Tony Stark caminaba rápidamente por los pasillos de la torre. Su cara irradiaba felicidad y por primera vez en mucho tiempo se le veía una sonrisa sincera.
Llego en pocos segundos a la cocina, en donde se encontraba Thor registrando la nevera, en busca de algo que saciara su apetito.
-¿Has visto a Steve?
-No amigo Tony. Lo siento. ¿Ya lo buscaste en el gimnasio?
Tony agradeció amablemente a Thor, dejándolo sorprendido y al mismo tiempo contento ante el cambio de actitud.
Tony siguió caminando rápidamente en busca del Capitán.
-Jarvis ¿Sabes donde esta el Capitán?
-Si señor. El joven Steve se encuentra en su habitación. ¿Desea que le comunique que quiere hablar con el, Señor?
-No. Muchas gracias Jarvis.
El moreno se encaminó al cuarto del Capi-Paleta aun mas rápido que antes, reprochándose porque no había empezado por ahí su búsqueda.
Llego al cuarto de Steve minutos después, sin embargo un mareo le sobrevino fuertemente.
Se recargo contra la pared en busca de soporte.
Después de que el mareo se le pasara un poco, de armo de valor y toco la puerta del capitán en espera de que este abriera.
Toco otra vez.
Otra vez.
Otra vez.
El capitán no le respondía y sinceramente, ya se había empezado a preocupar.
-Jarvis, por favor abre la puerta. Necesito hablar urgentemente con Steve.
El mayordomo artificial, obedeciendo las órdenes de su creador abrió la puerta rápidamente.
Tony estaba apunto de entrar, sin embargo unos gemidos detuvieron su marcha.
Ahí, en la cama, cabalgando a su amado Capitán, estaba una zorra pelirroja de buen cuerpo, gimiendo una y otra vez el nombre del Capitán.
Steve por su parte estaba en la cama, con sus manos en las caderas de la mujer ayudándola a marcar el ritmo que el quería y con una cara de placer increíble.
-¡Oh Dios! Cassie, si, mas fuerte cariño.- Esas palabras provocaron un fuerte asco al moreno.
-¡Steve! Dime, dime que nadie te a hecho sentir como yo.
-Oh, Cassie, nadie me ha hecho sentir tanto como tu.
-¿Ni-Ni siquiera Stark? -Dijo la chica a punto del orgasmo.
-St-Stark, fue solo un ¡Ah! Un juego. -Dijo viniendose dentro de la chica al mismo tiempo que ella.
-Stark solamente fue un maldito juego. ¿De verdad crees que yo amaría o tan siquiera me atraería alguien como el?
Alguien ególatra, egoísta, presumido y mujeriego.
Solamente me acosté con el por mera curiosidad. Jamás me quedaría al lado de el. La única persona que me impedirá eres tu Cassie. Te amo solamente a ti.
Tony cerro la puerta suavemente para que no se dieran cuenta. Ahora todo cobraba sentido. Steve solamente había jugado con el.
Un fuerte dolor de cabeza lo invadió en esos momentos, se dejó caer contra la pared.
Se tomo el rostro con ambas manos en un intento de hacer que el dolor menguara, pero lo único que consiguió fue que aumentará y varias lagrimas de dolor cayeron por su rostro. Lagrimas de dolor mezcladas con lagrimas de desesperación.
-¿Por qué? ¿Porque a mi? ¿No puedo ser feliz una vez en mi vida?
De la nada la puerta se abrió dejando ver a la pelirroja despeinada y despidiéndose de Steve con un apasionado beso en los labios, pasando al lado de Tony sin percatarse de su presencia.
Sin embargo Steve si reparo en el, y sin que el lo admitiera, preocupado.
Se agachó a su lado y atrajo su cabeza a su regazo.
—¿Tony? ¿Que tienes? ¿Estas bien?— Dijo haciendo llorar mas al castaño.
"Que buen actor es, deberían darle un Óscar"
-Necesito... hablar... de... lo... que... paso... —Dijo entre sollozos —Necesito saber si es cierto.— Dijo apartándose de el.
-¿Si es cierto que Tony?
—Te... Escuche con Cassie o como quiera que se llame.
El semblante de Steve cambio, dejo de verde preocupado y ahora se ría molesto y algo asqueado.
—Necesito saber si es verdad todo lo que dijiste
-¿De verdad quieres hablar de eso? Tu me lo dejaste bien claro hace unos días. Solo fue sexo casual. Y créeme que agradesco que no haya sido mas.
- No Steve, no lo entiendes...
-¿Que no lo entiendo? Lo entiendo perfectamente Anthony. Solo fue sexo. Solamente disfrutaste una noche conmigo.
Y ahora Anthony, déjame decirte que no me importas en lo más mínimo. Por mi te puedes morir. Y sea lo que sea que me tengas que decir no me importa.
-Pero Steve, es algo importante...
-¡¿Qué no lo ves?! ¡Te odio Anthony Stark! Solamente me acosté contigo por ¿Lastima? ¿Curiosidad? ¡No lo se! Pero si se algo, que jamás podrás compárate con Cassie. Ella es la persona que amo... Tu— lo miro despectivamente— Tu solamente fuiste un juego.
Y sin mas, Steve se apartó de Tony y regreso a su habitación, dejando en el piso a un Tony con el corazón roto.
—Steve...— Pero antes de que el moreno pudiera terminar la oración un fuerte dolor en el vientre lo invadió. Se sujeto este con ambas manos.
—Mi... Mi bebé...— Cada vez le dolía más y esto, sumando con el dolor de cabeza, hicieron que Stark cayera en la inconsciencia con lagrimas en los ojos, ambas manos en su vientre y sangre escurriendo por sus piernas.