¿Y bien que hacemos aquí?—preguntó el pelinegro en medio de ese bosque tupido.
El que estaba a su lado le dijo—¡Sasuke, ese no eres tú y lo sabes! ¿Me regalas chocolates? ¿En que jodido mundo se te pegó eso?—preguntó el ojos azules.
Ahora me dices que te enojaste porque te regalé chocolates. ¡Si no los quieres, solo devuélvelos!—contestó el ojos negros estirando una mano para pedir la caja pero sin mirar al que estaba a su lado por suerte para este porque se le puso la cara roja.
¡Eso no es lo importante! ¡No me enoja eso! ¡Lo que me enoja es que me hayas quemado mi casa!—le reclamó el rubio.
¡BIEN DICHO!—dijo Kurama.
Por suerte para el ojiazul la mano extendida se retiró indicando que ya no importaban los chocolates que ya se había comido-
¡MENUDA SUERTE!—dijo el kyuubi riendo y poniendo tantito de malas a Uzumaki.
¿Y bien que quieres? ¿Pelearte conmigo por eso? Si quieres un duelo yo…--dijo Uchiha empezando a deslizar su katana de la vaina cuando de pronto se vio con sus labios sellados por los del otro.
¿Por qué siempre quieres resolver las cosas con palizas, teme?—dijo por un momento el rubio antes de atacar profundamente los labios entreabiertos con su lengua.
¡ESO ES NARUTO! ¡DALE DURO!—le animó el zorro causando sonrojo.
Pero Sasuke no lo advirtió porque estaba demasiado entretenido disfrutando de una lengua voraz, entonces el ojos azules cargó todo su peso en él mientras alejaba su mano de la empuñadura de la katana. Por las dudas.
¡Naru…!—dijo entrecortadamente el pelinegro con esa voz grave y sexy que ponía de humor a cierto Kitsune con marquitas y que estaba ocupado halándole los pantalones.
¡UY! ¡TU NOVIA ESTA QUE ARDE!—gritó el burlón zorro.
¡Deja de gritar!—le comandó Naruto que intentaba concentrarse y disfrutar y vio la cara de disgusto del otro--¡No! ¡Tú no! ¡Él…--intentaba explicar el asolado Uzumaki cuando unas manos asolaron su cara, atrayéndola hacia la otra que a centímetros le habló.
¡Deja de prestarle atención a ese zorro que aquí estoy yo!—dijo antes de besarlo el Uchiha y el cuerpo del rubio lo aplastó por inercia, mientras una traviesa mano se apoderaba de una nalga y la apretaba.
¡Tú siempre quieres la atención para ti solito! ¿Verdad, teme?—preguntó el ojos azules.
¡No me digas teme!—le dijo el pelinegro.
Te lo diré porque te gusta—dijo el ojos azules mientras apasionaba más su beso y colocaba las caderas de su uke como más le gustaban, paró de besar para insertar dos dedos en su boca acto que provocó una real reacción en las mejillas del Uchiha, luego con estos penetró directamente en la entrada del pelinegro que gimió con molestia pero el tapó en el acto su boca con la propia.
De pronto una mano arrugó su vestimenta para y al apartarse de Sasuke este le dijo--¡Ocúpate de mí también!—
¡LA COSA ESTA QUE ARDE!—dijo el bijuu con admiración molestando un tanto al otro que trató de no darle importancia.
La otra mano de Naru se dirigió a la entrepierna del ojos negros mientras él se estabilizaba sobre sus rodillas, la vista de un Sasuke todo arqueado por la excitación le hacía ponerse mas intenso.