Las punzadas de agudo dolor lo hacían retorcer y la angustia comenzó invadirlo, tenía que hacer algo o podría ser muy tarde, trató de moverse pero le era imposible y sólo empeoraba el dolor, las lágrimas se volvieron incontrolables haciéndose más abundantes mientras el dolor aumentaba, logró arrastrase sobre la cama hasta llegar a la cómoda y tomar su celular pero debido a la tormenta que se avecinaba no había señal.
-¡AYUDA!-volvió a gritar desesperado implorando a todas las divinidades existentes que alguien lo escuchara.
-¡Kyungsoo!-la puerta se abrió de golpe dejando ver a Luhan que tan sólo usaba una camiseta enorme, el corrió a la cama y mirándolo asustado sin saber que hacer.
-Me...duele-sollozó.
-Tranquilo, tranquilo, estoy aquí-dijo Luhan intentando tranquilizarlo.
-Kai...mi bebé...no quiero que...le pase nada-suplicó.
-No, no, él estará bien y tú también-afirmó aunque no estaba seguro.
Kyungsoo sollozó de dolor y Luhan tuvo que obligarse a ponerse de pie para hacer algo pero no sabía que, miró a Kyungsoo retorciéndose de dolor en la cama y lo único que sabía que podía hacer era conseguir ayuda.
-Iré por ayuda-anunció.
-No por favor...no…me dejes-suplicó llorando.
-No voy a tardar, traeré ayuda para ambos-prometió.
Escuchó a Kyungsoo sollozar antes de que terminara de abandonar la habitación y corrió por todos lados en busca de alguien pero el lugar estaba vacío, salió entonces a fuera esperando que hubiese una auto que pudiese utilizar para llevar a Kyungsoo al hospital del pueblo pero el único que había tenía las llantas reventadas y no podría usarlo así.
Maldijo en voz alta y entonces para empeorarlo todo la tormenta se desató, Luhan comenzó a llorar entonces de impotencia y lo mejor que pensó en hacer fue correr con todas sus fuerzas al camino principal en esperando que un auto pasará y los ayudara.
Corrió tan rápido como el suelo mojado y sus cada vez más lastimados pies descalzos se lo permitieron, un auto pasó pero por más que gritó este no se detuvo, vio otro venir y aunque era una locura no lo pensó dos veces y se plantó en medio del camino escuchando el rechinar de las llantas cuando el auto frenó abruptamente.
Luhan miró como el vehículo había quedado a tan sólo centímetros de él, escuchó la puerta del copiloto abrirse y rápidamente levantó la mirada listo para suplicar por ayuda.
-¿Luhan?-preguntó asombrado.
-Gracias al cielo-sollozó aliviado al ver a Jongin-Kyungsoo te necesita, está llorando y dice que le duele, creo que es el bebé-soltó todo de golpe.
Jongin no necesito escuchar nada más y salió corriendo en dirección a la mansión, Minho y Yesung que venían con él bajaron del auto y corrieron tras él seguido de Luhan.
Cuando él ingresó a la habitación se horrorizo al encontrar a su pequeño Kyungsoo gritando de dolor, corrió a él para sostenerlo en sus brazos buscando desesperado aliviar su sufrimiento.
-Aquí estoy cariño, nada malo pasará te lo juro-le dijo al oído.
-¡Duele!-lloró Kyungsoo.
-Tranquilo, Minho hyung vendrá pronto-aseguró.
-Nuestro bebé él...
-Estará bien-afirmó.
Minho entró a la habitación y aunque no quería tuvo que alejarse de Kyungsoo para permitir que Minho hiciese su trabajo, lo vio moverse a prisa y odio el semblante en su rostro cuando lo miró a él.
-Tiene contracciones constantes, el bebé ya viene, tengo que hacer una cesárea, Yesung consigue agua caliente y alcohol, Luhan ve y trae toallas limpias, busca también mi maleta-indicó Minho y ambos salieron a toda prisa.
-¿Cómo que ya viene?...no puede...aún falta-sollozó aterrado, Jongin se apresuró a ponerse a su lado y tomar su mano para tranquilizarlo.
-Kyungsoo, él nacerá ya, no podemos hacer nada o podría ser muy tarde, ¿entiendes eso?-Kyungsoo no respondió y apretó con fuerza la mano de Jongin que sostenía la suya.
-Todo estará bien, no tengas miedo, ambos estarán bien-prometió.
-Tengo...miedo.
-Yo también pero...Minho hyung va a cuidara de ambos, además, Kai es fuerte y estará bien-afirmó.
-No quiero que...nada le pase.
-No lo hará...estarán bien ambos, no voy a perder a ninguno-dijo pegando su frente mojada por la lluvia a la frente cubierta de sudor del menor.
-Te amo...mucho-susurró.
-Yo te amo más-respondió despacio.
Los ojos de Kyungsoo brillaron de una hermosa manera, sus labios se unieron en un rápido y tierno beso ignorando a todos los que estaban en la habitación, Yesung salió de la habitación luego de que Minho le pidiera que hiciera hasta lo imposible por contactar con el hospital del pueblo para que fueran en su ayuda, le ordenó a Luhan quedarse para asistirlo y luego miró a Jongin.
-Él me necesita-dijo con un tono suplicante.
-Muy bien-asintió.
Luhan cerró la puerta y Minho los miró a ambos seriamente haciendo temblar a Kyungsoo que no dejaba de llorar.
-Esto va a doler, aquí vamos-informó.
Un gritó de agonía le desgarro la garganta a Kyungsoo a medida que Minho le desgarraba la piel, su mano estrangulaba la de Jongin que ignoraba por completo eso y se dedicaba a hablarle para hacerle saber que no tenía que tener miedo.
-Eso es amor, lo estás haciendo bien, todo saldrá bien-le decía el moreno.
Luhan en cambio tenía los ojos cerrados y se cubría los oídos, era demasiado perturbador y difícil de soportar ver todo el dolor de Kyungsoo, no creía poder soportar mucho el estar ahí.
*****
-Me estaba divirtiendo tanto pero la lluvia tuvo que arruinarlo-se quejó Baekhyun mientras todos entraban a la mansión tras él.
-Podemos ir mañana-propuso Chanyeol para animarlo.
-Iré a ver sí Luhan se siente mejor-informó Sehun.
Fue en ese momento que varios quejidos retumbaron por todo el lugar Sehun fue el primero en volar escaleras arriba seguido de todos los demás, al llegar al largo pasillo vieron a Yesung que le gritaba a alguien a través de eso que parecía una radio.
-¿Dónde está Luhan?-preguntó de inmediato Sehun.
-¿Y Kyungsoo?-preguntó la madre del pelirrojo.
-¿Qué son esos gritos?-habló Baekhyun también.
-El señor Kyungsoo está dando a luz ahora mismo en esa habitación y Luhan está adentro ayudando al doctor Minho-respondió a todo de una.
-Mi bebé, tengo que entrar.
-No señora, no pude hasta que el doctor lo indique-explicó deteniéndola para que no siguiera su camino.
-Pero...
-¡Luhan!-llamó Sehun golpeando la puerta con fuerza, no podía estar tranquilo, algo le decía que Luhan no estaba bien.
-Sehun-respondió al escucharlo llamarlo.
-Luhan te necesito aquí-llamó Minho.
-Sí-respondió rápidamente yendo hasta dónde el médico estaba.
-Lo estás haciendo bien Kyungsoo, falta poco, aguanta-dijo el mayor.
-Sólo un poco más cariño, lo estás haciendo perfectamente-susurró Jongin a su oído.
Él dudaba eso pero no podía rendirse hasta que escuchara a su bebé llorar, sentían como si estuviera por desmayarse pero se negó a hacerlo, vio a Luhan que le dedicó una sonrisa temblorosa que trataba de animarlo y al verlo todo mojado supo que le debía una muy grande.
-Luhan prepara la toalla-indicó Minho y él asintió.
Un agudo llanto llenó la habitación y Luhan contuvo el aliento cuando ese pequeño ser fue puesto en sus brazos, sintió lágrimas caer mientras miraba maravillado al perfecto ángel en sus brazos hasta que Minho le sonrió para que llevara con sus padres, lo puso con mucho cuidado en los brazos de Jongin que no pudo contener las lágrimas de alegría.
Miró a Minho que al ver lo inestable que Luhan parecía asintió dejando que el pobre chico se fuera, Luhan sonrió y se retiró en silencio dejándolos solos, lo primero que vio fue a Sehun y sólo entonces estuvo completamente seguro de que sus piernas podían fallar ya porque él no iba a dejarlo caer y así fue, sus piernas se negaron a seguir adelante y antes de que cayera Sehun lo sujeto.
-Te tengo precioso, eres muy valiente-susurró suavemente Sehun.
-Casi me desmayo-susurró también descansando en los brazos del menor.
Kyungsoo apenas lograba mantener los ojos abiertos pero agradeció haber podido ver la sonrisa de Jongin al recibir a su hijo y al saber que pronto perdería la conciencia sólo necesitaba una cosa más.
-Quiero...verlo-suplicó Kyungsoo, Jongin asintió y acercó ese pequeño bultito para que lo viera y únicamente al verlo ahí, vivo y bien todo había valido la pena.
-Es perfecto-le dijo Jongin.
-Que...bueno-susurró y finalmente se dejó vencer por el agotamiento escuchando apenas varios ruidos antes de que todo fuera negro.
Cuando sus ojos volvieron a abrirse estaba demasiado aturdido como para poder pensar con claridad, la habitación en la que estaba no era la misma de anoche, a su lado había un jarrón con rosas blancas, las paredes estaban totalmente blancas y el sol entraba por la ventana haciendo todo demasiado brillante para sus ojos, recordó entonces el llanto de su bebé y trató de levantarse inútilmente antes las punzadas de dolor en su vientre.
Sus ojos se movieron por toda la habitación hasta la puerta la cual comenzó a abrirse muy despacio, miró la puerta en espera de que alguien entrara y pudiese ayudarlo y explicarle que estaba pasando.
-Despertaste-dijo visiblemente feliz Jongin.
Kyungsoo se aferró a él como si su vida dependiera de eso cuando él lo abrazó con fuerza, aspiró profundamente su aroma para poder tranquilizarse y no perder el juicio antes de comenzar a pedir respuestas.
-Que bueno que despertaste, estaba muy asustado cuando te desmayaste-le dijo abrazándolo un poco más fuerte.
-¿Qué pasó, dónde está Kai?-preguntó angustiado.
-Luego de que lo vieras te desmayaste, los paramédicos llegaron minutos después y Minho ordenó que te trasladaran aquí de inmediato para que te atendiera correctamente, en cuanto llegamos una enfermera tomó a Kai y lo llevó a una incubadora-explicó.
-¿Incubadora, por qué, qué está mal con él?-no pudo evitar alterarse y trató nuevamente de levantarse pero nuevamente el dolor no lo dejo.
-No hagas eso-pidió Jongin preocupado obligándolo a volver a recostarse-Él está bien sólo que es muy pequeñito aun porque nació antes de tiempo, sólo es por preocupación-explicó.
-Que bueno-suspiró aliviado-Quiero verlo-pidió.
-Ahora que venga el médico si todo está bien y te da permiso te llevare con él-prometió tomando su mano con mucho cuidado-¿Qué paso anoche?-preguntó, sabía por lo que Luhan le había contado cuando llegaron al hospital que algo extraño había pasado pero él no parecía saber nada realmente.
-Fue Taemin-respondió, tal vez hubiese dejado todo en silencio porque no quería hacer el problema más grande pero él había puesto en arriesgo a su bebé y eso no iba a dejarlo pasar-Dijo que quería hablar conmigo y me ofreció té, yo acepté porque pensé que quería arreglar las cosas entre nosotros pero no fue así, no sé que me dio...cuando todo empezó él simplemente se largó y me dejó ahí-finalizó con los puños apretados y una inmensas ganas de tener a ese tipo de frente para matarlo con sus propias manos.
Jongin se puso de pie furioso y Kyungsoo no tardo en descubrir que Taemin estaba ahí y que Jongin iría tras él, no quería más preocupaciones, tan sólo quería descansar y ver nuevamente a su bebé cuanto antes por eso tomó la mano del moreno cuando este amenazó con irse.
-Quédate conmigo por favor, tan sólo no quiero que él se acerque a Kai jamás-pidió, Jongin lo miró seriamente durante largo tiempo hasta que terminó aceptando.
-Yesung-llamó e inmediatamente el mayor ingresó a la habitación, lo vio decirle algo a Yesung que inmediatamente asintió y abandonó la habitación-Todo estará bien-aseguró volviendo a su lugar.
Kyungsoo asintió tranquilamente sintiendo la mano de Jongin sobre la suya, cerró los ojos sintiéndose totalmente en calma al tener a Jongin a su lado, varios recuerdos de la noche pasada volvieron de golpe pero tan sólo uno se quedo ahí opacando al resto.
-Anoche-murmuró-Me dijiste que me amabas-dijo abriendo despacio los ojos para ver la sonrisa de Jongin.
-¿Y cómo no lo iba a hacer?-preguntó-Eres la persona que más me ha amado, perdonaste mi estupidez y errores, te quedaste a mi lado cuando todo el mundo pensó en abandonarme, cuidaste de mí aunque yo no lo agradeciera, me soportaste y ahora me diste al niño más precioso del mundo, por supuesto que te amo-aseguró.
-Yo también-respondió Kyungsoo con un hilo de voz y sonrisa enorme, Jongin también sonrió tanto como podía y cortó la distancia entre ambos para finalmente poder besarlo como había querido hacer desde que habían llegado ahí.
-¿Interrumpimos?-escucharon la inconfundible voz de Baekhyun que los miraba desde la puerta con una sonrisa traviesa.
-Nada de eso, adelante chicos-respondió Jongin.
-Trajimos regalos para Kai y flores para ti-anunció Lay que sostenía en sus manos un gran ramo de flores de colores, al igual que Baekhyun, Chanyeol y Suho en cambio traían enormes muñecos y globos.
-Bebé-escuchó a su madre que fue a abrazarlo-¿Cómo te sientes?-preguntó preocupada.
-Algo adolorido pero estoy bien-aseguró con una sonrisa.
-Eso es normal, en unos días el dolor va a disminuir y podrás moverte con normalidad-explicó Minho que entraba a la habitación también.
Minho le dijo que iba a revisarlo y Kyungsoo asintió obediente dejando que Minho lo revisara, el mayor no tardo mucho comenzar con su trabajo mientras Kyungsoo lo miraba ansioso esperando que terminara pronto para poder pedirle permiso para ir a ver a Kai.
-¿Puedo ir a ver a mi bebé?-pidió en cuanto Minho terminó de revisarlo.
-No le veo ningún problema pero no debes sobre esforzarte así que pediré que traigan para ti una silla de ruedas-indicó y aunque Kyungsoo no quería tuvo que aceptar al final.
Cuando por fin salió de aquella habitación comenzó a sentirse más nervioso que nunca en su vida, deseaba que fueran más rápido a través de aquellos pasillos, la enfermera en los cuneros les sonrió abiertamente al verlo y movió su cabeza en dirección a donde las dos personas que Kyungsoo aun no había visto estaban de pie.
Luhan parecía hipnotizado con la imagen del pequeño que dormía pacíficamente y Sehun parecía hipnotizado con la imagen de Luhan, puso su mano en el hombro de su amigo para llamar su atención recibiendo una sonrisa cuando se hizo a un lado para dejarlo ver al pequeño Kai.
Sus manitas eran tan pequeñas al igual que sus piecitos, tenía los ojitos cerrados y su pechito subía y bajaba con su contante con su respirar, era tan pequeño y se veía tan frágil, tan vulnerable que por un momento temió que alguien fuese a hacerle daño o que algo fuera a pasarle, los brazos de Jongin lo rodearon entonces transmitiéndole la confianza que le hacía falta.
-Estará bien-prometió Jongin y como respuesta tan sólo le sonrió.
-Kyungsoo-hablo en esa ocasión Luhan, Kyungsoo lo miró y por un momento el pelinegro dudó en lo que estaba por hacer hasta que vio a Sehun mirarlo-Tenemos que irnos ya, hay algo que tenemos que hacer y no podemos seguir retrasándonos-explicó sintiendo un nudo en la garganta.
-Está bien pero promete que vendrás a visitarme seguido-pidió Kyungsoo.
-Lo prometo-dijo con la voz algo débil viéndolo asentir-Bueno…adiós Kyungsoo, cuídalos mucho Jongin-advirtió Luhan.
-No tienes que decírmelo-aseguró con una gran sonrisa, Luhan asintió y salió camino hasta la puerta.
-Adios, cuídense mucho-se despidió Sehun y dio media vuelta para alcanzar a Luhan.
Ambos salieron del hospital y subieron al auto del menor en completo silencio, Sehun miró a Luhan limpiar discretamente sus lágrimas sintiéndose de lo peor, busco la mano de Luhan y la llevó a sus labios para besarla.
-Lo siento-susurró.
-No seas tonto-rió-Únicamente odio las despedidas y bueno Kyungsoo era el primer amigo que yo había hecho por mí mismo y supongo que voy a extrañarlo, además…
-¿Además?-preguntó curioso ante la pausa.
-Supongo que después de ver nacer a Kai y tenerlo en mis brazos, yo…realmente quisiera tener hijos-murmuró, arrepintiéndose al ver la expresión de Sehun-Pero no…
-Los tendremos, todos lo que tú quieras, te lo prometo-aseguró.
Luhan sonrió brillantemente mientras asentía, sabía que iba a ser muy difícil pero Sehun siempre cumplía sus promesas así que iba a creer en él sin importar que fuera a pasar de ese momento en adelante.
-¿Listo?
-Siempre.
*****
Kyungsoo paso un tiempo más en el hospital y aunque no era aburrido gracias a las contantes visitas de sus amigos y su madre quería salir de ahí cuanto antes y más luego de que Minho se disculpará por lo que había pasado, Jongin le había dicho todo al mayor y aunque vio la tristeza en sus ojos cuando le dijo que iba a separarse de Taemin estaba seguro que él iba a encontrar a alguien que de verdad lo amara, además tenía también a su hija que seguramente le iba a dar fuerzas para salir a delante.
El día que por fin lo dieron de alta no pudo estar más agradecido al finalmente poder abandonar ese lugar con su pequeño Kai en brazos, todos los recibieron en casa con una pequeña fiesta, estaba feliz no iba a negarlo pero se decepciono un poco al no encontrar a Luhan ahí, no sabía nada de él desde aquel día y estaba algo preocupado.
-Baekhyun-llamó a suavemente a su amigo que cargaba a Kai y le hacía expresiones graciosas para hacerlo sonreír.
-¿Qué pasa?
-¿Has sabido algo de Luhan?-preguntó, Baekhyun se puso serio durante entonces, sabía que Luhan se había ido con Sehun pero ellos le habían pedido a él y a Chanyeol no decir nada a nadie.
-No, también he tratado de contactar con él o con Sehun pero no sé-mintió.
-Estoy preocupado.
-No te preocupes Kyungsoo, Luhan hyung y Sehun estarán bien, ya verás-aseguró un sonriente Chanyeol.
-Supongo que sí.
-Seguro pronto llamaran no te preocupes-dijo Jongin dedicándole una sonrisa-Mejor ve a buscar una gorra para Kai-pidió.
Kyungsoo asintió y se retiro para buscar lo que Jongin había pedido entro de regreso a la casa y subió las escaleras directo a su habitación para buscar la gorrita que Baekhyun había comprado para Kai, fue en ese momento y entre todas esas cosas que encontró una carta de Luhan, la leyó inmediatamente y entonces se dio cuenta de lo que pasaba, él se había ido lejos y no iba a saber de él en mucho tiempo pero extrañamente estaba mucho más tranquilo porque sabía que estría bien.
-Kyungsoo tu madre llego y tiene una sorpresa para ti-dijo Jongin entrando a la habitación, vio a Kyungsoo con algo entre las manos y se acerco para ver de que se trataba-¿Qué pasa, qué es eso?-preguntó.
-Luhan se fue-le dijo tendiéndole la carta que le había dejado.
Jongin tomó la hoja de papel y comenzó a leer con atención todo lo que tenía escrito para luego mirar a Kyungsoo y sonreírle como él hacía.
-Está en buenas manos-afirmó Jongin.
-Lo sé-asintió rápidamente-Bueno supongo que tenemos que salir porque nos esperan-suspiró.
-Kyungsoo-llamó tomando su mano-Yo…
-¿Qué pasa?-Jongin se veía muy serio de repente y no sabía si preocuparse o no.
-Yo…luego de lo que paso…realmente lo he estado pensando y creó que es hora de dejar de ser novios-comentó tomándolo por sorpresa-¿Y si nos casamos?, bueno ya estamos casados pero yo…quiero decir que quisiera que volviéramos a casarnos pero ahora de verdad, ya no como un trato sí no porque de verdad queremos…porque tú quieres estar conmigo para siempre-dijo despacio y Kyungsoo sintió claramente como sus mejillas se volvían rojas-¿Aceptas?-preguntó.
Al escuchar esa pregunta miles de recuerdos volvieron a su mente, el día que conoció a Jongin lo había odiado e incluso lo había golpeado, cuando aceptó casarse con él pensó que no podría haber nada peor, el día de su boda había deseado salir corriendo, su noche de bodas fue la peor experiencia de su vida y tenía que admitir que aun tenía miedo de que esa parte de Jongin volviera a aparecer algún día.
Jongin tenía muchos defectos, era posesivo, celoso, impulsivo e incluso egoísta pero detrás de todos eso había un hombre con un tierno y enorme corazón, Jongin se había ganado su confianza día con día con todo lo que hacía, lo había ayudado a superar su primera decepción amorosa, había tratado de protegerlo de todo lo malo y entonces a Kyungsoo primero cambio su forma de pensar acerca de él, luego lo tomó como un amigo, se encariño con él y de alguna forma termino enamorado de la persona que al principio odiaba, todo había iniciado con esa pregunta y todo lo malo terminaría con ella también para iniciar desde cero.
-Acepto.
Fin.