Pippin leía un libro en su cama, pero casi no le prestaba atención a lo que leía. Últimamente no le prestaba atención a nada a su alrededor.
La sola idea de que pronto viviría lejos de sus amigos le aterraba.
De pronto un ruido en la ventana lo alejo de sus pensamientos. Los ojos de Merry del otro lado del cristal, se posaron sobre los suyos.
Pippin, sorprendido fue a abrirle la ventana, no sin antes sersiorarse de que su padre no ande cerca.
-¡Merry! ¿Que...?
No pudo terminar la frase ya que su amigo lo tomó de ambas mejillas. Acercó un poco el rostro y lo miró fijamente durante unos segundos. Sus corazones latían alocados, ya no importaba nada ni nadie.
Unieron sus labios en un beso profundo, silencioso. Lleno de palabras qe nunca se dijeron.
Fue un beso intenso. Cargado de amor y pasión.
Tuvieron que separarse por falta de aire. Juntaron sus frentes con amor.
-Oh Pippin, no tienes idea de cuantas ganas tenía de hacer esto.
-Esto no esta bien Merry.
-Lo se.
El rubio entro por completo a la habitación y cerró la ventana. Tomó de las manos a su amigo y dijo:
-Se que probablemente no sientas lo mismo. Pero te amo Peregrin Tuk. Desde que somos niños. Siempre amé tu carisma, la forma en la que socializas con la gente. Amo tu timidez porque asi te me haces muy tierno...Eres la persona mas maravillosa y única que conozco. Y no quiero perderte.
-Oh Merry yo...-al castaño ya se le salian las lagrimas de la emoción. No sabía que hacer ni que decir.-Merry, te juro que tus sentimientos son correspondidos. Te amo mas que a nada. No amo a Diamante, te amo a ti.
Merry sonrió ampliamente y abrasó a su....¿amante?
-Pero Merry. Esto no quita que tu y yo seamos primos...
-Justamente de eso venía a hablar.
Pippin lo miró con extrañesa.
-Hoy fuí a la casa de Frodo. Estaba con Sam...ambos me hablaron de que empezaron a investigar sobre algo de tu familia, nuestra familia que...creo que es mejor que sepas.
-¿Que sucede?
Ambos Hobbits se sentaron en la cama.
-Hace tiempo atras, Bilbo le contó algo a Frodo que oyó en la calle. Bilbo se encontró con tus tías. Y ambas estaban hablando sobre...la adopción de su hermana pequeña.
Pippin abrió bien grandes los ojos.-T-Tu mamá-dijo.
-Si...y los chicos tomaron los registros de mi familia y efectivamente. Mi mamá es adoptada. Lo que quiere decir que yo no soy un Tuk. Y tu y yo no somos primos.
Pippin comenzó a sentirse mareado. Toda su vida, toda su maldita vida triste y preocupado por amar a alguien supuestamente de su misma sangre.
-Merry...dios mio. ¿Como es que mi padre nunca me lo dijo?
-Lo mismo me pregunto de mi madre.
-¡Con razón mi padre la odia tanto!
Ahora todo encajaba en la cabeza de Pippin. El porque su tía no se parecía tanto a su padre y tías. El porque el terrible odio hacia los Brandigamo. El porque su padre nunca quiso hablar de su infancia.
-Se que es algo muy fuerte. A mi tambien me shokeo demaciado. Pero...en cuanto me enteré de la verdad, supe que tenía que decirtelo, Pippin. Tenía que decirte lo que siento.
A pesar de todo, Pippin sonrió.
-Este es el día mas raro y feliz de mi vida.
Ambos rieron y volvieron a besarse. En un arrebato, Merry tomó a su ahora amante y lo sentó encima suyo, provocando que el castaño se sonrojara.
-¿Que haces?-dijo entre divertido y sonrojado.
-Lo que he hecho en mis mas profundos pensamientos y ahora tengo la oportunidad de hacerlo realmente.
-Merry, mis padres estan durmiendo una siesta y no tardarán en despertarse.
-Ssshh-el rubió colocó un dedo en la boca de su compañero.- Solo disfruta del momento.
Y Pippin se dejó llevar.
Merry comenzó a besarle el cuello mientras acariciaba su torso por debajo de la camisa. Pippin simplemetne suspiraba y acariciaba la espalda del hobbit que tanto placer le estaba proporsionando.
-Eres tan suave-le susurró haciendo que Peregrin se estremeciera.
Este comenzó a moverse sobre las caderas del otro, provocando una deliciosa fricción y los suspiros de Meriadoc.
El tacto era perfecto. Querian disfrutar cada momento, dejarse llevar por el placer, hacer todo lo que deberían haber hecho hace mucho...
En eso se escucharon pasos por el pasillo.
-¡Mi padre! exclamó Pippin bajandose del regaso de su compañero.
Este últmio, con una gran velocidad, se escondió debajo de la cama. Pippin logró tomar el libro y recostarse en la cama justo a tiempo para que su padre abriera la puerta.
-Hijo...
-H-Hola padre...¿que sucede?
-Nada solo...venía a ver como estas y para decirte que me iré con tus hermanas a la casa de los abuelos. Te quedarás aqui con tu madre...
-Esta bien padre...
-¿Estas bien hijo? Te noto muy agitado...
-Ahm...no sucede nada. De verdad.
-Okay...-su padre lo miró desconfiado.-Nos vemos luego hijo.
-Adiós...
El Thain cerró la puerta y Merry esperó a que se escuhara la puerta principal de la casa cerrarse para salir.
-Mejor vete Merry.
El rubio abrió la ventana y comenzó a pasar por ahí.
-Te espero a la media noche en nuestro arbol ¿que te parece?
-Esta bien. Ahí estaré.
-Es una "cita"-dijo Merry haciendo reír a su amigo.
Se dieron un último beso antes de que el rubio saliera corriendo por el camino.
Por primera vez en semanas, Pippin se sentía contento. Al igual que Merry.
La media noche llegó y Pippin, asegurándose de que su madre este profundamente dormida, se dirigió al arbol.
Merry ya lo estaba esperando ahí arriba.
-¿No es hermoso?-dijo el rubio en cuanto su amigo se sentó a su lado.-El cielo.
Pippin vió el cielo con luna llena y estrellado, y le pareció los mas hermoso del mundo.
-Si...es perfecto.
Ambos se tomaron de las manos y sonrieron. Ya nada importaba.
Luego de un largo rato disfrutando de su cercanía, decidieron bajar. Merry guió a Pippin hacia el lago.
-¿Nos meteremos a nadar?-pregunto Pip divertido.
-Nono, ya verás.
Se metiron entre unos arboles. Aun tenían vista al lago, pero estaban mas alejados. Era una parte del bosque que tenía los arboles un poco alejados unos de otros, lo que dejaba una parte con el cielo despejado. Era hermoso.
Merry estiró una sabana que había llevado y ambos se recostaron ahí.
-¿Quieres saber que es mas hermoso que el cielo esrellado?-pregunto Merry.
-Adivino, diras que soy yo ¿no?
-No, soy yo.
Ambos comenzaron a reirse mientras se acercaban mas al otro.
-Claro que eres tu tonto.
Pippin sonrió y deposito un beso en los labios de su compañero.
Merry sonrió gustoso en medio del beso y colocó sus manos en las mejillas del castaño.
-Tu eres la persona mas hermosa que eh conocido en mi vida-dijo este último.
Siguieron besandose cada vez con mas intensidad, generando suspiros cada vez mas intensos.
Pippin no supo en que momento acabó arriba de Merry, pero ahí estaba, saciando ese deseo que hacía tanto lo consumaba.
En un momento Merry se separó de el y lo vió a los ojos.
-¿Hasta donde quieres llegar?
Pippin sonrió de lado acariciando la mejilla de su amante.
-Hasta dónde nuestros cuerpos nos digan basta.
Esto de alguna manera exsitó un poco mas a Merry. Tomo a su compañero de la camisa y lo atrajo mas a si.
Las prendas comenzaron a volar hasta quedar completamente desnudos. Ambos admiraban el cuerpo del otro. Ya se habían visto desnudos pero ahora era diferente. Completamente diferente.
Pippin fue desendiendo hasta toparce con la virilidad de su pareja y se la llevó a la boca. Merry arqueó la espalda tras recibir una ola de placer increíble. Asi estuvieron por unos minutos, con Pippin "trabajando" y Merry gimiendo cada vez mas fuerte.
Este último no se quiso quedar atras. Tomó al castaño y lo colocó debajo de el, y descendió dejando marcas en todo su cuerpo para poder proporcionarle lo mismo que el había recibido anterior mente.
Pippin gimió bastante fuerte en cuanto la lengua del rubio se enroscó en su miembro.
-Ah...Merry...
El aludido sonreía.
Ninguno aguantaba mas. Querían hacerlo. Lo deseaban. Lo necesitaban.
Merry colocó las piernas de Pippin en sus hombro y se chupo los tres dedos para ir colocandolos uno por uno.
El castaño solo gemía y maldecia de vez en cuando por el dolor.
-Merry...haslo, te quiero dentro.
-¿Estas seguro de que quieres hacer esto Pippin?
El aludido sonrió.-Nunca he estado mas seguro en mi vida.
Merry sonrió y beso sus labios posisionandoce para entrar.
Pippin cerró los ojos con fuerza al sentir como el miembro de su pareja se apoderaba de él.
-Ah...Merry me duele.
-Lo se...tranquilo ya pasara.
Y pasó.
Las quejas dieron paso a los gemidos por parte de ambos.
-Aaah Pip esto es maravilloso...
-Oh Merry...¡Ah!
Las estocadas eran cada vez mas fuertes. Pippin de tanto en tanto abría los ojos y, literalmente, veía las estrellas. Tomó a Merry de los cabellos y aumento sus gemidos conforme aumentaba el placer.
-Te amo Peregrin Tuk...
-Te amo Meriadoc Brandigamo...
Y asi ambos acabaron en el mejor orgasmo, haciendo que arquearan la espalda.
Se miraron a los ojos respirando con dificultad. Se besaron y Merry salió de dentro para recostarse al lado de su pareja.
Ambos se vistieron puesto que no tenían algo para cubrirse y se quedaron asi abrasados mirando el cielo.
-Merry...
-¿Hm?
-¿Sabes una cosa?-Pippin estaba sonriendo.-Ahora se que si me voy, puedo irme feliz porque se que mis sentimientos son correspondidos.
Merry se levantó un poco para quedar a la vista de su pareja. Ambos se sostuvieron la mirada. Merry acababa de tener la idea mas loca que se lo podría haber ocurrido.
-Pippin-dijo sin quitarle la vista de ensima.-Escapemos juntos.