo, pero nunca se imaginó lo que sucedió a continuación, Rin se abalanzo sobre el inmovilizado sus muñecas con una mano, mientras que con la otra tomo su mentón y lo obligo a exponer su cuello donde clavo sus dientes de forma posesiva, dejando una marca fuera de los limites del abrigo que duraría bastante, para cuando se alejo tenia una marca de sangre en los labios, que a los ojos del joven de anteojos, daba ganas de lamerlos hasta dejarlos limpios.
tras eso todos quedaron en silencio, al bicolor le costaba procesar, después de todo jamás hubiera imaginado a dos hermanos haciendo ese tipo de cosas, claro que sabia que eso existía pero no esperaba verlo fuera de un manga de incesto, y en este caso también de yaoi. no esque supiera de mangas yaoi, claro que no.
*entendiste ¿verdad? el es mío. ya vete*
la voz del medio demonio saco a suguro de sus pensamientos, aunque aun no comprendía del todo lo que había sucedido pero no se tenia que ser un genio para saber que ya no tenia nada que decir en ese lugar.
narra Rin
se pudo ver como el rostro del bicolor cambiaba de asombro a furia y luego a resignación, antes de irse echo una ultima mirada para atrás y siguió su camino.
rin se dio la vuelta para ver a yukio y no pudo evitar reir, su hermano se veía tan tierno, con sus manos tratando de cubrirse el rostro completamente rojo, pero fallando si remedio alguno, sus rodillas juntas y temblando, haciendo que tenga que apoyarse en el escritorio, con unas lagrimas, que de seguro eran de vergüenza, corriendo por sus cachetes, parecía que había vuelto a tener siete años.
"tan lindo"
se acerco a yukio y lo abraso.
*¿Cuanto tiempo vas a seguir llorando? ven, es hora de almorzar, te prepare algo rico*
el menor levanto la vista hacia su amado ni-san, solo para ver la brillante sonrisa que este le estaba dando.
¿como podía sonreír?¿que no se daba cuenta de lo que acababa de hacer? si suguro decidía vengarse contando lo que vio, o lo que le hizo, su credibilidad se iría por el caño.
*esta bien, vamos*
narra yukio
este no era el momento para reprocharle nada, a la noche ya lo regañaría pero por ahora su, ni-san dijo que le había echo algo rico.
además tenia ganas de seguir descubriendo facetas de su adorado ni-san.
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