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SOL DE MEDIANOCHE por crystalwall

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Notas del capitulo:

Hola, les traigo el capítulo nuevo, aquí pasa algo que lo cambia todo, uyyyyyyyyyy, espero que les guste

Capítulo 32.- El futuro visto a través de un espejo distorsionado

 

- Te queda linda la faldita, no es que no me de gusto verte hijo pero, qué haces aquí?, no es peligroso que te vean con nosotros? – Seiya había salido de su habitación y se había sorprendido de ver hablar a Zack con Hades, ambos tenían expresiones serias en sus rostros, las que cambiaron inmediatamente cuando lo vieron llegar, un par de semanas habían pasado desde que todos ellos estaban en el Olimpo y Zack veía la manera de ir a Hades cuando tenía algo que contarte y en eso estaban esa mañana, claro que lo hacía con todo el cuidado del mundo, lo que Seiya decía era cierto, era arriesgado para él que lo vean tan amistoso con Hades o con alguien de la delegación del Averno, Apolo y Ares nunca supieron quién era el espía que secuestraron y torturaron hacía más de 8 años, y si se enteraban o se daban cuenta que era Zack… sus días estaban contados, ahora tenía otro rostro pero… ellos eran dioses a la final

- No te preocupes papá que nadie me vio venir, y bueno… mi faldita es la última moda – dijo el muchacho sonrojándose un poco y tratando de cubrirse pero sin éxito, en verdad que la túnica que estaba usando era bastante alta, uno que otro Dios le había palmoteado el trasero, Afrodita de lo había peñiscado pero Zack casi se muere cuando Apolo lo miró lascivamente un día, no no no… casi vomita ahí mismo pero gracias a todos los dioses no había pasado a mayores

- Ajá… pero qué haces aquí?, pasó algo? – Seiya se acercó y abrazó a Zack que lo abrazó de vuelta

- No, el trabajo de copero no es lo que esperaba, ha habido noticias pero nada interesante, solo quería verlos un ratito nada más, los pequeños madrugadores están comiendo sin hacer escándalo, les gustó las uvas que me robé del templo de Dionisio – contestó Zack con una cara de convencimiento total, Hades arqueó una ceja, vaya… este muchacho tenía talento para inventar historias y sonar convincente, bueno… era hijo suyo a fin de cuentas, y sabía reaccionar bien ante presión

- Pues si… ya me parecía extraño que tus hermanos me dejaran dormir sin hacer escándalo o sin venir a decirme que mueren de hambre, me alegra mucho verte pero me tienes muy preocupado, lo sabes verdad? – Seiya sonrió al abrazar a su hijo pero bostezó y cuando el abrazo se rompió se llevó una mano al cuello mientras movía la cabeza de un lado a otro

- Dormiste mal papá? – preguntó Zack algo preocupado

- No… solo extraño mi cama, mis almohadas son mejores que las de aquí, y tú no te rías de mi – contestó el castaño que había caminado hasta su esposo y lo besó suavemente en los labios, Hades no dijo nada, solo sonrió ampliamente y acarició la mejilla a su esposo que se distrajo porque un grito de: “PAPI!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!”, llamó su atención, Seiya se tomó un sorbito del café de Hades e hizo caras al decir: - Eso está amargo… cómo lo tomas así?

- Está como siempre lo tomo amor – respondió el Dios de los muertos con una sonrisa esperanzada en su rostro

- No no no, está agrio y como que tiene… vainilla, es café con vainilla?

- No lo sé…

- Está horrible, el café que tenemos en casa es mucho mejor, y ni me hagas hablar de las pasas, las ciruelas, las bayas, y el agua, hasta el agua extraño, dioses… nos vemos luego Zack, voy a ver quién está matando a quién, cuídate hijo y si necesitas algo por favor dínoslo, no solo Hades puede ayudarte, es cierto que he pasado dedicado a cuidar a tus hermanos pero sigo siendo un guerrero y tengo nuevos trucos en mi arsenal, cortesía de tu padre y de los tres jueces, ahí donde me vez estoy en forma y hasta le doy pelea a tu padre – el castaño acarició el rostro de Hades que lució divertido, las palabras de Seiya eran ciertas, claro que le daba pelea, Seiya era un guerrero por demás hábil pero… era mortal aún, ese era su única vulnerabilidad

- Si papá, yo te aviso pero no te preocupes que estoy bien – respondió Zack con una sonrisa divertida, a él le gustaría ver un combate entre sus padres, eso si quería verlo pero hasta ahora no lo había presenciado

- Ok., y regresa a vernos más seguido, te quiero hijo

- Y yo a ti, adiós papá – Zack le sonrió a su papá que caminó lentamente por el pasillo y se sostuvo de la pared porque al parecer perdió el equilibrio por un segundo pero siguió su camino sin detenerse, Zack regresó a ver a Hades que estaba sonriendo mientras bebía su café y le preguntó: - Está bien?, está algo… raro, no?

- No, está bastante bien, lo que pasa es que creo, creo… que tú ya vienes en camino – Hades dijo esto poniendo una mano en el hombro de su hijo y sonriéndole de una manera muy divertida

- En serio?

- Yo creo que si, a Seiya usualmente le da por tomar todo dulcísimo cuando está de encargo, pasa muerto de sueño a pesar de que duerme mucho más de lo normal, y si le falla el equilibrio a ratos, es su cuarto embarazo no lo olvides, ya lo tengo medido y creo que ya está de encargo

- Pero hace algunos días no lo estaba, verdad?

- No…

- Dioses… ok., eso es mucha información para mi y me niego a escuchar los detalles de mi concepción, mejor me regreso al templo principal a ver que averiguo, Apolo no ha vuelto a pedir un copero, no sé si es que no se ha reunido con nadie o yo le caí mal

- No hijo… seguramente ni siquiera reparó en ti, lo que me preocupa es eso que me dijiste, eso de que la historia siempre se repite a si misma, eso no me agrada, y menos me agrada el hecho de que sea precisamente Hera la que supuestamente va a ejecutar sus planes, será que ella sabe que ellos piensan traicionar a Zeus?, si Hera es consciente de eso, es doble traición y ahí nuestra situación se complica un poco más, una cosa es enfrentarnos a Ares, Apolo y Artemisa, otra muy diferente es Hera – Hades frunció el ceño cuando dijo esto

- Por qué?, qué ha hecho de interesante Hera?

- Hijo…, Hera es una de las diosas más poderosas y vengativas del Olimpo, las acciones en contra de las amantes de Zeus y de sus hijos han sido legendarias

- Lo sé, he leído las historias

- No hijo, las historias no tienen nada que ver con eso, esa es una versión para niños, la realidad de las acciones de Hera son diametralmente peores, los dioses somos muy egoístas y egocéntricos, ese es el principal problema, ella no tiene ningún amor por la humanidad como Atena si, ella cree en la superioridad de los dioses y eso la hace muy peligrosa, los inmortales somos… complejos por decir lo menos – Hades suspiró cuando dijo esto, Zack tomó la mano de su padre y la apretó suavemente al decir:

- Pero tú no eres así

- No… porque tengo a Seiya a mi lado, él me ha hecho cambiar en muchos aspectos, al igual que Shun, Poseidón es diferente porque él vivió como humano muchos años al igual que Atena, ellos si tienen muy presente su humanidad, el resto de nosotros no

- Eso si es un problema

- Bueno… no todos tienen a alguien como Shun que nos ayude a entender las complejidades y maravillas del alma humana, no todos tienen un consorte humano que nos haga reconsiderar la fragilidad y la mortalidad, esos beneficios solos los tengo yo, y bueno… Poseidón también, por Shun…

- Por todos los dioses, no podemos olvidarnos del tío Shun, yo sé que nuestra prioridad es papá pero… debemos hacer algo por el tío Shun

- De eso no me has hablado claro, solo has dicho que debemos impedirlo pero no me lo has explicado a detalle – dijo Hades frunciendo el ceño

- Es que es muy triste papá, de las cosas que pudimos averiguar en el futuro y lo que el mismo tío Julián nos dijo pues… todo apunta a que el tío Shun fue asesinado y mis primos también, el tío Shun estaba de encargo en ese tiempo, Arsen era un poco menor a Adrián y Kai era un bebé, y es precisamente en este punto del tiempo que ocurre, todo ocurre al mismo momento y por eso hay confusión y caos porque el tío Julián estaba en el Santuario cuando eso pasó, él acudió al llamado que Zeus hizo porque tú estabas destruyendo la tierra y querías matar a Atena, y en eso estaban cuando el tío Julián no pudo sentir el cosmo de Shun y de sus hijos, él lo dejó todo y se apresuró a buscarlos pero… no pudo encontrarlos, los buscó por cielo, mar y tierra pero no los halló, luego sintió una explosión en uno de los templos abandonados de Delfos, y sintió como las vidas y los cosmos de sus hijos y de su esposo se extinguieron, fue allá solo para encontrar cenizas

- Pero eso no explica por qué Julián también fuera encerrado – puntualizó Hades tomando un sorbo de su copa de vino

- El templo en cuestión era uno de los antiguos Santuarios de Apolo, ya te podrás imaginar la ira del tío Julián, que con todos los antecedentes y lo que pasó antes, él asumió que Apolo era el responsable por lo que subió al Olimpo y trató de matarlo, él se defendió como pudo y envió a Artemisa a la tierra, ella fue por Zeus, el que subió luego de encerrarte en una urna a ti, y lo encerró en una urna a él, Hera fue decisiva para que esto pasara, ella relató los eventos de forma que quedó en claro que el tío Julián no tenía razón para atacar el Olimpo, y aseguró que el tío Julián lo que quería era tomar posesión del trono de los cielos, esto lo aseguró por la influencia de Artemisa y Apolo, el tío Julián trató de explicar que lo que quería era venganza por su esposo y sus hijos pero… sus palabras no fueron escuchadas y fue finalmente encerrado en medio de una situación bastante confusa, Zeus dictaminó que Apolo se haría cargo del Templo marino y Ares de haría cargo del Averno, y así fue como llegamos a donde estábamos en ese futuro del que escapé, en donde todos los que amábamos murieron de la manera más infame, ese maldito instrumento no trajo más que lágrimas y dolor, porque a la final nadie se hizo con el poder de los cielos, y todo estaba en proceso de destrucción

- Vaya… la ambición rompió el saco aparentemente – dijo Hades y lucía molesto

- Por eso te lo digo otra vez, no sería mejor destruir esa maldita cosa?, con eso nos evitaremos muchos problemas

- No te preocupes hijo, no volverás al infierno del que escapaste, deja todo en mis manos y todo resultará bien, ya lo verás…

 

Las reuniones fueron pesadas ese día, Hera estaba fúrica porque Zeus había tenido un amante mortal nuevo, eso hería profundamente el orgullo de la Diosa que había sido implacable en su castigo, había mandado una inundación a la villa en donde la muchacha vivía y trágicamente se había ahogado, eso es lo que mantenía Hera pero no engañaba a nadie, se podía ver su mano tras todo esto, lo que más le dolió a Zeus era que la muchacha estaba esperando un hijo suyo, y también había muerto junto a su madre

- No podemos seguir valiéndonos de nuestro lugar como Dioses y tomar amantes si nos place, en especial porque se engendran niños que no deberían venir al mundo – recalcaba Hera por enésima vez, Artemisa sonreía y miraba a Apolo disimuladamente, el Dios del sol tenía que darle crédito a su hermana, meter en la cama de Zeus a esa muchacha no había sido complicado y ahora gracias a ello, las cosas estaban saliendo muy bien para ellos

- Tú te aseguraste que no venga al mundo querrás decir – dijo Zeus y lucía molesto

- Pruébamelo – contestó Hera y los ojos le brillaron peligrosamente

- Por favor, esto no nos está llevando a nada bueno y ese pequeño poblado fue devastado – intervino Saori con tristeza

- Ahora me vas a culpar de la lluvia y del desbordamiento de los ríos Atena? – preguntó Hera con súbita rabia

- Lluvia en Julio?, en serio? – Hefestos preguntó en tono divertido, él sabía muy bien los alcances de su madre si los había sufrido en carne propia, pero eso es otra historia…

- Estás juzgándome? – le indignación de Hera fue muy palpable, por lo que Hefestos levantó las manos en símbolo de paz al responder:

- Solo hacía una observación, no estaba emitiendo ningún juicio de valor

- Yo creo que esto lo hemos tratado en varios puntos de la historia y no lo hemos resuelto, además que ahora hay complicaciones adicionales que hay que tomar en cuenta – dijo Apolo y su tono era tranquilo

- A qué te refieres? – preguntó Zeus, pero Hades sabía lo que se venía, si era un logro que el tema no haya salido a colación en este par de semanas, pero al parecer había llegado el momento

- De Hades y Poseidón, ambos tienen amantes mortales y ambos han engendrado hijos que son mortales pero tienen poderes divinos, y eso no fue penado por este concilio en su momento

- Penado?, cometimos un crimen acaso? – preguntó Hades en tono tranquilo, tomando un sorbo de su copa de vino, Poseidón si se mostró molesto

- De acuerdo a lo que está diciendo Hera, pues si…

- Me parece que el que menos debería hablar de eso eres tú, ya que tu si eres el resultado de uno de los amoríos de mi hermano, en cambio yo me casé con mi consorte al igual que Poseidón lo hizo con el suyo, entonces no es que tenemos amantes mortales, nuestras uniones han sido bendecidas por Himeneo, además mis hijos y los suyos son hijos legítimos, es verdad que son mortales, porque no podía ser de otra manera ya que su otro padre es mortal, pero esa puede ser una condición pasajera, ha habido muchos casos de mortales a los que se les ha concedido la inmortalidad, Perseo, Hércules, Castor, Polux son solo ejemplos, este caso bien podría ser igual, no?

- Quieres hacer inmortales a tus hijos? – preguntó Deméter, no es que le haya sorprendido, era lógico pensarlo, ella como madre podía entenderlo muy bien

- Por supuesto que si, cuando lleguen a la mayoría de edad me gustaría poder hacerlo, asumo que tú también – Hades habló directamente con Poseidón que asintió y dijo:

- Claro que si, mis hijos y mi consorte, yo deseo que mi matrimonio dure para toda la eternidad, no quisiera que Shun muriera por ninguna circunstancia, al igual que mis hijos, al fin tengo una familia y no estoy dispuesto a perderla – Poseidón tomó un sorbo de su copa, Hades asintió y miró a Apolo que meneó la cabeza con molestia al decir

- Vaya… ahora vamos a conceder la inmortalidad a todos los humanos que pasen por nuestro lecho?, eso sería… nuevo…

- Eso no es lo que estamos diciendo, estamos hablando de nuestros respectivos esposos y de nuestros hijos, no es lo mismo que proponer conceder la inmortalidad a todos los amantes que hipotéticamente podríamos tener, que no se mal entiendan las cosas o se tuerzan nuestras palabras, no puedo creer Apolo que sigas resentido por lo que pasó hace más de ocho años – dijo Hades sin perder su usual seriedad

- Cómo te atreves!!! – Apolo dio un manotazo en la mesa y se puso de pie indignado

- Por favor, siéntate que así no vamos a resolver nada – comandó Zeus, él estaba muy molesto por esta situación, la muerte de su hijo no nato lo tenía bastante sensible, él había visto a los niños de Hades y a los niños de Poseidón y quería uno para si mismo, pero su esposa se lo negó, a veces Hera tenía posiciones demasiado radicales a su criterio, la Diosa tenía sus razones pero… no había justificación para que sangre inocente hubiera corrido

- Es que esto es inaudito padre – Apolo se sentó y tomó su copa levantándola para que uno de los coperos se la llene, Zack que estaba en el salón corrió a hacerlo, esa sesión estaba un poco más agria que las anteriores

- Inaudito o no, no está en tus manos el conceder la inmortalidad a los humanos, eso lo puedo hacer yo y lo voy a hacer por los hijos de Hades y de Poseidón, ya lo he hablado con ellos y hemos quedado de acuerdo en hacerlo

- Pero… - Hera empezó a hablar pero un rayo que causó un descomunal estruendo dejo en silencio a la sala, y Zeus continuó al decir:

- Esto no está sujeto a discusión, he dicho que lo voy a hacer y lo haré, no necesito ni el permiso ni los comentarios de ustedes, así lo he decidido y así se hará, está claro? – el tono de Zeus no dejaba lugar a dudas de que la reunión terminó, nadie más habló, así que el Dios de los cielos se puso de pie y salió del salón, aún era temprano pero… ya no se podría discutir nada más ese día

 

Apolo salió del templo y caminó algún tiempo por los extensos y hermosos jardines, estaba pensando en lo que había pasado con Hera y sonrió, las cosas estaban muy bien por ese lado, pero luego en su caminata vio de lejos a Poseidón sonreír feliz mientras levantaba del césped a su hijo más pequeño y lo besaba, el bebé le tocó la cara y gritó emocionado de ver a su padre, Shun también estaba allí con los otros niños, y se veía tan deseable como lo recordaba, su sonrisa en el rostro lo decía todo, sus hijos eran en verdad hermosos y se veían tan felices… maldito Poseidón que había hecho suyo lo que por derecho le pertenecía a él, maldito Shun que se resistió a él, pero por sobre todas las cosas maldito Hades… maldito Hades porque él fue el culpable de todo, él fue el que metió las narices en donde nadie le había llamado, pero ya le llegaría su tiempo… claro que si…

 

Hades también había llegado y estaba sentado en el pasto hablando con su niña, en una manta junto a ellos estaba su castaño esposo, dormido profundamente y su último niño estaba arrimado en él mientras miraba una flor con detenimiento, los hijos mayores de Hades y Poseidón estaban corriendo alrededor de la fuente, entre risas y juegos

- A qué hora se durmió papá? – preguntó Hades a su niña

- Casi a lo que llegamos, dijo que tenía mucho sueño por lo que se acomodó en la manta, trató de no dormirse pero no pudo y se durmió, Damon lo está cuidando, no se ha movido de su lado, por lo menos ha estado quieto un rato – dijo Talia que estaba entretenida cargando un conejo que estaba bastante tranquilo en sus brazos

- Y tu hermano?, no ha dado guerra? – Hades señaló con la mirada a Adrián que estaba corriendo con Arsen

- No… no hemos usado nuestros poderes como te lo prometimos papá, no hemos hecho nada que no deberíamos haber hecho, nos hemos portado bien, puedes preguntarle al tío Shun

- No es necesario mi princesa, si tu me lo dices, yo te creo, ve a jugar

- No… luego se pierde mi conejito

- Ohhh… y le pusiste nombre?

- Todavía no, me lo cuidas un ratito papá?, y así me voy a jugar yo también

- Claro amor, ve… - Hades tomó el conejo de los brazos de su hija y la pequeña fue corriendo donde estaba su hermano y se unió alegremente al inocente juego, Hades acarició el dormido rostro de Seiya que abrió los ojos pesadamente y sonrió al ver a Hades a su lado

- Hey… a qué hora llegaste?, a qué hora me dormí?, me dormí? – Seiya lucía algo desorientado pero sonrió al acariciar a su hijo menor que estaba arrimado a su pecho y al ver a sus dos hijos mayores que estaban corriendo con Arsen, Hades estaba sentado en el césped a su lado mientras que Julián y Shun estaban caminando cerca con su bebé en brazos

- Si amor, te dormiste, te sientes bien?, estás un poco pálido – Hades volvió a acariciar la mejilla de Seiya, el castaño se incorporó un poco y recibió en sus brazos a su hijo que lo besó en la nariz y apoyó su cabecita en su hombro

- Hola bebé… en serio estoy pálido?, cielos…

- Bueno es normal que estés pálido y tengas sueño – Hades sonrió muy divertido cuando dijo esto, Seiya lo miró algo confuso hasta que su esposo le puso la mano en su vientre y arqueó una ceja

- No… en serio?

- Yo creo que si, aún no puedo sentirlo pero… creo que si

- Ohhhh Zack, dioses… - Seiya se dejó caer en el pasto con su bebé acomodado en su pecho, el castaño puso una mano en su vientre pero no sintió nada, aunque ya pensándolo bien, su esposo tenía razón, él estaba con sueño todo el tiempo, tenía sueños muy dulces de nubes de algodón, tenía antojos raros y todo le parecía agrio, dioses…

- No me digas que no estás feliz – Hades se acostó a su lado y lo abrazó

- Claro que si, es al que esperábamos desde hace mucho tiempo pero nos están ganando en número Hades, solo espero que el nuevo terremotito sea un poco más tranquilo que este, este bebé nos ha hecho ver luces – dijo Seiya acariciando a Damon que estaba acurrucado en su pecho y dijo:

- Yo bebé…

- Si, tú eres mi bebé… dame un beso… uyyyy gracias

- Yo creo que nos va a ir bien, tú mismo has visto a Zack con tus propios ojos así que no te preocupes amor, todo va a estar bien… ya lo verás

- Eso espero…

 

Hades pasó la tarde jugando con sus hijos, su nuevo conejo, los hijos de Shun y Julián, y todo fue paz, pero el Dios de los muertos sabía que esto no duraría y estaba tentado a hablar de todo con Julián, el tiempo se acercaba y pronto les tocaría actuar, el Dios de los infiernos había pensado en hablar con Atena también, pero no sabía que tan prudente sería hablarlo con Shun y Seiya, ellos sería los blancos de los ataques, pero su esposo ahora estaba de encargo, y según Zack, Shun pronto lo estaría también… esto se complicaba, mejor lo hablaba primero con Julián, ya luego ambos trazarían el plan… si… esa era la salida… debía confiar en Julián y contarle todos los detalles que no le había contado hasta ahora

 

***

Una mañana de sol, el fin de esa semana infernal de negociaciones, los dioses habían decidido que no se iban a reunir ese sábado, el ambiente estaba demasiado pesado así que, las Diosas Hera, Deméter y Afrodita estaban en el templo de la Diosa de la naturaleza, tomaban un aperitivo mientras hablaban de todo y nada, Hera no podía ocultar su indignación sobre la última escapada de su esposo y hablaba con amargura y resentimiento, Zeus le había hecho esto desde siempre pero… su paciencia ya había rebasado al borde hacía mucho, la Diosa del matrimonio lo que quería era venganza en este punto

- No crees que has hecho lo suficiente ya?, mataste a esa muchacha y al niño no nato, qué más deseas?, qué más quieres hacer? – preguntó Deméter y sonaba preocupada, nunca había visto tan indignada a Hera

- No lo sé… pero esta situación no puede seguir, por algo tenemos normas, reglas, o el matrimonio ya no significa nada?

- No digas eso Hera, tú sabes cómo es tu esposo – intervino Afrodita tomando un sorbo de su café

- Eso… no lo justifica – la Diosa del matrimonio miró con dureza a la joven que bajó la cabeza y suspiró, ella no podía defender lo indefendible, lastimosamente Zeus si era culpable de lo que Hera le acusaba, y ahora por lo que ella había hecho con esa pobre muchacha, los otros dioses se habían puesto en su contra, esto era lo último que le faltaba a la diosa del matrimonio, que levantó una mano y una muchacha que tenía un platón de frutas en las manos se acercó, Hera tomó un racimo de uvas e hizo otra seña a la muchacha para que se retire, pero ésta no lo hizo, Afrodita levantó la cabeza y vio como la muchacha palideció, sus piernas empezaron a temblar, el platón de frutas cayó causando un estruendo monumental y junto al platón de frutas, la muchacha también cayó al suelo y empezó a contorsionarse de forma antinatural, su rostro tenía una expresión de dolor única, sus ojos se tornaron blancos y un grito gutural escapó de su garganta

 

Las tres diosas se levantaron pero no se atrevieron a tocarla, simplemente la miraron mientras se contorsionaba y se movía, gritaba y lloraba, hasta que de pronto se quedó quieta, muy quieta, luego un vapor blanco la envolvió y la levantó del suelo, la muchacha parecía un monstruoso títere movido por invisibles hilos, echó la cabeza hacia atrás y las diosas pudieron ver como lágrimas de sangre bajaban por sus ojos al tiempo que una voz que no podía ser la propia habló desde la chica y dijo:

 

Pasado, presente y futuro, se disuelven en la línea del tiempo

Dioses, humanos y bestias alzarán al cielo sus puños en lamento

La destrucción, el olvido y la desolación llegarán a todos los rincones

Cuando los que no debían nacer usen en contra de los dioses sus dones

Los hijos de los mortales traerán consigo muerte, sangre y fuego 

La era de los dioses se extinguirá sin importar el ruego

En medio de la tempestad una nueva orden será a la fuerza impuesta

Que hará del futuro y de la vida una experiencia funesta

Se tiene que restablecer el delicado y frágil balance  eterno

Eliminando la creciente amenaza de los mares y del Averno

Tiempos turbulentos se entrelazan en el serpenteante camino

Lo reducirán a sangre y cenizas si se conserva el cruel destino

Busca y hallarás el instrumento que dejará en el tiempo sus huellas

Que se encuentra en la legendaria laguna que no refleja las estrellas

 

La muchacha cayó pesadamente al suelo y ya no se movió más, estaba visiblemente muerta, Hera pestañeó un par de veces mientras miraba como Afrodita se arrodillaba junto al cuerpo de la muchacha y le tomaba la mano comprobando que ya no tenía pulso, Hera lucía pálida al igual que Deméter, esa profecía había sido una de las más explícitas que habían escuchado últimamente, el contenido de la misma era desastroso, sus más escondidos temores tomaron forma, Artemisa se lo había dicho pero la había ignorado, los planetas se estaban alineando y ahora… todo se cumpliría, las tres diosas se miraron y luego miraron al cadáver de la chica, esto… lo cambiaba todo…

 

Notas finales:

Chan chan chan...

Y ahora?, Qué hará Hera?, Será que Deméter es aliada o enemiga?

No se pueden perder el capítulo del viernes, está veneno

Muchas gracias por leer y nos vemos el viernes en el capítulo nuevo, bye


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