CAPITULO 15: LA VERDAD
-Disculpen la tardanza, yo soy el tercer miembro – decía el joven que había entrado, mientras se sacaba la capucha que le cubría – mi nombre es…. Menma….Menma Namikaze un gusto hokage-sama – dijo serio el joven que ahora se dejaba ver.
- N-no pu-puede s-ser Na…. – tartamudeaba la rubia hokage al ver al recién entrado quien se había presentado bajo en nombre de Menma Namikaze el cual la miraba de forma directa y fría dejando aun mas confundida a la mujer quien no podía hablar ni reaccionar, frente a ella se encontraba un joven un poco mas bajo de dos de los integrantes que estaban junto a el, con una tez levemente bronceada siendo mas blanca, tersa y delicada como suave a la vista, sus labios bien formados y pequeños de un color cereza y su nariz pequeña y un poco respingona dándole aún más belleza al joven frente a ella, pues su rostro poseía facciones delicadas pero no como los de una mujer sus facciones le daban un toque varonil, este poseía un cabello tan negro como la noche, un poco chascón especialmente arriba pero sedoso y brillante a los ojos de cualquiera, su cabello era largo que caía suelto por su espalda llegándole hasta las caderas poseyendo dos mechones un poco mas cortos los cuales caían por los lados de su cara llegando un poco mas debajo de su pecho mientras que al frente pequeños mechones caían sobre su rostro hasta un poco más debajo de sus ojos tapando parte de este, pero lo que más le llamaba la atención eran sus ojos, eran como los de un felino con dos joyas zafiro hermosas pero que no mostraban nada eran dos joyas frías y calculadoras que se cubrían con una fuerte muralla que no dejaba ver nada más aparte de lo ya mencionado, ni una pisca de inocencia, amor, compasión, dolor o alegría eran dos joyas muy distinta a las que tenia esa persona. Esta persona vestía con un pantalón a la cadera negro, una especies de botas las cuales le llegaban unos diez centímetros bajo la rodilla por lo que los pantalones se perdían dentro de estas botas las cuales se veían cómodas como para pelear incluso peligrosas, mientras que para arriba llevaba una especie de gabardina que le llegaba hasta la mitad de los mulos color negra con los bordes y botones de color plateado y bajo de esta tenia una malla de color plateado que le llegaba un poco mas arriba del ombligo por lo que dejaba este al descubierto al llevar la gabardina abierta y en su cuello tenia una cinta negra colgando de esta una estrella con ocho puntas de color plateado mientras que al medio de esta había una gota de color rojo sangre.
-¿Se encuentra bien Hokage-sama? – pregunto Toaru, luego de un rato de silencio en el cual las mujeres no despegaban la vista del recién llegado, este era del mismo porte que Menma, un joven de tez blanca, ojos dorados y de un cabello color broce el cual le llegaba a los hombros, vestía con unos pantalones blancos pero al igual que Menma traía puestas las botas logrando que el pantalón se perdiera dentro de estas, y para arriba llevaba una especie de camisa con el cuello parado logrando cubrir el cuello de quien la portara pero con la parte de adelante abierta, sin mangas de un color azul rey con bordes color crema, esta camisa se apegaba al cuerpo del menor llegándole un poco más debajo de la cintura, esta en la parte de adelante tenia una línea vertical que empezaba por uno de los bordes del cuello y terminaba al final de la camisa, siendo esta línea partida unas siete veces por pequeñas líneas horizontales sobre esta, todo de color crema y detrás de el se dejaba ver el estuche de una espada en su cintura, este se encontraba al lado del otro joven de nombre Masaki el cual era mas alto que Toaru sus ojos eran de un color plateado, de tez tan blanca como la porcelana y de cabello corto y chascón de color negro, este vestía casi igual que su hermano la ropa se diferenciaba solo por los colores pues su camisa era de un color plata con los bordes negros de mismo color eran sus pantalones, llevando puestas las mimas botas.
-¿Si, se encuentra bien hokage-sama esta pálida? – pregunto Masaki ahora, mientras que con su mano derecha tomaba la cintura te Toaru y lo acercaba más a el y con la izquierda tomaba la mano de Menma y lo acercaba a el igual a que como hizo con Toaru y pues por fin la rubia despertó de su letargo mirando ahora a los tres jóvenes frente a ella y luego posar su vista en el mayor quien ella suponía era el maestro del grupo cosa que fue captada por el mayor por lo decidió hablar.
-Siento la tardanza pero tuvimos ciertos inconvenientes me presento soy Ray, Fujimura Ray y soy el sensei de estos jóvenes, Toaru y Masaki que son hermanos siendo Toaru el menor por un año con Dieciséis y Masaki el mayor con diecisiete y Menma de dieciséis – dijo tranquilo a la rubia quien le miraba.
-Eso es imposible – dijo apenas la rubia pero aún así siendo escuchada por todos – Tu… tu eres Naruto ¿cierto? – dijo un poco mas fuerte pero sin llegar a gritar, esta se encontraba realmente perdida no entendía que pasaba la persona delante de ella era muy distinta al rubio pero al mismo tiempo tan parecida que no entendía, el solo pensar en encontrarse después de tantos años con el rubio le hacia sentir algo que lo lograba descifrar era algo parecido a una combinación de miedo, culpa, dolor, alegría entre otros.
-Mmm desde que llegue al parecer me ha estado confundiendo con otra persona hokage-sama – contesto el rubio mirando fijamente a la mujer y separándose de su amigo para dar unos pasos adelante quedando al frente de la mesa de la hokage, la mujer le vio directamente a los ojos pero no vio nada solo frialdad.
-No, no me puedo equivocar tu eres realmente Naru… - no alcanzo a terminar porque fue interrumpida por el menor.
-Naruto Uzumaki ¿cierto? – dijo sin mostrar ninguna emoción sorprendiendo a las dos mujeres – iba a decir Naruto, usted cree que soy Naruto – dijo ahora – pues se equivoca no lo soy, ya se lo dije mi nombre es Menma, Menma Namikaze.
-Eso no puede ser, tu eres Naruto-kun – dijo rápidamente la pelinegra que desde el principio se había callado sin decir nada mas porque no podía que porque no quisiera – es mas ese apellido nadie tiene ese apellido, es impo…
-Ya lo dije soy Menma y si soy un Namikaze ese es el apellido de mi padre y si creen que soy Naruto se equivocan, la razón por la que me parezco a el es porque Naruto era mi hermano – dijo directamente dejando en shock a las mujeres que no entendían ya nada, siendo la rubia la primera en hablar.
-Que estas diciendo, es-eso es im-imposible – decía la mujer rubia.
-No, no lo es pero se lo explicare de forma que entienda – dijo tranquilo siendo mirado por sus amigos que se mantenían igual de tranquilos que el y por las mujeres que estaban ya pálidas y sin entender nada – como lo dije antes soy Namikaze por mi padre… uno que ustedes conocen… Minato Namikaze el era mi padre, claro que yo no lo conocí pero por mi madre se que mis ojos son como los de el y por eso es que Naruto es mi Hermano.
-Eso es imposible Kushina solo tuvo un hijo y ese es Naruto – dijo la rubia.
-Nunca he dicho que ella sea mi madre – le contesto Menma.
-¡¡Entonces di la verdad, explícate que es lo que esta pasando que es lo que dices!! – casi grito la rubia hokage.
- Esta bien le diré todo hokage-sama no me importa si me cree o no, pero se lo diré de todos modos – le dijo tranquilo para después cerrar sus ojos y comenzar su relato – vera mi madre no es Kushina-san ella solo es la madre de Naruto mi hermano menor, aunque solo nos llevamos por unas semanas, mi madre se llamaba Minori ella era una aldeana de la aldea de la estrella, ella conoció a mi padre hace más de diecisiete años cuando el la salvo en una misión que tenia en la aldea de la estrella, luego de salvarle el se quedo con mi madre y luego de unos días de haberse conocido ellos pasaron una noche juntos antes de que mi padre se fuera de la aldea de la estrella yo soy fruto de lo que paso aquella noche, cuando mi madre se entero de mi existencia no le dijo nada a mi padre, ella me dijo que me espero con muchas ansias y que cuando naci dijo que fue la mujer más feliz del mundo pues pese a haber estado tan poco tiempo con mi padre se había enamorado de el, pero ella sabia que era un amor imposible pues mi padre amaba a otra mujer Kushina-san, pero unas semanas después de que naci mi madre se entero de la muerte de mi padre en esta aldea eso la deprimió mucho pues el jamás sabría de mi existencia y yo jamás lo conocería pero siguió adelante, tras la muerte de mi padre ella decidió ponerme su apellido y pues así lo hizo – dijo con el mismo semblante de siempre tranquilo e impasible pero viendo las caras de las dos mujeres frente a el las cuales parecían en otro mundo.
-Eso no puede ser, esto debe ser mentira TU MADRE DEBE ESTAR MINTIENDO – dijo y luego grito la hokage lo que decía aquel debía ser mentira ella no podía creer algo así.
-Yo no miento y mi madre tampoco de eso estoy seguro y no tengo porque dudar de ella, así que por favor le ruego que no hable así de ella – pidió sin inmutarse el menor por el grito de la mujer.
-Tsunade-sama antes Kakashi-san dijo algo acerca de una misión que Minato-san había tenido en aquella aldea a lo mejor y el dice la verdad – dijo la pelinegra con duda en sus palabras y aún sorprendida – si le hacemos algún examen se podría saber si lo que dice es verdad o mentira – dijo después ya reponiéndose.
La hokage solo suspiro y se sentó pues estaba parada – entonces dices que eres hijo del cuarto Hokage y ¿tu madre? Que paso con ella – le pregunto al joven que aún estaba frente a ella.
-Ella murió hace mucho tiempo yo tenia diez, ella antes de morir me conto todo de mi padre pues antes no decía mucho, pero esa vez fue distinto me dijo su nombre, la aldea a la que pertenecía, me dijo también que padre era hokage, también me dijo que tiempo después, antes de que naciera le llego una carta de mi padre donde le deseaba lo mejor que esperaba ella estuviera bien y fuera feliz, en esa carta le conto de que el era muy feliz de que su amada mujer estaba embarazada de un bebe que se llamaría Naruto – dijo mostrando por primera vez un semblante distinto pues sus ojos y facciones dejaban ver tristeza y odio – mi madre me dijo que tenia un hermano menor al cual si era posible debía buscar en un futuro, el y yo nos parecíamos mucho por eso me han confundido – termino de decir ocultando sus ojos con su flequillo.
-¿Lo dices como si lo conocieras Menma-kun? – pregunto la pelinegra.
-Eso es porque lo conozco – respondió de manera directa y fría Menma a las mujeres que abrieron los ojos en demasía al escuchar lo dicho por el menor.
-¿Que dices?, ¿como que lo conoces?, ¿de que hablas? – preguntaba sin parar la hokage mientras se paraba de su asiento.
-Lo conozco… hace un tiempo lo conocí… por eso digo que nos parecemos nuestras únicas diferencias son el color del cabello y que yo no tengo las marcas que el tenia – contesto volviendo a ocultar sus ojos y temblando un poco especialmente la voz.
-Dime, dime donde esta… ¿donde lo viste? – pregunto ahora la hokage caminando hacia el menor tomándolo de los hombros.
-Eso a ustedes no les importa – contesto el menor a la mujer quien solo le miraba.
-Tu sabes donde esta ¿cierto?
-Si, si lo se pero eso a ustedes no les importa – dijo zafándose del agarre de la hokage.
-¿Dime donde esta?, necesito saber donde esta el, DIMELO – dijo y luego grito ya desesperada, quería saber de el, no sabia pero necesitaba saber del chico al cual quería como aún nieto, porque pese a todo no podía olvidarse de el, necesitaba preguntarle el porque, el porque hizo aquello.
-No se para que lo quiere, pero cualquier cosa que quiera con el es imposible… Naruto, mi hermano Naruto esta muerto… ESTA MUERTO – le grito finalmente a la mujer que derramaba lágrimas sin darse cuenta – el ya esta muerto así que déjenlo tranquilo, lograron lo que querían, lograron matarlo ya déjenlo descansar tranquilo y no se atreva a derramar lagrimas no sea hipócrita, NO SE ATREVA A LLORAR – le termino gritando.
-De que hablas eso es imposible – dijo la pelinegra.
-¿Como que esta muerto?, ¿Por qué? si el escapo ¿porque es que esta muerto? – pregunto la hokage.
-¿Que porque esta muerto?, que le importa Hokage-sama, ya esta muerto eso el lo que ustedes querían así que para que pregunta – le decía Menma de nuevo con su semblante serio.
-Por favor explícate, es una orden, el cometió un crimen y debía pagar por ello, el a sido buscado por más de tres años para pagar su condena, así que dime todo lo que sepas de el ahora o me veré en la necesidad de encerrarte y obligarte a confesar – dijo ahora seria e imponente la mujer rubia al menor frente a ella, el cual solo se mordía el labio inferior y apretaba sus puños.
-Mi hermano no era ningún criminal – dijo relajándose al sentir como una esencia tan conocida para el lo abrazaba por detrás.
-El mato a dos personas – dijo la hokage sorprendiendo a Menma cosa que nadie se dio cuenta, este iba a preguntar pero decidió quedarse callado después de todo ya sabría.
- Si lo busca para que pague su condena, ya le dije no es necesario el ya esta muerto, su condena era la muerte entonces para que buscarlo – dijo de manera fría el menor pero ya más tranquilo gracias al abrazo del mayor.
-De que hablas su condena nunca fue matarle – dijo la Hokage enojada por la mentira del menor quien solo rio de forma burlesca.
-No se como es capaz de decir eso Hokage-sama, esta bien que le mintieran a la gente del pueblo pero conmigo no es necesario que lo haga conmigo se perfectamente que querían matarlo – le dijo luego de terminar de reír se estaba molestando lo único que quería era destruir la oficina y salir de ahí y matar a los culpables pero no podía debía tranquilizarse y seguir con lo planeado esto solo era el principio faltaba mucho por hacer todavía.
-TE EQUIVOCAS EL SOLO IBA A SER EXILIADO – grito la hokage.
-MIENTE – grito luego Menma muy enojado y con odio pero rápidamente se calmo – se perfectamente que eso es mentira el mismo me lo dijo que su condena supuestamente y para los demás era la extracción del Kyubi, el sellar su chakra para luego echarlo de la aldea cerrando todas las puertas de ayuda – dijo mirando con odio a la hokage quien no dijo nada – pero eso era solo una mentira sabe perfectamente que tanto el kyubi como su contenedor son una persona un solo ser, si Naruto moría el Kyubi lo haría con el, por lo tanto si los separaban Naruto moriría, el no seria capaz e vivir sin el – dijo sin sorprenderse al ver a la mujer que habría los ojos y la boca como si recién se enterara de aquello – así que ya no mienta, el sello y el exilio eran mentira pues no creo que exiliaran a un muerto.
-Eso no puede ser – dijo Shizune pues no tenia ni idea.
-El ya esta muerto así que déjenlo en paz.
-Le hemos buscado por mucho tiempo pero no hemos encontrado nada ni siquiera su cuerpo o alguna señal que indique que este muerto, por lo tanto no podemos creerte así como así, si lo que dices es verdad y eres su hermano y se conocieron como se que no le estas ayudando – dijo la hokage sin ver a nadie pues se había dado vuelta y ahora miraba por la ventana de la oficina a la aldea que ya era cubierta por la noche.
-Hace más de tres años el sensei y yo estábamos en una misión ni muy lejos ni muy cerca de esta aldea – comenzó a relatar llamando la atención de ambas mujeres que posaron su mirada en el – ya era de noche por lo que nos quedamos a dormir en el bosque yo Sali a los alrededores y llegue a un lugar en donde ya no habían tantos arboles había un lago todo era muy bonito ahí lo vi… sentado en el suelo con su cuerpo golpeado, su ropa rota y con sangre, este miraba a la luna con un kunai en sus manos el cual acercaba a su cuello, pero el noto mi presencia…
FLASH BACK
– Quien eres…….. Tu, acaso vienes por mi, quieres matarme – era lo que preguntaba un niño rubio a alguien en la oscuridad.
- No, no vengo a matarte. Dime porque estas tan herido, y que haces aquí – pregunto la sombra.
-Porque debería contestarte, eso a ti no te interesa
-Yo e contestado a tu pregunta ¿o no? – insistió la sombra al muchacho.
-Me e escapado de mi aldea ellos querían ejecutarme por un crimen que no cometí eso es todo contento.
- Y si escapaste para no morir, porque piensas matarte con ese kunai.
- Y-yo so-solo pienso cumplir lo que ellos quieren – contestaba el rubio con la cabeza gacha – solo que los dejare tener todo.
- Dime enserio quieres morir – pregunto el desconocido extendiéndole su mano.
-Ya no tengo nada y no tengo las fuerzas para seguir luchando – contesto el kitsune mientras ahora miraba el cielo nocturno – ya no hay razón para seguir, ya no puedo seguir.
-Mientras estés vivo siempre se puede seguir, si tu vida es lo único que tienes aférrate a ella – le decía la sombra sin dejar de ver al rubio – ven conmigo, debes tener algún anhelo – extendió su mano nuevamente
- Entonces… dime ¿quieres morir? – volvió a hablar sin apartar la mano extendida al menor.
- yo ya tome una decisión… pero me gustaría pedirte algo
FIN FLASH BACK
-Cuando lo vi me di cuenta de quien era algo me lo decía en mi interior lo quise salvar, pero el no quería el ya había tomado una decisión me dijo, me pidió algo yo le dije que lo cumpliría a cambio de que me dijera todo lo que había pasado todo de el, quería saber quería asegurarme de que mis sospechas eran reales, no tenia más familia, por lo que si el era mi hermano haría de todo para salvarle y llevarlo conmigo, el estaba como un muerto en vida, ya no perdía nada así que me diría todo dijo y así lo hizo me dijo todo sobre su vida quien era, de donde venia, como había sido su niñez, todo sin ocultar nada, cuando termino de decirme todo solo dijo que debía cumplir mi promesa pero yo no conteste nada sabia la verdad sabia quien era ni siquiera el lo sabia pero yo si y no iba a dejar que muriera, por eso le abraza y le dije que se fuera conmigo que no estaba solo que yo era su hermano, que pese a que no teníamos padres, si lo tuvimos antes y ellos de seguro nos amaron – dijo viendo la cara sorprendida de las mujeres – si se lo dije, le dije el nombre de sus padres y que yo era su hermano el comenzó a llorar y me abrazo con la misma fuerza con lo que le había hecho yo, le correspondí le dije que todo estaría bien, le dije que estaba feliz de que me creyera y el solo dijo, el me dijo que no mentías que ellos eran mis padres, no sabe si tu eres mi hermano, pero yo te creo y soy feliz al saber que hay alguien más en mi vida que no estaré solo en mis últimos momentos, yo había pensado de que ahora todo estaría bien que se iría conmigo y que estaríamos juntos, pero no fue así el solo me dijo soy feliz se soltó del abrazo, dijo que sentía ser tan egoísta que lo perdonara pero que ya no quería más y con el kunai se quito la vida cuando me di cuenta su cuerpo ya sin vida estaba en mis brazos, mi ropa y mis manos llenas de sangre y la frialdad de su cuerpo, me hicieron darme cuenta de que ya no podía hacer nada, el ya estaba muerto – termino de decir ocultando su mirada con su flequillo sin mirar a nadie ni a nada.
Nadie decía nada, no podían ni querían era mucho era demasiadas cosas de las cuales enterarse y muy difíciles de aceptar – eso… - intentaba hablar la pelinegra pero sus palabras morían antes de poder ser libres.
-¿Cual fue la promesa que debías cumplir? – pregunto seria la rubia dándose la vuelta para seguir mirando a la aldea la cual era abrazada por la oscuridad de la noche y bañada por los rayos de luz que regalaba la luna.
-Eso no tiene porque saberlo Hokage-sama ya he dicho mucho no deseo hablar más – contesto el Menma aún sin mirar a nadie solo se abrazaba a si mismo, pero de un momento a otro sintió como le daban la vuelta para después sentir del calor de su sensei, quien nuevamente le abrazaba mientras pasaba su mano por su largo cabello, este sin esperar mucho solo se aferro a ser que le brindaba del calor que tanto necesitaba.
-Yo estaba con el en aquel momento cuando volvió, me pidió ayuda aún cuando sabia ya no se podía hacer nada, por lo que solo pude consolarlo y luego nos fuimos con el cuerpo de Naruto-kun le enterramos en un lugar donde sabemos estará seguro, ya por favor dejen que descanse en paz – hablo y pidió el sensei sin separarse de su alumno quien poco a poco se fue soltando.
-Ya creo de que es hora de que nos vallamos – dijo mostrando su semblante tranquilo y serio – aquí están nuestros papeles espero esto no valla a interferir con nuestros planes de dar los exámenes chunnin – dijo para dejar los papeles faltantes en la mesa junto los otros de sus compañeros para después darse media vuelta y caminar hacia la salida de la oficina, pero antes de siquiera lograr abrir la puesta fue detenido por la voz de la hokage.
-Nos culpas de su muerte, por eso te pregunto esto, ¿no, nos odias no deseas venganza contra esta aldea por hacerlo tanto daño a tu supuesto hermano? – Pregunto seria, dura sin denotar sentimientos y sin mirar a nadie, el ambiente era tenso demasiado para el gusto de cualquiera y más aún al no escuchar respuesta de Menma – no vas a contestar.
-Pese a todo el amaba esta aldea era su hogar y también fue el hogar de nuestro padre el cual protegió entregando su vida en ello, yo no tengo derecho para hacer nada en contra de esta aldea ni contra los inocentes, por eso prometo no hacer nada contra personas inocentes – fue todo lo que contesto Menma pero dejando en claro su respuesta para algunos, lamentablemente aquella mujeres no se dieron cuenta del mensaje entre líneas de esas palabras – Yo no hare nada contra la gente que no tiene culpa, mi meta son solo aquellos culpables los demás no será necesario que haga algo en contra de ellos pues la verdad será el peor castigo que tendrán – pensó mientras abría la puerta para salir siendo seguido de sus amigos.
-Mañana te espero a primera hora aquí mismo necesitamos saber la verdad de todas tus palabras, también te haremos unos exámenes como confirmación, no llegues tarde si quieres pueden venir los demás contigo – dijo tranquila la mujer rubia como si del clima estuviesen hablando, Menma ante las palabras no se paro ni deje su camino solo…
-Lo dicho solo es… la verdad – se escucho antes de escuchar el ruido de la puerta cerrase, dejando a ambas mujeres solas.
-Shizune manda a llamar a Kakashi que venga ahora mismo, también manda un mensaje a Jiraiya que venga de forma urgente y prepara todo para mañana – pidió de la misma forma anterior recibiendo solo una pequeña reverencia de la pelinegra quien salió de inmediato dejando a la hokage sola – Naruto – dijo en un susurro mientras cargaba la cabeza en el vidrio – la verdad…
CONTINUARA…