-Toma asiento-invitó Kai señalando el sofá que se encontraba frente al cual él ya estaba sentado.
Tomo asiento sin articular ni una sola palabra con la mirada fija sobre la bella mesita de centro que los separaba el uno del otro evitando en todo momento ver el rostro del moreno porque de lo contrario iba a cometer una tontería aún más grande que la que ya cometía.
-Como vamos a casarnos creo que lo ideal sería conocernos más-propuso el moreno haciendo que su cuerpo se tensara por completo, lo decía como su nada, como sí realmente fuesen a ser la pareja perfecta y feliz.
-Sí-respondió en voz muy baja apretando los dientes.
-Bueno yo sé que te llamas Do Kyungsoo y que tienes veintitrés años y bueno tú...tú ya sabes que me llamó Kim Jongin pero quiero que me digas Kai, claro eso siempre y cuando no estemos en público, entonces, ¿a qué te dedicas exactamente Kyungsoo?-pregunto con la esperanza de mantener una conversación cordial con el chico.
-Trabajo en una cafetería por las mañanas y en...una tienda de electrónica por las tardes-murmuro apenas.
-Bien pues eso ya no hará falta, dejaras ambos trabajos-ordenó, Kyungsoo se mordió la lengua para callarse aún cuando su cabeza le gritara que se pusiera de pie y le preguntara al moreno con que autoridad le decía todo aquello.
-¿Algo más que deba saber?-cuestionó
-Yo…estudio gastronomía, es mi último año-respondió con la voz apenas audible y sin dejar de mirar al suelo.
-Vaya eso sí que se escucha estupendo, de verdad espero llegar a probar tus platillos-dijo poniendo su mejor sonrisa pero no recibió respuesta de ninguna clase-Bueno yo soy abogado y manejo el bufete de abogados más importante del país, tengo veinticinco años y...no sé, ¿hay algo que quieras saber en particular?-pregunto.
-¿Por qué haces esto, por qué yo?-quiso saber.
-Bueno ya te expliqué las razones que me llevaron a decidir un matrimonio tan precipitado y bueno te elegí a ti porque...además de ser muy lindo se nota en tú mirada que eres alguien bueno-explicó dedicándole una bella sonrisa a Kyungsoo al conseguir que lo mirara finalmente.
Las mejillas de Kyungsoo se ruborizaron ligeramente obligándose a bajar la mirada nuevamente para que evitar que ese hombre lo mirara, había sido un lindo cumplido pero nada quitaba que estuviera haciéndole aquello.
-Yo...te había visto antes...en revistas y en la televisión, eres un hombre con muchas mujeres y hombres tras de ti... ¿por qué no ellos?
-Porque ninguno hubiese aceptado algo pasajero y la única persona con deseos de casarse conmigo no era aceptable para mi abuela que es la encargada de ver que yo cumpla con la voluntad de mi abuelo.
-¿Entonces había alguien que estaba dispuesto a hacerlo?-eso cada vez era más raro.
-Sí...mi novio estaba dispuesto pero ha estado envuelto en varios escándalos y eso no lo hace muy respetable que digamos-dijo formando una mueca de molestia.
-¿Tienes novio?-pregunto asombrado.
-Sí Kyungsoo, yo tengo un novio y ya que tocamos ese tema que me case contigo no implicará de ninguna forma que yo vaya a dejarlo, lo seguiré viendo y bueno, pronto lo conocerás seguramente te caerá bien-aseguro sin dejar de sonreír.
-¿Estas obligándome a que me case contigo aún cuando tienes novio y él incluso sabe además de que acepta esto?-eso era imposible, alguien que de verdad tuviera dignidad jamás permitiría eso por más enamorado que estuviera.
-Bueno le molesto al principio pero yo lo convencí, además, él no puede tener hijos aún cuando de verdad quiere tenerlos por eso...cuando esto termine y tú seas libre yo podré casarme con él y podremos criar juntos al bebé que tú nos darás.
Eso era una locura, era...era...ni siquiera sabía cómo denominarlo, ese tipo y quién fuera que fuera su novio estaban totalmente locos, estaban usando a una persona sin importar sus sentimientos solo por sus propios deseos egoístas, era cruel y era peor porque era de él de quien se trataba todo.
-¿Entonces yo vendría siendo, que?-pregunto tratando de no golpear a Kai-¿Tú vientre de reemplazo, tú puto, tú amante, que sería?-cuestión logrando apenas controlar su enojo.
-Mi esposo, tú serás mi esposo, está será tú casa y podrás hacer todo lo que tú quieras, tú podrás salir de mi mano a la calle y ante todos tú serás el único-su rostro estaba totalmente serio mientras decía aquello y aún así para Kyungsoo no era diferente a una maldita mentira y una burla.
-Así que yo seré a quién presumes como un trofeo y te follas para embarazarlo teniendo que soportar tú infidelidad con quién sabe quién, ¿es así, cierto?-su tono irónico logró que Kai frunciera el ceño lo que al final de cuentas le importaba un infierno.
-¿Acaso estas celoso?
-No claro que no, no mal interpretes sólo quería saber el poco amor propio que se tiene esa persona que está dispuesta a soportar esto-se burlo-No te preocupes que me da igual lo que hagas y dejes hacer, yo cumpliré con lo pactado sin problemas, no me gustan los niños y la verdad no planeaba tenerlos por eso no será un problema además ayudó a un pobre desesperado-dijo mostrándole al mayor una sonrisa arrogante que lo hizo mirarlo con desprecio-Bueno y sí esto es todo yo...
-Quiero que te quédese aquí está noche-pidió aunque era una obvia orden.
-Bien me da igual y sí ya terminamos me voy a dormir, oh casi lo olvido...ni pienses que vas a tocarme hasta la noche de bodas porque sí te me acercas antes de eso te mato-advirtió.
-¿Tan repulsivo te resultó?
-Sí, tal vez a ti te de igual pero yo soy virgen y quiero que siga de esa forma hasta ese maldito día, por lo menos quiero hacerme a la idea de lo que tendré que soportar-murmuro transmitiendo lo miserable que se sentía.
-Kyungsoo yo no...
-Quiero dormirme ya-interrumpió.
-Bien-asintió-Ryeowook-llamó con voz imponente.
Un encantador y joven hombre de adorable apariencia entró a la habitación mirando fijamente a Kai que por su mirada era obvio no le caía para nada bien aún cuando era igual de obvio que trabajaba para él.
-¿Llamó el señor?-su tono era respetuoso y desdeñoso a la vez.
-El es Kyungsoo, mi prometido por favor llévalo a su habitación-solicitó educadamente.
-¿Prometido, se canso ya entonces del libertino con el que salía?-pregunto con evidente burla.
-Ryeowook-llamó severamente Yesung.
-Ya entendí-suspiro resignado-Por favor sígame joven Kyungsoo-pidió con una bonita sonrisa.
Kyungsoo asistió tímidamente poniéndose de pie sin mirar ni un sólo segundo a Kai y siguió al lindo castaño que iba a llevarlo a su habitación, ese día había sido una maldita pesadilla y esperaba de alguna forma que al entrar a la cama y cerrar los ojos todo desapareciera por completo cuando volviera a abrir los ojos quedando como el más horrible sueño que hubiera tenido nunca.
-Llegamos-indicó el castaño abriendo la puerta para él.
-Muchas gracias-sonrió consiguiendo una linda sonrisa de aquel empleado que luego de una reverencia se marchó dejándonos solo.
Su mirada observó con mucha lentitud y atención cada detalle de aquella habitación que estaba seguro iba a ser suya a partir de ese día hasta que todo aquello terminara, ¿por qué rayos había aceptado aquello?, se pregunto a sí mismo.
Oh es verdad, todo era porque su madre estaba al borde de la muerte y eran tan jodidamente pobre que apenas tenían para él día a día, no culpaba a su madre de ninguna manera, eso jamás porque sí alguien merecía que él aceptará aquello y más era ella pero no dejaba de ser todo tan injusto.
¿Qué habían hecho de malo ellos para que eso les pasará?, su madre era una mujer excepcional, no era perfecta eso lo sabía pero en verdad ya había sufrido lo suficiente como para que aún tuviese que cargar con toda esa basura y bueno sí era alguna clase de castigo para él era malditamente injusto que quisieran hacerlo a costa de su madre que era tan buena y no lo merecía.
En realidad ahora que recordaba a su madre también recordaba que tenía que inventar algo para explicar lo de Kai porque estaba seguro como el infierno que ella iba a querer saber todo acerca de como su hijo había terminado casándose con Kim Jongin, uno de los hombre más ricos del país sin decirle nada, pero eso no era lo peor de todo y lo sabía, lo peor era tener que decírselo a sus amigos, sobre todo a Baekhyun al cual sabía que perdería, sí, ya sabía que en realidad jamás lo había tenido pero con eso él de verdad estaba perdiendo las pocas esperanzas que había logrado albergar.
En verdad no se explicaba como todo eso le estaba pasando a él, él sabía que no era un santo pero tampoco era tan malo, procuraba ser buen hijo, buen amigo y en general buen ser humano, entonces, ¿por qué?, seguramente jamás lo sabría.
Al día siguiente levantarse fue una odisea ya que apenas había conseguido dormir en toda la noche, era muy temprano cuando se obligó a salir de la cama, nadie estaba despierto entonces y aprovechó eso para salir de esa mansión sin que nadie lo notara, necesitaba caminar porque eso siempre lo había ayudado a pensar sobre todo lo que lo afligía.
Llegó a su casa luego de un largo tiempo sorprendiéndose cuando vio un lujoso auto negro frente a la puerta de su hogar, debía saber ya que ese tipo no iba a dejarlo escapar de ninguna forma aunque en realidad no había tratado de huir sí no sólo había ido a caminar, suspiro dándose valor para continuar su camino hasta la puerta de su casa fingiendo que jamás había visto al moreno ahí.
-No puedes irte sin avisar, me preocupe-le dijo en cuanto estuvo frente a la puerta.
-¿Seguro que solo fue eso o temías que me escapara?-soltó con ironía.
-Kyungsoo yo de verdad me preocupe, pensé que algo había pasado, pensé que tú madre se había puesto mal y te habías ido por eso pero al saber que no fue eso vine aquí, no vuelvas a desparecer así por favor-pidió amablemente aunque era obvio que estaba irritado.
-Te recuerdo que aún soy alguien libre además de que tengo que ducharme y en tú casa no había ropa mía-explicó de mala gana.
-Pudiste decirme, hubiera enviado a alguien por tus pertenencias-aseguro.
-No, además yo aún quiero seguir con mi vida lo más que pueda-lo escucho suspirar y en cuanto abrió la puerta se giro para mirarlo con los brazos cruzados.
-¿Qué?-pregunto el mayor al ver su expresión.
-Nada-rodó los ojos-¿Quieres pasar?-la realidad era que no quería invitarlo pero era educado y tenía que.
-Está bien-acepto, Kyungsoo se hizo aún lado dándole espacio para que pasará y luego lo siguió al interior.
El moreno miro curioso aquel pequeño lugar con las paredes de color lila, todo era tan humilde pero sin duda acogedor, se notaba que carecían de posesiones materiales y aún así se sentía tan cálido y agradable estar ahí dentro.
-Seguramente jamás has estado en un lugar así de pequeño, ¿verdad?-cuestionó con incomodidad ante la cara de Kai.
-No pero...en verdad parece agradable-una sonrisa se dibujo relajado un poco más a Kyungsoo.
-Lo es, sobre todo cuando mamá está aquí-afirmó como sí susurrara.
-Estoy seguro que sí-sonrió.
-¿Bueno quieres algo de beber o desayunar?-pregunto educadamente recibiendo una negativa del moreno-Bien entonces toma asiento mientras me doy una ducha y me cambio de ropa para así poder irnos al hospital-Kai asintió y se sentó en el único sofá que había-No tardo.
-Kyungsoo-llamó el moreno.
-¿Qué?
-Te voy a pedir que por favor no dejes de usar el anillo de compromiso no importa a donde vayas-solicito, Kyungsoo se quedo un momento sin saber que decir antes de asentir e irse al baño.
La noche pasada una vez que se había visto totalmente solo se había quitado aquel anillo y esa mañana al levantarse no había deseado ponerlo nuevamente sobre su dedo y lo había guardado en el bolsillo de su pantalón, lo saco de su escondite al igual que su celular.
Necesito hablar con ustedes sobre algo muy importante, nos vemos en tres horas donde ya saben.
Luego de enviarle aquel mensaje a Baekhyun se dispuso a hacer lo que tenía que hacer, Kai lo esperaba en la pequeña sala de estar de su casa sin emitir ningún ruido y no sabía si eso era algo bueno o debía preocuparse, miro la puerta con atención y no lo pensó dos veces para ponerle seguro por cualquier cosa, no podía confiar en aquel hombre.
Había pasado todo el rato mirando con curiosidad todo lo que había en aquella casita, era poco lo que había encontrado pero todo era agradable, la puerta del baño por fin se abrió y de ella vio salir a Kyungsoo completamente vestido, su ropa era tan sencilla como él y se notaba que era algo vieja, debía cambiar eso pero ya habría tiempo, su pelirrojo cabello estaba mojado y no pudo evitar pensar que se veía muy tierno de esa forma.
-Listo, vámonos-indico a lo cual él únicamente asintió.
El viaje al hospital fue en completo silencio resultando un tanto incomodo para él moreno pero era obvio que Kyungsoo no iba a hablar ni aunque se lo suplicara, cuando vieron a Yunho este les aviso con una sonrisa que la madre del menor ya había despertado y que podía pasar a verla sí quería.
La sonrisa que Kyungsoo puso en ese momento dejo a Kai atontado por un momento, era hermosa, el menor no espero nada y salió disparado a la habitación de su madre para verla, corría tan rápido como podía ignorando a las enfermeras que le decían que no debía hacer eso, abrió la puerta de golpe encontrando a su madre sentada sobre la cama sonriéndole de esa bella manera que la caracterizaba.
-¡Mamá!-casi grito acercándose a ella para abrazarla sin poder contener sus lágrimas-Estoy tan feliz yo…yo…estaba tan asustado-dijo entre sollozo sintiendo como ella acariciaba su cabeza con cariño.
-Lo siento bebé, lamento mucho haberte asustado-se disculpo separándose un poco para poder besar la frente de su hijo.
-No hay absolutamente nada de que disculparse mamá, todo estará bien, de ahora en adelante todo irá bien-prometió.
-Buenos días-saludo educadamente el médico-¿Cómo se siente señora Do?
-Muy bien doctor, muchas gracias por estar tan al pendiente de mi-sonrió agradecida al galeno que le devolvió el gesto.
-Me alegra saber que está mejorando señora-la mirada de la dulce mujer se poso sobre él viéndose claramente confundida ya que era más que obvio que parecía reconocer quién era, también resultaba obvio que no tenía idea de que hacia ahí.
-Oh pero si es…el heredero de los Kim pero que… ¿qué hace ustedes aquí?-dijo ella evidentemente sorprendida.
-Bueno vera…
-Mamá… ¿recuerdas que te dije que había alguien que me gustaba?-intervino Kyungsoo, la confundida mujer asintió despacio esperando a que su hijo continuara-Bueno…él es Kim Jongin mi prometido-confeso o mejor dicho mintió tomando la mano de Kai mostrando su mejor y más falsa sonrisa para ella.
Su madre se llevo las manos a la boca evidentemente sorprendida con aquella revelación, miro a su hijo y luego al hombre que en ese momento sabia era su yerno, no sabía que decir además de que todo le resultaba demasiado extraño.
-Pero…pero ¿desde cuándo?-pregunto ya que lo único que Kyungsoo le había dicho era que alguien le gustaba hacía varios meses atrás pero nada más.
-Seis meses-respondió el pelirrojo que era evidente para Kai que ya tenía un plan y por la forma que apretaba su mano no debía abrir la boca para nada.
-¿Cómo es que lo conociste?-continuo interrogando su madre
-Un día de casualidad fue a la cafetería donde yo trabajo, intercambiamos un par de palabras y sorprendentemente él se volvió cliente habitual del lugar y fue...fue tan sólo cuestión de tiempo.
-¿Por qué no me dijiste nada de su relación entonces?
-Mamá lo que pasa es que Jongin es una figura pública y queríamos evitar un escándalo tanto para él como para mi, fue todo para evitar ser molestado por la prensa y todo eso, yo se lo pedí de esa forma-explicó, Kai de verdad estaba sorprendido Kyungsoo era muy bueno inventando historias y eso igual podría resultar un poco peligroso para él.
-Él dijo que iban a casarse, ¿cuándo decidieron eso y por qué no me lo habías dicho?
-Lo decidimos hace un mes atrás, él me lo pidió y acepte, la boda sería la próxima semana e iba a contarte ayer pero…-su mirada viajo hasta el piso viéndose de verdad triste y lo estaba, odiaba estar mintiéndole a su madre pero, no podía decirle la verdad, no quería defraudarla.
-Tal vez lo mejor sería aplazar la boda-dijo Kai hablando por fin.
-No claro que no, si todo ya estaba decidido se hará, mi hijo merece ser feliz y si tú eres su felicidad yo estaré muy feliz también, no se preocupen por nada más así que sigan con sus planes-pidió ella.
-Gracias mamá, eres la mejor-ella sonrió al volver a ser rodeada por los brazos de su hijo, estaba tan feliz de saber que su hijo por fin había encontrado a alguien que cuidaría de él si ella llegaba a faltar-Muy bien entonces-sonrió desviando su mirada a Kai-Usted y yo tenemos mucho de que hablar así que venga aquí para que podamos hablar sobre mi pequeño-Kai asintió nerviosamente y se acerco a la dulce mujer para hacer lo que pedía.
-Bueno ya que ustedes deben conocerse yo…tengo que ir a ver a Baekhyun, no me tardo-informo.
-¿Quieres que te lleve?
-No Jongin así está bien, no tardo, quédate con mi madre que seguramente quiere saberlo todo de ti-pidió, él asintió algo inconforme y lo vio irse sin decirles nada más.