Françoise: lo siento Alfred, no creo que esto vaya a salir bien si no encontramos a ese vampiro
Por primera vez me sentía bajo presión, pero aun así no permitiría que Arthur sufriera, debíamos arriesgarnos o si no el resultado sería devastador.
Alfred: Emilio ¿podrías conseguirme una pluma y papel? – mi comentario sorprendió a Françoise así como hizo que Arthur reaccionara
Emilio: en un rato vuelvo –observe como mi amigo se retiraba dejándonos solo a los mayores en la estancia.
Arthur: ¿qué tratas de hacer Alfred? –casi no se notaba pero conociendo a mi pequeño oji verde deduje que estaba más preocupado
Alfred: tranquilo tengo una idea, pero necesito que confíes en mi ¿sí? –le sonreí de forma calmada mientras lo abrazaba con más fuerza.
Cuando Emilio regreso y me dio lo que le pedí mas la tinta me dirigí a la mesa y empecé a escribir una carta, solo que le tuve que pedir de favor a Emilio que le colocara una de las viejas armaduras de la casa a Arthur, eso era más por prevención a lo que pasaría, de esa forma me quede solo con Françoise quien me ayudaría con mi plan, así que se lo explique de forma breve y directo al punto.
Françoise: espero que tu plan funcione porque si no, Arthur te podría perder para siempre –me dijo serio pues mi idea era más que riesgosa
Alfred: a veces hay que tomar medidas drásticas para situaciones así… además… Alexander dice que es mejor hablar con palabras que reaccionar de forma agresiva –esa fue mi respuesta
Françoise: entiendo tus motivos pero entiende… los Helsing no se andan con juegos y mucho menos algo de tipo grave como con ese vampiro… si las cosas salen mal morirás, si no mal recuerdo eso es lo que menos quieres ¿o no es así?
Deje salir un largo suspiro ya que eso era algo que no podía negar –lo se Françoise… pero… Arthur es mi pareja ahora y are lo que sea necesario para protegerlo, sé que será un golpe muy duro pero… aun así no moriré tan fácil – en mi voz se podía escuchar mi determinación
Françoise: estas arriesgándote mucho Alfred… espero que sepas lo que haces – me dijo de forma seria, entendía a la perfección las cosas y por eso me estaba arriesgando a algo que se podría considerar suicida
Alfred: comprendo muy bien los riesgos Françoise, pero es lo único que nos queda – al terminar la carta la enrolle y coloque dos listones, uno negro y otro rojo, simbolismo de que fue escrito por un vampiro, así que se lo entregue a Françoise de forma seria – será mejor se le sea entregado personal mente por ti
Françoise agarro la carta y me miro de forma seria – no puedo asegurar tu seguridad… pero ¿que pasara con Arthur? – con cuidado guardo la carta, sabía que Françoise podía dar con el paradero del cazador
Alfred: el estará seguro… en caso de que no funcione mi plan el ya estará lejos de esta aldea… lo quiera o no
Con eso ultimo Françoise se retiró y yo solo pude suspirar angustiado, no sabía cómo reaccionaría Arthur a mi desciño pero era lo único que tenía en mente... en caso de que todo saliera bien estaba 100% seguro que Arthur me dejaría muerto por tanto golpe que recibiría.
Pov. Normal:
Con esa decisión Françoise partió rumbo al poblado donde fue visto por última vez al mencionado cazador, por cuestiones de seguridad llevaba consigo algunos artefactos en caso de que el vampiro estuviera por los alrededores.
Por suerte nunca se topó con aquel ser, sino todo lo contrario, después de una semana había logrado dar con el pequeño campamento del cazador, así que se acercó de forma segura pero a la vez cauteloso, sabía muy bien que el cazador no estaría acampando tan despreocupada mente sin protección alguna. No estaba equivocado ya que sin precio aviso activo una de las trampas la cual había lanzado una flecha de madera la cual apenas y esquivo.
….. : ¿Quién anda ahí? –se escuchó una voz bastante gruesa y seria
Françoise: buenas tardes… disculpe las molestias pero vengo a entregarle una carta –menciono el francés algo cauteloso por si activaba otra trampa
….. : Ya casi anochece y tú vienes viajando por el bosque, ¿solo para darme una carta? –de entre los árboles se logró divisar a un sujeto ligeramente más alto que Françoise usando ropaje totalmente obscuro, siendo unos pantalones negros, botas de piel, camisa muy apegada al cuerpo, guantes de cuero una elegante abrigo de cuero más un gorro perfectamente diseñado, todo totalmente de negro, y como accesorio usaba una pequeña cadena adornada por una cruz de plata pura, un cinturón con diferentes compartimientos y unas cuantas cadenas quizás consagradas para atrapar a seres bastante fuertes, un pequeño pañuelo negro cubriendo la mitad de su rostro y un anillo perteneciente a la familia siendo este antiguamente perteneciente a un vampiro de sangre pura (creo que ya se dan una idea de que vampiro me refiero xP).
Françoise: así es… permítame presentarme… mi nombre es Françoise Bonnefoy y vengo a entregarle esta carta ya que hay dos seres que podrían ser confundidos por el vampiro que usted mismo está cazando
…. : y porque debería de preocuparme por esos dos seres –su tono había sido bastante arrogante, aunque eso no era de esperarse
Françoise: si lee la carta lo entenderá… por favor –se acercó con cuidado de las trampas extendiendo aquel trozo de papel hacia el cazador
Aquel sujeto se aproximó retirándose el pañuelo dejando a la vista su rostro y así poder tomar la carta notando al instante el tipo de remitente quien se la enviaba
…. : ya veo… tú eras un cazador ¿no es así? –con cuidado retiro ambos listones
Françoise: así es… como notaras los listones no fueron elegidos al azar… pero te daré mejores explicaciones cuando leas la carta
…. : hmm… entiendo –miro aquella carta y la fue desenrollando para así empezara leer el contenido
“buenos días, tardes o noches seños Helsing.
Como sabrá usted, últimamente han habido ataques en los poblados por un vampiro, antes de que ocurra un grave error, déjeme informarle que mi familia podría ser culpada por un crimen que no cometió, así que he decidido pedirle de favor que venga a vernos, yo mismo estaré dispuesto a llegar no solo a un acuerdo con usted, sino que también estoy dispuesto a ayudarle en su búsqueda, si bien le informo que también soy vampiro pero a diferencia de muchos no tolero la sangre, pero mi pareja no es igual, por ello mi único familiar ha creado un acuerdo y lo ha cumplido a la perfección. Le pido de favor vernos en una zona de prado que está pasando dos pueblos de donde usted se encuentra, si usted gusta puede ir armado, pero le doy mi promesa que no le atacare, una vez nos veamos le explicare la situación con más detalle del paradero del vampiro que usted busca
Atentamente: Alfred F. Jones”
…. : ya veo… entonces sr. Bonnefoy podría darme más detalles de estos… ¿vampiros “inocentes”?
Françoise afirmó con la cabeza y se acercó para darle toda la información que sabe del par de vampiros, evidenciando tanto el tratado como las observaciones que ha visto en Alfred, así como la historia de ambos vampiros, al inicio parecía extraño que dos vampiros varones conformara una pareja pues eso ponía en riesgo la existencia de su especie y más siendo que uno de ellos era de sangre pura, por lo que la situación con ese par de extraños vampiros le llamo más la atención al cazador, siendo que al recibir cada respuesta surgían dos nuevas preguntas, por lo que acepto ir al encuentro, solo para poder exterminarlos siendo ambos vampiros una ridiculez para las criaturas alas que se ha enfrentado.
Con la información aportada por el ex-cazador y su ideal familiar de que ningún ser era pacífico y que todos debían morir el cazador partió en dirección al claro donde vería al vampiro que le solicito, teniendo en mente que su acompañante temporal podría ser o un sirviente o una marioneta más para esos vampiros, aunque dudaba un poco al ver que este llevaba protección.
Sin embargo su ideal de que podría ser una trampa no desvanecía, conforme se acercaban más al sitio su mete daba todos los puntos en contra de aquella pareja, sin embargo había dos ideas que no encajaban y es que ¿Qué vampiro se arriesgaría a exponerse a él, uno de los más grandes y temibles cazadores? ¿Porque arriesgar no solo su vida, sino que también un posible futuro para su raza?
Esas dos preguntas eran las únicas que no encajaban y que además no podía entender, si llegase a conocer a esos vampiros, si estos le ayudaban no debía bajar nunca la guardia y para cuando consiguiera deshacerse del vampiro asesino, mataría de una vez a el otro par, no solo porque ese era su trabajo, sino porque ellos deberían de estar muertos y así eran como debían de ser las cosas.
Después de todo, por eso existía un ciclo que el todo poderoso había creado en la tierra y seres como ellos eran solo parte de la rebeldía que se negaba a seguir los mandatos del ser divino.