—Y eso en resumen.
Había un lugar que gustaba a JongIn, no quedaba lejos de su hogar y era donde solía ir en sus momentos de aburrimiento. Ahora, sin embargo, estaba ahí por otra razón: Kyungsoo.
Se trataba del Bosque de las Almas, una extensión donde se reunían ciertos Genius Loci trashumantes, depresivos, o con malos momentos. Pero no todos acudían a él, claramente mucho ni siquiera sabían de su existencia ya que sus vidas eran tan plenas como la vida que solo un ánima puede tener. Era un hecho que la gran mayoría se contentaba con poco, es decir, su ambición no iba más allá del poder mantener una familia feliz en un cálido hogar, envejecer junto a ellos y almacenar sus historias en el expediente de su propia memoria, moldeándose, haciéndose portadores de vibraciones y esencias de almas habitantes de cuerpos vivos, de entes ajenos, de seres anhelados.
—Vaya… pues no sé qué decir, es muy extraño todo.
-Eso no es lo peor de esto, Chanyeol. Te lo explicaré de una forma que puedas entenderme. Primero, él es una extraña clase de humano que dice puede sentirnos, vernos, tocarnos e incluso olernos. ¿Entendiste bien? ¡A nosotros¡ ¡Si no somos nada! Bien, supongamos que la situación no es lo suficientemente retorcida todavía. Aun si él dice que le tenemos sin cuidado ¿Puedes creer? Lo que quiero agregar a todo esto que ya te he dicho, es algo que no sé muy bien cómo empezar a contar ya que ni siquiera yo mismo lo termino de comprender, es todo muy confuso Chanyeol, creo que me volveré loco.
—Hey, tranquilo, acá me tienes y puedes confiarme lo que sea, por muy desconcertante yo te escucharé con respeto. — Los genios descansaban bajo la sombra de un Pino rojo muy antiguo dentro del bosque de las almas. Poseía en total siete troncos crecidos desordenadamente, éstos formaron huecos que les permitían sentarse directamente bajo el centro del manto del follaje.
Era tan fresco, podían sentir el frío, la bruma, pero no cómo adormecían su piel, o más bien su ilusión de piel. No podía sentir que le calaba los huesos, ni la presión en sus oídos, ni el cansancio de haber permanecido dos noches y tres días en aquel bosque. JongIn solo tenía frío y sentía humedad en su cuerpo, sin embargo, dentro de su mente era todo peor incluso a lo que imaginaba sentiría si su cuerpo fuera de un verdadero ser vivo.
—Estoy, estoy muy mal.
—No, si se te nota. Tranquilo- Chanyeol siempre sonriendo, le dio una caricia en la cabeza, desordenándole el cabello- Ahora ¿Me cuentas?
—Sí, escucha, imagina que estás junto a Zhang YiXing, y bien, que ustedes no están en su situación normal de Dueño/Genio. Lo que significa que él te puede ver al igual que Kyungsoo puede verme. Entonces un día cualquiera, a tu corazón entra una ira tremenda contra la vida, contra lo que el destino ha hecho a nuestra alma, entonces odias un momento a tu dueño, y le quieres desgraciado. Cruza por tu corazón el deseo de verle infeliz y solo para que pueda ver en ti un refugio y que finalmente pueda quererte a ti… Pasan dos días, cuando tú ya te has calmado de la ira y todo anda bien nuevamente, porque tú sabes que de eso de la ira uno se sana ¿Cierto? En fin, Llega Zhang YiXing de muy mal humor una noche después de una fiesta, y te cuenta que ha roto con su novio. Te sientes en la gloria pero cierta parte de tu corazón duele, y sin embargo no te importa. Embriagado por el júbilo comienzas a imaginar a Zhang YiXing junto a ti, amándote como a un humano más. Como si… tú estuvieras en el lugar de su antiguo novio. Lo imaginas todo, el amor, sin saber muy bien cómo hacer la más grande demostración de éxtasis de los humanos… Y te duermes. Al día siguiente, Zhang YiXing actúa raro y sigue en los días posteriores, dando pequeñas señales de su malestar y confusión. Una tarde él explota, te intenta contar lo que experimentó y pide que le expliques por favor, que no sabe cómo pasó, que no entiende, y todas las piezas calzan dentro de tu cabeza, permitiendo que veas la imagen completa del rompecabezas y te das cuenta, por fin, lo que está sucediendo. Se lo intentas explicar para que no suene tan perturbador y Zhang YiXing siente pánico y, por desgracia, termina por temerte. Y eso es incluso peor que ser odiado. Todo por tu declaración que tal vez no fue la más acertada pero de igual manera no te imaginas otra forma de haberlo dicho:
“Con cada cosa que yo piense sobre ti, estaré afectando en tu vida. Mis pensamientos se verán reflejados en situaciones que te sucederán o experimentarás tal y como si hubiesen sucedido, con toda la carga sentimental y emocional que eso conlleva. Junto con tu forma en particular de resolver éstas situaciones inventadas por mi mente, se formará tu destino mientras permanezcas a mi lado”
—…Oh vaya, pues qué fuerte.
—Sí, bastante.
—¿Te has dado cuenta de una cosa? Has hablado de corazón, mente y sentimientos. Dices todo como si entendieras perfectamente un humano, e incluso como si tú fueras uno. Eres raro.
JongIn tragó saliva, Chanyeol la mayoría del tiempo parecía más dentro de sus pensamientos que tomando atención a lo que se le contaba. Por eso es que JongIn no se esperaba que diera comentario sobre su historia y dijo todo solo porque quería que alguien le escuchara, que alguien supiera que lo que le estaba pasando podía ser posible. No necesitaba que le creyeran ni le compadecieran, pero lo que menos necesitaba era que Chanyeol comenzara a analizar sus palabras para encontrar la raíz del asunto.
—Yo, supongo que los comprendo bastante. A los humanos, digo.
—Sí, bastante para ser normal. Ahora creo que todo lo que me cuentas tiene que ver más con tu comportamiento que con tu dueño. Vamos, él tiene su extraño don de verte y sentirte. Pero tú tienes algo escondido que estás tratando de evitar… puede que eso sea el punto de partida y creo que tú lo sabes bien.
JongIn sonrió ante aquellas palabras que no podían ser más ciertas.
—¿Y tú?
—¿Yo qué?
—¿No sientes a veces que… quisieras ser tan humano como Zhang YiXing o Do Kyungsoo?
Chanyeol pensó unos segundos su respuesta, mirando a algún punto entre la bruma que se hacía a cada segundo más espesa.
—Lo deseo tanto como tú. No sé si haya un genio que no lo haya deseado en algún momento, sin embargo, me conformo con que él sea feliz dentro de su hogar. Es natural dentro de los genius loci ésta clase de sentimientos ¿Verdad?— Chanyeol entrecerró los ojos mirando directamente hacia los de JongIn, en los que vio un abismo sobre tinieblas y un precipicio tan hondo como el que a veces veía en la mirada de Zhang YiXing.
Intentaba descubrir algo dentro de él, pero no vio nada.