- Etto Bianqui-san como es Japón?- pregunto el castañito recostado ene l asiento mirando hacia la ventanilla del avión
- Pues es una isla y es como cualquier otro lugar en el planeta con plantas, animales y todo lo demás
- Ahh- dijo un poco desanimado el otro es no le explicaba nada- y Reborn cuando va a venir a Japón?
- Mira Tsuna Reborn no vendrá pronto, pero creo que tu le prometiste que harias tu mejor esfuerzo no?
- Hai- se escucho como la voz de la azafata pedia que se abrocharan los cinturones
El avión aterrizó sin problemas, y los pasajeros comenzaban a bajar del mismo, el ojimiel se encontraba maravillado, todo era nuevo para el. Se dirigieron a la entrada del aeropuerto
Bianqui caminaba muy rápido y el peque tenia que correr un poco
En la entrada se encontraba un hombre bueno mejor dicho un joven que no pasaba de los 15 años con ropas simples pero le daban un aspecto casual, su cabello era rubio algo alborotado a su lado había un carro negro
- No se que haces aquí a fuera en ves de estar ya en el volante- dijo la pelirroja
- Oye yo no soy tu chofer, sabes que yo no lo hago por ti-contesto serio el rubio dirigio una mirada hacia el castaño que venia junto a ella, el cual se escondio detrás de ella cuando sintió la mirada del otro- hola pequeño- se puso a a la altura del castaño- mi nombre el Dinno un placer- extendió u mano hacia el menor, que solamente la observo curioso- solo tienes que tomarla, no muerdo- dijo mientras le dedicaba una sonrisa, el castaño estrecho su pequeña mano con la del mayor
- Hola mi nombre es Sawada Tsunayoshi- el castaño le sonrio dulcemente
- Ya déjate de cursilería potro, nos vas a llevar o no?
- Hai Hai, suban-el rubio se paro y les abrió lal puerta trasera
Cuando todos estuvieron dentro del auto, Dinno arrancó el auto y condujo en dirección desconocida para los dos de atrás
en Italia
Se podía ver una pequeña cabaña, en medio de aquel vivo bosque, la cabaña era modesta pero cubría todas las necesidades
Aunque para que les mienta dentro todo era bello y costoso, el exterior solo era una fachada
En el salón se encontraban 8 personas reunidas, cada uno haciendo algo diferente había una mesa en el centro pero esta estaba vacía, pero todos se comenzaron a sentar al ver que una azabache comenzaba a poner la mesa
Cuando todos ya estuvieron sentados fue que uno de los siete comenzó a hablar
- Bueno, creo que ya encontré una forma de que no nos volvamos unas miniaturas- dijo serio un hombre que traía puesta una bata y unas gafas, aunque después apareció una sonrisa- aunque dudo que tu tengas que tomarlo
- Déjate de estupideces Verde-contesto Lal molesta
- Y que no hay efectos secundarios?- pregunto una mujer que traía una capucha que no dejaba ver más que la mitad de su rostro- porque si es así me tendrás que pagar Verde
- Tranquila Viper seguro que a ti no te pasa nada, además dudo que pueda hacer algo el dinero por ti- contesto burlón el que vestía de motociclista y traía un casco
- Basta ya, Verde dinos todo, que no vine a perder mi tiempo- dijo irritado el Hitman
- Entonces no hubieras venido Reborn- dijo el militar
- Bueno chicos dejen de pelear, sin no Verde no va a poder continuar- dijo tranquila la azabache que vestía de traje, después todos guardaron silencio
- Gracias Aria, como les iba diciendo encontré la forma de no hacernos pequeños, pero como consecuencia no podremos envejecer , nos quedaremos así como nos vemos ahorita todos aceptan, dudo que les moleste quedarse así
La sala se tornó en silencio. Nadie dijo nada solo asintieron
- Bien, pero al momento de hacerlo tienen que traer lo pacificadores con ustedes
El castaño seguía admirando el lugar, por la ventana habían bastantes tiendas, edificios y personas sobre todo personas
- Etto y a dónde vamos?- pregunto curioso
- Ahh es verdad Bianqui no te ha de haber dicho nada- le lanzo una mirada a la mujer- bueno nos dirigimos a Nanimori a tu nueva casa
- Y quienes más van a vivir ahí?-pensaba que no iba a estar solo
- Hasta ahora solo con mi hermano y uno de sus amigos y la servidumbre
No pregunto nada más, solo espero tranquilo todo el viaje. Vio como el auto doblo en una esquina y entro por un enorme portón, dentro había un hermoso jardín con árboles, al fondo se encontraba una enorme casa a sus ojos (jeJe por que era una mansión)
- Bien ya pueden bajar- dijo una vez Dino cuando ya estaban estacionados – Bienvenido a tu nueva casa Tsuna
- Gracias
- Apresúrate para que conozcas a mi hermano- dijo Bianqui, cuando entraron a la casa, había una mujer esperándolos
- Izumi y Hayato?
- Está en su habitación con el otro joven
Bianqui no dijo nada más y se dirigió hacia la habitación de su ototou, cuando estuvieron frente a una puerta toco, se escuchó ligeramente un pase. Cuando entraron pudieron admirar a 2 niños, uno peliplata y el otro pelinegro
- Hayato este es el niño del que te hable, trátalo bien, tengo que irme
Dejo solo a los tres niños en la habitación, se formó un silencio un tanto incomodo hasta que uno de ellos decidió hablar
- Hola mi nombre es Yamamoto Takeshi un gusto- dijo el niño azabache, de tez morena y ojos café
- Hola, Sawada Tsunayoshi- dijo con una sonrisa que sorprendió a los otros dos, su mirada se dirigió hacia el otro niño
- A él es Gokudera Hayato, es un poco tímido- dijo burlón
- JA a quien le dices tímido baka- poso su vista en el castaño- hola
- Hola
Después de unas horas se fueron conociendo mejor, supo que Gokudera era italiano y que Yamamoto vivía en Nanimori junto con su papa y este vendía sushi, recorrió todo la casa junto con los otros 3, la casa era muy grande con muchos muchos cuartos, y nadie sabía para quienes eran. Se quedó anonadado cuando vio su gigantesco cuarto
Estaba cansado y ya estaba bajo las sabanas en la cómoda cama, tenía una vista perfecta del jardín y esto le permitía ver la hermosa luna una sonrisa decoro su rostro
- Buenas noches a todos- dijo y en un ligero susurro antes de quedarse dormido fue- buenas noches a ti también Reborn