Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Striper a la fuerza por Fullbuster

[Reviews - 907]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

Nathaly, mucha suerte en el examen. Saludos.

Naruto Namikaze POV

 

 

 

Ver a Sasuke estas dos últimas noches me había afectado. Ahora empezaba a ver que no me tomaba el pelo, realmente no se acordaba de mí ¿Tan poco le marqué en su vida? ¿Tan poco me amó? Supongo que no esperaba a sus dieciocho años tener un niño y lo más rápido fue abandonarnos, ni siquiera molestarse en contestar a mi mensaje.

 

Llegué a casa de Kakashi y como todas las noches, le agradecí que se quedase con él y me lo llevé a casa dormido como estaba. Cada vez que veía a mi hijo me preguntaba la clase de vida que le estaba dando, ni siquiera me consideraba un padre decente para él. Quizá si Sasuke se hubiera quedado… si no se hubiera marchado a aquella gira… si hubiera aceptado su paternidad nada de esto sería igual, pero también era verdad que esa gira era la oportunidad para Sasuke, la oportunidad de lanzar su carrera como artista y nosotros  no podíamos impedírselo. Supongo que ahora la fama se le había subido a la cabeza y ya no veía nada más que a él mismo, ¿Cómo iba a preocuparse por los que éramos su familia? Ni siquiera preguntó ni una sola vez en estos cinco años por su hijo.

 

Asahi a veces preguntaba por él y yo le decía que trabaja muy lejos de aquí y por eso no podía venir a vernos, pero que le echaba de menos, de eso estaba seguro aunque creo… que me había convertido en un grandísimo mentiroso. ¿Cómo iba a decirle a mi hijo de cinco años que su padre nos había abandonado? ¿Qué no le quiso? No podía hacer eso, me rompería el corazón a mí y se lo rompería a él. Quizá cuando fuera más mayor no tendría más remedio que contar la verdad y esperaba que lo entendiera aunque se enfadase conmigo por esta mentira.

 

Acosté a mi hijo en el sofá bien tapado y me fui a mi saco de dormir. No pude evitar una vez tapado y mirando las pocas estrellas que se veían por la ventana pensar en todo lo que había ocurrido con Sasuke en el pasado.

 

 

 

Flashback

 

Tenía diecisiete años cuando conocí a Sasuke Uchiha. Su familia siempre había sido muy simpática y amable conmigo. Yo… un simple chico de la calle que vivía en un orfanato de aquí cerca y que lo único que deseaba era encontrar a su padre, quizá nunca lo lograse. Quería saber por qué me habían abandonado, por qué nunca me quisieron, quería conocer a esas personas que me dejaron en la puerta de ese orfanato, pero por más información que intentaba buscar, nada aparecía. Empezaba a resignarme con encontrarles.

 

Sasuke Uchiha apareció en mi vida como un rayo de luz en medio de la oscuridad. Yo creía que nunca me querría nadie, pero él con sus escasas sonrisas y pese a esa frialdad que parecía tener, acabó enamorándose de mí tras las veces que iba a su casa a cenar y es que su madre era una persona tan amable y cariñosa, me sentía como en una gran familia.

 

La noche del dos de octubre fue cuando se declaró. Yo ya me iba hacia el orfanato cuando Sasuke comentó de acompañarme por si acaso y acepté. Me gustaba su compañía así que era perfecto. Supongo que me había enamorado de ese chico frío, pero jamás me atreví a confesárselo, siempre estaba rodeado de chicas y aunque alguna vez fui a verle tocar a ese roñoso garaje en el que ensayaban, yo sabía que no se fijaría en mí, para él sólo era como un amigo si es que podía considerarme así, quizá sólo era la obra de beneficencia de su madre… pero aquella noche él quiso acompañarme y a mitad camino, me detuvo del brazo deteniéndose en seco.

 

Naruto – me llamó sonrojado y yo me detuve mirándole.

 

¿Sí? – le pregunté.

 

¿Has pensado alguna vez en tener una familia? – me preguntó y yo dudé de por qué venía todo eso.

 

Supongo que sí – le dije sonriendo sin entenderle – pero ya tengo diecisiete años… nadie me acogería y a los dieciocho tendré que irme del orfanato ¿A qué viene esto?

 

Yo… yo quiero ser tu familia Naruto.

 

Sasuke… estoy muy agradecido a tu familia por lo que hacéis por mí, enserio, ya os trato como si fuerais mi propia familia.

 

No me entiendes Naruto… no parte de la familia Uchiha, quiero que seas mi familia. Creo que me estoy enamorando de ti Naruto, me gustaría salir contigo, que estemos juntos.

 

Me quedé atónito ante aquello pero cuando sentí los labios de Sasuke sobre los míos… todo se me olvidó. Era el chico más dulce, sensual y fogoso que había conocido. Había salido con algunos chicos antes, pero ninguno como Sasuke Uchiha. Cuando él me besaba sentía que todo mi cuerpo quería más de él, sentía que era él ese hombre para el que yo había nacido, era sorprendente sentirse tan feliz y sonreí en sus labios abriendo los ojos cuando empezó a separarse.

 

Lo siento – me dijo – quizá no querías y yo…

 

Vuelve a hacerlo – le dije – vuelve a besarme, Sasuke

 

Sasuke atónito por mis palabras volvió a besarme y aquella noche creo que nos quedamos una hora fuera besándonos. Llegaría tarde a su casa y seguramente sus padres estarían preocupados por él, pero nosotros descubrimos nuestros sentimientos, decidimos empezar a salir… aunque al día siguiente cuando fui a aquel garaje a verlos tocar y Sasuke confesó que estaba conmigo, vi la mirada de su representante, Sakura. Parecía como si quisiera matarme con la mirada aunque enseguida la cambió y me felicitó con una gran sonrisa.

 

Al día siguiente cuando sus padres se marcharon a la inauguración de una exposición de arte en la que Mikoto participaba y cuando Itachi se marchó a jugar con sus amigos a la ciudad fue el día que decidí entregarme por completo a él. Fui a su casa y nada más abrirme la puerta, se lanzó sobre mí besándome y entre risas… subimos a su habitación mientras me tiraba en la cama aún riendo.

 

Con Sasuke todo me parecía estupendo, no tenía miedo de nada siempre que él estuviera a mi lado. Sé que en el orfanato me habían hablado varias veces de los riesgos de tener sexo por mi condición, pero yo nunca terminé de creérmelo del todo eso de que pudiera quedarme embarazado, para mí no tenía sentido que un hombre se pudiera quedar embarazado así que simplemente… creía que me tomaban el pelo.

 

Sasuke me quitó la camiseta con rapidez riéndose mientras acariciaba todo mi pecho y entretenía su boca en mis pezones jugando con ellos. Cogí su cabello con fuerza sin dejar que se moviera de mi pecho, gimiendo a cada lametazo y cada succión que hacía en mis pezones.

 

Con fuerza separé la cabeza de Sasuke de mi pecho y le besé con pasión dejando que recorriera cada rincón de mi boca con su lengua, disfrutando de sus juegos hasta que bajó la mano a mi pantalón para quitarlo.

 

¿Tienes miedo Naru? – me preguntó.

 

Un poco – le dije sonrojado.

 

¿Por lo que te dijeron en el orfanato?

 

¿Crees que es posible que pudiera quedarme embarazado?

 

No lo creo – me dijo Sasuke también dudando - ¿Piensas que es posible?

 

No lo sé.

 

Cogeré un preservativo por si acaso ¿Vale?

 

Vale – le dije aún con mis labios rozando los suyos.

 

Sasuke volvió a besarme dándome un leve mordisco en el labio inferior que hizo que me excitase el doble. Sasuke siempre era tan malditamente seductor que me volvía loco con tan sólo mirarle. ¿Qué tenía este chico para que me excitase tanto? No estaba seguro, pero sé que le amaba… me estaba enamorando de él aunque no me había atrevido aún a confesárselo.

 

Mientras Sasuke se quitaba la camiseta me quedé mirando su torso perfecto y sonreí viendo en el rostro de mi chico también la sonrisa, como si supiera lo que pensaba. Aproveché ya que estaba de rodillas encima de mí lanzando la camiseta al suelo en bajar la bragueta de su pantalón y meter mis manos en busca de su miembro. Estaba casi excitado y empecé a mover su miembro en mis manos dándole placer, escuchándole gemir como nunca lo había escuchado.

 

Al final viendo el placer que le daba, me coloqué mejor saliendo del agarre de Sasuke y poniéndome de rodillas encima del colchón me agaché hasta poder tener su miembro cerca de mi rostro. Sasuke se sonrojó enseguida pero yo metí su miembro en mi boca jugando con mi lengua haciendo que Sasuke jadease con mayor frecuencia y cogiera ahora él mi cabello marcándome el ritmo que le gustaba.

 

Sé que su mano buscaba algo en la mesilla, creo que los preservativos y es que ambos estábamos muy excitados, yo sólo pensaba ya en tenerle dentro de mí hasta que escuché la queja de Sasuke.

 

Mierda, creo que no los tengo aquí – me dijo – iré a la habitación de mi hermano a buscarlos.

 

Da igual Sasuke – le dije cogiéndole del brazo – tardarás en buscarlos si no sabes donde están y yo te necesito ya, por favor… ya te he excitado, se te bajará si tardas mucho.

 

¿Estás seguro? ¿Y si ocurre algo no deseado?

 

Seguro que era una mentira del orfanato para que no tuviéramos sexo – le sonreí y él sonrió.

 

Está bien – me dijo quitándome el pantalón de golpe mientras con una mano cogía mi miembro y con la otra posicionaba el suyo para entrar en mí.

 

Me agarré a su cuello con fuerza quejándome cuando sentí su primer empujón y aunque iba despacio y con cuidado, dolía, no podía decir otra cosa, sentía el dolor y cuanto más entraba en mí más lo notaba. Sasuke me besó tratando de calmarme un poco mientras seguía abriéndose camino buscando el fondo.

 

Aguanta un poco más Naru, ya casi estoy – me dijo intentando tranquilizarme.

 

Hazlo Sasuke – le dije.

 

¿Qué? – me preguntó dudando.

 

Muévete en mí por favor… me acostumbraré enseguida.

 

Vale.

 

Sasuke se movió dentro de mí y cada vez que entraba y salía aunque iba despacio, sentía mi interior abrirse y cerrarse, ir dilatándose y acoplándose a la longitud y grosor de su miembro. Mentiría si dijera que no seguía doliéndome, pero al menos empezaba a sentir placer cuando llegaba al fondo y al cabo de los pocos segundos de esa intensa mezcla de dolor- placer, empezó a desaparecer por completo todo el daño, ya sólo quedaba el disfrute y empecé a jadear y gemir junto a Sasuke, que viéndome a mí comenzó a aumentar la velocidad gimiendo el doble que antes.

 

Sasuke agarró mis hombros empujándome más hacia abajo y hundiéndose todavía más en mí. Sus ojos oscuros no paraban de mirarme comprobando que estaba bien pero lo estaba… estaba genial siempre que fuera él. Su mano libre seguía moviéndose en mi miembro y con un gran gemido, me corrí en ella llenándonos a ambos el abdomen con mi semen mientras Sasuke al verlo, se corría en mi interior.

 

Los dos caímos en la cama suspirando y sonriéndonos por lo que habíamos hecho, yo estaba completamente seguro de que Sasuke era el hombre perfecto para mí, le había buscado toda mi vida y al fin lo había encontrado. Acaricié su cabello y su rostro con delicadeza antes de besarle con suavidad.

 

Una semana después de aquello… Sasuke dijo que se marchaba de gira, había firmado un contrato y aunque yo lloré como nunca en mi vida, nos prometimos que nos esperaríamos, yo quería seguir con él y haría lo que fuera por tenerle. Cuando el coche ya se iba calle abajo… me di cuenta de que el móvil no estaba en mi bolsillo y lo busqué por todos los lados, pero no lo encontré. Al final tuve que comprarme uno nuevo trabajando los fines de semana repartiendo pedidos para una empresa y así conseguir el dinero para obtener uno nuevo, el más barato que encontré, pero sólo lo quería para hablar con Sasuke.

 

Me costó un mes conseguir el teléfono… justo lo que me costó enterarme de que estaba embarazado, pero Sasuke ya se había marchado. Por suerte para mí siempre apuntaba los teléfonos en una agenda así que guardé su número en el nuevo teléfono. Una de las profesoras del orfanato me acompañó al médico cuando me dieron la noticia y la bronca que me cayó fue enorme, decían que no había tenido cuidado y era cierto, pero no esperaba que un hombre pudiera quedarse embarazado. Sólo tenía diecisiete años.

 

Le mandé un mensaje a Sasuke comentándole que había perdido el móvil, le dije que este era mi nuevo número de teléfono y ya de paso… le informé de mi embarazo. Esperé días… semanas… pero nadie me contestó. Supe que Sasuke se había olvidado de mí, que no le importaba nada, ahora estaría muy ocupado con sus conciertos, siendo famoso. Cuando cumplí los dieciocho años y ya estaba próximo el parto, es cuando me informé de todo lo que ocurría en mi cuerpo.

 

Uno de los médicos me explicó que había nacido con un útero en mi interior aunque no creían que podría quedarme de verdad embarazado. Era un operación tan simple… sólo tenían que quitar esa parte que se había formado mal cuando estuve en el vientre de mi madre, pero yo no tenía dinero para esa operación y ahora embarazado… no quería quitarme el útero. El niño nació con cesárea, no había forma de que pudiera nacer si no, era un hombre teniendo un maldito niño… jamás me lo habría creído y nadie lo haría, todos me tomarían por loco, pero ahora en mi vientre… tenía la cicatriz de esa cesárea y en mis manos… a Asahi. Fui el hombre más feliz de todos cuando me lo dieron tras el espantoso parto y lloré, lloré de felicidad, era idéntico a su padre.

 

De la operación para quitarme el útero… decidimos posponerla porque no tenía dinero para pagarla, así que aquí seguía… con el útero en mi interior y evitando tener sexo sin protección por si acaso.

 

Fin del Flashback

 

 

 

Al final con el pensamiento de Sasuke me di la vuelta y traté de dormir. Acaricié mi vientre y mis dedos recorrieron la cicatriz. ¿Cómo iba a ahorrar para quitarme esta cosa? No quería tenerla en mi interior, me consideraba a mí mismo un bicho raro y todo porque mis padres no me habían formado bien cuando estaba en el vientre. Yo era un chico… pero aunque me comportaba como tal, sentía como tal y tenía todos los elementos para ser un chico… ese maldito útero en mi interior que no se veía y que nadie sabía que tenía, me hacía sentir como un bicho raro. ¿Por qué mi útero funcionaba? Los médicos habían dicho que algunos hombres nacían con un útero, sólo era quitarlo y aunque estuviera allí… no debería haber funcionado ¿Por qué había funcionado entonces el mío? Maldije a Sasuke por haberme dejado embarazado aunque ahora Asahi era la luz de mi vida.

 

 


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).