Eran las 5:00 de la mañana, Kouki seguía dormido, pero era el único, Michi ya estaba despierta y Asahi llamaba a su puerta, acompañado de Miku, su hermanita.
Asahi: ¡Buenos días! ¿Ya están despiertos? ¡Kouki, Michi! ¿Me escuchan?
Miku: Tal vez sigan dormidos ¿No crees?
Michi: Que ruidoso eres, yo ya estoy despierta, pero no he podido hacer que Kouki se levante
Asahi: Que raro, yo creí que le tirarías una cubeta de agua en la cabeza sino despertaba
Michi: Oh, buena idea, voy a hacerlo
Asahi: Ah, no, yo no quería que...
Miku: Que malo eres, ahora ella va a hacerlo.
Y así lo hizo, Michi dejó empapado a Kouki con el agua y este se despertó rápidamente.
Kouki: ¡Ah! ¡¿Que ocurre?!
Asahi: Buenos días
Kouki: ¿Eh? ¿Ya es de día?
Michi: Son las cinco y todavía seguías durmiendo
Kouki: ¿Las 5? Ahhh... Buenas noches.
Este se acomodó de nuevo en la cama y se cubrió con las cobijas.
Kouki: Sólo 5 horas más
Michi: ¿5... horas? (Gruñó con una venita roja en su cabeza)
Asahi: Tratare yo.
Asahi se acercó a su cama para tratar de despertarlo él.
Asahi: Vamos, levántate de una vez, Kouki.
Su voz susurrando en su oído era una sensación agradable, el pelirosado se movió un poco y lo abrazó.
Asahi: ¿Que... haces? (preguntó sonrojandose)
Kouki: Mmm... Osito de peluche
Miku: ¿Mi hermano es un osito de peluche?
Asahi: ¡Por supuesto que no!
Asahi se levantó de la cama, aún con ese rubor en sus mejillas.
Michi: Ya dejen de jugar ustedes dos, mejor tratare de despertarlo yo.
Ella también se acercó a él y le dijo en el oído.
Michi: Si te levantas de la cama... te daré algo de chocolate.
Kouki se levantó de un salto con ojos brillantes.
Kouki: ¡Chocolate!
Asahi: ¿Chocolate? ¿Que le dijiste?
Michi: Siempre le gustó mucho el chocolate, así que le dije que le daría un poco.
Unos momentos después ya estaban todos listos para comenzar con el entrenamiento de Kouki.
Michi: Eres un debilucho, te hacen falta músculos ¡haz flexiones!
Kouki: ¿Flexiones?
Michi: Si, empieza con 1000
Kouki: ¡¿1000?! Pero no puedo hacer ni 10
Asahi: ¿No crees que es algo exagerado? Yo nunca hice tanto
Michi: Por eso eres un escualido debilucho, mira tus brazos; son frágiles y aguaditos
Asahi: ¿Aguaditos?
Miku: Sí, mi hermano está aguadito
Michi: Por eso es necesario esto ¡Así que hazlo, Kouki!
Kouki: Ohh... Ya que.
Minutos después.
Michi: Vamos, sigue, sigue
Kouki: No... ya no puedo más
Asahi: Pero... solo has hecho 9
Kouki: Por eso dije que no podía hacer ni 10
Michi: Eres un perezoso, continua con el ejercicio... o te mataré
Kouki: ¡Ahhh! 10, 11, 12, 13...
Michi: Así esta mejor.
Ya habían pasado unas horas cuando Kouki término, eran cerca de las 10:00 de la mañana.
Kouki: Tengo hambre, quiero comer algo
Michi: Bien, haremos una pausa, pero que sea rápido
Kouki: ¡Bien! ¿Quieren almorzar con nosotros, Asahi, tú y Miku?
Miku: Sí, por favor, hermanito
Asahi: Bien, de acuerdo
Kouki: ¡Sí!! ¡Pues a comer!
Todos almorzaron juntos y después continuaron, pero esta vez con algo diferente.
Kouki: ¿Me enseñaran a utilizar mi oscuridad?
Asahi: Sí, todo buen pactante debe saber usarla
Michi: Así es, por eso debes aprender rápido
Kouki: Bien, lo haré... ¿Como lo hago?
Asahi: Primero debes imaginar el poder circulando por el interior de tu cuerpo
Kouki: Bien ¿Después que?
Asahi: Piensa que todo eso se acumula en tus manos... Y expulsalo, intenta sacarlo por tus dedos
Kouki: Mmm, es difícil, sacarlo a través de mis dedos, a través de mis dedos.
Una pequeña ráfaga de viento comenzó a formarse y de la mano izquierda de Kouki salió una luz de color café claro, ese poder salió con tanta fuerza que destruyó una roca que estaba frente a él.
Miku: ¡Cielos!
Asahi: Muy bien, ahora deberías ponerle un nombre
Kouki: ¿Un nombre?
Michi: Asahi, muestrale tu poder y dile su nombre
Asahi: Bien.
Este empuñó su mano y apareció una brillante luz dorada.
Asahi: Brilla ¡Hotaru!
Kouki: ¡Oh! Increíble, así que tu poder se llama luciérnaga... ¿Como puede llamarse el mío?.
Tras decir esto volteó a ver a Michi, quién movía su colita como cualquier perrito.
Kouki: ¡Eso es! Yo voy a decir "Busca ¡Koinu!"
Michi: ¿Perrito? ¿No se te ocurrió otra cosa? Bueno, eres demasiado idiota para pensar en algo mejor
Kouki: ¿Idiota?
Asahi: A mi me parece bien
Miku: ¡Sí! Perrito, perrito, me gusta!
Asahi: Bien, pues creo que deberías pelear conmigo un poco para saber como enfrentarte a alguien después
Kouki: ¿Pelear contigo? No se ¿No eres muy fuerte? Además no se si me vaya a enfrentar a alguien
Michi: Lo harás, cuando alguien hace un pacto los demás pactantes te comenzarán a perseguir
Kouki: ¿Por que?
Michi: Para comprobar su fuerza, saber que tan fuertes son al luchar con otros
Kouki: Mmm, ya veo.
Y así pelearon el resto del día hasta que Kouki supo como hacerlo, terminaron en la noche,
Asahi: Ahora creo que ya podrías derrotar a alguien
Michi: Sí, a alguien muy débil, aunque con mi ayuda derrotarías a cualquiera
Kouki: ¡Genial!... Ahora quiero descansar
Michi: Esta bien, pero continuaremos mañana
Kouki: ¿Mañana también?
Michi: Por supuesto, con un sólo día no es suficiente
Asahi: La mayor parte de su poder aún esta dormido, seguro que cuando despierte será muy fuerte (pensó)
Cerca de ahí, vigilandolos, estaba un sujeto misterioso.
Voz: Kouki Sakuragami, eh? Se ve interesante, quiero asesinarlo con mis propias manos (ríe ligeramente).
Kouki: (Estornuda) ¿Eh?
Michi: Cuidado, alguien podría estar hablando de ti
Kouki: ¿Hablando de mi? ¿Pero quién?
Asahi: Cualquiera, nunca se sabe
Miku: Cierto, cierto
Kouki: Ahh, espero que no sea nada malo
Michi: Si es algo malo deberías estar preparado
Kouki: ¿Preparado?
Michi: Por eso necesitas entrenar más
Kouki: Ay, esta bien, pero hasta mañana
Asahi: Yo ya tengo que irme, buenas noches
Kouki: Buenas noches
Miku: ¡Buenas noches! ¡Buenas noches!
Michi: Ya váyanse de una vez
Kouki: Jiiji, no la escuchen
Asahi: Descuida, esta bien...
Michi: Que descansen...
Kouki: ¿Dijiste algo?
Michi: Nada, vámonos a dormir ya
Kouki: ¡Sí! ¡Dormir!
Michi: Duerme bien, Kouki.