Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Let me heal yor wounds. por IamBetterAlone

[Reviews - 54]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

Jelou! Pide actualizar!:D Tenía la inspiración~ aunque no es muy largo:c pero juro que si me elijen (o es eligen(?) como presidenta haré los capítulos más largos y con más lemon!

Publico: Seeh! Yooh!

Oqno sdkjhas, pero en serio. Si trato de hacerlos más largos pero mi mente no da para más!

La mañana ya despertaba en Suna, dejando ver como tres mapaches emprenden su largo viaje a Konoha para salvar a su hermanito menor.


—Kankurō deja eso. —Gaara reprimió a su hermano, que parecía en ese momento un molesto infante.


—¡No! ¡Es mi montón de basura favorito! —Temari puso su pata en la cabeza, tratando de evitar el dolor de cabeza que le provocaba.


—Habrá más en Konoha, puedes encontrar un nuevo montón para tu colección. —Como por arte de magia el mapache obedeció y dejo el montón donde estaba antes, en el piso donde lo había encontrado cinco minutos antes.


—Entonces, ¿ya nos vamos? —Gaara preguntó mirando el camino que tenían por delante.


—Así es, vámonos Gaara. Kankurō. —La rubia sonrió mirando el cielo.—Vamos a recuperar a nuestro hermanito. ¡No puedo esperar para abrazarlo!


—No puedo esperar para explicarle más sobre los Tanuki y los Kitsunes. —Dijo Gaara con una sonrisa leve.


—Y yo para... Para... ¡para mostrarle la basura!


—¡Kankurō! —Gruñeron sus dos hermanos.


                               ~En Konoha~


La cálida mañana también también se hacía notar después de la tormenta de ayer. Y Naruto comenzaba a despertarse después de una buena noche de descanso.


—Yawn... Qué bien dormí... —Se bajó de un salto de un árbol y se sacudió un poco la humedad de su cuerpo antes de estirarse y volverse a convertir en humano.


—Hola. —Al igual que ayer sintió el toque del desconocido, pero esta vez no saldría corriendo, a pesar de tener miedo.


—¿Q-Quién eres tú? —Trató de decir sin sonar tan asustado.


—Eso mismo me gustaría saber. ¡¿Quién eres tú?! ¡Lastimaste a Akamaru!


—¿Akamaru?, ¿el perro blanco?


—¡Ese mismo!


—¡Pero ese perro me insultó!, ¡no tiene derecho a hacerlo! —El rubio se puso a la defensiva frente al moreno con olor a perro. No le traía nada bueno.


—Qué va. No te preocupes, solo fue una vez. Akamaru a veces puede exagerar. Soy Inuzuka, Inuzuka Kiba. —Dijo extendiendo la mano.


—Ehm... Soy Naruto.


—¿Tú eres el que anda buscando Sakura? ¡Estás en graves problemas entonces!


Kiba lo tomó de la mano mientras lo llevaba árbol en árbol, buscando a Sakura en el progreso.


—¡Ahí está! ¡Sakura, he encontrado a tu hermanito! —La Kunoichi miró a su derecha y efectivamente, ahí estaba su pequeño hermano.


—¡Naru!, ¡¿dónde estabas?!


Antes de que pudiera contestar el rubio interfirió Kiba,—Lo he encontrado en el bosque, ni idea de lo que estaba haciendo.


—Naru, ¿por qué huiste al bosque? —Se acercó lentamente, esperando una respuesta que nunca llegó. Naruto sólo bajó la mirada. Tenía una confianza con la chica, pero no la suficiente como para contarle de Orochimaru.


Mientras hablaba el trío Sasuke se acercaba lentamente. Tendría que ganarse la confianza del zorro, ¿no? ¿Qué mejor manera de hacerlo que empezar de nuevo?


—Sakura, Kiba. —Saludó y luego miró al chico.—Tú debes ser Naruto, ¿no? —Le sonrío con una falsa calidez, haciendo sonrojar al rubio.


—Sí, sí y tú eres Sasuke, ¿verdad?


—Para ti puedo ser cualquiera. —Le guiñó un ojo provocando un sonrojo aún más fuerte.


—¡Sasuke, basta! ¡Ca a reventar si sigues así! —Se burló Kiba, partiéndose de risa.


—Cállate aliento de perro. ¿No tienes que alimentar a Akamaru?


—¡Es verdad!, ¡adiós Naruto, Sakura!


—Naruto, ¿quieres ir a almorzar conmigo?


—Ehmm... Yo... —Miró a Sakura quien le asintió con una sonrisa. Sasuke miró a su compañera, al parecer ya le habían dicho sobre la misión.—Acepto.


—Genial, será como una cita.


—¿Cita? —Se alarmó Sakura mirando los harapos que aún traía el rubio.—Si es una cita habrá que prepararte. Sasuke ven a buscar a Naruto a las dos en punto. —Dijo con una sonrisa llevándose al confundido Naruto. ¿Qué diablos era una cita?


Ya en la casa de Sakura, sacó las ropas que había pagado para Naruto, entregándosela.


—Anda, elige algo que te guste.


Asintiendo l rubio entró al baño donde salió unos minutos después con una camiseta de manga corta con gorro color verde lima, debajo de esa otra camiseta, pero esta hasta los codos y color verde oscuro. Unos shorts al estilo militar y unas zapatillas color cían, que le molestaban enormemente. Al salir Sakura lo miró anonadada.


—Tienes un buen estilo para vestirte, lo admito. —Dijo con los ojos cerrados, asintiendo lentamente.—Bueno son las una... Supongo que tenemos algo de tiempo para arreglarte ese cabello que tienes.


—¿Qué tiene de malo? —Hizo un puchero mientras se cruzaba de brazos.


—Aparte de aves viviendo en él, nada. Ven, vamos a lavarlo.


Después de varios lavados, cepillados y algunas tijeras por aquí y por allá, quedó con el cabello característico de él. Mechones desordenados y rebeldes por toda la cara, pero muy lindos.


                    ~En medio del desierto~


—Como quisiera haber nacido camello... —Cantaba Kankurō mientras sus dos hermanos lo miraban fijamente, tratando de evaporarlo con la mirada.


—Kankurō, ¿te puedes callar ya?


—Como quisiera que mi hermana hubiera nacido camello...


—Eso es todo, yo lo mato. —Gaara negó con la cabeza a su hermana.


—Mejor lo abandonamos aquí, mientras canta.


—Qué buena idea Gaara, así se convertirá en camello.


Ambos empezaron a avanzar mucho más rápido, dejando a su hermano solo.


—¡Chicos, era broma! ¡Yo los quiero tal y como están!


—¡Si es otra de tus canciones te parto la quijada de camello que tienes!


Kankurō asintió ante eso y siguieron su rumbo, aunque titubeaba de vez en cuando.


                      ~De vuelta en Konoha~


Ya eran las dos y Sasuke se encontraba fuera de la casa de Sakura, vestido  con una chaqueta de cuero azul, una camiseta celeste con el símbolo Uchiha, una bufanda miel y blanco, y por último unos pantalones cafés claro con unas zapatillas blancas.


Tocó la puerta dos veces, la tercera casi golpeando a Sakura en la cabeza.


—Sasuke-kun, casi me golpeas. —Dijo enfadada y haciendo una mueca.


—Lo siento Sakura, no te vi.


—Sí, sí. Lo que digas. Naru está adentro, espera aquí afuera.


—Cómo quieras...


Por el marco de la puerta apareció un chico casi irreconocible para el azabache, era un chico frágil que no había visto antes en el 'zorro', un chico que debía ser protegido y no dañado.


A pesar de eso, debía continuar con la misión y no encariñarse con él. Era su deber como ninja de Konohagakure.


—¿M-Me veo mal? —Sasuke no se había dado cuenta de que aún miraba al rubio. Este sólo dijo que no.—Entonces vamos, ¿no?


Caminaron por un buen rato, preguntándose cosas aleatorias. Cosas que Naruto casi nunca contestaba porque nunca las había experimentado, o porque simplemente, le traían malos recuerdos y se perdía en sus pensamientos.


—¿Quién es Temari?


—¿Temari..?


—Ya sabes, la chica que nombraste cuando llegaste a Konoha.


—Temari y sus hermanos, Gaara y Kankurō. —Completó.—Son el trío de hermanos que me protegieron durante un tiempo... antes de que pasara algo...


—¿Algo?


—Es un secreto. —Dijo con una sonrisa llena de melancolía.—'¿Qué estarán haciendo ahora?, ¿se habrán olvidado de mi?'


—Bueno, de todas formas hemos llegado.


—Huele muy bien, ¿qué es?


—Ramen, pensé que te gustaría probarlo.


Se sentaron en los taburetes del pequeño local, uno al lado del otro. Hoy tenían suerte pues no había mucha gente.


—Sasuke-san, viene acompañado hoy. ¿Qué desean ordenar para hoy?


—Dos misos.


—Dos misos a la orden.


Comieron tranquilamente, o eso trataba de aparentar Naruto. Que quería devorarse todos los platos de ramen que se encontraban en el local.


Después de la comida se despidieron, y satisfechos se dirigieron a las afueras de Konoha, es decir, a los bosques.


Naruto tocaba cada árbol con lentitud. Dándose su tiempo, pero no mucho. No quería que su acompañante se diera cuenta de que algo le ocurría.


—¿Naruto?


—¿Hmn?


—¿Por qué intentas abrazar cada árbol que encuentras?


—Creo que se notaba mucho... —Sonrió nerviosamente.—Pues porque creo que mi parte salvaje aún recuerda algo de la vida aquí. Y muy dentro de mi, yo también. Y. A decir verdad, la extraño un poco. Nunca la pude disfrutar al máximo.


Sasuke se preguntaba el porqué de la última frase cuando sintió un chakra conocido cerca.


—Ehm... Espera un poco aquí, necesito ir al baño. Volveré en unos minutos.


Naruto asintió sin preocupaciones, pero dentro de él quería que el azabache se quedara con su persona. Cuidándolo y protegiéndolo de todos los males del mundo.


—Orochimaru-san. —Susurró.—¿Qué haces aquí? —Dijo ahora un poco más hostil.


—Vengo por mi respuesta. Sakura-san y Sai-kun ya decidieron, sólo faltas tú. Sasuke-kun.


—Así que era verdad. Sakura aceptó...


—Y ya se ha ganado la confianza del zorro. Pero tú debes matarlo, no ella.


—¿Y por qué yo?


—Porque sí, ¿aceptas o no?


—Acepto. —Dijo a mientras se cruzaba de brazos.—Ahora, debo volver con él.


—Claro, claro, recuerda que solo tienes un mes. Adiós Sasuke-kun.


El joven Uchiha volvió algo molesto al lugar, pero se le pasó al ver a Naruto transformado como zorro jugando con unas crías de mapache.


—Se ve que te estás divirtiendo.


—¡L-Lo siento! Es solo que tener forma humana me agota...


—¿Y no hay ninguna forma de reducir el cansancio?


—No había pensado en eso antes... Date vuelta, no quiero que me veas sin ropa...


—Pensé que a los zorros no les molestaba eso.


—No nos molesta, pero Saku-chan dijo que es malo desnudarse en frente de personas.


—Entonces me doy vuelta, entiendo.


Naruto sonrió y se transformó en humano, con la única diferencia de que ahora de la cabeza le salían dos orejas de zorro y en su parte baja una cola.


—Ya te puedes dar vuelta.


—...'Se ve muy tierno...'


—Vamos, ¡quiero ver el atardecer!


Sasuke no sabía adónde lo dirigía el híbrido, no sabía si seguían en Konoha. Pero sí sabía que el lugar era muy hermoso.


—Llegamos.


Era un acantilado con numerosos árboles de cerezo, adornando así el suave pasto verde. Adonde miraba podía ver animales viviendo en armonía, y no parecían molestarse por la presencia de los dos humanos.


—Qué lugar más bello... Nunca lo había visto...


—Pues claro que no. Este lugar es solo para animales del bosque, yo ya estoy quebrantando las reglas por solo traerte aquí.


—Pero... ¿no se alarman?


—Supongo que me reconocen... Además no te ves hostil con esa vestimenta que llevas.


—Naruto...


—¡Haha! ¡Bromeaba Sasuke!


—¡Yo te voy a enseñar a bromear!


Cuando Sasuke estaba apunto de hacerle algo a Naruto una liebre se acercó al rubio y empezó a emitir sonidos.


—¿En serio? —La liebre asintió.—Pues iré a ver qué pasa entonces...


—¿Qué ocurre? —Preguntó Sasuke, obviamente no entendiendo el lenguaje.


—Me ha dicho que vienen unos animales extraños... Y mi deber es ir a ver...


—¿Tu deber?


—¡Es algo que siento dentro de mi! No lo cuestiones o te echaré a Inari-sama encima. —Dijo sacando la lengua.


—Ahora te has vuelto loco.


—Hmp. —De un momento a otro se transformó en zorro y se echó a correr, dejando su ropa tirada.


—Muy bien Sasuke, de ninja elite pasaste a ser la nana de un zorro. —Murmuró recogiendo la ropa, y mirando como los animales parecían reírse.—¡No se rían! Los podría matar a todos si quisiera.


Para la mala suerte de Naruto, no pudo ver el atardecer, pues como dijo anteriormente... Sentía que proteger a esos animales era su deber. Algo dentro muy dentro de él se lo decía. Y él lo creía.


Llegó al inicio del bosque, donde a la lejanía pudo divisar tres pequeñas figuras. Dos de ellas peleando entre sí.


—¿Quiénes crees que sean? —Dijo Sasuke.


—Animales...


—... ¿Sigues con tus bromas?


—Seh, un poco.


Las figuras empezaron a acercarse más, pero aún así Sasuke no las veía bien y tuvo que activar su sharingan.


—¿Seguro que no necesitas lentes?


—¡Que no! Este es un Kekkei Genkai que ha estado en mi familia desde que Ri-


—¡Ya llegaron!


—Yujuu...


Naruto se acercó y empezó a aullar. Reconoció quienes eran, y le emocionaba volver a verlos.


—¡Naruto! —Gritaron los tres mapaches simultáneamente mientras lo abrazaban con sus pequeñas patitas.


—¡Temari, Gaara, Kankurō! ¡Los extrañé mucho! Tenía tanto miedo.


Temari se transformó en humana y abrazó a los tres animales, reconfortando.


—Lo sé Naru, lo sé. —Las lágrimas no faltaron en el emotivo reencuentro que cierto azabache celoso rompió.


—Ejem...


—Naru, ¿quién es ese pulgoso?

Notas finales:

Espero les haya gustado!:D Aquí los votos hasta ahora:

 

ItaNaru: 5

GaaNaru: 1

SasuNaru: 8

LeeGaa: 1

SaiGaa: 3

GaaSai: 2 

 


seguramente haga que sai y gaa se vuelvan sukes y se turnen sajkhdsha!

P.D: Confesarse por carta es tierno? ¡Necesito opciones y creatividad! porfisss:3 también necesito consejos amorosos uwu

 

Eso es todo, espero les haya gustado.

Chaitu!~ 

Y se me cuidan eh?


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).