En la tranquilidad de mi casa, puedo pensar y recordar cada segundo de anoche. Esto es tonto, parezco niña enamorada. Bien, si estoy enamorado. Pero esto es normal ¿no? Pensar en esa persona todo el tiempo.
Quedamos de vernos en la tienda de música de siempre dentro de 3 horas. Necesito un poco de café, aun tengo sueño. Me quede dormido una hora junto a Yamaguchi, después de que regrese a casa ya no pude dormir. Mi celular vibra, puedo escucharlo.
*Tsuki, hola. Disculpa, llegare media hora después de la acordada. Te quiero.
Bien, al menos aviso, me disgustaría mucho tener que esperarlo media hora, pero siendo sincero creo que si lo esperaría.
*bien, te veo después.
Me ducho y me pongo algo de ropa ligera. Ya casi es hora, es un día muy caluroso, odio los días así. Me pregunto si Yamaguchi, tuvo algún problema como para retrasar nuestra cita media hora. Si es así debió ser algo muy importante.
Salgo de mi casa y llego a la tienda, no es una tienda muy grande, pero tiene de todo tipo de música y siempre esta actualizada. Me agrada este lugar. Valla, Yamaguchi ya esta aquí.
-hola, disculpa por retrasar la hora, pero tuve que cuidar de un pequeño.
-ah ya veo, bien entremos.
-si – me responde entrando a la tienda después de mi.
-mira Tsuki. ¿no te parece lindo? –me muestra unos audífonos con el diseño de una nota musical en los laterales.
-si, si lo son. Pero prefiero los mas discretos –le digo.
-pero se te verían bien –pone cara de niño asiendo un puchero, se ve adorable, ni siquiera yo le negaría algo a una carita así.
-los comprare, necesito unos de repuesto –le digo tomando los audífonos.
-no, deja que yo los pague.
-esta bien –será un reglo de la persona que me gusta. Yo debería regalarle algo. ¿pero que?
Estuvimos casi una hora dentro de la tienda. Escuchando música, mirando los artículos que tenían, son cosas que me gustan a mí, pero no tanto a Yamaguchi, y aun así me acompaño.
-¿quiere ir a un lugar en especial? –le pregunto.
-¿Qué? No, donde tu quieras ir esta bien.
-vamos, no es divertido si solo vamos a donde yo quiero ir –mi voz casi es un susurro –también quero ir a lugares que a ti te gustan.
-te estas volviendo mas expresivo jeje –dice mirándome a los ojos, siento que de alguna manera disfruta mi gesto de incomodidad.
-si no quieres ir, me parece mejor –le doy la espalda y camino un poco.
-no espera –me sostiene del brazo –esta bien Tsuki, vallamos a un lugar que me gusta.
Salimos de la tienda, y nos dirigimos a… ni siquiera se a donde vamos, Yamaguchi solo me dijo que lo siguiera.
-ya estamos aquí –dice señalando el lugar.
Una tienda de antigüedades, a él le gustan estas tiendas. Entramos y se escucho la campanilla de la puerta, típico de un lugar así.
-hola, bienvenidos –se escucha el saludo desde el mostrador.
-hola –responde Yamaguchi.
-ah es usted –¿conoce a Yamaguchi? –¿hoy no viene con su otro amigo?
¿Qué… otro amigo? Imagino que viene por aquí muy seguido, como para que lo reconozcan, ¿pero con quien viene?
-ah… hoy no –responde nerviosamente.
Nos dirigimos al fondo de la tienda, pequeño tendrás que explicarme muy detalladamente todo eso.
-¿y… con quien sueles venir? –tengo que saber.
-con Yue –difícilmente dice.
-ahh –es todo lo que digo.
-Tsuki, ¿te agrada este lugar?
-si, es un lugar tranquilo –es la verdad, de haber conocido este lugar antes, probablemente seria una de mis tiendas favoritas.
-me alego –dice sonriendo y yo también le sonrió.
-oh mira –le digo mientras veo unos pulseras bordadas con letras.
-ahh son lindos –Yamaguchi toma uno entre sus manos y lo observa.
-¿te gusta? Lo comprare para ti –le digo mientras le sonrió.
-si me gusta, buscare una letra –empieza a escoger entre el montón de pulseras.
-una con tu inicial estaría bien –le digo.
-no -¿no? –quiero una con tu inicial.
-¿con la mía? ¿Por qué?
-porque así podre tener una marca tuya, una que nunca se borrara –tonto, yo podría hacerte una todos los días.
-je me parece bien –no hay nadie, lo tomo de la barbilla y le doy un suave beso –pero en verdad disfruto marcar tu piel.
-podrás seguir haciéndolo –me vuelve a besar.
Podría seguir besándolo, pero no creo que sea el lugar indicado. Seguimos observando, compramos las pulseras entre otras cosas. Fue realmente divertido, definitivamente regresare a este lugar. Salimos de la tienda y nos dirigimos al parque para descansar un rato.
Escuche vibrar el celular de Yamaguchi, lo saco rápidamente y leyó el texto que le enviaron.
-Tsuki, es Nishio. Dice que si vamos ahorita a u casa, que los demás están allá.
-no –no arruinare mi domingo con esos.
-eso imagine –me dice mientras responde el mensaje de Nishio.
Mi celular sonó, ay no es el capitán… si no le respondo… no, definitivamente tengo que responder.
-si diga…
-¡ustedes, vengan en este momento, son los únicos que falta! –dice
-¿Por qué tendría que ir? ¿y como sabe que estoy con…
-eso es lo mas lógico, y porque disfrutaremos de la piscina de Nishio. Así que vengan de una vez –eso era mas bien una orden.
-no
-creo que Yamaguchi necesita relajarse un poco, después de todo casi puede decirse que erdio un amigo.
-¿Cómo… -creo que nada se le escapa a Daichi.
-en menos de media hora los quiero aquí - Daichi corto la llamada.
-Yamaguchi, vamos –digo resignado.
-si, me parece divertido. Ya que no iré a la playa, al menos iremos a divertirnos con los demás –es por Yamaguchi.
Llegamos a casa de Nishio, aun no entramos pero puedo escuchar los gritos y risas de los demás, que escandalosos. Entramos y nos dirigimos al jardín de atrás donde todos se encontraban.
-ah ya llegaron –dijo Nishio que se encontraba sentado junto a la piscina.
Es verdad Daichi no mentía, todos ya estaban ahí.
-me alegro de que hayan podido venir –Daichi sonreía casi como si no me hubiera obligado a hacerlo.
-si –le respondo pasándome de largo y evitando saludar a todos.
-Yamaguchi, ¿vas a entrar a la piscina? Te puedo prestar unos shorts para baño.
-Si claro. Gracias –responde, mientras lo sigue.
Me miran pero yo desvió la mirada y camino hacia una silla que se encontraba cerca. Yo no pienso meterme ahí, no es de mi gusto. Tal vez lo haría si Yamaguchi y yo fuésemos los únicos.
-no vas a entrar –el rey estaba completamente mojado.
-no –le respondo secamente.
-eh veras, lo de ayer… -es verdad lo vi besarse con el enano.
-lo de ayer no me interesa –le digo.
-ahhh –suspira pesadamente –eso pensé, solo no lo cuentes a nadie vale –se va de nuevo hacia la piscina.
Todos parecían divertirse mucho. El rey jugaba con el enano. Daichi, Sugawara y Asahi conversaban felizmente mientras tenían solo los pies dentro del agua. Y Tanaka… flotaba como una tabla de madera sobre el agua. Prácticamente parece un muerto.
-bien ya estamos todos, que empiece la diversión –grito Nishio mientras salía de la casa con Yamaguchi detrás de él.
Puso algo de música, no muy fuerte para mi gusto. Yo solo observo a todos, aunque no lo parezca, observar también es divertido. Yamaguchi reía, la forma en la que jugaba con los demás era como la de un niño. Me alegro de que se este divirtiendo, creo que hay algunas cosas en las que con los amigos se olvidan mas rápido. Tal vez Daichi esperaba esto.
-¿Cómo termino lo de ayer? –Sugawara se acercaba a mi.
-¿a que te refieres? –en verdad no se a que se refiere.
-bu… bueno veras, es algo de lo que me di cuenta hace poco. Tú sales con Yamaguchi ¿no? –que discreción la suya.
-ah…si –le respondo.
-ayer, pude escuchar la discusión de ustedes tres… ah fue por accidente –dice agitando las manos.
-bueno es un problema que ya se soluciono –le digo, nunca crei tener un tema de conversación así con él.
-me alegro –sonríe –bueno, como no creo que te unas al resto, te mandare a Yamaguchi para que te haga compañía. Me da la espalda y se va.
Cuando Sugawara llega junto a Yamaguchi, le dice algo y este se dirige hacia mí.
-¿Qué pasa? –es verdad que quería estar con él, pero se estaba divirtiendo mucho –aun no tienes que regresar.
-es divertido si. Pero también es divertido estar junto a ti –pequeño tonto, harás que te de un beso justo aquí.
-bien, siéntate –le digo señalando la silla junto a mi –deberías secarte, te dará frio.
-así esta bien, volveré a entrar dentro de un rato.
-Bien, como quieras –las gotas de agua que corren por su cuerpo lo hacen ver de cierta manera… mmm como decirlo… un tanto sexi, creo que esa es la palabra. No podre resistirme, quiero besarlo. No me importa el resto, solo quiero probar esos labios que hacen que…
-¡¡¡¡¡AHHHHH!!!! –el grito me saco de mis pensamientos.
Demonios, lo bese, le estoy besando mejor dicho. Estaba tan idiotizado que me deje llevar. Ahora todos nos vieron. Yamaguchi tiene la cara mas roja que… ahhh que hago.
-tsk… lo lamento, espero que no te incomode –le digo. Él solo hundía su cara en mi pecho.
-¡¡Tanaka, no hagas escandalo!! –Daichi le lanzo una bolla a la cabeza.
-lo lamento Daichi, pero es algo inesperado –dice mientras intenta no caerse por el golpe recibido.
-Tanaka eres muy lento –Kageyama se tocaba la frente –demasiado.
-jejeje el amor es increíble –dice Nishio mientras sonríe de forma divertida.
-¡hey Yamaguchi! –el enano grito, y Yamaguchi levanto la cara para verlo –no te apenes, jaja es bueno tener a alguien que te corresponda –creo que él comprende a Yamaguchi mejor que nadie.
-chicos –lo escucho susurrar.
-wajjajaja así que el vampiro de Yamaguchi ere Tsukiyama –Tanaka se ríe a mas no poder, y todos los demás intentan contener la risa.
-ya muchachos –dice Daichi –dejemos eso.
No pensé que lo tomarían así, me alegro de que sean como son, aunque en ocasiones son insoportables. Yamaguchi ya no esta rojo por lo sucedido, ahora esta mas alegre, la confianza regreso a él.
-te amo –me toma de la mano y me mira sonriéndome.
-yo también te amo –le digo apretándole mas la mano. Lo amo, y es algo que no me apena decir en público, porque quiero que todos lo sepan.
-ahh el amor –escuche a Tanaka decir.
-shhh arruinas el momento –dijo el enano. No me di ni cuenta de como fue que llegaron hasta donde estábamos. Parecen niños mirando un espectáculo.
Daichi y Asahi tomaron a Tanaka de ambos brazos y se lo llevaron, mientras el rey prácticamente arrastro al enano.
-déjenlos ya –dice Sugawara mientras lanzan a Tanaka y al enano al agua.
El día de hoy, es un día que no podre olvidar, un día en el que sin querer revele que la persona con la que estoy es Yamaguchi, pero es algo de lo que jamás me arrepentiré, algo que jamás cambiaria.
-Yamaguchi, te amo –le toco las mejilla y lo acerco a mi para poder besarlo. Esperaba otro escandalo, pero veo que los demás sonríen de forma alegre, es bueno tener amigos así, creo que a ellos tampoco los cambiaria.