Los nervios lo estaban molestando demasiado mientras su mirada se mantenía fija en Minho que continuaba con la misma rutina de todos los días, él había aparecido hacía dos meses atrás con una sonrisa enorme diciéndole que era su médico personal y que iba a cuidarlo durante todo momento y a toda hora, quiso creer entonces que todo era por capricho de Jongin pero esa idea desapareció y trajo consigo la preocupación cuando Minho comenzó a darle medicamentos, que según él, eran simples vitaminas pero sabía que no era eso y lo sabía por lo estricto que era Minho respecto a su consumo.
En ese momento supo que algo estaba pasando pero que nadie le estaba diciendo, trato de preguntarle a Yongguk pero su escolta le dijo que no sabía absolutamente nada más que lo que Jongin ya le había dicho con anterioridad respecto a su estado, sabía que estaba mintiendo pero también sabía que no iba a obtener ni una sola palabra de él.
Trató de preguntarle a Ryeowook pero tampoco dijo nada además de que el mayor últimamente estaba bastante distante con él y todo debía ser a causa de las horribles cosas que la señora Haneul le había dicho a Yesung, su intención era vengarse de todo lo que Jongin le había hecho pero jamás pensó que todo eso terminaría arrastrando a otras personas también y se sentía de lo peor com ambos mayores, Yesung no podía ni verlo y Kyungsoo lo sabía ya que veía en los ojos ajenos todo lo que odiaba tener que ir a verlo cuando Jongin se lo pedía.
Y Jongin, él le pedía a todos estar al pendiente de cada cosa que pidiera, lo dejaba hablar cada vez que quería con su madre o con sus amigos y tal vez ya les hubiese dicho donde estaba si tan sólo supiera porque aunque Jongin hacia que cumplieran cualquiera de sus caprichos nadie le decía donde estaban exactamente ni lo que estaba mal con él y todo eso lo desesperaba.
De alguna forma Jongin lo había notado porque esa era la única explicación que Kyungsoo encontraba para que de la nada Yesung fuese a hacerle saber que Jongin quería hacer una fiesta para él permitiéndole invitar a quién quisiera para así dejarlo ver a sus amigos y a su madre, era obviamente intentó para tenerlo tranquilo y aunque al principio se había sentido muy feliz por eso pero seguía angustiado por el hecho de saber que necesitaban mantenerlo tranquilo para así poder controlar lo que fuera que estuviera mal con él y sin poder evitarlo comenzó a temer que su hijo tuviese algún problema.
Minho le dio una sonrisa amable cuando termino finalmente de revisarlo y le dijo que todo estaba bien, de eso ya no estaba seguro porque desde que Minho había aparecido estaba demasiado angustiado, Minho era un gran hombre y además de cuidarlo había sido la persona que más lo distraía, al principio ambos se pasaban todo el tiempo charlando en su habitación porque no podía moverse de la cama y aunque no sabía que estaba mal Kyungsoo había obedecido todas las intrusiones del mayor.
Actualmente Minho le permitía salir a caminar durante un tiempo y en su compañía, había descubierto entonces que estaban en un lugar lejos de todo rastro de civilización y aunque al principio se molesto al final tenía que admitir que era un lugar bastante bonito.
-Minho hyung-llamó cuando el mayor comenzó a poner todo en orden.
-¿Dime?-respondió con su habitual sonrisa tranquila y amable.
-¿Qué tengo?-preguntó angustiado.
-Bueno Jongin…
-No, yo no quiero escuchar lo mismo que Jongin hace que todos me digan, quiero la verdad y la quiero ahora-exigió-Sé que algo está mal y necesito saber, estoy asustado y nadie me dice pero te traen aquí además de que también comienzo a tomar medicamentos sumado a que nadie deja que haga nada, algo pasa y nadie me dice por alguna razón pero yo necesito y quiero saber que está mal porque si algo le pasa a Kai voy a volverme loco y si necesito elegir entre mi propia vida y él, yo…
-Matarías a Jongin de tristeza si te escucha decir eso-interrumpió viendo como Kyungsoo se quedaba en silencio y agachaba la mirada.
Minho lo miró seriamente durante unos instantes antes de suspirar resignado y terminar asintiendo a su petición Kyungsoo estaba mucho mejor y podría decirle ahora, no estaba seguro de que Jongin estaría feliz pero Kyungsoo necesitaba saber y ahora que sólo faltaban dos meses más para que Kyungsoo diera luz podía saber.
-Te diré-dijo finalmente recibiendo una mirada de agradecimiento de parte del menor-Ya estas mejor y siempre le dije a Jongin que lo mejor era que tú supieras la verdad y no que te mantuviera protegido de todo-explicó con cansancio.
-¿Protegido?-preguntó confundido.
-Kyungsoo, todo esto de traerte aquí no es un simple capricho de Jongin, te equivocas sí crees que de la nada él simplemente quiso que fuese así, todo lo hizo por tu bien-aseguró.
-¿Por mi bien?-bufó-Esto no es por mi bien, esto es porque por alguna estúpida y extraña razón odia la idea de pasar el resto de su patética vida solo y ahora quieres obligarme a quedarme a su lado-sentenció.
-No es así-dijo Minho seriamente.
-¿No?-Minho negó-Muy bien entonces explícame, dime porqué tú tienes razón y yo estoy equivocado-exigió.
-Porque, en primer lugar, fui yo quién le dijo que debía traerte aquí-confesó dejando a Kyungsoo sin palabras.
-P-pero por...porque tú...
-Cuando pasó lo de Luhan, Jongin me llamó diciéndome que habías estado a punto de perder a Kai, estaba desesperado y quería que yo le diera una solución, hablé también con el doctor que atendió tu caso y me explicó la seriedad de tu situación, tú no estabas bien emocionalmente y eso había provocado el riesgo de un aborto "natural" que no sólo ponía en riesgo a tu bebé sino también a ti, Jongin lloró como un recién nacido cuando se lo dije, tenía tanto miedo de perderlos a ambos, estaba desesperado porque temía que cuando tú te enteraras no soportaras todas esas cosas horribles que los fans de Luhan y otras personas decían de ti o que te asustaras por todas las amenazas hacia tu persona, él necesitaba una solución y alejarte de Seúl por un tiempo fue lo mejor que se me ocurrió sugerirle pero yo realmente nunca pensé que el muy estúpido mantendría todo en secreto y te secuestraria, como tú dices pero...él lo hizo porque no quería que tuviese miedo o que lloraras al saber que tu vida y la del bebé estaban en riesgo, él estaba preocupado al pensar que tú podrías culparte por algo, que según él, es tan sólo su culpa-finalizó con un largo suspiro.
-Yo no...
-Tan sólo piénsalo Kyungsoo, si todo esto fuera por las razones que tú dices no crees que te habría echado de su vida luego de lo que hiciste con la señora Haneul, además, el es Kim Jongin, un excelente partido para cualquiera, podría tener a cualquier otra persona pero te eligió a ti, no me preguntes porque pero sé que eres tú-aseguró con una sonrisa.
¿Lo había elegido a él sobre todos los demás?, era tan difícil de creer que no sabía que pensar pero Minho no tendría ni una sola razón para mentirle además de que Jongin había hecho todo eso para protegerlo de todo el mundo que había intentando dañarlo y de pasó también lo había protegido de sí mismo.
Jongin había soportado cada insulto, desprecio, grosería y palabra hiriente de su parte además de lo que le había hecho pasar luego de abrir su enorme boca con la señora Haneul, se sentía de lo peor en ese preciso momento que ni siquiera tenía el valor para mirar a Minho cuando él puso una mano sobre uno de sus hombros.
-Él no está enojado contigo-aseguró.
-¿Por qué no?-preguntó en voz baja-Tiene todo el derecho a estarlo-afirmó.
-Pero no lo está, en verdad-dijo con una amplia sonrisa.
-Yo debo pedir perdón por tantas cosas que no tengo ni idea de cómo comenzar y tampoco sé si él pueda perdóname por todo lo que le hice.
-Lo hará-aseguró.
-Pero...
-Él se ha culpado por absolutamente todo y piensa que todo esto es un castigo por ser un idiota por eso estoy seguro de que cuando tú hables con él lo harás muy feliz-asintió dejando salir una suave risita.
Kyungsoo no estaba convencido de las palabras ajenas pero de cualquier manera asintió a sus ellas, Minho cambió de tema luego de eso y le mostró fotografías de su hija tratando de animarlo pero aún cuando sonrió la mayoría del tiempo no se sentía mejor, se sentía como un estúpido y todo el remordimiento que había sentido al ver la tristeza en los ojos de Jongin aquel día que le había confesado todo a la señora Haneul volvió multiplicado al triple.
Lo que había hecho todo ese tiempo era simplemente imperdonable y dudaba que Jongin fuese a olvidarlo todo con un simple "lo siento" de su parte, pasó toda su tarde reflexionando acerca de todos y cada uno de sus errores a sabiendas que no podía regresar el tiempo por más que así lo deseara y convenciendo de que lo único que le quedaba por hace era resignarse para aprender a vivir con ellos.
Escuchó el eco del sonido que hacia aquel viejo reloj de madera cada cierto tiempo, el enorme y viejo reloj estaba en la sala de estar junto a la chimenea y a Kyungsoo le había gustado desde la primera vez que lo había visto, miró por la ventana apreciando los brillantes colores rojizos que comenzaban a dar pasó a los azules oscuros que traían consigo la noche, suspiró con cansancio antes de obligarse a levantarse de la cama e ir a buscar algo dulce que comer antes de la merienda.
Las sombras estaban comenzando a inundar la gran mansión dándole un aspecto misterioso y agradable, le gustaba mucho como era ese lugar de noche, seguramente a algunas personas les daría miedo la imagen algo tétrica de la vieja mansión pero a él no y era por eso que luego de que Minho le había dado el visto bueno el se permitía disfrutar de pasear un poco por los alrededores cuando era de noche, claro que Jongin le había hecho saber por medio de Ryeowook su preocupación y lo obligaba a tener compañía durante sus paseos.
Llegó finalmente a la cocina deteniéndose en la puerta cuando se encontró con Jongin ahí, estaba con las manos sobre el fregadero y mantenía los ojos cerrados, había un vaso de cristal a su lado con residuos de lo que parecía ser leche pero lo que realmente captó la atención de Kyungsoo fue la demacrada imagen de Jongin, estaba pálido y desaliñado, también parecía exhausto y aunque Kyungsoo no estaba seguro se veía algo más delgado.
Su corazón se estrujó ante la preocupación y el remordimiento que ya sentía se volvió aún peor porque aunque nadie se lo hubiese dicho sentía que eso era su culpa.
-Jongin-lo llamó suavemente para no asustarlo, él llevó su mirada hasta dónde estaba y su pecho dolió aún más cuando él le sonrió.
-Hola, ¿pasa algo?-preguntó.
Estoy preocupado por ti-No yo...sólo quería...algo de comer antes de la merienda.
-Pudiste pedírselo a Ryeowook, no deberías salir de la cama-lo reprendió cariñosamente.
No te hubiese visto entonces-Ryeowook hyung no está, me dijo ayer que te pidió permiso para ir con Yesung hyung al pueblo a pasear.
-Es verdad, lo había olvidado-sonrió avergonzado-De cualquier forma, dime que quieres y yo hare que lo lleven a tú habitación así que por favor ve a la cama-pidió suplicante.
Te quiero a ti pero no me atrevo a decírtelo-Yo...me gustaría comer contigo.
Jongin lo miró al principio sorprendido pero la sorpresa rápidamente fue remplazada por la seriedad y Kyungsoo pensó que le diría que no inmediatamente.
-Tengo algunos pendientes que atender pero puedo acompañarte un rato-aseguró con una sonrisa.
-Gracias-murmuró.
-¿Qué quieres comer?-preguntó.
-Venía por algo dulce-dijo nervioso.
-Algo dulce-asintió mientras comenzaba a revisar la cocina en busca de algo que cumpliera con lo que él quería-Hay algo de pie de manzana, ¿está bien eso?-preguntó viéndolo asentir.
Jongin no demoró en cortar un trozo y ponerlo en un plato que luego llevó a la mesa colocándolo frente a Kyungsoo que sonrió un poco a forma de agradecimiento, Jongin también tomo asiento frente a él mirándolo con atención lo cual provocó que se sonrojara.
-¿Tú no comerás?-preguntó.
-No tengo hambre-respondió tranquilamente.
Kyungsoo no dijo nada más y dio el primer bocado con el cual el sabor a manzana y canela se impregnaron en su boca, miró de reojo a Jongin que seguía observándolo con mucha atención y una sonrisa en los labios, era momento de hablar, se dijo a sí mismo armándose de valor para hablar esperando poder aclarar un poco las cosas.
-Jongin-lo llamó.
-¿Qué pasa?-preguntó poniéndole toda la atención del mundo o por lo menos de esa forma lo sentía Kyungsoo.
-Hoy hablé con Minho hyung y...
-Eso no tienes que decírmelo, últimamente ambos son los mejores amigos-soltó con molestia, su sonrisa se había ido y Kyungsoo apenas podía creer que él estuviese celoso.
-Jongin yo no...
-No importa, me estabas diciendo algo acerca de una charla así que, ¿qué te dijo?-preguntó con evidente desinterés.
-Me dijo la verdad-murmuró.
-¿Qué?-habló en un murmullo poniéndose más pálido de lo que ya estaba.
-Me dijo todo Jongin, ¿por qué no me dijiste nada de lo que en verdad pasaba?-preguntó.
-Yo...no quería que te preocuparas por nada, tú tenías que estar tranquilo-explicó nervioso.
-Pero al hace eso tú tuviste que soportar todos mis malos tratos y eso no fue justo-afirmó.
-No importa-aseguró.
-Claro que importa, yo no sólo te trate mal sino que por mi culpa la señora Haneul...
-Está bien-dijo rápidamente poniéndose de pie al notar las intenciones de Kyungsoo por tomar su mano-No tiene ninguna importancia ya lo que pasó así que no tienes de que preocuparte, tengo que seguir con mi trabajo, termina de comer tranquilo y después vuelve a la cama-indicó.
Kyungsoo lo vio alejarse lentamente y se obligó a seguirlo de inmediato, no podía tan sólo permitir que se marchara como sí nada, aún tenía mucho que decirle y miles de preguntas, su mano tomó la de Jongin antes de que cruzara el umbral de la puerta abriendo los ojos desmesuradamente al notar lo caliente que estaba.
-Está caliente-susurró sorprendido.
Jongin intentó entonces alejar su mano pero no consiguió nada más que Kyungsoo lo sujetará con mucha más fuerza, la mirada de preocupación del pequeño pelirrojo fue hasta unirse con su mirada mientras trataba de pensar en una explicación lógica que lo ayudara a tranquilizarlo, no podía ser una preocupación para Kyungsoo, él tenía que estar tranquilo.
-Yo...
-Estas ardiendo-dijo sorprendido y angustiado cuando su mano se posó sobre la mejilla de Jongin.
-No es nada-aseguró con una sonrisa tomando la mano de Kyungsoo para alejarla.
-Tienes fiebre idiota, eso no cualquier cosa-lo regañó.
-Estoy bien-insistió.
-Nada de eso, ahora mismo vamos a la cama, vas a descansar y yo voy a cuidarte toda la noche-sentenció volviendo a sujetar su mano para comenzar a arrastrarlo a su habitación.
-No, Kyungsoo no puedes...
-Ya deja de protegerme tanto, estoy bien y tú también eres importante, no voy a permitir que nada te pase, entiende por favor-pidió angustiado.
-Está bien-respondió resignado permitiendo que Kyungsoo lo llevara a su habitación.
Al entrar le ordenó meterse a la cama mientras él iba a buscar un termómetro y algo para ayudar a bajar la fiebre, Jongin obedeció sin demora para evitarle más disgustos a Kyungsoo y lo espero pacientemente hasta que volvió con el termómetro.
-¿Cómo puedes ser tan descuidado, estás loco o qué?-continuaba regañándolo mientras esperaba que el termómetro hiciera su trabajo, tomó el pequeño termómetro luego de un rato revisándolo suspirando aliviado al ver que no era nada muy grave y que seguramente con algunos medicamentos y una buena noche de sueño se recuperaría-Tal vez debería ir a buscar a Minho hyung-susurró más para él que para Jongin.
-Minho hyung salió hace un largo rato y no ha vuelto-dijo llamando su atención-De cualquier forma no importa, me enfermó de fiebre fácilmente-comentó tratando de aliviar la preocupación de Kyungsoo pero al ver su ceño fruncido supo que había tenido el efecto contrario.
-¿Y esa es tu forma de hacerme sentir mejor?-preguntó molesto.
-Sí...no quiero decir no…lo que intentó decir es...es que es más común de lo que crees así que no hace falta que te preocupes-aseguró.
-¿Qué no me preocupé, estas diciéndome que te enfermas fácilmente y que eres lo bastante estúpido como para no tomarle importancia y quieres que no me preocupé?-bufó.
-Kyungsoo mi salud es lo último que importa sí tú...
-¡No es así, ¿qué sí hubiese sido algo grave?, no puedes tan sólo pasar por alto tu propio bienestar por mí, en el momento que tú empieces a estar mal yo ya no importo!
-¡Tú era lo más importante para mí, no puedes pedirme que simplemente te ignore!
-¡Sí eso te pone en peligro a ti a mí no me importa si me ignoras o incluso si me olvidas!
-¡Entiende que no puedo hacer eso, si te llegara a pasara algo yo no podría perdonármelo!
-¡¿Y tú te crees que yo estaría bien si algo te pasará a ti?!-Jongin iba a contestar pero se detuvo al ver las lágrimas en los ojos de Kyungsoo-No es así Jongin, yo...no podría soportar que algo malo te pasará-susurró débilmente.
Jongin lo miró detenidamente antes de inclinarse y recargar su frente en el hombro de Kyungsoo que limpiaba torpemente sus estúpidas lágrimas.
-Esto era justo lo que no quería que pasará y ahora está pasando por mi culpa, lo siento-habló despacio, el mismo sentía que iba a llorar.
-No tienes que disculparte...tú ya hiciste mucho por mí y yo...yo fui tan injusto pero...pero... ¡es tu culpa por ser un imbécil!-sollozó empujandolo con fuerza-¡Sí tan sólo me hubieses dicho porque hacías esto nada de lo que pasó hubiese pasado!-afirmó-Todo es...
La frase se quedó a medias, sus ojos estaban abiertos como platos y su corazón había comenzado a bombear a toda velocidad mientras los labios de Jongin lo obligaban a callarse de una buena vez, él se alejó de sus labios luego de largos minutos que le parecieron eternos y unió su frente a la suya.
-Sé que estuve mal, todo mundo me dijo que hacia mal por no decirte nada pero yo no quería que tú sintieras miedo ni ningún tipo de preocupación, la idea de que pudieses llorar me atormentaba y pensé entonces que si yo era el único que tuviese que llorar o tener miedo iba a estar bien, trataba de protegerte a como diera lugar y sí al final era yo quién terminaba pagando todos los platos rotos era mejor, por eso no llores ni te preocupes por mí, lo único que importa es que tú estés bien-aseguró.
-Jongin...
-Kyungsoo, se que quieres que nos separamos pero yo...no puedo...no sé que siento y tampoco sé que somos pero no quiero que terminé...soy un desastre ya sé...estoy llenó de errores, soy muy celoso, no sé expresarme, tomó malas decisiones, hago que llores y te preocupes, soy egoísta y por mi culpa tú siempre sufrías...no puedo prometer cambiar eso porque tal vez no pueda pero si decides darme una oportunidad yo...yo puedo prometerte que tú serás la persona más importante para mí, que voy a protegerte y haré hasta lo imposible por hacerte feliz hasta el último día de nuestras vidas cuando ambos seamos muy viejos, hayamos visto a nuestros hijos crecer y formar sus propias familias y entonces muéranos juntos tomados de la mano recordando lo feliz y maravillosa que fue nuestra vida juntos...eso es lo único que puedo prometerte por eso...¿quieres ser mi novio?-preguntó nervioso.
-Eres un idiota-susurró sonrojado y con las lágrimas mojado su rostro-Nosotros ya estamos casados y esperamos a nuestro primer hijo-le recordó.
-Lo sé pero...yo no sabía como...
-Aceptó Jongin-interrumpió con un hilo de voz.
-¿Eh?
-Que yo aceptó, aceptó ser tu novio o lo que sea que vayamos a ser, aceptó pasar hasta el último de mis días contigo y morir a tu lado cuando seamos viejos-dijo con una brillante sonrisa.
Fue entonces el turno de Jongin de luchar por detener las lágrimas cuando finalmente pudo tomar a ese maravilloso y perfecto hombrecito en sus brazos, sus labios volvieron a tomar los labios de Kyungsoo acariciando lenta y dulcemente la boca ajena en un beso que trataba de demostrarle todo eso que él sentía y que aún no conseguía nombrar.
-¿Estaría mal que te hiciera el amor ahora?-preguntó suavemente sobre sus labios.
-Sí-respondió dejando escapar una risita al ver el ceño fruncido de Jongin-Tú estás enfermó y Minho dijo que nada de eso hasta que Kai nazca-dijo divertido.
-Bien-aceptó de mala gana-Aunque de cualquier manera quiero que duermas conmigo-pidió.
-Eso puedo hacerlo-asistió sonriente, Jongin asintió también y abrió las mantas para permitir que Kyungsoo entrara a la cama envolviéndolo en sus brazos en cuanto estuvo a su lado.
-Creo que tu mamá va a matarme cuando me vea-murmuró haciéndolo reír.
-Intentaré protegerte de mi aterradora madre-bromeó.
Ambos rieron y se acurrucaron más cerca el uno del otro, dándose cuenta de la perfecta forma en que ambos encajaban en los brazos contrarios y que así debía ser para el resto de sus vidas, hasta que fuesen ancianos y murieran juntos como había prometido Jongin.