Pov. Normal:
Asi pasaron el resto de los días, tanto Alfred como Arthur aun iban a la casa de Françoise durante las noches, así pasaban las cosas… los días se volvieron semanas y las semanas en meses, los meses pronto se convirtieron en años, Alfred no paro de crecer hasta que por fin tuvo los 18 años, ahora era mucho más alto que Arthur (Arthur le llega hasta el hombro xD ), Françoise todavía buscaba a su amor, pero mientras esto pasaba el pueblo cercano también creía.
Un par de años más lo que era la mansión de Arthur pronto quedo a la vista de todo el pueblo, esto llevaba a una gran exposición de nuestros amigos vampiro, la ventaja era que nadie los vería en el día, siempre y cuando tanto Alfred como Arthur se mantuvieran ocultos, y por precaución Arthur tuvo que modificar el horario de salida de ambos, cosa que… no le agrado tanto al Alfred, peor lo acepto, ya había muerto una vez y si volvía a pasar lo mismo él no podría volver nunca, la única opción que quedaba era que obedeciera a Arthur así que se fue conformando con eso.
Pov. Arthur:
Últimamente Alfred anda un poco raro, le pregunto que tiene y siempre es la misma respuesta “no tengo nada” es lo que él dice, así que intento no preguntar y para colmo el pueblo cercano ha empezado a crecer más como colonia de bichos, pero ahora estaremos a salvo, siempre y cuando salgamos por la puerta de atrás y mantengamos la puerta principal cerrada con llave… el problema son los niños, les gusta venir y contar historias de terror, solo espero que no entren a la mansión quien sabe lo que podría pasar… por eso le pedí a Alfred que pasáramos las camas al sótano para evitar que nos vean si es que llegan a entrar… lo bueno de mi mansión es que lleva muchos pasajes secretos, los cuales Alfred y yo sabemos dónde están y que nos podrían ayudar a escapar en caso de emergencia.
Alfred: Arthur~ se oyen ruidos afuera –dijo en voz baja para que no se haga tanto eco
Arthur: lo se… ya está anocheciendo, pero aun así ellos no se van
Alfred: tengo hambre~
Arthur: lo se… solo esperemos un poco mas
Alfred: ¿?… -me miro unos minutos y después me pregunto-¿tienes hambre?
Arthur: un poco – vi como Alfred hacia unas cuentas… eso era raro viniendo de Alfred-… ¿Alfred?
Alfred: tres semanas
Arthur: ¿qué?
Alfred: hace tres semanas que comiste ¿cierto?
Suspire… tenía que admitirlo, me moría de hambre –si…- Alfred se me fue acercando mientras descubría su cuello- ¿seguro? – le dije
Alfred: prefiero esto a que mates a alguien
Arthur: …
Por fin comí… pero de nuevo volvió a pasar lo de siempre, cada vez que muerdo a Alfred su sangre sale más rápido y me lleno más rápido, no creo que eso sea normal y me preocupa, antes no pasaba eso… bueno por lo menos no hasta hace tres años… pero no me quejo tanto… ¿será que es una nueva habilidad de el?
Arthur: listo…
Alfred se acomodó su ropa – ok
Arthur: … parece que ya se fueron
Alfred: creo que si… ¿debemos salir ahora?
Arthur: esperemos un poco… si ya no se oyen ruidos salimos
Esperamos y todo estaba en silencio así que decidimos salir… Alfred me tuvo que sostener porque…¡POR DIOS HABIA PASADO UN TIFON EN MI MANSION!, esos niños tiraron muchas cosas y no solo eso… se llevaron uno de mis jarrones favoritos y carísimo… ¡esto era el colmo!
Alfred: tranquilo Arthur no agás cosas de las que te arrepentirás después – me decía Alfred intentando calmarme… pero no salió como el quería
Arthur: ¡NO ME DIGAS QUE HACER! Iré por mi jarrón… es demasiado valioso como para que unos mocosos se lo llevaran –gritaba a todo pulmón
Alfred me agarro de los hombros e hizo que le mirara a los ojos y me dijo – iré por tu jarrón… no olvides la promesa, prefiero ir yo a que rompas esa promesa – me soltó y camino hacia la salida… por dios por primera vez tenía razón… apenas comí algo pero sigo alimentándome de sangre… ir allá es como una tentación enorme para mi así que me dedique a esperar.
Una hora después Alfred llego con mi jarrón y por como lo vi me di cuenta que lo hayan descubierto… pero preferí no sacar conclusiones al azar – ¿qué paso... te descubrieron?
Alfred: si y no a la vez… me descubrieron tomando el jarrón pero nunca encendieron la luz a tiempo… para cuando salieron a buscarme yo ya me había ocultado entre los callejones para que no me vieran
Arthur: ¡TONTO! ahora pensaran que fue un ladrón y el único lugar donde pensaran que se escondió seria aquí
Alfred negó y me dijo – no lo creo… nunca vieron para donde me fui… además lo único que pueden decirle a los guardias es mi estatura… nunca lograron ver mi cara… pero yo si vi la de ellos
Arthur: porque no me sorprende… bien al parecer en el día tendremos que estar despiertos por si llegan a entrar los guardias a revisar la mansión
Alfred: y con los pasadizos no nos encontraran tan fácil
Debía de admitirlo… los pasadizos estaban ingeniosamente escondidos… así que si nos llegan a ver será por mera suerte… las probabilidades de que alguien nos encontrara al azar eran escasas… pero mejor quise prevenir eso. Después Alfred y yo arreglamos todo el desorden, y nos preparamos para una muy buena velada (bueno para ellos es como una velada xD) así que una vez terminado de recoger decidimos ahorrar energía para poder estar despiertos en el día… cosa que podía ser posible… el único problema… el sol.
Pov. Alfred:
Nunca había visto a Arthur tan furioso… pero no lo juzgo… la mansión se volvió todo un desastre… lo limpiamos rápido ya que no era nada en comparación a los desastres que hacia yo de pequeño, lo peor de todo fue que no dormí NADA, entiendo que Arthur quiera que no nos descubran pero a veces se preocupa demasiado, estuvimos despiertos todo el día y nunca entro alguna persona… y estoy extremadamente exausto… y Arthur también lo está, tanto que decidimos ir a cenar en casa de Françoise y de por suerte creo que el noto lo cansados que estábamos.
Françoise: santo cielo… tendrán que mudarse para no estar expuestos a tantos peligro –dijo como comentario a lo que Arthur y yo le platicamos mientras dormíamos
Arthur: es una suerte que tuvimos… más que nada porque no nos encontraron
Alfred: pero por desgracia tenemos un sueño de horror
Françoise asintió – si se les nota en la mirada que en la cara… además Alfred siempre es energético
Arthur asintió – de veras… has estado muy tranquilo Alfred – dijo mientras me miraba a lo cual yo me puse muy nervioso
Alfred: ¿será porque estoy cansado? –le dije dando a notar que en verdad estaba cansado
Arthur suspiro – cierto… obvio no tienes energía al no dejar que tu cuerpo descanse
Françoise: por cierto Arthur… tú y Alfred son vampiros, no es necesario que duerman ¿oh si? –pregunto Françoise algo… curioso
Arthur: como Alfred no come nada de sangre mantiene un uso limitado de energía… claro eso no tiene nada que ver con su fuerza… es como… cuando tú no duerme una noche entera… yo si lo soporto aun… pero Alfred no tanto
Françoise: ya veo… por cierto… ya te decidiste si vas a dejar que se entere ¿oh no?
Arthur: ya habíamos discutido eso… ¿verdad Alfred?
De ahí en mas no puse atención por andarme quedando dormido… lo único que quería era dormir… pero no, Arthur me zangoloteó regañándome y diciendo “¡no te duermas cuando comes!” o almenos eso entendí… hasta que recibí un golpe de parte de Arthur
Alfred: ¡auch!... ¿Por qué me golpean?
Arthur: ¡para que te despiertes!
Françoise suspiro- Arthur, Alfred mejor vayan a descansar ¿si?
Alfred: ok…
Arthur: está bien… -se levantó y mientras Arthur se iba yo fingí seguirlo… pero nunca salí de la casa de Françoise… no dije nada hasta que Arthur se hubiera ido por completo.
Alfred: Françoise ¿puedo preguntarte algo?
Françoise: por supuesto… pregúntame lo que quieras –dijo mientras recogía los paltos
Alfred: me eh sentido raro desde hace tres años… se supone que estoy muerto pero… a veces siento mi corazón latir… ¿eso es normal?
Françoise: no… dime más –dijo preocupado mientras se iba sentando
Alfred: bueno… es eso y… también siento como si sudara… claro como estoy muerto se puede decir que es como sudor frio y a veces se me seca la garganta… también me pongo nervioso
Françoise asintió – dime ¿por lo general pasa eso todo el tiempo?
Negué con la cabeza… le iba a decir que era con Arthur pero no le dije eso – sucede cuando… digamos que es una persona especial para mi… dime… ¿voy a morir?
Françoise: ¿solo con esa persona?
Asentí nuevamente con la cabeza… la persona que más conocía de “monstruos” era nada más y nada menos que Françoise, voltee a verle y lo vi sonriéndome – estás enamorado- me dijo
Alfred: ¿enamorado?... ¿Eso es posible?
Françoise asintió –no te vas a morir… si solo es con esa persona entonces ya te has enamorado de ella… incluso los seres como tu pueden enamorarse… no es gran cosa- me dijo
Alfred: ¿enserio?... no lo sabía, bueno gracias por decírmelo… me has quitado un peso de encima –dije completamente aliviado
Françoise: ¿se puede saber de quién te enamoraste?
Esa pregunta izo que me erizara y me sonrojara leve… pero no se lo podía decir… porque con lo que me dijo, concluí que era Arthur de quien me enamore… el problema es que era como un hermano y eso aria que nuestra relación se viniera abajo por completo así que decidí no contestar exactamente lo que Françoise esperaba – te lo diré después… quiero cerciorarme de todo esto
Françoise: está bien te entiendo… solo una cosa Alfred… si quieres que esa relación valla más allá… tendrás que convencer a Arthur de que te deje saber sobre el tema de “hacer el amor”
Alfred: ¿¿hacer el amor?? –dije confundido
Françoise: es todo lo que te puedo decir… si no Arthur se enojara –dijo sonriendo de una manera… traviesa… el sabia a lo que se refería y seguramente Arthur también
Alfred: está bien –dije un poco confundido por la cara de Françoise- que tengas buenas noches- y de ahí me retire a la mansión… “hacer el amor”… de que rayos me estaba hablando, Arthur jamás me diría algo sobre ese tema… así que tendré que investigarlo por mi mismo
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