- ¿K-Kid? ¿Q-qué te p-pasa? ¿E-estás bien?- pregunté preocupado, y Kid solamente susurró algo que no pude entender.- ¿Qué dijiste?
- Su-suelta.... Mi.... Pene.
Me separe de él asustado y bajé mi vista hacia sus pantalones, y si, efectivamente tenía su erección entre mis manos.
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Con la cara totalmente roja, lleve mis manos hacia mi cara avergonzado y disculpándome repetidamente con Kid que tenía un ligero sonrojo y una erección en sus pantalones. Se sentó en la cama recargando sus codos en sus rodillas tratando de relajarse y asimilar lo ocurrido.
Me senté a un lado de él escondiendo mis manos entre mis piernas sin decir palabra alguna, simplemente me le quedé viendo avergonzado. No sabía qué decir o qué hacer lo que acababa de pasar había arruinado todo y ahora ninguno de los dos sabía cómo reaccionar.
-Emm ¿E-estás bi-bien?- susurre bajito pero lo suficientemente alto para que Kid lo escuchara.
-Ca-calla, estoy intentando concentrarme para que baje, si me hablas se pondrá duro de nuevo.- soltó esas palabras sin vergüenza alguna, simplemente asentí y no dije nada más.
Pasaron aproximadamente 3 minutos y Kid seguía en la misma posición, estaba creyendo que a lo mejor ya no quería hablar y me sentí culpable por haberle ocasionado eso.
-Veré si ya está lista la cena.- dije sin más levantándome de la cama yendo en dirección a la puerta, pero Kid me tomó de la muñeca.
-Me gustas Sanji.- repitió.- quiero que lo intentemos, quiero que me veas con los ojos que ves a Roronoa, quiero que veas las reacciones que causas en mi, quiero que seas mío.
Me quede plasmado ahí, viéndolo directamente, no sabía qué decir Kid había sido tan sincero que hasta me daba pena decirle que no, pero es que no podía cambiar mis sentimientos de Zoro hacia él, cinco años enamorado de la misma persona que no es tan sencillo cambiarlos de un momento a otro.
Tomé su mano que tenía agarrada mi muñeca y la coloqué en mi mejilla, me arrodillé enfrente de él hasta poder ver su cara, que tenía una expresión triste, algo que no solía ver en Kid.
-De verdad, si hubieras aparecido hace cinco años en lugar de Zoro, créeme que serías tú, pero eso no fue así, lamento tanto no poder corresponderte, pero mi corazón le pertenece a Zoro.
-¿Es así como se siente el rechazo?- preguntó triste, me dolía el pecho verlo así, pero qué más podía hacer.
-Podemos ser amig....- puso un dedo sobre mi boca sin dejarme terminar lo que iba a decir.
-No me digas esas palabras que aún no me daré por vencido, me gustas y haré todo lo posible para que dejes de pensar en ese bastardo.- sonrió de lado llevando su dedo que tenía en mi boca hacia la suya.- esto cuenta como un beso indirecto ¿no?
Me sonroje por lo dicho y me levanté rápidamente, tapé mi boca con una de mis manos y moví mi cabeza de un lado para el otro.
-¡Hey! No te borres mi beso que es de mala educación, pequeño bastardo.- dijo levantándose de la cama y tomando mis dos manos.
-No tienes derecho a darme besos indirectos.
-¿Entonces puedo darte besos directos?- preguntó sonriendo, ocasionando que mi sonrojo aumentara e intentando liberarme de su agarre.
Me puso entre la pared y él y se fue acercando lentamente en dirección hacia mi boca, seguí moviendo mi cabeza intentando hacer que no diera con mi boca.
La puerta se abrió de golpe y los dos nos asustamos y nos quedamos plasmados. Era mi madre quien había abierto la puerta, se quedó unos segundos mirándonos y llevo su mano a su boca expresando, según ella, su asombro mal actuado.
-Solo venía a decirles que ya está la cenaaaaa jujuju.
Kid me soltó y llevo una de sus manos a su pelo acomodándolo, obviamente se le veía incómodo y estaba avergonzado por lo ocurrido, yo simplemente asentí con mi sonrojo saliendo de mi cuarto siguiendo a mi mamá que iba a la cocina y detrás mío iba Kid.
La cena transcurrió tranquila, un poco incómoda, pero tranquila, mi mamá le hacía varias preguntas a Kid sobre su vida y este las contestaba sin problema alguno, pero como es normal de mi madre, siempre comienza con sus preguntas extrañas haciendo que Kid se sintiera un poco abochornado.
Terminamos la cena y mi madre se fue a tomar su té en la sala mientras que yo me quede lavando la loza en compañía de Kid. No pronunció palabra alguna en el rato que dure lavando. Cuando termine, le avise a mi madre que lo acompañaría a la esquina para que fuera a su casa.
Caminamos en silencio hasta la esquina de un parque cerca de mi casa, ya que Kid no me dejó acompañarlo más lejos, se paró frente mío y acomodó mi flequillo.
-Me la he pasado muy bien, tu madre es genial, un poco metiche, pero genial.- rei ante su comentario dándole la razón.- estoy ansioso a que llegue el sábado, espero que no se te olvide nuestra cita ¿eh?
-No se me olvidará porque estoy seguro que me estarás recordando todos estos días.
-Jajaja me conoces bien.
Reímos unísono viéndonos fijamente, su risa era escandalosa pero su sonrisa era bonita, me gustaban sus dientes blancos y derechos y sus labios delgados, era guapo, no sé cómo se pudo haber fijado en mí. Paro de reír y tomo mi mano llevándola hasta su boca, besándola al instante provocándome un hormigueo en todo mi cuerpo. Kid sabía cómo ponerme nervioso y hacer que me sonrojara fácilmente.
-P-para y ya vete de una buena vez.- le dije tratando de no sonar nervioso.
-En las despedidas siempre debe de haber un beso de por medio.
-Esto no es una despedida cabeza de pincel.- rió ante mi comentario.
-Eres bueno arruinando los momentos románticos.
-Es que ya me tengo que ir.- mentí para hacer que me soltara.
-No quiero que te vayas, no huyas, sabes lo que se aproxima por eso quieres irte ¿verdad?
Había dado justo en el clavo, sabía las intenciones de Kid, sabía que después de ese beso en la mano querría darme uno en mis labios, pero no debería dejarlo, es malo, después confundiría la situación y le daría falsas esperanzas y no quiero que Kid se ilusione conmigo.
-Basta Kid, no te atrevas a hacer algo más.
-¿Que es lo que se supone que haré? Dímelo.
-Sabes perfectamente a lo que me refiero.- dije un poco molesto ya que se hacía el tonto.
-Esta bien, está bien pero ten en cuenta que en cuanto menos te lo esperes lo haré, y tu no chistaras porque ya estarás enamorados de mí.- dijo en un tono de burla y soltó mi mano, depositando un pequeño beso en mi mejilla.- me gustas tonto.
Me aleje un poco de él avergonzado agarrando mi mejilla.
-Y-y-y-ya veteeeeeee.- lo empujé para que comenzara a caminar.
Lo vi alejándose, volteando repetidas veces para despedirse de mi, yo simplemente levanté mi mano y sonreí, era un completo tonto, pero que se le iba a hacer me caía bien. Cuando desapareció de mi vista me di la media vuelta y comencé a caminar a mi casa.
Estaba feliz, las palabras que Kid me había dicho me hacían sentir un poco feliz y avergonzado, ya que antes no se me habían declarado. Fije mi vista al frente viendo el cielo, voltee a un lado ahora viendo el parque, había niños revoloteando en la caja de arena y en los jueguitos. Vi que en los columpios estaba cierta persona, y sin duda alguna, era Zoro.
Los nervios se apoderaron de mi cuerpo, mis manos comenzaron a sudar y mi corazón latía con fuerza. Quería acercarme y sentarme junto a él. Suspiré profundamente y me armé de valor emprendiendo mi caminar hacia los columpios donde se encontraba. A unos centímetros levantó su cabeza y me miró, yo simplemente le sonreí nervioso.
-Ho-ho-hola.
-Hey, hola
-¿M-me puedo s-sentar?- señalé con mi dedo índice el columpio que estaba vacío a un lado de él.
-Claro.- me dio una pequeña sonrisa que hizo que diera un grito interno.-¿estás solo?- preguntó.
-Si jeje.
Nos quedamos en silencio, como siempre solía ser cuando estábamos nosotros dos solos. Sentí su mano colocandoce encima de la mía, lo miré sorprendido sin saber qué hacer y con un pequeño sonrojo, él me miró fijamente y me sonrió de lado.
-Eres muy bonito.- dijo sin más provocando que mi sonrojo incrementara.
-¡G-g-g-g-g-gracias!- dije eufórico, pues no sabía cómo reaccionar debidamente por causa de mis nervios.
Rió levemente y colocó su mano ahora en mi mejilla.
-¿Quieres ir a mi casa?- preguntó sin más.
Mi boca se abrió de lo asombrado que estaba, y sin pensar, asentí rápidamente.
~Continuará.