—Elle ¿Por qué no activas tu cámara?—Mire la pantalla de mi portátil que se encontraba a una distancia moderada de la estufa, ya que estaba preparando la comida y desayuno—No es justo que solo tú puedas observarme
—Es que… estoy colocándome el uniforme—tome el cucharon volteador para mover el omelette y evitar que se pegara.
—Insisto en que me gustaría verte…— Pude escuchar el sonido característico de alguien cayendo al suelo, tal vez en esos momentos estaba poniéndose el pantalón— ¿Has tropezado o algo similar? —No pude evitar sonreír levemente ante el silencio
—Light… veo que tienes mucha experiencia en la cocina.
—Solo un poco, no salgo de fideos, huevo, arroz y otras cosas sencillas—Levante con un pequeño pañuelo de tela la tapa de la olla en la que se cocinaba la sopa, ya era tiempo de apagar el fuego.
—He escuchado que hacer arroz es difícil, se te puede hacer puré…
—Eso dicen— voltee a mirar la portátil, La cámara de Elle ya estaba encendida, por lo que podía ver estaba sentado en la cama, tenía el saco abierto, la corbata aún no estaba arreglada y su cabello seguía húmedo por la ducha, se veía un poco cansado, tal vez no había dormido.
— ¿Qué día es hoy? —Preguntó mecánicamente
—Jueves—
—Hoy regresa…—Elle susurro levemente y colocó su dedo pulgar en su boca, para ser sincero, ese gesto siempre me ha parecido tierno e incluso provocativo.
— ¿Quién?
—Mi mamá…— Elle torció levemente la boca.
— ¿No te agrada la idea de verla?
—No es eso… es que hay cosas que tengo que arreglar—sonrió levemente
— ¿Qué cosas? Bueno… — guarde silencio por unos segundos, no quería ser un entrometido, así que cambie la pregunta— ¿Puedo saber de qué se trata? —Elle parecía dudar en decirme o no.
—Si fuera algo mío te lo diría, pero es un asunto de mi hermano…
—Entiendo… pero Elle, no te presiones… En esta semana has estado bajo stress y te está afectando…—Elle me miro un poco sorprendido, tal vez creía que me estaba ocultando muy bien sus sentimientos, pero la verdad era otra. Él estaba tan acostumbrado a no hablar de ellos que ni siquiera se daba cuenta que eso le hacía mucho daño.
Sonreí levemente ya que Elle era muy parecido a mí en ese aspecto.
—Light… creo que se está quemando el omelette…—Voltee a mirar desconcertado el pequeño sartén, había un poco de humo alrededor del huevo, comencé a percibir el olor característico de comida quemada, quite con rapidez el sartén y lo coloque en el fregadero. —Lo siento, ha sido culpa mía—Dijo notablemente culpable
—No, claro que no… —Con ayuda del cucharon logre despegar los pequeños trozos que no habían sido dañados—Aun esta rescatable— Volví a ver a Elle, su mirada estaba completamente perdida. — ¿Estas bien?
— ¿eh? Si… solo pensaba. — Escuche la puerta principal abrirse, seguido de los pasos de mi primo, llegaba de su trabajo.
—Bueno Elle, creo que debo dejarte, mi primo acaba de llegar del trabajo y ha de estar muerto de hambre, seguro que podría comerse la cazuela entera—Reí levemente ante mi comentario, Elle asintió con suavidad—Nos vemos en la parada de autobuses.
—Si— Entonces cerré sesión del sitio. Me quede mirando la pantalla fijamente, realmente detestaba ver esa expresión de tristeza en Elle… pero aún más odiaba el no poder hacer algo para verlo sonreír.
— ¿Con que me voy a devorar la cazuela? — La voz de mi primo Mikami llamó mi atención, gire mi cuerpo para quedar frente a él.
— Es solo un chiste… La comida ya está lista ¿Quieres que te sirva? — El negó con la cabeza.
—No... Primero quiero darme una ducha y dormir, este caso me ha desgatado bastante. — Mikami me miro con un poco de seriedad, parecía dudar en decirme lo que pensaba, aunque a juzgar por su mirada, ya sabía de qué se trataba. — ¿Cómo van las cosas con mis tíos?
—Este fin de semana iré a verlos, será el cumpleaños de mi padre…
—Entiendo… Bueno, no te interrumpo más. —Asentí y nuevamente le di la espalda. La situación con mis padres, no parecía mejorar, al contrario, las cosas empeoraban… aunque podía decir que era solo por parte de mi padre, él es un hombre testarudo en cuanto a esos temas y no lo podía culpar, ya que él había sido criado con la idea de que la homosexualidad no era natural, normal o cosas de ese tipo.
Realmente me preocupaba y entristecía el hecho de que no quisiera cambiar de opinión ya que eso significaría que sin importar que mi madre me aceptara, ella tenía que apoyarlo…
Suspire pesadamente y sacudí mi cabeza para “retirar los sentimientos negativos”, era un poco gracioso que en la actualidad siguiera haciendo eso, pues desde que tenía unos seis años lo hacía ya que mi madre me decía que cada vez que algo malo sucedía, sacudiera la cabeza para que los malos sentimientos salieran volando de mí. Aunque debo destacar que en muchas ocasiones me ha servido esa forma de “ser positivo” ante los conflictos.
Fui a la sala para tomar mi teléfono celular, había dejado cargando la batería, encendí el aparato y cuando estuvo prendido escribí un texto a mi hermana deseándole un buen día.
Después de desayunar y lavar unos pocos trastes, me prepare para ir a la escuela y llegar a la estación de autobuses a tiempo.
Cuando finalmente llegue al punto de reunión, Elle ya se encontraba ahí, sentado en la banca para esperar la llegada del autobús. Siempre me he sorprendido por la extremada puntualidad que tiene, si lo citan a las doce de la tarde él llega media hora antes.
— ¿Te hice esperar? — Dije al estar frente a él
—No, llegas puntual. —levantó un poco el rostro y sonrió.
—Me alegra… — mire de reojo al autobús que estaba por llegar.
—Ese es nuestro autobús— dijo Elle a la vez que se ponía en pie. Me quede mirándolo fijamente por unos instantes, Elle pareció confundirse por la forma en que lo veía.
—No me has saludado…
—Ah… lo siento… — Un leve sonrojo adornó sus mejillas, pero no se movió ni un centímetro por lo que tome del mentón y lo acerque rápidamente para darle un pequeño beso en los labios. Sus mejillas se colorearon aún más de lo que ya estaban.
Subimos al autobús, afortunadamente para mí, pudimos tomar asiento, pues tenía que acabar la tarea que no había podido hacer la noche anterior.
— ¿quieres que te pase la tarea? — Dijo Elle suavemente y lo mire algo sorprendido.
—No… gracias—sonreí dulcemente
— ¿Seguro? —Asentí— Es que… no creo te dé tiempo de terminarla ya que es la primera clase que tenemos.
—Elle, no me subestimes, créeme que voy a terminar incluso un poco antes de llegar a la escuela— Sonreí con confianza y orgullo.
—Entonces apresúrate—Elle correspondió a mi sonrisa.
Debo decir que hacer tarea en el transporte público no es lo ideal, ya que por el mismo movimiento del autobús la letra no te sale de lo mejor, pero… eso era preferible a no cumplir con las obligaciones.
Tuve que guardar mi cuaderno y bolígrafo al aventón para bajar del autobús a tiempo, mientras caminábamos para entrar a la Universidad, Elle me miraba como esperando le digiera algo.
—Si termine la tarea, solo espero no se haya doblado la hoja— él sonrió un poco, quizá no esperaba que la terminara.
Subimos las escaleras del edificio para llegar al tercer piso, cuando finalmente estuvimos ahí, me detuve en el lado izquierdo para no estorbar al acomodar mis útiles, Elle detuvo su paso para esperarme.
Pronto las voces de ciertos compañeros llamaron mi atención. Voltee a mirar a donde Elle, era Alejandro y sus amigos quienes corrían en dirección a las escaleras, al parecer iban a bajar, al percatarse de nuestra presencia se acercó a Elle y lo empujo de forma brusca con el hombro, provocando que Elle estuviera al borde de caer por las escaleras, solté mis cuadernos y me puse en pie rápidamente, lo jale fuertemente del brazo pero de inmediato él dio un pequeño quejido.
— ¿Te lastime? —Mire con preocupación a Elle, el se soltó con delicadeza, acarició suavemente su brazo.
—No, es solo que… creí que en verdad caería— Elle sonrió un poco, quizá para calmarme.
Nos colocamos nuestras batas una vez que el profesor llegó para abrir el laboratorio, entramos después de que él lo hizo y comenzamos a acomodarnos en nuestros lugares correspondientes, para mi mala suerte, en esa clase, Elle y yo estábamos en diferentes equipos.
Como siempre, el profesor tardó treinta minutos en iniciar la clase, no sé porque, pero él siempre nos cuenta las cosas inusuales que le pasan en su vida, quizá trata de llevarse bien con sus alumnos o simplemente le da pereza trabajar.
Cuando finalmente comenzamos la práctica, me dispuse a coger la tarea que había terminado en el autobús, púes soy el encargado de ese equipo.
— Light, dime por favor que me pasaras tus referencias bibliográficas—dijo Mathew notablemente nervioso, nunca me había pedido algún favor, él era de los típicos compañeros que no necesitan de nadie.
—Claro…— sonreí levemente y le cedí mi tarea.
Mientras él copiaba lo que necesitaba dirigí mi vista a donde Elle se encontraba, al parecer lavaba el instrumental que ocuparían, solo observaba a los otros y de vez en cuando sonreía levemente. Por alguna razón, ese momento me hizo recordar cuando Elle y yo, apenas cruzábamos palabra.
Recuerdo perfectamente la primera vez que cruzamos miradas. Fue en un laboratorio de primer semestre. Estaba aburrido ya que mi equipo ya había terminado con la práctica, que no fue más que responder un cuestionario. Miraba el atardecer a través de la ventana que estaba cerca de mi mesa, suspire sin más y volví mi vista a enfrente. Algunos compañeros platicaban, entonces fije mi atención en un chico dos mesas frente a la mía.
Llamo mi atención porque era el único que parecía bastante concentrado en lo que hacía, hasta que uno de sus compañeros lo golpeó fuertemente en el hombro.
Aquel chico de cabello de cabellos desordenados y piel pálida rio levemente. Miro frente suyo, colocando su atención en mí. Sus profundos ojos se clavaron en los míos, haciendo que absolutamente todo desapareciera… era como si nos hubiéramos conectado a una frecuencia, que solo él y yo podíamos captar.
Desde ese entonces nuestras miradas se encontraban con más frecuencia, a veces Elle parecía avergonzarse, mientras que en otras, parecía querer saber que era lo que yo pensaba acerca de él. Cosa que era recíproco, pues preguntas como:
— “¿Qué impresión tenia de mí? ¿¿Por qué siempre que intentaba conversar con él, huía de forma graciosa? ¿Por qué sentía la necesidad de protegerlo? O ¿Por qué, esos profundos ojos me llamaban tanto la atención? “—
solían cruzar mi mente…
Elle, es el primer chico que me ha confundido demasiado. Para ser sincero no es el tipo de hombre que me atraen físicamente, pero… él, tiene algo que me atrapo desde el primer momento en que lo vi. Tal vez lo que me atrajo de él, fueron esos grandes y profundos ojos llenos de un misterio indescifrable, o quizá… fue su manera de pensar; Siempre en clase de filosofía, me maravillaba con sus opiniones que hasta cierto punto, eran iguales a las mías.
Aunque… ahora que lo pienso. Solo quería averiguar el misterio de su peculiar personalidad, pero inevitablemente me fui enamorando de él.
Fui a donde el profesor para entregar las tareas de mi equipo, ya habían unas cuantas en su escritorio, así que simplemente las deje junto a ellas sin llamar su atención. Cuando di media vuelta, escuche su voz llamándome.
—Light ¿Puedes hacerme un favor? —Asentí levemente. —Mira quiero que vayas al laboratorio de abajo y le pidas a la profesora Esther que por favor nos regale papel filtro porque ya se acabó en este laboratorio
—Claro— sonreí levemente y salí del laboratorio; me quede por unos instantes mirando las hojas de los arboles agitarse con el viento, suspiré levemente y comencé a caminar. Cuando estuve frente la puerta, toque un par de veces para que me abrieran.
Entre al salón. Me dirigí a donde la maestra.
—Hola ¿Usted es la profesora Esther?
—Si ¿en qué puedo ayudarte pequeño? —sonreí levemente al escuchar la última palabra, hace mucho que no me decían así, me sentí como un niño de 12 años
—el profesor Ramiro me dijo que si le regalaba papel filtro porque en el laboratorio cuatro ya no hay.
—Claro— Aquella profesora se levantó y dirigió al cuarto de servicio, yo le seguí, quedándome en la entrada. La profesora no tardo mucho para entregarme el papel. Le di las gracias y Salí del lugar.
Camine con cierta pereza por el pasillo para dirigirme a las escaleras. Me detuve un instante para mirar la planta baja.
Beyond y un par de amigos estaban caminando por ahí. Aclare un poco mi garganta y grite.
— ¡Ey! ¡Beyond, espera! — En cuanto volteo a verme volví a decirle que me esperara, corrí en dirección a mi salón y deje el encargo en la mesa del profesor. Salí de nueva cuenta para bajar con rapidez las escaleras y llegar hasta donde él. En cuando llegue, sus amigos me miraron con cierta curiosidad, mientras que él, mostraba una mirada fría. Parecía no tener intenciones de hablar, por lo que decidí hacerlo yo. — ¿Tienes tiempo?
— ¿Para qué?
—Necesitamos hablar. —él suspiró levemente e hizo una mueca para que sus amigos nos dejaran solos.
—¡Beyond! No sabía que también salías con chicos—dijo uno de sus amigos entre risas— Arturo, mejor hay que alejarnos de Beyond, podría echarnos el ojo.
—Créeme Amaro, si me gustaran los chicos, no saldría contigo. No me fijo en escorias…—note la molestia del otro, sin embargo no dijo nada. Simplemente se alejó. Sonreí un poco al encontrarme con la mirada de Beyond.
— ¿Y bien? ¿Qué es lo que quieres decirme? —
— ¿No crees que sería agradable intentar llevarnos bien?
— ¿Por qué? —
—Soy el novio de tu hermano…— Beyond miro con fastidio.
— ¿Por qué te gusta mi hermano? — él se acercó a mí de tal forma que la distancia entre nosotros era casi nula. Sus ojos se clavaron en los míos, al parecer intentaba intimidarme.
— Elle revivió mis sentimientos…— Noté un pequeño fruncido, era obvio que no entendería mi respuesta, Si no había sido especifico, me disgusta en sobremanera hablar de mi pasado pero en ese momento era necesario—He vivido cosas que con el tiempo apagaron mis sentimientos, pero cuando Elle llegó a mi vida, las cosas dieron un giro de 360 grados. —Reí levemente— de alguna manera me vi reflejado en él. Esos ojos vacíos, llenos de duda y angustia, pero sobretodo, de dolor… — cerré por un breve instante los ojos, sentí como Beyond guardo distancia—Son los mismos que alguna vez tuve—Sonreí por mi respuesta. — Al principio me acerque a él por curiosidad, pero con el paso del tiempo, los sentimientos que bloquee fueron floreciendo rápidamente y esa armadura cayó. —el rostro de Beyond expreso tristeza, como si se hubiera identificado con mis palabras. —Sé que me odias, pero créeme, no voy a hacerme a un lado solo por ti. Para serte sincero, quiero que mi relación con Elle dure mucho tiempo…
—Apenas si lo conoces…—escupió con agresividad, rápidamente endureció su expresión. Sonreí levemente cosa que le molesto bastante.
—Sé que desconozco muchas cosas de él, porque el mismo no me lo permite pero sabes, me voy a encargar de conocerlo… Quiero saber más del verdadero Elle. — Beyond retrocedió unos cuantos pasos, fijo su mirada en el suelo para después darme la espalda.
—Tus palabras parecen ser sinceras…—sonreí al escucharlo, ya que al parecer había entendido mis sentimientos y quizá las cosas entre nosotros serían mejor. — Pero… quiero dejarte algo en claro
— ¿Qué es?
— Yo amo a Elle…
—No te preocupes, créeme que cuidare muy bien de él. No le haré daño.
—Lo amo pero no de la forma natural. —Fruncí levemente el ceño ¿No natural? ¿A qué se refería? Giro sobre sí rápidamente para verme a los ojos, esta vez, en su mirada Había algo pesado. Como si fuera capaz de robarme el alma. — Lo amo de la misma forma en que tú lo haces, así que no te ilusiones con Elle, porque él, ya es mío. —Parpadee un par de veces para entender la situación ¿Beyond estaba interesado en su hermano como pareja?
—Vaya… eso es un poco inusual. — Solté vagamente— en realidad, nunca había pensado en ese tipo de amor. —Beyond dejo escapar una breve risa.
—Ya estoy acostumbrado a esa mirada ¿Acaso eres de las personas con doble moral? ¿Aceptas el amor homosexual pero no el “incestuoso”? Vaya cliché.
—Debo admitir que se me hace bastante extraño que sientas eso por Elle, pero no soy quien para juzgar lo que sientes… si tú quieres verme como rival, perfecto. Yo también lo haré.
— ¿Realmente crees que vas a ganarme? — volteo a mirarme y se acercó con rapidez a mí. Por reacción retrocedí un par de pasos, pero para mí mala suerte, tropecé con algo y caí de espalda al suelo. Beyond no tardo en dejar sus cosas y sentarse sobre mi estómago. — Presiona un poco y obtendrás respuesta… — susurró
—Beyond, quítate por favor…— Dije un tanto molesto, me incomodaba estar de esa manera. Él simplemente sonrió. Tomo mis mejillas con sus frías manos y acerco su rostro al mío. Deslizo su cadera hasta que su entrepierna quedó justo al borde de mi pantalón, me sentí aún más incómodo. Me moví un poco para intentar quitarlo de encima. sus brazos se deslizaron por mis costillas y rozaron los míos, los cuales tomo un segundo después, para dirigirlas a su entrepierna. Me sorprendí un poco pero no quise demostrarlo...
Fije mi vista en esos ojos de un tono rojizo, me desafiaban. Tome con fuerza las muñecas de Beyond y lo empuje a un lado para quitarlo de encima. Escuche un gruñido de su parte. Me levante rápidamente y comencé a caminar en dirección a las escaleras, pero al poco tiempo sentí un fuerte golpe en mi cabeza. Voltee a mirarlo, el simplemente sonrió. cerré el puño con fuerza y fruncí los labios. Quería golpearlo, volví a darle la espalda, al instante sentí como sujeto mi hombro para que lo mirara.
—No me provoques...— fue lo que atine a decir, para ser sincero me estaba costando no responder a su agresión, pero sabía que eso le agradaría a él. La mejor forma de golpear su orgullo, era ignorarlo.
—¿De que eres capaz Yagami Light?— Me solté bruscamente. Una vez más le di la espalda. Y subí las escaleras, mientras lo hacía, escuche un par de amenazas.
En cuanto entre al salón, me quede cerca de la puerta, recargue mi espalda en la pared y solté un suave suspiro. Beyond era muy difícil de tratar, aunque… podía entender un poco su reacción. Él intentaba saber si yo realmente era sincero con Elle, además de que quería averiguar qué clase de persona soy, para así saber cómo "derrotarme".
Aunque para ser sincero, Beyond tenía la batalla perdida y eso lo desesperaba.
Comencé a caminar en dirección a la mesa don estaba Elle, necesitaba verlo, quería estar cerca de él. En cuanto llegue, me coloque a su lado, el me miro con detenimiento.
— ¿Sucede algo Light?— negué suavemente, sonreí y el me correspondió.
—Elle...—tomé con delicadeza y un poco de timidez su mano, inmediatamente sus mejillas se colorearon de un tono rojizo y miro fugazmente a sus compañeros. Me acerque a su oreja, con mi mano libre, hice a un lado unos mechones de cabello— Te amo...— solté en un susurro, poco a poco me aleje, su rostro estaba completamente rojo. Estaba claro que se había sorprendido y avergonzado.
—Eh...— reí un poco ante su reacción, revolví sus cabellos y me fui a mi equipo.
Las clases pasaron con normalidad... podría decirse, Alejandro y compañía cada que tenían la oportunidad, nos dirigían comentarios ofensivos, a veces para mantenerlo a raya bastaba con mirarlo de forma intimidante.
En cuanto la última clase concluyo, Elle y yo salimos del salón, elle permanecía en silencio, lo mire de reojo, parecía preocupado. No dejaba de acariciar su antebrazo izquierdo.
— ¿Te duele el brazo? — él volteo a mirarme un tonto sorprendido.
— No… solo tengo un poco de comezón— sonrió nerviosamente.
— Entiendo. — coloque mi brazo izquierdo atreves de sus hombros y lo acerque a mí. — Que marca es tu champo? Hueles a frutas
— Bueno… no he puesto atención a eso. — coloco su dedo pulgar en sus labios.
—¿Vendrán por ti?
— Si… pero, esperaré contigo el autobús.
— Gracias.
Así fue, esperamos el autobús junto a otros estudiantes, aunque no fue mucho, esta vez no tardó en aparecer el transporte. En cuanto algunos estudiantes subían, me despedí de Elle, con un suave beso en la nariz, él sonrió levemente y después subí.
Una vez que encontré un lugar para sujetarme, ya que no quedaban asientos vacíos, mire a Elle a través de la ventana. En cuanto el autobús comenzó a arrancar, vi como Beyond se acercaba a Elle, abrazándolo por la espalda. Sentí una punzada en el estómago...
Llegue a casa de mi primo, las luces se encontraban apagadas. Subí las escaleras con cuidado, ya que no quería despertarlo. Entre a mi habitación y encendí la laptop que estaba en el escritorio cerca de la ventana.
Comencé a desvestirme para usar el pijama. Saque unos libros de mi mochila y una vez que la laptop estaba prendida, me senté en la silla.
Inicie sesión en una red social, mire a los que estaba en línea. Sayu aún estaba conectada. Fruncí el ceño. Abrí una pequeña ventana de mensajes y le escribí:
<< — ¿Qué estás haciendo tan noche en el celular? — No espere mucho para recibir respuesta, casi de inmediato escuche el característico sonido que te avisaba que tenías un mensaje pendiente.
— Hola hermanito, perdón, es que te estaba esperando para dar los detalles del cumpleaños de papá.
— ¿Qué es lo que van a hacer?
— Bueno, habrán compañeros del trabajo de papá, algunos tíos y primos… creo será algo grande.
— Sí, me sorprende un poco.
— A mí ni me digas… Light ¿Iras verdad? — me quede mirando el texto de Sayu, para ser sincero, no estaba seguro de si ir, no quería que mi padre se sintiera incómodo con mi presencia.
— El fin de semana iré a verlos… veré si me quieren en la fiesta.
— Yo digo que no les digas, ¡serás el regalo sorpresa! — no pude evitar reír por su comentario, ya que me había imaginado a mí con un moño en la cabeza.
—No estaría mal, pero no puedo hacer eso.
— Algún día lo aceptaran.
— Eso espero…
— ¿Y cómo está tu amado? ¿Ya arreglaron sus asuntitos?
—Eso no se pregunta Sayu… pero, está bien…
—Ups! Perdón. Bueno hermano, me tengo que ir a dormir, mañana te espero. Y te quiero.
—Descansas Sayu, yo también te quiero. — >> Me quede mirando la pantalla de la laptop, debía admitir que no estaba seguro si algún día me aceptarían… en realidad, comenzaba a desechar esa idea… comenzaba a creer que, aquellos momentos que viví con mi familia no volvería jamás, que no volvería a ver a mi padre y madre… Comenzaba a creer que se olvidarían de mí.
Cerré la laptop de forma un poco brusca, y fui a acostarme, me cubrí por completo. Sentí un nudo en mi garganta y mis ojos humedecerse… contuve la respiración por unos segundos, para después destaparme rápidamente. Me levante y tome mi teléfono celular que estaba en mi mochila.
Escribí un texto y lo envié. Fui a acostarme de nueva cuenta, pero esta vez con el teléfono en la mano.
Al poco tiempo sentí mi teléfono vibrar, era un mensaje…
“No te rindas Light Yagami”
Sonreí levemente al verlo y cerré los ojos.
A la mañana siguiente, hice de nueva cuenta mis deberes, esta vez mi primo almorzó conmigo, aunque fue un breve tiempo ya que tuvo que irse rápido. Me sentía un poco extrañado, porque Elle no había respondido mis mensajes y tampoco las llamadas.
En cuanto terminé, Salí de casa para ir a la parada de autobuses. Sin embargo a llegar, me percate que Elle no estaba ahí como de costumbre. Mire a mi alrededor por si llegaba verlo cerca, pero no.
Mire la hora de mi celular… las dos con treinta minutos. Suspire levemente, entonces recibí un mensaje, era de Elle: Light, lo siento… no podré ir hoy a clases. Por favor, no me llames. No podré responder.
Guarde mi teléfono, el autobús estaba por llegar. Lo tomé. Durante el camino a la escuela, me limite a mirar el paisaje, el cielo era de un azul bastante hermoso. Sonreí levemente y voltee a mirar el lugar de alado. Sentí un hueco que recorrió todo mi cuerpo. Ya me había acostumbrado a estar en compañía de Elle.
Al llegar a la escuela, fui directo al sanitario, abrí el grifo, el agua no tardo en salir. Moje mis manos y me mire en el espejo. El mensaje de Elle no dejaba de darme vueltas en la cabeza.
Me preocupaba, no podía estar tranquilo. Saque mi móvil y marque su número… No recibí respuesta.
Volví a marcar. Pero esta vez, respondió a la llamada. Había un silencio sepulcral… escuchaba una respiración al otro lado de la línea.
—¿Elle? ¿Estás bien?
—Si… Light, por favor, no me llames.
—¿Por qué? — Pude escuchar la voz de una mujer, seguramente era su madre pero parecía alterada. Elle pareció alejarse de donde estaba, pues deje de escuchar la voz.
—Yo te llamaré. — Entonces colgó. Me quede con el teléfono cerca del oído. ¿Qué había pasado?
Llegue al salón, aun el grupo estaba esperando. Me quede al margen de todos. Me sentía inquieto por lo que había escuchado, quizá debí de haberle hecho caso a Elle, pero… necesitaba saber cómo estaba. Solté un suspiro.
—Oye Light! —La voz de Alejandro llamo mi atención, lo mire con el ceño fruncido. No estaba de humor como para aguantarlo. — ¿Dónde dejaste a tu muñequita? ¿Ya te cansaste de jugar con ella? — Se escucharon unas cuantas risas de parte de los demás compañeros, Alejandro se acercó a mí. — No espera, ¡seguramente la mandaste a reparar de tanto que la usas! — En cuanto estuvo frente a mí, cerré el puño y entonces lo golpee en el rostro lo más fuerte que pude. Él cayó al suelo, su nariz sangraba.
— ¿Podrías dejar de escupir mierda? — Lo mire seriamente, Alejandro parecía asustado. Tome mi mochila y me fui de ahí. Sentí la irada de algunos compañeros. Necesitaba estar lejos de ahí.
Me senté en una de las mesas que estaban en las zonas verdes de la escuela, coloque mi mochila frente a mí. Saque mi celular e hice una llamada.
— ¿Diga? — La voz característica de mi madre se escuchó del otro lado. Abrí levemente la boca pero no pude decir algo. —¿Light? Hijo… ¿Eres tú?
—Sí.
— Hijo ¿Cómo has estado? Te he extrañado mucho.
— he estado bien, mamá… yo también te he extrañado.
— Por favor Light vuelve a casa. — Me quede en silencio, no sabía que responderle. ¿Ya habían aceptado mis gustos?
— ¿Qué crees que diga papá?
— No lo sé hijo…
— Mamá, me tengo que ir… voy a entrar a clases. Me dio gusto volverte a escuchar.
—Te amo hijo, nunca lo dudes…
— Yo también te amo mamá. — corte la llamada. Recargue mi cabella en la mesa. Y entonces recordé el mensaje de anoche.
“No te rindas Light Yagami”
Sonreí levemente, tome mi mochila y fui de nuevo al salón. Aun había mucho que recorrer, así que rendirme no era una opción.