Ya se ha dado cierto colapso de tiempo en el cual no eh vuelto a saber de él, ni de sus cabellos albinos mucho menos de su perfecta sonrisa, ¿realmente así de fácil perderé a lo más parecido a un amigo que eh tenido hasta ahora?
Mas de una ha sido la vez la cual sin resultado alguno eh venido diariamente al estanque en el cual nos conocimos, sin si quiera un rastro de él, únicamente el reflejo de mi ser y Chimuelo…Si bien no se lo eh podido contar, en este tiempo eh tenido un gran avance como persona, insistentemente eh venido durante cuatro meses esperando la oportunidad para decirle que gracias a él lo eh logrado…ahora los integrantes de mi isla no tienen más pensamientos negativos hacia los dragones desde que supieron la verdadera razón de sus malos labores, no todos son buenas noticias…pero tampoco son malas por así decirlo…
Las personas claramente se dieron cuenta de mi tan solo por eso…es algo sucio ya que hace poco tan solo sabían de mi existencia, y no es como si no me hubiera tratado de escabullir más de una vez…la verdad quiero hacerlo, mandar todo al demonio y huir…luego pienso en ti…en esa corta conversación que dentro de mi ser duro décadas, en los igualdad de nuestros sentimientos y la comprensión mutua, y en mi esperanza por encontrarte nuevamente algún día en este mismo lugar, haciéndome sonreír y divirtiéndonos, de hecho más de una vez eh pensado en cosa las cuales podríamos hacer juntos, como ver el atardecer con Chimuelo, entre otras cosas algo infantiles ahora que lo pienso bien…
Lo extraño más de lo que imaginaba que podría hacerlo con alguien, las noches parecen mucho más amplias y mis esperanzas se pierden poco a poco.
La nieve no ha parado desde que Jack no está, por lo mismo no pierdo la esperanza de que no se encuentre tan lejos pero…el corazón también se cansa de esperar ¿No?
Esta mañana trate de saltarme las absurda actividades junto a mis otros “amigos”, desde temprano tome a Chimuelo, no aseguro que este sea mi último intento pero tratare de hacer lo posible para estar nuevamente junto a él. Mientras el amanecer se daba espacio en el amplio cielo partí con mi búsqueda, aprendí a domar de mejor forma a Chimuelo, así que junto a él y mi conocimiento sobre esta isla no creo que se dificulte tanto. O eso creí…
Durante toda la mañana trate de hacerlo, indagando en diferente lugares junto al escenario de varios pinos los cuales contaban con una delgada capa de nieve, si bien la frigidez ha aumentado de forma notable no lo tomaría como una molesta, nada que esté relacionado con él lo es realmente. Mis esfuerzos al parecer no dieron mucho resultado y al cabo de aproximadamente las 3:30 PM (Lo calculo por la posición del sol) tomo un descanso a causa de Chimuelo, ya que estaba agotado a causa del interminable proceso de búsqueda. Respiro profundamente, yo también estoy algo cansado…Paramos en una de las áreas del bosque las cuales eh marcado con mi pequeña cuchilla anteriormente mientras exploraba cuidadosamente la isla en busca de mi Furia Nocturna.
Dejar ir mis penas y todo este asunto sería más fácil…pero…
Repentinamente escucho un ruido detrás de mí, Furia Nocturna se pone alerta al igual que yo.
-Tranquilo muchacho…- Es lo único que soy capaz de decir con inseguridad mientras trato de examinar en lo posible el área en la cual nos encontramos, si recuerdo bien no era muy extensa así que el causante…,volteo para después imprevistamente encontrarme con Jack al frente de mí.
-Ah… ¡ah!- caigo estruendosamente al suelo a causa de la impresión algo confundido – ¿Jack?- pregunto mientras froto mi cabeza.
-Hola…Hipo…- responde de forma sencilla sin expresión alguna.
-Tengo tanto que contarte, preguntarte y agradecerte Jack-Comento de forma entusiasmada mientras mis manos forman puños –No sé por dónde empezar y …- espontáneamente me encuentro acorralado contra el árbol que anteriormente marque por Jack, con sus manos a cada lado de mi cabeza, apenas puedo distinguir su rostro, un acto algo confuso para mi .
-¿De quién se trata?- cuestiona
-¿Eh?... ¿De qué hablas?
-No lo entiendes después de todo… ¿Eh?
-Desconozco de que hablas…
-Lo debí saber desde un principio…- dice para después soltarme y darme la espalda
-Ella… ¿Qué es para ti? Esa chica. La rubia…
-Ah… ¿Astrid? Ella es una amiga, es muy agradable y…
-¿Gustas de ella?- me pregunta desprevenido, puedo sentir como mis mejillas se tintan de rosa a causa de la fulminante pregunta.
-Bueno…yo…-No puedo evitar que siento algo por ella después de todo, aunque pensándolo bien ella realmente no siente lo mismo por mí, siente lo mismo que yo pero por mis acciones, no por mi ser.
-¡Por eso no volviste los primeros días! Creí que habías prometido volver…- Objeción en voz alta contra mis palabras, me admiro un poco.
-¿Eh? Jack…estas actuando como un lunático…
-¿Yo? ¿Cómo un lunático? No lo pensé que lo fuera por preocuparme por lo que creí ser mi amigo…-¿Acaso el...?
-No tienes que actuar por un maniático a causa de eso. Jack…
-Vete por favor…- me implora en voz baja sin mirarme a los ojos, si quiera con alzar mi mirada.
-¿Qué no lo entiendes? ¡Largo! – exclama para después tomar su bastón creando una pared de hielo con intención de atacarme, lo que gracias a mis habilidades últimamente aprendidas no tengo problemas para esquivar para después tomar rápidamente a mi dragón e irme vertigosamente de ahí ¿Qué demonios abre hecho para que actuase de esa forma? Al parecer todo mi esfuerzo fue en vano…no pareció valorarlo, y no es como si me importara pero me hubiera dicho desde un principio para haberme ahorrado ese tiempo, ¡maldición! Desde ahora no confiare en nadie, mucho menos me atreveré a hacer un esfuerzo de esa forma .Sin darme cuenta estoy llorando del coraje, lágrimas las cuales nublan mi campo de visión, froto mis vistas con el reverso de mi mano para después ir un poco más rápido. Sólo quiero ir a casa y recuperar todo ese tiempo perdido entrenando…
Toda la tarde pase con Chimuelo, acariciándolo, jugando con él y tratando de olvidar los eventos anteriormente ocurridos, pero por más que trataba no podía, recordaba las hirientes palabras que grito Jack para tratar de alejarme de él. Respiro profundo para después sentarme en el suelo, si me quedo aquí sin hacer nada no poder ser capaz de olvidarlo, mi orgullo me impide que trate de hacer algo para si quiera remediarlo, creo que ya hice lo suficiente…sé que aunque hubiera tratado de explicarle de forma más detallada mis sentimientos hacia a ella no me hubiera escuchado…
Una lamida de Chimuelo me toma desprevenido sacándome de todos mis pensamientos – ¡Agh, Chimuelo! – Lo regaño cariñosamente para después acariciar su cabeza y apoyarme a él creo que lo que más…-¡Whaaaa!- repentinamente toma vuelo, sin vacilar tomo sus riendas, no estoy seguro de a dónde se dirige tan solo trato de seguir su instinto posicionando la ortopedia de su cola según sea conveniente. Después de un rato nos encontramos en el lago donde…agh…eso…
Chimuelo se acomoda en el suelo jugando con el césped, al parecer esta zona en particular tiene un césped que le encanta, no habría problema de mi parte quedarme aquí si no fuera por…
Aún recuerdo cuando caímos aquí cuando lo estaba aprendiendo a volar.
Me estiro para después acostarme y mirar al cielo mientras estoy a las orillas del estanque ,cuando mi vista se nubla y estoy a punto de hacer conexión con el suelo escucho una voz a la lejanía pronunciando mi nombre.
-¡Hipo!
Abro mis ojos rápidamente para después voltearme -¿Eh?
-Por fin te encontré- Exclama con alegría Astrid mientras se baja de su dragón y corre a abrazarme.
-No es por molestar pero tu padre me mando a buscarte, es algo tarde y también me encontrado un poco preocupada y…
Jack… ¿Acaso fue por ella que actuó así? Él está celoso, no lo aseguro pero lo tomaría como una posibilidad, después de todo lo que pensé anteriormente fue un acto impulsivo, recuerdo que ese día le había prometido volver pero estuve muy ocupado con mis entrenamientos y si lo analizo bien él está así por… ¿Mí?
-¡Hipo!
-¿Eh? Dime Astrid.
-¿Me estas escuchando?- protesta con tono y gesto pesado.
-Si si…yo…voy enseguida…
Mientras me levanto Astrid me toma de la mano para después abrazarme por completo-Realmente estaba preocupada por ti Hipo- Dice en tono dulce, no evito mostrar mi antipatía para después apartarme y preguntarle si me amaba a mí, o amaba las cosas que había hecho, se quedó callada y algo confundida. Sin esperar una respuesta subí sobre Chimuelo para después dirigirme a casa, sin mirar atrás pude sentir que Astrid iba detrás de mí.
Al llegar a casa note que me seguía, tan solo la ignore hasta que llegamos a la puerta…
-Por favor no me sigas…- Fue lo único que dije para después tomar la manecilla de la puerta.
-Hipo, confundes las cosas…yo…
-Tú me llegaste a odiar ¿No? A causa de tu impotencia, no creo que te enamoraras de mi de la nada, lo hiciste al saber que tenía a Chimuelo, y por qué cometí el error de unirte a mi mundo, si tienes algún argumente que justifique eso dilo, si no es así por favor déjame en paz.
-…
Como era de pensar, ninguna palabra de su parte, ella tan solo se dejó engañar por su avaricia después de todo no la culpo. Cerré la puerta lentamente, esta vez sin que ella lo evitara.
Como había afirmado Astrid anteriormente ya era algo tarde, me acosté en mi cama mientras Chimuelo hacia lo mismo a mi lado, no sin antes despedirme de mí pare y tomar una rápida ducha. Me siento algo mal por Jack, aunque tampoco era para que lo tomara de esa forma…
Y así mi mayéutica acerca de Jack se dio paso durante una buena parte de la noche, acompañado junto a los leves ronquidos de Chimuelo y mi mirada hacia el techo, hasta que mis sueños tomaron el control de mi mente.
-Fue divertido… ¿No?
-¿Jack?
-Fue divertido el jugar conmigo, ¿No?
-No…
Me vi a mí, junto a Jack, en la misma escena que pasamos esta tarde, teniendo esa discusión que después de todo llegue a la conclusión de que no tenía sentido alguno.
-¿Yo? ¿Cómo un lunático? No pensé que lo fuera por preocuparme por lo que creí ser mi amigo…- Repitió Jack.
Yo…yo respondí que…
-Lo dices por qué es lo mejor para ti… ¡No te estas preocupando, estás desconfiando de mí! Si somos amigos, Jack, y te quiero pero…-
¿Te quiero?
-¡Pero tan solo te pido que confíes una vez más en mí, que creas en mi así como yo lo hice contigo!
Me despabilo rápidamente, mirando hacia todos lado, al parecer solo fue un sueño, éstos sentimientos… ¿Qué debería hacer con ellos?
Rápidamente me incorporo para después me, al salir por mi desayuno aun me encuentro poniéndome mi chaqueta mientras tomo una tostada de mi comida, mi padre aún está en casa así que rápidamente lo saludo.
-Padre, buenos días, tengo que ir A... Ya sabes. Voy a hacer ciertas cosas…volveré al rato y… ¡Ah!- caigo de forma desagradable al suelo, enorgulleciendo a mi padre…como siempre
-Ten cuidado...
-Claro…-Me quejo desde el suelo.
-Buenos días Hipo, después de todo estas creciendo y creo que está bien que te independices pero como dije anteriormente quiero que tomes las precauciones necesarias y…
-¡Yo también te quiero!- digo sin intención de terminar de escuchar sus parloteos para después salir de casa y buscar rápidamente a mi Furia Nocturna con la mirada, lo encuentro en medio de su desayuno, nuestras miradas se encuentran para después en menos de milésimas de segundos tenerlo encima de mí, en dos patas, lamiendo mi rostro –Jaja ,vamos muchacho, tengo cosas que hacer hoy…- es lo único que alcanzo a decir para después trepar en el no sin antes acariciarlo para después empezar a planear en él.
Con una indescriptible velocidad dimos empiezo a nuestro viaje, tenía muy en claro mis motivos para esa entonces…tuve a mi perspectiva mil noches y un sueño para tomar esta decisión…
Al llegar al anterior sitio en donde tuve mi encuentro con Jack le di la señal a Chimuelo de descender, al hacerlo se este se encogió yendo a un rincón, al parecer le había cogido temor a Jack por su anterior acto, lo miro con algo de pena, pero todo eso cambiaria ahora, tan solo tenía esta vez, enfrentándome a que ponía mi vida en riesgo.
-Jack…-Pronuncio su nombre para después recorrer un poco la zona, esta era la más fría de todos los sitios los cuales conocía, me parece un poco difícil de lidiar con él ya que a comparación de mi hogar (En el cual últimamente no ha dejado de nevar) es extraordinariamente mucho más frígido.
Después de un rato lo encuentro, en una esquina de rodillas, con una sábana de claros colores cubriéndolo, probablemente creada por el mismo…me siento mal…después de todo…en parte fue mi culpa…me alegro de que este bien físicamente, pero sin dejar mi actitud de lado.
-Jack…yo…-
Se voltea y mi mera con frigidez durante unos segundos.
-Hipo…-se incorpora con algo de dificultad sin dejar de mirarme a los ojos con una expresión algo indescriptible…esta triste…pero al mismo tiempo parece enojado…una mirada generosa, pero con una profundidad inmortal, con esos ojos…
Me toma del cuello de mi camisa mientras me entretuve buscado el significado de su observación ¿Cómo pude ser tan tonto…?
-Hipo…-vuelve a decir pero esta vez con un tono algo serio–Yo…-
Chimuelo chilla e intenta atacar a Jack, pero él se encarga de encerrarnos a ambos entre las paredes de una imperdonable pared de hielo la cual Chimuelo sin resultado alguno trata de desplomar, trato de zafarme de las manos de Jack pero al parecer es considerablemente más fuerte que yo, mi respiración se corta, siento agonizar…pero en el instante adecuado me suelta, haciéndome caer al suelo.
-Lo siento tanto…-se lamenta mientras tanto de recuperar mi respiración-Sé que fue muy tonto, lo tome todo muy enserio y…yo realmente…lo siento, perdóname Hipo, no quiero perderte… ¡No quiero perderte maldición! ¿Hay algún problema con eso?
-Ahí está otra vez… ¡Eres amable y luego actúas de forma que lo haría un demente! Y…
Lo siguiente hizo que una calidez indescriptible se apoderara de mí ser por completo, sentir los brazos de Jack fusionados en mí, en un abrazo… ¿Qué debería de hacer? Es la primera vez que siento un abrazo de esta forma…
Chimuelo cae al suelo, agotado pero no rendido ante sus inténtenos de tratar de “salvarme”.
-Quizás no valga la pena ahora pero…Hipo…nunca antes alguien había creído en mí, mucho menos ha sido mi amigo y…perdona por arrebatarme pero es la primera vez que he llegado a querer tanto a alguien yo…yo…
Correspondo el abrazo, al parecer nunca es demasiado tarde para él, y sí, soy demasiado ingenuo para creer de esta forma en alguien que apenas conozco, soy simplemente…”yo”. Nos quedamos en esa posición un buen rato, o por lo menos el suficiente para sentir los latidos de su principiante corazón fusionarse con los míos, principiante y sincero corazón que es perfecto.
Noto como a nuestro alrededor la celda de hielo empieza poco a poco a deshacerse, Chimuelo entra alarmado con intenciones de atacar a Jack, pero logro detenerlo, mí albino amigo da unos pasos hacia atrás algo asustado y no lo culpo, los Furia Nocturna pueden llegar a causar ese tipo de emociones o por lo menos hasta cuando los conocen de la forma en que yo conozco al mío.
Se podría decir que desde ahora todo ha vuelto a ser como antes, me alegro al ver la sincera sonrisa dibujarse sobre la pálida piel de Jack. Al cabo de un rato me pregunta sobre mi aventura en estos cuatro meses en los cuales él estuvo “de esa forma”.
-Ah...dame un respiro no sé por dónde comenzar.
-Jaja está bien tomate tú tiempo pequeño vikingo.
Le conté sobre mis aventuras entrenando a Chimuelo, sobre el gigante dragón que oprimía a los demás y muchas cosas inimaginables que hace cuatro meses no me creía capas ni en mis más agitados sueños, todo esto mientras caminábamos a lo desconocido junto a Chimuelo, así hasta que…
-Nunca creí que los vikingos y los dragones convivieran de una forma tan compleja, tus aventuras son realmente impresionantes Hipo.
-N-no es para tanto…-involuntariamente me sonrojo para después bajar la mirada.
Al momento de volverla al frente pude encontrarme con el lugar en el cual tiempo atrás me dispuse a entrenar a Chimuelo.
-Wau, este lugar no ha cambiado en nada realmente.- Tomo el bastón con el cual esboce a mi reptil en el suelo, realmente no creí que seguiría aquí. Empiezo con un nuevo dibujo, me tiembla un poco la mano a causa de que estoy algo nervioso.
-¿Qué haces? Pregunta Jack mientras se inclina un poco hacia a mí.
-Que es una sorpresa y… ¡Ya está! Mira…-Lo dejo observar tímidamente.
-Eres bastante bueno dibujando…y es bastante parecido a mí…
-Tonto, eres tu- afirmo mientras una tonta sonrisa se traza en mi rostro.
-Jaja, está bien, gracias.
-No es necesario…-me apeno un poco para después bajar mi mirada al suelo.
-También voy a hacer algo por ti…-
De forma asombrosa y con una agilidad desconcertante se encargó de congelar el lago en tan solo segundos congelar el lago en segundos.
-Ven, patinemos sobre hielo, será divertid…-
-…
-Ah…Lo siento, no perdamos tiempo- justifico su extraña expresión momentánea gracias a esa frase para después tomar mi mano y ayudarme a mantener el equilibrio, al parecer lo hacía con mucha confianza mientras me ofrecía una amplia sonrisa y un lindo gesto. Y así pasamos toda la tarde o la mayor parte de ella, jugando sobre el gélido lago entre risas y tropiezos de parte de ambos, Chimuelo no se dio a esperar y se unió en unos segundos a nuestra diversión.
-¡Whaaa J-Jack!- Cuando mi cuerpo estaba a punto de tropezar contra el pavimento, en el momento adecuado Jack me aferro con su bastón contra su cuerpo.
-Jaja, tienes que tener más cuidado Hipo
Hago un leve puchero –Es lo mismo que me dice mi padre-
-Tal vez deberías de tomarle más atención, aún eres un pequeño vikingo, pero admito que un gran dibujante.
Nuestras miradas se cruzan por un instantes, sus inmensos ojos azules me hacen olvidarme por completo de todo, de mi cercanía con el…y de…
-¡Ah! Debo ir a casa, mi padre se pondrá furioso si…-Me alejo cuidadosamente para después tomar a Chimuelo por sus riendas.
-No es tan tarde…-se queja un poco desanimado.
-Jugaremos mañana o… ¿Me acompañarías hasta casa?
-¿Enserio?
-Vamos, no hay nada que perder y…podemos ir en Chimuelo.
-No te preocupes, puedo ir con el viento.
-Entonces… ¿Qué te parece una carrera?- lo reto con un gesto competitivo de entusiasmo.
-¿Me estas retando pequeño vikingo?
-Tómalo como quieras…-No pierdo más tiempo para después subir en Chimuelo e ir rápidamente, no estoy dispuesto a perder y…
-¿Es lo más rápido que puedes ir novato?-repentinamente ya me ha alcanzado…
-¿Eh?-Repentinamente siento los brazos nuevamente en mi cuerpo, esta vez apoyados en mi cintura.
-Veamos qué tan rápido puedes ir Hipo…
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Al llegar a casa entre risas y algo agitados nos despedimos, una despedida larga y sin muchos ánimos la cual finalizo con una pregunta por la parte de Jack.
-Me divertí realmente mucho contigo hoy Hipo, ¿Podemos hacerlo de nuevo mañana?
Sonrío para después asentir con la cabeza-Claro que se repetirá, hoy, mañana, pasado mañana, cuando quieras Jack-
-Hey…dame un respiro jaja-
Sonrío ante su tonta pero agradable broma, ya quiero que sea mañana.