Me sentía nervioso hoy me presentaría ante los integrantes del grupo sabía que no sería fácil ellos ya tenían casi 6 meses de su debut, y yo simplemente sería una intruso, respiré hondo y entré por la puerta que me indicaron.
Como lo imaginé, no fui recibido con buenos deseos y menos con buenas caras, todos me vieron como la peste, yo traté de no mostrar en mi incomodidad durante la reunión, al término algunos me saludaron y otros se marcharon sin siquiera dirigirme la mirada.
Cuando llegamos al departamento que compartían alcance escuchar a todos intensamente jugando piedra papel y tijera, cuando ganaban gritaban de la emoción, yo no entendí que era lo que estaban disputa hasta que el gran perdedor se acercó a mí y me dijo- ¿Kyu verdad?, bueno creo que tú serás mi compañero de cuarto dijo un no muy alegre Sungmin.
Paso el primer mes y las cosas no avanzarán seguía igual hasta que un día al término de un ensayo se acercó a mi Ryewook y me dijo: “6 meses, aguanta 6 meses, después de ese tiempo todo se calmara y volver a la normalidad te lo digo porque eso me pasó a mí”- y se retiró sonriente, eso me dejó impresionado pero lo que todavía me sorprendió más escuchar la voz de otro de los integrantes
-Lo que te dijo es cierto, ten paciencia, los chicos no te conocen pero no pierdas la fe, si estás aquí es por algo, a partir de hoy prometo cuidar de mi pequeño maknae.
Siwon cumplió su promesa cuida de mí, durante los siguientes meses me procuró y estuvo conmigo en todo momento ante el desagrado de alguno de los integrantes pero al pso del tiempo todos comenzaron a aceptar claro uno más que otros.
Pasaron los meses y de pronto Siwon cambio, se comenzó a alejar de todos, lo veíamos en la gira pero llegando al hotel se encerrado en su habitación y no salía, cuando estábamos en Seúl lo veíamos sólo para lo esencial, algo dentro de mí y comenzó a preocuparse ¿qué le estaría pasando?, ¿necesitaría ayuda?, estaba pensando seriamente ir a buscarlo a su departamento si hoy no daba señales de vida, pero mi plan fue cambiado luego de que Leeteuk nos informara que cenaríamos todos juntos y después a bailar, esto me emociono porque sería la primera vez que me incluirían en sus planes.
Cuando llegamos a cenar me llevé una grata sorpresa Siwon ya nos esperaba con su hermosa sonrisa, sentí algo dentro de mí que no reconocí sólo sé que estaba muy feliz de verlo, pero de pronto reaccione, sentada junto a él estaba una chica con ojos grandes y tenía que aceptar que era guapa y elegante, cómo la saludaban los demás estaba claro que ya la conocía.
-Hey Kyu ven tengo que presentarte- dijo Siwon pidiéndome con su mano que me acercara y lo hice, lentamente, comencé a sentir un miedo recorrer mi cuerpo algo extraño me estaba pasando.
-Kyu te presento a mi novia Oh Ha Ni, no le habías podido conocer porque estaba estudiando en Londres pero acaba de regresar dijo un muy sonriente Siwon.
-¡Mucho gusto!- dijo ella y me abrazó, cosa que me sorprendió –
- Perdona mi efusividad, eres el único que no conocía pero he oído tanto hablar de ti que ya te considero amigo.
No sabía qué contestarle, qué le podría decir, ¡que a no sabía qué existía!, ¡tu novio nunca me habló de ti!, ¿estas segura que eres su novia?, no entendía por que sentía enojo y tristeza.
-¡Mucho gusto!, espero que no te hayan dicho cosas malas de mí- dije tratando de sonando lo más casual que podía pero por dentro algo me estaba ahogando
-Para nada, solo cosas buenas, en poco tiempo de has ganado el corazón de Siwon y eso es suficiente para que te yo también te quiera.
Sus palabras me impactaron, nunca hubiera imaginado que Siwon hablara de mí y menos que al escuchar “te has ganado el corazón de Siwon” me hiciera sentir mariposas en el estómago.
La noche pasó entre risas y pláticas, al final no fuimos a bailar porque hay varios habían pasado de copas y hoy era de esos días que deseaba no ser bueno para tomar ya que quería emborracharme y no ser consiente de nada, me causaba una sensación rara cada vez que veía sus muestras de afecto, pero lo que más me molestaba era tener esta sensación que no sabía de dónde venía y sabía que no era normal.
Los meses pasaron y ella venía constantemente con Siwon a los ensayos y presentaciones ya me había acostumbrado, claro siempre y cuando me alejara y no volteara a verlos, pero también pude comenzar a descubrir que a Heechul no le caía nada bien, al igual que otros integrantes, pero la respetaban por su novio, cosa me agrado, era bueno saber que no era el único que no la quería con él.
También en ese tiempo comencé a unirme a Sungmin, que termino siendo un lindo un lindo conejito rosado que todos queríamos, pero que sin darme cuenta por mi necesidad de alejarme de Siwon comencé apoderarme en él y se convirtió alguien especial para mí, dónde estaba él estaba yo era una necesidad de seguirlo por todos lados porque era con el único que me daba la tranquilidad y la paz que tanto de necesitaba.
-Kyu, que tanto me quieres?- me cuestionaba Sungmin, mientras estaba apoyado en mi hombro mientras veíamos una película en el cuarto-
-Conejito ya te dije que eres mi Top No. 1, eres mi mejor amigo, siempre estas para mi aun cuando no quiero decir lo que me pasa solo te sientas conmigo en silencio, créeme aguantarme no es fácil, si a veces ni yo mismo me soporto, pero tú siempre estás ahí para mi.- dije esto sin quitar mi vista de la película, pero tratando de agradecerle todo el tiempo que ha estado conmigo.
-Yo también te quiero y eres en número 1 en mi lista- contesto acomodándose en mi pecho y seguimos viendo la película.
Unas semanas después Siwon nos informó que tendríamos un fin de semana libre y nos iríamos a su casa Jeju para estar todos juntos y poder descansar. Comer , y por qué no poder jugar vídeo juegos, esto último lo dijo viéndome directamente – sentí mi rostro arder pero nadie lo noto porque todos comenzaron a gritar y hacer planes de que ropa se llevarían, cosa que agradecí enormemente.
Todo el plan era perfecto, pero como algunas veces pasa las cosas no salen como uno las piensa, nadie tenía idea que Siwon viajaría acompañado de su novia, cosa que a todos molestó, era un fin de semana de chicos, claro sabemos que dentro del grupo existían algunas parejas aun cuando nadie lo hiciera oficial, pero ahora éramos un nosotros y ella, yo ya había decidido no presentar les atención, me centraría en mis vídeo juegos, los chicos y Sungmin, pero lo que yo no sabía que ese fin de semana en la isla cambiaría completamente el resto de mis años, descubrir un sentimiento, descubrir quién era yo y saber quién era el dueño de mis deseos.
La noche había llegado y después de cenar poco a poco todos se comenzaron a ir a dormir, yo aunque fuera extraño no estaba jugando mis vídeo juegos, solo quise quedarme en la terraza y sentir el aire recorrer mi rostro, tal vez muchos no sabían que era así una de mis mejores terapias para despejar mi mente y era exactamente lo que quería hacer después de haber tenido que soportar todas las muestras de amor que se daban Siwon y su novia, había llegado el momento de aceptar que se había enamorado de su compañero, mientras más lo pensaba las lágrimas comenzaban a recorrer su rostro, sabía desde antes de llegar al grupo que le gustaban los hombres y se había repetido que no podía enamorarse de ninguno de sus ahora amigos pero ya no podía dar marcha atrás, su corazón le pertenecía al mayor pero debida guardar esos sentimientos para que nadie los descubriera.
De pronto abro los ojos, creo que me quede dormido en la terraza, observo el reloj y compruebo que son más de las 3 am y mi cuerpo comienza a doler, creo que debo ir a dormir a mi cama para descansar mejor, la casa está en silencio dejando claro que todos duermen plácidamente, mientras camino por pasillo unos ruidos comienzan a llegar a mis oídos, mientras más me acerco descubro que son gemidos, de seguro alguien está teniendo acción, me causa gracia esto, de seguro son Heechul y HanGeng ya que aunque no lo confirmaran era obvio que estaban más que enamorados, pero de pronto lo que escucho me deja congelado-
-Maas Siwoon- una voz más que agitanada y perfectamente reconocible ya quera la única mujer en la cosas, Oh Ha Ni-
Siento que la furia y el dolor me invaden, los gemidos de Siwon comienzan a llenar mis odios, de pronto mis pasos se dirigen a la puerta de su cuarto, la cual para mi sorpresa esta medio abierta y lo veo sobre ella dando estocadas desenfrenadas, su rostro contrario por lo que está haciendo y sus ojos cerrados, un espectáculo digno de admirar, sino fuera por ella, de pronto sus gritos dejan claro que están por llegar al climax, pero el sale de ella y solo la observa mientras se sacude por el orgasmo, baja de la cama y es cuando puedo verlo, completo, desnudo, como un Dios de la mitología griega, hermoso; mientras termina de masturbarse para correrse en su propia mano, veo como llega ese orgasmo, como cierra sus ojos y gime, siento esto en mi propio pene, que clama por atención, no me había dado cuenta que esta duro y todo esto por verlo a él, de pronto soy consciente que si abre los ojos me podría ver y camino directo a mi habitación.
Al entrar a la habitación veo a Sungmin dormido en la misma cama que tendría que estar yo, pero mi respiración es agitada, me siento caliente, ¡demonios!, porque tenía que haber visto eso, ahora menos podría acercarme a él sin recordarlo desnudo, trato de recuperar la tranquilidad pero ella no quiere llegar a mi, opto por darme un baño con el agua más fría, tenía que sacar de mi cuerpo esa sensación para al menos poder dormir y no molestar a Sungmin.
Pasaron horas antes que pudiera conciliar el sueño, miles de imágenes aparecían en su mente y cada una ellas donde Siwon y yo éramos los protagonistas, esto casi me hace llorar de la desesperación, no solo amaba a Siwon si no también lo deseaba intensamente.
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