Los rayos del sol ya se colaban por los enormes ventanales que rodeaban todo el salón principal pero eso no podía incomodar menos a todos los hombres que se encontraban tirados dentro del castillo. Todos estaban dispersos en el inmenso lugar, algunos como los asgardianos descansaban en pareja recostados uno encima del otro en una de las mesas de centro, Clint por su parte estaba dormido y desnudo sobre un patito inflable que flotaba en la fuente de café que por el momento estaba apagada pero no vacia. La pelirroja desde hace un rato habia despertado con el cuerpo molido y la cara llena de moretones, aun asi no se puso a investigar que le habia pasado y mejor aprovecho el tiempo para tomar la evidencia de las vergonzosas escenas en las que habían estado involucrados sus compañeros. Su fiel compañera, una cámara canon, era la encargada de conservar cada imagen que en el momento adecuado seria un muy buen chantaje; incluso se encargo de tomar fotos a los tres guerreros que habian amanecido en el corral de los cerdos, todos en poses extrañas e incluso Fandral con la cara y el cuerpo pintados con algo que parecía marcador indeleble ; aunque Bruce se habia llevado la peor parte al estar recostado entre el lodo de los animales, algo que de seguro le dejaría un peculiar olor que por lo menos duraría un par de semanas. Tal vez el olor del Stark tambien seria particular por unos días ya que como un pequeño lechón apareció dormido sobre el vientre de una grande puerca rodeado también de varios cerdos y lo que era mas épico es que su rostro se encontraba liso, sin ningun rastro de su característica barba de candado, ¿Cómo habia pasado eso?, bueno preguntar eso la haría cuestionarse sobre todas las demás cosas extrañas con las que se encontró y jamas tendría una explicación coherente para todo ello asi que lo mejor era no preguntar y solo burlarse de los hechos aunque no todos se quedarían contentos con esa respuesta.
-lo que paso anoche fue que tuvieron una celebración…divertida.- fue lo único que pudo responder la reina al ser cuestionada durante el desayuno, evidentemente su respuesta solo causo bufidos y reclamos de los presentes.
-oigan ¿cómo esperan que la reina sepa porque Bruce apesta a cerdo, porque Tony no tiene su barba y porque Thor esta lleno de chupetones por todo el cuerpo?.- Loki bufo indignado girando su cara a otro lado mientras su rubio esposo solo rogaba por su perdón.
-si, claro Rogers, como tu amaneciste fresco como una lechuga no tienes de que preocuparte- menciono con ironía el castaño quien había creado un cubrebocas improvisado con un pañuelo solo para evitar la vergüenza de estar sin su hermoso barba.
-¿Qué amanecí bien dices?, parece que no haz visto mi cabeza cariño- efectivamente, el rubio tenia una venda rodeando su cabeza dado que su frente y su nuca habian sufrió daños en tan alocada fiesta.
-solo hay algo que decir y es que todos fueron responsables de sus acciones y ahora culpables de las consecuencias- el padre de todo decidió interferir en la platica donde aquellos muchachos descontrolados solo buscaban culpables para deshacerse de la responsabilidad.
-El señor Odin tiene razón, asi que este tema se da por sentado, no quiero escuchar ni un comentario mas- el capitan hablo autoritario tomando su papel como líder del equipo a lo que Tony trato de rebatir de nuevo- ¡ni un comentario he dicho!- lo miro seriamente haciendo que volviera a sentarse con mala cara y los brazos cruzados.- ahora todos quítense esa cruda de encima que no tardamos en irnos.
-ahhhggg-replicaron todos desparramándose en sus sillas al solo pensar en el terrible viajecito que les esperaba.
Un par de horas después y tras despedirse de toda la familia Odinson los vengadores volvieron a Nueva York con la ayuda de Thor quien de inmediato volvió a su reino prometiendo que siempre volveria cuando lo necesitaran o claro cuando quisieran simplemente convivir en equipo o mas bien como la gran familia en la que se habian convertido. Aun asi como familia que eran tambien tenían vidas independientes asi que cada uno volvió a su propia rutina; como era de esperarse la viuda volvió de inmediato a sus misiones secretas encomendadas por Nick Fury mientras que Bruce y Clint desistieron de volver a la base de los vengadores con el fin de darse un mes de vacaciones, solo ellos dos con los hermosos estados de Norte America que estaban dispuestos a descubrir en un aventurero viaje por carretera. Tony los envidiaba pero las responsabilidades llamaban, responsabilidades como avanzar en sus estancados proyectos, comer una hamburguesa con queso, ir por donas, firmar solo un par de papeles de la empresa y comer otra hamburguesa.
-sigo sin entender porque tuvieron que depilarme precisamente la cara- reprocho por enésima vez logrando que el rubio suspirara con cansancio.- y no me trates asi Rogers, como si no te importaba- lo sensible aun no se le quitaba y parecía que no se le quitaría durante todo el embarazo.
-¿y que mas podrían haberte depilado?- pregunto solo para que no volviera a reclamarle por solo darle el avión.
-no se, tal vez mis partes por ejemplo- Steve gruño mirándolo con mala cara- ¿Qué?, es algo que nadie veria.
-es algo que nadie excepto yo tiene derecho de ver- cerro el tema justo en el momento en que las puertas del ascensor se habian abierto.
-oye sonaste muy posesivo…y eso me encanta- se colgó en su cuello dispuesto a devorarle la boca con un beso aunque su acto fue detenido abruptamente y de la peor manera.
-Bucky- murmuro el capitan contra sus labios dejando su corazón completamente herido pero a la vez indignado.
-¿¡Qué!?- se separo de golpe mirándolo con mala cara pero el rostro del capitan no mostraba pena ni arrepentimiento es mas no mostraba nada y es que su mirada estaba fija en un punto, un punto que se encontraba tras de Tony; de inmediato el castaño giro buscando lo que habia robado la atención de su rubio y lo que vio no le gusto.- Jarvis, libera la Marc 9- aquello fue suficiente para que Bucky agachara la cabeza con culpa mientras que el capitán por fin pudo salir de su letargo.
-¡TONY NO!- pero ya era demasiado tarde porque la armadura ya habia pasado a su lado instalándose por completo y de manera rápida en el cuerpo del menor. De inmediato el castaño preparo un rayo repulsor concentrando toda su potencia en su diestra la cual seria la encargada de acabar de una vez por todas con ese maldito.- TONY NO- repitió el capitan al colocarse en su campo de ataque como utilizando su cuerpo como un escudo para proteger a su amigo.
-Quitate de mi camino antes de que te quite por mi cuenta.- amenazo aunque el mejor que nadie sabia que jamas le haría daño a su prometido.
-hazlo- respondio con seguridad sin siquiera temblar ante su afirmación.- no permitiré que lo dañes Tony, no sin antes escucharlo.
-¿Qué quieres que escuche? , ¿el como mato a mis padres?, ¿quieres que me cuente con todo detalle como le arrebato la vida a ambos, como elimino a las personas que fueron lo mas importante en mi vida?- Steve suavizo su mirada observándolo de manera comprensiva pero aun asi no se movio de su lugar.
-se que Buc..James tiene más que decirte, por ejemplo el porqué esta aquí- esta vez el rubio miro de reojo a su amigo sosteniéndole la mirada solo por unos segundos, dejando en claro que el también quería escuchar la razón de su presencia la cual le alegraba pero a la vez lo confundía ya que habia sido tan…repentina.
-por favor- ambos fijaron su atención en el inesperado invitado que se habia atrevido a hablar, pero aunque ambos estaban fijos en el soldado, Bucky solo estaba fijo en Stark; paso a un costado del rubio evitando tambien la mano con la que intento detenerlo y solo camino con paso recto hasta colocarse delante del menor en donde sorpresivamente se hinco sin dejar de mirarlo a los ojos.-solo te ruego que me escuches, que me des la oportunidad de pedirte disculpas y explicarte como es que todo paso, no para que me perdones sino para que sepas la verdad de los hechos…la verdad sobre la muerte de tus padres- esa ultima frase tiro un gatillo en Tony que lo hizo volver a apuntarlo con el guante de su armadura.
-Tony..por favor- rogo tambien el rubio muerto del miedo por lo que pudiera pasarle a su mejor amigo que se entregaba como un esclavo a su verdugo.
-es lo único que te pido Stark aunque si no quieres hacerlo te comprendo, si lo único que deseas es matarme- tomo con sus manos el guante de la armadura tirando de el hasta colocarlo sobre su pecho, justo sobre el corazón- hazlo, que yo no te lo voy a impedir, pero antes de que lo hagas solo quiero decirte que lo siento, lamento haberte causado tanto daño… se que unas simples palabras jamas repararan mis errores pero no puedo regresar el tiempo para evitarme sobrevivir, para evitar tanta destrucción…para haberme tirado yo mismo de ese tren.- el oji azul no pudo evitar que sus ojos se llenaran de lagrimas ante aquel terrible recuerdo, el recuerdo del dia en que creyó perder a su mejor amigo, su hermano. El silencio reino en la sala de tal manera que parecía que se habia detenido el tiempo, Bucky solo estaba ahí esperando su destino mientras que Tony se enfrentaba a su propia batalla moral donde una parte de si le dictaba que acabara con ese maldito mientras que una pequeña parte veía a Bucky como alguien inocente, es mas incluso como a una victima, una victima mas de todas aquellas terribles guerras. Al final su pequeño lado humano gano asi que lentamente apago su rayo repulsor cerrando su mano en un puño que estrello salvajemente contra la mandíbula del soldado quien aun con el fuerte impacto solo giro el rostro permitiendo que Tony repitiera la acción en su otra mejilla y asi lo hizo cinco veces mas hasta que lo estampo en el suelo propinándole tambien una patada en el estomago.
-¡¡TONY YA BASTA!!- el rubio se lanzo sobre el al pensar que iba a matarlo a golpes pero ni sus suplicas ni su intervención detuvieron a Tony que lo lanzo a través de una ventana haciéndolo caer un piso abajo; de inmediato se levanto corriendo las escaleras que los separaban encontrándose con una escena que no esperaba ver, Tony se habia deshecho de la armadura y ahora solo golpeaba a su amigo con los puños aunque cada golpe se volvia mas débil nublado por el llanto desgarrador del menor quien descarado dejaba caer sus lagrimas empapando el cuerpo del soldado.
-TE ODIO, TE ODIO MALDITO HIJO DE PUTA, MATASTE A MIS PADRES, TE ODIO-le propino un ultimo golpe antes de caer rendido en el suelo haciéndose un ovillo mientras no podia dejar de llorar a todo pulmon. Steve de inmediato y sin importarle si podia ser rechazado se hinco frente al castaño tomándolo entre sus brazos incitándolo a refugiarse en el, a desahogarse, a liberarse ofrecimiento que ante todo pronostico Tony acepto bastante afectado como para ponerse a pensar que era su propio marido un pilar importante en todo este problema.
El capitan estuvo menciendolo entre sus brazos hasta que el moreno ante tanto esfuerzo asi como por el cansancio del viaje termino durmiéndose; con delicadeza lo cargo hasta su habitación volviendo a la sala donde su amigo aun le esperaba aunque mas que esperarlo parecía que estaba aun sumido en la culpa.
-oye Buck- llamo haciendo que el otro girara a mirarle apenas con el tiempo para poder cachar la botella que le habia arrojado su amigo. Miro la marca de la botella sorprendiéndose de que fuera la misma que tomaban hace años. Aun asi eso no logro que dejara de sentirse incomodo ante la familiaridad con la que Steve lo trataba.- ¿actuas como si nada?
-¿y que otra cosa puedo hacer?- pregunto de forma simple mientras se sentaba en el extremo contrario del sofa.
-la ultima vez que te vi estuve a punto de matarte- respondio esperando que por ese hecho al menos existiera un poco de hostilidad entre ellos.
-pero no lo hiciste- Bucky bufo pensando en que era una manera tonta de ver las cosas- a mi no tienes que darme explicaciones Buck y mucho menos pedirme perdón por eso, yo siempre comprendi que ese no eras tu, aquel que cometió todas esas acciones.
-asesinatos Steve, cometi asesinatos de gente inocente a los que ni siquiera les di la oportunidad de defender su vida.
-¡pero no eras tu!- rectifico mas seriamente con la firme decisión de hacerlo entender de una vez por todas que nada de eso era su culpa.- tal vez tu cuerpo estaba ahí e incluso lo recuerdos están en tu mente pero ese no eras tu, ese no era el hombre que me apoyo y creció conmigo, ese no era el hombre que siempre defendía a los débiles, ese no era el hombre que se enlisto al ejercito con la finalidad de terminar una guerra y mucho menos es el hombre que casi murió por mi y por una grande causa…ese no eras tu.- murmuro bajando la mirada que se quedo fija en el suelo envolviéndolos a ambos en un profundo silencio. Bucky se permitió por un momento reflexionar las cosas que le habian dicho pensando en que no era la primera vez que las oia pero que ni asi podían entrar en su cabeza y en su alma que no encontraba paz y al parecer jamas la encontraría; destapo su botella de cerveza dándole un profundo trago.
-vaya, hace tanto que no probaba una de estas- su comentario fue lo suficiente tonto como para robarle a Steve una leve carcajada- no se tal vez como unos 70 años- volvio a burlarse de su condición de “anciano” ya que era la misma situación de Steve.
-creo que ha pasado aun mas tiempo.
-y seguimos aquí, debo reconocer que las verduras de la señora Pershing si eran muy sanas, siempre dijo
-que viviríamos mas si comíamos sus verduras.-ambos sonrieron recordando los viejos tiempos.
-ella decia que eran de un plantío especial cosechadas por ella misma en la huerta de su hermano pero miles de veces la vi comprándole al mercader de la esquina.
-lo se, una vez me hiciste subirme a su camión para robarle un par de fresas porque le gustaban a tu novia Marie.
-¿tuve una novia llamada Marie?- frunció el ceño haciendo que su compañero solo negara.
-en serio que nunca cambiaras, era alta, pelirroja y con pecas, solia llevar el cabello suelto ademas de que lo tenia rizado.
-cierto cierto, ¿y tenia grandes pechos?
-bastante considerables.
-oh entonces se merecía todas las fresas del mundo- ambos soltaron una carcajada limpia dando un trago mas a sus cervezas- vaya tu tienes mejor memoria para recordar a mis chicas, debería sentirme apenado por eso.
-no es importante, es solo que como yo no tuve mi mente ocupada con ninguna novia tenia el suficiente espacio en mi memoria para recordar a las tuyas.
-si lo recuerdo, eras el joven sin suerte, sin suerte en el amor porque todo lo demás te salía bastante bien- le revolvió el cabello de manera amigable haciendo que el otro se alejara con una sonrisa.- pero las cosas han cambiado ¿no?, ahora incluso estas comprometido…y con un hombre, vaya eso si fue novedad.- murmuro mas para si mismo que para el rubio quien dejo las sonrisas de lado.
-¿te molesta? –pregunto con algo de temor al ser mal visto por su mejor amigo, alguien ciertamente muy importante en su vida y de quien esperaba su entera aceptación.
-¿y si lo hiciera…lo dejarías?- menciono tentativo mirando como el rubio perdia los colores del rostro mientras negaba frenéticamente- tranquilo, no es como si fuera a golpearte hasta que te casaras con una linda chica, es solo que me pareció un cambio muy drástico en tu personalidad.
-¿mi personalidad?- le miro confundido sin saber muy bien que intentaba decirle con eso, ¿era acaso una clase de desprecio hacia su nueva vida?
-Steve cuando pensaba en ti ya sabes comprometido y esas cosas siempre me imagine a una chica bonita, educada, respetable, sensible, frágil y muy humana…bueno ignora lo de sensible porque bueno estabas loco por Peggy y esa mujer era todo menos frágil- Steve asintio dándole la razón- incluso me la imagine físicamente, con un despampanante cuerpo, piernas torneadas y muy buen..
-suficiente, se a donde quieres llegar.
-terminaste comprometido con un hombre y no solo eso sino que hombre, tu pareja es…es alguien complicado.- prefirió dejarlo por la paz ya que la culpa aun le removía la consciencia, no podia soltarse a decir cosas malas de alguien a quien habia hecho tanto daño.
-se lo que puedes pensar de él, de hecho se lo que todos piensan de él pero es que nadie entendería jamas lo maravilloso que es ese hombre y es solo mío.- el castaño miro la cara de ensoñación que inconscientemente ponia su amigo al hablar del menor de los Stark dándose cuenta que lo habia perdido, su amigo estaba profundamente enamorado aunque no es como si no lo hubiera sospechado antes.
-hay un cierto placer en la locura que solo el loco conoce- fue lo único que pudo decir dándole la razón de que nadie mas que el podia considerar al Stark como una pareja formal.
-exacto.- sonrio una vez mas antes de seguir con su charla entre amigos evitando a toda costa hablar de sus antiguos errores y solo centrarse en lo bueno de la vida algo que incluso Bucky pudo saber manejar solo para no arruinar aquella reconciliación tan maravillosa que estaban teniendo, era tan maravilloso tenerse el uno al otro igual que en los viejos tiempos. Aquello se sentía tan ameno que podría haber durado por horas hasta que el propio Steve fue quien opto una actitud seria e incluso algo apenada al ver a su prometido parado en el marco de la sala mirándolo fijamente aunque sin mostrar ninguna expresion.
-¿necesitas algo cielo?- pregunto amable mientras sentía el ambiente tornarse tenso, Bucky de inmediato bajo la mirada apenado por haber permanecido tan alegre en aquella casa mientras otro hombre bajo el mismo techo sufria una grande pena.
-necesito un café- fue su escueta respuesta antes de caminar hacia la cocina teniendo que atravesar toda la sala creando asi un ambiente mas incomodo; cuando el Stark estaba a punto de ingresar a la cocina Bucky se levanto con toda la intención de irse solo para no incomodar mas al castaño.
-fue un gusto verte de nuevo Steve, adiós y cuídate- se despidió aunque esa despedida tenia explicito un hasta nunca pues no se prestaba a algun otro encuentro o a un nos veremos. Steve lo noto de inmediato mirándolo de manera triste al pensar que perdería de nuevo a su mejor amigo y justo ahora que lo habia recuperado.
-¿no piensas decirle que la próxima reunión será en tu casa?-intervino aun cuando no le habian hablado a el fijando su vista en Barnes que lo miraba sorprendido asi como el capitan.- ¿vez a este hombre de aquí?- señalo al rubio quien aun seguía a la desconcertado de lo que Tony pudiera decir-su nombre es Steve Rogers aunque eso ya lo sabes…lo que no sabes o tal vez si pero deseas ignorarlo, es que esta sufriendo, sufre por tener que partir en dos sus sentimientos solo para no causarte daño ni a ti ni a mi pero yo siempre tendre ventaja al grado de que si le pido que deje de verte lo haría porque me ama y nunca seria capaz de lastimarme- Bucky suspiro resignado pues eso era lo que sabia que pasaría, por eso mismo no se habia hecho esperanzas de un futuro encuentro.- pero no hare eso, porque no soy el tirano que crees que soy, jamas le negaría a Steve el convivir con la única persona que comprende su pasado y sobre todo que es su hermano.-el ojiazul estaba a punto de saltarle encima en busca de agradecerle su enorme consideración pero el moreno se lo impidió.- esto no es un tratado de paz entre tu y yo Barnes que te quede claro, tu no volveras a entrar a mi casa y mucho menos entraras en contacto conmigo, te sigo odiando desde lo mas profundo de mi y eso jamas cambiara asi que no busques meterte conmigo.
-lo entiendo y gracias- Tony no dijo nada mas y solo se perdió en su cocina dando un permiso mudo para que ambos pudieran ir a beber algo solo para convivir unas horas mas.-creo que comienzo a comprender lo bueno de tu locura- susurro mirando la espalda de Steve que se habia adelantado para ir por el auto.
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Lo habia escuchado volver apenas hace un par de minutos pero aun asi el rubio no hizo el intento de buscarlo, algo que agradeció completamente ya que aun no se sentía con el animo de enfrentarlo y ver en el aquellos rastros de felicidad que debia portar al haber estado toda una tarde con su gran amigo Bucky; dejo de lado sus pensamientos y siguio concentrándose en los comandos que debia mejorar en Jarvis, una tarea bastante compleja que lo hacia distraerse al grado de olvidar los problemas que le rodeaban asi como las ganas de llorar, benditas lagrimas se habían escapado de sus ojos por dos largas horas, algo agotador y dañino para sus sensibles ojos. Además de su “tarea”, lo que le ayudo a subir el animo fue su infalible música que siempre lo acompañaba, como ahora que retumbaba en toda la habitacion Rock n roll damnation. Tecleo un par de comandos mas antes de fijar su vista en uno de sus paneles holográficos notando que tenia una llamada entrante de alguien bastante inesperado-vaya vaya honey, pensé que como estabas en tu luna de miel no te acordarías de tu hermoso hermanito menor- menciono con su habitual alegría tratando de evitar asi algun tipo de cuestionamiento sobre su decaída actitud.
-no es una luna de miel Tony- aclaro aunque solo recibió un bufido como respuesta- espero no estar interrumpiendo tu rutina.
-¿si por rutina te refieres a comer muchas hamburguesas con queso y una enorme malteada de fresa? Si, si me interrumpiste, pero no importa, ¿Qué pasa cariño?
-solo queria darte los resultados del estudio que me enviaste, las cosas parecen bien, todos tus niveles están estables aunque tu presión descendió un poco, ¿tomaste las pastillas que deje en tu buro?
-lo hice mama y en serio muchas gracias Brucie, no era mi intención arruinar tu escapada romántica pero en serio temi por mi vida- dramatizo aunque sus palabras tenían cierto grado de verdad.
-¿estas bien Tony?- evidentemente Bruce no se tomo el comentario como una broma.
-si si, solo comencé a sentir un par de mareos pero todo parece estar bien.
-si, asi parece- acepto mirando una vez mas los estudios.- por cierto Tony, habia otra cosa que queria mencionarte.
-tu diras mi amigo.
-con base en lo que vi en estos estudios, que son los mas recientes y viendo el desarrollo del bebe asi como su tiempo de gestación creo que estas libre de peligro.
-¿eso quiere decir..
-que tu embarazo ya no es un embarazo de alto riesgo, asi que solo seguiremos con los cuidados esenciales sin..
-espera- lo detuvo digiriendo la noticia- ¿eso quiere decir que puedo tener sexo?
-¿eso es lo único que te importa?- pregunto con incredulidad tambien algo molesto por esa actitud tan despreocupada.
-claro que si, por dios estamos hablando de el millonario play boy Tony Stark- un tercera voz se sumo a su conversación haciendo que el moreno frunciera el ceño.
-venga Bruce, te he dicho que nunca pongas el altavoz cuando Katniss esta cerca.
-y no lo hago, es solo que el tiene buen oído.- intercedió a su favor antes de crear una disputa mas grande.- en fin, tu embarazo ahora puede seguir un rumbo normal y si- intervino antes de que Tony pudiera volver a hablar- si puedes tener sexo.- El moreno sonrio dispuesto a gritar de felicidad aunque al ver de reojo su reflejo en un espejo noto que no se sentía con los animos para reiniciar su pospuesta vida sexual y estaba que Steve con todos los sucesos del dia tampoco estaba en su mejor momento.
-gracias Bruce y diviértete, nos vemos luego.
-ah…ok- respondió algo desconcertado ante la actitud tan seria de su amigo, se supone que para el era una muy buena noticia.
-pense que estarías saltando y gritando de alegría Stark- hawkeye fue el encargado de exteriorizar el pensamiento de ambos amantes- creo que no exageraste cuando dijiste que temias por tu vida- menciono con mas seriedad haciendo que la preocupación de Bruce volviera.
-¿en serio estas bien Tony?- se alejo algunos pasos de su pareja buscando crear un aura de mayor intimidad y confianza entre su amigo y el mismo.- sabes que puedes contármelo, siempre estaré para apoyarte.
-lo se Bruce…-miro una vez su reflejo volviendo a sentirse abatido por todo lo que habia pasado en tan solo algunas horas.- pero estoy bien, no tienes nada de que preocuparte amigo mas que de divertirte junto a tu zopilote.
-Tony- se dirigió a el seriamente.
-jaja nos vemos cielo.- termino con la llamada cerrando tambien los paneles que lo rodeaban; ya con la vista libre se recargo sobre el escritorio suspirando con cansancio, era increíble pensar como el mundo de una persona podia ponerse de cabeza en tan poco tiempo aunque el debería estar mas que acostumbrado a esos cambios, su vida era un vórtice de sucesos inesperados. Sus animos habian decaído y con eso su animo de hacer cualquier cosa, incluso estar sentado le causaba incomodidad ademas de que cada vez que alzaba tan solo un poco la mirada se topaba con aquel reflejo que comenzaba a odiar aun a pesar de que se trataba de si mismo; miro sobre su hombro la reluciente y ordenada cama de su capitan (si, porque habia decidido realizar sus proyectos ahí en busca de paz y del aroma de su rubia perdición) que no lo pensó mas y solo se tiro cual largo era sobre la cama, aspiro lentamente la esencia que desprendían las sabanas notando que ahí tambien se conservaba perfectamente el olor de su hombre a pesar de que esa habitacion habia dejado de ser usada desde hace mucho mucho tiempo; acerco su rostro tambien a las almohadas sospechando que ahí el olor seria aun mayor, metió ambos brazos por debajo de la almohada con la intención de abrazarla contra su cara sin embargo sus planes se vieron frustrados al toparse con un objeto debajo de esta el cual tomo entre sus manos revelando un cuadernillo de dibujo de al menos 100 hojas (ya que lucia delgado), examino su pasta dura y amarilla la cual no portaba ni un solo adorno o detalle de mas aunque era evidente de que era de su marido, eso hizo que una venita le picase para investigar que es lo que su esposo habia estado dibujando en sus días de descanso que parecían ser lo suficiente largos como para darse el lujo de dibujar. La primera pagina estaba en blanco dejando a la segunda como portada en donde podia vislumbrarse un lago rodeado de arboles y edificios que lograban darle un aire urbano pero a la vez natural, lo mas grandioso es que reconocía el lugar y es que se trataba de aquel lago donde por primera y única vez fueron a remar, sus recuerdos de aquel lugar no eran muy gratos pero aun asi habia sido una ocasión especial, su primera cita y sobre todo su gran reconciliación, desde ahí las cosas habian marchado bastante bien entre los dos; sonrio inconscientemente hasta que algo mas llamo su atención, aun costado del dibujo se encontraba una oración escrita con una perfecta caligrafía y en la cual citaba:
¿Cuándo fue la última vez que tu piel se erizo tanto que te falto el aire y sonreíste plenamente?
Porque a mí me pasa exactamente eso, cada vez que lo veo a los ojos.
Entrecerró los ojos no sabiendo si sentirse alagado o intrigado ya que el maldito de Rogers no especificaba de quien demonios hablaba, su corazón le hacia creer que Steve hablaba de ÉL, aunque tal vez ese ÉL era otra persona….otra persona tal vez llamada James Buchanan Barnes, agh debia dejar esas patrañas para despues y solo dedicarse a investigar, paso la hoja y lo primero con lo que se encontró fue con un dibujo de si mismo sonriendo como muy pocas veces lo habia hecho, ni el mismo sabia que lucia asi sonriendo…solo Steve era capaz de descubrir todas sus facetas y todos los sentimientos que se encontraban dentro de su corazón. En la esquina derecha otra frase se veia:
Porque con tu llegada apagaste mi oscuridad
Las siguientes paginas estaban llenas de su propio rostro en diferentes poses mostrando casi por completo todas sus facetas, serio, relajado, alegre, sensual incluso haciéndose el gracioso; era increíble como el capitan habia podido grabar tan perfectamente sus emociones en aquellas hojas. Cada pagina daba como resultado una sonrisa que poco a poco comenzó a subirle el animo incluso haciéndole sentir una hermosa calidez en todo su cuerpo muy parecida a las veces en su interior muy similar a las veces en las que se encontraba entre los brazos de su capitan.
Los últimos dibujos ya no eran sobre el si no sobre cierta personita especial que aunque aun no tenia rostro ya estaba dibujado en la libreta de su padre en forma de una hermosa pancita donde reposaba su pequeño campeón. Cerro el libro no sin antes dar una pequeña caricia al vientre que estaba sobre el papel; decidió esta vez dejarlo sobre el escritorio sin importarle mucho si Steve sabia que lo habia visto, al fin y al cabo habia confianza ademas de que se trataba de SUS dibujos; camino con calma hasta la pequeña mesa aunque justo al elevarlo sobre sus manos la libreta desprendió algunas hojas que cayeron balanceándose hasta el suelo, con pesadez se hinco a recogerlas mirando con sorpresa que esas hojas no lo tenían a el como protagonista sino a hawkeye. Aquello era tan extraño como inesperado ya que no encontraba ninguna razón para que su oji azul dibujara a ese mal nacido que siempre lo molestaba. Con rapidez hojeo todo el bloc sin encontrar algo que indicara que Steve hacia retratos de todos sus compañeros lo cual lo hacia aun mas raro; bueno al menos no habia sido una imagen nudista.
-Jarvis ¿Dónde está mi capitán?- pregunto pensando en una nueva forma de pasar lo que quedaba del dia.
-se encuentra en su habitación marital señor- fue la automática respuesta que lo hizo sonreir maliciosamente, vaya hasta el destino ponia sus planes sobre un buen camino. Agradecio a su IA antes de darle la orden de dormir un rato aunque como ultima tarea debia eliminar las llamadas, mensajes e incluso desactivar el elevador todo con la intención de no ser molestado hasta dentro de 24 horas. Camino tranquilamente hacia su destino sosteniendo tambien en sus manos aquellos retratos de Barton que había encontrado dispuesto a exigir una explicación…aunque a penas entrar pensó que las explicaciones podrían esperar y es que su prometido se mostraba con todo su esplendor ante el. Su rubio estaba parado frente a la ventana mirando al exterior con un aire reflexivo; lo contemplo solo un momento pensando en lo afortunado que era al tener un hombre como aquel en su vida, amable, cariñoso, respetuoso, valiente, inteligente en fin, la lista resultaba ser inmensa lo cual muchas veces y aunque costara creerlo lo hacia sentirse poco merecedor del capitan. Aquel momento de reflexión lo hizo olvidar sus intenciones de saltarle encima caminando mejor a paso lento y silencioso con el plan de sorprenderlo. Una vez que estuvo tras de el se paro un poco sobre las puntas de sus pies recargándose sobre los hombros contrarios mientras tomaba con los labios el lóbulo de su oreja, era algo que le resultaba inevitable; le fascinaba su sabor. Aquella piel clara, brillando con cada rayo de sol, fresca como cualquier mañana,cubriendo ese cuerpo ejercitado digno de una escultura. El rubio aun sorprendido sonrio por el gesto, giró despacio aun entre los brazos del menor, quedando los dos frente a frente.
-hola cielo - le dio un pequeño beso en los labios como una forma de recibirlo pero el castaño no pensaba conformarse con eso, con una sonrisa traviesa saco la punta de su lengua acercándola hasta los labios contrarios, delineándolos lentamente de forma romantica pero a la vez insinuante, esa fue una señal clara para que Steve decidiera unir sus bocas en un beso un tanto posesivo beso con el cual trataba de demostrarle su devoción, devoción que aun seguía con el pequeño a pesar de los problemas y las adversidades, el rubio lo sostuvo tambien por la espalda, aferrándolo a su cuerpo como si quisiera unirse a su cuerpo aunque ese abrazo no lastimaba para nada al castaño, es mas lo hacia sentir reconfortado. Ambos sólo se sabían habitantes de los brazos del otro, atrapados entre el torso de su amante, llenando el vacío que sus almas habian sufrido. Aquellas sensaciones tan fuertes cegaron al rubio quien sin pensar en la prohibición del contacto físico los guío hacia un sofa que estaba tras ellos. El mayor fue quien tomo asiento (debido a que el sillón era de una sola plaza) aunque Tony no tardo en hacerle compañía sentándose sobre sus piernas, logrando tambien que el vientre inflamado del menor se rozara con el cuerpo del rubio, haciéndolo entrar un poco en razón.
-mi amor- acaricio levemente su vientre mirándolo a los ojos con pesar - deberíamos dejarlo…si seguimos asi no creo poder parar.- murmuro escondiendo su rostro en el pecho de su esposo, a veces aquello parecía mas difícil que cualquier batalla en las que habia luchado.
El castaño sonrio bastante cautivado por las acciones del otro quien anteponía su propia necesidad con tal de protegerlos. Le dio un pequeño beso en la cabeza tomando entre sus manos el mentón del otro alzando su rostro hasta que sus ojos entraron en contacto- no tendrás que hacerlo- el rubio frunció el ceño no muy seguro de que hablaba- ya no tendras que controlarte- unió sus labios en un beso corto mirándolo de nuevo- no mas.
-pero el doctor Banner…
-digamos que por fin nos quito la ley del celibato- respondio con una sonrisa victoriosa contagiando con ella al capitan.
-¿hablas en serio?- pregunto mas emocionado que un pequeño apunto de abrir los regalos de navidad.
-claro, el mismo lo dijo, ya no hay nada de peligro, asi que amor- susurro volviendo a optar esa pose seductora- ¿Qué piensas hacer con eso?- la mirada del oji azul cambio de mirarlo con emoción a mirarlo con hambre, con deseo que ya no estaba dispuesto a contener; de nuevo unieron sus bocas aunque esta vez de manera mas desesperada paseando sus manos entre el cabello, el pecho y la espalda del otro aunque en aquellas partes la ropa estorbaba por lo que no duraron en quitársela poco a poco, ambos bastantes conscientes de lo que iba a pasar.
El instinto por el que se dejaron llevar cantó victoria cuando la ultima prenda quedó botada en el suelo dejando sus cuerpos totalmente desnudos. Tony que estaba solo un poco mas ansioso que el rubio bajó despacio, dejando besos sembrados por el torso de su amante hasta llegar a los pezones que se dedicó a mordisquear y lamer obteniendo el resultado esperado ya que en pocos segundos los habia dejado completamente erectos y con un tono rojizo. Cuando se sintió orgulloso de su trabajo y de los suspiros que le habia robado a su capitan siguió bajando con besos húmedos para entretenerse un poco más en el ombligo, jugó con su lengua ahí por un instante y continuó descendiendo hasta que llegó finalmente al objeto de sus deseos que ya se erguía gloriosa ante el. No espero más y comenzó trazando una línea de saliva desde la base del miembro erecto, duro y surcado de venas hasta la cabeza sonrosada, húmeda y caliente recogiendo con la lengua un poco del liquido pre seminal que iba saliendo poco a poco de la pequeña abertura hasta que llegó a las bolas. Se introdujo una en la boca mientras acariciaba la otra con la mano. Los gemidos de su esposo no se hacían callar y, por el contrario, sonaban más fuertes. Tony seguía disfrutando de el dulce sabor que su capitan poseía aunque tambien uso mas que su lengua para aumentar aun mas el placer; tomó con la mano toda la erección que tenía a su alcance y de un rápido movimiento se la introdujo en la boca hasta que tocó el fondo de su garganta. Succionó fuerte, apretando los labios alrededor de la ereccion, gimiendo de placer al sentir el sabor del líquido pre seminal deslizándose por su lengua. Siguió saboreando su dulce manjar mientras escuchaba, en acompañamiento, los suaves gemidos de placer que tanto le gustaba escuchar; porque sabía que él siempre sería el único que los provocaría y no porque se creyera el mejor en aquellos trabajos (bueno, solo un poco) sino porque jamas pensaba alejarse del rubio, su unión ya no se trataba de una simple atracción, de un simple gusto no, ahora estaban unidos por mas, por un hijo, por sus almas y por su amor, aquella unión ya no se podia romper. Volviendo al encuentro, el castaño volvió a devorar aquel miembro sin piedad, recorriendo con su lengua la base de la erección mientras sentía el palpitar de la sangre llenando el cuerpo cavernoso entre sus manos, sintió unos dedos enredarse en su cabello pero no con la intención de indicarle un ritmo, sino mas bien como una forma de que Tony disfrutara mas del acto, pues sabia de mas lo mucho que el menor se relajaba al sentir suaves caricias en su nuca; solo su diestra era la encargada de enredarse en esos cabellos castaños ya que su mano izquierda estaba recargada en el reposabrazos del sillón, apretándolo con tal fuerza que hasta sus nudillos estaban blancos hipnotizado por todo ese ritual, sintiendo como el moreno volvia a succionarlo completamente, ahuecando incluso sus mejillas en torno a el.
Tony dio unos lametazos más cuando sintió que su capitan eyacularía en caso de seguir y se incorporó hasta llegar a unir sus labios de nuevo en un beso frenético y pasional a la vez que abría las piernas y se montaba en él con una pierna a cada lado entre el cuerpo sexy y caliente de su amante y la tela del sillón. Sus erecciones quedaron balanceándose dolorosamente entre ellos algo que Tony aprovecho para tomarlas entre sus manos masajeandolas al compas de sus gemidos mientras las manos grandes de su capitan se encargaban de recorrer su cuerpo desde el cuello hasta depositarlas sobre sus nalgas, masajeándolas y dándoles pequeños golpes para escuchar el sonido que hacía la piel de sus manos al chocar contra la suave piel de su esposo.El castaño recargó todo el peso de su cuerpo sobre sus rodillas, levantando la cadera para que su apasionado amante se recorriera hacia el borde del asiento dejándolos en una perfecta posición para iniciar lo que ambos se habian negado desde hace 3 meses; el castaño no espero delicadezas asi que una vez que enfilo ese miembro contra su entrada comenzo con la autopenetracion de manera un poco lenta (tampoco es como si deseara destrozarse el ano) al principio, la cabeza quedó alineada con su abertura empezando a hacerse lugar mas aun cuando no habia existido una preparación previa pero lo que menos importaba, incluso resultaba ser algo bueno ya que de esa forma ambos sentían con mayor intensidad la penetración, haciendo a sus cuerpos reaccionar aún más urgentemente a los estímulos, a uno por la estrecha cavidad que apretaba su miembro y al otro por la repentina y casi dolorosa intrusión; Tony siguio descendiendo mientras que con una mano sostenía el pene que se introducía en él de forma firme. Bajó y bajó hasta que sus nalgas quedaron recargadas sobre las piernas del rubio justo como hace un momento pero con un complemento mas entre sus nalgas. Aquella sensación de plenitud lo recorrió desde la nuca hasta la punta de sus dedos teniendo que recargar su frente contra la de su acompañante en busca de un soporte, le miro directo a los ojos que brillaban ante todos los sentimientos que lo embargaban, al igual que respirando dificultosamente, el moreno podia sentir incluso el rubor invadiendo su cara por lo caliente de la situación. Se permitió cerrar los ojos por un momento mientras se acostumbraba a la intromisión en su trasero. El capitan en busca de apaciguar su dolor comenzo a repartir besos dulces alrededor de su rostro hasta llegar a sus labios posándose ahí con un tacto suave y delicado mientras hacia círculos con su cadera. Tony gimio ante ello haciendo que el rubio sonriera con satisfacción al ver que el castaño tambien lo disfrutaba, se animo a empujar un poco mas contra el cuerpo de su amante oyéndolo sisear tanto por el placer como por el ardor que sentía en sus paredes internas pero eso no evito que el castaño lo recibiera apretando deliciosamente el trasero, sintiendo más y más con cada movimiento y cada respiración. El castaño busco aun mas soporte apoyándo sus rodillas contra el tapiz del mueble, subiendo un poco hasta casi quedar libre de la penetración para despues volver a caer más deprisa llevándose así cualquier resto de control que pudiera quedar en ambos.
Continuaron con el vaivén de sus cuerpos; entre cada estocada se besaban o sólo tocaban sus labios con los del otro transmitiéndose así todo el amor que se profesaban el uno al otro. Gemían sus nombres, casi lloraban de placer y murmuraban un “más”, un “así” o simplemente un “te amo”. Tony solo podia aferrarse a los hombros de su capitan mientras su cuerpo rebotaba como una pelota contra el cuerpo del otro llenando la habitacion con el sonido de sus pieles estrellándose cada vez con mas fuerza, aquella posición ademas era ideal para rozar sin piedad su próstata algo que lo hacia casi delirar, teniendo que morder el cuello de su esposo solo con el deseo de liberar esa ansiedad que lo rodeaba al querer liberarse de una vez, al querer alcanzar su orgasmo y quedarse ahí por siempre, por dios que habia extrañado demasiado todo esto. Las cosas para el capitan pintaban de una manera similar, el sentir aquella calidez nuevamente alrededor de su miembro le hizo recordar porque amaba tanto hacer el amor con su castaño quien como en todo sus encuentros parecía casi succionarlo a los mas fondo de su cuerpo. En un momento casi alcanzaron el final pero el rubio no pensaba dejar que aquello terminara tan rapido asi que prefirió parar aprovechando el momento para cambiar de posición, una que les permitiera llegar más allá, más duro y más rápido, hizo que Tony se levantara de sus piernas teniendo que abandonar aquel santuario que comenzaba a contraerse ante la falta de atención, el tambien se levanto guiando el agotado cuerpo de su esposo a hincarse encima del sillón recargando su pecho sobre el respaldo, dejándo a su disposición aquella dulce y algo irritada entrada que no dudo en profanar de nuevo, lo sostuvo por ambos lados de la cadera con manos firmes iniciando otra vez con las desenfrenadas embestidas.
El cabello de Tony para ese momento ya estaba desordenado sobre su cara mientras que su cabeza se recargaba de vez en cuando en lo alto del respaldo, sus manos tambien se mantenían aferradas en el respaldo del sillon a cada lado de su cabeza. Con la cadera bien respingada podia sentír el fuerte agarre de aquellas grandes manos hasta el momento en que una de ellas dejo de sostenerlo para mejor guiarse a su desatendido miembro que temblaba y se balanceaba entre cada empuje. El gesto llevó al menor hasta las nubes, haciéndolo arquearse con la boca abierta, los ojos entrecerrados y los sentidos más alertas que antes anticipándose al inminente orgasmo.
Mientras tanto, el capitán era el encargado de aumentar el ritmo de las embestidas que daba contra el cuerpo de su castaño, moviéndose con tal rapidez que termino recargando su pecho contra la espalda del menor, sintiendo el sudor que escapaba de cada poro en esa perfecta piel, mezclando sus propios fluidos. Aquella posición lo dejo bastante cerca del cuello del menor que se mantenía estirado por lo que no dudo en recorrerlo con su lengua, succionando tambien logrando dejar una visible marca rojiza, algo que se volveria una prueba de ese candente encuentro.
-Ya… casi —susurró en su oído a lo que Tony gimió en respuesta anunciando con esto que el tampoco estaba lejos del orgasmo—jun..tos- susurro dándole una mordida sobre la mejilla derecha. El moreno reclinó la cabeza contra el hombro de su capitan sintiéndolo darle las últimas estocadas con movimientos torpes y un poco forzados; sintió la humedad extenderse en su interior y como aquel adonis de cuerpo escultural se enterraba más en él. Aquello ocasionó que se rindiera ante el placer y explotara inmediatamente. Su semen quedó regado por el sillón en fuertes espasmos mientras su ano se contraía y apretaba en torno al miembro que seguía en su interior, rodeándolo sin dejarle forma de escapar.
Se mantuvieron algún tiempo en aquella posicion mientras su respiración se regularizaba. Tony sintió que gran parte del peso de su capitan se encontraba recargado sobre su espalda pero no le importó pues estaba tan complacido, feliz y orgásmico como para que eso le pareciera incomodo o chocante. Sentía su propio sudor resbalar por su cuerpo y de repente un rápido lametazo en su mejilla derecha lo hizo salir de su ensueño. Escuchó la risita del otro muy cerca de él y enseguida un beso tierno depositado casi con nerviosismo en la fina piel que había sido lamida.
-agh Rogers, eso es tan antihigiénico y vulgar- lo reprendio de forma burlona mientras se quitaba con el dorso de la mano cualquier rastro de saliva.
—Por eso lo hago. Me fascina hacerlo.
-oh, ¿entonces el respetado soldado de America resulto ser todo un pervertido?, vaya esas son impactantes revelaciones.
-Tony, nadie puede ser tu pareja sin volverse un pervertido- menciono tambien con burla mientras iba saliendo del interior de su amado. Honestamente para el ese momento y el de la penetración era lo que más saboreaba de sus encuentros; el castaño por su parte cerró los ojos cuando lo sintió salir.-Me fascinas Tony —volvió a susurrar en su oído, para despues depositar un beso gentil en su mejilla.
- lo se- acepto con su común soberbia haciendo sonreir al rubio quien habia aprendido a amar esa actitud- a mí me fascinas tú—acepto sentándose correctamente acercando sus rostros para poder apoderarse de sus labios —ahora tengo que tomar una ducha, me siento pegajoso- murmuro con algo de molestia ante aquella sensación tan incomoda.
-podemos bañarnos juntos- sugirió el rubio tomándolo de las manos para ayudarlo a levantarse.
-Steve, sabes que si nos metemos juntos a la tina haremos de todo menos bañarnos.
-¿y que?, de todas maneras hay que recuperar el tiempo perdido- en definitiva su capitan se habia vuelto un pervertido, pero eso solo lo hacia amarlo aun mas. Los rayos del sol ya se colaban por los enormes ventanales que rodeaban todo el salón principal pero eso no podía incomodar menos a todos los hombres que se encontraban tirados dentro del castillo. Todos estaban dispersos en el inmenso lugar, algunos como los asgardianos descansaban en pareja recostados uno encima del otro en una de las mesas de centro, Clint por su parte estaba dormido y desnudo sobre un patito inflable que flotaba en la fuente de café que por el momento estaba apagada pero no vacia. La pelirroja desde hace un rato habia despertado con el cuerpo molido y la cara llena de moretones, aun asi no se puso a investigar que le habia pasado y mejor aprovecho el tiempo para tomar la evidencia de las vergonzosas escenas en las que habían estado involucrados sus compañeros. Su fiel compañera, una cámara canon, era la encargada de conservar cada imagen que en el momento adecuado seria un muy buen chantaje; incluso se encargo de tomar fotos a los tres guerreros que habian amanecido en el corral de los cerdos, todos en poses extrañas e incluso Fandral con la cara y el cuerpo pintados con algo que parecía marcador indeleble ; aunque Bruce se habia llevado la peor parte al estar recostado entre el lodo de los animales, algo que de seguro le dejaría un peculiar olor que por lo menos duraría un par de semanas. Tal vez el olor del Stark tambien seria particular por unos días ya que como un pequeño lechón apareció dormido sobre el vientre de una grande puerca rodeado también de varios cerdos y lo que era mas épico es que su rostro se encontraba liso, sin ningun rastro de su característica barba de candado, ¿Cómo habia pasado eso?, bueno preguntar eso la haría cuestionarse sobre todas las demás cosas extrañas con las que se encontró y jamas tendría una explicación coherente para todo ello asi que lo mejor era no preguntar y solo burlarse de los hechos aunque no todos se quedarían contentos con esa respuesta.
-lo que paso anoche fue que tuvieron una celebración…divertida.- fue lo único que pudo responder la reina al ser cuestionada durante el desayuno, evidentemente su respuesta solo causo bufidos y reclamos de los presentes.
-oigan ¿cómo esperan que la reina sepa porque Bruce apesta a cerdo, porque Tony no tiene su barba y porque Thor esta lleno de chupetones por todo el cuerpo?.- Loki bufo indignado girando su cara a otro lado mientras su rubio esposo solo rogaba por su perdón.
-si, claro Rogers, como tu amaneciste fresco como una lechuga no tienes de que preocuparte- menciono con ironía el castaño quien había creado un cubrebocas improvisado con un pañuelo solo para evitar la vergüenza de estar sin su hermoso barba.
-¿Qué amanecí bien dices?, parece que no haz visto mi cabeza cariño- efectivamente, el rubio tenia una venda rodeando su cabeza dado que su frente y su nuca habian sufrió daños en tan alocada fiesta.
-solo hay algo que decir y es que todos fueron responsables de sus acciones y ahora culpables de las consecuencias- el padre de todo decidió interferir en la platica donde aquellos muchachos descontrolados solo buscaban culpables para deshacerse de la responsabilidad.
-El señor Odin tiene razón, asi que este tema se da por sentado, no quiero escuchar ni un comentario mas- el capitan hablo autoritario tomando su papel como líder del equipo a lo que Tony trato de rebatir de nuevo- ¡ni un comentario he dicho!- lo miro seriamente haciendo que volviera a sentarse con mala cara y los brazos cruzados.- ahora todos quítense esa cruda de encima que no tardamos en irnos.
-ahhhggg-replicaron todos desparramándose en sus sillas al solo pensar en el terrible viajecito que les esperaba.
Un par de horas después y tras despedirse de toda la familia Odinson los vengadores volvieron a Nueva York con la ayuda de Thor quien de inmediato volvió a su reino prometiendo que siempre volveria cuando lo necesitaran o claro cuando quisieran simplemente convivir en equipo o mas bien como la gran familia en la que se habian convertido. Aun asi como familia que eran tambien tenían vidas independientes asi que cada uno volvió a su propia rutina; como era de esperarse la viuda volvió de inmediato a sus misiones secretas encomendadas por Nick Fury mientras que Bruce y Clint desistieron de volver a la base de los vengadores con el fin de darse un mes de vacaciones, solo ellos dos con los hermosos estados de Norte America que estaban dispuestos a descubrir en un aventurero viaje por carretera. Tony los envidiaba pero las responsabilidades llamaban, responsabilidades como avanzar en sus estancados proyectos, comer una hamburguesa con queso, ir por donas, firmar solo un par de papeles de la empresa y comer otra hamburguesa.
-sigo sin entender porque tuvieron que depilarme precisamente la cara- reprocho por enésima vez logrando que el rubio suspirara con cansancio.- y no me trates asi Rogers, como si no te importaba- lo sensible aun no se le quitaba y parecía que no se le quitaría durante todo el embarazo.
-¿y que mas podrían haberte depilado?- pregunto solo para que no volviera a reclamarle por solo darle el avión.
-no se, tal vez mis partes por ejemplo- Steve gruño mirándolo con mala cara- ¿Qué?, es algo que nadie veria.
-es algo que nadie excepto yo tiene derecho de ver- cerro el tema justo en el momento en que las puertas del ascensor se habian abierto.
-oye sonaste muy posesivo…y eso me encanta- se colgó en su cuello dispuesto a devorarle la boca con un beso aunque su acto fue detenido abruptamente y de la peor manera.
-Bucky- murmuro el capitan contra sus labios dejando su corazón completamente herido pero a la vez indignado.
-¿¡Qué!?- se separo de golpe mirándolo con mala cara pero el rostro del capitan no mostraba pena ni arrepentimiento es mas no mostraba nada y es que su mirada estaba fija en un punto, un punto que se encontraba tras de Tony; de inmediato el castaño giro buscando lo que habia robado la atención de su rubio y lo que vio no le gusto.- Jarvis, libera la Marc 9- aquello fue suficiente para que Bucky agachara la cabeza con culpa mientras que el capitán por fin pudo salir de su letargo.
-¡TONY NO!- pero ya era demasiado tarde porque la armadura ya habia pasado a su lado instalándose por completo y de manera rápida en el cuerpo del menor. De inmediato el castaño preparo un rayo repulsor concentrando toda su potencia en su diestra la cual seria la encargada de acabar de una vez por todas con ese maldito.- TONY NO- repitió el capitan al colocarse en su campo de ataque como utilizando su cuerpo como un escudo para proteger a su amigo.
-Quitate de mi camino antes de que te quite por mi cuenta.- amenazo aunque el mejor que nadie sabia que jamas le haría daño a su prometido.
-hazlo- respondio con seguridad sin siquiera temblar ante su afirmación.- no permitiré que lo dañes Tony, no sin antes escucharlo.
-¿Qué quieres que escuche? , ¿el como mato a mis padres?, ¿quieres que me cuente con todo detalle como le arrebato la vida a ambos, como elimino a las personas que fueron lo mas importante en mi vida?- Steve suavizo su mirada observándolo de manera comprensiva pero aun asi no se movio de su lugar.
-se que Buc..James tiene más que decirte, por ejemplo el porqué esta aquí- esta vez el rubio miro de reojo a su amigo sosteniéndole la mirada solo por unos segundos, dejando en claro que el también quería escuchar la razón de su presencia la cual le alegraba pero a la vez lo confundía ya que habia sido tan…repentina.
-por favor- ambos fijaron su atención en el inesperado invitado que se habia atrevido a hablar, pero aunque ambos estaban fijos en el soldado, Bucky solo estaba fijo en Stark; paso a un costado del rubio evitando tambien la mano con la que intento detenerlo y solo camino con paso recto hasta colocarse delante del menor en donde sorpresivamente se hinco sin dejar de mirarlo a los ojos.-solo te ruego que me escuches, que me des la oportunidad de pedirte disculpas y explicarte como es que todo paso, no para que me perdones sino para que sepas la verdad de los hechos…la verdad sobre la muerte de tus padres- esa ultima frase tiro un gatillo en Tony que lo hizo volver a apuntarlo con el guante de su armadura.
-Tony..por favor- rogo tambien el rubio muerto del miedo por lo que pudiera pasarle a su mejor amigo que se entregaba como un esclavo a su verdugo.
-es lo único que te pido Stark aunque si no quieres hacerlo te comprendo, si lo único que deseas es matarme- tomo con sus manos el guante de la armadura tirando de el hasta colocarlo sobre su pecho, justo sobre el corazón- hazlo, que yo no te lo voy a impedir, pero antes de que lo hagas solo quiero decirte que lo siento, lamento haberte causado tanto daño… se que unas simples palabras jamas repararan mis errores pero no puedo regresar el tiempo para evitarme sobrevivir, para evitar tanta destrucción…para haberme tirado yo mismo de ese tren.- el oji azul no pudo evitar que sus ojos se llenaran de lagrimas ante aquel terrible recuerdo, el recuerdo del dia en que creyó perder a su mejor amigo, su hermano. El silencio reino en la sala de tal manera que parecía que se habia detenido el tiempo, Bucky solo estaba ahí esperando su destino mientras que Tony se enfrentaba a su propia batalla moral donde una parte de si le dictaba que acabara con ese maldito mientras que una pequeña parte veía a Bucky como alguien inocente, es mas incluso como a una victima, una victima mas de todas aquellas terribles guerras. Al final su pequeño lado humano gano asi que lentamente apago su rayo repulsor cerrando su mano en un puño que estrello salvajemente contra la mandíbula del soldado quien aun con el fuerte impacto solo giro el rostro permitiendo que Tony repitiera la acción en su otra mejilla y asi lo hizo cinco veces mas hasta que lo estampo en el suelo propinándole tambien una patada en el estomago.
-¡¡TONY YA BASTA!!- el rubio se lanzo sobre el al pensar que iba a matarlo a golpes pero ni sus suplicas ni su intervención detuvieron a Tony que lo lanzo a través de una ventana haciéndolo caer un piso abajo; de inmediato se levanto corriendo las escaleras que los separaban encontrándose con una escena que no esperaba ver, Tony se habia deshecho de la armadura y ahora solo golpeaba a su amigo con los puños aunque cada golpe se volvia mas débil nublado por el llanto desgarrador del menor quien descarado dejaba caer sus lagrimas empapando el cuerpo del soldado.
-TE ODIO, TE ODIO MALDITO HIJO DE PUTA, MATASTE A MIS PADRES, TE ODIO-le propino un ultimo golpe antes de caer rendido en el suelo haciéndose un ovillo mientras no podia dejar de llorar a todo pulmon. Steve de inmediato y sin importarle si podia ser rechazado se hinco frente al castaño tomándolo entre sus brazos incitándolo a refugiarse en el, a desahogarse, a liberarse ofrecimiento que ante todo pronostico Tony acepto bastante afectado como para ponerse a pensar que era su propio marido un pilar importante en todo este problema.
El capitan estuvo menciendolo entre sus brazos hasta que el moreno ante tanto esfuerzo asi como por el cansancio del viaje termino durmiéndose; con delicadeza lo cargo hasta su habitación volviendo a la sala donde su amigo aun le esperaba aunque mas que esperarlo parecía que estaba aun sumido en la culpa.
-oye Buck- llamo haciendo que el otro girara a mirarle apenas con el tiempo para poder cachar la botella que le habia arrojado su amigo. Miro la marca de la botella sorprendiéndose de que fuera la misma que tomaban hace años. Aun asi eso no logro que dejara de sentirse incomodo ante la familiaridad con la que Steve lo trataba.- ¿actuas como si nada?
-¿y que otra cosa puedo hacer?- pregunto de forma simple mientras se sentaba en el extremo contrario del sofa.
-la ultima vez que te vi estuve a punto de matarte- respondio esperando que por ese hecho al menos existiera un poco de hostilidad entre ellos.
-pero no lo hiciste- Bucky bufo pensando en que era una manera tonta de ver las cosas- a mi no tienes que darme explicaciones Buck y mucho menos pedirme perdón por eso, yo siempre comprendi que ese no eras tu, aquel que cometió todas esas acciones.
-asesinatos Steve, cometi asesinatos de gente inocente a los que ni siquiera les di la oportunidad de defender su vida.
-¡pero no eras tu!- rectifico mas seriamente con la firme decisión de hacerlo entender de una vez por todas que nada de eso era su culpa.- tal vez tu cuerpo estaba ahí e incluso lo recuerdos están en tu mente pero ese no eras tu, ese no era el hombre que me apoyo y creció conmigo, ese no era el hombre que siempre defendía a los débiles, ese no era el hombre que se enlisto al ejercito con la finalidad de terminar una guerra y mucho menos es el hombre que casi murió por mi y por una grande causa…ese no eras tu.- murmuro bajando la mirada que se quedo fija en el suelo envolviéndolos a ambos en un profundo silencio. Bucky se permitió por un momento reflexionar las cosas que le habian dicho pensando en que no era la primera vez que las oia pero que ni asi podían entrar en su cabeza y en su alma que no encontraba paz y al parecer jamas la encontraría; destapo su botella de cerveza dándole un profundo trago.
-vaya, hace tanto que no probaba una de estas- su comentario fue lo suficiente tonto como para robarle a Steve una leve carcajada- no se tal vez como unos 70 años- volvio a burlarse de su condición de “anciano” ya que era la misma situación de Steve.
-creo que ha pasado aun mas tiempo.
-y seguimos aquí, debo reconocer que las verduras de la señora Pershing si eran muy sanas, siempre dijo
-que viviríamos mas si comíamos sus verduras.-ambos sonrieron recordando los viejos tiempos.
-ella decia que eran de un plantío especial cosechadas por ella misma en la huerta de su hermano pero miles de veces la vi comprándole al mercader de la esquina.
-lo se, una vez me hiciste subirme a su camión para robarle un par de fresas porque le gustaban a tu novia Marie.
-¿tuve una novia llamada Marie?- frunció el ceño haciendo que su compañero solo negara.
-en serio que nunca cambiaras, era alta, pelirroja y con pecas, solia llevar el cabello suelto ademas de que lo tenia rizado.
-cierto cierto, ¿y tenia grandes pechos?
-bastante considerables.
-oh entonces se merecía todas las fresas del mundo- ambos soltaron una carcajada limpia dando un trago mas a sus cervezas- vaya tu tienes mejor memoria para recordar a mis chicas, debería sentirme apenado por eso.
-no es importante, es solo que como yo no tuve mi mente ocupada con ninguna novia tenia el suficiente espacio en mi memoria para recordar a las tuyas.
-si lo recuerdo, eras el joven sin suerte, sin suerte en el amor porque todo lo demás te salía bastante bien- le revolvió el cabello de manera amigable haciendo que el otro se alejara con una sonrisa.- pero las cosas han cambiado ¿no?, ahora incluso estas comprometido…y con un hombre, vaya eso si fue novedad.- murmuro mas para si mismo que para el rubio quien dejo las sonrisas de lado.
-¿te molesta? –pregunto con algo de temor al ser mal visto por su mejor amigo, alguien ciertamente muy importante en su vida y de quien esperaba su entera aceptación.
-¿y si lo hiciera…lo dejarías?- menciono tentativo mirando como el rubio perdia los colores del rostro mientras negaba frenéticamente- tranquilo, no es como si fuera a golpearte hasta que te casaras con una linda chica, es solo que me pareció un cambio muy drástico en tu personalidad.
-¿mi personalidad?- le miro confundido sin saber muy bien que intentaba decirle con eso, ¿era acaso una clase de desprecio hacia su nueva vida?
-Steve cuando pensaba en ti ya sabes comprometido y esas cosas siempre me imagine a una chica bonita, educada, respetable, sensible, frágil y muy humana…bueno ignora lo de sensible porque bueno estabas loco por Peggy y esa mujer era todo menos frágil- Steve asintio dándole la razón- incluso me la imagine físicamente, con un despampanante cuerpo, piernas torneadas y muy buen..
-suficiente, se a donde quieres llegar.
-terminaste comprometido con un hombre y no solo eso sino que hombre, tu pareja es…es alguien complicado.- prefirió dejarlo por la paz ya que la culpa aun le removía la consciencia, no podia soltarse a decir cosas malas de alguien a quien habia hecho tanto daño.
-se lo que puedes pensar de él, de hecho se lo que todos piensan de él pero es que nadie entendería jamas lo maravilloso que es ese hombre y es solo mío.- el castaño miro la cara de ensoñación que inconscientemente ponia su amigo al hablar del menor de los Stark dándose cuenta que lo habia perdido, su amigo estaba profundamente enamorado aunque no es como si no lo hubiera sospechado antes.
-hay un cierto placer en la locura que solo el loco conoce- fue lo único que pudo decir dándole la razón de que nadie mas que el podia considerar al Stark como una pareja formal.
-exacto.- sonrio una vez mas antes de seguir con su charla entre amigos evitando a toda costa hablar de sus antiguos errores y solo centrarse en lo bueno de la vida algo que incluso Bucky pudo saber manejar solo para no arruinar aquella reconciliación tan maravillosa que estaban teniendo, era tan maravilloso tenerse el uno al otro igual que en los viejos tiempos. Aquello se sentía tan ameno que podría haber durado por horas hasta que el propio Steve fue quien opto una actitud seria e incluso algo apenada al ver a su prometido parado en el marco de la sala mirándolo fijamente aunque sin mostrar ninguna expresion.
-¿necesitas algo cielo?- pregunto amable mientras sentía el ambiente tornarse tenso, Bucky de inmediato bajo la mirada apenado por haber permanecido tan alegre en aquella casa mientras otro hombre bajo el mismo techo sufria una grande pena.
-necesito un café- fue su escueta respuesta antes de caminar hacia la cocina teniendo que atravesar toda la sala creando asi un ambiente mas incomodo; cuando el Stark estaba a punto de ingresar a la cocina Bucky se levanto con toda la intención de irse solo para no incomodar mas al castaño.
-fue un gusto verte de nuevo Steve, adiós y cuídate- se despidió aunque esa despedida tenia explicito un hasta nunca pues no se prestaba a algun otro encuentro o a un nos veremos. Steve lo noto de inmediato mirándolo de manera triste al pensar que perdería de nuevo a su mejor amigo y justo ahora que lo habia recuperado.
-¿no piensas decirle que la próxima reunión será en tu casa?-intervino aun cuando no le habian hablado a el fijando su vista en Barnes que lo miraba sorprendido asi como el capitan.- ¿vez a este hombre de aquí?- señalo al rubio quien aun seguía a la desconcertado de lo que Tony pudiera decir-su nombre es Steve Rogers aunque eso ya lo sabes…lo que no sabes o tal vez si pero deseas ignorarlo, es que esta sufriendo, sufre por tener que partir en dos sus sentimientos solo para no causarte daño ni a ti ni a mi pero yo siempre tendre ventaja al grado de que si le pido que deje de verte lo haría porque me ama y nunca seria capaz de lastimarme- Bucky suspiro resignado pues eso era lo que sabia que pasaría, por eso mismo no se habia hecho esperanzas de un futuro encuentro.- pero no hare eso, porque no soy el tirano que crees que soy, jamas le negaría a Steve el convivir con la única persona que comprende su pasado y sobre todo que es su hermano.-el ojiazul estaba a punto de saltarle encima en busca de agradecerle su enorme consideración pero el moreno se lo impidió.- esto no es un tratado de paz entre tu y yo Barnes que te quede claro, tu no volveras a entrar a mi casa y mucho menos entraras en contacto conmigo, te sigo odiando desde lo mas profundo de mi y eso jamas cambiara asi que no busques meterte conmigo.
-lo entiendo y gracias- Tony no dijo nada mas y solo se perdió en su cocina dando un permiso mudo para que ambos pudieran ir a beber algo solo para convivir unas horas mas.-creo que comienzo a comprender lo bueno de tu locura- susurro mirando la espalda de Steve que se habia adelantado para ir por el auto.
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Lo habia escuchado volver apenas hace un par de minutos pero aun asi el rubio no hizo el intento de buscarlo, algo que agradeció completamente ya que aun no se sentía con el animo de enfrentarlo y ver en el aquellos rastros de felicidad que debia portar al haber estado toda una tarde con su gran amigo Bucky; dejo de lado sus pensamientos y siguio concentrándose en los comandos que debia mejorar en Jarvis, una tarea bastante compleja que lo hacia distraerse al grado de olvidar los problemas que le rodeaban asi como las ganas de llorar, benditas lagrimas se habían escapado de sus ojos por dos largas horas, algo agotador y dañino para sus sensibles ojos. Además de su “tarea”, lo que le ayudo a subir el animo fue su infalible música que siempre lo acompañaba, como ahora que retumbaba en toda la habitacion Rock n roll damnation. Tecleo un par de comandos mas antes de fijar su vista en uno de sus paneles holográficos notando que tenia una llamada entrante de alguien bastante inesperado-vaya vaya honey, pensé que como estabas en tu luna de miel no te acordarías de tu hermoso hermanito menor- menciono con su habitual alegría tratando de evitar asi algun tipo de cuestionamiento sobre su decaída actitud.
-no es una luna de miel Tony- aclaro aunque solo recibió un bufido como respuesta- espero no estar interrumpiendo tu rutina.
-¿si por rutina te refieres a comer muchas hamburguesas con queso y una enorme malteada de fresa? Si, si me interrumpiste, pero no importa, ¿Qué pasa cariño?
-solo queria darte los resultados del estudio que me enviaste, las cosas parecen bien, todos tus niveles están estables aunque tu presión descendió un poco, ¿tomaste las pastillas que deje en tu buro?
-lo hice mama y en serio muchas gracias Brucie, no era mi intención arruinar tu escapada romántica pero en serio temi por mi vida- dramatizo aunque sus palabras tenían cierto grado de verdad.
-¿estas bien Tony?- evidentemente Bruce no se tomo el comentario como una broma.
-si si, solo comencé a sentir un par de mareos pero todo parece estar bien.
-si, asi parece- acepto mirando una vez mas los estudios.- por cierto Tony, habia otra cosa que queria mencionarte.
-tu diras mi amigo.
-con base en lo que vi en estos estudios, que son los mas recientes y viendo el desarrollo del bebe asi como su tiempo de gestación creo que estas libre de peligro.
-¿eso quiere decir..
-que tu embarazo ya no es un embarazo de alto riesgo, asi que solo seguiremos con los cuidados esenciales sin..
-espera- lo detuvo digiriendo la noticia- ¿eso quiere decir que puedo tener sexo?
-¿eso es lo único que te importa?- pregunto con incredulidad tambien algo molesto por esa actitud tan despreocupada.
-claro que si, por dios estamos hablando de el millonario play boy Tony Stark- un tercera voz se sumo a su conversación haciendo que el moreno frunciera el ceño.
-venga Bruce, te he dicho que nunca pongas el altavoz cuando Katniss esta cerca.
-y no lo hago, es solo que el tiene buen oído.- intercedió a su favor antes de crear una disputa mas grande.- en fin, tu embarazo ahora puede seguir un rumbo normal y si- intervino antes de que Tony pudiera volver a hablar- si puedes tener sexo.- El moreno sonrio dispuesto a gritar de felicidad aunque al ver de reojo su reflejo en un espejo noto que no se sentía con los animos para reiniciar su pospuesta vida sexual y estaba que Steve con todos los sucesos del dia tampoco estaba en su mejor momento.
-gracias Bruce y diviértete, nos vemos luego.
-ah…ok- respondió algo desconcertado ante la actitud tan seria de su amigo, se supone que para el era una muy buena noticia.
-pense que estarías saltando y gritando de alegría Stark- hawkeye fue el encargado de exteriorizar el pensamiento de ambos amantes- creo que no exageraste cuando dijiste que temias por tu vida- menciono con mas seriedad haciendo que la preocupación de Bruce volviera.
-¿en serio estas bien Tony?- se alejo algunos pasos de su pareja buscando crear un aura de mayor intimidad y confianza entre su amigo y el mismo.- sabes que puedes contármelo, siempre estaré para apoyarte.
-lo se Bruce…-miro una vez su reflejo volviendo a sentirse abatido por todo lo que habia pasado en tan solo algunas horas.- pero estoy bien, no tienes nada de que preocuparte amigo mas que de divertirte junto a tu zopilote.
-Tony- se dirigió a el seriamente.
-jaja nos vemos cielo.- termino con la llamada cerrando tambien los paneles que lo rodeaban; ya con la vista libre se recargo sobre el escritorio suspirando con cansancio, era increíble pensar como el mundo de una persona podia ponerse de cabeza en tan poco tiempo aunque el debería estar mas que acostumbrado a esos cambios, su vida era un vórtice de sucesos inesperados. Sus animos habian decaído y con eso su animo de hacer cualquier cosa, incluso estar sentado le causaba incomodidad ademas de que cada vez que alzaba tan solo un poco la mirada se topaba con aquel reflejo que comenzaba a odiar aun a pesar de que se trataba de si mismo; miro sobre su hombro la reluciente y ordenada cama de su capitan (si, porque habia decidido realizar sus proyectos ahí en busca de paz y del aroma de su rubia perdición) que no lo pensó mas y solo se tiro cual largo era sobre la cama, aspiro lentamente la esencia que desprendían las sabanas notando que ahí tambien se conservaba perfectamente el olor de su hombre a pesar de que esa habitacion habia dejado de ser usada desde hace mucho mucho tiempo; acerco su rostro tambien a las almohadas sospechando que ahí el olor seria aun mayor, metió ambos brazos por debajo de la almohada con la intención de abrazarla contra su cara sin embargo sus planes se vieron frustrados al toparse con un objeto debajo de esta el cual tomo entre sus manos revelando un cuadernillo de dibujo de al menos 100 hojas (ya que lucia delgado), examino su pasta dura y amarilla la cual no portaba ni un solo adorno o detalle de mas aunque era evidente de que era de su marido, eso hizo que una venita le picase para investigar que es lo que su esposo habia estado dibujando en sus días de descanso que parecían ser lo suficiente largos como para darse el lujo de dibujar. La primera pagina estaba en blanco dejando a la segunda como portada en donde podia vislumbrarse un lago rodeado de arboles y edificios que lograban darle un aire urbano pero a la vez natural, lo mas grandioso es que reconocía el lugar y es que se trataba de aquel lago donde por primera y única vez fueron a remar, sus recuerdos de aquel lugar no eran muy gratos pero aun asi habia sido una ocasión especial, su primera cita y sobre todo su gran reconciliación, desde ahí las cosas habian marchado bastante bien entre los dos; sonrio inconscientemente hasta que algo mas llamo su atención, aun costado del dibujo se encontraba una oración escrita con una perfecta caligrafía y en la cual citaba:
¿Cuándo fue la última vez que tu piel se erizo tanto que te falto el aire y sonreíste plenamente?
Porque a mí me pasa exactamente eso, cada vez que lo veo a los ojos.
Entrecerró los ojos no sabiendo si sentirse alagado o intrigado ya que el maldito de Rogers no especificaba de quien demonios hablaba, su corazón le hacia creer que Steve hablaba de ÉL, aunque tal vez ese ÉL era otra persona….otra persona tal vez llamada James Buchanan Barnes, agh debia dejar esas patrañas para despues y solo dedicarse a investigar, paso la hoja y lo primero con lo que se encontró fue con un dibujo de si mismo sonriendo como muy pocas veces lo habia hecho, ni el mismo sabia que lucia asi sonriendo…solo Steve era capaz de descubrir todas sus facetas y todos los sentimientos que se encontraban dentro de su corazón. En la esquina derecha otra frase se veia:
Porque con tu llegada apagaste mi oscuridad
Las siguientes paginas estaban llenas de su propio rostro en diferentes poses mostrando casi por completo todas sus facetas, serio, relajado, alegre, sensual incluso haciéndose el gracioso; era increíble como el capitan habia podido grabar tan perfectamente sus emociones en aquellas hojas. Cada pagina daba como resultado una sonrisa que poco a poco comenzó a subirle el animo incluso haciéndole sentir una hermosa calidez en todo su cuerpo muy parecida a las veces en su interior muy similar a las veces en las que se encontraba entre los brazos de su capitan.
Los últimos dibujos ya no eran sobre el si no sobre cierta personita especial que aunque aun no tenia rostro ya estaba dibujado en la libreta de su padre en forma de una hermosa pancita donde reposaba su pequeño campeón. Cerro el libro no sin antes dar una pequeña caricia al vientre que estaba sobre el papel; decidió esta vez dejarlo sobre el escritorio sin importarle mucho si Steve sabia que lo habia visto, al fin y al cabo habia confianza ademas de que se trataba de SUS dibujos; camino con calma hasta la pequeña mesa aunque justo al elevarlo sobre sus manos la libreta desprendió algunas hojas que cayeron balanceándose hasta el suelo, con pesadez se hinco a recogerlas mirando con sorpresa que esas hojas no lo tenían a el como protagonista sino a hawkeye. Aquello era tan extraño como inesperado ya que no encontraba ninguna razón para que su oji azul dibujara a ese mal nacido que siempre lo molestaba. Con rapidez hojeo todo el bloc sin encontrar algo que indicara que Steve hacia retratos de todos sus compañeros lo cual lo hacia aun mas raro; bueno al menos no habia sido una imagen nudista.
-Jarvis ¿Dónde está mi capitán?- pregunto pensando en una nueva forma de pasar lo que quedaba del dia.
-se encuentra en su habitación marital señor- fue la automática respuesta que lo hizo sonreir maliciosamente, vaya hasta el destino ponia sus planes sobre un buen camino. Agradecio a su IA antes de darle la orden de dormir un rato aunque como ultima tarea debia eliminar las llamadas, mensajes e incluso desactivar el elevador todo con la intención de no ser molestado hasta dentro de 24 horas. Camino tranquilamente hacia su destino sosteniendo tambien en sus manos aquellos retratos de Barton que había encontrado dispuesto a exigir una explicación…aunque a penas entrar pensó que las explicaciones podrían esperar y es que su prometido se mostraba con todo su esplendor ante el. Su rubio estaba parado frente a la ventana mirando al exterior con un aire reflexivo; lo contemplo solo un momento pensando en lo afortunado que era al tener un hombre como aquel en su vida, amable, cariñoso, respetuoso, valiente, inteligente en fin, la lista resultaba ser inmensa lo cual muchas veces y aunque costara creerlo lo hacia sentirse poco merecedor del capitan. Aquel momento de reflexión lo hizo olvidar sus intenciones de saltarle encima caminando mejor a paso lento y silencioso con el plan de sorprenderlo. Una vez que estuvo tras de el se paro un poco sobre las puntas de sus pies recargándose sobre los hombros contrarios mientras tomaba con los labios el lóbulo de su oreja, era algo que le resultaba inevitable; le fascinaba su sabor. Aquella piel clara, brillando con cada rayo de sol, fresca como cualquier mañana,cubriendo ese cuerpo ejercitado digno de una escultura. El rubio aun sorprendido sonrio por el gesto, giró despacio aun entre los brazos del menor, quedando los dos frente a frente.
-hola cielo - le dio un pequeño beso en los labios como una forma de recibirlo pero el castaño no pensaba conformarse con eso, con una sonrisa traviesa saco la punta de su lengua acercándola hasta los labios contrarios, delineándolos lentamente de forma romantica pero a la vez insinuante, esa fue una señal clara para que Steve decidiera unir sus bocas en un beso un tanto posesivo beso con el cual trataba de demostrarle su devoción, devoción que aun seguía con el pequeño a pesar de los problemas y las adversidades, el rubio lo sostuvo tambien por la espalda, aferrándolo a su cuerpo como si quisiera unirse a su cuerpo aunque ese abrazo no lastimaba para nada al castaño, es mas lo hacia sentir reconfortado. Ambos sólo se sabían habitantes de los brazos del otro, atrapados entre el torso de su amante, llenando el vacío que sus almas habian sufrido. Aquellas sensaciones tan fuertes cegaron al rubio quien sin pensar en la prohibición del contacto físico los guío hacia un sofa que estaba tras ellos. El mayor fue quien tomo asiento (debido a que el sillón era de una sola plaza) aunque Tony no tardo en hacerle compañía sentándose sobre sus piernas, logrando tambien que el vientre inflamado del menor se rozara con el cuerpo del rubio, haciéndolo entrar un poco en razón.
-mi amor- acaricio levemente su vientre mirándolo a los ojos con pesar - deberíamos dejarlo…si seguimos asi no creo poder parar.- murmuro escondiendo su rostro en el pecho de su esposo, a veces aquello parecía mas difícil que cualquier batalla en las que habia luchado.
El castaño sonrio bastante cautivado por las acciones del otro quien anteponía su propia necesidad con tal de protegerlos. Le dio un pequeño beso en la cabeza tomando entre sus manos el mentón del otro alzando su rostro hasta que sus ojos entraron en contacto- no tendrás que hacerlo- el rubio frunció el ceño no muy seguro de que hablaba- ya no tendras que controlarte- unió sus labios en un beso corto mirándolo de nuevo- no mas.
-pero el doctor Banner…
-digamos que por fin nos quito la ley del celibato- respondio con una sonrisa victoriosa contagiando con ella al capitan.
-¿hablas en serio?- pregunto mas emocionado que un pequeño apunto de abrir los regalos de navidad.
-claro, el mismo lo dijo, ya no hay nada de peligro, asi que amor- susurro volviendo a optar esa pose seductora- ¿Qué piensas hacer con eso?- la mirada del oji azul cambio de mirarlo con emoción a mirarlo con hambre, con deseo que ya no estaba dispuesto a contener; de nuevo unieron sus bocas aunque esta vez de manera mas desesperada paseando sus manos entre el cabello, el pecho y la espalda del otro aunque en aquellas partes la ropa estorbaba por lo que no duraron en quitársela poco a poco, ambos bastantes conscientes de lo que iba a pasar.
El instinto por el que se dejaron llevar cantó victoria cuando la ultima prenda quedó botada en el suelo dejando sus cuerpos totalmente desnudos. Tony que estaba solo un poco mas ansioso que el rubio bajó despacio, dejando besos sembrados por el torso de su amante hasta llegar a los pezones que se dedicó a mordisquear y lamer obteniendo el resultado esperado ya que en pocos segundos los habia dejado completamente erectos y con un tono rojizo. Cuando se sintió orgulloso de su trabajo y de los suspiros que le habia robado a su capitan siguió bajando con besos húmedos para entretenerse un poco más en el ombligo, jugó con su lengua ahí por un instante y continuó descendiendo hasta que llegó finalmente al objeto de sus deseos que ya se erguía gloriosa ante el. No espero más y comenzó trazando una línea de saliva desde la base del miembro erecto, duro y surcado de venas hasta la cabeza sonrosada, húmeda y caliente recogiendo con la lengua un poco del liquido pre seminal que iba saliendo poco a poco de la pequeña abertura hasta que llegó a las bolas. Se introdujo una en la boca mientras acariciaba la otra con la mano. Los gemidos de su esposo no se hacían callar y, por el contrario, sonaban más fuertes. Tony seguía disfrutando de el dulce sabor que su capitan poseía aunque tambien uso mas que su lengua para aumentar aun mas el placer; tomó con la mano toda la erección que tenía a su alcance y de un rápido movimiento se la introdujo en la boca hasta que tocó el fondo de su garganta. Succionó fuerte, apretando los labios alrededor de la ereccion, gimiendo de placer al sentir el sabor del líquido pre seminal deslizándose por su lengua. Siguió saboreando su dulce manjar mientras escuchaba, en acompañamiento, los suaves gemidos de placer que tanto le gustaba escuchar; porque sabía que él siempre sería el único que los provocaría y no porque se creyera el mejor en aquellos trabajos (bueno, solo un poco) sino porque jamas pensaba alejarse del rubio, su unión ya no se trataba de una simple atracción, de un simple gusto no, ahora estaban unidos por mas, por un hijo, por sus almas y por su amor, aquella unión ya no se podia romper. Volviendo al encuentro, el castaño volvió a devorar aquel miembro sin piedad, recorriendo con su lengua la base de la erección mientras sentía el palpitar de la sangre llenando el cuerpo cavernoso entre sus manos, sintió unos dedos enredarse en su cabello pero no con la intención de indicarle un ritmo, sino mas bien como una forma de que Tony disfrutara mas del acto, pues sabia de mas lo mucho que el menor se relajaba al sentir suaves caricias en su nuca; solo su diestra era la encargada de enredarse en esos cabellos castaños ya que su mano izquierda estaba recargada en el reposabrazos del sillón, apretándolo con tal fuerza que hasta sus nudillos estaban blancos hipnotizado por todo ese ritual, sintiendo como el moreno volvia a succionarlo completamente, ahuecando incluso sus mejillas en torno a el.
Tony dio unos lametazos más cuando sintió que su capitan eyacularía en caso de seguir y se incorporó hasta llegar a unir sus labios de nuevo en un beso frenético y pasional a la vez que abría las piernas y se montaba en él con una pierna a cada lado entre el cuerpo sexy y caliente de su amante y la tela del sillón. Sus erecciones quedaron balanceándose dolorosamente entre ellos algo que Tony aprovecho para tomarlas entre sus manos masajeandolas al compas de sus gemidos mientras las manos grandes de su capitan se encargaban de recorrer su cuerpo desde el cuello hasta depositarlas sobre sus nalgas, masajeándolas y dándoles pequeños golpes para escuchar el sonido que hacía la piel de sus manos al chocar contra la suave piel de su esposo.El castaño recargó todo el peso de su cuerpo sobre sus rodillas, levantando la cadera para que su apasionado amante se recorriera hacia el borde del asiento dejándolos en una perfecta posición para iniciar lo que ambos se habian negado desde hace 3 meses; el castaño no espero delicadezas asi que una vez que enfilo ese miembro contra su entrada comenzo con la autopenetracion de manera un poco lenta (tampoco es como si deseara destrozarse el ano) al principio, la cabeza quedó alineada con su abertura empezando a hacerse lugar mas aun cuando no habia existido una preparación previa pero lo que menos importaba, incluso resultaba ser algo bueno ya que de esa forma ambos sentían con mayor intensidad la penetración, haciendo a sus cuerpos reaccionar aún más urgentemente a los estímulos, a uno por la estrecha cavidad que apretaba su miembro y al otro por la repentina y casi dolorosa intrusión; Tony siguio descendiendo mientras que con una mano sostenía el pene que se introducía en él de forma firme. Bajó y bajó hasta que sus nalgas quedaron recargadas sobre las piernas del rubio justo como hace un momento pero con un complemento mas entre sus nalgas. Aquella sensación de plenitud lo recorrió desde la nuca hasta la punta de sus dedos teniendo que recargar su frente contra la de su acompañante en busca de un soporte, le miro directo a los ojos que brillaban ante todos los sentimientos que lo embargaban, al igual que respirando dificultosamente, el moreno podia sentir incluso el rubor invadiendo su cara por lo caliente de la situación. Se permitió cerrar los ojos por un momento mientras se acostumbraba a la intromisión en su trasero. El capitan en busca de apaciguar su dolor comenzo a repartir besos dulces alrededor de su rostro hasta llegar a sus labios posándose ahí con un tacto suave y delicado mientras hacia círculos con su cadera. Tony gimio ante ello haciendo que el rubio sonriera con satisfacción al ver que el castaño tambien lo disfrutaba, se animo a empujar un poco mas contra el cuerpo de su amante oyéndolo sisear tanto por el placer como por el ardor que sentía en sus paredes internas pero eso no evito que el castaño lo recibiera apretando deliciosamente el trasero, sintiendo más y más con cada movimiento y cada respiración. El castaño busco aun mas soporte apoyándo sus rodillas contra el tapiz del mueble, subiendo un poco hasta casi quedar libre de la penetración para despues volver a caer más deprisa llevándose así cualquier resto de control que pudiera quedar en ambos.
Continuaron con el vaivén de sus cuerpos; entre cada estocada se besaban o sólo tocaban sus labios con los del otro transmitiéndose así todo el amor que se profesaban el uno al otro. Gemían sus nombres, casi lloraban de placer y murmuraban un “más”, un “así” o simplemente un “te amo”. Tony solo podia aferrarse a los hombros de su capitan mientras su cuerpo rebotaba como una pelota contra el cuerpo del otro llenando la habitacion con el sonido de sus pieles estrellándose cada vez con mas fuerza, aquella posición ademas era ideal para rozar sin piedad su próstata algo que lo hacia casi delirar, teniendo que morder el cuello de su esposo solo con el deseo de liberar esa ansiedad que lo rodeaba al querer liberarse de una vez, al querer alcanzar su orgasmo y quedarse ahí por siempre, por dios que habia extrañado demasiado todo esto. Las cosas para el capitan pintaban de una manera similar, el sentir aquella calidez nuevamente alrededor de su miembro le hizo recordar porque amaba tanto hacer el amor con su castaño quien como en todo sus encuentros parecía casi succionarlo a los mas fondo de su cuerpo. En un momento casi alcanzaron el final pero el rubio no pensaba dejar que aquello terminara tan rapido asi que prefirió parar aprovechando el momento para cambiar de posición, una que les permitiera llegar más allá, más duro y más rápido, hizo que Tony se levantara de sus piernas teniendo que abandonar aquel santuario que comenzaba a contraerse ante la falta de atención, el tambien se levanto guiando el agotado cuerpo de su esposo a hincarse encima del sillón recargando su pecho sobre el respaldo, dejándo a su disposición aquella dulce y algo irritada entrada que no dudo en profanar de nuevo, lo sostuvo por ambos lados de la cadera con manos firmes iniciando otra vez con las desenfrenadas embestidas.
El cabello de Tony para ese momento ya estaba desordenado sobre su cara mientras que su cabeza se recargaba de vez en cuando en lo alto del respaldo, sus manos tambien se mantenían aferradas en el respaldo del sillon a cada lado de su cabeza. Con la cadera bien respingada podia sentír el fuerte agarre de aquellas grandes manos hasta el momento en que una de ellas dejo de sostenerlo para mejor guiarse a su desatendido miembro que temblaba y se balanceaba entre cada empuje. El gesto llevó al menor hasta las nubes, haciéndolo arquearse con la boca abierta, los ojos entrecerrados y los sentidos más alertas que antes anticipándose al inminente orgasmo.
Mientras tanto, el capitán era el encargado de aumentar el ritmo de las embestidas que daba contra el cuerpo de su castaño, moviéndose con tal rapidez que termino recargando su pecho contra la espalda del menor, sintiendo el sudor que escapaba de cada poro en esa perfecta piel, mezclando sus propios fluidos. Aquella posición lo dejo bastante cerca del cuello del menor que se mantenía estirado por lo que no dudo en recorrerlo con su lengua, succionando tambien logrando dejar una visible marca rojiza, algo que se volveria una prueba de ese candente encuentro.
-Ya… casi —susurró en su oído a lo que Tony gimió en respuesta anunciando con esto que el tampoco estaba lejos del orgasmo—jun..tos- susurro dándole una mordida sobre la mejilla derecha. El moreno reclinó la cabeza contra el hombro de su capitan sintiéndolo darle las últimas estocadas con movimientos torpes y un poco forzados; sintió la humedad extenderse en su interior y como aquel adonis de cuerpo escultural se enterraba más en él. Aquello ocasionó que se rindiera ante el placer y explotara inmediatamente. Su semen quedó regado por el sillón en fuertes espasmos mientras su ano se contraía y apretaba en torno al miembro que seguía en su interior, rodeándolo sin dejarle forma de escapar.
Se mantuvieron algún tiempo en aquella posicion mientras su respiración se regularizaba. Tony sintió que gran parte del peso de su capitan se encontraba recargado sobre su espalda pero no le importó pues estaba tan complacido, feliz y orgásmico como para que eso le pareciera incomodo o chocante. Sentía su propio sudor resbalar por su cuerpo y de repente un rápido lametazo en su mejilla derecha lo hizo salir de su ensueño. Escuchó la risita del otro muy cerca de él y enseguida un beso tierno depositado casi con nerviosismo en la fina piel que había sido lamida.
-agh Rogers, eso es tan antihigiénico y vulgar- lo reprendio de forma burlona mientras se quitaba con el dorso de la mano cualquier rastro de saliva.
—Por eso lo hago. Me fascina hacerlo.
-oh, ¿entonces el respetado soldado de America resulto ser todo un pervertido?, vaya esas son impactantes revelaciones.
-Tony, nadie puede ser tu pareja sin volverse un pervertido- menciono tambien con burla mientras iba saliendo del interior de su amado. Honestamente para el ese momento y el de la penetración era lo que más saboreaba de sus encuentros; el castaño por su parte cerró los ojos cuando lo sintió salir.-Me fascinas Tony —volvió a susurrar en su oído, para despues depositar un beso gentil en su mejilla.
- lo se- acepto con su común soberbia haciendo sonreir al rubio quien habia aprendido a amar esa actitud- a mí me fascinas tú—acepto sentándose correctamente acercando sus rostros para poder apoderarse de sus labios —ahora tengo que tomar una ducha, me siento pegajoso- murmuro con algo de molestia ante aquella sensación tan incomoda.
-podemos bañarnos juntos- sugirió el rubio tomándolo de las manos para ayudarlo a levantarse.
-Steve, sabes que si nos metemos juntos a la tina haremos de todo menos bañarnos.
-¿y que?, de todas maneras hay que recuperar el tiempo perdido- en definitiva su capitan se habia vuelto un pervertido, pero eso solo lo hacia amarlo aun mas.