¿Que pasaría...? por Arabella3876

Pov. Sahian

Los labios de Ayshane no eran iguales al día anterior que nos besamos…su tacto no era suave…en mi piel era áspero, me lastimaba e incomodaba…no era dulce…yo no quiero esto. Yo no la quiero a Ella

-lo lamento-murmure tomándola de los hombros separándola de mi

-¿Qué pasa?-me pregunto con el ceño fruncido intentando besarme de nuevo

-Ya no siento lo mismo Ayshane, lo lamento…no quiero que me beses nunca más-sentencio con seriedad y ella abre los ojos en shock

-¿Qué…que estás diciendo?-empieza a tartamudear confundida

-Lo que has escuchado; así que por favor, te pido que te vayas-dije intentando sonar lo más calmada posible, pero tenía un mal presentimiento de todo esto

-…-sin decirme nada agacho la cabeza de manera confundida

-por favor-seguí pidiendo de la misma forma

-¿Es por ella…?-pregunto aun con la cabeza agachada

-…-ahora fui yo quien no dijo nada, haciéndome la desentendida

-¡¿ES POR ELLA VERDAD?! ¡¿ES POR ESA ZORRA?!-comenzó a gritarme y yo sorprendida empecé a retroceder, alejándome lo más posible de ella

-No la llames así, ella no es ninguna zorra-Defendí con firmeza, igual yo tenía derecho a enojarme y si alguien tenía que reclamar, seria yo. Ella fue quien me dejo por un asesino

-…-sin decir nada se acerco hasta mi y empezó a golpearme, tratando inútilmente de hacerme daño; Por alguna razón…sus golpes ya no me hacía daño, antes me lastimaban pero ahora…no sentía nada

-cálmate Ayshane-ordene con seriedad tomando sus brazos entre mis manos

-¿Por qué…dime porque…Sahian…?-decía entre cortadamente, llorando observándome directo a los ojos

-Ni yo tengo respuesta a esto. Ayshane…tu…me has lastimado, ella…solo ah tratado de ayudarme, a abrir los ojos. Mi pasado es su pasado -respondo con suavidad intentando que se tranquilizara

-lo lamento mucho…todo esto…es mi culpa…-seguía sollozando pero esta vez con su cabeza apoyada en mi pecho

-no es culpa de nadie. Por favor, no vuelvas por aquí y se feliz-pedí con cariño abrazándola, ella por un rato mas siguió sollozando en mi pecho; pero por alguna extraña razón…sabía que no lo dejaría ahí.

-te acompañare a casa-rompí el silencio cuando deje de escuchar sus sollozos y estuvo un poco más calmada

-está bien-accedió con tranquilidad pero tomo mi mano; sin decir nada empezamos a caminar un poco más adentro del bosque, necesitaba volverme el lobo grisáceo

Era raro, por alguna extraña razón, sentía que hace mucho no tomaba mi transformación…aunque por otra parte, era cierto. No había pasado una eternidad, pero si mucho tiempo en el que no me haya podido transformar con calma, la última vez fue por un arrebato de ira, jamás eh podido llevar a los chicos a disfrutar solamente del bosque, sin presiones, sin algún loco persiguiéndonos…mi deber como jefa será hacerlo, de ahora en adelante, con la revolución a la vuelta en la esquina será difícil volver a hacerlo; y aunque no quiera admitirlo pero…no muchos volveremos de esa guerra, incluyéndome. Tenemos que disfrutar el poco tiempo que nos queda

-¿sabes algo Sahian?-Ayshane me saco de mis pensamientos cuando estábamos a unos pocos metros de su casa

-no…dime-respondí quitando mi transformación, volviendo a ser humana. Mirándola confundida

-la primera vez que te vi, tenias el cabello corto y el ceño fruncido…lo primero que pensé fue que eras un niño muy mal humorado-empezó a explicar y yo sentí como si un balde de agua fría me cayera sobre la cabeza http://www.cinemaldito.com/wp-content/uploads/2013/05/Tomboy-1.jpg

-¿gracias?-digo con sarcasmo sin verla al rostro

-no había terminado, idiota. En ese momento jamás pensé que te volverías tan especial para mí-en ese momento paro; Voltee a verla confundida…me asusto de inmediato, verla con la cabeza cabizbaja y una mirada llena de tristeza

-Ayshane…-no supe que decir en ese momento, estaba sorprendida 

- Dejamos de ser niñas y tú…eras la única persona a mi lado pero por alguna extraña razón me daba miedo que supieras perfectamente todo sobre mi, mis reacciones, lo que me gustaba, lo que no, a que le tenía miedo…La gente no se acercaba a ti por tu extraño cabello y rostro atemorizante, pero…cada vez que te miraba, yo no veía nada atemorizante. Solo veía a una chica dulce y tierna a su forma-seguía diciendo pero ahora con las manos en el rostro tratando de apaciguar su llanto

-por favor, no llores-dije acercándome hasta ella, pero negó con la cabeza

-Eras mi mejor amiga, pero me gustabas…tenia tanto miedo de admitirlo, aun ahora no se qué hacer…se que cometí un error, pero perdóname por favor. Todo esto, el asunto de lobos, el matrimonio, ser la alfa…es mucho para mí. Pero no quiero estar alejada de tu lado-sollozaba y yo no tuve más opción que abrazarla, a pesar de todo, me seguía doliendo que llorara, no me gustaba verla de esa forma

-Ayshane…es complicado-conteste sinceramente, mientras con mi mano secaba una de sus lágrimas

-esperare a que lo pienses bien-respondió con rapidez

-…-yo sin decir nada la solté. Seguimos caminando hacia su casa, sin decir nada, pero tomadas de las manos. Era extraña esta sensación ¿Cómo todos mis sentimientos pudieron haber cambiado de un día para otro? Me resultaba algo completamente imposible, pero al parecer, no era así…Irina ah sido mi novia desde hace mucho tiempo, incluso antes que naciéramos ya estábamos destinadas a estar juntas. Deseaba tanto verla pronto.

Después de dejar a Ayshane en su habitación, la arrope y me encamine hacia el restaurante, se que tenía que pensar en todo esto pero…igual había algo mas importante.

Pov. Arabella

 En otro lado del país, se encontraban dos jóvenes charlando dentro de un aula vacía, específicamente, el salón de instrumentos, mientras acomodaban varios instrumentos y dejaban los suyos de paso.

-me hace muy feliz que aceptaras ser mi novia Irina, aunque sigo sin entender ¿Por qué no quieres ser mi Prometida?-un joven de cabellos rubios miraba extrañado a su compañera

-Debemos conocernos, Arthur. No quiero correr contigo-fue la respuesta con voz pausada de Irina, que veía a su ahora novio con una sonrisa

-lo sé…se que tienes mucha razón pero…yo me quiero casar contigo Irina, así no habrá problema por vivir juntos cuando nos graduemos-respondió este coqueto, acercándose hasta Irina y sin previo aviso la abrazo por detrás depositándole un beso en su mejilla

-…-esta sin decir nada, se dejo hacer, pero por otro lado…estaba muy incómoda de estar así con su amigo. En su cabeza no dejaba de rondar el recuerdo de su beso con Sahian, aun podía sentir el tacto de sus labios encima de los suyos y los brazos de Sahian rodeándole su cintura. Aunque ella pensaba que el corazón de Sahian solamente pertenecía a Ayshane

Por otro lado…se encontraban dos cuerpos, siendo solamente cubiertos por una ligera sabana, uno de ellos acariciaba con cariño el pecho de su acompañante, con delicadeza rosando sus dedos con su piel y su cabeza apoyada en su hombro viéndola con adoración.

-¿Ya no está celosa?- se atrevió a preguntar con una risita traviesa

-te dije que no me encontraba celosa para nada-fue la respuesta de esta, con seriedad tomando la mano de su acompañante deteniéndola de lo que estaba haciendo

-Vamos Alexia…admítelo…o mínimo déjame hacerte cariñitos, sabes que te gustan-decía aun divertida Leonor intentando volver hacer lo mismo pero dejo de reír al notar la mirada seria de su compañera

-no me gusta. Ahora quítate de encima, tenemos trabajo que hacer-respondió con seriedad Alexia, levantándose rápidamente, desconcertando a Leonor

-pero… ¿Qué? ¿Y lo que acaba de pasar? Estábamos pasando un buen rato Alex-se quejaba con un puchero Leonor llamando con un mote cariñoso a Alexia, pero esta rodo los ojos

-tú lo dijiste, un buen rato, ya se acabo. Espero que estés feliz, acabamos de perder valiosas horas que pudimos haber utilizado para planear la revolución junto Froilán y Simeón- decía cansada Alexia tomando la ropa del suelo que había tirada, lanzándosela a Leonor, la cual seguía sin poder creérselo

-no puedo creerlo… ¡en verdad eres increíble Alexia!-enojada y de mala gana, Leonor se levanto, dando un portazo (como en la mañana) se encerró en el cuarto de baño

-solo quiero protegerte-susurro muy por lo bajo Alexia, por nada del mundo quería que Leonor lo escuche y se “emocione de mas” como ella solía decir.

Pov. Leonor

¿Cómo llegamos a esto? ¿Cuándo fue que esta relación toxica empezó? ¿Por qué no cuando pude le pedí a Tala que me quitara mi enamoramiento por Alexia? Oh cierto…me lo ofreció pero…yo dije que lucharía hasta el final; Quien diría que después de varios siglos ella sigue siendo igual, sin admitir que me quiere…estoy empezando a creer que en verdad no lo hace.

Extraño cuando éramos niñas, era tan madura pero cuando estábamos solas podía ser la Alexia verdadera, por un momento, olvidaba todas esas obligaciones aburridas y le gustaba jugar conmigo ¿en qué momento se perdió aquella niña? Aun con tala por momentos era ella misma, solo conmigo, pero cuando Tala y Elu murieron…creo que esa niña murió igual; Alexia jamás volvió a ser la misma, mucho menos conmigo, poco a poco se volvió cada vez más fría conmigo. Hasta lo que hoy en día somos

Flashback~ 

Un siglo después, de que Tala y Elu se “fueran”, solíamos viajar de ciudad en ciudad, viendo como los lobos se escondían entre la sociedad, fingiendo ser humanos para que no los mataran como a nuestro jefes…una guerra había empezado entre los humanos y lobos, lo peor fue cuando entre los lobos empezaron también las disputas, hasta llegar a la terrible conclusión de cada quien por su lado. Sé que Tala no hubiera querido esto pero…ellos mismos lo provocaron y no podíamos a permanecer unidos si no querían…así que simplemente los vigilábamos o protegíamos si había problemas.

-¡Mira esto!-decía Simeón emocionado jalando a Froilán consigo

-tranquilo pequeño-respondía este, enternecido, de su novio. Ambos, meses después de la muerte de Tala y Elu, tuvieron un acercamiento y cuando menos nos dimos cuenta…Simeón lo había logrado, conquistar el corazón del cabeza dura de Froilán

-que envidia…-murmure para mí misma. Al igual que ellos, yo estaba emocionada por ver como las cosas iban evolucionando y nuevo aparatos aparecían en nuestro mundo

-Cachorritos, ya les dije que tengan cuidado-decía de repente Alexia, con seriedad, mirándolos despectivamente a ambos

-si Jefa…-respondieron ambos al mismo tiempo riéndose, mientras seguían en lo suyo. Alexia era nuestra Líder, la “Primera, se supone que yo era la segunda al mando…la verdad no entiendo cómo es que Tala me pudo nombrar la segunda, siempre pensé que sería Froilán quien lo seria, pero al final termine siendo yo. El problema era que Alexia siempre terminaba regañándome TODO el tiempo, por no tomarme mi papel “enserio”, me dolía un poco saber que ella igual que yo esperaba que Froilán fuera quien sea su mano derecha. Pero estaba bien, estaba tan estúpidamente enamorada de ella que todo lo que haga y diga estaba bien.

-¿no te gustaría…tomarnos de las manos? Como cuando…éramos pequeñas-digo tímidamente, sonrojándome, intentando agarrar su mano

-¿Qué edad tienes? Leonor, ya no somos niñas. Tenemos más de 100 años, compórtate-fue su dura respuesta, alejando su mano de la mía

-…-sin decir nada asentí desviando la mirada

-¡CHICAS VEAN ESTO!-se reía Simeón y yo forzando una sonrisa corriendo hasta ellos, escuchando desde lejos las quejas de Alexia

‘Dios mío…esta chica… ¿Cómo no se puede tomar su papel enserio?’ la escuche pensar, pero fingí no haberlo hecho, prefería mil veces fingir que no escuche nada. 

Un tiempo después de eso, nos enteramos que Froilán y Simeón querían festejar una ceremonia secreta, respectivamente a su unión; yo estaba muy emocionada y feliz por ellos…pero quien no lo estaba era Alexia, quien rotundamente se negó a ayudar.

-¿Por qué te molesta tanto que dos personas se quieran?-un día mientras estaba en la biblioteca encerrada, me arme de valor y entre sí avisar, aunque sabía que era una mala idea, me atreví a preguntarle. Quise sonar firme y segura pero…mi voz temblaba y mis nervios se sentían desde lejos

-no me molesta que dos personas se quieran, Leonor. Es solo que me parece una tontería celebrar algo así…además, el “Amor” es solo una cosa de débiles-respondió, dejándolo los papeles en su mesa y alzando la mirada, en sus ojos no había ninguna duda y me preguntaba cómo alguien como ella, podía pensar algo así

-el Amor no es cosa de débiles; El Amor…te da fuerzas para luchar por la persona que quieres e incluso…hacer lo imposible, si así lo deseas-dije rápidamente, sentía mi corazón explotar en cualquier momento

-¿y te consta? Dime Leonor… ¿tu quieres a alguien? ¿Has querido a alguien con tanta intensidad…que hasta duele? ¿Has sido capaz de arriesgar tu vida por su bienestar? ¿Ser lo que necesitara? ¿Convertirte en lo que deseara? Inclusive… ¿renunciar a todo? Si has hecho todo eso…y aun así, esa persona no te corresponde…te darás cuenta que el amor es para débiles y solo te hace daño, dejándote como idiota-ella se levanto de su asiento, y mientras decía esto…se acercaba hasta mi, acorralándome entre una mesa y ella, poniendo cada brazo a un costado, dejando una separación de tan solo 10cm entre nuestros rostros

-yo…-estaba muy nerviosa por la distancia, me quede sin palabras, pero pude notar algo…en sus ojos había mucho dolor

-¿lo ves? Jamás lo has sentido, tienes suerte. Un día Tala me dijo que…los lobos contamos con una maldición, y era que aunque no queramos…solo nos enamoramos una vez, de una persona, en toda nuestra jodida vida. Y no podemos escogerla, el amor nos escoge a nosotros, no nosotros a él. Es una mierda-decía con cansancio intentando separarse de mí, pero yo no la dejaría, tenía que ser valiente…por una vez en mi vida, necesitaba enfrentar a Alexia

Sin decir nada, rápidamente pose mis manos sobre su rostro y con un poco de fuerza la jale hacia mi…juntando nuestros labios, los suyos encima de los míos y viceversa. Tenía mucho miedo, demasiado, a varias cosas…a su reacción, a hacerla enojar, a que no me corresponder y sobre todo…a no besar bien, pues era mi primer beso. Le estaba dando mi primer beso a la chica que amaba y no sabía qué hacer además de haber pegado nuestros rostros.

Ella al igual que yo no hizo nada por un momento, pero de un segundo a otro me tomo por la cadera obligándome a subir por encima del escritorio detrás de nosotras, sorprendiéndome, empezó a mover sus labios…de una manera rápida y algo brusca, sabia con perfección que no era su primer beso pero tampoco me gustaba la manera salvaje con la que me trataba.

-Alexia…-murmure sin aliento al separarnos por la falta de aire

-sígueme el ritmo Leonor, yo te enseñare-fue lo último que dijo esa noche antes de hacerme suya.

No me arrepiento de haberme entregado a ella pero…ni las primeras noches juntas lo hicimos de manera “linda”, siempre fue salvaje y un poco brusca.

En su mirada no había amor, lo podía sentir y ver, siempre sus ojos estuvieron llenos de morbo, deseo y mucha lujuria…cada que quería, que podía, me tomaba…Cuando no estábamos viajando o investigando, nos encerrábamos en cualquiera lado, ya sea una biblioteca o una habitación; Alexia me tomaba el rostro con fuerza y me hacia suya durante toda la noche.

Jamás lo hacíamos de manera calmada, siempre era de quitarnos la ropa a jalones, ella encima de mí haciéndome todo lo que su perversa mente deseaba…

Pensaba que con el tiempo dejaría de tratarme así, pero…después de varios años me termine acostumbrado, Simeón nos burlaba por lo “fogosas” que éramos, me reía, pero en el fondo me dolía.

Yo quería un amor dulce como Simeón y Froilán; Froilán llegaba algunas veces y le regalaba flores a Simeón, o los veía jugando en el pasto como dos niños y algunas veces terminaban dormidos en el sofá de la sala acurrucados uno junto del otro, se trataban con tanto cariño y respeto…a veces, durante algunas noches, me escondía lo más lejano de nuestro hogar y lloraba, a la mañana siguiente actuaba como si nada.

 Alexia jamás me decía que me quiera y siempre que se lo preguntaba cambiaba de tema…yo cometí el error de decírselo todo el tiempo. Cuando empezaba a sugerir la idea de formalizar nuestra relación ella simplemente decía:

-tenemos cosas más importantes que hacer, Leonor-con una voz llena de frialdad

Fin del flashback~  

-debo acabar con esto…-murmure bajo el chorro de agua, ya no quería estar de esta forma. Podía tener la apariencia joven pero ya no pensaba como tal; Yo deseaba casarme algún día, tener hijos y ser feliz con mi familia. Desgraciadamente…temo que con Alexia no podrá cumplirse ese deseo.

Al salir del cuarto de baño, no me sorprendió no encontrar a Alexia ahí…de seguro estaría en la sala o biblioteca esperándome. Sin decir nada, me vestí y Salí de la habitación para encontrarme con mi “compañera” de cuarto

-¡Hey! Hola bonita, que bueno que te encuentro-escucho una voz y con lentitud volteo, pero con una gran sonrisa, es el…aquel chico que conocí hace un par de horas, estaba a unos metros de mi, viéndome contento con una pequeña maceta en manos y una flor pequeña

-James…que gusto verte de nuevo-dije rápidamente acercándome a el

-si, digo lo mismo. Ya me puse una camisa, así que... ¿no habrá problema si te regalo esto? ¿O…tu novia se enojara?-pregunto extendiendo la pequeña planta delante de mí

-¿novia? Por Dios James…no es mi novia, es solo…una amiga-respondo divertida, aunque por una parte me dolía que sea cierto

-¡ah bueno! Pues…como vi que se molesto, no quise causarte problemas o algo por el estilo. Eso quiere decir que…puedes adoptar a Plantón- decía divertido y me dio ternura verlo sonreír, el pequeño sonrojo que adornaban sus mejillas, hacían querer pellizcárselas

-¿plantón? Que nombre más original, ¿Por qué no me platicas un poco mas de ella?-rio empezando a caminar junto a su lado. El decía que no era de mucho cuidado, tan solo debía dejarla un rato en el sol y darle un poco de agua cada dos días…según él, eran unas margaritas a punto de florecer.

-pensaba que eras artista nada mas-digo al notar como sabía mucho mas de jardinería de lo que pretendía

-bueno…si iba a ser jardinero en esta casa, mínimo tenía que hacerlo bien. Aunque igual soy carpintero, plomero, cocinero…lo que tu desees, preciosa-me guiño un ojo y mas que parecer coqueto, lucia realmente gracioso

-eres tan bobo-no pude evitar reír.

Al fin de un rato, llegamos hasta la gran biblioteca de los Aldrich, donde se encontraba Alexia apoyada en la pared, viéndonos con cierta molestia

-¡AUCH!... ¿que…que demonios?-me alarme al escuchar de repente a James quejarse, mientras con fuerza se sujetaba el estomago

-¿Qué sucede?-pregunto con preocupación, fingiendo no saber cuál era la causante de su dolor

-Yo…no lo sé…de repente me empezó a doler el estomago pero… ¡Auch! Es muy extraño-decía con dificultad, yo inmediatamente le dirigí una mirada de reproche a Alexia, y ella rodando los ojos desvió su mirada de nosotros

-¿y ahora?-pregunte un poco más calmada, acariciando suavemente su espalda

-ya paro…que extraño, de repente dejo de doler. Creo que eres de buena suerte-decía incorporándose con lentitud, mientras me miraba con una sonrisa

-Créeme que no; ahora vete, aun tienes trabajo y no quiero que te regañen por mi culpa-le digo divertida despidiéndome de el

-Pasen buena tarde, señoritas-se despidió de nosotras con una sonrisa amable y desapareció por el pasillo

-¡¿Qué demonios pasa contigo?!-dije enojada cuando deje de escullar sus pensamientos de James, volteándome a encararla, me empezaba a molestar esa actitud que estaba tomando Alexia

-¿Qué? No es mi culpa que tu novio sea tan debilucho, ni siquiera le implique tanto dolor y ya estaba a punto de llorar como nena-me respondió con indiferencia abriendo la puerta de la biblioteca, adentrándose a ella

-¿Quién lo diría…? La tan Perfecta y Correcta Alexia, la que siempre nos dice que no hay que abusar de nuestros dones, resulta que…por celos se aprovecha de un joven humano. ¿Qué diría Froilán y Simeón al enterarse de esto?-es mi turno de usar el sarcasmo mientras la miro divertida

-…-ella no dice nada pero me mira con reproche

-si tan solo…alguien decidiera guardar el secreto-sigo diciendo acercándome hasta ella con sonrisa victoriosa

-dime qué quieres, Leonor-se rinde por fin viéndome con fastidio

-me prometerás, nunca más volverte a meter con James-sentencio y ella abre los ojos en sorpresa

-¡Eso no! ¡Jamás lo permitiré!-alzo la voz enojada, frunciendo el ceño, dejando ver sus colmillos y gruñendo al mismo tiempo. Pero yo igual podía ponerme así

-¡Lo harás Alexia! O se lo diré a la Señorita Irina-la amenace igual enojada. Ella de inmediato oculto sus colmillos y se removió incomoda

-…-empieza a debatir mentalmente, puedo escuchar sus miles de insultos

-¿y bien?-digo cuando noto que se calma

-Bien-accede aun enojada. Yo sonrió complacida y me siento enfrente de ella para investigar de los libros de los Aldrich, sobre la Revolución.

Aunque cierta parte de mi cabeza no podía llegar creer de lo que era capaz Alexia enojada, la señorita “Nunca hay que romper las reglas o abusar de nuestros dones” utilizo el suyo solo porque estaba enojado de un Humano. No era la primera vez que se ponía celosa (aunque no lo quiera admitir) pero nunca llegaba a tal punto.

Pov. Sahian

Después de dejar a Ayshane en su casa, me dirigí a la mía, quería descansar de todo este drama…sentía muchas ganas de hablar con mi abuelo.

-¿Qué tal todo?-como siempre, mi abuelo siempre adivinando que me pasaba…estaba en la puerta de mi casa esperándome sentado en su típica silla con una taza de café en manos

-supongo que bien…la deje en su habitación y volví-fue mi simple respuesta sentándome a lado suyo

-así que… ¿Irina Aldrich? ¡Eh!-se empezó a burlar divertido tomando un poco de su café entre manos

-vamos no te burles…es solo que…me trae loca-digo riéndome con él, dando un suspiro de boba enamorada

-por esa sonrisa, aun no te lo crees-sigue diciendo mientras me sirve un poco de café igual

-es solo que no logro entender, como tan solo al recordar, pude sentir de nuevo todos estos sentimientos…porque, como Sahian, jamás lo había experimentado, pero como Tala…es como si algo, de nuevo, volviera a mí. Es tan extraño. Me hace sentir tan viva, y al mismo tiempo asustada, no digo que con Ayshane todo fuera mal, pero…es que era diferente; Además…sigo sin poder explicar cómo es que mi Bisabuelo al recordar, le fue totalmente indiferente-trato de explicar

-supongo que porque el amor de mis padres, no era toxico como el tuyo…Ayshane te hacía daño Sahian, debes aceptarlo tal y como es. En cambio, Irina siempre ah sido tan buena contigo-me respondió tranquilo

-…-yo sin decir nada asentí, aunque me dolía, eran tan ciertas sus palabras

-Se lo que quieres decir ¿Verdad? Que la quieres…-me dio un codazo amistoso y yo reí

-me leíste la mente; aun no sé como decírselo…-empecé a narrar

-soy tu abuelo, te conozco. Y por si no lo sabías…ahora que eres totalmente Tala, no podemos leer tu mente, en cambio, tu si puedes leer las nuestras, aunque…solo tienes conexión con Irina-dijo y yo abrí los ojos sorprendida, los chicos me habían comentado en aquella ocasión que ya no podían meterse en mi cabeza, pero tardaría en acostumbrarme un tiempo

-al menos no sabrán si eh tenido sexo o no…-murmure pero el termino escuchándolo y me dio un pellizco

-con esa cabezota que tienes, temo que Irina te rechace-me reprendió con el ceño fruncido

-abuelo perdóname-no pude evitar reírme fuertemente

-bueno…tendrás la oportunidad de declararte correctamente dentro de unas semanas, haremos un baile, en tu presentación como jefa de la Revolución y como la nueva Tala-comento con tranquilidad

-¿un baile? ¿Otro? Hace apenas unos meses tuvimos uno en mi cumpleaños-me quejo haciendo un puchero, no es que me moleste ir, pero no me gusta arreglarme, usar smoking, preferiría ir en pantalones rasgados y una camiseta cualquiera

-si y tienes que preparar un discurso…para convencerlos de que peleen a tu lado. No solamente les mandaras un mensaje y les dirás…’oigan pelearemos el lunes a las 5pm así que preparen sus lanzas y garras, nos vemos en Inglaterra’- respondió con sarcasmo

-podríamos-digo riéndome y ahora me da un zape ¿Cuál es su manía de repartirme golpes?

-compórtate idiota; En unas horas iremos con el sastre para preparar tu traje…empieza a pensar como le dirás que la amas, porque no creas que porque te ama te será así de fácil conquistarla-me impuso en tono de regaño, pero yo sabía cómo contestarle perfectamente

-no es mi culpa que mi Abuela te haya dejado un tiempo sosteniendo velas-me burlo y por su mirada, es mejor que corra. Por suerte soy veloz y me fui rápidamente a mi cuarto; era cierto…ahí tenía el Anillo que me entrego mi abuelo…era perfecto, total, Irina y yo en el pasado éramos marido y mujer…así que no tendría nada extraño si se lo doy ese día

-ya veras, Aldrich. Te conquistare-digo con una sonrisa para mí misma, sacando el Anillo, observándolo fijamente. Sería bueno hablar con ella justo ahora…pero tengo que tener paciencia.

Pov. Irina

Me encontraba en una sesión de prueba de vestidos, habíamos recibido hace apenas una hora la llamada del señor Sadoc, avisándole a mi Abuela sobre las invitaciones al Baile, en Presentación a la Revolución, habían sido enviadas con éxito a cada jefe.

Yo no podía estar concentrada en qué tipo de vestido quería, el largo, o si quería escote o no…En mi mente solo viajaban las imágenes de mis recuerdos con Sahian, no podía dejar de sentir sus labios encima de los míos y el suave tacto que añoraba probar una vez más…

-a ver querida…levanta la barbilla-me pedía mi modista, pasando por mis hombros una cinta métrica

-por favor Irina, sonríe al menos un poco… ¡Deberías estar emocionada! Será tu primer baile con pareja. No puedo espera para verte a ti…con tu primer novio… bailando, juntos, toda la noche en la pista-decía con ensueño mi Abuela. Desde que llegamos aquí, no dejaba de contar que su nieta Irina Aldrich ahora era novia del joven Arthur, proveniente de una familia Inglesa

-…-yo no dije, pero gire mi vista hacia ella, indiferente

-¡Y no les eh dicho lo mejor! El me ah solicitado que si Irina lo desea… ¡se casarían en un par de años!-antes de que pudiera terminar decidí interrumpirla

-Abuela, no amo a Arthur-dije con seriedad, a pesar de que era mi mejor amigo, no lo miraba con los mismos ojos. Solo le había dado una oportunidad para que dejara de insistir

-Irina…es un buen partido. No entiendo cómo puedes seguir obsesionada con Sahian, ella ya tiene a alguien…eres Elu; tienes el poder suficiente como para borrar todo sentimiento hacia Tala…pero no… ¡te gusta sufrir!-me regañaba con reproche, haciéndome uno de sus dramas. En ese momento me aparte de mi modista y gire totalmente mi cuerpo hacia mi abuela

-Abuela, me eh besado con Sahian-pronuncie con firmeza, viéndola fijamente a los ojos. En ese momento, todas las modistas del lugar giraron su vista hacia nosotras…no era ninguna novedad que ellas supieran  mi amor por Sahian, ya que ellas eran mis empleadas desde que era pequeña, cada uno de mis vestidos habían sido confeccionados por ellas…Incluso muchas abrieron sus ojos en sorpresa y tiraron lo que tenían en manos…todas sabían que jamás había besado a nadie, hasta ahora…Mi Primer Beso había sido dado oficialmente.

-oh por dios…-murmuraron al insomnio

-¿ustedes que ven chismosas? Vuelvan a lo suyo-ordeno molesta mi abuela, casi saliéndole humo por los ojos

-…-yo sin decir nada volví junto a la muchacha que me estaba tomando medidas

-¡Y TU IRINA VALLIERE ALDRICH DEL NORTE! ¡¿COMO ES ESO QUE TE BESASTE CON UNA VAGABUNDA DEL SUR?!-y ahí está, mi nombre completo cuando se molestaba y sus gritos exagerados cuando algo no le salía como le gustaba

-abuela, te quiero. Pero es mi vida-conteste tranquilamente con simpleza, alzando los hombros con despreocupación  

-¡¿COMO…?!-con suerte no exploto

-Bueno…si quieres que te cuente como fue, es sencilla la respuesta: Una vez en un sueño-cante divertida ante su reacción

-Hija, si no quieres que me enoje…mejor respóndeme bien-me ordeno con severidad

-está bien. No sé cómo fue posible pero…al parecer nuestras mentes se conectaron, Elu jama me había comentado que algo así nos pasaría pero…Sahian al fin me recordó…vimos nuestros recuerdos juntas y solamente charlamos, después de eso…paso. Nos besamos-termine de contar un poco avergonzada y sonrojada, aun no podía superarlo

-…-mi abuela con suerte no se desmayo, pero si se sentó sosteniéndose la cabeza

-su tacto aun está en mis labios…no lo puedo sacar de mi cabeza-murmuro con suavidad tomándome mis labios con mis manos

-tienes que hacerlo. Sahian ya está enamorada de Ayshane ¿Acaso lo olvidas? No puedo seguir viéndote aferrada a un sueño-me decía con severidad, aunque me dolía, tenía razón

-Pero…-no tenía ni respuesta para defenderme

-Eres una Aldrich y como tal, tu deber es cumplir tus responsabilidades…una de ellas ahora es cumplirle al Joven Arthur, el es tu novio ahora-me recordó

-pero si yo hablo con el…entenderá-contesto seriamente

-¿Quién entenderá que?-esa voz…Tanto mi Abuela como yo abrimos los ojos sorprendidas, no me lo podría creer…el Diablo ah llegado…

-Mama…-murmure entre preocupada y asustada. Ante mis ojos tenia la vista de una mujer severa, una desconocida ante mí, siempre tan distante y fría…Mi Madre, Galván Aldrich, con una mirada intimidante y sus manos en la cadera me veía de manera despectiva. La pregunta era ¿ella que hacia aquí? Se supone que volvería de su viaje en los próximos tres meses, no ahora. Durante toda mi vida, es muy poco lo que eh convivido con ella…siempre eh pensado que me odia, Así que mi abuela se tuvo que encargar de mí durante todo ese lapso de tiempo. ¿Si era una Loba? Claro que si…y no una cualquiera… se la pasaba todo el tiempo criticándome y compitiendo contra mí, siempre diciendo que, si no fuera por Elu, sería tan débil como una humana.    http://3.bp.blogspot.com/-L2umQ8TNcXI/UiD7eEJq6YI/AAAAAAABNnI/j8OFpklAZF8/s1600/Kelly+Rutherford+Plastic+Surgery-before.jpg    

-hija… ¿Qué haces aquí?-pronuncio mi abuela de la misma forma que yo

-Madre, veo que tanto usted como mi hija…no están felices de verme-contesto mi madre con seriedad, acercándose hasta nosotras

-…-yo seguía sin palabras

-no pienses eso Querida…es solo que estamos sorprendidas por tu llegada-trataba de sonar calmada mi abuela pero podía sentir como estaba tan incómoda como yo

-si, como sea ¡tú! (Apunto a una de las modistas de la sala) Tráeme una copa de Champan, y que sea para hoy-ordeno con fiereza, otra cosa que odio de ella, su estúpido complejo de Reina del Mundo, era tan arrogante y creída

-Debes ser más amables con ellas, no son sirvientas-digo con seriedad, ganando la mirada de ella y mi abuela, la cual, me veía con cara de ‘No peleen por favor’

-si lo fueran Irina, ya estarían despedidas por su incompetencia-se acerco hasta mi amenazante, pero no lograría que desviara la mirada. Era mucho más fuerte que ella

-Vamos…este no es lugar para pelear-interrumpió mi abuela, poniéndose entre medio de nosotras

-No las trates así-ya no sugerí, ordene esta vez con molestia

-veo que no has cambiado nada desde que me fui hija…pensé que un tiempo alejada te serviría para reflexionar y darte cuenta a quien te diriges. Soy tu Madre y Primera al Mando de la manada del norte; Además de ser parte primordial del Consejo-me hablo con su típico tono de arrogancia, y yo entre cerré los ojos fastidiada; A diferencia de mi Abuela, Mi Madre no estaba de acuerdo con la Revolución de lobos…

-Que casualidad, yo igual pensaba que el tiempo fuera te haría darte cuenta quien soy…podrás ser primera al mando o parte primordial del estúpido consejo, pero tu querida hija es Elu, Alfa de todos los lobos-respondí con una sonrisa calmada, pero era falsa

-las Alfas son como las putas de los lobos, no te sientas tan especial CA-CHO-RRA; Me impresionarías si fuera Tala…pero desgraciadamente, no lo eres- seguía diciéndome y yo estaba tentada a saltar sobre ella y romperle el cuello

-Bueno Hija, además de criticar, ¿A qué has venido?-pregunto mi abuela sacándonos de nuestro trance

-se te olvido mencionar molestar…-murmure fuerte a propósito para que lo escuchara

-Ignorando tu comentario. Eh venido a preguntarte directamente, ¿Qué es esta tontería de “Revolución”? las noticias han llegado a oídos del Consejo y no nos preocupaba mucho al principio, pero desde hace poco se ah vuelto una molestia…así que dime, Madre ¿Qué planean?-directa y al punto, como siempre

-no es de tu incumbencia Madre, ¿Por qué no mejor vas a seguir lamiéndole los pies a Yerik? Para eso eres buena-contesto con indiferencia, viendo como mi Abuela y las modistas abrían los ojos sorprendidas e impactadas; Mientras mi Madre fruncía el ceño como nunca antes dispuesta a golpearme. Pero yo era más rápida y lo esquivaría sin problemas

-¡TU….!-ahí estaba el golpe, ni medio segundo y ya estaba a espaldas suyas

-Veo que la edad empieza a hacerte efectos, Madre-digo con calma, empezando a quitarme el precioso vestido que llevaba…esto se iba a poner feo y no quería que las Modistas se tomen la molestia de limpiar después. Así que lo llevaría en casa

-Irina, no te vayas-me llamo mi abuela y yo dando un suspiro cansado seguí caminando. Sé que debería estar pendiente en esta pelea, pero aun con mi Madre aquí…mi mente no deja de viajar en Sahian y en que estará haciendo ahora…

Pov. Arabella

Las horas terminaron pasando volando y un nuevo día se aproximaba…en todo ese tiempo, ni Irina o Sahian dejaron de pensar en la otra, ambas querían volver a verse pero al mismo tiempo tenían miedo de la reacción de la otra, se la pasaron horas viendo el numero de la otra preguntándose si estaría bien llamarse, pero el tiempo se acabo y decidieron rendirse. A la mañana siguiente ambas tenían actividades diferentes en sus respectivas escuelas, pero por alguna razón, ambas lo sentían como si fuera el primer día de clases.

Por otro lado, Ayshane se debatía mentalmente como ir vestida ese día, se la había pasado el día anterior llorando por la ausencia de Sahian, siendo consolada por Nicolás que extrañamente se volvió un buen amigo para Ella.

-¿debo llevar el blanco o el negro?-le preguntaba Ayshane enfrente del espejo a Nicolás que estaba sentado en su cama

-mmmm…creo que cualquiera de los dos te veras linda Ayshane-contesto con una sonrisa amigable Nicolás

-Gracias bebe, ahora salte. Tengo que vestirme-le ordeno esta y el con naturalidad salió, aunque por otra parte tenía miedo de estar en la casa de Ayshane…en cualquier momento podrían llegar sus padres y no quería que lo sacaran a patadas

Mientras eso pasaba, Sahian olvido un pequeño detalle…había frio y todo su brazo estaba lleno de marcas similares a tatuajes; sin pensarlo mucho se puso una camisa sin mangas ligera y fue a la escuela en su moto, aun con la mente en las nubes por Irina. Pero cuando entro…no gano una terrible hipotermia o gripe, más bien, un montón de miradas de sus compañeros que se preguntaban ‘¿Cómo podía estar vestida así?’ ‘¿no tiene frio?’ ‘¿estará bien de la cabeza?’ ‘¿y esos tatuajes?’ ‘Aun si está loca, se ve muy sexy’

-que onda chicos-saludo con normalidad a sus compañeros lobos, que se encontraban cerca de su casillero y la miraban con los ojos bien abiertos

-…-ninguno sabia como decirle, su inusual falta de ropa

-¿les pasa algo?-pregunto confundida, viéndolos con extrañeza, dejando su cosas en su casillero

-¿no tienes frio?-el primero en hablar fue Frank, quien tratando de sonar natural, hizo una broma

-no ¿Por qué preguntas eso? ¿Cómo vamos a tener frio? Somos…-aunque para ella fuera raro en el momento, le basto unos segundos para entender a lo que se refería su amigo

-exactamente, te falta ropa Sahian-le llamo la atención Klein, que se mantenía serio hasta el momento y no se reía como sus amigos

-Demonios chicos…perdónenme. Lo había olvidado hasta ahora, ya saben, cosas de Lobos-intento excusarse, pero la verdad, era que estaba avergonzada

-lo entendemos, últimamente tienes más cambios que nosotros. Ten, toma esta sudadera y finge frio, si te preguntan, inventa una excusa-le respondió más calmado Klein pasándole dicha prenda

-Gracias-rápidamente se la puso y se sostuvo con las manos fingiendo temblor

-No puedo creer que se te haya olvidado-reía Frank, pero más que desear burlarla, quería simplemente aligerar el ambiente tenso que se había formado

Pov. Ayshane

Llegue a la escuela con calma, Nicolás estaba a mi lado mientras caminábamos por los pasillos, pero lo extraño no era eso…sino los murmullos de la gente y no exactamente sobre nosotros

-¿las viste? ¿Qué está loca no? ¿Cómo pudo venir así a la escuela? ¿Sin sudadera ni nada? Es hermosa pero ah de estar loca por venir expuesta ante el frio… ¿Sahian no?-muchos se reunían entre ellos solo para hablar sobre ello

-demonios…-murmure preocupada al oírlos

-al parecer tu ex novia se le olvido un pequeño detalle, ante todos, aun es humana-dijo Nicolás con una risita bromista pero yo le di un codazo molesta, no quería que hablaran así de ella

-Cállate bobo, tengo que ir al verla ¿Dónde tendrá la cabeza ahora?-lo regaño empezando a acelerar el paso hacia el salón

-Perdona, era una broma. De seguro ah de estar con sus amigos, espérala en el salón-me dijo antes que lo dejara en medio de los pasillos, aunque mentalmente le agradecí, estaba desesperada por buscarla. Ella misma sabe que está teniendo más cambios de lo normal en su cuerpo, ojala no haya olvidado sus pupilitas, no debe ser tan descuidada…

Por suerte, ahí estaba, en el salón con una extraña sudadera, sabía que de ella no podía ser, le quedaba demasiado grande y la mirada perdida hacia la ventana…De seguro está pensando en esa zorra de Irina

-¡¿Por qué no te pusiste hoy un abrigo antes de venir a la escuela?!-se que no fue la mejor manera de empezar un conversación pero no pude evitarlo, ardía de celos al mismo tiempo que me preocupaba

-Buenos días Ayshane, me encuentro bien, gracias por preguntar ¿y tú?-ella solo voltea, pero no demuestra enojo, tiene esa estúpida sonrisa boba que me encanta tanto. Me muero de ganas de besarla

-no me salgas con eso Sahian ¿No pensaste que la gente podría sospechar? Tu secreto corre riesgo, necesitas ser más precavida-no quería flaquear. Le seguí hablando con firmeza

-Primero Klein ahora tu…Gracias por preocuparte Ayshane, está bien, seré mas precavida, Lo lamento-me contesto con calma, pero su mirada rápidamente se desvió a la ventana ¿Por qué no me miraba? ¿Tan poco le importaba? Dolía

-Sahian…enserio me preocupo por ti. Por favor, mírame-le pedí en voz baja, tratando de ocultar mi dolor

-Perdóname, enserio. No me gusta causarte dolor-me dijo con una ligera sonrisa, pasando uno de mis mechones de cabello por detrás de mí oreja. Había algo diferente en toda esta charla, sus gestos eran de cariño pero no el mismo amor, no la pasión que me encantaba o el deseo que me derretía, ahora solo veía fraternidad en sus ojos y no me gustaba para nada  

-Te necesito-sin querer, de mí voz se escaparon estas breves palabras, que significaban mucho, no lo decía con el mismo sentido con el que ella de seguro entendió. Necesitabas sus brazos alrededor de mi cuerpo y sus labios encima de los míos; No esa mirada de cariño, como si estuviera viendo a una pequeña niña

-Somos amigas Ayshane, estaré contigo cuando lo necesites-me seguía mirando con la misma sonrisa, pero no podía soportarlo más y fui yo quien desvió la mirada ¿Qué estaba pasando aquí? Esto no debía ser así.

Pov. Klein

¿Cómo podía tomarse todo esto a la ligera? Se supone que si ya recupero sus recuerdos debería despertar como una verdadera Jefa, pero, no puedo ni si quiera culparla un poco…es normal. Aun tiene 17, vivió toda su vida como humana, le falta madurar

-pero…en tan poco tiempo es la guerra-murmuro con detenimiento y preocupación, para mí mismo. Necesitaba hacer algo pronto o esta guerra llegaría y nadie estaría listo para ella.

Pov. Arabella

Mientras todos estaban en la escuela, en el restaurante, Simeón y Froilán jugaban con los lobos, alimentándolos y de paso entrenándolos

-no puedo creer como los amigos de Sahian les tengan miedo-decía Simeón divertido, en los que acariciaba a un lobo adulto

-es por culpa de Sadoc ¿has visto a ese chico, Klein? Aquel día, hable con él, me comento que su jefe, siempre les pidió que se controlaran, jamás subieran la guardia y sean sumisos ante todo, los hizo cobardes, no están listos para la guerra, solamente serán un estorbo si no entrenan como se debe-le contesto serio Froilán mientras se sentaba, enfrente suyo

-no digas eso, Froilán. El pequeño Sadoc solo quiso que disfrutaran sus vidas como humanos, sin preocupaciones ni ninguna molestia-Simeón dejo lo que estaba haciendo, solamente para encarar a Froilán

-lo sé, entiendo pero…solamente les hizo un mal. La guerra está a la vuelta de la esquina, ellos, como la manada principal de Tala, necesitan ser el ejemplo ¡Ni siquiera comen carne cruda o beben sangre! Y eso es algo vital en un lobo-siguió Froilán indignado

-no lo necesitan, necesariamente no. la mayoría de ellos, son solamente entre 40% a 50% lobos, prefieren comer como humanos. Recuerda que nosotros cuatro, Sirhan, Tala y Elu, además de los hijos de jefe, somos más lobos que Humanos, para nosotros, si es vital comer carne directamente de los animales o beber su miedo por medio de la sangre-explico tranquilo Simeón

-¿Cuándo te volviste tan listo?-pregunto más relajado Froilán, sonriéndole 

-cuando tú querías entrenar más tiempo, para volverte más fuerte, yo aproveche el tiempo, estudiando, investigando y sacando conclusiones. Además que la biblioteca de Klein, tiene muchos datos interesantes igual, aunque no hay nada que te sorprenda-respondió aun divertido Simeón, viendo como su esposo seguía con una cara de no poder entender nada

-aun así…no entiendo porque a pesar de que Sahian obtuvo todos los recuerdos de Tala, no haya cambiado mucho, tiene un aura diferente, más poderosa pero…su personalidad…-Froilán no pudo terminar de hablar, porque Simeón decidió interrumpirlo

-¿Recuerdas que edad tenemos Froilán? Demasiados años, al igual que Tala, al conocernos. Sahian apenas tiene 17, no sabemos si será inmortal o no, como nosotros, pero lo que si sabemos, es que, nos necesita, estaremos ahí para ella, en cualquier momento, lugar u hora. Tala nos dio nuestros dones por esa misma razón, tenemos que protegerla y guiarla por el buen camino-dicto

-tienes razón, lo lamento Simeón. Es solo que a veces, lo olvido. Han pasado tantos años…Alexia y Leonor recibieron los dones de Elu; tú y yo el de Tala…-recordó con nostalgia Froilán dando una leve sonrisa

-así es, Alexia siempre ah mostrado ser merecedora de sus Dones, siendo la primer al mando, implica dolor o corta todos sus sentidos, con los años ah mejorado jugando con la mente de los enemigos. En cambio, Leonor, ella es más seductora, coqueta, los atrae, juega igual con sus mentes pero es inferior al poder de Alexia. Tu y yo, nuestros Dones son mas físicos, soy muy ágil y veloz pero tú eres más fuerte e intrépido-narro con seriedad Simeón, viendo en su brazo…las marcas que Tala les había dado, la cual, consistía en un cuarto megante de luna. Dándoles a entender, que solo uno, no era nada, pero los cuatro juntos, lo eran todo

-¿crees que Elu maneje sus Dones?-pregunto curioso Froilán

-es lo más probable, ella…-no pudo terminar. Un extraño choque eléctrico, viajo por toda su columna, dándole a entender, que algo se aproximaba y no era para nada bueno

-…-Froilán no dijo nada, pero de inmediato se levanto con rapidez, observando hacia los costados, buscando que era lo que había alterado de repente a su pareja. En esos momentos, Alexia y él se sentían muy impotentes al no poder percibir el peligro, ya que solo Simeón y Leonor se les había otorgado este Don extra

-vienen y no es solo uno-dijo Simeón, empezando a correr hacia el bosque

-bien, lo que esperaba, una gran pelea-se empezó a reír Froilán corriendo, muy por detrás, de Simeón

Pov. Sahian  

Entendía que Klein estuviera enojado conmigo pero, ¿enserio me ignoraría todo el día? estábamos en la mesa, almorzando, y él seguía con ese rostro serio, observándome de reojo nada mas, pero era lo bastante listo, no podía escuchar sus pensamientos, ya que repetía una y otra vez la tabla del uno. Ocasionando que me doliera la cabeza

-¿podrías dejar de pensar en matemáticas? Prefiero escuchar tus pensamientos de mujeres o cualquier otra cosa-le dije con molestia, dejando de lado mi comida

-…-el no me respondió, es más, me ignoro, siguiendo en lo suyo

-Klein…-le murmuro preocupado Said. Estaba molesta pero no le iba a decir nada, no tenía tiempo para pelear y mucho menos por una tontería como esta

-solito se le pasara, estas siendo muy inmaduro, Klein. Ya ni yo-lo burlo Frank, pero este, en vez de ignorarlo o reírse, golpeo la mesa con su puño, rompiendo una parte de esta…

Pov. Arabella  

El sonido llego hasta los oídos de los demás compañeros que no eran lobos, incluso uno que otro maestro giraron a ver qué era lo que pasaba, normalmente, en la hora del almuerzo no había mucho alboroto y mucho menos, en la mesa de la nieta de Sadoc

-¡¿Qué te pasa loco?! ¡Nos la van a cobrar!-alzo la voz Sahian, viendo fijamente a Klein el cual seguía con la mirada en su plato de comida

-…-sin decir nada. Los demás amigos lobunos se quedaron viendo la escena sin saber qué hacer, incluso Ayshane y Alinee desde sus lugares la veían. Ambas se habían mantenido calladas hasta el momento

-Sahian…-murmuro Ayshane, intento tomar el brazo de su ex novia, pero esta…fue más rápida y en un movimiento rápido jalo a Klein del cuello de la camisa

-¡¿Qué te pasa?!-se defendió enojado Klein, intentando soltarse del agarre de Sahian. Esta, teniendo más fuerza, apretó con más fuerza su camisa, tratando de controlarse, ya que, sus colmillos salieron a relucir, al igual que sus ojos ojirubi. Ocasionado, que todos los de la mesa se asustaran…

-¿recuerdas quien soy yo? Klein, soy Tala. Si me porto amable con ustedes, es porque son mis amigos, pero no abuses, porque no tendré piedad-le reprendió con coraje Sahian. Varios alumnos de la cafetería, veían la escena entre sorprendidos y asustados ¿Cómo una compañera suya podía lucir de tal forma? Era algo anormal

-…-inconscientemente, tanto como Klein y sus demás amigos lobunos bajaron la cabeza avergonzados. Sahian tenía razón, ella era la jefa de todos los lobos y a pesar que era menor que ellos, vivido toda su vida a su lado, ya no era la misma…

-yo…-dándose cuenta de sus acciones y palabra, rápidamente, soltó la camisa de Klein y retrocedió avergonzada…ella normalmente no era así y odiaba cuando los jefes o superiores se portaban de esa manera tan arrogante

-¡AYUDAAAAAAAAA!-antes de que los muchachos pudieran decirle o hacer algo, el grito de una mujer alarmo a todos. Los maestros corrieron hacia la puerta, para ver de qué se trataba, pero, la puerta se adelanto, abriéndose ante los ojos de todos…

-¡RAWWWWR!-más de uno, eran 10 en total, hombres y mujeres, incluso, habían dos niños entre ellos, con ropas formales, rubio, tez pálida, ojos totalmente negros, como un tiburón, y una mirada increíblemente fría. Traían sangre en la ropa y manos. Entraron a la cafetería, girando la vista a los alrededores, como si buscaran algo

-demonios…-murmuraron al mismo tiempo Sahian, sus amigos y las dos jovencitas de la mesa

Mientras tanto…en otro lado del país. Estaban Leonor y Alexia en la biblioteca de los Aldrich, sin decir nada, ni moverse, o verse, simplemente, las dos con los ojos en los libros, pero, desde unos minutos antes, un dolor punzante ah estado molestando a Leonor, era como si…algo o alguien le estuviera dando un aviso, sobre un mal presentimiento, no quería decir nada, ya que no estaba segura de lo que se trataba y prefería dejarlo como algo de mínima importancia

-Buenas Tardes Chicas, las había estado buscando ¿Cómo esta todo?-Irina entro a la biblioteca con una sonrisa, observándolas

-Buenas tardes Mi Señora, Leonor y yo investigábamos un poco nada más sobre los Aldrich. ¿No es cierto? Leonor-respondió alexia, girando su vista hacia su compañera, pero…

-…-no pudo ni siquiera contestar, un golpe mental la dejo en shock, empezó a escuchar gritos y miles de imágenes empezaron a inundar su cabeza, dejándola aturdida y confundida al mismo tiempo

-¿Leonor?-pregunto preocupada Irina, acercándose lo más rápido posible, al igual que Alexia

-¿Qué sucede contigo? Leonor, La señorita Irina te esta…-ni pudo terminar de hablar. Ya que, Leonor termino desvaneciéndose hacia el suelo…

-¡LEONOR!-gritaron las dos al mismo tiempo preocupadas. Un lobo jamás se enferma

-son muchos…una manada…en peligro…Sahian…Tala…necesitan ayuda…-empezó a murmurar con la mirada perdida Leonor. Alarmando al par

-algo esta presintiendo-dijo rápidamente Alexia, sabiendo que esto había llegado a pasar veces anteriores, así, habían evitado varias catástrofes

-llévala a su habitación y cuídala. Tengo que hablar con mi abuela y Sahian-ordeno seriamente Irina, saliendo con rapidez de la habitación, rezando mentalmente, que todo se encontrara bien en el sur

Volviendo a la actualidad…

Pov. Sahian

Nunca los había visto en mi vida, no los conocía, ni los recordaba, ni siquiera en los recuerdos de Tala venían a mi cabeza, no había sospecha ni sentimiento similar en mi cabeza, ellos eran totalmente desconocidos para mí, pero no tenía miedo. Notaba como me miraban…sus ojos estaban fijos hacia mí, ellos sabían quién era, y si algo querían, atacarían sin dudarlo. Necesitaba hacer algo pero ya. Aunque…no podía arriesgarme a ser descubierta o exponer a los demás

-Ciro…-lo llame y el de inmediato giro a verme, note como Klein me miraba preguntándose porque no lo había llamado a el

-Ordene-respondió

-llévate a todos, evacua a los humanos lo más rápidos posible. Zaqueo y Frank, les encargo a Alinee y Ayshane, no permitan que nadie les ponga un dedo de encima, los demás…ayuden a Ciro, necesito que me dejen sola con ellos-ordene con simpleza, notando como la paciencia de nuestros “nuevos amigos” se acababa y harían un movimiento pronto

-yo me quedo-escuche decir a Klein, pero no había tiempo para esto

-te vas y es todo. Obedece a Ciro y evacua a la gente-le conteste cortantemente

-pero…-él se quiso oponer

-¡AHORA!-grite. Ellos de inmediato obedecieron y empezaron a esparcirse entre todos, asegurándose que escaparan y a ninguno le pasara nada

-Tala…-me hablo uno de ellos, acercándose lentamente, paso a paso, viéndome directamente a los ojos

-¿Qué quieres Idiota? No permitiré que te metas con mi gente-respondí, acercándome hasta él y de paso…quitándome la sudadera que me habían entregado

-eso lo veremos-dijo simplemente, en el momento, intentando golpearme.

-…-sin decir nada, antes de que me impactara, tome su puño y lo aplaste con todas mis fuerzas, escuchando el crujido además de un grito lleno de dolor

-¡MISHA!-grito una mujer, corriendo de la misma forma hacia mí. Esto era algo extraño, no estaba acostumbrada a golpear mujeres, todo el que se me enfrentaba era hombre

-¡Espere!-dije rápidamente, soltando al tipo y tomándola a ella de los hombros…no quería hacerle daño, tan solo, alejarla de mi. Pero en vez de calmarse…me termino dando una patada directo en el estomago, ocasionando que saliera rodando por el suelo varios metros atrás, chocando con algunas mesas

-Misha, on ochen' sil'nyy, on prosnulsya. My dolzhny predupredit' nashego lorda (Misha, es muy fuerte, ha despertado. Tenemos irnos y advertir a nuestro señor)-logre escuchar que murmuro esa señora extraña al tipo que anteriormente le había roto la mano

-wooow…lanza unas patadas muy fuertes tu novia esposa o lo que sea-digo riéndome, mientras me incorporo. A veces debería tomarme las peleas más enserio, pero es más divertido no hacerlo, al menos, que este al borde de la muerte

-My ne ubezhim. My yavlyayemsya chast'yu soveta, my ne uydem tak legko, yesli vy ne na grani smerti. Itak, my vozvratimsya vmeste s slavoy vmeste s nashim Gospodom (No escaparemos. Somos parte del consejo, no nos iremos tan fácilmente, al menos que se encuentre al borde de la muerte. Así volveremos con gloria junto nuestro señor)-le respondió el tipo tratando de incorporarse

-¿Kto oni? ¿Otkuda oni vzyalis'? ¿Chto vy ishchete? Otvet nemedlenno (¿Quiénes son? ¿De dónde vienen? ¿Qué es lo que quieres? Respondan inmediatamente)-les ordene, recordando que además de poder entenderlos, podía hablar su idioma

-Eto ne tvoye delo, polzet volk. Nash Gospod' zakonchitsya s toboy, eto yedinstvennoye, chto ty dolzhen znat' (Eso no es asunto tuyo, loba rastrera. Nuestro señor acabara contigo, es lo único que necesitas saber)-me respondió uno de ellos, acercándose hasta los dos anteriores y viéndome a mi fijamente a los ojos

-¿Loba rastrera? Creo que es un mejor apodo que “Cachorra”-me rio mientras me levanto. Si ellos no querían irse por las buenas, tendrá que ser por la malas, total…con su apariencia e idioma, no es difícil adivinar quién los mando

Me quite mi camisa y zapatos, era hora de pelear enserio. Tres de ellos se pusieron enfrente de la pareja, que aun se encontraba en el suelo, y otros dos, tomaron a los niños, para llevárselos…desde aquí podía oler su temor hacia mí. Algo que me confundía un poco era ¿Por qué los trajeron en primer lugar? No era algo coherente llevar a niños, en una pelea, si ni siquiera pueden convertirse en lobos aun...Como sea, lo dejaremos para más tarde. Los tres vinieron primero, uno me intento dar una patada, otro un golpe en el estomago y el ultimo en la cara, pero pude esquivarlos con facilidad, no tenía que hacer mucho esfuerzo para devolverles el golpe, pero, fui más rápida y logre derrumbarlos

-…-estaba un poco agitada y algo acelerada por la adrenalina, pero se me bajo rápidamente al desviar la mirada…notando como varios compañeros de mi clase me veían, por la otra entrada del comedor. Tenía el rostro en shock y sus ojos me veían con horror, demonios…les había ordenado a los muchachos asegurarse que todos salieran

-¡¿QUE HACEN AHÍ?! ¡CORRAN!-les grite y ellos de inmediato asintieron, saliendo disparados del lugar, pero uno…giro antes de correr, al parecer, dudaba si correr o no

-¡MI SEÑOR!-escuche las voces en mi cabeza de Simeón y Froilán, estaban cerca

-¿Chto proiskhodit s lobitoy? ¿Ty ne mozhesh' bol'she srazhat'sya? (¿Qué pasa lobita?) (¿Ya no puedes pelear?)-se reían con burla aquellos lobos levantándose, algo que note, son su ojos. Los míos eran completamente rubíes, a diferencia, que los de ellos era un tono rojizo mas pálido, su pupila parecía más transparente que llena

-eto tol'ko nachinayetsya (esto apenas empieza)-sonreí con arrogancia

La pareja igual ya se había levantado, los cinco me veían con ferocidad, entre combinada con odio, podía escuchar sus insultos hacia mí. El primer lobo que había derribado estaba muy débil, si podía llegar hasta él, todos los demás querrán retirarse

-¡My dolzhny inti! ¡Prishlo vremya! (¡tenemos que irnos! ¡La hora ha llegado!)-tenemos que irnos, la hora ah llegado. Llego uno de los que había escapado anteriormente, gritando completamente asustado

-…-se quedaron viendo el uno al otro, dudándolo, si seguir o irse, pero yo se los haría más fácil

-¡Ey! ¡Vy, vy! Skazhi svoyemu gospodinu, chto ya zhdu tebya, Tala akh vernulsya (¡Hey! ¡Tú! ¡Si tú! Dile a tu señor que lo estaré esperando, tala ah regresado)-les dije con calma, tomando de nuevo mi camiseta del suelo, al parecer, ellos se rendirían así de fácil. Mejor para mí, me ahorraron la pelea

-¡SEÑOR! ¡MI SEÑOR!-llegaron corriendo, justo a tiempo, Froilán y Simeón. Que al ver a los lobos, por inercia reaccionaron y se pusieron a lado mío, en señal de protección

-¿Qué hacemos Mi Señor? ¿Atacamos?-me murmuro por lo bajito Froilán

-No…ellos ya se van-conteste aun sin bajar la guardia. Notando como empezaban a irse fuera del lugar, pero sin dejar de vernos de forma amenazadora

-Tala…-murmuro uno antes de darse la vuelta y salir corriendo. Al fin puedo sentirme tranquila, a excepción del pequeño detalle de los dos humanos anteriores, los cuales, eran mis compañeros de clase

-Mi señor… ¿se encuentra bien? ¿Le han hecho daño?-pregunto de inmediato Simeón girando su vista hacia mí, a lo cual, negó con la cabeza 

-búscalos-escuche una voz dentro de mi cabeza, era Tala. Desde aquel día, nuestra conexión era más seguida y ya no temía tanto como antes

-Tenemos que buscar a dos Humanos, son mis compañeros. Ellos…me han visto pelear con los “Rusos”-dije con seriedad, observándolos a los dos. En estos momentos, sabía que solo podía confiar este tipo de misiones en ambos

-Entendemos, denos la descripción de ambos y de inmediato iremos a buscarlos-respondió de igual forma Froilán

-iré con ustedes, pero primero debo hablar con los chicos. Debo decirles que se aseguren que ninguno, de aquellos lobos, se encuentra en la ciudad. No quiero problemas-decía mientras empezaba a vestirme con normalidad, aun seguía sin zapatos y camisa

-si gusta, iré con ellos, soy más veloz que cualquiera y de esa forma, el trabajo será hecho más rápidamente-hablo esta vez Simeón

-Me parece una buena idea, por favor vigílalos-digo con un poco de molestia al recordar que por no evacuar a todos, esos humanos me vieron

-¿se encuentra todo en orden?-como si hubiera leído mi mente, Froilán me saco de mis pensamientos

-tengo que hablar con Klein, tuve una discusión con él antes de que aquellos lobos se aparecieran, no sé qué paso con el…pero se puso muy…-no sabía cómo describirlo sin sonar mal. Juntos empezamos a caminar hacia la salida del lugar  

Pov. Arabella

Ambos chicos escuchaban con atención, sorprendiéndose ellos mismos de que este día haya llegado, nunca pensaron que podría llegar la hora en que Sahian tenga que poner en alto su lugar como jefa y dejar de ser “Sahian la Adolecente”. Justo de eso hablaban antes de llegar al lugar, pero pensaron que sería en un par de años, no ahora

-¿desobediente? ¿Insumiso?-pregunto sorprendido Simeón. Sabía que eran débiles pero no rebeldes

-Normalmente no es así, no entiendo cual es su problema, todo solo por no vestir adecuadamente como humana hoy-dijo con sinceridad Sahian

-…-ambos, Simeón y Froilán, se quedaron viendo entre ellos, preguntándose si decirle o no a su jefa

-¿pasa algo?-dijo extrañada Sahian

-Es tiempo mi Señora. De alguna forma, entiendo lo que le pasa a Klein…el igual que a nosotros, nos dejaron una misión, protegerla. Usted es la reencarnación misma de una Deidad para los lobos, todo el mundo, incluso Sirhan o Galine esperan muchas cosas de usted, pero teniendo tan solo 17 años…muchos temen que no la tomen enserio, debe poner su lugar como jefa-respondió con tranquilidad Froilán

-pero… ¿Qué quieren? ¿Qué me porte fría? ¿Qué les ordene? Tala no era así, lo eh visto, el era amable, tranquilo y algo cabezota-contesto de inmediato Sahian

-Lo sabemos, pero en tiempos de peligro…tenía que ponerse firme ante todos y apoyarse únicamente de Elu. No insinuamos que queremos que nos grite, solamente que…imponga su lugar, el cual, se le ah otorgado. Porque, así como usted, cada uno tiene su papel en esta historia-fue el turno de Simeón de hablar

-…-Sahian lo dudaba, pero hasta cierto punto, tenían razón. Asintiendo a ambos, siguió su camino, tenía que ponerse más seria cada vez más y enterrar por completo su vida como humana. La guerra estaba cerca…

Salieron los tres por el bosque, cuidando que ninguno de los maestros o alumnos los viera, esperarían un rato antes de integrarse con la multitud asustada

-¡Sahian! ¡Sahian!-se escucharon los gritos de Said, venia corriendo con los demás, los cuales, estaban un poco preocupados por la reacción de Sahian al verlos

-¿Por qué no se aseguraron que todos los humanos salgan de la escuela?-fue lo primero que dijo Sahian al tenerlos cerca de ella

-…-tanto Simeón como Froilán decidieron guardar silencio

-wooow ¿Qué pasa contigo? Cachorra, Tranquila, fue un pequeño error-respondió riéndose Frank, pero ninguno rio de su chiste

-¿te parece gracioso Frank? ¡Ellos me vieron! Ahora tengo que buscarlos y asegurarme que no digan nada a nadie-respondió con molestia Sahian

-Demonios…los buscaremos Sahian, no te preocupes ¿Cómo eran?-dijo Dacio más serio

-no, necesito que se aseguren, de verdad esta vez, que ningún lobo desconocido se encuentra en la zona. Simeón ira con ustedes, el tendrá el cargo. No quiero problemas en mi ciudad-le respondió con seriedad Sahian

-Relájate un poco, Cachorrita, todo saldrá bien-decía con despreocupadamente Zaqueo, ocasionando que todos lo voltearan a ver con el ceño fruncido

-…-Sahian sin decir nada, se acerco hasta él y de un solo movimiento le dio una bofetada, midiendo su fuerza para no hacerle daño

-Sahian…-tanto él como los demás estaban sorprendidos ¿Qué había pasado con ella?

-esto no es un juego, Zaqueo. Es una guerra, necesito mantener a mi gente a salvo, sin que se enteren de todo esto-dijo con el ceño fruncido Sahian

-Entendemos, nos reportaremos en un par de horas-fue el turno de hablar de Ciro, que de alguna forma, sabía que esa cachetada se la había ganado Zaqueo y la forma de ser de Sahian, era parte de ser Tala

-Demonios…-murmuro Sahian, viendo como sus amigos se iban. Sintiéndose mal por lo que había hecho, pero sabía que era justo lo necesario

-Vámonos mi Señor-le saco de sus pensamientos Froilán. Sahian asintió y empezó a seguirlo, tenían que buscar a esos dos tipos rápidamente si no querían que el rumor se esparciera

Pov. Alexia 

Leonor llevaba un par de horas inconsciente, estaba preocupada, pero el cierto momento, entro la Señorita Irina y me dijo que todo estaría bien. Puedo escuchar su respiración, ver su pecho subir y bajar pero…sigo preguntándome cuando despertara y me vera con sus dos ojos hermosos ojos

-Mmmm…-me saco de mis pensamientos el sonido que hacía. Me daba cierta calma ver que ya despertaba

-Leonor, dime ¿Ah pasado algo? ¿Los del sur y Tala se encuentran bien?-fue lo primero que me dije, para luego golpearme mentalmente, debía ser más suave con ella

-Necesito…agua…-murmuro con dificultar e inmediatamente obedecí. Serví un poco de agua, ayudándola a incorporarse y tomar con calma

-¿Cómo te encuentras? Debió haber sido muy grave esta vez, como para que te desmayaras-digo más calmada esta vez

-mejor…mucho mejor-me sonrió y no pude evitar sonrojarme un poco ¿Cómo puede sonreírme? Después de todo lo cruel que me eh comportado con ella

-…-desvié la mirada, ocultando mi vergüenza

-El Consejo mando a sus perros sarnosos en busca de Sahian, están mal informados. Piensan que Tala todavía no ah despertado-narro intentando levantarse pero de inmediato cayo. Era la desventaja de aquel Don, podrán presentir el peligro a cambio de un poco de su energía, dependiendo la magnitud del caos

-debes recuperarte. Yo iré en busca de la Señorita Irina, tú descansa-le dije mientras me levantaba, en un intento de darme la vuelta pero ella…me detuvo tomando una de las mangas de mi camisa

-Se que tienes que ir, pero… ¿Podrías quedarte conmigo hasta que me duerma? Te prometo que no será mucho tiempo-me pidió con ojos de cachorrito ¿Cómo podría negarme ante tal petición? Si me lo pedía de aquella forma

-está bien, solo porque me preocupaste mucho…pensé que algo malo te había pasado-me sincere por un momento

-entonces tengo que preocuparte mas-rio mordiendo la punta de su lengua, era tan linda

-por favor no lo hagas-rio un poco, pero me detengo y empiezo a jugar con su cabello, acariciándolo y pasando simplemente mis dedos entre ellos; se que ama cuando le hago eso. Puedo ver que le gusta en sus ojos, que se van cerrando, entrado a un profundo sueño…es hora de ir con la Señorita Irina

Salgo de la habitación sin hacer mucho ruido y me encamino hacia la sala principal de la casa, ahí se encontraban Galine y la Señorita Irina, pero esta primera, tenía un rostro lleno de preocupación y nervios

-¿Ah pasado algo Galine?-es extraño llamarla así, porque la conozco desde que era una niña, pero ahora con esa apariencia, parecía que me doblaba la edad, cuando realmente…era todo lo contrario

-Mas bien, llego alguien-me respondió y por su cara pude entenderlo todo. Había regresado su hija, la cual, nos odiaba a Froilán, Simeón, Leonor y a mí

-¿Dónde está?-pregunto, girando mi vista con discreción hacia los lados

-No lo sé, mi Madre es un caso especial. Mas importante aun ¿Qué sucedió con Leonor?-me pregunto la Señorita Irina, interrumpiéndonos a Galine y a mí, en nuestra charla

-oh cierto...El consejo envió a sus perros sarnosos en busca de la Señorita Sahian, piensan que Tala todavía no ah despertado, la querían con ellos, pero conociendo a mi Señor y compañeros, no lo permitieron-contesto con confianza, Froilán jamás dejaría que eso sucediera

-Si lo creo…le eh llamado, pero no ah podido contestarme. Lo más seguro es que haya ganado la pelea-dijo con tranquilidad, pero en sus ojos…pude notar cierta tristeza

-De seguro le devolverá la llamada y le dirá que todo se encuentra bien-digo con rapidez. Conocía con perfección el sumo amor que tenia Tala por Elu

-Si…por ahora lo importante es…-antes que pudiera terminar, un ruido nos distrajo a las tres, llamando nuestra atención

-¡AGHGGGGH!-era Leonor, reconocería su voz a kilómetros

-…-tanto la Señorita Irina, como yo, nos vimos unos segundos antes de salir corriendo hacia la habitación de mi compañera

Pov. Leonor

Estaba durmiendo plácidamente, sin escuchar ningún ruido ni nada, me sentía tan calmada…en paz, pero un olor extraño me despertó ¿Dónde había sentido esto antes? Eres aroma me era familiar…

-Es bueno verte de nuevo, Leo-abrí los ojos y quede completamente helada. Demonios… ¿Qué hacia ella aquí?

-¿No estabas en Rusia? Galván-pregunto con una sonrisa arrogante, a pesar, de la incómoda situación en la que estábamos. Estaba encima de mí con sus manos en mi cuello; era una buena jugada, debía admitirlo

-Estaba, pero sentí que era tiempo de volver a casa. Jamás creí encontrarte aquí, tan indefensa, durmiendo en una de las habitaciones de mi casa-me respondió poniendo un poco de presión en mi cuello, sintiendo como la respiración se vuelve pesada

-¿ah…si? ¿Tú casa? Pensaba que era de tu Madre, no de una lobita ¡oh perdona! Ya no eres una loba, sino, una zorra del consejo-me rio, pero por muy poco tiempo. Estoy jodida, sin muchas fuerzas y ella encima de mí, no tengo muchas salidas

-no has cambiado nada, Leonor-dice con coraje, metiendo fuerza en su agarre, cortándome la respiración

-Ni en 500 años lo haría-con esfuerzo pero la tomo del cuello y cambio las posiciones, a pesar, de que ella no me soltaba con totalidad. Aproveche y puse mi rodilla sobre su estomago, cortando más rápido su respiración

-pero conmigo si-dijo y soltándome me dio un empujón, ocasionando que cayera de la cama

-¡AGHGGGGH!-no pude evitar gritar, al sentir como clavo la aguja de su tacón en mi abdomen, no pensé que iría enserio

-Espero que eso te sirva para que empieces a respetarme-decía con rencor clavando mas su pie, traspasando mi piel

-Pensaba que ya habías superado discusiones del pasado, sigues sin madurar Galván-me rio a pesar del dolor. Tomo su pantorrilla y con fuerza la obligo a caer. Por suerte el dolor se va con rapidez pero no mi coraje, no tenía tiempo para pelear estúpidas. La inmovilice tomándola de los brazos y poniendo mi rodilla sobre su cabeza

-¡¿Qué sucede aquí?!-de golpe se abrió la puerta y en ella, se dejo ver a la señorita Irina, sorprendida y mi no…”compañera” Alexia molesta

-Ella empezó-digo rápidamente soltando a Galván

-Eres una…-¿acaso no se calmaba? La acabo de soltar y ya quiere atacarme de nuevo

-Cálmate de una vez Mama-le ordeno con seriedad la Señorita Irina

-Le pido disculpas por esto Señorita Irina-dijo Alexia, ¿era enserio? la loca me acaba de atacar y ella solo piensa en pedir perdón por defenderme, no me lo podía creer

-No tienes porque pedir nada, Alexia. Conociendo a mi Madre…ella tuvo la culpa-respondió la Señorita Irina con calma, mirando con reproche a su Madre, la cual, era una niña odiosa que siempre odie

-aun así, igual conozco a Leonor. Exagera siempre las cosas-okey, hare como si no escuche eso, tratare en ignorarlo por unos segundos 

-Tengo que ir con tu Abuela-dijo con molestia Galván, saliendo de la habitación, pero no sin antes dedicarme una mirada fulminadora

-Iré con ella-la siguió la Señorita Irina y nos dejos sola a Alexia y a mi

-¿Qué sucede contigo?-me reprocho Alexia

-¿Qué sucede conmigo? ¿Qué sucede con ella? Mira esto, nadie se siente feliz después de despertar con alguien encima de ti, intentando asesinarte-contesto molesta, alzando mi blusa, mostrando la marca del tacón de Galván

-Sabes cómo…-ni siquiera la deje terminar

-Oh no Alexia, no me vengas a decir “Sabes cómo es ella”, que si fuera una niña, se lo pasaría, pero tiene casi 40 años-me quejo

-tú tienes más de 100-sigo sin poder creérmelo, es una…

-no voy a discutir de esto contigo, acabo de recuperarme, necesito aire fresco-trato de finalizar con intención de salir de la habitación, pero ella me detiene tomándome del brazo

-Tenemos trabajo-me ordena, más que pedir. Bienvenida de nuevo a la Alexia fría

-Seguiré con ello por mi cuenta, SOLA-recalque la ultima palabras y me fui. Estaba ardiendo del coraje ¿Qué demonios no recordaba lo que paso cuando Galván era una adolecente? Maldita Alexia

Flashback~

De vez en cuando, íbamos a Estados Unidos, solo para ocasiones especiales…como esta, por ejemplo, años atrás viajamos al norte, para visitar a Galine Aldrich, nueva jefa del Norte, pero ahora, su hija se estaba preparando para tomar el cargo y estábamos emocionados por saber cómo sería la pequeña de Galine. Habíamos escuchado muchos rumores de ella, que era una loba excepcional y no lo dudábamos, siendo hija del Norte, era natural ser perfecta.

-Me encanta este lugar, lleno de tanta historia y cultura-digo con emoción viajando del avión

-Es aburrido si ya viviste la “historia”-como siempre, mi tan animada Alexia hacia comentarios desanimados

-vamos aguafiestas, vinimos a divertirnos, no a amargarnos-le contesto en mi defensa Froilán, ellos igual estaban emocionados

-Vinimos a trabajar, que no se les olvide. Debemos asegurarnos que la hija de Galine sea una futura jefa adecuada para el norte, no queremos problemas-respondió con seriedad Alexia

-tienes razón, pero no prometo ignorar el Champagne, mucho menos el Vodka-se rio Simeón, uniéndose a nuestra platica

-¿olvidas que nos estamos haciendo pasar por los sobrinos lejanos de Galine?-le pregunto con sarcasmo Alexia

-Cierto-se rindió un divertido Simeón

-Bueno…Tu y mi Bebe. Leonor y yo solamente somos su acompañantes-los interrumpió Froilán

-…-alexia solamente rodo sus ojos cansada, sabía que si de fiestas se trataba, ni a mí ni a los chicos podrá detener. Éramos todo un caso, pero no hacíamos nada malo, nadie salía herido

Llegamos al hotel, nos cambiamos y dos dirigimos directo a la fiesta, Galine celebraría el cumpleaños 17 de su hija. La fiesta se llevaría a cabo en su casa, en el jardín para ser más precisos, era un lugar perfecto para un día de verano. Amaba su jardín, lleno de cortes tan elegantes y ni se día la piscina, la casa perfecta

-Veo que Galine no se midió esta vez-decía Froilán caminando con Alexia del brazo, cualquiera que les preguntara, son pareja

-nunca lo hace-le contesto divertido Simeón, caminando conmigo de igual forma

-Veamos que tanto han cambiado-digo con cierta emoción, eran muy pocas las ocasiones que Alexia accedía a venir, no desaprovechaba estas oportunidades

-Pero que muchachitos tan guapos, es todo un gusto-se acerco hasta nosotros una Señora bastante linda, nos sorprendía que estuviera sola, pero no mentía en sus palabras…Froilán venia formal, usando un traje gris con corbata roja, el cabello peinado hacia atrás y zapatos de vestir https://cdn.revistavanityfair.es/uploads/images/thumbs/201547/los_hombres_mas_guapos_de_los_ultimos_100_anos_67423793_1588x2050.jpg

A diferencia de Simeón que era más relajado, con un suéter, camisa blanca, corbata (Alexia obligo a ponérsela), pantalón de vestir negro y zapatos de vestir  https://i.pinimg.com/originals/7a/a6/e8/7aa6e8dca6cabed4fa4c20f6ba7908cb.jpg

Alexia y yo veníamos a juego de nuestras parejas, pero a diferencia de ella, a mi me gustaba usar ropa mas juvenil, de acuerdo a mi apariencia, a pesar de tener más de 100 años. Ella prefería el estilo formal https://www.okchicas.com/wp-content/uploads/2016/06/Fotografias-que-captan-la-belleza-de-la-mujer-en-los-a%C3%B1os-50-y-60-por-Nina-Leen-1.jpg aunque no se veía para nada mal. En cambio yo https://images.fineartamerica.com/images-medium-large-5/suzy-parker-wearing-a-dior-dress-and-jacket-horst-p-horst.jpg tampoco me veía mal

-el gusto es nuestro, Mi nombre es Froilán y soy pareja de esta bella Señorita, llamada Alexia-el primero en hablar fue Froilán dándole un estrechón de mano a aquella joven desconocida

-Mi novio tiene razón, Señora. El placer es nuestro, soy sobrina lejana de la Señora Aldrich-Alexia le sonrió y de igual forma estrecho su mano

-¿y ustedes? Par de jovencitos-nos miro a nosotros esta vez

-Mi nombre es Simeón, Señora. Soy hermano de Alexia, de igual forma…soy sobrino de la Señora Aldrich, y ella, es mi novia, Leonor-contesto en mi lugar Simeón con una sonrisa

-Es un placer-digo de misma forma, esta señora por alguna extraña razón, siento que la tengo vista en algún lugar antes

-Es un placer conocerlos, ahora me podrían responder una cosa-nos pidió a los cuatro

-…-todos asentimos confundidos

-¿Cuándo dejaran de fingir?-pregunto riéndose

-…-todos nos quedamos viendo sorprendidos y confundidos ¿Qué trataba de decir?

-¡Cariño! Vengan por favor-grito a un costado. Oh por dios…

-Tiempo sin verlos, chico-Era Saen, o mejor dicho, el futuro jefe del sur. Con una sonrisa divertido y justo a su lado…venia con el ceño fruncido, nuestro niño favorito ¡Sadoc!

-¡oh por Dios! Pequeño Sadoc, has cambiado tanto-se reía Froilán caminando hacia él, lo admito, igual a mí me gusta fastidiarlo

-¡Ya no soy un niño! Igual tengo un hijo ¿recuerdan?-contesto molesto, Froilán le estaba despeinando su cabello

-para nosotros siempre serás un niño, pequeño Sadoc-me rio. No ah cambiado casi nada, sigue manteniendo el ceño fruncido y su esposa una sonrisa

-Te pareces mucho a tu madre Saen, que bueno. Es mejor a tener un rostro igual de amargado que tu Padre-dice esta vez Simeón, acercándose hasta el joven hijo de Sadoc. Su cabello y ojos eran iguales a los de su Padre, pero sus facciones eran mas como su Madre

-Pienso lo mismo-ríe y nosotros aprovechamos para seguir burlando a Sadoc

-…-el cual se mantenía con una cara de pocos amigos

-Bueno, Chicos, dejen de jugar…tenemos que seguir manteniendo la compostura-nos regaña Alexia y todos de inmediato asentimos

-¿vienen por trabajo?-nos pregunta la esposa de Sadoc

-siempre es por trabajo…-murmuro con fastidio

-Si, tenemos que asegurarnos que la próxima jefa del Norte, sea…una buena candidata-respondió con seriedad Alexia

-si lo será, ya verás-dice con fastidio Simeón y yo asiento

-estoy segura de ello, espero que les vaya bien-nos dedica una cálida sonrisa Satarah, me sigo preguntando como semejante amargado se caso con tan bella Dama

-Si, aunque Galván es una pesada de primera-comenta con fastidio Saen, el me agrada 

-¡SAEN ZARAGOZA!-lo regaña Sadoc, y el alza los hombros con despreocupación

-El Norte siempre es así, acostúmbrate chico-dice Froilán riéndose

-¡Froilán!-es el turno de Alexia de regañar. Los demás solo podemos reír, después de un rato charlando, emprendemos camino hacia nuestro objetivo principal…Galine y Galván Aldrich

En todo el camino, íbamos saludando, haciendo relaciones, conexiones, fingiendo ser tan solo unos parientes lejanos, por suerte la mayoría de los invitados eran humanos y no nos reconocerían, a cambio, algunos lobos del consejo que se encontraban en el lugar, nos miraba de forma desafiante, con suerte y no habría una pelea…

-Es un gusto verlos de nuevo, Chicos-se acerco con una sonrisa Galine, Froilán es el primero en acercarse, tomar su mano y besar esta

-Es bueno igual verla, Señora Aldrich-saluda Alexia con una suave sonrisa

-¿Quiénes son los jovencitos? Galine-pregunta uno de los Señora cercanos

-ellos son…-no puedo terminar de responder Galine, porque decidimos interrumpirla

-Usted perdone, no era nuestra intención interrumpirlos. Mi nombre es Alexia, soy Sobrina lejana de los Aldrich. El es Froilán, mi novio-respondió con una sonrisa Alexia, enganchando su brazo junto al de Froilán

-y yo…soy Hermano menor de ella, Mi nombre es Froilán y esta bella señorita es mi novia… Leonor-me presenta Simeón

-un gusto-digo con una leve sonrisa, pero los señores no desaprovechan la oportunidad, puedo leer sus mentes, están deseosos por “conocerme más”, que asco

-Madre…-nos llama nuestra atención una leve voz, había llegado la hora. Juntos dirigimos nuestra mirada hacia un lugar en particular, era…una mini copia de Galine https://www.ecestaticos.com/imagestatic/clipping/a7d/03c/a7d03cb0ea9b30f8d07d693dec26e5a1/asi-ha-recuperado-blake-lively-su-silueta-tras-el-embarazo.jpg?mtime=1519326108. Tenía unos ojos intimidantes, al igual que una mirada desafiante, era bella, no lo niego, pero su sola presencia daba a entender que era una mujer firme y dura, a pesar de su corta edad

-La Cumpleañera al fin decidió aparecer-dijo uno de los hombres a mi lado, riendo, pero yo no le encontré la gracia

-Les ruego la disculpen, como heredera…tiene muchos asuntos que atender, a pesar, de ser su cumpleaños-los interrumpió Galine y en el fondo, Simeón y yo, nos preguntábamos ¿Cómo no les rompe su cabeza? De ambos

-Caballeros, es un placer verlos. Me alegra mucho ver que han podido venir-dijo con amabilidad falsa, la antes mencionada. Tenía una sonrisa mas forzada que la de un payaso

-Nuestra amada Galine siempre da las mejores fiestas, ¿Cómo nos negaríamos? Además, es grato ver un joven y hermoso rostro, de vez en cuando-contesta uno de los “caballeros” pero en sus cabezas solo rondan pensamientos inmorales, asquerosos

-¡Ups! Cariño, lo lamento tanto. Se te ah caído tu copa por mi culpa-habla de repente Simeón, sacándome de mis pensamientos. Tiene razón, pero lo bueno…es que el contenido había caído sobre el señor que antes pensaba barbaridades

-No te preocupes, querido. Ah sido un accidente ¿verdad?-pregunto con falsa inocencia, al hombre de mi lado, y el asiente de inmediato, aunque en el fondo, lo escucho todo enojado maldiciendo

-tendré que ausentarme un momento, discúlpenme-dice con rapidez, escapando. Solo puedo ver a Froilán y Simeón aguantarse la risa, pero claro…Alexia solamente frunce el ceño molesta

-lo acompañamos-dijeron los otros hombres, caminando con rapidez hacia el

-…-yo me tape la boca para no reír, había sido tan gracioso

-¿Ustedes son…?-nos interrumpe de nuestra broma, la hija de Galine

-Tus primos lejanos-responde con una sonrisa divertido Froilán

-No digas eso, idiota-lo regaña Alexia dándole un codazo

-…-Galván solo nos miraba con confusión

-Ellos son los cuatros guardianes de Tala, Galván. La primera Alexia, La segunda Leonor, El tercero Froilán y el Cuarto Simeón; son aquellos quienes han jurado dar su vida por la de Tala y cuidar el orden de los lobos en el mundo-nos presento Galine

-Es un gusto conocerte por fin, tu Madre nos hablo mucho sobre ti-digo con amabilidad, estirando mi mano hacia ella

-El gusto es totalmente mío, mi Madre igual me conto miles de historias sobre ustedes…los cuatro juntos han sido perseguidos por el Consejo durante décadas-respondo con una sonrisa, estrechando con fuerza mi mano, al parecer, esta emocionada

-Yo diría que…los hemos dejado con vida. Nuestro señor nos ha ordenado mantener un perfil bajo, pero cuando la revolución se lleve a cabo…acabaremos con ellos-rio Froilán, estrechando a la joven Aldrich en un abrazo

-¿Estarás de nuestro lado? ¿Verdad?-pregunto Simeón, una vez teniendo a Galván en el suelo

-Lo estaré, mi Madre ah estado años trabajando por nosotras, para volvernos cada vez más fuerte, es mi turno seguir con la tradición familiar-respondió con una sonrisa y al principio, pensé que era muy amable de su parte

-Me alegra mucho escuchar eso…Nuestro trabajo está hecho entonces-dijo esta vez Alexia, con una leve sonrisa.

Todo estaba bien, hasta que Alexia le sonrió, no sé qué pasaba por su cabeza de Galván Aldrich, pero cuando fijo su vista en mi Compañera…toda esa amabilidad se derrumbo, sus ojos amables se llenaron de lujurio y deseo. Rompiendo toda buena expectativa buena que tenia sobre ella, ¿cómo lo supe? Soy una Loba, puedo leer los pensamientos de una adolecente como ella.

-Bueno, eso quiere decir que ya nos vamos. Las veremos dentro de 10 años-digo con una sonrisa falsa, pasando mi brazo sobre el de Alexia, alejándola con rapidez de Galván

-pero… ¿Qué pasa? Leonor, acabamos de llegar-se queja Froilán, con el ceño fruncido, y casi al instante Simeón le dio un codazo

-Froilán tiene razón, quédense un poco más. Es mi cumpleaños y sería un gran honor para mí, tener a los 4 en mi fiesta-a mi no me engañabas niñita, podía sentir toda tu lujuria dirigida hacia MI Alexia

-ustedes querían beber y comer ¿no? Supongo que no está mal de vez en cuando, diviértanse muchachos-dice con indiferencia Alexia ¿Qué carajos? Hace una hora se quejaba de venir y ahora quería quedarse… ¿Quién la entiende?

-Bien…-murmure a regañietas

-Aprovechando que están aquí… ¿puedo hablarte sobre algunas de mis propuestas para la Revolución? Como la primera, supongo, que podrías darme un mejor punto, que cualquiera-pidió Galván, mirando con suplica a Alexia

-No suena mal, puedo escucharte-respondió con calma Alexia ¡No vayas con ella! Carajo…a kilómetros se nota sus intenciones pero como siempre, la insensible de Alexia no entiende indirectas

-Deberías ir por ella…-me murmura Simeón con preocupación

-y tu ve por tu Esposo, si lo descuidas…-no pude terminar de hablar, porque él comenzó a reírse

-lo sé, acabara con todo el alcohol de la fiesta. Suerte-se despide con rapidez y corre en busca de Froilán…yo tendré que vigilar de cerca a Galván, la cual, no me da buena espina

Pov. Alexia

A kilómetros de distancia, podía escuchar los malos comentarios de Leonor en mi cabeza, estaba claro que se encontraba muy celosa, pero no podía hacer nada al respecto, no debía ser grosera con la hija de Galine, cuando su única intención es darme ideas sobre la Revolución

-Eres muy guapa ¿Sabes?-comento, sacándome de mis pensamientos

-Gracias-respondí cortante, no entendía el propósito de los halagos, me resultaba una molestia

-Mi Madre me hablo mucho sobre los Cuatro Guardianes de Tale, pero realmente…solo pude prestar más atención contigo, eres la primera ¡Una chica! Eso es…admirable-narro con entusiasmo Galván

-Tala no nos observaba por género, el media nuestra fuerza respecto a nuestra inteligencia. Nuestras mentes no son  nada comparadas a la de Él, no podemos saber en que está pensando o cuáles son los propósitos de sus acciones, siempre actúa…de una manera tan impredecible-contesto con indiferencia, a pesar de tener miles de años, aun no podía entender la mente de Tala y cuál era su objetivo de todo esto, tan solo…seguía ordenes sin dudarlo

-Wooow…no por nada eres la primera, tu forma de hablar dice mucho de ti-dice impresionada, pero ese no era mi objetivo, mis palabras eran más un regaño que una narración

-…-no dije nada, seguía mi camino, esperando con paciencia, la hora de irnos

-¿Por qué eres tan misteriosa? Alexia, ¿Qué secretos ocultas dentro de ti?-me pregunto y yo solo la observe de reojo, con fastidios. Lo que me temía...su cerebro era tan pequeño como el de una humana adolecente, en su cabeza solo rondaban ideas vánales, que me parecían completamente aburridas y sin ganancia alguna, estar con ella…era una total pérdida de tiempo

-¿Secreto? ¿Misterio? Dímelo tú-respondo tranquilamente, deteniendo mis pasos, observándola fijamente

-¿Por qué no mejor…? Me los enseñas-ronroneo como un gato, intentando acercarse a mí, ya que el lugar donde nos encontrábamos, era algún tipo de rincón alejados de todos

-No-la corte severamente, poniendo mi mano enfrente de la suya. En señal de Alto

-¿Qué pasa? ¿Viene alguien?-dice confundida, observando hacia los lados, muriéndose de la preocupación

-No, me refiero a que pares tus inútiles intentos de conquista hacia mí. Pensé que tendrías ideas para la Revolución,  no que intentarías algo-respondo con fastidio

-¿eh? ¿Acaso no entendiste la indirecta que te lance hace un rato? ¿O solo en trabajo piensas? Eso es aburrido Alexia…diviértete un rato-volvió a decir, con una sonrisa lasciva, intentando cortar la distancia entre mi cuerpo y el suyo, pero era más rápida y me hice a un lado, dándole la espalda, intentando alejarme de ahí

-¡¿Qué pasa contigo?! Una Estudiante de 17 años quiere tener sexo contigo ¿y te vas? ¿Qué clase de loba eres?-me recrimino, intentando seguirme

-Soy la primera de los Cuatro Guardianes, me tomo mi puesto muy enserio, además…que tu cuerpo no llama mucho mi atención, solo eres una Adolecente común y corriente, no eres de mi interés-corto con frialdad

-¿Quién acaso llama tu atención entonces? ¿Qué mente puede ser tan “Interesante”? ¿Qué cuerpo puede ser de tu gusto? ¿La segunda? ¿Leonor? ¿Esa chica de cabello Gris? Es tan común y corriente como yo-en el momento que dijo eso, no pude seguir caminando e irme, ignorando tales insultos

-Recuerda esto, Niñita.

Me decepciona mucho, que alguien como Galine, tenga una hija tan ignorante como tú.

Leonor no es común y corriente.

No te atrevas, ni siquiera, a querer compararte con ella 

Tala la escogió para ser la segunda en su mando, le otorgo un don extra, que ni Froilán y yo poseemos.

Cuando ambas éramos Humanas, teníamos un Reino que heredar. Nos llenaban de lujos y alabanzas cada día.

Y si habláramos de su personalidad…Nunca acabaríamos.

En estos miles de años eh tenido la dicha de conocerla, jamás había conocido, ni conoceré, a una chica tan paciente, linda e inteligente como ella, en TODO el Mundo, incluso, tiene una mente tan abierta y eso la hace no tener límites-digo con firmeza, sin darme cuenta que…todas estas palabras salieron de lo profundo de mi Corazón

-…-ella solamente frunció el ceño con rabia, como si deseara golpearme, se dio la vuelta, y empezó a caminar a paso rápido, alejándose de mí

-Demonios…-murmuro con molestia hacia mí misma, reprendiéndome por las palabras groseras que había dicho. Normalmente, mi papel como la primera, era ser quien mantenga el Orden y por nada del mundo, romperlo

-Alexia…-escuche que susurraron detrás de mí doblemente me sentí como una idiota, no logre percibir su esencia

-¿Qué haces aquí Leonor? Deberías estar con los chicos-le reprendí con molestia, intentando evitar el tema de lo que acababa de pasar, con la hija de Galine

-Simeón se puede hacer cargo de ello. Lo que me importa ahora…es saber porque le has dicho todas esas cosas sobre mí, a Galván Aldrich-me interrogo, con un ligero sonrojo en sus mejillas, avergonzada

-…-no respondí nada, no quería hablar sobre ello. Desde hace siglos, conozco con perfección los sentimientos de Leonor hacia mí, puedo sentir la intensidad con la que me mira, llego a escuchar los latidos de su corazón, cuando estoy a pocos centímetros de distancia; Que decir sobre las veces que tenemos sexo…o como Ella lo llama “Hacer el Amor”…me repite mil veces, lo hermosa que soy y lo mucho que me Ama

-Dime, Alexia ¿Por qué me has defendido con tanta pasión? ¿Acaso…? ¿Será este día? ¿Será por fin nuestro momento? En el que de tus labios, salgan duces palabras de amor...hacia mi-habla con tonalidad suave y con voz de poeta. Ella sabe cuánto amo la literatura clásica y cuanto admiro a los grandes Escritores

-No digas tonterías, Leonor. Solamente te eh defendido porque eres mi Segunda al mando-respondo con frialdad. No por lindas palabras, bajaría mi guardia

-¡Mientes! Amor mío. Puedo verlo en tus ojos, leerlo de tus labios. Me Amas, yo sé que me amas y no descansare, ningún día, ninguna noche, hasta escuchar de tus labios…el dulce susurro de tu declaración de Amor hacia mi-decía con calma, acercándose con lentitud, sonriéndome con devoción, pero en sus ojos…podía ver, en lo oculto, el dolor que le causaba, mi rechazo hacia ella, pero…era necesario. No puedo sentir el mismo amor, que ella tiene hacia mí

-Leonor…por el amor de Dios ¿Tengo que dejártelo “claro”, igual a ti? No te sientas especial

Si te eh defendido, por ningún momento, pienses que es porque te quiero de la misma forma o tus sentimientos son correspondidos  

Solo eh dicho la verdad, hacia tu persona

Antes de ser una loba, eras una Princesa. Te llenaban de lujos, sin límite alguno

Pero…eras una malcriada, bastante fastidiosa, que se interponía entre mis estudios y me distraía

No eh encontrado a ninguna otra persona, con el mismo carácter, porque eh llegado a la conclusión que toda persona es diferente, a su manera. Viste, piensa y actúa de forma individual, tal vez…se inspiran en otros, pero siguen su propio camino

Tú, solamente, haz hecho lo mismo

Y si no quise follar con ella, no fue por ti, fue porque soy lo demasiado consciente como para meterme con una Adolecente

Follo contigo, porque eres la única persona que es inmortal, como yo, y si Froilán o Simeón no fueran homosexuales, igual follaria con ellos

En conclusión… no te lo tomes personal, Leonor

Deja de intentar “conquistarme” porque solo me das lastima-hablo con la suficiente frialdad que se necesita para calmarla ¿Acaso no se da cuenta de la magnitud de nuestras situaciones? Tenemos que proteger a Tala, hacerlo despertar, que sus recuerdos vuelvan a él y salvar a los lobos, no tenemos tiempo de “Amor” y esas cosas…

-Entiendo…-contesto débilmente, agachado la mirada, tomando su falda entre sus puños, poniendo fuerza en ellos, en un inútil intento, de reprimir sus sollozos

-No llores, eres la Segunda al Mando. Deberías dar el ejemplo a todos los lobos-ordene con firmeza, empezando a retomar el camino, hacia la fiesta. Era hora de irnos a casa

Fin del flashback~

Claro que lo recordaba, desde aquel día…la hija de Galine ah hecho lo imposible por atacar a Leonor, al principio, eran cosas pequeñas, juego de niños, que no hacían daño a nadie, pero con los años…la relación se ha vuelto más tosca y peligrosa, hasta el punto que…Galine termino desheredando a su hija de la manada, para dejar el mando, a su nieta Irina.

-¿Por qué siempre tiene que hacer un drama por todo?-murmuro para mí misma con fastidio, desearía que por un día Leonor, solamente me obedeciera y se abstuviera a quejarse

-…-la vi irse enojada, dando largas zancados, pero algo que odiaba…era el efecto que ella provocaba en mi, sabía que no era demasiado profundo para ser amor, pero esas caderas, su ceño fruncido y la pasión con la que me atacaba cuando estaba celosa, como me encantaba…me hacia estremecer desde el fondo. Sabía que estaba mal, pero no podía evitarlo

Pov. Simeón

Estos Lobos eran demasiado lentos… ¿En que habrán malgastado su tiempo? Parece que en vez de entrenar, solamente se la han pasado jugando

-¡Te podemos escuchar! ¡¿Sabes?!-escuche como me grito uno de ellos, sacándome de mis pensamientos. Si no me equivoco, su nombre es Frank

-…-decidí no responderle. Conocía a los lobos de su tipo, se dejaban llevar rápidamente por sus instintos y si lo provocaba lo suficiente, terminaría iniciando una pelea

-¡No te creas…!-no pudo terminar ya que uno de ellos, Klein, decidió callarlo, jalándolo de su camisa

-¡Cállate Frank! No molestes a Simeón-lo reprendió con seriedad. Si no fuera porque tenemos nuestra forma humana, me lo imagino como un cachorrito, con las orejas agachadas 

-Veo que sabes cómo controlar a tus chicos, Klein-digo con seriedad, mientras seguimos recorriendo toda la frontera. No encuentro rastros de los rusos, eso era algo bueno

-Ellos son leales únicamente a Sahian y a mi-me respondió con firmeza, tirando la piedra muy directamente. Entendía a lo que se refería

-Klein…no tengo intención de adueñarme de la manada-digo con simpleza, era solamente la verdad. Mis objetivos únicamente eran servir a Sahian

-Aun si quisieras, no podrías. Ninguno de ustedes, forasteros de quinta-Zaqueo se puso enfrente mío, tapándome el paso, esto no era bueno, por suerte, yo no era ni Froilán ni Leonor, que seguramente en esta situación pelearían sin duda

-Hazte a un lado, por favor-pedí con calma, faltaba poco para acabar la misión

-Este no es momento para pelear-fue el turno de Ciro de hablar, el era de los pocos que usaba la cabeza en esta manada

-Bien…-se rindió con molestia Zaqueo, quitándose de mi camino. Qué suerte, no tenía ganas de pelear

-Por el momento no pelearemos, pero…no permitiré que me quites el lugar que tanto me ha costado conseguir, yo debería ser quien este al mando, no tu. YO soy la mano derecha de Sahian-dijo con resentimiento Klein, pero en sus ojos podía ver la gran frustración que recorría en sus venas, estaba herido por ser remplazado, que inmaduro

-Niño…ni tu ni yo somos la mano derecha de Sahian, ese papel es únicamente de Irina-doy una risa pequeña y sigo mi expendición, les quedaba mucho por aprender a estos Lobitos…me encargaría de ellos

Pov. Sahian

¿Dónde estarán? Maldita sea… ¿Dónde se podrán esconder esos chicos? Espero que no hayan ido con la policía…seria un problema tener que lidiar igual con policías       

-Mi Señor ¿Son ellos?-me saco de mis pensamientos Froilán, habíamos recorrido casi toda la ciudad y por suerte…los habíamos encontrado

-Si, son ellos…-respondo disgustada. Aquellos chicos, a simple vista se notaba que no iban a ser de fiar…Al solo observarlos, podía adivinarlo, además…el lugar donde los encontramos, no era el más seguro de todos

-¿me encargo de ellos?-me pregunto con seriedad Froilán, observándolos bien

-No, déjame hablar con ellos primero-contesto tranquilamente, relajándome antes de ir con ellos

-…-ambos chicos, se encontraban fuera de un bar de mala muerte fumando como locos, ambos tenían una cerveza en cada mano y sus rostros estaban pálidos, como si hubieran visto a un fantasma

-Hola Chicos-me acerco calmadamente, con Froilán detrás de mí

-Eh…ERES…Eres tu…la…la…-uno de ellos, inmediatamente soltó su botella, intentando alejarse atemorizado, temblando

-¡Monstruo! ¡¿Qué demonios haces aquí?!-empezó a gritar el otro, alterado. Alejándose de igual forma

-Chicos, tranquilos. Necesito hablar con ustedes-pedía con paciencia, intentando tranquilizarlos

-Le diremos…le… ¡TODO EL MUNDO LO SABRA! ¡Lo que en realidad eres…Un Monstruo!-el chico numero uno con suerte y no se orino en sus pantalones

-¡ELLA TE SALVO IDIOTA! ¡DEBERIAS ESTAR AGRADECIDO!-le grito en respuesta Froilán, furioso, acercándose a ellos, de manera amenazante

-Tranquilo…-le ordene con firmeza, poniendo una mano sobre su pecho, alejándolo de ellos

-Monstruo asqueroso-me insulto el tipo número dos. Normalmente seria mas paciente pero estoy al borde del colapso mental, ya estaba cansada de todas estas mierdas ¿Qué no podían razonar un poco? Si fuera un Monstruo los mataría en vez de salvarlos

-Dime algo nuevo, ese insulto se está volviendo aburrido. Como sea, necesito que guarden el secreto o sino…-empecé a decir, estresada

-¿sino qué?-pregunto el tipo numero dos, amenazantemente, viéndome con el ceño fruncido, vaya…el humano tenia agallas

-sino, yo misma me encargare de hacerlos callar-sentencia con firmeza, dejando que mis ojos se tornaran de rojizo y mis garras salieran, solo quería asustarlos un poco

-…-y al parecer, lo logre

-Piénsenlo Chicos, pero les recomiendo…que sigan mis órdenes, al menos…que quieran estas dentro de sus órganos-rio con falsedad, mostrando mis uñas. Ellos temen, lo puedo sentir, incluso el tipo número uno, no aguanta más y se terminar orinando en sus pantalones

-Vámonos-ordeno a Froilán, dedicándole una última mirada a esos chicos, sabía que no dirían nada, después de mis palabras, ninguna persona lo haría

-Eso fue…-Froilán no sabía que decir, caminaba a mi lado, pero estaba impresionado con mi actuación

-Froilán…Simeón y tú, tienen razón. Me eh estado tomando mi papel muy a la ligereza. Necesito ser más firme con mis decisiones y madurar de una vez. Si voy a dirigir una guerra…debo hacerlo bien, no puedo ser débil de ahora en adelante-murmuro con seriedad, parando por un momento, observando con detenimiento mis manos. En poco tiempo…mis manos serán manchadas con sangre y no puedo sentir culpa ante ello, tenía que proteger a mi gente, aun si eso…implicaba volverme una asesina

-Mi Señor…no la dejare sola, ninguno de mis compañeros lo hará, la apoyaremos y ayudaremos en todo lo que usted requiera, le prometo…que daremos lo mejor de nosotros-él, se hinco ante mí y agacho la cabeza, en señal de lealtad

-Gracias-respondí con una leve sonrisa, asintiendo con la cabeza, para que se levantara. Me sentía halagada con su devoción hacia mí, me daba ánimo y confianza de seguir con este duro camino

-¿Volvemos al restauran?-me pregunto de igual forma, levantándose

-Si, espero que Simeón haya tenido éxito, hay algunas cosas que necesito hablar con los chicos-le digo con seriedad, antes de retomar mi camino hacia el bosque

-…-el no dice nada, pero estaba segura que sabia a lo que me refería

Ambos empezamos a correr directo al Restauran de mi Abuelo y para mi mala suerte, los chicos y Simeón no habían vuelto, pero al mismo tiempo, era bueno. Así podía prepararme psicológicamente para lo que les iba a decir. Por un momento, tome mi teléfono y note como tenía varias llamadas perdidas de Irina, demonios… ¿Cómo no pude haberle contestado? Que idiota soy…era mi oportunidad y la desperdicio de tal manera, ahora… ¿Cómo la llamaría? ¿Qué le diría? En primer lugar… ¿Por qué me habrá llamado?

-¡SAHIAN! ¡Hemos vuelto!-la voz de Said me saco de mis pensamientos y tuve la obligación de apagar mi teléfono, en otro momento podría llamar con más calma a Irina…

-¿Cómo ha ido todo? Simeón-es lo primero que digo, observando fijamente a mi Cuarto guardián

-Todo bien, Sahian. Aquellos espías del consejo han abandonado el territorio y la ciudad-me contesto con una leve sonrisa

-Eso es bueno, muchas gracias por llevar el mando-digo con sinceridad, al mismo tiempo que siento un peso menos en mis hombros, al fin puedo respirar con calma 

-No era necesario que el tenga el mando, Klein es mucho mejor que él-dijo rápidamente Zaqueo, casi empujando a Simeón, poniéndose enfrente, mirándome con el ceño fruncido. Vaya…está enojado

-Zaqueo, mejor guarda esa ira para la guerra-digo con seriedad, observándolo fijamente, que lobo mas rebelde ¿Enserio pensé eso? Un día eres joven y al otro quieres tener en orden tu manada

-¡Es la verdad Sahian! Entiendo que sean tus guardianes, pero… ¿Por qué permites que nos den ordenes? Klein era el único que podía hacerlo-de igual forma, Frank alzo la voz con fiereza, indignado

-Chicos, alguna cosas cambiaran de ahora en adelante-solté por fin, acariciando mi frente con cansancio

-¡¿EHHHH?! ¡¿DE QUE HABLAS?!-gritaron al mismo tiempo, Said, Frank y Zaqueo

-…-Klein, Dacio y Ciro se mantuvieron callados, pero con los ojos abiertos completamente en shock

-Hablo muy enserio chicos. Necesito su apoyo en esto, no puedo seguir jugando a ser la “Adolecente”, necesito organizar una guerra, no puedo seguir entrenarlos personalmente. Froilán y Simeón se encargaran de eso, ellos llevaran el mando sobre ustedes-explicaba con calma, preparándome para sus miles de quejas

-Sahian, yo puedo hacerme cargo de ello…soy tu mano derecha-dijo rápidamente, desesperado, Klein, viéndome con cara de “no estarás hablando enserio”

-Se que puedes, Klein. Pero Froilán y Simeón llevan miles de años de experiencia ¿Quién mejor que ellos? Los prepararan para la guerra además de cuidar el pueblo cuando no este, porque…no todos irán a la guerra-respondo observando fijamente a Said. No permitiría que él, siendo tan joven, arriesgue tan pronto su vida. Podrá ser un solo año menor, pero mi alma, tenía más años que mi abuelo

-…-Klein no me contesto, simplemente asintió, pero podía ver lo enojado que estaba

-Entendemos…-Mis demás amigos, a regañietas, pero terminaron accediendo

-Chicos…son como mis hermanos, lo saben muy bien, pero tengo que hacer esto. Por desgracia…no en todas las ocasiones los podre llevar conmigo.            Por favor, les pido que me comprendan-pedí con calma, una parte de mi igual no estaba a gusto, pero era esto o que sigan portándose como lobos débiles

-no te preocupes, Sahian. Nosotros tenemos que entender, estaremos bien-me dio una leve sonrisa Dacio, lo cual, me hizo sentir tranquila

-Gracias-finalice por fin y me dirigí hacia el restaurante. Tenía mucha hambre y debía hablar con Irina… Para mantenerla al pendiente de su territorio, no quería que le pase lo mismo que a nosotros, un ataque sorpresa 

Así que al entrar al Restauran, no encontré comida ni a Marian, sino, a mi Abuelo sentado en una mesa tomando una taza de café, supongo que era hora de un sermón

-Hola hija, no esperaba verte por aquí-me dijo con una leve sonrisa, dejando su taza de lado

-Bueno…normalmente aquí como, Abuelo-respondí sin ánimos, sentándome enfrente suyo

-¿Cómo te va en el trono? Te veo…un poco cansada-se ríe y me da ganas de golpear mi cabeza contra el suelo repetidas veces

-Pesado, los chicos aun no captan la magnitud de este asunto y mis deberes como Tala también son muchos-respondo con un suspiro cansado, lo único que me animaría en este momento seria escuchar la voz de Irina diciéndome “¡Tú puedes!”

-Lo imaginaba. Puedo escuchar a Kilómetros las quejas mentales de los Chicos, no están contentos con la decisión tuya de poner a unos Nómadas al Mando de la Manada-comento mi abuelo con seriedad

-Lo sé…todos esperaban que sea Klein quien los guie mientras yo no este, pero El, al igual que yo, necesitamos aprender muchas cosas ¿Quién mejor? Que dos de mis Guardianes. Ellos han vivido las guerras mismas contra el consejo, los prepararan para lo que venga-dije con calma, tomando un poco del café que había dejado sobre la mesa

-Entiendo, pero…si vas a pedirle a tu gente que te acompañe en la guerra, no debes darlo por hecho, se amable con ellos y nunca los descuides-sugirió mi Abuelo, viendo fijamente hacia la ventana, donde se encontraba Klein hablando seriamente con Froilán

-No les pediré que me acompañen a la guerra, Abuelo. Los preparo con el principal objetivo de proteger la ciudad, nuestro hogar. Ellos aun son jóvenes y no están obligado a ir a la guerra conmigo…Si quieren ir irán, a excepción de Said. El es apenas un niño-digo sin mucho ánimos, levantándome de mi asiento, al presentir las malas vibras entre Klein y mi Tercero

-Igual tu, Sahian…aun eres una niña-escuche murmurar a mi abuelo, pero no era tiempo para seguir discutiendo ello

-¿Qué sucede aquí?-me uní a los dos, interrumpiéndolos

-Sahian, te pido por favor…que no te metas-me respondió con seriedad Klein, sin dejar de mirar a Froilán de forma mordaz

-¡No le hables así! Tienes que respetarla, es tu jefa-le ordeno con molestia Froilán, podía sentir que se estaba aguantando las ganas de golpear a Klein

-Froilán ¿podrías darnos un momento? Por favor-le pregunte con calma, viéndolo tan solo de reojo

-Como usted ordene Mi señora, si me necesita…no dude en llamarme-me dijo con neutralidad, alejándose, pero sin dejar de ver del todo a Klein. Con suerte y no se mataron

-¡Sahian esto es una estupidez! ¡Tú viste como nos trataron el primer día que llegaron! Se portaron de una manera tan…arrogante y estúpida-decía con desesperación Klein, mirándome con suplica, sus ojos gritaban por ayuda

-Klein…entiendo que esto sea nuevo y ninguno este acostumbrado, pero es lo mejor, créeme por favor. No haría esto, al menos, que haya otra opción-le respondí con tranquilidad, mirándolo fijamente a los ojos

-Pero Sahian…se supone que soy tu Mano Derecha, quien obtiene el Mando cuando no estás-dijo con molestia, desviando la mirada

-Lo sé, pero antes de tomar ese cargo, necesito que te entrenes con Simeón y Froilán. En el futuro, cuando la Revolución empiece, necesitare que seas uno de los Comandantes y no me sentiré segura, dejándote ese cargo, sin que antes estés preparado-lo anime, tomando su rostro entre mis manos, obligándolo a que me mirara

-Perdóname…-murmuro débilmente, agachando la mirada

-No tienes que disculparte, Klein. Entiendo que fue un día ajetreado para todos, solo necesito que me prometas algo ¿si?-le pedí con una sonrisa, soltando su rostro

-¡Lo que necesites!-Respondió de inmediato, más animado

-No permitirás que nada le suceda a Irina ¿Está bien? Antes de salvar mi vida o protegerla, piensa en ella primero. Moriría si algo le llegara a ocurrir-confesé con seriedad, recordando que debía llamarla

-Con mi vida-contesto con una sonrisa, poniendo su mano en su pecho

-Confió en ti-me reí y dándome la vuelta, me aleje…Necesitaba privacidad para hablarle, no quería decir algo estúpido y que todos se burlaran de mi

Corrí lo más rápido que podía, quería llegar a mi habitación y encerrarme lo más pronto posible, nadie debía escucharme o moriría de la vergüenza

-pippp…pippp…-sonaba el sonido en mi teléfono, la marcación se estaba haciendo

-¿Bueno? ¿Quién habla?-demonios, escuche su voz y me congele, quede como una papa dura

-…-no salía ni una palabra de mi boca, sentía mi voz atorada en la garganta

-¿Sahian? ¿Eres tú?-Oh por Dios…ten piedad de mi…su voz…me deja sin aliento…

-Yo…yo…-en mi mente estoy gritando: ¡Habla estúpida!

-¡¿Cómo te encuentras?! ¡HACE HORAS QUE EH TRATADO DE COMUNICARME CONTIGO! ¡¿Dónde has estado?! ¡¿Los atacaron?! Leonor…Ella…tu…yo…-me hablaba con desesperación, se encontraba muy aletada y eso me remordía el corazón, me llenaba de culpa al mismo tiempo que me daba ternura

-Irina…todos estamos bien, Reine (Reina)...-no pude continuar al haber dicho lo último, quede totalmente en shock ¿Cómo demonios se me ocurrió llamarla así? Fue algo inconsciente, supongo que era parte de mis recuerdos con ella

-Me alegra mucho escuchar eso, Sahian. Estaba muy preocupada por ti-me contesto con suavidad y puedo jurar…que en estos momentos, tiene una leve sonrisa

-Lo sé, por eso quise llamarte. Debía hacerte saber que estoy bien, pero igual quería que te cuides…por si el Consejo va hacia el norte, no quiero que te hagan daño-dije con seriedad, no podía dejar pasar el peligro que corría

-Lo entiendo, estaremos pendiente-respondió, aun, tranquila y yo antes de cambiar el tema, recordé algo importante

-Irina, De casualidad, ¿Tu sabes porque algunos lobos del consejo andan con niños? ¿No son muy jóvenes para un pelea?-me atreví a preguntar, tenía miedo que esto le traiga malos recuerdos

-¿Niños? ¿Hablas enserio? No estaba enterada de ello-me contesto confundida, al parecer, a ella igual se le hacía extraño aquello

-Espero que no los tengan secuestrados…-murmuro con preocupación, sería terrible saber que son niños en peligro

-Es probable, el consejo no tiene sentimientos de culpa o piedad, ellos atacan por conveniencia propia-casi susurro, pero en sus palabras se podía notar cierta nostalgia llena de tristeza y aquello me partía el corazón

-De ahora en adelante, no dejare que nadie te ponga un dedo encima, Irina. Nadie te tocara ni un solo pelo, te lo prometo-confesé con seguridad, tragándome toda mi vergüenza en aquel momento

-Estoy segura que lo cumplirás, Sahian-respondió con una pequeña risa, oh por Dios… ¿Su risa siempre ha sido así de hermosa?

-Si…bueno…yo…este…-no sabía que mas decir, pero tampoco quería dejar la conversación

-Supongo que tendrás más cosas que hacer, entiendo. No te quito mas tu tiempo, cuídate Sahian, espero que todo con Ayshane…siga igual de bien-finalizo y me corto sin dudarlo, lo que me dejaba mas en shock…era el tono de voz, con el cual, hablo al final…sonó tan frio y distante. Me dejo sin armas

-Pero…yo…te quiero…-murmure hacia la nada, ya que, desde el otro lado de la línea…nadie me escuchaba

Pov. Arabella

Pasaron varios Días…las horas pasaban volando…Sahian entrenaba día y noche, con el propósito de proteger a Irina en la guerra y ganar sobre el Consejo. Además, que se encerraba por horas en el sótano de Klein a leer y releer sobre los libros que su Bisabuelo les había dejado

Los días en la escuela se habían tornado algo extraño, un poco incómodo, para todos…Ya que, Sahian era constantemente acosada por Ayshane, la cual, la seguía como un cachorrito abandonado y esta no se inmutaba hacia ella. En su mente solo cabían ideas para la Revolución y pensar en el bienestar de su Amada.

Simeón y Froilán se habían tomado enserio su papel de dirigir a la manada y todas las tardes, sin falta, entrenaban hasta el anochecer. Mentiría si dijera, que a los chicos se les había hecho fácil acoplarse a ellos…les costó un poco, pero al final, pudieron adaptar sus cuerpos a ello

Alexia y Leonor seguían sin hablarse, a pesar de dormir en la misma habitación y cama…Leonor evitaba lo más posible a Alexia, en cambio esta, buscaba cualquier excusa para hablar con Leonor, ya se, un regaño o llamada de atención, porque esta primera aprovechaba sus ratos libres para charlar con James

Irina por su parte, disfrutaba sus ratos libres con el Joven Arthur, el chico de origen ingles era bastante agradable para ella y aunque le gustaba mucho pasar el rato junto a él, en su cabeza…no podía recordar aquel beso con Sahian

Los malos ratos, solo los pasaba  cuando llegaba a casa y haciendo todo lo posible del mundo, moviendo mar y aire, esquivaba a su Madre

Sadoc estaba impresionado con el cambio repentino de actitud que tuvo su nieta, de un día para otro olvido por completo a la pequeña Peli dorada, aunque una parte…se preguntaba si seria momentáneo o tal vez, para siempre…

Ayshane por su parte, no se rendiría fácilmente con Sahian. Aun sabiendo que los lobos tienen aquella maldición en el corazón, en su interior…tiene la esperanza de que Sahian, solamente se encuentra confundida

-¡Que cansancio! Ser una Jefa Lobina no es nada fácil…-murmuraba nuestra heroína, recostándose sobre la mesa del Restaurante de su abuelo. Este último, la había obligado a salir del sótano diciéndole que tenía algo importante que comentarle

-Y pensabas que ser Jefe era fácil, esto no es nada…tienes que prepararte, serás Jefa de TODOS los lobos-le respondió su abuelo, sentándose enfrente de ella

-Solicito un descanso-susurro pensando que solo ella la escucharía

-Lo tendrá, después de la Revolución-le sonrió con gracia Simeón, acercándose hasta ellos y entregándoles un par de platos llenos de carne. El de Sahian…era carne cruda  

 -Aun sigo sin entender ¿Cómo puedes comer eso?-le pregunto su abuelo asqueado, viendo como su nieta sin problemas se metía aquellos trozos a la boca

-Soy más Lobo que humana, mi dieta consiste en esto. Puedo vivir con comida humana, pero mi complemento primordial es la carne cruda. Sobre todo la esencia de la sangre…tiene cierto sabor especial cuando el animal, del que se obtuvo, estaba calmando. En pocas palabras, no se lo esperaba. Un Animal estresado no es delicioso-respondió con calma Sahian, siguiendo alimentándose de los diferente platillos que Simeón le extendía, como corazón, hígado, pierna, etc.…

-Que bueno ser más humano que Lobo-dijo aun asqueado Sadoc, aguantándose las ganas de vomitar pero sin perder el apetito

-Dime, Abuelo ¿Que era aquello importante que me tenias que decir?-le pregunto Sahian con calma, tomando un poco de la copa llena de sangre

-Oh cierto…Tienes que invitar a Ayshane al baile-respondió con calma Sadoc, dándole un mordisco a la hamburguesa en sus manos

-¡¿EH?!-casi se atraganta Sahian al escuchar eso, pero sin desperdiciar una gota de su copa

-Tienes que hacerlo, ella corre más peligro que cualquier humano en la ciudad-comentaba su Abuelo con seriedad, sin dejar de observar su comida

-Pero…pero…yo… ¿Por qué?-Sahian estaba en shock, ella no quería llegar con Ayshane al baile, no quería que Irina mal piense o siga creyendo que aun están juntas

-Ella fue tu novia, TODO el consejo piensa que aun es la “Alfa”, si se enteran que la dejaste sola, en la ciudad…puede que cosas horribles le sucedan-contesto Sadoc, viendo fijamente a su nieta a los ojos

-tienes razón, me siento mal al no pensarlo antes…se lo comentare. De seguro se pondrá terca, ya la conoces, pero aceptara-dijo más calmada Sahian, reaccionando ante las palabras de su abuelo 

-Esta emocionada por ver a Irina ¿Verdad?-le respondió con una leve sonrisa enternecido Sadoc, cambiando su gesto a uno más calmado

-Si…ya quiero darle el anillo-murmuro por lo bajo Sahian, sacando del bolsillo de su Sudadera la pequeña cajita con el regalo que su abuelo le había dado

-Le gustara, te lo aseguro-sonrió un poco emocionado Sadoc, el sabia con perfección cuantos años espero Irina para reencontrarse con Sahian, Galine se lo había contado.

-Esperemos que si…-finalizo de igual forma, Sahian, sin decir nada más. Comiendo con calma junto a su abuelo  

Después de la comida, Sahian tomo su moto y se encamino hacia casa de Ayshane, quería acabar con ello lo antes posible y sobre todo…quería asegurarse que sus intenciones no sean mal entendidas, no le gustaría ilusionar a Ayshane

Cuando estuvo enfrente de la casa, toco varias veces el timbre y espero pacientemente a que la dueña de la casa saliera

-¡Sahian! Hija mía ¿Cómo estás? ¿Dónde has estado? ¿Qué has estado haciendo? ¿Viniste por mi hija? ¿Volverás con ella? ¿Serás mi nuera? ¿Le pedirás matrimonio?-eran demasiadas las preguntas, con las cuales, la mama de su ex novia le bombardeaba

-Buenas tardes Señora Johnson…esto…yo…eh venido solamente para charlar con Ayshane-fue la respuesta un tanto incomoda de Sahian

-Oh bueno…entiendo. Espera un momento por favor, la llamare ¿Quieres pasar?-le ofreció con una débil sonrisa la mama de Ayshane, algo decepcionada que su ex nuera no quisiera nada mas con su hija

-No se preocupe, la esperare aquí-dijo con amabilidad Sahian, sentándose en la banca fuera de la casa de Ayshane. En donde antes…solían sentarse a charlar por horas

-…-La señora no dijo nada más, cerro con suavidad la puerta, para correr con velocidad hacia el cuarto de su hija

-¡Ayshane! Alístate, ponte guapa, cepíllate los dientes…-empezó a gritar en susurro la mama de Ayshane, entrando abruptamente a la habitación de su hija. La cual, en esos momentos, se encontraba despeinada y en pijama

-¿eh? ¿Por qué?-pregunto confundida Ayshane, quitándose las gafas de descanso, que ella solía utilizar en casa

-Sahian esta abajo, vino a charlar contigo. Así que… ¡Arréglate hija! La quiero de Nuera-ordeno la mama de Ayshane con una sonrisa maliciosa, casi sacando la ropa de su hija, escogiéndole un conjunto “atractivo” según su punto de vista

-Mama…te amo, pero esa combinación arcoíris no queda bien-rio Ayshane, soltándose el cabello y escogiendo ella misma su ropa

-¿No los jóvenes homosexuales usan ropa de arcoíris?-pregunto con inocencia su Madre, viendo con detenimiento a su hija

-…-la cual, negó la cabeza divertida, aguantándose las ganas de reírse

-Bien…preparare galletas y jugó mejor, tu apresúrate. No la querrás dejar esperando-anuncio la Madre de Ayshane, saliendo de la habitación con una sonrisa emocionada, ante la idea, de que su hija y Sahian volvieran

-Vaya…todos desearían una Madre como la mía-Rio levemente Ayshane y termino de alistarse, una parte de ella, admitía, que se sentía nerviosa por ver nuevamente a Set

Al acabar, salió de su casa y con detenimiento, observo a su ex novia de espaldas

-Que guapa…-fue lo primero que pensó, al ver su fuerte espalda, sus brazos tonificados, su torso perfecto y el culo que se le formaba con esos jeans ajustados

-Hola Ayshane ¿Cómo te encuentras?-le pregunto Sahian, con una leven sonrisa calmada, girando su cuerpo hacia ella

-¿eh? ¿Yo? ¡Ah si! Me encuentro mejor ahora, Sahian ¿y tú?-respondió Ayshane, fingiendo una sonrisa tranquila

-no tienes porque fingir, Ayshane. Puedo saber con exactitud cuándo mientes y cuando no-dio una leve risita Sahian, viendo fijamente a su ex novia a los ojos. Los cuales, de un momento a otro, pasaron de gris a rubí

-vaya ¿Puedes controlar el color de tus ojos?-pregunto sorprendida Ayshane, ya que, anteriormente Sahian no podía controlar sus impulsos

-Eh recuperado completamente mis recuerdos, pero aun hay cosas que todavía no logro dominar. La inmortalidad, por ejemplo…es algo que aun no esta a mi alcance-respondió con tranquilidad Sahian

-¡¿Te volverás inmortal?!-casi grito Ayshane en shock ante la noticia

-Ese es un tema que no tiene importancia en estos momentos. Tengo que hablar contigo de otro tema, en el cual, estas involucrada-dijo tranquilamente Sahian, ignorando el shock de Ayshane

-dime-pidió Ayshane, un poco triste por el hecho de que Sahian ya no le contara sus asuntos de lobos como antes

-Se llevara a cabo un baile, en un par de días, el fin de semana para ser exactos. En el que me presentare como Tala y necesito que tú vengas porque…-Sahian no pudo terminar de hablar cuando Ayshane decidió interrumpirla

-¡¿COMO TU PAREJA?!-alzo la voz emocionada Ayshane, tapándosela de inmediato, apenada ante lo que acababa de hacer

-Yo…bueno…no exactamente. Lo que pasa, es que los lobos que nos atacaron aquella vez, en la escuela, son lobos del Consejo. Ellos aun piensan que tú eres mi novia y no me gustaría que te ocurriera algo en nuestra ausencia, por eso, prefiero que vengas conmigo al baile-dijo Sahian, algo apenada ante el mal entendido. Podía sentir como esto, de alguna forma, hería a Ayshane

-Entiendo…ir como amigas, nada más. Lo capto-sonrió forzosamente Ayshane, fingiendo una sonrisa, aguantándose las ganas de llorar

-Ayshane…yo…aun te quiero, pero todo ese cariño es fraternal. Ya no puedo verte como mi Pareja, por eso mismo, me disculpo si te eh hecho confundir con mis acciones-dijo con sinceridad Sahian, acercándose hasta su amiga, tomando sus manos entre las suyas

-Lo entiendo, en verdad, Sahian. Solo tienes que…darme tiempo, por favor-rogo Ayshane, agachando la cabeza y soltándose lentamente del agarre de su ex novia. Tocarla…solo le hacía doler más el corazón

-Bien, entonces…te recogeremos a las 7pm el sábado-finalizo con una ligera sonrisa Sahian, antes de darse la vuelta y encaminarse hacia su moto

-…-nuevamente, Ayshane no dijo nada, pero con tortura en su pecho, observo al amor de su vida irse sin siquiera girarla a ver por última vez, como días anteriores, solía hacer

Pov. Irina

Hace varios días que no eh vuelto a saber nada de Sahian, le pedí a Leonor y Alexia que cualquier novedad sobre la manada del Sur, sea exclusivamente para oídos de mi Abuela

-El vestido le queda perfecto, señorita Irina-me sonreía mi principal modista, dándole los últimos ajustes al vestido que portaría esta noche

-Muchas gracias, si gustas…ya puedes retirarte a casa-le respondí con una leve sonrisa

-Muchas gracias a usted, Señorita-con entusiasmo se levanto y cruzo por el marco de la muerta, ignorando rotundamente la presencia de mi Madre

-Hoy en día ya no puedes conseguir buena servidumbre-murmuro mi Madre con molestia, observando como mi Modista se iba

-Les eh ordenado no tenerte respeto alguno, Madre-dije con indiferencia, procediendo a desvestirme y ponerme una bata

-sabia que no podían ser tan groseras por voluntad propia-respondió con seriedad, fulminándome con la mirada

-¿Necesitas algo?-pregunte desinteresada, guardando el hermoso vestido que llevaría esta noche, en el baile

-Nada en lo que me puedas ayudar, hija. Solamente caminaba por los pasillos y me pregunte si estarías lista para la fiesta de hoy, donde serás coronada como la zorra de Tala-respondió con calma mi Madre, caminando hacia mí

-Lamento decepcionarte, Madre. Pero no puedo tomar un papel como el tuyo, hacia Yerik-dije con tranquilidad, no le permitiría verme perder los estribos

-Mi querida hija, ¿Acaso no sabes la historia sobre Tala y Elu? Elu era tan solo una joven humana, ingenua y débil, que se dejo llevar por un Monstruo demasiado astuto…Aun si es la “Alfa”, nunca dejara de ser en el fondo una Humana débil-narro con tono malicioso, mientras con suavidad acariciaba mi mejilla derecha

-Madre, usted solo es una loba celosa de LA humana que se enamoro de Tala y decidió pasar su vida junto a él. Le molesta que alguien como ella…haya hecho las cosas bien, se enamoro y formo una familia, en cambio usted…Hoy en día, sigo sin saber quién es mi Padre-respondí con seriedad, tomando la mano de mi Madre y alejándola de mi

-…-ella no me respondió nada, pero de un manotazo se soltó de mi agarre y desvió la mirada avergonzada, y muy furiosa

-Tengo cosas que hacer, Madre. Por favor, sal de mi habitación- pedí con calma. Sabia con perfección que este era un tema, del cual, no debía hablar. Mi Abuela me había dicho de niña, que el hombre que ayudo a engendrarme era un tipo malo y no podía dudar de ello…ya que, si él fuera un hombre bueno, no me habría abandonado con la lunática de mi Madre o al menos, habría vuelto por mí

-Si supieras quien es tu Padre…-murmuro, con la intención de finalizar la charla pero eso no significaba que me dejara tranquila, aun si mi Padre era un hombre maligno…no me quitaba la curiosidad de querer conocerlo y saber del porque nunca vino hacia mí.

Crecí sin alguna pista sobre él, o alguna fotografía. Cuando le preguntaba a los empleados de mi Abuela, simplemente me esquivaban entre nerviosos y asustados por la reacción de mi Abuela, la cual, me ignoraba rotundamente la pregunta y reprendía diciendo:

-Eres una Aldrich, debes ser fuerte

Nunca debes llorar por personas como el-

-supongo que tendré que olvidarlo por el momento…-susurre para mí misma, intentando pensar en otra cosa

-Irina, te he estado buscando-no me di cuenta cuando mi Abuela llego hacia mi habitación

-¿Ha pasado algo? Abuela-pregunte con calma, fingiendo que nada pasaba por mi cabeza

-No realmente…solamente quería avisar que el joven Arthur pasara por ti en unas horas, el te llevara al baile-me respondió con calma, acercándose hasta mi

-¡Abuela! ¡¿Por qué él me llevara?! ¡El…!-no comprendía las intenciones de mi abuela, era consciente que ella tenía la esperanza de que me enamorara de Arthur

-Es tu novio, Irina. Tiene que empezar a tomar su papel enserio, en un futuro cuando se casen no podrás ocultarle tu origen lobuno-me interrumpió seriamente

-No creo que él esté listo para saberlo, cuando sepa lo que en realidad somos se asustara, es mejor no arriesgarnos-digo de igual forma, buscando una buena excusa

-Tarde o temprano pasara, no tenemos tiempo. Mejor ahora que nunca-dijo con indiferencia mi Abuela, empezando a caminar hacia la salida, dejándome descontenta y con una preocupación mas en la cabeza

-Supongo que no tengo más opción-pienso para mí misma, resignándome a cualquier cambio, de todos modos estaba acostumbrada a seguir las órdenes de mi Abuela desde niña. Tampoco era como si Sahian me estuviera esperando, ella estará demasiado ocupada complaciendo a su pareja de baile…Ayshane

Pov. Leonor

Desde aquel día, de mi fatídico reencuentro con Galván y mi discusión con Alexia…ella y yo, no nos hemos hablado. Más que para discutir sobre la Revolución o ponernos al tanto de noticias sobre Froilán y Simeón. Esto empezaba a desesperarme…no sabía si ella sería mi pareja esta noche o me ignoraría como siempre

En los bailes anteriores, cada una iba por su cuenta, pero siempre sin pareja, al menos…yo nunca iba con nadie, ya que, Alexia era muy celosa y si alguien me invitaba, ella solía ahuyentarlo o regañarme por mi “falta” de profesionalismo

-Supongo que será un desperdicio usar un vestido tan lindo…-murmuro para mí misma, viéndome enfrente del espejo

-¿Por qué dices eso?-escucho su voz y siento toda mi piel erizarse como gallina, mis nervios se ponen de punta, me hace sentir tan vulnerable

-Alexia…-murmuro por lo bajito, girando hacia ella. Observando con detenimiento, su rostro indiferente y la manzana que sostenía sobre su mano, comiéndola con jodida lentitud

-Dime, ¿Por qué será un desperdicio usar un vestido tan…Sexy esta noche?-me pregunta, dejando su manzana de lado. Acercándose a mí, poniendo sus manos sobre mis hombros, obligando a devolver mi vista hacia el espejo

-Porque…no tengo pareja esta noche-respondo en un hilo de voz, al sentir como sus manos viajaron hacia la parte trasera de mi vestido, sostuvo el cierre y fue bajándolo con lentitud, ocasionando que el vestido cayera

-¿Eso qué? Siempre puedo quitártelo al final de la noche…como ahora-susurro sobre mi oído, pasando sus manos a mi abdomen, acariciándolo

-No…por favor…-decía débilmente, pero ella dirigió sus labios a mi cuello. Era consciente que no era Amor…no era nada más que deseo y una búsqueda de satisfacción…Alexia buscaba con quien saciar sus mas íntimos deseos carnales y yo era el títere perfecto para ello

-Sabes que…-no pudo terminar de hablar, por primera vez en todos estos años juntas, eh decidido actuar

-¡Suéltame!-alce la voz con molestia, separándome de golpe de su agarre, tratando de taparme con mis manos, la desnudez de mi cuerpo 

-¿Qué sucede contigo? Normalmente no actúas así- respondió con molestia, poniendo sus manos sobre su cadera y viéndome fijamente con el ceño fruncido

-No quiero hacerlo contigo, así no. No dejare que me vuelvas a tocar, al menos que…-no podía decirlo, no quería arriesgarme a ser rechazada de nuevo

-¿Qué…?-pregunto, invitándome a seguir

-Al menos que me lleves esta noche como tu pareja-sentencie firmemente, sacando seguridad de quien sabe donde

-…-ella no respondió nada, solamente abrió los ojos con sorpresa y retrocedió un par pasos

-Lo digo enserio, Alexia. No habrá una mejor pareja para ti esta noche, si no soy yo. Vayamos juntas y…te recompensare muy bien al volver-le insistí con una tímida sonrisa, tenía mis mejillas teñidas de rojo

-¿Ir contigo? ¿Solamente por un acoston? Olvídalo, Leonor. Bien podría ir con cualquiera y darme un mejor trato que…-no le permití continuar

¡PAFFF!

-Vete inmediatamente-ordene entre furiosa y dolida, me sentía avergonzada por haber creído tan solo un momento que Alexia cambiaria por mí. En estos momentos, sostenía su mejilla rojiza, culpa de la cachetada que me atreví a darle, mi paciencia se me había agotado

-…-ella no respondió nada, pero el tono rojizo de su rostro decía mucho…estaba furiosa e indignada, no la culpaba, ni su Padre se había atrevido a levantarle la mano

-Si esta noche voy con alguien más, no te atrevas a interponerte. Bien lo has dicho, puedes acostarte con cualquiera aparte de mi-solté con molestia, tomando mi bata y saliendo de la habitación, no podía soportar permanecer un segundo más cerca de ella y conociéndola…no se iría tan fácilmente

Corrí hacia el jardín, estaba tan avergonzaba y arrepentida de haber golpeado a Alexia, pero no podía soportarlo ni un minuto más…Me escondí entre los arbustos y deje mis lagrimas salir con libertad, esperaba que la señorita Irina no se diera cuenta, no quería que nadie me viera

-Leonor…-escuche una voz y de inmediato alce la mirada asustada

-James…-murmure sorprendida, era la última persona que quería ver en estos momentos

-Hola Bonita ¿Qué sucede? ¿Por qué estas llorando?-me pregunto con una leve sonrisa, acercándose hasta mi

-Dios…no me mires, James. Debo verme horrible en estos momentos-conteste avergonzada, ocultando mi rostro entre mis manos

-Vamos, no digas eso. Tu eres hermosa de cualquier manera-me contesto riéndose, tomando mis manos entre las suyas

-…-yo no conteste, seguía triste por Alexia y avergonzada por el

-Debes cuidar mejor estos bellos pies, no queremos que te cortes con algo-me reprendía, tomando con una mano mi pie izquierdo, alzándolo lo suficiente para dejar un pequeño beso sobre este

-¡¡ ¿Qué…Que estás haciendo?!!-le pregunte, tratando de alejar mi pie de el

-En algunas culturas, un beso en el pie…es señal de respeto, yo lo hago con el fin de jurarte devoción-me respondió con una sonrisa

-…-El sonrojo que tengo en estos momentos no puede ser mayor

-Ahora ¿Me dirás por que estas llorando?-volvió a interrogar

-¿Nadie te enseño a NO ser chismoso?-le respondí con el ceño levemente fruncido, tratando de evitar el tema

-Si, mi Padre, pero…si veo a una señorita tan bella como tú, llorando ¿Cómo me pides que no me entrometa? Es casi imposible-seguía calmado y yo no entendía como podría estarlo

-Eres un coqueto de primera-murmuro entre frustrada y divertida

-Gracias, ahora dime…Señorita Leonor ¿Cuál es el motivo de tus lagrimas?-insistió, sentándose a mi lado

-No tengo pareja para el baile de esta noche-Mentí, tan poco me importaba ir acompañada, pero por obvias razones no podía contarle sobre mi inexistente relación con Alexia

-Oh…creo que si llegue a escuchar sobre ello, la Señorita Irina y Galine han estado algo estresadas por ello. Dime ¿Cómo es posible que no tengas pareja?-pregunta sorprendido

-Supongo que nadie quiso invitarme…-respondo con tristeza, recordando los bailes anteriores, donde esperaba que Alexia me invitara, pero nunca paso

-¿Quieres ir al baile conmigo?-dijo de repente, abrí los ojos con sorpresa y Salí de mi pensamientos

-¿Qué…Que estás diciendo?-pregunte desconcertada, viendo la seriedad de su mirada

-Lo que escuchas, hablo muy enserio, Leonor. Soy un simple jardinero, no tengo mucho dinero, tampoco un gran auto…pero si tú me lo permites, déjame ser tu pareja esta noche. Me comportare, te lo prometo, igual no sé bailar tan mal, puedo fingir ser un niño rico, solo por ti-decía con una gran sonrisa, secando el rastro de mis lagrimas con sus manos

-James, no quiero que finjas ser de la alta sociedad por mí, tampoco me interesa si tienes un auto de último modelo o si sabes bailar excelente-digo con seriedad, no me gusta la manera en cómo se menosprecia, me gusta más cuando se comporta narcisista

-¿Eso quiere decir que…iras al baile conmigo?-pregunto con una enorme sonrisa, emocionado. Como si se tratara de un niño pequeño, me daba mucha ternura

-Pasa por mí a las 7, tenemos que ser puntuales-termino cediendo con una sonrisa, no seria para nada desagradable ir con el

-¡Bien! Nos la pasaremos muy bien, te lo aseguro-rio, levantándose de golpe y de paso, tomándome de la cintura, obligándome a levantar

-Vaya…tienes mucha fuerza-murmuro sorprendida 

-Perdona, no era mi intención ser tan brusco-se disculpa de inmediato, avergonzándose al instante

-…-yo solo sonrió, enternecida y con cariño, acaricio su mejilla. Era tan lindo, no podía negarlo, solamente esperaba poder mantener oculto nuestro secreto lobuno lejos de el

Pov. Sahian  

Me había dejado el cabello hasta la cintura, por Ayshane, pero me era un estorbo, cuando entrenaba o corría, me daba calor y era difícil de manejar, además…Tala originalmente tenía su cabello largo para ser hombre pero tampoco exageraba

-Supongo que hasta aquí esta bien…-murmuro enfrente del espejo, observándome con detenimiento. No estaba segura si lo había hecho bien, pero no se veía tan mal, según yo

-Sahian, Hija ¿Dónde…? ¡¿Qué has hecho?!-Grito mi abuelo, al entrar, sin tocar, a mi habitación

-Abuelo, no grites tanto, por favor-le pedí con calma, escuchando los pasos de mis amigos, que seguramente habrán escuchando el grito de mi abuelo

-¡¿Qué sucede?!-gritaron todos al mismo tiempo, incluso Marian ¿Cómo demonios habían llegado tan rápido?

-Esta…ella…loca…su…su…-mi abuelo no salía de su trance y apuntaba fijamente hacia mi cabeza, la cual, tenía mucho menos cabello que días anteriores

-No es para tanto-murmuro con molestia, observando los mechones de cabello en el suelo https://images.ctfassets.net/g8qtv9gzg47d/11k69r7g2uyIyESCQiEgEC/e2c1a73601afdf180ebe144fd3b63d17/erika-linder-5.jpg?fl=progressive&fm=jpg&q=80

-Hija mía…No te queda mal pero ¿Por qué lo has hecho?-me pregunto con preocupación Marian, acercándose hasta mi

-¡SAHIAN CERRO UN CICLO!-empezó a reírse fuertemente Frank, maldito sea

-Solamente quise cortármelo, sentía que estorbaba-respondí con simpleza, desviando la mirada

-Te veras guapa esta noche-me sonrió mi Nana

-Jefe, reaccione por favor-los demás chicos rodearon a mi Abuelo, el cual, seguía en blanco

-Tu…Demonios Sahian, mínimo deberías avisarnos, deja de darme sorpresas-ordeno con seriedad mi abuelo, volviendo en si

-Bien-respondí cortante, aguantándome mis ganas de reír, pero era casi imposible, su cara en shock era bastante divertida

-Te vez muy bien, Sahian-me halago con una sonrisa Said

-Gracias, ahora chicos…vayan a prepararse, en unas hora tenemos que irnos-ordene con tranquilidad, observando de reojo la hora. Faltaba poco para ver a mi preciosa Irina, me sentía ansioso ¿Qué tipo de vestido llevara esta noche?

Pov. Arabella

Tanto los chicos como Sahian se habían alistado, Sahian había decidido peinarse poniendo todo su cabello para atrás, le daba un aspecto masculino pero no le quedaba para nada mal

-Sigo sin comprender porque tenemos que utilizar estas ropas…-murmuro un poco incomoda, observándose al espejo. Sentía que para ella, era demasiado https://i.pinimg.com/originals/75/85/47/7585478ce3dc19218217be7d6f3b93c4.jpg

-Es parte de la vestimenta de esta noche, Sahian. No te quejes y sonríe-le ordeno su abuelo con seriedad, pero en el fondo…estaba igual en de acuerdo con su nieta

-Bien, entiendo. Todo con ver a Irina feliz-rio Sahian, acomodándose su camisa en frente del espejo

-Pensaba que ese sería mi trabajo…-escucharon una voz murmurar y de inmediato voltearon. Ambos se impresionaron con la imagen enfrente de ellos

-Ayshane, te vez hermosa-halago con una sonrisa el señor Sadoc, caminando hacia la ex novia de su nieta, invitándola a acercarse

-Muchas gracias, Señor Sadoc. Dime Sahian ¿Cómo me veo?-le pregunto con emoción la chica, mirando fijamente a la joven lobina

-Te vez muy bien, Ayshane-le respondió con una leve sonrisa Sahian, en el fondo…ella solamente pensaba en cómo se vería Irina esa noche

-Gracias…-dijo débilmente Ayshane, agachando un poco la cabeza dolía, ante el poco entusiasmo de Sahian al verla. Ella había estado alistándose por horas, solamente para impresionarla https://cdn.vogue.es/uploads/images/thumbs/201444/gala_lacma_2014_801923805_800x.jpg

-Chicos, es hora de irnos-anuncio Marian, interrumpiéndolos, entrando hacia la habitación donde estaban los tres reunidos

-Bien, es mejor apresurarnos si no queremos llegar tarde-dijo Sahian con neutralidad, encaminándose con entusiasmo hacia los vehículos, en donde se encontraban los chicos esperándolos

-¿Vamos?-ofreció caballerosamente su brazo el señor Sadoc, hacia la amiga de su nieta

-Si, vamos-respondió con amabilidad esta, ocultando su tristeza de él, no quería que este le tuviera pena…pero eso era algo que muy difícilmente podría ocultar

Mientras tanto, en otro lado…

Miles de clanes internacionales se encontraban en el salón de baile, el cual, era el triplemente más grande que la vez anterior, en donde celebraron el cumpleaños de Sahian y su presentación como la futura jefa del lado sur.

Sirhan, su esposa, su madre y su hija, Alika, saludaban a todos, entablando pequeñas charlas en donde solían comentar, con discreción, su relación con Sahian, con el fin de hacerla quedar bien. Ya que muchos dudaban de su papel como Jefa en la Revolución, poniendo de excusa su corta edad y la poca experiencia que tenía como loba

Sahian no tardo en llegar junto a sus amigos, Abuelo, Marian y Bobby. Muchas personas la observaban fijamente en el momento en que bajo del auto, la miraban con curiosidad y se preguntaban si en realidad ella era Tala

-¿Por qué todos me observan?-le pregunto en susurro a Froilán, quien se encontraba a su lado, sosteniendo el brazo de Simeón

-Todos ellos se preguntan quién es usted-le respondió de igual forma Froilán, dándoles leves sonrisas a las personas que conocía

-Entiendo…-murmuro un poco insegura Sahian, intentando caminar con calma hacia su mesa, no le gustaba mucho ser observaba

-¡ES ELLA! ¡MIRENLA!-empezó a gritar uno de ellos, casi corriendo junto un par de personas hacia ella

-Oigan…-Sahian no supo que decir, cuando los tuvo enfrente de ella

-¿Eres tú? ¿Tala?-pregunto con curiosidad, el primero

-Esto…yo…-Sahian no sabía que responder, buscaba con la mirada ayuda, pero todos las miraban esperando que diga algo

-Chicos, por favor, no la molesten-por suerte, Galine se había acercado hasta ellos

-¡Señora Galine! Es tan agradable volver a verla-dijo con una enorme sonrisa, Sahian. Acercándose hasta ella y tomar la palma de su mano, para depositar un beso en esta

-Pequeña Cachorra…veo que has aprendido modales-respondió con una leve sonrisa Galine, viendo con cariño a la chica

-Usted me los enseño-rio Sahian, apartándose un poco de ella

-Tan guapa como siempre, Galine-halago esta vez Sadoc, acercándose hasta ellos

-Igual te vez bien, Sadoc. Veo que seguiste mi consejo y vestiste bien a tus lobitos-rio Galine, observando a los jóvenes lobos del Sur, escuchando desde la distancia la charla sin la intención de entrometerse

-Bueno…si no lo hacía, de seguro no estaría hablando tan calmadamente contigo-contesto divertido Sadoc, ocasionando risas de Galine, pues ella misma sabia como era

-…-Sahian escuchaba esto con atención, pero al mismo tiempo sus orejas y ojos estaban en una busca continua de su musa…Irina Aldrich

-Ara…veo que tu lobita esta moviendo la cola muy deprisa, ¿A quién buscas Cachorra? Si tu novia esta a tu costado-pregunto confundida Galine, viendo fijamente a Sahian

-Esto…yo…bueno…-Sahian se sonrojo y no sabía cómo decir exactamente que estaba buscando a su nieta, no quería sonar descortés

-Sahian y yo…solamente somos amigas-se adelanto a decir Ayshane, acercándose hasta el trió

-…-Tanto Sahian como Sadoc abrieron los ojos sorprendidos, no se esperaban esa iniciativa por parte de ella

-Ya veo, siempre tan valiente humana-murmuro igual de sorprendida, Galine. Esto la confundía al mismo tiempo que la avergonzaba, ella insistiendo en que su nieta saliera con el joven Arthur ¿Qué haría ahora?

-Sahian, que bueno que has llegado, hay muchas personas que quieren conocerte…-los interrumpió Alika, quien se acerco entusiasmada, tomando a su amiga del brazo y casi arrastrándola hacia un grupo de personas que esperaban curiosos por la joven Tala

En otro lado del Salón, Froilán y Simeón, se habían adelantando en busca de su par de amigas, estaban curiosos por saber si Leonor lo había logrado esta vez, ellos conocían con perfección los intentos fallidos de su amiga por ser la pareja de Alexia durante los bailes

-Vaya… ¿Quién lo diría? Alexia esta sola-dijo divertido Froilán, siendo quien primero se acerque a su amiga

-Oh por Dios…ni lo menciones-murmuro mal humorada Alexia, viéndolos con desaprobación, al caminar tan tranquilos

-Dinos, Alexia ¿Dónde se encuentra Leonor?-pregunto curioso Simeón, sin darse cuenta del mal humor de su amiga

-Por ahí, jugando a la casita-respondió con molestia Alexia, apuntando con su dedo a cierta parte del salón de Baile, donde se encontraba una sonriente Leonor junto un chico, desconocido para ellos

-¡Vaya! ¿Quién es él? Leonor no tiene mal gusto-dijo sorprendido Froilán, tratando de provocar más celos en Alexia, ya que el tenia la esperanza de que en algún momento, la cabeza dura de su amiga rompa su orgullo de una vez por todas

-¡OYE!-Le regaño con molestia, Simeón celoso

-Amor, no lo decía con esa intención-rio divertido Froilán, al notar el mal entendido que había causado

-Esta bien…-accedió muy poco convencido Simeón, haciendo pucheros

-Te amo tanto-le sonrió con cariño, Froilán. Antes de proceder a besarlo

-Que asco…-murmuro Alexia, desviando la mirada hacia Leonor y su actual pareja de baile. Ellos a diferencia de Alexia, se la estaban pasando bien…Se sonreían y decían halagos el uno al otro, James se portaba muy caballeroso con Leonor y la trataba con respeto, de vez en cuando le susurraba uno que otro piropo en el oído. Esta solamente se reía, dejándose llevar por el cariño del chico…

-Solo esta ardida, porque ese chico…se comerá lo que debió ser tuyo esta noche-sonrió con fingida inocencia Froilán, sin querer parar de su provocación

-En eso tiene razón Froilán, soy gay pero admito que nuestra amiga es demasiado Hermosa como para no ser aprovechada-siguió Simeón, notando como Alexia apretaba sus puños, llena de rabia y envidia

-Conozco a Leonor mejor que nadie, si yo lo deseara…me bastarían solo dos palabras para tenerla rendida a mis pies-respondió llena de coraje Alexia, sonriendo con arrogancia

-Si, pero son las únicas dos palabras que no puedes pronunciar-le recordó con seriedad su amigo

-…-Alexia no dijo nada ante ello, el tenia mucha razón y no podía negarlo

-Bueno, tendrás que soportar mientras tanto observar a Leonor con aquel chico-dijo con simpleza Simeón, jalando a Froilán para llevarlo lejos, no le apetecía permanecer durante más tiempo en el triangulo amoroso de sus amigas, el cual, estaba demasiado torcido

-Te vez hermosa…-susurraba por quinta vez James, en el oído de Leonor, sonriéndole de manera coqueta http://pm1.narvii.com/6400/7e6a97029f1a7a7de7ba307f16a7bcef8dc70491_00.jpg

-Lo has repetido miles de veces, James-le regañaba divertida Leonor, sonriéndole al chico con cariño

-No puedo dejar de repetirlo, Leo. Me siento muy feliz de estar contigo-respondió con calma James, siendo sincero

-¿Leo?-pregunto sorprendida Leonor, nadie la había llamado así antes

-Si, es mi manera de llamarte. Aunque si te molesta…no te llamo así-dijo rápidamente James, avergonzado

-Oh…no, claro no, llámame como tú quieras-le siguió el juego Leonor, contenta de haber aceptado al chico como su pareja esa noche. Ambos se estaban divirtiendo y eso era lo único que importaba

-Hemos llegado, Señores-en otro lado, un mayordomo abría la puerta de una gigantesca camioneta todo terreno, en la cual, viajaban dos personas que en la sociedad eran mejor conocido como “Herederos” de grandes empresas

-Vaya…cuando me dijiste que sería lejos, no imaginaba que tanto-decía con una leve sonrisa Arthur, ayudando a su novia a bajar del auto

-¿Te molesta la distancia?-pregunto sin mucho interés Irina, en su cabeza solo podía pensar en Sahian y como seria su reencuentro con ella, después de aquel beso

-Mientras no sea entre tú y yo…todo excelente-le sonrió el chico con picardía

-…-ocasionado que Irina no respondiera, pero se sonrojara un poco incomoda

-Vamos, Señorita. Es mejor que demos nuestra gran entrada-siguió el chico, tomando a su pareja y guiándola hasta el interior del salón https://data.whicdn.com/images/57283125/large.jpg  

Irina entro junto Arthur, ganando de inmediato mirada de todos, no solamente por el hecho de ser Elu, sino por llegar con un Humano de acompañante, además de lucir un hermoso vestido blanco escotado y que remarcaba con detalle su figura https://i.pinimg.com/originals/f1/d9/7a/f1d97ab02f4532c3e42ff614f282e0ba.jpg

-Es ella…solo mírenla…es hermosa…se ve tan profesional…-miles de murmullos resonaban en el salón, ganado un poco de la atención de Irina, la cual, caminaba fingiendo calma, mientras que en fondo se moría por encontrar a su Abuela

-Me siento afortunado de caminar con una chica tan linda como tú, Señorita Irina-halago Arthur, pegando con más intensidad el cuerpo de Irina junto al suyo

-Gracias, Arthur. Me siento halagada-mintió Irina, aguantando las ganas de separar al chico de ella, lo prefería cuando era solamente era su amiga y se abstenía a mantener mucho tacto con ella

-Mi abuelo y yo…-Sahian en otro lado se encontraba charlando con un grupo de personas, junto Alika y Sirhan, pero en el momento que sintió la presencia de Irina entrar en el salón, una corriente eléctrica viajo por su columna vertebral y no le permitió seguir charlando

-Tala ¿Te encuentras bien?-le pregunto con preocupación Sirhan, extrañado por la reacción de la chica

-Esto…si, por favor discúlpenme, tengo algo que hacer-dijo con rapidez Sahian, con una sonrisa ansiosa, sintiendo la enorme de necesidad de correr hacia su amada

-…-Varios se quedaron extrañados ante esto, pero Alika sonreía con complicidad, emocionada por el hecho de ver a su mejor amiga y su jefa por fin juntas. Aunque ella desconocía el pequeño detalle, del compromiso de Irina y Arthur

Mientras Sahian corría en su búsqueda hacia Irina, esta inventaba excusas para alejarse de Arthur, fingiendo tener sed y enviándolo por agua, la verdad, es que estaba harta del constante acoso del chico. No había encontrado a su Abuela, o algún otro conocido, como Alika y el sonreír todo el tiempo le cansaba…sentía la necesidad de charlar con alguien “normal” con quien no tuviera la necesidad de fingir

-Irina…-murmuro Sahian con alivio, en el momento en que la encontró. Tan solo estaba a unos metros de ella. Estaba agitada por la carrera que había hecho en todo el lugar, pero a pesar de tener su corazón agitado, sentía una inmensa tranquilidad en su interior

-Sahian…-murmuro sorprendida Irina, escuchando el murmullo de Sahian, volteando con lentitud, topándose con los ojos mas lindos que haya podido ver en su vida. Estaba impresionada por su vestimenta, pero al mismo tiempo…le gustaba

-Te vez…hermosísima, más que eso, bellísima te queda corto-dijo con emoción Sahian, caminando directo hacia ella, con una enorme sonrisa, aguantándose las ganas de abrazarla

-y tú te vez…muy guapa ¿Qué le paso a tu cabello?-pregunto impresionada Irina, tomando entre sus manos, unos de los mechones rebeldes que sobresalían sobre la cabeza de Sahian

-Me lo corte, tan solo un poco ¿No te gusta?-respondió apenada Sahian, desviando tan solo un poco la mirada

-Te queda muy bien, me recuerda a los días en que éramos unas niñas-dijo con una risita Irina, recordando que ese día lo primero que pensó de Sahian es que se trataba de un niño

-Lo había olvidado, pero tienes mucha razón-rio de igual forma Sahian

-…-Irina no volvió a decir nada, pero sin darse cuenta, se había quedado observando a Sahian fijamente a los ojos, con una mirada llena de cariño

-No sabe cuánto te extrañe, Irina. Hay tantas cosas de la cuales…-antes que pudiera terminar de hablar, una voz en el micrófono las tuvo que interrumpir

 -Demos la Bienvenida por favor, a nuestras Señoras y futuras de la Revolución…Sahian Zaragoza del Sur e Irina Aldrich del norte-anuncio con una enorme sonrisa Galine, la cual, estaba acompañada de Sadoc, quien se encontraba neutro a su lado. Varios aplausos empezaron a resonar en el salón, causando que ambas giraran y les dieran sonrisas en agradecimiento

-Suban por favor-les pidió Galine, en el fondo se sentía mal por haber interrumpido su charla

-…-sin decir nada, ambas obedecieron. Caminando una a lado de la otra, sin saber exactamente qué era lo que iba a pasar

Cuando llegaron hasta lo alto del escenario, Alika y Sirhan se acercaron a ellas, con un par de objetos entre manos, de los cuales, ambas chicas estaban confundidas por ello

-Agachen un poco la cabeza, por favor-les pidió con calma Alika

-Esta bien-aunque no muy convencida, pero Sahian fue la primera que lo hizo. Cuando sintió como algo era depositado encima de su cabeza, de inmediato alzo la mirada confundida pero con un pequeño espejo que le entrego Sirhan, no pudo evitar sonreír con emoción, se trataba de una corona de oro… https://fotografias.antena3.com/clipping/cmsimages02/2017/08/30/FEA45C4B-641C-45F3-820A-25A199D08FDD/58.jpg

-...-Irina de igual forma sonrió, cuando vio la tiara de flores de plata que se le había entregado. Ninguna de las dos esperaba algo así https://i.pinimg.com/originals/d7/fa/7a/d7fa7aad0c75d8d00c071c251f316c6f.jpg

-¡SALUDEN A SUS SEÑORAS!-alzo la voz con firmeza Sirhan, poniéndose enfrente de las chicas. De inmediato todos las personas, incluyendo a James y Arthur, agacharon sus cabezas en signo de respeto, alguno incluso se hincaron con devoción

-…-las chicas se miraron por un momento entre ellas y sonriendo asintieron con la cabeza, ordenándoles a todos levantarse

-¡Larga vida a Irina del Norte! ¡Larga vida a Sahian del Sur!-empezaron a ovacionar cientos de personas, alzando las voz con alegría y aplaudiendo emocionados

-Sahian…di algo-le murmuro Alika a la joven lobina, la cual, desvió la mirada un poco nerviosa

-Tú puedes, Copito-le animo con cariño Irina, aprovechando el momento y tomando la mano de Sahian en signo de apoyo

-Está bien (Le respondió Sahian, apretando su mano con fuerza y caminando con ella hacia el frente)

Es un gusto conocerlos a todos, mi nombre es Sahian Zaragoza. Soy la próxima jefa de la manada del Sur, aunque…en realidad, soy la reencarnación de Tala y seré quienes los lideren hasta la Revolución del próximo año, en donde los lobos al fin podremos salir a la luz.

Entiendo que muchos en este momento no confíen en mi o no me crean capaz de llevar el mando, lo entiendo…recién cumplí 17 años y apenas hace unos meses me entere de mi Destino. De la noche a la mañana deje de ser una humana a mitad loba, pero…eso no me interesa

ACEPTO MI DESTINO CON ORGULLO ¡Portare a Tala con orgullo y nunca abusare de los dones que me hayan sido otorgados! Guiare a los lobos con sabiduría y cada día…aprenderé algo nuevo

A los que me sigan, no tendrán porque temer…porque a partir de hoy  ¡Les juro mis hermanos que no permitiré que nadie les haga daño! ¡Los protegeré más que a mi propia vida!-alzo la voz con firmeza Sahian, al igual que Sirhan. Tenía los ojos rubí y la mirada llena de determinación

-…-muchas personas en ese momento decidieron guardar silencio, varios jefes empezaron a mirarse entre ellos, algo inseguros

-¡VIVA TALA! ¡LARGA VIDA A SAHIAN DEL SUR!-el primero en gritar, fue uno de los lobos de la manada de Sirhan, quienes habían tenido la oportunidad de conocer a la chica, mejor que las personas que recién la veían

-¡VIVA!-otros lobos empezaron a unirse a la bulla y de inmediato empezaron a golpear el suelo con sus pies emocionados

-Al igual que Sahian…Soy demasiado joven, pero no me importa, sé que soy lo suficiente madura para aceptar el Destino que se me ha otorgado. Portare con orgullo los Dones de Elu y juro que a partir de hoy, no dejare que nadie les haga daño-alzo la voz, más tranquila, Irina sonriéndole a las personas que se encontraban en el salón

-¡QUE VIVAN! ¡LARGA VIDA A ELU Y TALA!-no paraban de gritar las manadas reunidas en el salón

-¿Me permites?-Le pregunto con una leve sonrisa Sahian, a Irina, extendiéndole su mano en señal de baile. Ya que la música…había vuelto a sonar

-Con mucho gusto-acepto de inmediato Irina, sonriéndole con cariño a Sahian y olvidando por el momento a su Novio…

Ambas caminaron juntas a la pista de baile, pasando por medio de todas las personas, dedicándoles sonrisas al mismo tiempo que cortos saludos, pues ambas…estaban perdidas en su mundo en aquel instante. Aunque la gran mayoría no lo tomaba mal, sino todo lo contrario, les encantaba ver a su par de jefes tan amorosos entre ellos https://www.youtube.com/watch?v=TEVGLXVhhns

-Romeo and Juliet…-murmuro sorprendida Irina, al escuchar la balada que interpretaba la banda

-Somos similares ¿No crees?-le pregunto divertida Sahian, refiriéndose a la novela del Shakespeare

-Puede ser, pero en esta historia yo no soy Julieta-respondió con una falsa sonrisa Irina, mal interpretando las palabras de Sahian

-Prefiero que seas Cenicienta, no me gustaría que tengamos un final trágico-decía con calma Sahian, llegando hasta el medio de la pista de baile, deteniendo su paso

-…-Irina sorprendida, no supo que decir y opto por permanecer en silencio, dejándose envolver por los brazos de Sahian

-¿Sabes? Cuando pelee contra Nike…pensé que había dado todo de mi, que todo al fin había acabado y podría llevar una vida tranquila. Pero me doy cuenta que fui muy ingenua al pensar eso, aun quedan muchas cosas por hacer-rio Sahian, guiando a Irina en un baile calmado

-No fuiste ingenua ¿Quién diría que ambas acabaríamos dirigiendo una Revolución?-rio de igual forma Irina, transmitiéndole tranquilidad a Sahian

-¿Quién diría…que terminaría conociéndote?-pregunto parando de reír, Sahian, pero observando a Irina con detenimiento. Sus ojos reflejaban amor

-Sahian…-murmuro sonrojada Irina, sintiendo el ardor en sus mejillas

-Cuando nos reencontramos, supongo que no pude reconocerte, pero con el paso de los días y el tiempo…poco a poco…fui reconociendo tus ojos y el tacto de tu piel. Debo admitir que me costó aceptar quienes somos…pero hoy en día, no puedo esperar por ver lo que podemos lograr juntas. Por eso, aunque ha sido difícil…valió la pena-decía con una sonrisa Sahian, sin dejar de observar a Irina fijamente a los ojos

-¿Qué quieres decir? Sahian-pregunto ansiosa Irina, por saber si Sahian le diría lo que tanto tiempo ha esperado por escuchar

-Irina…yo…te amo-finalizaba Sahian con una sonrisa, sin esperar un segundo mas, sacando de sorpresa el anillo que su abuelo le había entregado, de su manga y colocándoselo en el dedo anular de Irina https://i.pinimg.com/originals/92/d4/2b/92d42b3ea4b1990ff8875f343119cf02.jpg

-…-la cual, de inmediato con su otra mano se tapo la boca sorprendida, casi en shock. Eran demasiadas las emociones que empezaron a abordar su corazón que no sabía que decir

-Aun nos queda mucho por recorrer, Irina, pero sé que estará bien…siempre y cuando sea contigo, por eso mismo, no me importa, si en esta vida tan solo tengamos 17 años, cuando cumplamos 18 quiero que te cases conmigo-finalizaba Sahian, con una tímida sonrisa, mirando fijamente a Irina a los ojos

-Yo…Sahian…esto…-Irina tartamudeaba con dificultad, sentía la debilidad de sus piernas y presentía que en cualquier momento se desmayaría

-Bueno… ¿Qué dices? ¿Aceptarías casarte conmigo?-volvió a decir Sahian, ignorando que la chica que tenía enfrente suyo, en ese preciso momento de su vida…se encontraba siendo observada fijamente por su Abuela, Madre y actual novio. Los tres preguntándose que era aquello que la joven lobina le había entregado a Irina

-Yo…-antes de poder contestar, no pudo terminar ya que cierto chico rubio se había impacientado de observar a su novia bailar con una total desconocida, al menos, para el

-Irina ¿Bailarías esta pieza conmigo?-fue lo primero que dijo el chico, con una sonrisa, ignorando por completo a Sahian

-¿Tu…? ¿Eres…?-pregunto Sahian, confundida por aquel chico que se había tomado el atrevimiento de interrumpirlas

-Arthur, la pareja de esta bella señorita y… -sonrió con orgullo el chico, rodeando a la ojiazul por su cintura con su brazo

-¿No te incomoda? ¿Verdad?-dijo rápidamente Irina, interrumpiendo al chico y casi escapando con él, no quería que Sahian se enterara sobre su “Novio”

-No…-murmuro al aire, Sahian. Observando confundida, como la chica y su novio desaparecían de su vista

-¿Bailarías conmigo? Mi Señora-por suerte, Alika se había reunido casi al instante en que Irina desapareció y dejo sola a Sahian en medio de la pista

-No me llames así, Alika. Tu siempre podrás llamarme Sahian-se rio Sahian, girando hacia la chica, tomando sus manos para iniciar lo que sería un pequeño baile

-Lo sé…era solo una broma, dime ¿Le propusiste matrimonio?-pregunto curiosa Alika, sin poder ocultar su emoción

-Así es, pero no me contesto…-respondió un poco desanimada Sahian, esperando que Irina no se haya cansado de esperarla

-De seguro la emoción no la dejo decir nada, créeme…serán una pareja hermosa ¡Solicito ser la Madrina!-dijo con alegría Alika, riéndose

-Claro que lo serás, eres la mejor amiga de mi prometida-dijo Sahian, esta vez más animada

-Es tan lindo por fin verlas juntas-decía con calma Alika, de igual forma que Sahian, pensando que todo lo que venía por delante seria más tranquilo…

-¿Por qué no me dejaste terminar? Irina, iba a decirle a tu amiga que soy tu futuro esposo-decía confundido Arthur, observando fijamente a su “Novia”

-Arthur…solo soy tu novia, jamás hemos hablado de matrimonio-respondió con seriedad Irina, asegurándose que nadie los escuchara

-Yo si, sabes que me interesa mucho formalizar nuestra relación. No te quiero como una chica cualquiera, quiero que seas mi Prometida-insistía el Chico, con seriedad

-…-Irina no supo que contestar, agachando la cabeza un poco frustrada, no sabía cómo dejarle en claro a su mejor amigo que no lo amaba

-Perdóname, Bonita. Solamente quiero hacerte la mujer más feliz del mundo, y empezare con regalarte un anillo más lindo del que te dio tu amiga…no es feo pero si bastante viejo-comento el Arthur sin poder evitar reír, al observar el anillo en el dedo de Irina. Una parte de lo que decía era cierto, el anillo era bastante viejo pero había sido pasado por décadas en la familia Zaragoza

-Me gusta este anillo, tiene un significado muy grande para mí-sonrió con cariño Irina, observando fijamente su mano

-El que te daré será mejor-siguió riendo Arthur, pero Irina lo ignoraba. En su cabeza solo podía pensar en Sahian

-Me habías dicho que no sabias bailar bien-se reía Leonor, observando como James la guiaba con profesionalismo  sobre la pista de baile

-Cuando me dijiste que si, le rogué al Chofer a enseñarme rápidamente-le respondió con una sonrisa divertido James, sintiéndose afortunado de no haber pisado ninguna vez a Leonor

-¡¿Es enserio?! No me los imagino bailando-seguía riendo Leonor, apoyando su cabeza en el pecho de James queriendo reprimir su risa

-Me gusta el sonido de tu risa-soltó de repente James, llamando la atención de Leonor

-…-la cual, alzo la mirada un poco sorprendida. Había escuchado muchas veces, durante todos esos años, la misma frase, pero por alguna razón…el que James se lo dijera, sonaba diferente a las anteriores

-Sé que puedo parecer un Mujeriego, no te lo niego…pero desde la primera vez que te vi, Leonor. Algo me dijo que eras diferente a las otras chicas, y por lo poco que te eh ido conociendo, me doy cuenta que no estaba equivocado. Leonor me…-antes de que James pudiera terminar, Leonor decidió posar uno de sus dedos sobre la boca de James, obligándolo a callar

-No, por favor. No lo digas-le rogo Leonor, sintiéndose desesperada. Ella no quería lastimar al chico,  no quería hacerle sentir lo que Alexia tanto le ha hecho sentir, el dolor y la frustración de no ser lo suficiente para alguien

-Entiendo, estoy yendo demasiado rápido…no quería hacerte sentir incomoda-le sonrió con cariño el chico, tomando con suavidad la mano de esta y depositando un pequeño beso en la palma

-…-Leonor sentía sus ojos inundarse de lagrimas ¿Por qué Alexia no podía ser como él? Inconscientemente se pregunto

-No llores, mi Pequeña. No quiero verte llorar…-la consoló el chico, pegándola a su cuerpo, dejándola descansar en el

-James ¿Por qué apareciste en mi vida?-murmuro con frustración

-Lo mismo me pregunto, Leo, pero no me arrepiento…-contesto el chico, sin soltar a Leonor, bailando con lentitud junto a ella

-Observa nada mas, Klein…esta moviendo la cola por esa Loba-decía con molestia Ayshane, mientras desde su lugar vigilando fijamente a Sahian, la cual, de vez en cuando dirigía su mirada hacia Irina

-Ayshane ¿Enserio quieres hablar sobre esto? La rechazaste como tres veces, la mandabas al carajo, te molestaba todo lo que hacía, permitiste que su mayor rival te besara y le dijiste enfrente de todo el Colegio que no sabias si aun lo amabas o la preferías a ella ¿Qué esperabas? ¿Qué te besara? ¿Qué esperara todo el tiempo por ti?-le decía con sarcasmo Klein, mientras observaba fijamente a la ex novia de su jefa

-Admito que me equivoque pero… ¿Tan rápido pudo olvidarme?-volvió a peguntar Ayshane, esta vez, con un desdén de tristeza

-Realmente…a quien olvido fue a Irina. Sabes con perfección que ella y Sahian han tenido historia desde hace miles de años, solo era cuestión de tiempo para que Sahian la recordara-respondió indiferente Klein, tomando con calma un poco de su bebida

-Pero…se supone que cuando lo haga, no me olvidaría-acuso Ayshane, recordando como la mismísima Irina le aseguro eso

-Podía ser posible, pero debido a que antes de que Sahian pudiera recordar, le rompiste su corazón, le fue fácil desprender todo sus sentimientos de ti-dijo Klein, recordando los ojos de Sahian al gritarle a Ayshane, nunca antes la había visto de aquella manera. Algo estaba cambiando por dentro de Sahian y aunque una parte de el sabia que ocurriría, también le asustaba

-…-Ayshane no dijo mas, pero se sorprendió un poco al ver como una señora de aproximadamente cuarenta años se acercaba a Sahian y le solicitaba bailar con ella ‘¿Quién era ella? y ¿Por qué se le hacía tan familiar?’ Se pregunto

-Así que tú eres la pequeña cachorra que porta a Tala…-murmuro una voz cerca de Sahian cuando esta aun bailaba y charlaba animadamente con Alika

Pov. Sahian

Gire sobre mi lugar y observe a una señora de mediana edad enfrente mío, portaba un elegante vestido blanco lo cual me hacía sospechar que era del norte pero tampoco podía recordar si la había visto en algún lado

-Mi nombre es Sahian Zaragoza, un gusto-salude cortésmente, estirando mi mano. Mientras Alika se posicionaba a mi lado, podía notar como fruncía desconfiadamente el ceño, eso llamo mucho mi atención

-Que poco educada eres, deberías ser tu quien bese mi mano-me contesto con molestia la señora enfrente mío, dando un ligero manotazo a mi mano

-¿eh?-estaba confundida ¿Qué pasaba con ella? ¿Acaso no sabía reconocer un apretón de manos?

-¡¿Cómo osas golpear a mi Señora?! Eres una…-Alika rápidamente salto a mi defensa, sentía como su sangre hervía y estaba a punto de arrancarle la cabeza a esta señora

-Tranquila, Alika-le pedí calmadamente, tomándola suavemente del brazo, no quería llamar la atención de todos los invitados

-Esta bien…-contesto degustada Alika, volviendo a su lugar

-Me sorprende que no seas una salvaje, Cachorra. Todos los del sur, sin excepción, lo son. Tan groseros, mal educados, débiles e impulsivos. Aun recuerdo cuando Saen…-antes de que pudiera terminar decidí interrumpirla

-No permitiré que hable así de mi Padre, si no le eh arrancado la cabeza es porque no quiero llamar la atención de mis invitados. Si no va comportarse educadamente, le pediré que se retire o solicitare que la escolten hacia la salida-advertí con seriedad, mi sangre estaba empezando a calentarse pero no quería armar un escándalo

-Al parecer Tala tiene garras…-murmuro sínicamente la Señora sonriéndome con burla

-…-guarde silencio, pero en mi mente estaba contando hasta cien

-¡MADRE! ¡¿QUE ESTAS HACIENDO?!-escuche una voz interrumpirnos, casi inmediatamente pude reconocer de quien era, pero por primera vez…no estaba feliz de saber la respuesta

-Hija mía, Joven Arthur, me alegro tanto de verlos-sonrió con fingida modestia la señora, mientras estiraba su mano hacia el rubio que acompañaba a Irina

-…-la cual, me miraba fijamente, apenada

-Igual me alegra verla, Señora Galván. Tan guapa como siempre-maldito lambiscón, este tomo la mano de la vieja bruja y sin pensarlo CASI paso su lengua en ella

-Estoy un poco confundida-murmure sin dejar de observar a la Señora e Irina, había cierto parecido que no podía creer

-La Señora aquí enfrente…es la Madre de Irina, Galván Aldrich-me contesto Alika, casi escupiendo poco a poco sus palabras, no parecía tan contenta, al igual que yo

-¿Te sorprende? Observa bien, Cachorra. Mi hija y yo somos como un par de gotas de agua ¿No es así? Querida-rio Galván, mientras apretaba con fuerza la mejilla de Irina, entre sus asquerosos dedos

-Mama, suéltame. Por favor-le pidió con molestia Irina, era la primera vez que la veía fruncir el ceño, siempre era tan paciente  y tolerante

-Awww Cariño, no tienes por qué ser tímida-le dijo con ternura el chico a su lado, abrazándola con confianza por la cintura, atrayéndola a su cuerpo, casi haciéndome vomitar. Espera… ¡¿POR QUE CARAJOS LA TOMA CON TANTA CONFIANZA?! ¡ES MI PROMETIDA PERRO SARNOSO!

-Estoy doblemente confundida-dije por lo alto, observando fijamente a Irina en busca de una explicación

-¿No lo vez? Cachorra, mi niña y su novio están tan enamorados-me contesto con malicia la Señora, casi queriendo restregármelo en mi cara, lo cual, era lo que hacia 

-…-tanto Alika como yo estábamos en silencio, esperando que Irina diga algo

-En un futuro, espero no tan lejano, nos casaremos ¿No es así? Cariño-el Rubio, alias perro sarnoso, hablaba con orgullo mientras hundía su asquerosa boca en la cabeza de mi “Prometida”

-Ella no se casara contigo-dije rápidamente, con firmeza. No iba a permitir que me la roben tan fácilmente, le di el anillo, ella acepto, era oficial. Ella me ama a mí

¿Por qué no se casaría con el Joven Arthur? El es guapo, caballeroso, bien educado, proviene de una familia bien acomodada, como nosotros y sobre todo…es un hombre-comento la asquerosa loba, alias Mami Suegra

-Porque ella…-no pude continuar, ya que mi bellísima prometida decidió interrumpirme

-Chocolatito ¿No tienes Sed? Creo que hay demasiado calor aquí, tal vez quieras que Sahian te acompañe a buscar ponche-hablo con seriedad, Irina. Al fin decía algo, pero sus palabras me dejaron bastante indignada, hubiera preferido que no diga nada

-Si, tienes razón. Acompáñame por favor, Mi Señor-me pidió Alika, apenada, notando que las palabras de Irina me habían herido

-Si, vámonos-la seguí, pasando mi mano por su cintura. Necesitaba aferrarme a algo, o si no, le arrancaría la cabeza a la Madre de Irina y al estúpido de su novio

-Ella…-empezó a hablar Alika, cuando estuvimos lo suficiente lejos de ellos

-No me interesa, supongo que llegue demasiado tarde-dicto con seriedad mientras sigo caminando a su lado. Lo entendía perfectamente, Irina se canso de esperarme, esta bien, no la culpo, supongo que lo merecía…

Pov. Irina

No podía dejar que Arthur se siguiera haciendo ilusiones conmigo, pero eso no significaba que no me importara herirlo. Antes de ser mi novio, ha sido mi amigo

Tenía que hablar seriamente con mi Madre

-Arthur ¿Podrías ir por un poco de ponche? Por favor, estoy sedienta-digo con una fingida sonrisa, haciendo ojos de cachorrito

-Claro que si, Amor-me respondió rápidamente, dejándome un pequeño beso en mi mejilla

-…-Mi madre solo observaba esto en silencio, sospechosamente

-Madre, ¿Observas esto? Es mi anillo de compromiso, es oficial, me casare con…-no pude terminar de hablar cuando decidió interrumpirme

-¡Felicidades! Al fin tomas una buena decisión en tu vida, ya dudaba de tus genes como mi Hija, te casaras con el joven Arthur-dijo con una retorcida sonrisa, dándome un rápido abrazo, el cual parecía mas un intento de homicidio

-¡MAMA! ¡¿ACASO…?!-no pude continuar de hablar cuando un Hombre desconocido, tuvo que entrometerse

-Disculpe ¿Acaso escuche mal? ¿La Señorita Aldrich esta comprometida?-pregunto el susodicho con un rostro emocionado ¿Qué no podía ocuparse de sus propios asuntos?

-¡ASI ES! Observe nada mas, el enorme anillo que porta en su mano-contesto mi Madre, sin mi consentimiento, tomando bruscamente mi mano y obligándome a mostrar el anillo que Sahian momentos anteriores me dio

-¡Muchas felicidades mi Señora!-alzo la voz emocionado aquel Hombre y por desgracia…no fue el único que lo escucho, varios invitados rápidamente empezaron a rodearnos, a mi Madre y a mi

-¡WOOOW! ¡Es maravillo! A pesar de que ambos son jóvenes… ¡Que alegría!-comentaban felices

-Estoy tan orgullosa de ti, Hija-por alguna razón, ese “Hija” sonó como un insulto para mi, esto era un problema…ahora será más complicado arreglar todo este mal entendido

-…-Antes de poder decir alguna palabra, sentí una mirada fija hacia mí. No se podía sentir como algo agradable, me daba mala espina. Cuando alce la vista, la logre visualizar, era Sahian…de su brazo se encontraba Alika, quien igual me observaba fijamente, pero a diferencia de Sahian, ella se encontraba en shock, como si dijera: ‘¿Qué estás haciendo?’ En cambio, Sahian tenía un rostro indiferente, casi decepcionado…pero en sus ojos podía notar una tristeza enorme. Al cabo de unos segundos desvió la mirada, le murmuro un par de palabras a mi Mejor amiga y siguieron su camino, esto era malo…

Pov. Sahian

Irina había tomado su decisión, estaba bastante claro. Lo entendía, tenía que entenderlo…me había tardado, ella pasó años esperándome, es normal que se haya cansado. No podía culparla, ni odiarla, la amaba demasiado, miles de generaciones atrás habíamos estado juntos, pero ahora…supongo que podría ser la siguiente o la próxima a ella, en la cual, al fin nuestras almas vuelvan a ser una.

-Demonios…-Por alguna razón, mi marca empezaba a doler, nuevamente ardía

-¿Se encuentra bien? Mi Señor-me pregunto Alika, llena de preocupación, observándome fijamente

-Si, solamente…arde un poco, pero estaré bien-respondo calmadamente, mientras con mi mano sostengo mi hombro, ejerciendo presión en ella

-Iré por un poco de hielo-dijo con rapidez Alika, antes de salir casi corriendo

-…-no pude ni siquiera agradecerle por su atención hacia mí. Intentando no llamar la atención, me senté en la silla más cercana y me permití descansar un momento

Cerré los ojos por unos breves segundos, hasta que sentí una mano sobre mi hombro, una cálida sensación empezó a nacer en mi interior y mi el ardor de mi Marca bajo, un poco

-¿Has vuelto? Ali…-no pude continuar, al abrir mis ojos, me encontré con una persona que por nada del mundo se asemejaba a Irina o Alika

-No soy Alika, o tu novia del norte-me contesto, con el ceño ligeramente fruncido al igual que sus labios, sus ojos me observaban fijamente a los míos

-Ella no es mi novia, ni prometida…-murmuro por lo bajo, desviando la mirada, no quería hablar sobre ello con Ayshane

-Como sea, dime…Tala ¿Por qué estás aquí sentada? Tan sola, ¿Pasa algo?-me pregunto con un tono de voz tranquilo, aun cuando parecía molesta

-Nada relevante, es tan solo mi Marca…arde un poco-contesto tratando de sonar indiferente y no darle importancia al asunto, pero al parecer, ella no queda satisfecha con esa simple respuesta

-Arde cuando no puedes controlar todo el poder que llevas en tu interior, este fluye de gran manera cuando reprimes tus emociones, algo te esta preocupando, no puedes dejar de pensar en ello, te conozco bien, Sahian. Así que no vuelvas a insinuar que no es importante-me amenazo con firmeza, tomando mi rostro en sus manos, obligándome a enfrentarla

-…-no podía creerlo ¿Enserio esta era la Ayshane que semanas atrás conocía? Parece tan diferente e incluso, más consciente de sus palabras  

-¿Te quedaras observándome así toda la noche? ¿O me dirás que es aquello que te ha estado preocupando?-volvió a interrogarme, con más calma esta vez

-Si…digo, yo bueno…no es importante, enserio-insisto, sintiéndome un poco incomoda ante su mirada. No me gustaba la calma que me transmitían los ojos de Ayshane, no me gustaba volverme a sentir dominada o vulnerable

-Si no importara, tus ojos no tendrían la pupila dilatada-me dijo con molestia, soltándome lentamente

-Bien, tienes razón. Es solo que…me siento un poco mal, al saber, que Irina se casara con ese perro sarnoso llamado “Arthur”, se nota que es un idiota-admito, agachando la cabeza. Sintiéndome avergonzada

-¿Irina no se casara contigo?-soltó bastante sorprendida. No pensé que ella sabría de mi propuesta hacia Irina

-No…Ella eligió al humano-contesto, casi escupiendo mis palabras llena de frustración

-Sahian, Irina te estuvo esperando bastantes años ¿No es así? Aun puedes recuperarla, supongo que te toca ser paciente, esperarla y demostrarle tus sentimientos hacia ella. Ya que si no lo haces…es posible de que la pierdas para siempre-hablo Ayshane tan calmadamente, mientras con su mano acariciaba mi cabeza, consolándome

-¿Hablas enserio?-Pregunto casi en shock, con mis ojos tan abiertos como un par de platos

-Si…al parecer si. Te Amo, Sahian. Al igual que tu…tengo que perseverar por la persona que amo, ya que, si no lo hago…es posible que la pierda y no pueda quedarme a su lado, ni como amiga-me dedico una ligera sonrisa, llena de cariño

-…-simplemente no pude responder, estaba impresionada. Ayshane…eres genial

-Buena suerte, Sahian-me dedico una última sonrisa y sin preguntarme, o pedirme permiso, me dio un pequeño beso sobre la comisura de mis labios. Fueron un par de segundos, que a mi punto de vista, se volvieron una eternidad, pero no hubo ningún problema, no fue desagradable

-Gracias…-respondí en un débil susurro, observándola irse.

Me quede unos minutos sola, pesando en todo lo que me había dicho Ayshane, sobre lo que debía hacer con respecto a Irina y en verdad, que todo me daba miles de vuelta mi cabeza

-¡SAHIAN! ¡MI SEÑOR!-gritaron un par de voces, bastantes conocidas ante mis oídos

-¡…!-me levante rápidamente, buscando al par de dueños, alarmada ¿Por qué habrán gritado? Observando hacia los lados, girando mis ojos de arriba-abajo, derecha-izquierda, pude localizarlos, eran Alika y Sirhan con rostros desesperados, apuntándome con sus manos hacia la entrada principal

-Veo que la pequeña Tala sabe bien cómo hacer un Baile, lástima que…no sepa enviar invitaciones, ya que…la nuestra nunca llego-eran ellos…asquerosos, el Maldito consejo reunido y el maldito Yerik en el centro

-Ustedes no son bienvenidos acá-respondí, con firmeza, caminando hacia ellos. Sin miedo, no tenia porque temer, ellos eran como 10 y nosotros  más de 150

-¿Enserio? Me decepciones chiquilla, pensaba que serias más selecta con tus invitados. No nos invitas a nosotros pero si a…“Ellos”, bola de esclavos-escupió Yerik, observando fijamente a la manada de Sirhan, los cuales, fruncieron el ceño furiosos

-No me sorprende que seas un racista de mierda, si no vas a respetar a mis invitados…te pediré que te vayas, al menos, que quieras que te saque a patadas-amenace con una sonrisa llena de arrogancia, escuchando como algunos lobos a mis espaldas, empezaban a reír

-…-Era obvio que a Yerik, esto no le gustaría. Mucho menos a sus seguidores, perros rastreros

-¡¿COMO TE ATREVES A INSULTAR AL JEFE DEL CONSEJO?!¡DEBERIAS HINCARTE ANTE EL!-no puede ser…La Madre de Irina tuvo que entrometerse, en respuesta de los malditos lobos rastreros ¿Qué pasaba con ella? ¿Cuál era su problema conmigo?

-Señora, enserio, si quiere irse con ellos, puede hacerlo-digo de la forma más “amable” posible, cansada de todo este alboroto

-Aunque me gustaría irme, eh venido por seguridad de todos, ya que tu…Sahian Zaragoza, proveniente de la manada del Sur, has roto nuestra regla mas importante como lobos, exponer nuestro secreto a los humanos-Hablo aquel maldito de Yerik, borrando aquella sonrisa estúpida de su rostro e intercambiándola por una mirada más intimidante

-No respeto ninguna estúpida regla tuya, Yerik. Sabes bien quién soy yo…así que no puedes venir con la intención de darme órdenes, ya que si lo intentas, lo pagaras muy caro-amenazando, empezándome a quitar mi chaqueta, dispuesta a pelear si era necesario

-Veo que la Cachorra al fin saca sus garras, esta bien, admito que es aceptable-aunque sus palabras parecían amables, sus intenciones claramente no las eran, al igual que yo, empezaba a quitarse su chaleco

-‘Sahian…ten cuidado, están planeando algo, puedo sentirlo’-Escuche la voz de mi amada en mi cabeza, digo…la voz de Irina

-‘Mantente alejada de esto, se pondrá feo’-Ordene con firmeza, sin voltear a verla; en vez de eso, busque entre la multitud a Klein y con la mirada le ordene sacar a Marian y Ayshane de aquí, lo más importante eran proteger a los débiles. Ya lo demás…lo veríamos después