Capítulo 31.- Espacios en blanco…
En los años que vinieron, cuando a Shun le preguntaban cómo fue que llegó desde el departamento de su hermano hasta la estación de policía, el peliverde podía decir honestamente que no sabía, no supo cómo fue que lo sacaron de aquel departamento, no supo cómo fue que llegó a la estación, no supo a qué hora lo cambiaron de ropa, no supo a qué hora lo asearon para quitarle la sangre de las manos y de su piel, Shaka es el que lo había hecho, Shun no se acordaba de nada, nada… estuvo en shock por varias horas
- Shun… Shun… amor mírame – Shaka tenía un café en las manos, se había ausentado de la estación por una hora más o menos, habían llamado de la escuela de Han, el pequeñito había estado en la escuela desde el mediodía y nadie había llegado a verlo, cuando la maestra Marin se cansó de llamar al papá del niño, llamó a su compañero maestro, pero cuando él no contestó, llamó al otro número que el papá del niño le había dejado, Shaka contestó el teléfono de Shun y como Shun no estaba en condiciones de nada en esos momentos, había ido a buscar a Han, como no lo podía llevar a la estación de policía, lo llevó a casa de un amigo suyo, Shaka no tuvo corazón para decirle la verdad a Han, eso… lo tendrían que hacer Shun y él juntos…
- Mmm? – el peliverde alzó la mirada y una nueva lágrima bajó por su mejilla, Shaka lo abrazó y besó sus cabellos
- Te traje un café, quieres beber un poco?, no has comido nada en horas – Shaka acarició la mejilla de Shun que se incorporó un poco, estaba sentado en una se las sillas de espera en la estación de policía, usaba un enterizo naranja, era la ropa que la policía daba usualmente a los criminales, pero eso a Shun no le importaba en lo más mínimo, su ropa estaba manchada de sangre y se había convertido en evidencia
- No quiero nada… a dónde fuiste?
- Fui a buscar a Han, llamaron de la escuela – respondió Shaka en un susurro
- Han?, dioses… me olvidé de Han… cómo pude olvidarme de Han???, lo tengo que ir a buscar – Shun se puso de pie de un salto pero se mareó, Shaka lo abrazó sosteniéndolo y volviéndolo a sentar
- Ya lo fui a buscar yo y lo dejé en casa de su amigo Sam, no le conté lo que pasó, pensé que eso debíamos hacerlo juntos
- Mi pobre niño… su papá… morir así… de esa forma, Ikky… Ikky no se lo merecía…
- No, no se lo merecía, pero podemos omitirle todos los detalles a Han, podemos decirle que su papá murió en un accidente o algo, él es muy pequeño para entender todo lo que pasó, ya luego cuano sea mayor se lo podremos explicar o algo… rayos… yo aún no lo logro entender del todo – dijo el rubio y sonaba frustrado, Ikky era uno de sus mejores amigos y estaba muy consternado por las condiciones de su muerte
- Fue mi culpa… - dijo Shun y lloró con más fuerza
- Shun… cómo pudo haber sido culpa tuya?, tu no tuviste nada que ver en esto – Shaka limpió las lágrimas del rostro de su amado y le sonrió con tristeza, esta no era la primera vez en esa noche que Shun decía que era su culpa
- Yo… yo me fui de la casa, y Shyru… yo… no estuve pendiente de él, no estuve ahí para él, y él… enloqueció y mató a mi hermano… es mi culpa Shaka… fui muy egoísta al haberme ido de la casa así, todo esto es mi culpa… todo… todo… - Shun escondió su rostro en el pecho de su amante y lloró con fuerza, Shaka acarició sus cabellos y lo abrazó de mejor manera al decir:
- Te equivocas Shun, nada de esto es tu culpa
- Si lo es… si yo hubiera estado allí… si yo hubiera estado pendiente de él como lo estuve todo este tiempo yo… si yo me hubiera dado cuenta de lo que pasaba con Shyru… nada de esto habría pasado, mi hermano estaría conmigo… mi hermano… – las palabras de Shun venían cargadas de dolor, Shaka lo miró con ternura, era lógico que Shun se culpara a sí mismo, usualmente las personas de buen corazón se culpaban de todo, y este caso no iba a ser la excepción
- No amor… esto no es tu culpa, mírame y escúchame muy bien, tu eres responsable únicamente por tus acciones, lo que el resto de personas sobre la faz del planeta haga, no es ni tu culpa ni tu responsabilidad, Shyru está loco, así tú te hubieras dado cuenta de lo que pasaba con él, nada hubiera impedido que lo que pasó anoche, eventualmente pasara, no te tortures así Shun – Shaka besó la mejilla de su amante, Shun tenía los ojos enrojecidos de tanto llorar
- Eso tú no lo sabes
- Si lo sé… Shyru estaba obsesionado con Seiya, lo hubiera buscado hasta encontrarlo y lo hubiera matado sin importar los obstáculos que hubiera en su camino
- Y mi hermano?
- Lastimosamente tu hermano amaba a Seiya, y estaba a su lado, el amor es así e Ikky fue una víctima de las circunstancias, él amaba a Seiya así como yo te amo a ti y estoy a tu lado, ni él ni nadie pudo suponer que Shyru haría lo que hizo, Ikky fue daño colateral, y no sabes cómo lo siento Shun, no sabes cómo… él era mi amigo y yo lo quería mucho, pero no puedo permitir que tú te culpes por su muerte, tú no eres el culpable
- Seiya si… Seiya si tuvo la culpa de todo esto – dijo Shun con rabia entre sus lágrimas
- Tampoco él tuvo la culpa – respondió Shaka con toda la paciencia que pudo demostrar en ese punto, no era bueno antagonizar con Shun pero… Seiya también había muerto, si algo de culpa tuvo pues… ya la expió
- Si no hubiera sido tan cobarde de desaparecer como desapareció cuando lo hizo, nada de esto hubiera pasado
- Eso no lo sabes Shun… la vida está llena de cosas que pasan, cosas que simplemente pasan sin que existan verdaderos responsables o culpables, muchas veces nos pasan cosas que no tienen razón de ser, a nosotros solo nos toca afrontar las consecuencias y escenarios que nos toca vivir, tenemos que vivir y hacer lo mejor que podamos con nuestras posibilidades
- Pero es que… Ikky era muy bueno, buena persona, buen padre, buen hermano, por qué Shaka?, por qué?
- Nadie merece morir como ellos murieron Shun, la vida no es justa
- No… no lo es…
***
El detective Shura caminaba por los pasillos de la estación, era temprano en la tarde y él estaba cansado, había estado despierto más de 24 horas y el cansancio le estaba pasando la factura, por lo que en esos momentos estaba tomando un café cargado. Pietro caminaba en dirección opuesta porque lo estaba buscando y sintió alivio al ver un folder en las manos de su colega
- Ya tienes los resultados por lo visto – dijo el peliazul estirando la mano para tomar el folder
- Si… ya los tengo y déjame decirte algo, este es uno de los casos más extraños que se han cruzado por mi escritorio, lo bueno de todo esto es que cerramos varios casos de una sola vez, lo malo es que dos inocentes murieron en el proceso - dijo el detective Shura mirando su reloj
- Por qué?, de qué casos hablas?
- De nuestro violador en serie, ya lo atrapamos
- Shyru Yamada es nuestro violador en serie?, rayos… no puedo creer que nuestras sospechas fueran ciertas, eran solo conjeturas, pero… cómo puedes estar tan seguro? – Pietro arqueó una ceja cuando preguntó esto
- Por esto… mira bien el cuello de la víctima, lo notas? – Shyru tomó de vuelta el folder y buscó entre las fotografías de las víctimas de la noche anterior hasta que encontró una fotografía en particular, era una foto de una marca que tenía Seiya Hyuga en su cuello, era la marca de un anillo o algo así, Pietro asintió y luego Shura sacó su teléfono, buscó hasta que encontró otra fotografía que se la enseñó a su colega, era la misma marca
- Y esta marca de dónde es?
- Tenma Koyama, la marca se me hizo familiar cuando la vi y me puse a buscar entre los últimos casos que estamos investigando y boom… coincidencia, mandé a Mu con fotografías de Shyru Yamada para que el muchacho lo identifique, y Mu me llamó hace unos minutos, Tenma identificó positivamente a su agresor, es él sin duda alguna – explicó Shura guardando nuevamente su teléfono
- Wow… este muchacho es muy parecido a la víctima, a Seiya Hyuga – DM frunció el ceño cuando dijo esto
- Todas sus víctimas lo son… eso es lo escalofriante del asunto, así que ese caso lo cerramos, el que tenemos que volver a abrir es el de la desaparición y muerte de la víctima, de Seiya Hyuga, ya mandé a pedir a la bodega de evidencias todo lo que tenemos de ese caso, van a volar cabezas en el departamento, lo declaramos muerto hace cuatro años Pietro – dijo Shura y sonó preocupado por ello
- Lo declaramos muerto en base al informe forense Shura, pero tienes razón, hay que abrir ese caso y notificar a su padre
- Ya lo hice, está en la morgue… de allí vengo – dijo el pelinegro con ojos tristes, el peliazul meneó la cabeza al susurrar:
- Dioses…
En la morgue, el serio empresario Aioros Hyuga estaba de pie y contemplaba el rostro de su hijo, el cuerpo estaba cubierto con una tela blanca hasta el cuello, al forense le pareció lo más prudente cubrirlo, su padre no toleraría ver las marcas que quedaron en su piel producto de la tortura a la que fue sometido. Aioros estuvo allí, de pie en silencio mirando el rostro sereno de su hijo por lo que le parecieron horas, Seiya parecía dormido pero no… la cruel realidad era otra…
- Sr. Hyuga, podría acompañarnos por favor?, tenemos que hacerle algunas preguntas – era el detective Pietro que había venido a buscarlo, habían muchas cosas que los detectives no encontraban sentido, tal vez el padre de este muchacho podría llenar los espacios en blanco de su historia
- Cuándo liberarán el cuerpo? – preguntó el serio hombre limpiando una lágrima de su mejilla
- Mañana en la mañana, el informe de la autopsia está listo – respondió el médico forense, el Doctor Aldebarán Maky había entrado a trabajar hacía tres años más o menos, a raíz de que el anterior forense se jubiló
- Muchas gracias, por favor notifíquenmelo lo antes posible, debo hacer los arreglos necesarios
- Entiendo, nuestra oficina le notificará
- Gracias… vamos… - Aioros asintió y puso su mano en la frente de su hijo, lo miró por una última vez y salió en compañía del detective del caso
Pietro llevó al empresario a una de las salas de la estación de policía, no era una sala de interrogación, era mas bien una de las salitas que se usaban para conversaciones un poco más informales, Aioros se sentó en un sillón y tomó el café que el Detective Shura le dio, ese café estaba horrible pero bueno… era una gentileza del oficial, no se lo iba a despreciar
- Sr. Hyuga, usted entenderá nuestra consternación, hemos recabado de nuestras bodegas el expediente original que habla de la desaparición de su hijo, y bueno… tenemos muchas inconsistencias en la información, tiene usted conocimiento de algo de esto? – Pietro fue el que habló y tenía en sus manos muchos folders abiertos en los que el castaño mayor pudo ver muchas fotografías y hojas de hojas de informes, al ver todo esto suspiró con cansancio
- Ustedes saben que el alcalde y yo somos muy buenos amigos verdad?, saben que he contribuido con su campaña y saben de mis conexiones con el gobierno, cierto? – preguntó el castaño dándole un sorbito a su café
- Si… pero eso qué tiene que ver con todo esto? – preguntó Shura arqueando una ceja
- Todo… tiene todo que ver, esta historia es algo extraña
- Le importaría decirnos lo que sabe?, es importante para poder cerrar el caso de su hijo – dijo Pietro sacando una libreta y alistándose a tomar nota, Aioros asintió y empezó a hablar, su tono era bastante sereno, aunque eso podría ser una máscara para ocultar su dolor
- Mi hijo… mi hijo es el muchacho más testarudo del planeta, él es todo lo que tengo y… yo solo quise lo mejor para él, siempre… eso deben entenderlo, eso deben comprenderlo – dijo Aioros y los dos detectives asintieron, la urgencia en sus palabras era algo extraña
- Usted sabía que él estaba vivo, verdad?
- Claro que si – respondió Aioros y meneó la cabeza, se puso de pie y empezó a caminar por la habitación, era como si estuviera tomando fuerza para decir lo que iba a decir
- Ok., empiece desde el principio – dijo el detective Shura mirando al castaño mayor que asintió nuevamente y dijo:
- Mi hijo estaba terminando la escuela secundaria, yo… sabía que él era gay, sabía que tenía una relación con uno de los chicos de su salón pero… no pensé que fuera con Shyru, ese mal nacido… ese desgraciado… él me robó a mi hijo – se notó la furia en el tono de voz de Aioros
- Por qué lo dice? – preguntó Pietro, esos detalles no estaban en los expedientes
- Porque… mi hijo cambió, yo tenía planeado mandarlo a estudiar en el extranjero, él se resistía pero, para complacerme, se presentó a varias pruebas y entró a varias universidades, tenía el mundo a sus pies pero… el amor… que es la madre de todas las estupideces, lo cegó, su amor por ese muchacho hizo que mi hijo se alejara de mí, de su familia, hizo que rechazara todo lo que yo tenía planeado para él y se fue de la casa
- Eso debió ser muy duro – dijo Shura mirando las fotos de los expedientes, Shyru había llenado las paredes de la casa de Ikky con fotos de Seiya, fotos en las que ambos eran muy jóvenes, probablemente aún estaban en la escuela
- Lo fue, al inicio pensé que mi hijo estaba siendo testarudo y que no volvería por unos días, pero los días se transformaron en semanas, meses, años finalmente, siempre estuve pendiente de él, siempre lo tuve vigilado y por mis investigadores privados supe que trabajaba a medio tiempo y hacía muchos tipos de trabajos para poder costearse la universidad, obtuvo una beca por su promedio y apenas lograba sobrevivir, a mí se me encogía el corazón cuando supe que en un accidente de motocicleta se rompió la pierna y tuvo que ir a un hospital público, yo soy dueño de una cadena de hospitales y mi hijo fue a un hospital público a hacerse atender, eso yo… ya no podía permitir
- Se acercó a él?
- Si lo hice, por orgullo no lo hice antes, no saben como me arrepiento de eso, en fin… al inicio mi hijo no aceptó verme, no respondía mis llamadas, no aceptaba el dinero que le enviaba o la ropa o lo que sea que le enviaba, hasta que llegué una mañana a su oficina, mi hijo había conseguido trabajo en una empresa cualquiera del centro de Tokio, él pudo haber manejado mis empresas pero… su testarudez y la mía lo complicaron todo, bueno… él tenía un pequeño cubículo en donde trabajaba, era un empleado más cuando a mi lado podía tener un imperio pero… como él no aceptaba nada de mí, yo opté por algo tonto, le dije que no había desayunado ese día y que el carrito de la esquina tenía los mejores cafés, él me miró extrañado pero no me echó de su oficina, aceptó el café y una rosquilla que le había llevado, dos a decir verdad, fue un momento sumamente incómodo porque ninguno de los dos supo qué decir, él fue el que rompió el hielo y charlamos un ratito nada más, hablamos de cómo yo estaba, de cómo estaba él, de Seika, mi otra hija, nos tomamos el café y me fui
- Ese fue el primer acercamiento? – preguntó DM
- Si… luego de eso, yo hice algo semanal de las visitas a mi hijo, me interesé en saber cómo estaba, no le ofrecí nada más porque sabía que él no lo aceptaría, pero el objetivo de llegar a él, lo estaba cumpliendo, al cabo de un par de meses, empezamos a mandarnos mensajes por correo electrónico, a llamarnos por teléfono, fuimos a almorzar algunas veces, comimos sánduches en el parque cuando él salía del trabajo al caer la tarde, a mi hijo le gustaban las cosas sencillas, yo estaba un poco más tranquilo porque lo veía tranquilo a él, podría decirse que estaba feliz, enamorado de ese imbécil al que en ese punto de mi vida, yo estaba dispuesto a aceptar en mi familia si eso me devolvía a mi hijo, cuando se lo hice saber, Seiya… mi Seiya me abrazó con fuerza, me dijo que eso era todo lo que él quería, que también me había extrañado mucho y muchas cosas más, eso parece tan lejano ahora…
- Pero… si usted estaba dispuesto a aceptar a Shyru en su familia, qué cambió?
- Así como yo tenía vigilado a mi hijo, mandé a seguir a su novio, él trabajaba en una galería en el centro y mis investigadores me trajeron noticias, él tenía un amante que trabajaba con él, me trajeron fotos, no pueden empezar a imaginarse la indignación que sentía, yo había perdido a mi hijo por un hombre que no lo merecía, por alguien que no valía la pena, pero ahora yo tenía las pruebas en mis manos para acabar con esa relación de una vez por todas, estaba dispuesto a ir a la oficina de mi hijo para desenmascarar a ese cretino pero… lo pensé mejor, Seiya no me creería, él pensaría que mis intenciones no eran buenas, se cegaría por su amor a ese imbécil en pensar que yo había manipulado las cosas de alguna manera para separarlo de él, así que… no lo hice de manera frontal pero lo guié, guié sus pasos para que él mismo lo encontrara en la cama con su amante
- Eso fue la noche que desapareció, verdad? – preguntó Shura mirando la declaración de Shyru, siempre fue una incógnita para él, el cómo Seiya dio con él en el departamento de su amante
- Si, mediante mis investigadores le hice llegar la dirección del amante de ese desgraciado, con engaños lo llevé hasta allí, le hice creer que el maldito de su novio le tenía preparada una sorpresa para él, hasta le hice llegar una copia de la llave de ese departamento, tuve que pagarle al encargado del edificio para que me la diera pero yo pensaba que valdría la pena si eso me devolvía a mi hijo y sacaba de nuestras vidas para siempre a ese maldito muchacho que llegó solo a traernos pesares
- Entonces fue usted, usted lo arregló, dioses… no se puso a pensar ni un momento en las consecuencias que eso traería? – el detective Shura meneó la cabeza al preguntar esto, Aioros sonrió de medio lado y se cruzó de brazos al responder:
- No… lo único que me importaba era quitarle la venda de los ojos a mi hijo, era mostrarle el tipo de persona que su novio era, él esperó llegar a su nuevo departamento pero… mi hijo llegó a aquel lugar y encontró a Shyru en la cama con su amante, él mismo me lo dijo
- Habló luego con él? – Shura frunció el ceño cuando preguntó esto, él recordaba muy bien el caso original y la insistencia de Aioros para encontrar a su hijo
- Si… mi hijo llegó a mi casa poco después del amanecer del día siguiente, me dijo que luego de salir de aquel lugar, caminó y caminó hasta que se le antojó un trago, fue a un bar y se encontró con un amigo suyo, pasó la noche en su casa y antes de que despertara se fue, se fue para no volver a la vida que había llevado por tantos años, mi hijo estaba indignado y destrozado en todos los sentidos, estaba desubicado y muy dolido
- Entonces su hijo siempre estuvo con usted? – DM pensó en todo el trabajo botado que les tocó llevar en ese caso, pensó en las horas que dedicaron a buscar a ese muchacho para ahora venirse a enterar que siempre estuvo en la casa de su padre
- Si, yo conseguí lo que quería, cuando él se vio necesitado de ayuda acudió a mí, él llegó a mis brazos y yo lo recibí con alegría, feliz de tenerlo en casa nuevamente
- Ok., eso lo puedo entender pero… si él estaba en su casa, por qué lo denunció como desaparecido?, por qué luego fingió su muerte?, por qué le ayudó a obtener una nueva identidad?, porque eso usted también le ayudo a hacer, verdad?
- Si… mi hijo estuvo deprimido algunos días, el fin de semana lo pasó prácticamente en cama y así estuvo, yo me estaba empezando a desesperar hasta que ese perro me llamó
- Shyru lo llamó a usted preguntando por Seiya?
- Si, yo estaba tratando de animar a mi hijo con un juego de ajedrez y no lo estaba consiguiendo, por eso cuando él escuchó con quien hablaba yo, me hizo señas, le colgué a Shyru de muy mala manera y ahí mi hijo me dijo que no quería que Shyru supiera que él estaba en casa, fue en ese momento en donde se le ocurrió a Seiya que quería dejar todo atrás pero hacerlo en serio, por eso me propuso que quería un cambio de nombre para que nunca lo pudieran encontrar, esa fue la condición que me puso para aceptar lo que yo le proponía – Aioros sonaba triste en este punto
- Qué le proponía?
- Un viaje, le propuse un viaje largo por el mundo, le propuse estudios en el extranjero, le propuse todo lo que ya antes le había propuesto pero… Seiya no quería saber es nada, hasta que Shyru me llamó, ahí fue que se decidió y me pidió que lo ayudara a desaparecer, y así lo hice
- Usted lo reportó como desaparecido y luego fingió su muerte… es que eso me parece por demás extremo, no le parece a usted?
- Si, pero le vi el sentido al ver a mi hijo sufrir, lo vi llorar y eso… eso me llegó, así que decidí tomar la justicia por mis propias manos, yo quería que Shyru sufriera también, que sufriera lo que yo antes sufrí cuando perdí a mi hijo, cuando él me lo arrebató y se lo llevó, yo sabía por mis investigadores que Shyru no paraba en sus intentos de buscar a mi hijo, así que me propuse complicarle la existencia, Seiya nunca lo supo, él estaba en mis fincas del campo con su hermana, lo mandé a que descanse y tome sol, a que monte a caballo y que se distraiga, para que empiece a olvidar, mientras yo arreglé sus papeles, y lo tuve todo listo, no fue fácil, además, tenía que esperar la oportunidad perfecta para declararlo muerto, eso fue lo más complicado de todo
- Ok., pero antes de eso, hubo un incidente que no pasó a mayores por falta de pruebas pero, fue usted fue el que intentó inculpar a ese muchacho de la muerte de su hijo? – Shura le mostró una fotografía de la billetera de Seiya y de su teléfono, habían rastros de sangre en ellos, Aioros las tomó y las miró con detenimiento para luego sonreír ligeramente
- Si en verdad lo hubieran encarcelado, mi hijo no estaría muerto ahora – respondió el castaño mayor devolviéndole las fotos al detective Shura
- Pero lo hizo usted?
- Si… lo hice yo, le pedí a Seiya muestras de sangre y cabellos antes de mandarlo a mi finca, si íbamos a fingir su muerte lo teníamos que hacer bien así que… cuando mi hijo se fue… a los pocos días me llamó mi hija a decir que Seiya había intentado suicidarse, yo viajé a la finca y me encontré a mi hijo en cama, con varios sueros conectados y muchas máquinas más, el médico que vive allí al cuidado de los trabajadores fue el que le dio los primeros auxilios, pastillas… había tomado un frasco entero de pastillas con la intención de quitarse la vida, ustedes podrán entender mi furia
- Y por eso usted trató de inculpar a Shyru Yamada de la supuesta muerte de su hijo?
- Si… sé que hice mal pero también sabía que eso no llegaría a nada, no habían pruebas suficientes, yo solo quería asustarlo, eso es todo, quería que sufra… cuando ustedes tengan hijos lo entenderán
- Esa no es justificación Sr. Hyuga
- También sé eso, pero es lo único que les puedo ofrecer
- Ok., luego de eso, qué pasó después?
- Bueno… puse a Seiya en terapia y eso lo ayudó un poco, pero lo que en verdad lo ayudó fue el viaje, como yo ya tenía los papeles de su nueva identidad, lo mandé a Italia con Seika, se iban de tour por Europa y yo los alcancé luego, una vez que mi hijo se fue de Japón me dediqué a colocar vallas, hice los anuncios que salieron por la televisión y bueno… esa fue la época en la que hablé con Lune, él me ayudó, desde su oficina hablamos con el médico forense, esa fue la clave de todo, como Lune siendo alcalde, era muy influyente, él consiguió que aquel doctor me ayudara, cuando se dio ese accidente, había un cuerpo al que no se pudo identificar, no había posibilidad de nada, era un muchacho desconocido el que había muerto, esa fue la oportunidad que estaba esperando, y así fue como fingimos la muerte de mi hijo
- Por eso el forense se retiró poco después, verdad?
- Yo lo compensé generosamente, ahora vive en alguna playa supongo yo, la verdad no me interesa, él le dio la libertad a mi hijo y le estaré por siempre agradecido
- Se da cuenta que infringió y rompió varias leyes?
- Si, lo sé, pero en este punto ya nada me importa, mi hijo murió… ya nada importa…
- Muy bien… y luego que pasó?
- Mis hijos viajaron por el mundo por un año más o menos, luego Seika volvió, acabó su carrera y empezó a trabajar en mis empresas, Seiya se quedó en Inglaterra, fue a la universidad allá, yo lo visitaba frecuentemente pero hace casi ocho meses me dijo que quería volver a casa, yo lo recibí con alegría, de haber sabido lo que iba a pasar… no hubiera dejado que regrese
- Él volvió hace ocho meses?
- Si… más o menos, cuando estuvo en Inglaterra estudió una licenciatura en arte y educación, mi hijo siempre quiso ser maestro así que… compré una escuela para que él pudiera trabajar en lo que siempre quiso trabajar sin problemas, el director es muy buen amigo mío, y así logré que mi hijo volviera a casa sin levantar dudas o sospechas, Tokio es una ciudad inmensa, pero para su seguridad Seiya se tiñó el cabello, se puso lentes de contacto, quería cambiar un poco su apariencia y todo funcionó de maravilla los primeros meses, luego supe que estaba involucrado con alguien
- Ikky Takamura…
- Si… Ikky Takamura, en defensa de ese muchacho puedo decir que él realmente amaba a mi hijo, él guardó su secreto, compartió su vida con él, mi Seiya amaba al hijo de Ikky, lo llevó a mi casa varias veces y le estaba enseñando a montar a caballo, por primera vez en años vi a mi hijo completamente feliz, yo… estaba feliz por él, Seiya hasta me habló de planes futuros con Ikky, yo le había ofrecido una casa y un muy buen trabajo en mis oficinas en Roma, Seiya dijo que lo pensaría, si ellos se hubieran ido cuando yo se los propuse… nada de esto hubiera pasado, todo estaba funcionando de maravilla hasta que ese demonio lo encontró y tomó su vida…
- Sr. Hyuga, espero que se dé cuenta que todo lo que nos ha dicho, lo ha hecho de manera oficial, se abrirá la investigación correspondiente por la falsificación de documentación pública, intento de inculpar a alguien más en un delito y demás cargos
- Hagan señores lo que deban hacer, que yo haré lo que deba hacer, puedo irme por ahora?, debo hacer los arreglos para el funeral y el crematorio de mi hijo
- Si Sr. Hyuga, pero por favor, no salga de la ciudad
- No lo haré, ya no tengo a dónde ir…
El castaño mayor se puso de pie, estrechó la mano de todos los presentes y salió sin más de la estación de policía, Shura aún no podía creer lo que había escuchado, pero… el amor de un padre a un hijo era capaz de todo
- Aún nos falta hablar con los testigos – dijo Death Mask mirando por la ventana de la salita, en el pasillo un muchacho de cabellos verdes lloraba en los brazos de un hombre rubio que lo sostenía con ternura
- Esto es lo que no me gusta de mi trabajo – respondió Shura saliendo de la salita, tenían que hablar con Shun Takamura ahora…