Escuchar los sonidos de la noche de alguna manera lograba relajarme, aunque no lo suficiente como para conciliar el sueño, no hacía nada más que mirar el techo de mi habitación. Me sentía realmente estresado por la situación de Beyond y mi madre, ella había llegado a casa por la tarde así que como mi hermano no estaba en casa no hubo ningún “enfrentamiento”, pero ¿El tío Chris había sido capaz de decirle cómo paso lo de su accidente?
Sinceramente, no sabía… aunque a juzgar por el carácter de mi tío, él es capaz de eso y mucho más…
Me removí un poco entre las cobijas, cubriéndome hasta la nariz con ellas, hacia un poco de frío y los vientos eran algo fuertes.
Si Chris le había dicho a mamá, lo más seguro era que mañana las cosas no estarían nada tranquilas, me asustaba el hecho de que Beyond sacara de sus casillas a mamá y ella a él… ambos son de un carácter fuerte. Quite las cobijas de un solo golpe, me levante rápidamente y salí de la habitación. Camine por el pasillo para entrar al baño. Una vez que lo hice no me moleste en encender la luz. Abrí el grifo del lavabo, el agua comenzó correr, el sonido del agua inundaba la habitación. Moje mis manos y las pase por mi rostro. Aunque lo que más me ponía tenso era el hecho de que Beyond no sería capaz de decir la razón por la que cometió tal atrocidad… y si, si lo hacía ¿Cómo reaccionaría ella? ¿Nuestra madre le creería? ¿Y si no lo hace? ¿Cómo se sentirá Beyond?
Si era necesario, yo tendría que intervenir para decirle a mamá las razones de Beyond…
No, más bien, era mi deber, no porque tenía reparar el daño que le hice al ignorarlo cuando niños, sino era porque amo a Beyond, y quiero lo mejor para él...
Mire mi reflejo en el espejo, cerré la llave del lavabo, di un pequeño suspiro para después salir de ahí. Baje las escaleras, tenía en mente ir a la cocina a perder un poco el tiempo. Una de las cosas que detesto del insomnio, es que no puedes hacer mucho durante la noche porque podría despertar a mi madre o hermanos. Aunque era más por mi madre, si ella se enterara que sigo despierto estoy seguro que me iría muy mal.
Entre a la cocina y alce mi mano para sacar un frasco de dulces que estaba en la vitrina aun lado del refrigerador. Sin embargo al momento de abrir la puertecilla, la manga de mi pijama se recorrió para descubrir una parte de mi antebrazo. Mire con detenimiento las cicatrices de mi brazo… pero sobretodo, mi atención era captada por unas cortadas de un color rojo oscuro, alrededor de ellas, mi tono de piel era entre rojo y morado. Sentí un vacío en mi pecho, odiaba verlas, eran una muestra física de mi debilidad, de lo frágil que era y lo detestaba…
Saque el dulcero, fui a sentarme en uno de los sillones de la sala. Abrí el frasco, saque un puño de dulces y comencé a comer uno tras otro.
Recientemente me había herido los brazos…
Sentir mi piel ser cortada por el filo de la navaja, alivió mi dolor emocional en un principio pero al terminar todo aquello, el golpe de la realidad fue mucho peor y eso me hizo sentir fatal.
Me había decepcionado a mí mismo, me deje llevar por los insultos de los compañeros…
El miedo y la tristeza
me envolvieron de nuevo.
Me odiaba...
Sentí un nudo en la garganta ¿Qué debía hacer para dejar de lastimarme? Realmente ya no quería ver más cortadas en mis brazos…
El llorar dejo de bastar para sacar el dolor…
Apreté los labios por unos segundos y después solté un suspiro. Repentinamente escuche los pasos de alguien bajar las escaleras, tome el frasco, me levante rápidamente, fui al comedor —que estaba aún lado de la sala— y me escondí bajo la mesa, afortunadamente para mi tenía un mantel que me ayudaba a esconderme.
Escuche que encendieron la televisión, cambiaba de canal cada dos segundos y después la dejo en uno. Me sorprendí bastante al escuchar un suspiro, pues era mi madre quien había bajado. Pronto, un sollozo rompió el silencio.
Mi madre luchaba por no romper en llanto, pero no lo pudo contener por más tiempo, sentí mi corazón estrujarse. Ya hacía mucho que no escuchaba a mi madre llorar…
Cuando era pequeño, mi madre lloraba mucho por la situación que vivía con mi padre, me frustraba el hecho que a pesar de mis intentos, nunca pude hacer sonreír a mi madre y que en ese entonces me prometí que yo jamás la lastimaría, que no sería una causa para entristecerla.
Escuchar su llanto me partía el alma, quise salir de mi escondite para ir a consolarla, pero me detuve casi al instante, si me madre se había bajado, era para evitar que nosotros la escucháramos. Necesitaba estar sola.
Ahora estaba claro,
mi madre sabía que Beyond,
había lastimado al tío Chris.
Mordí mi labio inferior con fuerza y me limite a escuchar a mi madre llorar. Siempre he pensado que las madres, no tiene derecho a llorar, que ellas no pueden sentirse tristes, porque si lo hacen, sus hijos se verán afectados, ellas siempre han sido la fortaleza de una familia. Y mi madre siempre ha tenido que fingir ser fuerte para nosotros, aunque por dentro estuviera cubierta por la tristeza o el miedo…
Lo mínimo que podía hacer por ella en ese momento —y aunque detestaba escucharla llorar— era dejarla que sacara todo aquello que la presionaba y encerraba en esa armadura de persona fuerte.
La admiro, por eso y más…
Mi madre después de un rato se quedó dormida en el sillón, aproveche ese momento para salir de mi escondite e irme a mi habitación, no sin antes cubrir a mi madre con una de sus cobijas, ya que el frio había aumentado.
Al estar caminando por el pasillo en dirección a mi cuarto, decidí desviarme a la habitación de Beyond. La luz de su cuarto estaba apagada. Entre con sumo cuidado, y cerré la puerta suavemente. Mis ojos no tardaron en acostumbrarse a la oscuridad ya que, las cortinas de la ventana impedían el paso de la luz. Una vez que estuve frene a la cama de mi hermano, me senté al borde de esta. Él se removió un poco, escuchaba claramente su respiración. Acerque tímidamente mi mano a su cabeza y acaricie su cabello.
Voy a protegerte…
Le di un beso en su frente que pude encontrar con ayuda de mi mano. Salí sin más que hacer y esta vez, entre a mi recamara. Me uve de boca al colchón para poco después dejarme llevar por el cansancio.
Podía escuchar unos gritos a lo lejos, era la voz de mi madre, seguidos de unos golpes. Abrí con lentitud los ojos, los rayos del el sol me molestaban. Escuche un fuerte portazo, que me sobresalto.
— ¡Beyond abre la puerta! — Era mi madre, se escuchaba bastante molesta. De inmediato recordé la razón por la que seguramente ella estuviera así. Quite las cobijas y me levante con rapidez, al correr hacia la salida, escuche algo caer al piso. Me detuve y regrese, había sido mi teléfono celular.
Una vez que lo tome, Tenía un par de mensajes de Light, aunque no los revise y entonces me di cuenta de la hora que era: Dos y media de la tarde.
Como sabia que Light ya estaría en la parada de autobuses, le mande un mensaje diciéndole que no iría a clase y que no me marcara. Guardé el teléfono en el bolsillo de mi pijama y Salí.
Los gritos eran mucho más fuertes, al parecer estaban forcejeando la puerta del cuarto de Beyond. Al llegar ahí. Vi a mi adre, bastante agitada, golpeaba la puerta con demasiada fuerza. Torcí la boca.
— ¡Mamá! —grite para llamar su atención, pero me ignoro. — ¡Mamá! — Esta vez volteo a verme furiosa.
— ¿¡Que quieres!?
— ¿Qué es lo que pasa…?
—Nada…— suspiro— ¿Qué no tienes escuela?—Abrí la boca para dar una respuesta negativa, pero me interrumpió antes de poder hacerlo— ¿¡Qué esperas!? ¡Vete!
—Mamá… creo deberías clamarte…— Me acerque a ella con intenciones de alejarla.
— ¿¡Calmarme!? ¿¡Qué te crees como para decirme eso!? Por favor! — Ella me dio la espalda y comenzó a golpear la puerta. — ¡Abre la maldita puerta Beyond!
— ¡Mamá, cálmate por favor! — la tome de los hombros y la quise alejar de la puerta pero ella se soltó bruscamente a la vez que me golpeaba para alejarme. Pude ver a Beyond asomarse en la entrada de su cuarto, el parecía sorprendido al verme en esa situación. Mi madre de inmediato lo notó y rápidamente corrió hasta donde Beyond, esta vez no pudo cerrar la puerta a tiempo. Me quede quieto, escuchando como le gritaba a mi hermano, me sentí extraño, una sensación de irrealismo me invadió. De repente sentí mi celular vibrar, lo saque torpemente, Light me llamaba… pero la deja pasar. Al poco tiempo recibí una nueva llamada. Contesté, un terrible silencio al otro lado de la línea contrastaba a la perfección.
— ¿Elle? ¿Estás bien?
—Si… Light, por favor no me llames
— ¿Por qué? —Un grito de mi madre hizo que me alejara del lugar, no quería que Light escuchara todo aquello.
—Yo te llamaré— No le permití a Light hablar. Corte la llamada bruscamente. Guarde el teléfono y corrí una vez más al cuarto de mi hermano. Al llegar vi como mi madre buscaba desesperadamente entre los cajones del armario algo.
— ¿tú crees que vas encontrar algo? —Beyond rio fuertemente, lo mire sorprendido— Si es así, eres una estúpida.
— ¿Cómo te atreves a hablarme de esa manera? ¿¡No lo entiendes!? ¿¡No viste lo que le hiciste a mi hermano!?
—Oh… eso— Beyond señalo su mejilla, haciendo alusión a la herida de mi tío. — ¡créeme que lo volvería a hacer, aun si no estoy drogado!
— ¡Estás loco! — Mamá le lanzo un zapato a mi hermano, él pudo esquivarlo.
— ¡Claro que lo estoy! Si no, no tendría razones para hacer ese tipo de cosas ¿¡Cierto!? — Nuestra madre se acerco a Beyond y comenzó a golpearlo, él se cubría con las manos, a la vez que intentaba sujetarla. Me acerque corriendo a ellos.
— ¡Cálmense los dos! ¡Mamá por favor! —de alguna manera pude meterme en medio de los dos y así alejarlos. — ¡Beyond guarda silencio! —grite con fuerza, ya que él seguía insultándola. Mire a mi madre, estaba agitada.
—Elle, esto no es asunto tuyo… vete de aquí—negué con la cabeza
—Mamá… yo sabía lo que Beyond le hizo a nuestro tío… de hecho, estuve en el momento en que ocurrió.
— ¿¡Y porque no me lo dijiste!? —Mamá parecía que rompería en llanto por la frustración. Paso sus manos por su cabello, como si intentara acomodárselo.
—Por temor a como reaccionarias… — Se quedo callada.
—Elle, no te metas en esto…— La voz de mi hermano se escuchaba un tanto agresiva y preocupada. Sabía perfectamente cuál era mi intención. Mi corazón se acelero rápidamente.
—Mamá… ¿no te has preguntado por qué Beyond hizo eso?
— ¡Se intoxico con quien sabe qué cosa! ¡No lo vayas a justificar! ¡Elle, lo que tu hermano necesita es ayuda!
— ¡Exacto mamá! Necesita ayuda pero ¿Cuál es la razón por la que Beyond se comporta así? ¿No te has preguntado? —Pronto sentí como Beyond me empujo por la espalda, casi caí por la acción, él intentaba sacarme de la habitación.
— ¿Qué haces? —dijo mamá — ¡Suelta a tu hermano! —Pronto comenzamos a forcejear
— ¡él no tiene nada que hacer aquí! — Beyond me tiro al suelo, di un pequeño quejido por el golpe en la espalda. — ¿¡No me estas escuchando Beyond!? —Aun así, no fue suficiente para él y me tomo fuertemente de los brazos para arrastrarme. Intente deshacer su agarre.
—Beyond ¡tienes que decirle a mamá! — finalmente logro su cometido, me saco de la habitación, dejándome tirado en el pasillo y volvió al cuarto, cerró la puerta fuertemente. Me levante e intenté abrirla pero al parecer la cerró con seguro. Golpee la puerta un par de veces, podía escucharlos... aun estaban tensos.
— ¿Qué es lo que pasa? —La voz de Mello llamo mi atención. Gire mi cuerpo para mirarlo, portaba el uniforme de la escuela. Se veía preocupado.
—Nada…—susurré.
— ¿Seguro? ¿Qué hizo Beyond? — Sentí feo al escuchar como sentenciaba la culpa a Beyond. Era responsable de lo que hizo pero… en el fondo de todo eso, había sido consecuencia de ser una víctima.
— ¿Dónde esta Near? —
—Abajo, con Mail…
—Hay que mantenerlo calmado. —dije secamente, él asintió. Near era demasiado ansioso ante situaciones así, le costaba manejar el estrés, por lo que mantenerlo ocupado era lo mejor.
Baje las escaleras junto a Mello, ambos en silencio. Se podía apreciar claramente la discusión entre mamá y Beyond.
En cuanto llegamos a la sala, Near me miro bastante angustiado, mientras que Mail jugaba con su PSP, al parecer no le afectaba la situación.
— ¿Por qué están discutiendo? —soltó rápidamente, mientras retorcía desesperado un mecho de cabello.
—Es algo que no nos concierne... —susurre
—No quiero que Beyond le haga daño a mamá…—Abrí los ojos un tanto sorprendido por las palabras de Near, que aunque e costaba admitir que tenían algo de verdad.
—Beyond no le hará nada…—Sonreí para intentar calmar la tensión.
—No te preocupes—Dijo Mello—Nuestro hermano siempre la ha desquiciado
—Es algo normal—Esta vez hablo Mail—Aunque creo esta vez, si se pasó—Torcí levemente la boca, no me gustaba lo que decían pero era lógico que pensaran que su hermano mayor era un problema, ya que… desconocían sus razones. Suspire levemente.
—Watari los rajo ‘¿Cierto?
—Si—respondió Mello
—Vamos con Watari—Mail y Mello me miraron confundidos, me acerque a Near y lo tome de la muñeca obligándolo a levantarse. Comencé a caminar en dirección a la cocina. Una vez ahí, note que Watari estaba acompañado de la nueva empleada.
—Watari…—Dije casi en un susurro pero él pareció escucharme perfectamente.
—¿Qué ocurre joven Elle?
—¿Puedes llevar a mis hermanos a algún lugar? —Watari sonrió levemente y asintió con la cabeza.
—Como usted ordene joven—correspondí a su sonrisa— Y no se preocupe… aunque las cosas no luzcan del todo bien, créame que se solucionaran de la mejor manera
—Gracias… — Watari fue a donde mis hermanos, vi como hablaba con ellos y después se marcharon, aunque antes de irse Mello me miro fugazmente.
Voltee para mirar a la chica que estaba ahí, parecía estar incomoda con el “ambiente pesado”
—Puedes tomarte el día—dije, ella simplemente asintió y dejo lo que estaba haciendo para después salir por la puerta de servicio. Me quede mirando por unos segundos la puerta por donde la chica había salido. De repente sentí una punzada en mi brazo izquierdo. Dirigí mi vista a este y pude notar unas cuantas manchas color rojo en mi manga. Abrí más los ojos, al parecer mis cortadas se habían abierto al forcejear con Beyond. Remangue la prenda para dejar al descubierto mi antebrazo.
Efectivamente, las heridas estaban abiertas. Ahora me daba cuenta del daño que me hacia… las heridas eran lo bastante profundas como para no cerrarse lo suficiente después de un día. Era necesario que me las atendiera de nuevo. Subí con rapidez las escaleras para ir al baño, pero al momento de estar por el pasillo escuche la puerta del cuarto de Beyond abrirse con violencia, seguido de sus gritos
—¿¡Y qué paneas hacer!? ¿¡Encerrarme!? —
—¡No me retes!
—¡Ya conozco todos tus trucos! ¡Nada de lo que hagas me afecta! —Vi como Beyond comenzaba a bajar las escaleras, mi madre lo siguió. Baje junto a ellos, pero al parecer no me notaron, estaban lo suficientemente sumidos en su discusión.
—¿¡A dónde vas!? ¡No hemos terminado de hablar! —Beyond ya estaba frente a la puerta, la abrió pero de inmediato mi madre la cerro — ¡Si te sales, no pienses en volver!
—¿Y crees, que voy a regresar?
—¡Beyond, cálmate! —Grite, ambos me miraron desconcertados.
—¿Por qué o te has ido a la escuela? —Mire con sorpresa a mi madre
—Eso no importa…—susurre sin embargo mi madre si escucho
—¿Cómo que no es importante? Si de por sí, tus calificaciones son un desastre—Parpadee confundido
—Tengo un promedio de ocho…
—¿Y crees que es suficiente? Elle, tú eras excelente en la escuela—Suspire cansado, a veces creía que mamá buscaba cualquier cosa para pelear.
—No hablemos de mí. Cálmense… no quiero que todos estos corajes, se vean reflejados en su salud
—Yo estaría calmada si él, no fuera un problema—Mire a Beyond de reojo, sabía que le había dolido las palabras de mamá. Sus ojos lo delataban.
—¡No sería un problema, si ´tú no fueras mi madre! —Rápidamente abrió la puerta y salió corriendo. Mi madre lo iba a seguir pero la detuve al sujetarla de brazo.
—Mamá, es mejor que lo dejes, él va a volver…—Ella suspiro resignada. Cerré la puerta, mamá se sentó en el sofá. Yo camine lentamente hasta quedar frente a ella.
—Elle… ¿Crees que estoy haciendo bien? ¿Crees que soy una mala madre? —Los ojos de mi madre se volvieron cristalinos, me hinque y tome sus suaves manos.
—No creo que sea una mala madre…—sonreí un poco para animarla pero ella no correspondió—Es difícil cuidar de cinco hijos, además de que eres madre soltera y digamos que nosotros no ponemos mucho de nuestra parte…—Espere recibir una respuesta pero lo único que apareció fue un silencio—Yo sé que tu haces lo que crees es correcto, nadie nace sabiendo ser padres
—Lo sé pero… veo a otras madres y en comparación conmigo, sus hijos son…—Agache la mirada, sabía lo que diría. “Maravillosos” era la palabra que buscaba. —No dan muchos problemas…
—Igual y esas señoras golpean a sus hijos—reí levemente por mi comentario estúpido— Mamá a veces, una mujer puede ser una excelente madre pero los hijos un gran desastre…
—¿Tu me consideras una buena madre?
—Para mi eres la mejor mamá que pudiera tener…— Mi madre se puede considerar con una mujer ejemplar, lo único que ocurría era, que se preocupaba demasiado por nosotros que a veces nos asfixiaba, pero siempre ha querido lo mejor para nosotros y eso era sinónimo de amar.
— ¿En verdad?
—Si—sonreí dulcemente, esta vez, me correspondió pero la sonrisa duro poco.
—No sé que voy a hacer con tu hermano… — Mordí mi labio inferior, ahora no me sentía seguro de decirle acerca de mi tío y Beyond.
—Mamá… hay algo que quiero decirte sobre él…
— ¿Vas a justificarlo? Sabes que lo que hizo es grave ¿verdad? —Asentí, me puse de pie.
—Lo sé, pero… antes de que tome la responsabilidad de sus acciones. Quiero que sepas sus razones…—sentí un hueco en el estomago y mi corazón acelerarse, si para mí era difícil, no me podía imaginar como lo era para Beyond—Lo que te quiero decir mamá… sé que será difícil de creer, incluso a mi me costó asimilarlo pero…
—Estas asustándome ¿Qué es lo que me dirás? —Suspiré y coloque mi dedo pulgar en la boca.
—El tío Chris… — Mamá me miro confundida— Mamá… Beyond no había perdido la cordura cuando hirió al tío Chris.
— ¿Cómo puedes estas seguro? Estaba drogado… —volví a hincarme y tome con fuerza sus manos
—Mamá, Beyond no siempre tiene la culpa de todo lo que ocurre—Ella me miro un poco sorprendida—Yo estuve ahí y sé lo que vi.
—Yo no culpo a tu hermano de todo…
— Él gritaba que el tío Chris, pagaría por lo que le había hecho… Mamá ¿Qué cosa le puede hacer un adulto a un niño? ¿Qué cosa haría como para que ese niño quiera vengarse? —Mamá soltó mis manos. Ella había entendido lo que quería decirle.
—No lo sé…—La mire un poco decepcionado
—Yo sé que quizá notaste algún cambio en su comportamiento…
—Si, lo note, pero se la razón de su cambio y fue por otra cosa, no por eso que estas pensando.
—Entonces mamá ¿Por qué otra razón Beyond atacaría al tío Chris? ¿Recuerdas que ellos se llevaban muy pero muy bien?
—Lo recuerdo perfectamente, pero Chris aprecia mucho a Beyond, él no le haría daño a mi hijo…
—Era su sobrino favorito ¿No? — Mamá me hizo a un lado para poder levantarse, camino rumbo a la cocina, yo le seguí. Me quede en la entrada, observaba a mi madre beber un poco de agua.
— ¿Beyond te lo dijo? — Negué con la cabeza— Entonces son puras suposiciones tuyas— sentí mi sangre hervir, no podía creer lo que estaba pasando. ¿Cómo era posible que mi madre no quisiera creerlo? ¿Cómo podía dudar de su hijo?
— ¡No me lo dijo directamente pero pude entenderle! ¡Mamá! ¡Créeme! ¡Lo que te estoy diciendo, no son mentiras! ¿¡Qué ganaría yo al decirlas!?
—Nada…
— ¿Y entonces? ¿Por qué lo dudas?
— ¡Porque él es mi hermano! ¿¡Como crees que me siento!? — La voz de mi madre se quebró, no había caído en cuenta lo ella me había dicho. Era cierto que era su hermano, que habían crecido un tiempo juntos, que ella lo cuido cuando eran niños. Ella también lo amaba pero… la balanza pesaba más del lado de mi hermano, es decir, su hijo.
— Ahora entiendo porque Beyond no quería decírtelo… — Sentí un nudo formarse en mi garganta— Sabía que no le creerías. — Le di la espalda, mi madre comenzó a llorar, cosa que e hizo sentir culpable, pero a veces las palabras fuertes, hacen reaccionar.
Me senté en las escaleras, saque mi teléfono celular del bolsillo de mi pantalón, ya faltaba poco para las cinco de la tarde. Me sorprendí por lo rápido que paso el tiempo. Aunque no era de extrañar ya que cuando ocurren este tipo de cosas el tiempo pareciera no existir.
Ya quería que Beyond llegara, pero a decir verdad, era seguro que sería hasta la noche. Suspire con pesadez.
Decidí subirme a mi cuarto, pues el llanto de mamá me rogaba ir a abrazarla, como ya había mencionado… detestaba que ella derramara lagrimas.
Siendo sincero, debe ser muy difícil estar en la posición de mi madre… su hermano —Con el que mejor se lleva— era acusado de algo tan horrible…
¿Cómo reaccionar ante una acusación de ese calibre?
Mi tío Chris era un hombre amable, carismático y hasta cierto punto tierno. Él es el típico tío soltero que consiente a sus sobrinos a tal grado que a veces lo preferías a él, que a tus propios padres…
¿Cómo un hombre así, sería capaz de hacer eso?
¿Cómo es posible que tu propio hermano haya abusado de uno de tus hijos?
Sentí un escalofrío recorrer mi cuerpo ¿Como podía existir gente así? Personas enfermas que no les importa nada más que ellos. Gente que… es capaz de tomar tu confianza y hacerla trizas solo por algo que querían.
Las odio, realmente odio ese tipo de personas…
La puerta principal se ario, fije mi vista en ella. Mis hermanos habían llegado. De inmediato escuche los pasos de mi madre acercarse a la entrada, seguramente esperaba que fuera Beyond.
— ¿Acaban de llegar? ¿Qué horas es? —fue lo que mamá atino a decir. Near se acerco a ella y la abrazo fuertemente, ella correspondió a su abrazo.
—No… es que quisimos dar un paseo—Hablo Mail un tanto nervioso
—Ya sabes, para tranquilizar a Near—Esta vez fue Mello
—Si… entiendo— Mi mamá fijo su vista en mi, pude notar sus ojos rojos por el llanto y se mostraba algo frágil. — ¿Ya comieron?
—Si, pizza— Dijo Near quien aun no se despegaba de mamá.
—Bueno… entonces hagan su tarea. — Sonrió levente, mis hermanos asintieron y tomaron sus mochilas que estaban en el perchero en una esquina. —Pero… quiero que la hagan aquí abajo…
— ¿Aquí? —Hablo Mello
—Si, quiero estar con ustedes— Sonreí levemente. Mi madre estaba decidida a cuidar más a mis hermanos, a tener una relación más cercana y eso realmente me hacia feliz.
Me levante del escalón donde estaba sentado, mire como mis hermanos y mamá fueron al comedor. Estaba por subir, cuando la puerta se abrió, voltee a ver. Era Watari, ambos nos miramos por unos segundos y después me sonrió levemente para después ir en dirección a la cocina.
Estando en mi cuarto, me cambie de ropa y atendí mis “heridas” que apuntaban a que las cicatrices serían horrendas y difíciles de ocultar. Una vez que termine, me recosté en mi cama.
El color blanco del techo por alguna razón e desesperaba. Tome mi teléfono celular que deje debajo de la almohada y comencé a leer los mensajes que Light, me novio desde la mañana.
El primero era un “buen día”, el segundo fue una pequeña lista de sus labores y de lo que desayunaría, a la vez que me preguntaba que comería yo. En el siguiente me preguntaba que si estaba bien o si aun dormía.
De pronto escuche mi puerta abrirse, moví levemente la cabeza para ver de quien se trataba.
—Elle… ¿Puedo pasar? — Mello tenía un semblante serio. Asentí con la cabeza a la vez que me sentaba y guardaba el teléfono bajo la almohada.
—¿Qué pasa? — Mello se acerco con rapidez, no sin antes cerrar la puerta con cuidado. Una vez que estuvo cerca se sentó frene a mí.
—Hace un rato… vi que tu manga tenía una manchitas de sangre— sentí un cosquilleo en el estómago al escuchar aquello— ¿Qué fue lo que te paso?
—Ah… es que la otra vez me caí y raspe el brazo. Supongo que con el alboroto me volví a lastimar donde me raspe. — Los ojos de Mello se fijaron a los míos, él sabía que mentía
—Si eso paso ¿No crees que deberías ir al doctor? — Acerco su mano a mi brazo
—No… estaré bien—sonreí para darle confianza pero al parecer no funcionaria. — Y… ¿ya terminaste tu tarea?
—No…
—Entonces, deberías ir a terminarla.
—Elle, cuando golpeabas la puerta del cuarto de Beyond… vi tu brazo, no parecían raspones. —Mi respiración se detuvo por unos segundos. No podía creer que Mello había visto mis cortadas…
—Esta bien te diré—dije de la forma más tranquila posible— Hay un gato en la escuela, le llamo chuleta.
—¿Chuleta?
—Si, la otra vez quise cargarlo, pero lo único que conseguí fueron un monton de arañazos.
—¿Y ese gato estaba limpio?
— No sé, pero fui a la enfermería y ya sabes… — reí un poco— La doctora en turno me regaño—hubo un silencio aterrador, pero poco a poco se fue rompiendo por la risa de Mello
—Me hubiera encantado ver cómo te arañaba ese gato— reí junto con él.
— ¡No seas un sádico! Realmente me dolió!
— Por eso detesto los gatos, prefiero a los perros
—Bueno, bueno basta de pláticas. Es mejor que te vayas a hacer la tarea. —Mello asintió y se levanto para ir hacia la puerta. Tomo la chapa y se detuvo.
—Elle…
— ¿Qué?
—Te quiero…—abrió la puerta y salió rápidamente de ahí.
No creyó mi mentira.
El resto de la tarde paso con normalidad, mamá le preguntaba a mis hermanos sobre la escuela, sus amigos e incluso de sus profesores, cenamos todos juntos y finalmente se fueron a dormir.
Mamá y yo nos quedamos esperando a Beyond en la sala. Ambos completamente en silencio.
Ya eran las doce de la noche cuando escuchamos la puerta abrirse, mamá se levanto con rapidez del sofá. Movía sus manos con nerviosismo. Beyond entro, a juzgar por su apariencia, al parecer se había ido a “divertir” a algún lado. Mamá frunció el ceño, pero rápidamente se suavizo.
—Beyond—Hablo un poco tímida. Él la miro con seriedad
— ¿Qué?
—Tenemos que hablar…—él volvió los ojos fastidiado
—Dime de una maldita vez lo que harás— Mamá suspiro, Beyond la miro extrañado
—Ya sé…—La voz de mi madre comenzó a entre cortarse— ya sé lo que te hizo mi hermano… —Los ojos de Beyond se abrieron como plato y comenzó a ruborizarse. De inmediato fijo su mirada en mí.
—Lo siento…—Fue lo que atine a decir, ya que su mirada me provoco un escalofrío. Sin darme tiempo de reaccionar, él se lanzo hacia mi
— ¿¡Como e atreviste a decírselo!?
— ¡Beyond basta! — Él me golpeaba con fuerza, logre cubrirme en rostro con los brazos— ¡Por favor basta! —Mamá intentaba quitármelo de encima— ¡Beyond! ¡Lo siento! — Al instante él se detuvo. Poco apoco me fui descubriendo
—Hijo… perdóname… por—Mi madre agacho la mirada—Por no haberte protegido…— Pronto Beyond comenzó a reír, tanto mi madre y yo lo miramos desconcertados.
—¿Crees que voy a perdonarte? ¡Tú lo sabías! Pero…. — alzo sus brazos, yo mire a mamá confundido— decidiste ignorarme, solo por que querías mantenerme lejos de Elle—dio un manotazo al aire.
— ¡No! ¡Claro que no! ¡Yo no haría tal cosa!
— ¡No mientas! — Grito fuertemente— ¡No mientas…!—Las lagrimas de Beyond comenzaron a fluir, mamá se acerco a él con la intención de abrazarlo pero él se alejo— no he acerques— La mirada de mi hermano se endureció por completo. Dio un par de pasos atrás y subió las escaleras. Mamá no tardo en seguirlo.
Me tuve por completo en el sillón, escuche un fuerte portazo y a mamá tocar la puerta con desesperación. Saque mi teléfono celular y marque un número. A los pocos segundos recibí respuesta.
—¿Estas bien? — La voz de Light al oro lado de la línea me tranquilizaba un poco
—No…—susurre débilmente
—¿Qué paso? — Se escuchaba preocupado
— ¿Qué tal e fue? — Dije
—Elle… ¿Qué pasó? ¿Elle? —
—Nada… estoy bien—sonreía a pesar de que no podía verme— Solo necesito hablar contigo—hubo un silencio seguido de un suspiro
—Elle, te quiero…
—Yo también…