CAPITULO 26: FLASH BACK 1/2
Era un nuevo día, tranquilo y despejado en el cual todos se recuperaban de las pequeñas consecuencias de la batalla anterior, mas para alguien al cual los rayos del sol pegaban fuertemente en sus ojos cerrados por elección este era un día difícil y sombrío, la verdad que fue revelada ante él el día anterior había dejado más consecuencias que la batalla vivida, no físicamente pero internamente estaba destruido, más sabia debía reponerse debía tomar una decisión la cual hace mucho tiempo ya había decidido, por lo que ahora debía ponerla en marcha.
-Es hora de hacerte una visita Tsunade – dijo aquel hombre que se encontraba sobre uno de los tantos techos de aquella villa, este era de larga cabellera blanca y moreno, él cual mientras hablaba abría sus ojos con determinación y tristeza, sabia que lo que haría ahora quizás provocaría dolor y odio en muchas personas en un futuro cercano, pero él tenia una prioridad y aunque sabia a lo mejor no hacia lo correcto en estos momentos era lo mejor. Por lo que con eso en mente de levanto del que había sido su lecho y miro hacia su destino dirigiéndose a este recordando todo lo sucedido la noche anterior.
FLASH BACK
-Entonces creo que ya es hora de que me expliques que es lo que esta pasando aquí – dijo una voz ronca con un cierto deje de molestia – entonces… ¿Qué es lo que estas planeando?… Naruto – Pregunto sin dudar el portador de aquella voz haciendo que Menma se diera vuelta con una pequeña sonrisa de lado en sus labios.
-¿Acaso no le han enseñado que escuchar a escondidas una conversación ajena es de mala educación?… Ero-senin… - dijo el más joven con una pequeña sonrisa en sus labios mirando fijamente al que había sido su maestro hace años atrás y la única persona adulta que realmente le importo, más lo único que recibió de respuesta fue un fuerte abrazo uno que no pensó nunca recibir de aquel duro hombre que lo abandonaba en sus entrenamientos por andar a la siga de mujeres.
-Por fin te encuentro Naruto – fue lo siguiente que susurro el hombre separándose un poco del menor para mirarlo fijamente con una sonrisa de felicidad en su rostro, haciendo que el menor también sonriera de forma débil per cálida.
-Hai ero-senin por fin me has encontrado – le dijo sonriendo ahora de forma burlesca pero no de mala manera, haciendo que Jiraiya sonrisa de la misma forma.
-Valla hombre si que eres un jodido dolor de cabeza – le dijo mientras posaba su mano sobre la cabeza del meno y lo chasconeaba, tenia muchas preguntas y Naruto muchas cosas por explicar y responder pero por ahora quería ver que el menor estuviera bien, más en ese momento una tercera presencia se hizo presente, una que alarmo al mayor quien se puso a la defensiva, más al menor solo sonrió en espera de la llegada de aquel ser que tan bien conocía.
-Te has tardado Kyu-chan – dijo intentando sonar molesto más solo parecía un niño pequeño haciendo berrinche algo que sorprendió al peliblanco y molesto al recién llegado.
-Tsk mocoso cuantas veces te he dicho que no me digas así por un demonio, la próxima vez te matare – dijo mostrándose el recién llegado dejando ver a un joven de unos 25 años alto de cuerpo atlético, de unos ojos rojos escarlata brillantes, de piel bronceada de un largo cabello igual de rojo pero que termina con puntas anaranjadas, quien solo miro fijamente a Naruto más sus ojos mostraban que aquella amenaza era una que jamás pasaría de ser una simple amenaza.
-Ya, ya jeje no te enojes Ku-chan – dijo haciendo que al zorro le naciera una gran vena en su frente, más para no cometer ningún homicidio decidió llevar su vista a la otra persona que el miraba fijamente con duda.
-Joon ¿ha pasado mucho tiempo no crees Senin? – dijo mirando al peliblanco que no dejaba de estar a la defensiva.
-Naruto no quería apresurar nada pero supongo que entenderás que deberás explicarme muchas cosas, referente a lo sucedido hace tiempo atrás y a lo que siguió a eso, empezando por él – dijo apuntando al pelirrojo frente a él, que solo chasqueo la lengua dirigiéndose hacia donde estaba Naruto ganándose detrás de el apoyado en un árbol pero pendiente de su alrededor, sabia la conversación que ahora se daría era importante.
-No te preocupes lo entiendo es más yo también quiero hablar contigo, no negare que me sorprendió que me hallas descubierto tan pronto, pensé que tardarías más o que seria yo quien me revelaría ante ti, pero supongo que me has facilitados las cosas Ero-senin – le dijo sorprendiendo un poco al mayor quien bajo su guardia – así que hablaremos ahora mismo es mejor no dejar pasar las oportunidades, pero no lo haremos aquí, bueno si pero… Tsk ya entenderás – dijo cerrando sus ojos para después abrirlos provocando que todo a su alrededor cambiara, Jiraiya estaba confundido solo había pestañado por menos de un segundo y durante ese lapso todo había cambiado incluido una de las personas frente a él, ahora estaba en un lugar en donde todo era de blanco rosáceo, en donde lo único que cambiaba era el lugar en donde ellos estaban pues el pelirrojo que antes se apoyaba de un árbol ahora lo hacia de una gran roca, Naruto estaba ahora sentado en un gran tronco frente a él mientras él estaba parado al lado de otro, todo esto bajo la sombra de un gran árbol el cual dejaba caer pétalos de igual color rosáceo los cuales para su sorpresa caían al agua que hacia de soporte para ellos, si todos ellos estaban sobre un hermoso lago tan claro y hermoso como los antiguos ojos de su pupilo, y Naruto ya no estaba como Menma sino tal y como debía ser, aunque los cambios realmente no eran muchos pues seguía con las mismas facciones finas pero masculinas, su mismo físico, en fin todo era igual lo único que cambiaba era que ahora si traía sus inolvidables marquitas en su rostro y que su igual de largo cabello ahora no era negro sino que de un hermoso rubio dorado, tan brillante la envidia del mismo sol.
-¿Naruto que esta pasando? – pregunto entre serio y sorprendido el mayor.
-No te preocupes estamos en el mismo lugar solo que a la vez es diferente, pero bueno lo importante es que aquí nadie nos va a molestar, podremos hablar tranquilos Ero-senin, así que no te preocupes y siéntate – dijo pero al ver la cara de disconformidad del mayor decidió dar una mejor explicación – estamos en mi interior, en este lugar es donde pasa la mayor parte del tiempo Kyu-chan, fue creado por mi y puedo cambiarlo si así quiero, pero este ambiente me gusta y pues solo nuestra conciencia esta aquí nuestra forma física sigue fuera, de seguro en el suelo durmiendo, pero no importa aún cuando pase alguien por ahí no se darán cuenta de nosotros, pues caerán en una ilusión que se los impedirá – termino de explicar mientras veía la vena hinchada del zorro y a su maestro sentarse en el tronco.
-Entiendo bien, bueno tengo muchas preguntas pero la primera será – dijo mirando hacia el pelirrojo quien le ignoro completamente – ¿Quién es el? – pregunto sorprendiendo un poco a Naruto pues se esperaba otra pregunta.
-Valla pensé que lo primera pregunta seria si había sido yo o no quien provoco todo años atrás – dijo un poco confundido a lo que Jiraiya solo hizo una mueca de molestia.
-Pero que dices mocoso no necesito que tu me lo digas o haber estado ahí para saber que tu nada tienes que ver con eso – dijo molesto más al ver la sonrisa de Naruto su molestia desapareció, después de tanto tiempo por fin veía una sonrisa que aunque no era igual era muy parecida a las que tanto tiempo atrás daba.
-Gracias Ero-senin por confiar en mi… - dijo y voltio a ver al pelirrojo – el es Kurama – dijo y vio la confusión del peliblanco – o mejor conocido como Kyubi el zorro de las nueve colas, aunque yo prefiero Kyu-chan o ku-chan… – dijo sonriendo con malicia, más esta desapareció al sentir la oscura aura del zorro dirigida a él, más la ignoro y miro al mayor que aún no creía lo que escuchaba.
-De que hablas dices que él es el Kyubi – dijo sin creer pese a que la energía que ese ser desprendía era sin duda la del zorro no podía creer como era que andaba suelo por ahí.
-Tsk malito vejestorio – dijo luego de recibir una mirada del ahora rubio menor, transformándose en tan solo unos segundos en su verdadero ser un gran zorro rojizo anaranjado de nueve colas – ahora nos crees soy yo, ya déjate de darle vueltas al asunto… Tsk tengo sueño – se quejo luego de hablar y se redujo de tamaño hasta quedar del porte de un gato adulto pero sin perder su forma, saltando a los brazos del rubio donde se acurruco para posteriormente dormirse sin antes no haberle dejado una ultimas palabras al peliblanco – más te vale no darle problemas a Naruto o personalmente me encargare de hacerte desaparecer de este mundo, no dejare que le vuelvan a hacer daño, ya estas advertido – fueron sus últimas palabras antes de dormir.
-Ku-chan te has dormido sin decirme como te fue… bueno supongo que por lo cansado que estas debe haberte ido bien – dijo el rubio acariciando el suave pelaje del ahora pequeño zorro – bien ¿ahora me crees Ero-senin?
-Si, aunque no es como si no te creyera solo se me hacia imposible y ahora pese a verlo con mis propios ojos no logro creer lo que vi ni lo que escuche, al parecer el zorro te ¿protege mucho? – dijo aún con un poco de duda.
-Se que es extraño pero así es, él a sido muy importante para mi durante todos estos años, luego entenderás todo – le dijo y jiraiya asintió viendo como el rubio acariciaba delicadamente al zorro.
-Por lo que veo han sucedido muchas cosas, más de las que ambos quisiéramos ¿no? – Dijo y Naruto solo le miro serio pero a la vez tranquilo – eres tan diferente ahora que me cuesta aceptarlo, ya no eres ese niño revoltoso, alegre e inmaduro al cual entrenaba, eres todo un ninja, frio, indiferente, maduro, serio, eres un adulto, más de lo que quisiera… Naruto que tan profundo has caído, ¿Cuánta oscuridad llevas contigo? – pregunto de forma triste el mayor mirando con preocupación al menor.
-Lo suficiente como para eliminar a cualquiera que se interponga en mi camino Ero-senin, lo suficiente para matar sin sentir luego remordimientos, lo suficiente para hacer que todos, incluyéndome vivan en un mundo de mentiras e ilusión con tal de lograr mis objetivos – dijo serio dando a notar a través de sus ojos que todo lo que decía era cierto – el mundo y las personas son crueles Ero-senin, matan, injurian, engañan, lastiman sin compasión a cualquiera sin importar quien sea un niño inocente, un adulto, un amigo, un familiar, un anciano, no les importa nada y sino no eres lo suficientemente fuerte para aceptar y sobrellevar las penas, perdidas e injusticias de las cuales fuiste victima caerás aún más profundo, lo se porque y estuve a punto de caer a un pozo sin retorno, pero el odio y dos personas me salvaron, gracias a Kurama e Itachi es que ahora estoy aquí, soy capaz cualquier cosa para lograr mis objetivos si, pero hay una excepción al “cualquier cosa” y esa es que jamás lastimare a un inocente, jamás lastimare a alguien que no tiene culpa de los pecados o errores ajenos, por lo menos no de forma directa e irreparable – dijo muy seguro de sus palabras y era verdad, el mataba, engañaba pero jamás haría un daño irreparable a un inocente.
-No puedo decir que estas equivocado porque no lo estas Naruto, pero sabes que para mi la venganza y el odio no son un camino el cual me gustaría que siguieras – dijo serio y con tristeza pues sabia Naruto quería venganza y nada de lo que le dijera le haría cambiar de opinión.
-Lo se Ero-senin, después de todo el odio crea más odio, pero lamentablemente no puedo solo quedarme callado me quitaron mucho, me llevaron a un punto sin retorno donde mi única salida era la muerte, y aunque viví aún después de aquello las secuela continuaron y me quitaron lo único que me quedaba en el mundo, en ese momento decidí que no podía quedarme así el dolor, el odio me hicieron más fuerte mate a Naruto Uzumaki y di vida a Menma Namikaze un ser que solo era odio y que quería venganza – dijo y al ver el rostro inexpresivo de Jiraiya sonrió – pero no te preocupes, ellos no me dejaron caer me ayudaron a sobrellevar el dolor me hicieron más fuerte, me dieron una pequeña familia incondicional, Menma Namikaze ya no solo era odio, pero aún así no olvidaba ni antes ni ahora y no se si pueda olvidar y perdonar por lo menos no antes de haber cumplido mi objetivo en esta villa – dijo con total determinación y Jiraiya ahí lo supo que muchos caerían, sin importar que el rubio llevaría a cabo su venganza.
-No importa que diga se que no te hare cambiar de opinión, pero aún así deseo y quiero saber que fue lo que sucedió Naruto, dime todo aquello que no se, dime ¿Qué planeas? ¿Por qué Itachi esta contigo? ¿Cómo fue que has logrado engañar a todos? ¿Cómo fue que llegaste a ser lo que eres ahora? – pregunto y aunque tenia muchas más sabia era momento de callar y escuchar.
-Entonces Ero-senin le diré todo bueno me saltare hechos sin importancia pero nada más… bien esta es mi historia, esta es mi realidad la cual solo Kurama, Itachi y yo sabemos – dijo preparándose para relatar lo suficiente no pensaba alargar nada.
“Se podría decir que todo empezó cuando volvimos a la aldea luego de nuestro corto viaje de entrenamiento, pero de seguro empezó mucho antes, pero bueno luego entenderás, en fin cuando volvimos lo primero que hice fue llevar a cabo mis planes, hable con mis amigos de estos, solo los que sabia mi relación con Sasuke y luego le busque a él, todo salió bien incluso mejor de lo esperado, pasamos la noche junto y a la mañana volvimos, todo iba bien había conocido a unos niños adorables, nos divertimos jugando juntos, luego ellos se fueron y llego Sakura a buscarme diciendo que la hokage me llamaba, no dude de su palabra y me fui con ella, me dio un frasco con un liquido para tomar y un papel con una dirección, el primero para supuestamente tener fuerzas luego de mi entrenamiento y el segundo para llegar donde la vieja, pues ella debía irse, claro que se fue una vez me vio tomarme todo el frasco, no dude de ella Ero-senin… llegue a la dirección indicada algo me decía que no entrara, aparte Kurama había tratado de advertirme de algo más nuestra comunicación se había cortado… sin hacer caso de nada entre y me encontré con la horrorosa imagen de una mujer muerta y los dos niños que había conocido a punto de morir por manos de Sakura, la rabia el dolor era mucha, más comencé a sentirme mal, algo pasaba con mi cuerpo no entendía el chakra salía por si solo, Kurama no respondía, no importaba cuanto tratara no podía controlar el chakra ni podía ayudar a los niños… vi como Yuki moría frente a mis ojos, vi como sus ojos se apagaban y logre leer sus ultimas palabras “te quiero Naru-niisan”, luego de eso ya no pude más el chakra rojo exploto y todo se volvió negro, en mi oscuridad solo repetía en nombre de Yuki, quiera salvarla nada más.
Luego todo paso muy rápido todos me gritaban y odiaban y golpeaban pero aún existía una pequeña luz, y esa era Sasuke pero solo recibí palabras cargadas de odio de parte del, al igual que todos me abandonaba y me dejaba solo con mi dolor, yo solo quería una mirada tierna de compresión una sonrisa pero no recibí nada solo golpes a mi corazón ya roto… estaba en prisión mi condena ya había sido dada, más esta solo era una mentira y quien me lo dijo fue el propio Danzou si Danzou el cómplice de Sakura, la ultima por la rabia y el odio que tenia hacia a mi por el hecho de estar con Sasuke y el primero por ambición quería al zorro de las nueves colas, él se encargaría luego de mi supuesto exilio arrancármelo.
Más nada salió como ellos querían kurama me ayudo a reaccionar, Kiba y Neji me ayudaron a escapar no quería que se vieran involucrados pero aún lo hicieron logramos salir, estaba determinado a demostrar mi inocencia sabia que en el fondo Sasuke aún me amaba lo tenia a él no importaba si toda la villa me odiaba mientras el supiera la verdad todo estaba bien… pero solo recibí otro golpe más al verlo besarse con Sakura, ella era la culpable de todo y él prefería creer en ella, en ese momento fui débil estaba débil y no me importa nada me despedí de mis amigos y me aleje de la aldea pero con un propósito diferente… daría fin a mi vida sin sentido… llegue al mismo lugar en donde había pasado la noche con mi gran amor, mi cuerpo dolía horrores, mis heridas sangraban, mi chakra era muy inestable tanto que estaba seguro en cualquier momento sentía explotaría… estaba tan débil tanto físicamente como psicológicamente, no quería nada solo desaparecer y así lo iba a hacer, cumpliría el deseo de konoha pero no dejaría que Danzou tuviera a Kurama, me disculpe con él por mi egoísmo, pero al final al igual que antes en prisión el terminaba disculpándose, era extraño luego de tanto tiempo cuando al fin nos entendíamos, era nuestro fin. Más tal y como me vez estoy vivo, al final no logre mi objetivo…
- Dime enserio quieres morir – pregunto el desconocido extendiéndole su mano.
-Ya no tengo nada y no tengo las fuerzas para seguir luchando – contesto el kitsune mientras ahora miraba el cielo nocturno – ya no hay razón para seguir, ya no puedo seguir.
-Mientras estés vivo siempre se puede seguir, si tu vida es lo único que tienes aférrate a ella – le decía la sombra sin dejar de ver al rubio – ven conmigo, debes tener algún anhelo – extendió su mano nuevamente – Entonces… dime ¿quieres morir? – volvió a hablar sin apartar la mano extendida al menor.
-Mocoso…
- yo ya tome una decisión… pero me gustaría pedirte algo – ellos no tienen la culpa, deseo realmente que sean felices…. Lo siento kurama, lo siento chicos… prometo ser fuerte por ustedes y por mi, me hare más fuerte pero para eso es necesario que Naruto Uzumaki muera aquí y ahora… mi existencia debe desaparecer y no ser más que una sombra – pensó el rubio con cansancio pero a la vez con determinación.
-Dime – dijo mientras retiraba cuidadosamente el Kunai de las manos del pequeño rubio – hare lo que pueda para complacerte.
-Para poder escapar… unos amigos me ayudaron… cuando… lleguen a ellos… yo… yo quiero… - estaba demasiado débil como para seguir sentía sus ojos cerrar más quería terminar de hablar pero ya esta hablar se le dificultaba, la imagen frente a el se distorsionaba, por lo que solo centro su vista en los ojos ónix que poco a poco se acercaban a él, aún con miedo de confiar nuevamente y ser traicionado – bueno si me traiciona solo me llevara a la muerte no hay mucha diferencia con lo que pensaba a hacer pero… Kurama no se merece esto, solo esta ayudándome – pensó el rubio aún viendo los ónix.
-Naruto confía en él por ahora no tenemos alternativa ahora mismo ni yo puedo controlar mi chakra, no te preocupes de alguna forma saldremos adelante – escucho le rubio la voz del zorro dentro del se notaba cansada, y con dolor, eso explicaba en parte por que su cuerpo aún no curaba y solo había dolor, el zorro estaba igual que el sino que peor.
-Confiare en ti, así que por favor ayuda a los chicos… ayuda a Neji y Kiba… Itachi… - susurro el nombre de su acompañante antes de caer en la inconsciencia debido al dolor y el cansancio que sentía, de seguro no despertaría en un buen tiempo.
-De acuerdo pequeño yo ayudare a tus amigos así que descansa – dijo el pelinegro mientras tomaba en brazos al herido menor, con la mayor delicadeza posible y comenzaba a adentrase la oscuridad del bosque – yo cuidare ti pequeño, siento no haber ayudado a evitar todo esto pese a que intuía que algo tramaban…
Luego de que me desmallará no desperté por más de un mes, bastante tiempo, pero cuando lo hice quise no haber despertado jamás… no fue agradable Ero-senin, todo era oscuro y frio sentía que mi cuerpo explotaba, se quemaba y yo solo quería expulsar aquello que provocaba ardor en cada parte de mi cuerpo, estaba confundido trataba de abrir mis ojos pero no podía… hasta que llego el ese día… el día en el que realmente desee vengarme, el día en que me di cuenta de lo que verdaderamente ocasionaron sus actos, el día en que me di cuenta que lo que me habían quitado jamás lo recuperaría… Ese día sentía al igual que los otros mi cuerpo ardía y yo no podía reaccionar hasta que el ardor se transformo en dolor, un fuerte dolor que provoco lo que por tantos día no pude, abrir mis ojos… los abrí deje atrás la oscuridad que me rodeaba más esta era mejor que la que me esperaba… había mucha sangre a mi alrededor y el dolor cada vez era más fuerte, gritaba y lloraba… rogaba porque parara, como ninja estaba acostumbrado al dolor pero este era diferente algo era arrancado de mi, eso era lo que sentía… gritaba por el dolor y lloraba por la desesperación, el miedo y el dolor de sentir que estaba perdiendo algo importante para mi… Itachi llego a mi lado y trataba de calmarme, cada vez había más sangre y pude notar la desesperación del al tratar de controlar mi chakra el cual seguía descontrolado, y lo logro pero… ya era muy tarde para él… cada vez disminuía más el dolor pero me sentía vacio, algo faltaba, algo dentro de mi me lo indicaba, mire a Itachi y el solo me miraba con culpa y dolor, quería hablar pero el me callo pronunciando un “lo siento Naruto no pude salvarlo”, aún sin entender la razón de esas palabras llore, hasta que me dormí”
-Naruto… si no puedes seguir dejémoslo hasta aquí… no te esta haciendo bien – dijo Jiraiya preocupado al ver como su alumno dejaba caer lagrimas desde sus ojos, los cuales se encontraban vacios, como si lo que estuviese llorando fuera una simple muñeca, más este simplemente negó con su cabeza.
-Desperté tan solo unas horas después, ya no estaba cubierto de sangre y no había dolor, solo un leve ardor en mi cuerpo, sentado al lado de mi cama se encontraba Itachi sentado en una silla, no me miraba solo miraba la suelo, aún recordaba sus palabras y una parte de mi quería entenderlas, pero la otra solo quería huir de su significado, más aún así pregunte.
-¿Qué paso? – pregunto simplemente el rubio tratando de levantarse, más se sentía débil y aún dolía lo que el pensaba su estomago – Itachi… dime por favor, no me ocultes nada.
-Yo lo siento Naruto… - fue todo lo que pudo decir el pelinegro, aún sin mirar al menor.
-¿Cuánto tiempo ha pasado?
-Un mes y medio de que te encontré en el bosque y tan solo una horas desde que despertaste – dijo aclarando un poco al rubio.
-¿Qué fue lo que paso? – pregunto nuevamente sabia que lo que escucharía no le gustaría pero que podía hacer, sea lo que sea era mejor saber que vivir en la ignorancia… o eso pensaba en ese momento un rubio de ahora tan solo trece años recién cumplidos.
-…- Itachi se mantuvo callado realmente no quería hablar, solo era un niño a su vista y a lo de muchos pero sabía no podía ocultarle las cosas, le ayudaría a salir del pozo en el cual seguramente caería pero aún así… era difícil.
-Si no me lo dices tu, le preguntare a Kurama, de todas formas sabré que sucede – dijo sorprendiendo un poco al mayor quien le miro sin entender bien “¿quien era Kurama? – ¿entonces? – más al no recibir respuesta del pelinegro trato de comunicarse con el zorro más este tampoco contestaba nada y al intentar más contacto con él su cuerpo ardía aún más por lo que solo obtuvo una advertencia de Kurama “Mocoso mi chakra esta inestable, ni yo aún puedo controlarlo, te harás más daño si te sobre esfuerzas, siento no poder ayudarte ni curarte… Naruto yo realmente lo siento” fue todo lo que logro escuchar del antes de perder la conexión, por lo que solo miro nuevamente al pelinegro, quien solo suspiro
-Luego de que te encontrara te traje a esta cabaña – dijo mirando el alrededor – esta alejada de todo, tarde un poco, pero una vez llegue atendí tus heridas pensé que por le chakra del zorro te curarías pero eso no paso al contrario tus heridas parecían no curar, quise salir a buscar a alguien pero la noticia de lo que había pasado en konoha se propago rápidamente por lo preferí no hacerlo, pasaron los días y nada que mejorabas, me di cuenta de que tanto tu chakra como el del zorro estaba inestable y que cada cierto tiempo esto era peor por lo que me mantenía cerca para poder controlarlo, pero tu no despertabas por lo que decidí investigar que había pasado y porque de la inestabilidad de ambos… ingrese a tu mente vi y escuche todo lo que sucedido desde que volviste – dijo viendo como el rubio ocultaba su vista con su cabello – fue difícil ¿cierto?... tras ver todo me di cuenta que el descontrol de antes y la inestabilidad de vuestro chakra se debía al brebaje que bebiste, este impedía el curso normal del chakra y lamentablemente no podía hacer mucho, más que esperar y mantenerte estable hasta que este por si solo se normalizara… pasaron las semanas y al mes, aun no despertabas tus heridas se estaban curando lentamente pero lo hacían, pero al contrario de lo creía los descontroles de chakra del kyubi eran cada vez mayores y no entendía se suponía que al no utilizarlo este se normalizaría pero no lo hacia… utilice mi Sharingan y ahí me di cuenta, todo ese tiempo el chakra había estado siendo ocupado… no por ti, pero... el chakra estaba siendo desviado para poder proteger y alimentar por así decirlo al… al bebe… - dijo en un susurro que claramente Naruto pudo oír, y no entendía pero aún así sus ojos nuevamente eran abordados por lagrimas.
-¿bebe?... ¿Qué bebe? – pregunto con vez apenas audible.
-Para el bebe que esperabas… tenias un mes de embarazo Naruto, no se como pudo pasar pero… es la verdad – dijo y vio como las lagrimas corrían por el rostro del menor, de aquel que solo era un niño que lamentablemente debió y debía vivir como un adulto.
-¿Para… snif el bebe… snif que es-esperaba? – pregunto apenas mientras tomaba su vientre con sus pequeña manos, sentía un gran nudo en su garganta y pese a saber al respuesta quería oírla, quería estar seguro.
-Lo siento, desde que me entere yo… te inyectaba de mi chakra para evitar que el bebe siguiera tomando en tuyo y del zorro pero no era suficiente y el chakra seguía dirigiéndose hacia tu vientre… no mejorabas, solo empeorabas y tu cuerpo comenzó a rechazar al bebe – decía lo más cuidadoso posible no quería lastimas más al destruido chico – no pude hacer nada lo intente pero hoy… hoy perdiste al bebe, tu cuerpo lo rechazo y se provoco un aborto en donde este murió no hubo forma de evitarlo – dijo escuchando los muy audibles sollozos del menor, mientras acariciaba su vientre como buscando alguna señal de que aquel bebe aún seguía ahí, más ahí ya no había nada.
-No, no, no, no, no es justo ¿Por qué? ¿Por qué? ¡¡¡PORQUE!!! DIME PORQUE – grito el menor mientras se aferraba a su vientre – no es justo, no es justo por su culpa, por su culpa mate a mi bebe, mate a mi bebe ¿Por qué?... ¿Por qué lo mate? – se acusaba y preguntaba mientras sin detener las lagrimas se hacia un ovillo en la cama intentando desaparecer – ¿Qué hice mal, que daño hice para merecer esto, porque todo se me es arrebatado? ¿Era mi bebe, era mío? ¿Por qué lo mate?
-NO, no Naruto tu no lo mataste, por favor reacciona – decía Itachi mientras abrazaba al menor y lo levantaba, intentando hacerlo reaccionar – tu no fuiste, no tienes culpa de nada.
-No, no, yo lo mate, porque soy débil porque no pude defenderme, porque no fui capaz de protegerme en la aldea, yo lo mate, ya no quiero más, ya no más me quiero morir – cada vez perdía más el control, el dolor era mucho y el chakra comenzaba a reaccionar – Yo lo mate, pero yo no quería, no quería, no quería matarlo, era mi bebe, me bebe, yo quiero tenerlo conmigo Itachi por favor, devuélveme a mi bebe, dame la fuerza para seguir viviendo.
-No, no ya basta Naruto – dijo sacudiéndole un poco desde los hombros para lograr que este reaccionara y le mirara a sus ojos – no fue tu culpa, tu no lo mataste por favor reacciona tu cuerpo no soporto la presión, estabas débil debido al maldito brebaje que tomaste si alguien tiene la culpa de todo esto son aquello que te hicieron esto… Naruto no puedes desear morir, se que debe ser difícil, solo eres un niño pero la maldad de las personas, de este mundo se ha ensañado contigo mostrándote lo peor, pero debes ser fuerte, debes salir adelante recuerda que hay gente que te quiere que esta contigo, no te culpes más – le decía al rubio que aunque aún lloraba ya no hablaba y el chakra había desaparecido, se sentían tan solo y desprotegido, pese a lo que el decía el mayor aún sentía que el había matado a su bebe y se odiaba por eso, más también sabía que si no fuera por lo que el hicieron, sino fuera por lo que bebió, por los golpes por la desconfianza a lo mejor eso no hubiese pasado, mato a su bebe como consecuencia de lo que le hicieron, se odiaba él mismo y odiaba a aquellos que una vez se llamaron amigos y familia.
-Sabes… - hablo suevamente mientras se recargaba en el pecho del mayor con miedo de que este le rechazara más no lo hizo – es triste… es triste tener algo y luego perderlo, yo naci y crecí solo, no tenia ni sabia nada, solo sufría por la soledad y por el odio de las personas, pero luego eso cambio tuve el cariño de algunas personas… de Sasuke… cada vez tenia más cariño, era feliz, por primera vez era verdaderamente feliz, pero de un momento a otro se me fue arrebatado todo… y ahora, ahora otra vez obtenía algo, más ni siquiera tuve tiempo de ser feliz, me quitaron a mi bebe incluso antes de saber de su existencia… ya no quiero tener nada, tener algo importante para ti solo conlleva dolor a la larga – dijo sin separar su rostro del pecho del mayor evitando así que este le viera.
-Tener algo importante para ti te hace más fuerte, no es algo malo Naruto se que estas sufriendo pero no debes temer ser feliz – dijo suavemente levantando el rostro de este para verlo más solo vio los ojos apagados, fríos e indiferentes del menor, ojos que no reflejaban nada más que el vacio de su ser – Naruto... – no pudo terminar pues el rubio negó con su cabeza.
-Naruto Uzumaki ya no existe, Naruto murió en aquel lugar hace más de un mes – volvió a negar – Naruto murió cuando él lo traiciono, Sasuke Uchiha mato mi corazón y todos los demás mataron mi alma y por ello ya no queda nada más que una cascara vacía.
-Eso no es verdad Na…
-Para seguir adelante, para poder seguir es necesario esto, es necesario que Naruto muera eso lo decidí aquel día en que me salvaste – le dijo tras interrumpirle alejándose de este – aquel día murió definitivamente Naruto y nació Menma…
-En aquel momento solo pensaba en lo vacio que estaba y en las grandes ganas de venganza, una que poco a poco comencé a planear, pasaron los días y al no tener necesidad de utilizar chakra logre recuperarme, todos los días era cuidado por Itachi eso ayudo bastante más aún en los primeros días no confiaba lo suficiente en el por lo que nuestras conversaciones eran casi nulas, pero luego poco a poco fuimos compartiendo más, recuerdo que algo que ayudo bastante a que confiara en él fue el hecho de que ayudo a kiba y Neji, gracias a él no fueron descubiertos, aún así siempre mantuve un muro que nos separaba… volví a la normalidad al igual que Kurama, una vez ambos estuvimos bien le pregunte a Kurama la razón por la que estaba esperando un bebe siendo hombre, me dijo que se debía a él, su chakra había creado todo lo necesario para que pudiera dar vida, sabes le costo hablar pese a lo poco que habíamos compartido me di cuenta de la gran culpa que sentía por lo que había pasado, aún cuando no era su culpa, se lo dije pero hasta el día de hoy aún se culpa por ello, piensa que el pudo haber hecho algo, más sabemos era imposible – dijo mientras acariciaba el pelaje del pequeño animal.
-Naruto yo… yo lo siento – fue todo lo que pudo decir el peliblanco.
-Sabes creo que para muchos eso hubiese sido lo mejor, un niño de tan solo trece años criando a un bebe no es algo normal, menos siendo un varón, enfermo y sin un futuro, siendo buscado como un criminal… pero aún si no sabes lo que daría para poder tenerlo conmigo, por haber sentido un patadita del en mi vientre, por haberle enseñado a caminar, por haber escuchado su primera palabra, por aunque haber podido verlo y abrazarlo tan solo una vez, por tan solo haberlo podido ver una vez, pero… nada de eso se podrá, pues lo mate antes de siquiera saber de su existencia – dijo sin dejar de acariciar al animal que recibía las gotas salinas que el rubio derramaba.
-No fue tu culpa, no te culpe Naruto – dijo el Senin mientras se acercaba y abrazaba con fuerza al menor quien solo se dejo hacer durante unos minutos, para después levantar sus manos librándose del abrazo y así limpiar sus lágrimas, para seguir con su relato.
-Se cumplieron tres meses de que me junte con Itachi y ya estaba mejor, tanto mi chakra como el de Kurama estaban normalizados y mis heridas curadas, por lo que ya era capas de levantarme y andar por los alrededores aunque siempre siendo cuidado por Itachi, siempre me preguntaba porque se preocupaba tanto por mi, siempre tenia un ojo sobre mi, más nunca me imaginaba una respuesta por lo que un día se lo pregunte, él la respondió con facilidad y se fue, no era una respuesta esperada pero sirvió para estrechar más nuestra relación y se convirtió en mi familia junto a Kurama, así se cumplieron dos año, dos años en los cuales vivimos solos en aquella cabaña, dos años en los cyales recibo un estricto entrenamiento por parte de Kurama e Itachi, en un primer momento solo pensaba en la venganza y en el gran odio y rabia que sentía, esos sentimientos y deseos eran los que me hacían caminar pero gracias a ellos dos no caí a un pozo sin retorno, me ayudaron a salir adelante y me hicieron mucho más fuerte, más fuerte que ha nadie, esos fueron los años más difíciles de mi vida, pero los que más frutos tuvieron, pues cuando terminaron ya no era el mismo, cuando por primer vez después de dos años logre alejarme de aquella cabaña ya no era el mismo que entro ahora era Menma Namikaze… un ninja capaz de manejar tanto el Sharingan como al zorro a voluntad…
-De que estas hablando Naruto… ¿a que te refieres con eso último, especialmente a que te refieres con ser capaz de utilizar el Sharingan? – pregunto confundido y hasta un poco asustado, ¿Qué tanto había crecido su alumno? ¿Cuánto ocultaba? Se preguntaba más no sabia las respuestas y por más que buscaba una en los ojos contrario solo veía el gran muro que los separaba.
-Me refiero a esto Er-senin…
-¿Itachi? – llamo el menor al pelinegro que se encontraba a unos metros del cuidándole como siempre lo hacia cuando este salía fuera de la cabaña.
-¿Qué sucede? – pregunto mirándole directamente.
-¿Te puedo hacer una pregunta? – pregunto sin dejar de mirarle también, viendo que este se acercaba hasta donde él estaba.
-Ya me las hecho ¿no? – dijo serio como siempre, molestando un poco al rubio quien solo frunció el entrecejo, haciendo inconscientemente un mohín que divirtió al mayor – te escucho – dijo luego de soltar un suspiro.
-¿Por qué me cuidas tanto? – pregunto su mayor duda al pelinegro que solo le miro un poco confundido y luego miro al cielo.
-No lo se, simplemente no pude dejarte cuando te vi, supongo que el capricho de salvarte y de mantenerte a mi lado es para cumplir mi egoísta sueño de tener una familia, de pertenecer a una familia aunque esta solo este compuesta por dos personas – dijo dejando de mirar al cielo para mirar a Naruto que le miraba entre confundido y con sorpresa – estoy solo no tengo una familia por mi propia debilidad… perdí a la mía por ser débil – dijo mientras comenzaba a retirarse – se que puede que aún me veas como tu enemigo, mi historial no es el mejor después de todo, pero me gustaría que me vieras como tu familia, una que se protege entre si sin pedir nada a cambio, solo la compresión del otro, puede que no me creas pero te comprendo, el odio el dolor y la venganza que deseas, todo lo comprendo porque ambos perdimos algo importante debido a nuestra debilidad y nos quedamos solos… - termino de hablar mientras desapareció en el interior de la cabaña.
-No esperaba esa respuesta – se dijo a si mismo el rubio mientras miraba el cielo también – “ambos perdimos algo importante por nuestra debilidad”, aún no lo comprendo pero lo hare, seré la familia que deseas Itachi ¿sabes por qué? Porque pese a no comprender te creo… ambos compartimos la misma mirada y la misma oscuridad… tu conoces la mía y pronto yo conoceré la tuya…
CONTINUARA….