…
Yunho se despertó y como todas las mañanas Jaejoong corría al baño para vomitar. Dos semanas ya habían pasado desde aquella noticia.
<<¿Qué piensas hacer cuando su bajo vientre empiece a crecer?>>
- No lo sé. No puedo decirle. No me creerá – habló en voz baja con su demonio.
<<Eso es verdad. Creerá que estás loco o puede que ya lo estés>>
Jaejoong regreso al dormitorio limpiándose la boca después de lavarse.
- No entiendo estos vómitos matutinos. El doctor Kim dijo que sólo era por falta de vitaminas. Estoy tomando esas cosas – dijo Jaejoong sobándose el estomago – Creo que subí de peso.
- N-No, te ves genial – dijo él para tranquilizarlo.
- ¿No crees que estoy más gordo? – pincho molesto su vientre, aun plano – Tendré que ejercitarme más, estoy muy flácido.
- ¡No puedes hacerlo!
Jaejoong se le quedo viendo pidiéndole una explicación.
- Junsu dijo que no debías hacer esfuerzo, que sólo necesitabas tomar tus vitaminas.
- No tengo problemas en tomar las vitaminas pero… ¿Por qué acido fólico? Eso toman las embarazadas.
- Cof cof – Yunho se ahogo con su propia saliva – Junsu sabe lo que hace, después de todo es médico.
- Pues buscare una segunda opinión. Me siento cansado y últimamente lloro por todo.
- Eso no es verdad.
- La otra vez llore por un comercial de gel de baño para bebés.
Yunho se encogió de hombros al recordar ese día. Jaejoong no paró de llorar hasta que le compro un helado de chocolate y fresas.
<<¿Cuánto más vas a ocultárselo?>>
- No se lo diré – dijo Yunho sin percatarse que había hablado fuerte.
- ¡¿Qué es lo que no me dirás?! – preguntó preparándose para echar a llorar – ¿Me estas engañando? ¿Es con la nueva vecina? ¿Ya no te gusto porque estoy gordo?
- No es eso Jaejoong y no estás gordo. Por favor deja de llorar.
- No puedo evitarlo… Buaaaa
- Lo siento, lo siento. – lo obligó a mirarlo – Jaejoong. No quiero a nadie como te quiero a ti. Creo que es el momento de decirte…
Jaejoong dejo de llorar expectante por lo que diría el más alto.
- ¿Quieres vivir conmigo?
La ilusión se borró del rostro de Jaejoong y empezó a llorar de nuevo.
- ¿Qué hice mal?
- ¡Todooo! – y Jaejoong salió corriendo del dormitorio.
- Nueve meses… No creo soportarlo.
…
Jaejoong sentado para la hora del almuerzo devoraba sin descanso su pulpo al natural. Yoochun trago saliva intentando no vomitar.
- Así que tu y Yunho van a convivir – dijo Yoochun intentando comprender el voraz apetito de su amigo – Sigo pensando que tu y él no tienen futuro.
Tragó y dejo los palillos a un lado del plato.
- ¿Lo viste con alguna chica? ¿Quién es?
- No. No lo vi con nadie, es solo que… si él te lastima…
- Estaré yo para ayudarle – apareció Jung Il Woo tomando lugar junto a ambos chicos.
Jaejoong se tenso. Ver a Il Woo le traía los recuerdos de su ruptura.
- Así que es verdad. Tú y Jung están saliendo – dijo Il Woo sin ningún reproche – No duramos ni doce horas como novios. ¿No es gracioso?
- ¡Oh! Se me hace tarde para mi trabajo – Yoochun cogió su bolso y se fue dejándolos solos.
- Lo siento. Desde el principio sabias que mi corazón era de él.
- Tienes razón. Aun así quise ser tu novio. La persona que te protegería y te amaría por siempre – le dijo mostrándose comprensivo a pesar del rechazo.
Verlo y escucharlo tan comprensivo y amable hacia que la culpa golpeara a Jaejoong. Si las cosas no funcionaban con Yunho, realmente era un estúpido por dejar a ir semejante hombre.
- No es tu culpa – Il Woo habló mientras cogía las manos de Jaejoong sobre la mesa – Pero desearía que tu corazón fuera de otro y no de Jung Yunho.
- ¿También crees que él no es para mí?
- Podrías tener a cualquier hombre Jaejoong, pero no a ese. Jung Yunho es preso de sus propios deseos. Ahora son novios pero…
- No somos novios – Jaejoong agacho la mirada muy triste.
- ¿No te propuso formalmente una relación? – Jaejoong negó con la cabeza y una débil sonrisa se dibujo en el rostro de Il Woo – No te diré lo que tienes que hacer porque tu lo escogiste. Pero piensa un poco. ¿Qué pasara cuando se aburra de ti? ¿Qué pasara cuando te sea infiel? Tú no eres su novio, no podrás reclamarle.
Jaejoong se hundió más en las dudas y el temor. Si Yunho lo dejaba él no podría seguir. <<Si él me deja no sé qué hare>>
…
Yunho saltó esperando esquivar las balas, pero una le atravesó el brazo
- ¡Maldición! – se maldijo viendo el pequeño rasguño.
Junsu y SeungHyun habían llegado para terminar de asesinar al hombre que se atrevió a disparar contra su camarada. Yunho les agradeció, pero su cuerpo estaba más débil para la lucha que otros veces.
Bajo la calma del bosque, Yunho apoyó su espalda contra el tronco de un árbol. Observó los tres cuerpos sin vida de los cazadores. En otro tiempo, él solo hubiera acabado con esos tres, pero ahora y en su estado, necesitaba la ayuda de sus amigos. La misión ya era un fracaso. La pista que tenían sobre la séptima reliquia también era seguida por los cazadores.
- Tendremos que esperar al eclipse para hallar la séptima reliquia – dijo Changmin sin una gota de sudor al asesinar dos cazadores mas.
- Ese día no habrá solo tres o cinco cazadores – Yunho golpeo el tronco del árbol – Tenemos que encontrarlo antes.
Changmin observó la frustración de Yunho y lo cansado que se veía. No tenía dudas, Jung Yunho se estaba debilitando.
Por el contrario SeungHyun era feliz al percibir rabia en Yunho. Su demonio se alimentaba de aquellos sentimientos y Yunho le estaba dando lo que quería, pero ya no era divertido.
- Hay mucha rabia en ti y frustración – habló el hombre de cabello azul a Yunho – No me molesta, pero ya no es divertido. ¿Qué es lo que te sucede?
- Es inútil luchar contra tu demonio y su naturaleza – dijo Junsu viendo de reojo a Yunho.
La voz de Junsu era tan triste que SeungHyun sintió pena. Pero Yunho le lanzó una mirada asesina a Junsu para que callara.
- ¿Qué esconden ustedes dos? – les preguntó conociendo las miradas cómplices de esos dos.
- Nada – respondió Yunho viendo su brazo herido. ¿Por qué la herida no sanaba?
- Un simple rasguño y no puedes curarlo – Changmin intervino – Soy todo oídos. Habla.
Yunho apretó los labios. Un demonio como él no podía enamorarse, no era como los demás. Hasta SeungHyun con su mal genio y su sed de sangre tenía una pareja. Changmin a pesar de tener encerrado a Muerte, ya tenía a alguien que lo amaba y Siwon había robado el corazón de una hija de Venus. Tal vez esa era una de las razones por los que dejo a sus amigos. Todos luchaban por ser libres y amar a sus parejas como humanos. Todos podían decir que alguna vez conocieron el amor, incluso el pequeño Junsu amo y sufrió la pérdida del amor.
- Busco en la oscuridad las emociones marchitas en mi corazón – Junsu cantó sentado sobre la copa de un árbol – No puedo ver la luz. Aquí no hay luz. Sigo deambulando en un valle de sueños. Oscuridad en mis ojos. No veo el ayer, el hoy, ni el mañana. No puedo ver la luz. Buscando la respuesta. ¿A dónde en este mundo debería ir?
La hermosa y triste voz de Junsu, llego hasta el corazón de Yunho. No podía seguir ocultando a Jaejoong y los motivos de su repentina debilidad. Empezó a narrar desde el principio, desde que conoció a Jaejoong por primera vez.
Cuando terminó su relato Junsu dejo de cantar.
- ¿Cuántos días? – le preguntó Changmin a Yunho.
- Tres semanas.
- Estas luchando en agonía – dijo Changmin molesto – No podrás resistir mas.
- Al menos lo intentare.
SeungHyun se cruzó de brazos admirando la capacidad de resistencia de Yunho, pero no podía dejarlo debilitarse. En unos días, Siwon y los demás llegarían, y necesitaban toda la fuerza de Yunho para la batalla final.
- Él no tiene porque saberlo. Lo haces y asunto olvidado. Todos felices.
…
Jaejoong se despertó. Miró el despertador y ya pasaban de las dos de la mañana. Escuchó la puerta abrirse. Cerró los ojos sabiendo que era Yunho el que llegaba.
Yunho se quitó el reloj y se dispuso a ir al cuarto de baño para quitarse el asqueroso perfume de mujer.
- ¿Qué estoy haciendo? – se preguntó mientras el agua bajaba por todo su cuerpo – Mi cabeza da vueltas. ¿Por qué no estoy pensando bien?
Antes de salir del cuarto de baño ato una toalla a su cintura. Ahora, él solo quería dormir pero no esperaba encontrarse a Jaejoong sentado en la cama con las rodillas al pecho.
- Perdón. ¿Te desperté? – dijo buscando ropa que ponerse. Él no podía ver a los ojos a Jaejoong y mentirle. Era mejor darle la espalda, al menos ese día.
- ¿Dónde estabas?
Yunho mentiría si dijera que no esperaba esa pregunta.
- Con unos amigos. Ellos volvieron a Seúl hace poco y fui a verlos.
Jaejoong no pudo evitar ver las marcas de rasguños en la espalda de Yunho. Y ahí estaba nuevamente intentando no llorar.
- Buenas noches – dijo escondiéndose en la cama para no llorar.
…
Junsu caminó por los pasillos del hospital, una de las enfermeras lo llamó para presentarle al nuevo estudiante para las pasantías en emergencia.
- Él es Park Yoochun – le indica la enfermera y Yoochun abre los ojos no pudiendo creer que aquel chico que se cruzo en el baño del club era el mismo que tenia frente a sus ojos
- Bienvenido, soy el doctor Kim Junsu – dijo Junsu sin mostrar alguna emoción – Tengo que irme.
- Es alguien muy reservado – dijo la enfermera excusando la actitud seria de Junsu.
- Ya veo – suspiró algo decepcionado.
…
Junsu se encerró en su consultorio. El corazón le latía tan rápido que parecía escapar del pecho.
<<Es muy parecido a él>> habló Tristeza y Junsu negó con la cabeza.
- No puede ser él.
<<Él murió hace mucho como olvidarlo. Ambos lloramos ese día>>
Junsu presionó sus puños recordando ese día. Su gran amor había muerto protegiéndolo de Jung Il woo. Junsu ese día despertó la furia de Tristeza y fue incontenible su dolor. Tanto que lastimo a sus camaradas. Desde ese día, guardo su corazón para siempre. Su dolor lo alimentaba cada día y lo ayudaba a seguir viviendo hasta el día en que asesinara a Jung Il Woo. La venganza no era su demonio, pero su parte humana aun quería justicia por su prometido muerto.
…
Yoochun cogió su bicicleta para montarla, pero se detuvo al ver salir al joven doctor de mirada triste y seria. Algo en lo más profundo de su ser quería estar ahí, junto al médico y no dejarlo ir mas.
- ¿Qué me está pasando? – Yoochun se preguntó desconcertado de sus propios pensamientos – Debo estar muy cansado por pasar la noche en emergencias.
De repente su vista se nublo y al final todo se oscureció para él.
- El único amor que deseo es el tuyo. Junsu. ¿Qué hago si no estás a mi lado?
- No puedo, no debo… usted es un cazador.
- Te amo y me amas. Dejare mi clan por ti, para estar juntos.
- Yunho no lo aceptara… él podría matarte por ser el príncipe de los cazadores.
- ¡Que me mate, pero no estaré ni un día mas lejos de ti!
- Yo no soy alguien para usted, yo…
- Eres el amor de mi vida. Junsu, te amo y nada más importa. Viviré mi vida para protegerte y amarte aun más allá de la muerte.
Yoochun abrió los ojos, extrañado por aquel sueño.
- ¿Qué fue eso? – preguntó en voz alta y al voltear vio a Kim Junsu a su lado.
- No muchos residentes soportan las extenuantes horas de emergencia. Tienes que descansar – dijo serio, se estaba por ir pero Yoochun le habla.
- Espera – se pone de pie y camina hasta Junsu – ¿Quién eres?
Junsu no movió un solos musculo, pero todo su ser tembló al escuchar otra vez la voz de Park Yoochun.
<<No solo su rostro es igual, también su voz es tan similar a nuestro príncipe muerto>>
Continuara...