[PORCELANA]
.
.
[Narración Yuuichiro]
Mis ojos se abrieron con pesadez ante los rayos del sol directamente en mi cara, removiendo mi cuerpo con incomodidad, sintiendo un leve cosquilleo en mi brazo izquierdo -"¿Pero qué?" susurre al ver como Mika usaba mi brazo como una almohada, reí para mis adentros al notar como él me abrazaba de forma demandante.Admire su rostro por unos segundos, sus labios con un ligero tono rosado, su piel pálida y blanca al igual que sus pestañas largas, sus finas facciones no cambiaban con el paso de los años, ni lo harían.Él había bebido de mi sangre cuando ambos teníamos quince años, por lo que ya no iba a crecer, muy a lo contrario de mi, que al cumplir dieciocho decidí que lo mejor sería convertirme en vampiro.
-Umh -murmuro, arrugando un poco su nariz-
-Mika -susurre con una leve sonrisa-
Quien iba a imaginar que yo, siendo un demonio de alto rango, terminaría enamorado y como el fiel sirviente de un vampiro pura sangre.
[Narrador Yuuichiro] [FlashBack]
La noche era fría, tan fría que incluso daba escalofríos, la nieve cubría todo a su paso, tiñendo lo de un magnifico blanco, caminaba sin rumbo alguno por el bosque, por alguna razón que aún no conocía los demonios estaban muy activos, demasiado diría yo.
-¡Yuu! -llamaron mi nombre en un grito-
-¿Qué sucede, Guren? -respondí con total calma-
-¡Te ha estado buscando por todas partes maldito mocoso! -dijo molesto-
-Pues, aquí estoy -hable un poco cínico- Ahora habla -apoye mi espalda en el tronco de un árbol, observando divertido el rostro enojado del hombre- Estoy bromeando -reí-
Ichinose Guren, mi familiar adoptivo y uno de los demonios más fuertes bajo mi mando.
-Al parecer los vampiros han atacado un reino cercano -informo con notable preocupación-
-¿Seraphin? -pregunte con un semblante serio-
-Si -contesto sin más- Además, demonios de todos los rangos aprovecharon esto para devorar almas -continuo- Si esto sigue así pronto ambos mandos comenzarán con una lucha
-Tienes razón -retome mi postura- Bien, manda a Mitsuba, Yoichi y Shiho para allá -ordene-
-De acuerdo -y sin más se largo-
Continúe caminando sin un lugar exacto a donde ir, conforme daba unos pasos escuchaba gritos, desgarradores gritos de personas rogando por su vida y llorando sin la más mínima pizca de vergüenza, mientras eran atacados por vampiros que bebían hasta la última gota de su sangre, arrebatando les la vida en cuestión de segundos, antes eso, tan solo solté una risa
Los humanos habían matado a mis padres cuando yo tenía tan solo seis años, recuerdo que mi madre solía ser una mujer con suma belleza, bondadosa y admirable, ella jamas lucho con los humanos, al contrario, ella solo pedía la paz al igual que mi padre, él era un gran hombre, con carácter fuerte y digno de todo su prestigio, amaba con devoción a su pequeña familia.
Paré en seco al escuchar un grito doloroso y sumamente triste, con curiosidad me dirigí hacía donde provenía tal sonido.No demore demasiado en encontrar la fuente del grito, para no ser descubierto, me escondí tras algunos arbustos.
Había dos cuerpos, una mujer y un hombre, ninguno de los dos se movía o emitía algún ruido, confirmando así mis sospechas de que ambos estaban muertos, tan solo sonreí burlón "-Es similar a lo de ese día"- pensé con nostalgia.
-¡Madre, padre! -se escucho el llanto de un niño- ¡N-No nos d-dejen, se los r-ruego! -suplico con una voz casi inaudible-
-Mikaela-onii -una niña de cabellos rosas pastel observaba expectante lo ocurrido- ¿Qué pasa?, ¿porqué estás llorando? -pregunto "inocente" la mocosa"-
Claramente ella estaba fingiendo, pero él . . . él en verdad estaba sufriendo.
-Sabes que no me gusta cuando lloras -hizo un ligero puchero- ¡Vamos Mikaela-onii sonríe! -río de forma infantil-
-K-Krul y-yo n-no -cada palabra que salía de sus labios titubeaba-
-No me gusta ver sufrir a Mikaela de está forma -hablo mientras tomaba al chico en un leve abrazo, apegando su cabeza en el pecho de ella- Es tonto llorar por algo insignificante -sus ojos brillaron con la intensidad de la luna- La muerte de nuestros padres es algo efímero -le miro a los ojos-
Esa maldita era un vampiro.
Sujeto el rostro del rubio entre sus manos y ella misma mordió ligeramente su lengua tomando de sorpresa a su "hermano" en un corto beso.
Por alguna razón ese niño me recuerda a mi, él estaba tan débil e indefenso, ¿Mikaela?, si, ese era su nombre, era igual de bello que él, era tan inocente y puro.
-"Vaya~" -escuche una voz burlona- "Así que el gran Yuuichiro se acaba de enamorar de un humano" -dijo con notable sorna- "Mejor dicho, de un semi-vampiro pura sangre" -río feliz-
-Asuramaru -suspire molesto- ¿Qué quieres? -pregunte algo enojado-
-"Estás dudando" -su tono se volvió serio- "¿Acaso te has enamorado ciegamente de alguien a quién apenas has visto?" -hizo una breve pausa- "¿Es acaso posible?"
-Quien sabe -conteste con una media sonrisa-
Salí de mi escondite, provocando un ligero crujir en las ramas de los arbustos.
-¿E-Eh? -se sorprendió la peli-rosa- ¿Quién es usted? -dijo con el ceño levemente fruncido-
-Eso no te interesa -respondí un tanto grosero, dirigiendo mi mirada hacia el niño- Yo puedo vengar a tus padres -ofrecí dándole la mano-
-¿Qué? -fue lo único que logro decir-
-Como lo oyes, solo debes matarlos -susurré- Matar a sus asesinos -corregí-
- . . . -bajo un poco su cabeza, clavando la mirada en el suelo, mientras la otra presenciaba la escena- No -contesto, a un ocultando su mirar-
-¿Q-Qué? -articulé incrédulo-
-¿De que sirve matar si el daño está hecho? -cerro los puños con furia- La venganza . . . la venganza no me devolverá a mis padres -y tras decir eso, levanto la cabeza, dejando a la vista sus hermosos ojos azules llenos de lágrimas, lágrimas que caían por sus mejillas ligeramente rosadas-
-Eres . . . bastante raro para ser una persona -dije riendo un poco- Eso me agrada -mentí-
Mikaela, ese chico tenía algo en especial que me hacía querer proteger lo.
[Fin de FlashBack] [Narración Omnipresente]
Los pasillos se encontraban vacíos, dando un aura tranquilizante a cualquiera, pasos comenzaron a escucharse, era un joven hombre de cabellos platas e intensos ojos azules, éste caminaba tranquilamente por uno d los corredores, a su lado se encontraba alegremente una niña de cabellos lilas similares al morado.
El era Shinya Higari y ella Shinoa Higari de Shindo, ambos miembros de la familia real y parientes cercanos a los jóvenes gobernantes.Shinya era el tío y tutor legal de Mikaela y Krul, mientras que Shinoa era prima, casi hermana de ambos, además de que ella era la futura prometida del príncipe. Si como lo lee, ambos estaban comprometidos.
-Sabes, deberías aceptar la propuesta de Guren-san -hablo finalmente la chica rompiendo el cómodo silencio-
-¿Piensas eso? -pregunto el joven con voz calmada-
-Vamos Shinya, Mahiru murió hace mucho tiempo, ya es momento de que te preocupes por ti -aconsejo-
-No tengo tiempo para pensar en amoríos -rió por lo bajo- Después de todo tengo que cuidar por tu futuro -aseguro mientras acariciaba el cabello de su hermana-
-Mahiru nunca te intereso, entonces ¿porqué debes de negarte la felicidad? -aparto suavemente la mano ajena-
-No pienso ponerse la tan fácil a Guren -rió un poco-
Ya que él había sido el amante de Mahiru durante varios meses.