En todo este viaje, solo existe una cosa que no le dije a Sanada, la realidad es que quería que pensara que me había ido para siempre y que no me volvería a ver, pero eso no es así, recibí una invitación para entrar a un equipo profesional de tenis, y lo primero que pensé, si logro entrar, pediré que te inviten, entonces, jamás nos vamos a separar, tu siempre consigues todo solo, pero si seguimos así, definitivamente terminaremos en polos opuestos del planeta, y eso es lo que menos quiero, es un arma de doble filo, lo tengo muy presente, porque bien puedes decidirte por Atobe, pero algo me dice que ya tomaste una decisión, y si es firme, no cambiara aunque yo esté lejos un tiempo.
-no sabía que fueras tú el que llegaría, Yukimura-
-Tezuka Kunimitsu-
-si estás tú, con más razón debo esforzarme-
-no entiendo-
-quiero traerlo-
-entonces esfuérzate mucho-
-me ayudaras a conocer Alemania-
-claro…-
Los días han pasado, la verdad es que apenas hace una semana que ingrese formalmente al club, por lo que tengo entendido, necesito un mes para recomendar a alguien.
-no te presiones-
-¿Qué?-
-yo lo haré por ti-
-pero…-
-cuando venga le diré que fue una petición tuya, con eso bastará-
-¿Por qué estas siendo tan amable?-
-porque si lo traigo, él va a dejarlo en paz-
-¿Atobe?-
-en realidad todo esto de conquistar a Sanada, fue mi culpa, me enfade mucho con él, y me dijo que si no podía aspirar a tenerme, entonces se pasaría con el primero que viera y que conociera, ese día, no solo la primera persona que conoció, sino, también la primera persona que vio, fue Sanada-
-entonces ustedes dos…-
-no, las cosas no son así-
-entonces él te quiere…-
-tampoco, aun no se da cuenta, pero dentro de su equipo, es allí donde está la persona que realmente quiere, tan solo soy una obsesión-
-ya veo…-
Han pasado repentinamente muchas cosas, me entere de que Tezuka, mi rival, me recomendó en su equipo, y es por eso, que se en este momento que realmente se me abrieron las puertas para poder ir a encontrarlo, pase mucho tiempo molesto por su partida, y más tiempo pase molesto conmigo por haberlo dejado ir.
En cuanto llegué, me realizaron muchas pruebas que al final pasé, después de eso me dieron mi entrada formal, y entonces me reuní por primera vez con los integrantes del equipo, fue como tener mil espinas clavadas en mi corazón, los dos me miraban de frente.
Dijeron muchas cosas que no entendí porque no puse atención, y después de muchas horas, hable con ambos, si se preguntan porque no soy tan especifico, es porque cuando uno está enojado, no piensa ni razona como debe, en pocas palabras entendí claro, “fui objeto de una escena de celos y obsesión”.
-Yukimura, debiste decirme que vendrías aquí y después me traerías-
-si te lo hubiera dicho, no habrías sufrido lo suficiente como para pagarme en que caíste en la tentación-
-me engañaste, esta noche me lo pagarás-
-nada de eso, tú serás quien lo pague-
-a ja ja… disculpen, pero aún estoy aquí-
-Tezuka, gracias por recomendarlo-
-ya pague mi deuda, así que no esperen que los ayude más-
-aprendí mucho de ti-
-¿Qué aprendiste?-
-que esa cascada dura y estoica es solo eso, pero eres como el tamarindo, es considerada una de las frutas más dulces, pero… es doloroso limpiarlo porque su cascara se te puede enterrar en los dedos al abrirlo-
-no me gusta que tengas esa opinión de mí-
-el gran Tezuka, es débil-