Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

DONDE HUBO FUEGO... por crystalwall

[Reviews - 115]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

Hola, les traigo el capítulo nuevo, aquí vemos como las cosas se empiezan a complicar, uyyyyyy

Capítulo 7.- Relaciones complicadas

 

Kanon y Seiya no se demoraron mucho es salir del hospital, pero hubo un cambio de planes porque en el camino, Seiya decidió que no tenía hambre, el castaño tenía mucha curiosidad por el departamento de Kanon, ellos se conocían de años pero su amistad nunca había trascendido a los planos familiares, como si era el caso de Shyru por ejemplo, Shyru si conocía a toda la familia de Seiya y ellos se veían socialmente, pero con Kanon nunca fue ese el caso

 

El peliazul vivía cerca del hospital, Seiya sabía que tenía una casa en las afueras de la ciudad, cerca de donde él solía vivir con Ikky, pero por razones prácticas, Kanon se había comprado un departamento en el centro, Kanon solía decir que el tráfico es una de las cosas que lo saca de casillas, y prefería no tener que manejar mucho, por su salud mental claro está, Seiya arqueó una ceja al ver el edificio, era uno de los nuevos de ese sector

- Wow… te lo tenías escondido – dijo Seiya al entrar en el elevador, Kanon solo sonrió y meneó la cabeza

- Te he invitado infinidad de veces pero tú nunca has querido venir

- No ha habido la oportunidad

- Hasta hoy

- Pues si…

 

Kanon abrió la puerta y caminó directo por el pasillo hacia el interior y Seiya escuchó la alarma apagarse, el castaño se sacó el saco y caminó por la estancia, el departamento era sencillo pero hermoso, muy sobrio, digno de un médico pensó Seiya, si él no tuviera hijos su casa sería muy parecida, paredes blancas, pocos muebles, pocos adornos, sencillo…

- Y qué te parece?

- Me gusta… pero quiero ver si en serio tu cama es de dos plazas – dijo Seiya abrazando a Kanon y metiendo sus manos dentro de su camisa, el peliazul caminó con Seiya entre sus brazos hasta llegar a la habitación en donde se fueron sacando la ropa y entre besos cayeron en la cama

 

Esa noche fue muy pasional, Kanon le hizo el amor a Seiya hasta hacerle pedir clemencia, le encantó tener al castaño en su cama por lo que estuvieron bastante inspirados y se amaron con abandono, esta noche fue especial porque a Kanon le pareció que Seiya perdió todas sus reservas, se dejó ir, se dejó amar y lo dio todo como nunca había hecho antes, Kanon lo vio vulnerable, extremadamente sexy y apasionado, pero no era solo eso, Seiya en serio se entregó a él esa noche, eso era lo que el peliazul siempre quiso y su corazón latió con fuerza cuando escuchó a Seiya llamarlo por su nombre en completo éxtasis

 

Cuando todo acabó, Seiya se quedó profundamente dormido en la muy cómoda cama de Kanon hasta que despertó de un salto, eran las ocho y media de la noche por lo que el castaño se levantó rápidamente, no quería que sus hijos llegaran a una casa vacía, así que entró al cuarto de baño para tomar un rápido duchazo para luego vestirse y salir de la habitación, en la cocina vio a Kanon de pie tomando una bebida humeante, así que Seiya se acercó, le palmoteó el trasero y le quitó el jarro de las manos para decir:

- Por qué me dejaste dormir?, tengo que irme, me llamas un taxi?

- Te vas tan pronto? – dijo el peliazul que lo miró un poco extrañado

- Si… mis hijos ya mismo llegan a casa y quiero llegar antes que ellos, desde cuándo tomas té? – Seiya frunció el ceño al tomar ese té, estaba agrio porque tenía mucho limón para su gusto y no tenía azúcar

- Se me antojó – dijo simplemente el peliazul encogiéndose de hombros y ladeando la cabeza, en su muy característico gesto, Seiya dejó el jarro en el mesón, tomó a Kanon de la solapa de su chompa para hacer que se agache un poquito y lo besó en los labios, el peliazul estrechó contra su cuerpo al castaño y profundizó el beso, pero saltó cuando sintió las manos de Kanon en su trasero, Seiya abrió los ojos al tiempo que escuchó una voz a sus espaldas que decía:

- Qué crees que estás haciendo? – Seiya se volteó y vio a Kanon que tenía un frasco de café en las manos y vestía solo pantalones de pijama, el castaño volteó el rostro una vez más y se soltó del agarre del otro peliazul que sonreía muy divertido

- Así que tú eres Seiya… es un verdadero gusto conocerte, soy Saga por cierto, asumo que Kanon te ha hablado de mi – Saga tomó su jarro de té y le dio otra sorbito

- Eres un imbécil – Kanon le lanzó el frasco de café a su hermano que se agachó para esquivarlo sin dejar de sonreír

- Oye oye oye… fue tu novio el que me besó a mí, yo solo me dejé besar, no te vas a enojar conmigo por eso, verdad Seiya?

- Yo… dioses… - el castaño dio un paso hacia atrás y se llevó una mano al pecho, él sabía que Kanon tenía un hermano pero no sabía que eran gemelos y eso lo desubicó

- Ya no te apures… fue solo una broma – dijo Saga y se sacó la chompa que estaba puesto, sus brazos estaban llenos de tatuajes y tenía un piercing en uno de sus pezones, eso era visible a través de la ajustada camiseta que estaba usando, si Saga no hubiera estado usando esa chompa nada de esto habría pasado

- Ya te voy a hacer una broma yo a ti – dijo Kanon amenazadoramente

- Yo creo que mejor me voy antes de que corra sangre – dijo el castaño recobrando la compostura y caminando hacia la puerta, Kanon lo acompañó y la abrió por él, una vez afuera del departamento Seiya besó a Kanon con pasión, el peliazul no se esperó esto pero igual lo disfrutó, cuando el beso se rompió, preguntó:

- Y eso por qué fue?

- Porque es a ti al único al que quiero besar, tú besas rico… tu hermano no lo hace tan mal pero… no es igual

- Notaste la diferencia?

- Si… él huele diferente y tú nunca me habías agarrado el trasero así, eso fue extraño… tú me gustas más y me gusta como me tocas – Seiya besó nuevamente a Kanon en los labios y le acarició la mejilla cuando el beso se rompió, el peliazul sonrió al decir:

- Bien… me gusta que nos diferencies

- Ya de cerca no son tan parecidos, nos vemos mañana?

- Si… no quieres llevarte mi auto?

- No te preocupes, yo tomo un taxi, bye

- Bye…

 

Kanon entró al departamento en donde vio a su hermano escoba en mano barriendo los pedazos de vidrio y el café regado en el piso del comedor

- Tu novio es un caramelo, y besa muy rico – dijo Saga con una sonrisa

- Más te vale mantenerte alejado de él, porque es mi caramelo y solo me besa a mi, pero tienes razón… besa como los dioses y hace el amor como uno de ellos también – Kanon sonrió al decir esto

- Lo sé… los escuché, oye Kanon… crees que tu Seiya esté interesado en un trío?, digo… me sonó muy apasionado y tiene un traserito mmmmmm…. – Saga sonrió lascivamente y se mordió el labio inferior, Kanon le golpeó en el estómago al decir:

- No te atrevas ni siquiera a pensarlo, ese traserito es sólo mío

- Ya ya ya… no te esponjes, no perdía nada al preguntar, no?

- Ni lo preguntes porque no, ni en tus sueños

- Ok., ok., que posesivo… y eso está bien, no te había visto tan feliz desde hace mucho tiempo, solo ten cuidado hermanito, no pongas tu corazón en bandeja de plata

- Creo que ya es tarde para eso – respondió Kanon con un suspiro y era verdad, él ya se había enamorado de Seiya desde hacía mucho tiempo y sabía que las cosas no eran fáciles, y peor que ahora se habían complicado más allá de lo que se podría imaginar, maldito Ikky…

 

En las semanas que siguieron, las relaciones de Ikky y sus hijos se suavizaron poco a poco, el cambio se dio en gran medida porque Takeshi ya no le saltaba al cuello a su padre a la menor provocación, lo escuchaba y miraba pero aún no le hablaba mucho que digamos, básicamente toleraba su presencia, además la ausencia de Hyoga ayudó a que las cosas se tranquilizaran, Ikky había optado por no llevar a ninguna parte a su rubio esposo, porque en eso Seiya tenía razón, su presencia agitaba el avispero y eso no era conveniente para nadie.

 

Ikky había cumplido todas sus promesas en lo que respectaba a su hijos y los iba a recoger de la escuela, los llevaba a comer por lo menos un par de veces en la semana, iba sin falta a los partidos de futbol de Ryu, fue un par de veces también al repaso de la banda de Takeshi, esa fue una experiencia nueva, al ver a su hijo desenvolverse tan bien con la guitarra, Ikky se sintió sumamente orgulloso, y eso cambió la dinámica que tenía con su hijo mayor porque ahora tenían muchas cosas más de que hablar, hasta le compró una nueva guitarra y todo, eso era lo que Seiya estaba buscando y lo estaba consiguiendo aparentemente

 

Todo esto le daba a Seiya un poco más tiempo libre, el que usualmente pasaba con su peliazul amante, pero habían sutiles cambios en Seiya que Kanon había notado y no le agradaba mucho, el castaño hablaba mucho de sus hijos, pero ahora hablaba mucho de Ikky también, ellos estaban hablando por teléfono más seguido precisamente por sus hijos y por el hecho de que a veces se encontraban y compartían tiempo juntos, eso no le agradaba a Kanon porque veía cómo Seiya hablaba de su ex, muy diferente a cómo solía hacerlo, y eso le reventaba de las iras y los celos

 

- Ocupadísimo? – Seiya había bajado a la sala de emergencia en donde encontró a Kanon de pie al final de una de las camillas, estaba observando como dos muchacho bastante jóvenes estaban entubando a un hombre maduro que parecía haber sido sacado de una pila de escombros

- Un poco, no no no Eden no lo estás haciendo bien, tienes que fijarte en tu paciente antes de hacer nada, dime otra vez qué es lo que se supone debes hacer – dijo Kanon y un muchacho de cabellos celestes se volteó y se veía nervioso

- Ammm… no lo sé doctor… dioses… - el muchacho estaba entrando en pánico y no sabía que hacer, se notaba su nerviosismo porque las manos le temblaban ligeramente

- Tranquilo y respira, piensa… es ese el tubo más adecuado para entubar?

- Ammmm

- Respira y piensa, mira el tubo… eso es…

- No… es muy grande

- Exacto, trata con uno más pequeño, exacto… ahora entúbalo… muy bien, el pánico no es un buen compañero, si quieres especializarte en trauma, necesitas poder trabajar con mente clara bajo presión y hacer este tipo de cosas de forma mecánica, un segundo de más que pienses y eso te costará la vida de tu paciente, pero hey… sin presiones – dijo Kanon con su típico tono calmado, eso hizo sonreír a Seiya pero el  muchacho se veía al borde de un ataque de nervios o algo

- Vuelvo más luego si estás ocupado – dijo Seiya al ver la escena, él no quería interrumpir

- Nahh… Koga quedas a cargo, yo ya regreso y más les vale no matar a nadie en mi ausencia, Sorrento está en su break y llegará en unos 10 minutos, traten de no incendiar la sala entera, puedo confiar en que no habrán desgracias?

- Si doctor Yamada, vaya tranquilo, le prometemos que no vamos a matar a nadie, si podemos evitarlo claro está – contestó un muchacho castaño que sonrió sinceramente, el que parecía molesto era el otro muchacho, el de cabellos celestes

 

Kanon tomó a Seiya suavemente del brazo y lo llevó para una de las salas de  tratamiento de ese piso, era una sala que tenía ventanales y persianas, ofrecía un poco de privacidad pero no era mucho la verdad, apenas cerró la puerta, Kanon tomó a Seiya en sus brazos y lo besó con pasión en los labios, el castaño lo abrazó correspondiendo el beso y enredó sus dedos en la azulada cabellera, Seiya sabía que a Kanon le encantaba eso

- Bajaste solo a tentarme?, eso me parece sexy de tu parte – dijo el peliazul entre besos

- No… quería hablar contigo de algo

- Lo podemos hablar en la cena, mira que ya quedamos para hoy en la noche – Kanon estaba besando el cuello de Seiya mientras le zafaba el cordón de su pantalón

- Si pero… no puedo…

- Por qué no? – Kanon se separó un poco para mirar a su amante a los ojos, Seiya estaba algo incómodo, en especial porque suavemente se separó de Kanon y dio un paso hacia atrás

- Te conté que esta noche los niños van a la presentación estreno del Cirque du Soleil y que Ikky los iba a llevar, verdad?

- Si… no me digas que el idiota de tu ex plantó a sus hijos y ya no los va a llevar?

- No exactamente, Ikky compró una entrada extra y…

- No me digas que estás considerando ir al circo con tu ex – Kanon no lo podía creer, en estas últimas semanas, en algunas cosas que Seiya hacía con y por sus hijos, llegaba Ikky, y llegaba solo, eso es lo que le molestaba al peliazul, porque él no había sido invitado, los hijos de Seiya no sabían de su relación, en cambio Ikky estaba en todo y eso le parecía injusto

- Ryu dice que solo va a ir si va conmigo, porque los trapecistas le dan miedo, lo siento Kanon pero… no le puedo decir que no

- Pues deberías

- Es mi hijo Kanon

- No estoy hablando de tu hijo, sé que es tu hijo, lo que me molesta es que el plan sea con tu ex, cómo es posible que lo veas con el pretexto de que son cosas de tus hijos, a qué estás jugando Seiya? – esta no era la primera vez que ellos hablaban de esto, pero si la primera vez que Kanon se mostraba tan molesto

- Yo no estoy jugando a nada, y me parece el colmo que insinúes que hay algo con Ikky cuando tú sabes que eso no es así, qué te pasa a ti? – contestó Seiya molesto también, le podría que Kanon no confiara en él cuando nunca habían tenido este tipo de problemas antes, Seiya no era del tipo infiel

- Y qué quieres que haga entonces?, que aplauda mientras veo como ese estúpido se va abriendo camino hasta llegar a tu cama – Kanon iba levantando la voz

- Eso no es lo que está haciendo, Ikky está casado por todos los dioses

- Eso no fue impedimento para que él se buscara un amante, quién te dice que no te quiera de amante a ti ahora?

- Así eso fuera lo que él quisiera, quién te dijo a ti que eso es lo que yo quiero?, por quién me tomas?

- Es que deberías escucharte hablar de él Seiya, últimamente Ikky es un dechado de virtudes, que es tan lindo porque hizo tal cosa, porque hizo tal otra, no hace falta ser adivino para saber que el camino a tu alma son tus hijos,  él tiene todos los accesos y yo no

- Pero eso no es… por todos los dioses Kanon…

- Una cosa es que Ikky vea a sus hijos, otra muy diferente es que tú también estés incluido en las visitas, eso es lo que me emperra Seiya, él te desea, él te quiere en su cama – Kanon gritó esto, no le importaba si alguien pudiera escucharlo o no, y claro que afuera lo podían escuchar, Sorrento estaba tratando de distraer la atención de los transeúntes pero no lo estaba logrando, todos los oídos estaban en esa habitación

- Cómo es que puedes afirmar semejante cosa? – preguntó Seiya completamente indignado

- Ese día que nos encontró en tu oficina, si hubiera podido asesinarme lo hubiera hecho, estaba celoso, yo lo vi, crees que estoy ciego?, crees que no me he dado cuenta como te ve cuando viene a buscar a tus hijos cuando están aquí?, por favor Seiya… por quién me tomas tú a mí?

- Por favor Kanon… estás viendo fantasmas donde no hay, Ikky ya no significa ni representa nada para mí, eso se acabó, no sé por qué te pones así

- Porque odio como hablas de él, odio que lo veas, odio que lo trates y que él con el pretexto de ver a sus hijos te vea a ti

- Serías más feliz si le dejo de dirigir la palabra?

- Si… realmente si

- Kanon… eso no puedo hacer, él a mi ya no me interesa, no sé cómo más decírtelo, no sé cómo hacer para que creas en mi – Seiya se arrimó a la pared y se cruzó de brazos, esta conversación siempre llegaba a este punto, Kanon se ponía histérico y a Seiya se le acaban las explicaciones

- Yo sé de una manera

 

Kanon cubrió las distancias y tomó a Seiya en sus brazos para besarlo con fuerza, Seiya lo empujó para quitárselo de encima, ese beso le dolió, así que se llevó la mano a los labios, Kanon no aceptó un no como respuesta y lo volvió a tomar con fuerza entre sus brazos y lo volvió a besar, Seiya se revolvía intentando zafarse mientras decía:

- No… así no… Kanon… así no… así no…

- Entonces no te niegues

- No me niego… pero no así… suéltame… no así… - Seiya trataba de poner las manos para empujar a Kanon pero no podía, él era más grande y más fuerte que él, el peliazul estaba rabioso y no quería soltar a Seiya

- Tú no puedes ser de él… tu eres mío… solo mío…

- Ya te dije… que no tengo… nada… con él…

- Eres mío… solo mío… dímelo… - Kanon volteó a Seiya y lo aplastó con su cuerpo contra la pared, metió las manos entre sus ropas y empezó a frotar su miembro, el castaño gimió en contra de su voluntad, esto no era lo que él quería, pero era lo que estaba pasando, Kanon le mordió el cuello y exigió nuevamente: - Dime de quién eres... dímelo…

- Tuyo… Kanon… tuyo… mmmmm… - Seiya volvió a gemir y se estremeció entero, las hábiles manos de Kanon lo estaban frotando deliciosamente, el peliazul sabía muy bien como hacerle ver luces y que olvide hasta su nombre

- Y que no se te olvide

 

Kanon le bajó los pantalones a Seiya, desanudó los suyos y lo penetró de una sola estocada, el gemido de Seiya se escuchó en toda la sala de emergencias, Kanon lo sujetó y le mordió el cuello otra vez

- Te gusta… dime si te gusta…

- Si… Kanon… mmmm…

- Pídemelo… vamos pídemelo…

- Muévete… métemela… vamos muévete…

- Así?

- Ohhhh por todos los dioses… Kanon… - el peliazul empezó a moverse y eso hizo gemir a Seiya otra vez, esto era nuevo porque no lo habían hecho así nunca, el vaivén de las caderas del peliazul los llenaba a ambos de placer, esto fue intenso y rudo, porque Kanon no estaba teniendo el menor cuidado con Seiya, el castaño tenía la impresión de que Kanon estaba marcando territorio y no se equivocaba

 

En el pasillo, varias personas se habían reunido en la puerta, se podían escuchar claramente gemidos descarados y demás sonidos de los cuerpos pegados a la pared mientras hacían el amor, Seiya sentía como su amante lo embestía con fuerza y le marcaba la piel, porque Seiya estaba seguro que al día siguiente en sus caderas tendría dibujadas las manos de Kanon que lo sostenía y lo apretaba, le hablaba cosas sucias a la oreja y lo mordía

- Kanon… tócame… frótame…

- Te gusta esto… que te lo haga yo…  - Kanon llevó sus manos a la entrepierna de su amante y empezó a frotar su erecta hombría, Seiya se retorció de placer y echó su cabeza hacia atrás mientras jadeaba y gemía al decir:

- Si… frótame… así… mmmm… me vengo… me vengo… - Seiya apretó las manos, cerró los ojos y se rindió al espectacular orgasmo que lo hizo vibrar por completo, Kanon lo sostuvo y salió de su cuerpo, se acarició a sí mismo y llegó a su clímax pero lo hizo fuera del cuerpo del castaño que estaba cual pudín en sus brazos, luego ambos cayeron al suelo con la respiración entre cortada y alocados latidos del corazón

 

Seiya estaba recostado sobre su costado derecho, le dolía un poco su trasero y se quejó cuando se movió, al escucharlo Kanon se movió incorporándose un poco, poniendo su mano en la cadera de su amante y manteniéndolo como estaba para poder verlo mejor

- Te lastimé mucho?

- No lo creo…

- Quédate quieto, déjame ver… - Seiya se quedó quieto y sintió como Kanon separó los cachetes de su trasero y tocaba suavemente su enrojecida entrada, esto a Seiya el pareció incómodo y algo humillante

- No es nada… déjalo así…

- No no no… ven acá – Kanon prácticamente levantó a Seiya y lo recostó en la camilla que había en la sala, luego buscó en los cajones hasta que encontró una crema, tomó unos pañitos húmedos y regresó junto al castaño se había bajado de la camilla y estaba en proceso de subirse los pantalones pero no pudo hacerlo porque Kanon lo incorporó y lo besó en los labios suavemente, Seiya se dejó besar y luego se dejó llevar a la camilla, Kanon le bajó los pantalones nuevamente y lo recostó boca abajo

- Yo puedo hacerlo

- Lo sé, pero déjame hacerlo a mí, quieres?

- Ok., ok., - Seiya relajó su postura mientras Kanon lo atendía, dio un respingo cuando sintió un dedo en su intimidad, pero ese era Kanon aplicando la crema, luego limpió su trasero con los pañitos húmedos y se lo palmoteó suavemente para poder subirle los pantalones

- Listo… siento haberte lastimado – Kanon acarició la mejilla de Seiya y le besó en los labios, el castaño lo abrazó y así abrazados y besándose estuvieron un buen tiempo en esa camilla, hubieran continuado pero el teléfono de Kanon sonó, Seiya se levantó y se terminó de acomodar la ropa, Kanon habló solo un par de palabras antes de colgar el teléfono y tomar nuevamente a Seiya en sus brazos y besarlo con pasión

- Auch…

- Qué te duele?

- Creo que tengo roto el labio – Seiya pasó la lengua por su labio inferior y pudo probar el sabor metálico de la sangre, Kanon no se había dado cuenta, a qué rato le rompió el labio a Seiya???, dioses…

- Lo siento…

- No te preocupes, la próxima vez usa un poco de lubricante y nos va a ir mejor – Seiya sonrió y besó nuevamente a Kanon en los labios que respiró con alivio al ver que Seiya se lo había tomado muy bien

- La próxima vez?

- Ajá… esto fue diferente, excitante… me gustó mucho, no sabía que tu lado salvaje sería tan sexy, solo no te enojes conmigo ni te pongas celoso que no hay necesidad, yo soy solo tuyo

- Pero es que…

- No no no… no hay pero que valga, yo no te he dado motivos para que te pongas celoso – Seiya puso un dedo en los labios de Kanon para callarlo, ellos ya habían peleado lo suficiente por ello y el castaño no quería volver a discutir, Kanon respiró profundamente y tomó a su amante en sus brazos, lo besó en los labios y dijo a manera de queja:

- Ok., pero no me acuses de loco porque no es así, pueda que no me hayas dado motivos para estar celoso de Ikky pero tampoco me incluyes en tu vida, él si está presente en todo y a mí me dejas a un lado, yo quiero que me incluyas, quiero compartirlo todo contigo, no quiero almorzar con tus hijos solo porque es la última opción y fue un accidente como pasó hace tiempo cuando Tak te llamó para que lo recojas en la estación de autobuses

- Kanon… - Seiya quiso separarse pero el peliazul no le dejó, lo sujetó con más fuerza y le dijo:

- Sé que es difícil para ti pero… me prometes que lo pensarás?

- Si lo he pensado – admitió Seiya en un susurro

- Y?

- Es complicado

- Descomplícalo… - respondió Kanon encogiéndose de hombros y sonriendo ligeramente, esa era una de las cosas que Seiya amaba de Kanon, él no se hacía problema por nada, en cambio el castaño había veces en las que se ahogaba en un vaso de agua

- Lo voy a intentar, ahora ya me voy, me voy a mi consultorio porque tengo un paciente que ya debe estar esperándome, así que trata de no entrar en histeria compulsiva en mi ausencia – dijo finalmente el castaño separándose de Kanon y acomodándose nuevamente la ropa

- No te burles de mí que sabes como soy, así me conociste así que no te hagas la victima ahora

- No me estoy burlando… ok., me estoy burlando un poquito – Seiya sonrió al decir esto, Kanon se incorporó y cubrió las distancias que los separaban y lo besó nuevamente antes de decirle en la oreja:

- Pórtate bien, recuerda que solo eres mío, me lo acabas de decir

- Ajá… y tu acuérdate que solo eres mío, sé que por ahí tienes un interno que babea por ti, así que tu pórtate bien, y que no se te olvide que esto me pertenece– Seiya bajó una mano y apretó suavemente el miembro del peliazul que saltó ante aquella osadía, el castaño besó a su amante y le guiñó un ojo antes de salir de la habitación, Kanon sonrió y se acomodó la ropa, al salir sintió todos los ojos en su espalda, pero poco le importaba, a la final le hizo el amor a su amante y le hizo gemir de placer, ojalá con eso se le quiten las ganas de salir con Ikky, dioses…

 

Esa noche, Seiya no salió de casa, le dijo a Ikky por el intercomunicador que no se sentía bien y que llevara a los niños al circo, que él solo iba a tomar un baño y se iba a acostar, y eso fue lo que precisamente hizo, habló por teléfono con Kanon por más de dos horas hasta que se quedó dormido, el peliazul de larga cabellera fue a la cama un poco más tranquilo al ver que Seiya fue prudente y no salió en la noche con Ikky, pero la tranquilidad le duró poco, porque con los días que siguieron, Ikky seguía siendo una presencia constante en la vida de Seiya, Kanon sabía que tenía que hacer algo, pero no sabía qué debía hacer, pero esta situación no daba ya para más…

 

En los días siguientes Kanon y Seiya salieron varias veces en las noches en las que Ikky tenía a los niños, pero en sus salidas, frecuentemente el teléfono de Seiya sonaba, era alguno de sus hijos a contarle como les estaba yendo con Ikky y que lo extrañaban, otras veces llamaba Ikky a preguntarle si estaba bien o no hacer tal o cual cosa con sus hijos, estas eran cosas normales pero a Kanon le molestaba el tono tan fresco y jovial con el que Seiya hablaba con su ex

 

Seiya había optado por la prudencia y ni le mencionaba a Kanon nada de Ikky, pero… el peliazul estaba celoso, no lo podía evitar, en especial porque Hyoga nunca era mencionado, Kanon no sabía si Ikky estaba separado de su esposo o simplemente el esposo de Ikky se negaba a compartir tiempo con los chicos, pero sea como sea, eso le parecía muy extraño y no le gustaba, toda esta situación le tenía profundamente preocupado y no lo podía evitar, él sentía que Seiya se le estaba escapando como agua entre las manos…

 

Notas finales:

Chan chan chan...

Será que los celos de Kanon empujan a Seiya a los brazos de Ikky???, será que Ikky hace algo más para recuperar a Seiya???, qué es lo que van a hacer todos ellos???

No se pueden perder los capítulos que vienen, están veneno

Muchas gracias por leer y nos vemos el miércoles, saludos, bye 


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).