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VIDAS CRUZADAS por crystalwall

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Notas del capitulo:

Hola, les traigo el penúltimo capítulo, aquí se acaban de develar los misterios del fic, espero que les guste lo que viene

Capítulo 32.- La amarga realidad

 

Shun entró a la salita acompañado de Shaka y se sentó en uno de los sillones, sus ojos rojos resaltaban en su blanco rostro, el solo mirarlo provocaba ternura

- Le podemos ofrecer algo? – preguntó Shura entregándole un paquetito de toallitas de papel, Shun lo tomó y meneó la cabeza

- Tenemos que hacer esto ahora? – preguntó Shaka mirando a su amante, Shun no estaba en condiciones de dar ningún tipo de declaración, él mismo le había dado algunos calmantes y por eso Shun estaba aletargado y dócil, además Shaka había hablado por largo rato con el detective Mu, le había contado todo lo que Shun le había contado a él sobre el tema, esperaba que eso fuera suficiente, no quería someter a Shun a un interrogatorio largo, el pobre muchacho de ojos verdes no lo resistiría

- Es preferible hacerlo ahora, sé que han sido unas horas terribles para ustedes y lo que queremos es poder dejarlos ir para que descansen y… puedan hacer los arreglos necesarios para el funeral de… la víctima

- Muy bien, qué más podemos decirles? – preguntó Shaka en tono calmado, Shun estaba apoyado en él y tenía la mirada perdida, miraba la puerta como si esperara que su hermano entrara por ella

- Bueno… los informes preliminares están bastante completos, todo cuadra con la información que se dio a los oficiales en el sitio, solo tenemos algunas preguntas sobre Seiya Hyuga – dijo Shyru tomando un folder en sus manos

- Qué con Seiya? – preguntó Shun, su voz sonaba ahogada

- Sabía usted que él no murió cuando se lo declaró muerto hace más de cuatro años?

- Lo supe hace un par de semanas nada más, yo… nunca lo supe, solo sabía que mi hermano tenía un nuevo novio pero no me lo había presentado, lo descubrí por accidente, qué tiene que ver eso con todo esto?

- Si usted no lo sabía, su esposo, el Sr. Hyoga Nara no lo sabía tampoco? – preguntó el detective Shura

- No lo sé, supongo que no

- Y Shyru Yamada?

- Tampoco lo sé, perdí el contacto con ambos hace mas de un mes, no sé qué es lo que ellos saben o no saben, eso tiene que preguntárselo a ellos, siento no poder ayudarle – el tono de Shun era seco y hasta molesto, Shaka entendía muy bien la razón, Shun culpaba a Seiya por la muerte de su hermano

- Bien, necesitamos hablar sobre Shyru Yamada, hemos hablado con su psiquiatra y él dijo que usted era la persona que principalmente veía por él, es eso cierto? – DM hizo esta pregunta pero se arrepintió de hacerlo porque Shun convulsionó y lloró con desesperación en los brazos de Shaka, el rubio abogado se mostró muy molesto, a él le había tomado horas calmarlo un poco

- Por favor señores, eso ya lo declaré yo, debemos repetirlo?, en serio? – Shaka miró a Shura que meneó la cabeza y se sintió muy mal, el rubio abogado tenía razón, no había motivo para hacerlo ellos ya tenían una declaración firmada

- Tiene usted razón Sr. Mahan, si no tienes nada mas que decir Pietro, yo creo que debemos dar por terminado esto – Shura miró significativamente a su colega que asintió levemente y respondió:

- Eso es todo Sr. Takamura, sentimos el haberlo retenido tanto tiempo aquí en la estación, le molestaría leer la declaración que nos dio su abogado? – preguntó DM extendiéndole el papel a Shun que lo tomó pero ni siquiera lo vio y al devolvérselo respondió:

- No necesito leerla, yo apoyo y confirmo lo que Shaka haya dicho, él lo sabe todo, yo le conté todo lo que pasó, todo lo que yo sé, él lo sabe todo…

- Muy bien, Sr. Takamura, siento mucho su pérdida – dijo DM haciendo una señal de respeto con la cabeza, la cual Shun correspondió

- Somos libres de irnos? – preguntó Shaka poniéndose de pie y ayudando a Shun a hacer lo mismo

- Si…

- Y Hyoga?, y Shyru?, a dónde lo llevaron a él? – Shun no había estado pendiente de nada las últimas horas, no sabía lo que pasó con nadie la verdad, ahora como que parecía que estaba realmente consciente, estaba saliendo del shock inicial

- El Sr. Hyoga Nara va a ser entrevistado en este momento y el Sr. Shyru Yamada fue llevado a los separos de la estación, pero tuvimos que ponerle una camisa de fuerza, se puso violento hace unas horas, ahora está sedado pero… no ha dejado de gritar

- Bien… una camisa de fuerza suena bien, espero que lo manden a una de esas instituciones mentales, a la cárcel, aunque sería mejor que se pudra en la quinta paila del infierno – dijo Shun con furia

- Mejor vámonos Shun, tenemos que ir a buscar a Han – Shaka abrazó al peliverde y empezó a caminar con él a la salida, no era conveniente que Shun lanzara amenazas al viento

- No lo podemos llevar al departamento de Ikky, no puede ver eso, se traumaría

- Lo sé, lo llevaremos a nuestra casa, le compraremos ropa nueva hasta que podamos entrar a su departamento a sacar lo que necesitemos de él, poco a poco saldremos de esto Shun, por lo pronto vamos a verlo que debe estar muy angustiado

- Han… dioses… qué vamos a hacer con él?

- Le vamos a dar todo el cariño que necesita en estos momentos, lo vamos a superar juntos, tranquilo Shun… saldremos adelante… - Shaka se despidió de los oficiales con una seña de cabeza y llevó a Shun por el pasillo de la estación de policía, lo que se les venía a ellos era muy triste…

 

El detective Shura fue a llamar al otro testigo, Hyoga Nara, el rubio había estado de pie frente a la morgue, todo el tiempo había esperado allí, no se había movido en varias horas, y cuando los detectives lo llamaron no se quiso ir, Seiya estaba allí y no quería dejarlo solo.  De cualquier manera Hyoga entró en la salita y se sentó pesadamente en uno de los sillones, el detective Pietro le dio un café y se sentó a su lado, estuvieron en silencio unos minutos hasta que Hyoga habló y lo primero que dijo desubicó a unos y confirmó sospechas de otros

- Es su culpa… todo esto es su culpa…

- Por qué lo dice Sr. Nara?, culpa de quién? – preguntó Shura con interés

- De Aioros, porque él hizo esto, porque esto es su culpa, porque… porque él lo causó… y ahora Seiya está muerto, por qué no me buscó?, por qué no me lo dijo?, por qué no me dijo que estaba vivo?, por qué???, yo lo hubiera ayudado, yo… yo hubiera hecho todo por él, yo…  – el rubio muchacho hablaba con desesperación y apretaba los puños

- Entonces usted no sabía que Seiya Hyuga estaba vivo? – preguntó Shura aunque la respuesta era más que obvia

- No, yo no lo sabía… su padre si… él mismo me lo dijo en la morgue… él siempre lo supo… desgraciado…

- Y Shyru Yamada?, él lo sabía?

- Él lo encontró, no?, no tengo idea de cuándo lo supo, no… no lo sé… - Hyoga se encogió de hombros cuando dijo esto, lo que menos quería era pensar en Shyru

- Sabe… hemos estado hablando mucho con el psiquiatra de Shyru, hemos escuchado muchas historias algo extrañas que le han pasado a través de los años, hay cosas que su psiquiatra no se explica – el detective Pietro tenía en sus manos un folder algo gordito, lo había revisado la noche anterior con el psiquiatra de Shyru y tenía muchas preguntas, pero fue Mu el que trajo una teoría que querían comprobar, los criminalistas habían entrado al departamento que compartían Hyoga y Shyru en busca de pistas y habían encontrado cosas extrañas, muy extrañas

- Y creen que yo tengo la explicación? – preguntó Hyoga muy molesto

- Puede ser, Hyoga… tenemos una preguntas que queremos hacerle, y lo primero que queremos saber es… qué es esto?, y por qué estaba en su habitación? – el detective Pietro sacó varias funditas que contenían varias pastillas de colores varios y formas diversas, Hyoga palideció al ver eso en las manos de los detectives

- Eso no es mío… yo no tomo pastillas… y qué rayos hacían ustedes urgando entre mis cosas?, no que iban a chequear las cosas de Shyru?

- Nuestra orden de cateo cubre el departamento entero, y por lo que vimos pues si… sabemos que usted no toma pastillas pero… hicimos las pruebas correspondientes y… casualmente estas píldoras son antisicóticos y antidepresivos, hemos hablado con el médico psiquiatra de Shyru Yamada y… hemos comprobado que esta medicación es la que le ha sido recetada a él – el tono del detective Pietro era tranquilo, pero eso ponía mucho más nervioso a Hyoga que empezó a jugar con sus manos al preguntar:

- Y eso que tiene que ver conmigo?

- Que encontramos esto en su departamento, pero no en la habitación de Shyru, sino en la suya, nos quiere explicar que hacía la medicación del Sr. Yamada en su recámara?

- No lo sé… yo no la puse ahí

- Hemos tratado de hablar con el Sr. Yamada pero nos ha sido imposible, su médico ha venido y realizó una evaluación preliminar, le hicimos pruebas de sangre y hemos podido comprobar que tiene elevados niveles de anfetaminas en su sangre, su sistema nervioso central estaba completamente alterado y por eso estaba tan violento, ahora está sedado pero hemos encontrado esto entre sus ropas – el detective Pietro sacó un frasquito que estaba en una funda y tenía pastillas dentro, Hyoga tragó saliva cuando lo vio

- Insisto… eso que tiene que ver conmigo? – preguntó Hyoga pero estaba más blanco que un papel

- Sus huellas están en el frasco

- Mis huellas?

- Si, recuerda que nos dio una muestra de ADN y sus huellas dactilares cuando estábamos en la primera investigación por la desaparición de Seiya Hyuga?, esos datos se quedan en nuestro sistema, ahora… dígame Hyoga porque esto yo no lo entiendo, por qué cambió la medicación de su amigo?, por qué contribuyó a que Shyru Yamada llegue a un estado psicótico tal, que desencadenó una tragedia?

- No… yo no… yo nunca… Seiya… - Hyoga se llevó las manos al rostro y se escondió prácticamente de las miradas de los detectives

- Creemos que su intención nunca fue la de hacer daño a Seiya, pero… qué pasó con Shyru Yamada?

- Él está loco, eso es lo que pasó, él está loco… loco… - Hyoga estaba peleando las lágrimas de rabia, porque era ira lo que se notaba en su rostro, además que estaba apretando los puños

- No necesariamente, hasta hace algunas semanas él llevó una vida bastante normal, tenía trabajo en el que le iba bastante bien, compartía el departamento con usted y su esposo, todo estaba bien en su vida – dijo Shyru mirando el certificado que le había llegado del dueño de la galería en donde Shyru trabajaba

- Supongo que sí, eso que tiene que ver conmigo? – preguntó Hyoga molesto

- Bueno… el deterioro que sufrió Shyru Yamada, no pudo pasar por desapercibido por las personas con las que vivía, usted y su esposo – dijo Pietro sentándose en el mueble directamente frente a Hyoga y mirándolo con intensidad

- Mi esposo se fue de la casa hace tiempo ya, nos vamos a divorciar

- Y eso fue más o menos al mismo tiempo que Shyru Yamada dejó de ir a trabajar, dejó de ir a su departamento y se desapareció, verdad?

- No sé… supongo que si…

- Supone que si?, no se dio cuenta?

- Mire detective, estaban pasando cosas más importantes en mi vida como para que yo le haya puesto atención a ese estúpido, él era el caso de caridad de Shun, no mío, y cuando Shun se fue de la casa me dejó todos los problemas, eso incluía a Shyru, si alguien tiene la culpa de todo esto, es Shun – respondió Hyoga con ira

- Ya hablamos con él

- Fantástico, asumo que les dijo que mientras él estuvo divertidísimo revolcándose con el amante ese que tiene, me dejó a mí para que me hiciera cargo de todo, no?

- No… nos dijo que trató de localizar a Shyru varias veces, que lo intentó llamar pero que nunca lo encontró, que lo fue a buscar a su trabajo solo para enterarse de que no había ido en varios días, además nos dijo que usted lo golpeó y que por eso se fue de la casa – respondió el detective Shura mirando su libreta de apuntes

- Ese es un desgraciado, cómo pudo decir todo eso de mí? – Hyoga se puso de pie y estaba fúrico en ese punto

- Bueno, no fue Shun Takamura el que nos dijo eso, fue Shaka Mahan, su abogado – aclaró Pietro mirando al rubio que hizo una mueca de asco al pensar en ese abogado de cuarta que se había interpuesto en su matrimonio

- No me sorprende, esos dos son tal para cual

- Pero eso no es de lo que queremos hablar con usted, necesito que nos aclare lo de este asunto – Pietro volvió a tomar las funditas con las pastillas y el frasco que tenía las anfetaminas, Hyoga miró las pastillas y se cruzó de brazos al decir:

- Está bien… admito que las anfetaminas son mías, si Shyru las tomó de mi velador y me cambió las pastillas, eso no es ni mi culpa ni mi problema

- No?

- No… lo que él haga a mí no me importa en lo más mínimo – respondió Hyoga con violencia

- De ser así, por qué lo acompañó varias veces al médico?, por qué permitió que viviera en su departamento por tantos años?, por qué lo acogió bajo su cuidado?

- Yo no lo hice!!!, ese fue Shun, ya les dije que Shyru era su caso de caridad, no el mío

- Vaya… a usted no le agrada el Sr. Shyru Yamada entonces?, no es su amigo?

- Claro que no, ese es un perro que debe morir bajo un puente o algo, yo no sé por qué no se ha suicidado todavía, si lo hubiera hecho… Seiya estaría vivo… Seiya no… - la voz se le quebró a Hyoga que se sentó otra vez en el sillón, DM arqueó una ceja, iba a hablar pero Shura le hizo una pequeña seña con la mano para callarlo, se acercó a Hyoga y se acunclilló delante suyo al decir:

- Yo sé y entiendo por lo que estás pasando, lo comprendo muy bien

- Ah sí?

- Si… sé lo duro que es amar sin ser correspondido, en especial cuando la persona que amamos, ama a quien no es digno, es eso verdad?, Shyru no era digno de Seiya? – Shura estaba siguiendo una corazonada al preguntar esto, algo le había dicho Shaka y la verdad… de ser lo que él suponía, le daba motivos a Hyoga para quitar de su camino a Shyru, o de vengarse de él cuando Seiya murió, Hyoga se quedó en silencio unos momentos antes de suspirar y recostarse en el sillón, se llevó las manos a la cara y respondió:

- Claro que no era digno de Seiya, pero él… él lo amaba ciegamente, yo nunca pude entenderlo, Shyru siempre fue un imbécil

- Tú los conocías a ambos desde el colegio, verdad?

- Si… yo conozco a Seiya desde el jardín de niños, él fue… él siempre fue mi mejor amigo

- Pero no era solo eso verdad?, tú lo amabas cierto?

- Si… yo lo amaba, siempre lo amé, él fue mi primer amor, mi primera ilusión, mi primer beso, mi primer todo…

- Seiya fue tu novio en algún punto?

- No… nunca llegamos a eso, solo nos besamos un par de veces, éramos unos niños y todo era nuevo para nosotros, él siempre fue especial para mí y yo… yo me sentí en las nubes cuando supe que a él también le gustaban los chicos, yo… yo pensé que él me correspondería y  todo iba bien hasta que Shyru llegó a nuestro colegio – se notaba la emoción inicial con la que Hyoga habló, pero cuando mencionó a Shyru… su tono se volvió amargo, y fue notorio que apretó los puños, el rubio estaba dejando salir su frustración, lo que aprovechó Shura para seguir preguntándole sobre la historia y sus motivos

- Por qué?

- Porque Seiya lo vio y se deslumbró, él venía de un colegio estatal de mala muerte con una beca, era muy inteligente y lo supo envolver, lo enamoró y él… él me olvidó

- Seiya te hizo a un lado?

- No del todo, yo siempre fui su mejor amigo y… tuve que ver como se enamoraba de ese imbécil, tuve que soportar todas sus pláticas en donde me contaba como lo amaba y cómo lo hacía sentir, me contaba de sus besos, de sus caricias, y yo… yo me moría de la rabia y de los celos, Seiya debía ser para mí, no para él

- Entiendo…

- No, no creo que lo haga, sabe usted lo que es escuchar al hombre que ama, contarle de lo bueno que es su novio en la cama?, de cómo le hace ver luces y estrellas?, no… eso es tortura…

- Y no hiciste nada al respecto?

- No, qué podía haber hecho?, Seiya lo amaba y yo… yo solo quería que él fuera feliz así no fuera conmigo, yo lo amaba de a de veras, no como el desgraciado hijo de puta ese

- Ok., tú lo amabas pero nunca hiciste nada al respecto, eso lo puedo entender y respetar, tu te mantuviste al margen, eso es noble de tu parte

- No, no fue noble, fue estúpido, yo… debí tener más cuidado, debí darme cuenta antes…

- Darte cuenta de qué?

- De que Shyru tenía un amante, si lo hubiera sabido… si lo hubiera sabido… - se podía notar claramente el remordimiento en su voz, esto era algo en lo que Hyoga pensaba todos los días, si él lo hubiera sabido, le hubiera roto la cara a Shyru y hubiera apoyad a Seiya para conquistarlo después, pero no… Aioros había intervenido e Ikky se había quedado con él, esa era otra cosa que no podía creer, Ikky???, en serio???

- Por eso resientes a Shyru?, porque él engañó a Seiya…

- Con su engaño, yo lo perdí, Seiya se fue, por alejarse de él se alejó de todos nosotros, él se fue y… mi vida dejó de tener sentido

- Pero tú tenías novio en ese entonces, te casaste con él, con Shun Takamura

- Shun… Shun… yo nunca lo amé, nunca pude amarlo, él estaba bien para un revuelque, era dulce y me amaba, me casé porque… me daba igual con quien me casara, si no era Seiya, la persona con la que me casara carecía de importancia, Shun es atractivo y… la verdad me daba igual, siempre me dio igual – Hyoga se encogió de hombros y movió la mano dando a entender que no era importante, el detective Shura frunció el ceño, a él le agradaba el muchacho de cabello verde y le parecía una buena persona, lo había entrevistado algunas veces y tenía la impresión de que era buena persona, el hecho de que su esposo nunca lo amara le parecía muy triste

- Y Shyru?, por qué le diste cabida en tu casa luego de que Seiya desapareciera? – continuó Pietro con las preguntas

- Porque Shun insistió, yo lo quería echar pero Shun no lo permitió, y ahí se quedó, en mi casa, bajo mi techo…

- Y ahí viste la oportunidad de cobrarte lo que él te había arrebatado, verdad?

- Él tenía que sufrir, su crimen no podía quedar impune – respondió el rubio en tono sereno

- Qué hiciste con él?

- Hice que recordara a Seiya, de todas las formas que pude, quería hacerle creer que Seiya estaba vivo y la verdad no fue difícil, yo conocía mucho mejor a Seiya de lo que él pudo llegarlo a conocer, así que… arreglé su departamento y le dejé pistas varias veces, le hice flan un par de veces, acomodé su ropa, yo… tenía las llaves de la casa de Shyru porque sabía el lugar en donde Seiya tenía esas llaves así que… me hice una copia para mi y le dejé varios regalitos, quería que pensara que el fantasma de Seiya o el mismo Seiya lo estaba atormentando, fue extremadamente fácil hacerlo y me daba un retorcido sentido de satisfacción el verlo retorcerse de dolor, es lo menos que se merecía ese desgraciado, es lo menos que se merecía…

- Y luego?

- Luego… enloqueció de a de veras, luego ya no necesitó mi ayuda para acordarse de Seiya, muchas veces lo escuché hablando solo, imitaba la voz de Seiya, hablaba con él, tuvo muchos bajones depresivos, así que Shun lo llevó al médico y empezó terapia y tratamiento con medicinas, estuvo bien por algún tiempo pero… mientras su vida iba mejorando, la mía iba empeorando, mi relación con Shun se estaba yendo al diablo, no me dieron el ascenso que esperaba en mi trabajo, yo… me sentía vacío así que empecé a beber… empecé a salir… pero nadie, ninguna de las personas con las que me relacioné se comparaba a Seiya… su recuerdo siempre estuvo presente en mi vida así que… me harté de todo, necesitaba un desahogo

- Y Shyru fue ese desahogo para ti?

- Si… lo fue…

- Qué le hiciste?

- Un día yo salía de un bar y lo vi caminar en la oscuridad, parecía que le dolía la cabeza porque tenía la mano en la cien, me acerqué un poco porque quería verlo mejor y lo escuché murmurar, así que lo seguí hasta que llegó a su antiguo edificio y entró a su antiguo departamento, estuvo allí un par de horas y salió, cuando lo hizo yo entré, y allí pude comprobar lo loco que en verdad estaba

- Por qué?, qué hay en ese lugar?

- Ustedes ya lo vieron, el departamento de Ikky… es lo mismo… las paredes estaban llenas de fotos de Seiya, dibujos, cartas, notas de periódicos, su obsesión era tal que dominaba su vida, Shyru presentaba una máscara de serenidad y eso le permitió seguir funcionando en el mundo real pero… estaba al borde, a punto de estallar

- Y tú lo ayudaste?, a estallar?

- Solo le di un empujoncito, cambié su medicación y él… enloqueció, yo quería que se suicidara, eso era lo que yo esperaba pero… las cosas no funcionaron así

- No… en vez de suicidarse, buscó hasta encontrar a Seiya Hyuga y le hizo esto: - Pietro fue sacando las fotografías que el médico forense había tomado en donde se podían apreciar de mejor manera las consecuencias de la tortura a la que el castaño había sido sometido, también sacó las fotografías de la escena del crimen, Hyoga se puso de pie y se cubrió el rostro con las manos, él no podía ver aquello, no tenía corazón para ello

- Por favor no… ya no más

- Sr. Nara… esto es lo que ocasionó su odio, esto es lo que ocasionó su sed de venganza

- Shyru lo mató, Shyru lo hizo… no yo… no yo…

- Usted no fue el actor material del crimen pero… su mano está presente en todo esto, la condición de Shyru Yamada es directo resultado de su intervención, ahora… no necesariamente le podemos encarcelar por cambiar la medicación de Shyru, o… si logramos armar un caso en contra suya, dudo que pase mucho tiempo en la cárcel, pero mire bien… mire bien su obra… mire bien lo que su amor, sus celos, su rabia provocaron, mire los resultados, mire a Seiya… mírelo y no lo olvide jamás

 

El detective Pietro le dejó las fotografías en la mesita y salió de la sala con los demás miembros de la policía, Hyoga quiso salir inmediatamente pero la puerta estaba cerrada, el golpeó con desesperación pero nadie le abrió, Pietro simplemente le señaló la mesita y luego de mucho rato, Hyoga se sentó nuevamente en el sillón y miró las fotografías una por una, una por una… La vida no le alcanzaría para arrepentirse de lo que había hecho, cuando salió de la estación de policía caminó por la calle sin rumbo fijo, todo había acabado para él, ya nada tenía sentido ahora… él había sido el causante de todo lo que había pasado, por su culpa, su egoísmo y su estupidez, la persona que más había amado en la vida había muerto de la manera mas horrible, ya nada importaba, él ya no importaba, él ya no era nadie, él ya no era nada, nada…

 

Notas finales:

Solo falta el epílogo, todos los misterios han quedado develados, fue Hyoga el que le dio una ayudadita a Shyru y todo eso desencadenó en tragedia

Ahora solo falta el epílogo, espero que les guste en lo que acaba el fic, Muchas gracias por leer y nos vemos en el capitulo final del viernes, saludos, bye


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