Sai flotaba en la piscina dejando que el sol lo golpeara, en sus manos estaba una hoja de papel y un lápiz y no lograba trazar ni una línea. ¿Qué podía hacer? ¿Qué podía hacer? Recordó a toda su familia de repente y comenzó a dibujar, los veía tan reales en su mente que no fue difícil.
Su padre, su madre, su hermano. Todos comenzaron a tomar forma lentamente, se dio su tiempo ¿Hace cuanto no hablaba con Shin? ¿Su hermano? El hombre y su padre seguían en Australia, y hacía tiempo no hablaban. En realidad era su medio hermano, pero era el único que conocía y para él era su único y verdadero hermano. Le llevó tiempo no supo cuánto pero cuando notó el dibujo listo, salió de la piscina y se dirigió a su laptop, del otro lado apareció un hombre parecido a él
-¡Hi bro! –Saludó el hombre-
-Hi Shin –Sonrió también- ¿Tienes tiempo para hablar?
-Sure
Gaara bajó del autobús y observó alrededor, después aparecieron una mujer rubia y un hombre de cabellos castaño abrazándolo
-¡Gaara!
-¡Has vuelto! –Gritó ella abrazándolo-
-Temari me ahogas…
-Lo siento, lo siento ¿Vamos a casa?
-Claro
Temari y Kankuro No Sabaku, sus hermanos mayores. Aunque sabían que Gaara había vuelto a Japón no habían podido ir a visitarlo y esta vez Gaara se dio el tiempo de visitar a su familia, hace mucho no los veía.
La casa donde había crecido, ahora era de Temari y su sobrino apareció para saludarlo, Kankuro aún vivía en esa ciudad pero ya tenía su vida también hecha con una mujer.
Naruto estacionó el auto y bajó sin comprender bien
-¿El muelle?
-Solo sígueme dobe –El rubio rodó los ojos cuando quería Sasuke podía ser muy misterioso. Cuando Naruto vio a Sasuke subir al yate quedó petrificado- ¿Subes o qué?
-¿Es tuyo?
-Claro ¿De quién más seria? ¿Subirás? –Naruto subió viendo todo alrededor-
-Que grande… Tiene de todo… ¿Seguro que no intentas solo regodearte ante alguien? –Sasuke rió-
-Seguro. No me regodeo, te lo estoy mostrando –Naruto se tambaleó un poco cuando el yate se movió entonces notó que el moreno lo había arrancado-
-¿¡Que estás haciendo!? ¿Sabes navegar esto? –Preguntó alterado- No quiero morir
-Exagerado, por supuesto que se navegar mi propio yate ¿Para qué lo tendría entonces? ¿Solo para mirarlo? –Naruto le dio la razón con la cabeza-
-¿Y a dónde vas? –Preguntó parándose cerca del moreno-
-A dar una vuelta, yo también tengo cosas que mostrarte…
-No me había montado en un yate –Confesó-
-¿Primera vez?
-Aja…
Naruto salió a la proa y se sostuvo del borde inclinándose un poco hacia afuera, Sasuke que podía verlo claramente se alarmó
-¿¡Que crees que haces!?
-¡No me grites así que asustas! –Se paró normal- Quería ver como rompen las olas, relájate –Volvió a inclinarse un poco, Sasuke rodó los ojos y luego suspiró más tranquilo- Es genial –Dijo para sí mismo volviendo a pararse-
Caminó hasta la popa observando alrededor, la espuma que dejaba a su paso, le gustaba el agua y como se veía desde ahí. Analizó la arquitectura del yate, ¿Cómo no hacerlo? Le llamaba la atención, luego volvió a entrar con el moreno para ver desde ahí. Se quedó hablando con el moreno el trayecto “¿Quieres ver algo genial?” Fue la pregunta a la que debió decir no, pero como él era Naruto Namikaze, tan curioso e incapaz de decir no tuvo que sostenerse cuando el moreno aumentó la velocidad y giró de repente haciendo el yate ladearse un poco y el agua levantarse
-Jajaja
-Jajaja –El susto pasó rápido y el rubio le siguió la corriente al moreno- ¡Eso fue genial! Que divertido ¿Lo puedes hacer otra vez?
-Claro… -La sensación podría marear a otros pero a ellos les daba gracia, cosquillas desde el interior y al rubio le gustó la forma en que se veía el agua levantarse, seguramente desde lejos el yate también se debía ver genial luego el moreno detuvo el yate-
-¿Nos detenemos?
-Un rato…
-Enséñamelo todo –Pidió, Sasuke alzó una ceja con curiosidad y una sonrisa traviesa- ¡Hablo del yate pervertido!
-Yo no dije nada… -Bromeó guiando al rubio por toda la parte interna del yate-
Naruto no podía creer todo lo que tenía dentro, si parecía una casa flotante, si lo veía como casa estaba el recibidor y la sala muchos muebles, estaba el comedor, la habitación, el bar, ¿Se podía vivir en un yate?
-Yo podría mudarme a aquí tranquilamente
-No es tan fácil –Dijo el moreno sonriente cuando salieron al segundo piso, algo como un pequeño balcón con techo incluido y un inmenso sofá en forma de U con una mesita de cristal en el centro-
-Yo quiero uno así –Bromeó- ¿Puedo tomar algo?
-Te dije que puedes hacer y pedir lo que quieras, es parte de ver lo que es mi mundo.
Naruto no tardó en llegar al bar seguido por el moreno y entre ambos bebieron algo y salieron aún con sus vasos en manos al balcón solo a observar alrededor, todo estaba tan calmado, el agua parecía tan pacífica. Solo se quedaron hablando como si nada disfrutando del momento.
-Traer a una mujer aquí, eso debes hacer. –Sasuke no comprendió la idea pero ni siquiera miró al rubio solo veía el agua alrededor- Ninguna podría negarse después de una cita aquí
-No necesito traer a ninguna mujer aquí
-Ay si, Don Juan
-Eres el único además de familia que sube al yate –El rubio se asombró de aquello- No necesito ni quiero traer a más nadie
-… -Negar que esas frases lo ponían incomodo sería mentir descaradamente y Sasuke lo sabía porque luego le regalaba esas sonrisas burlonas, el rubio suspiró intentando obviar la frase- Sería genial echarse un chapuzón ¿No crees?
-No puedes
-¿Por qué no?
-Porque yo lo digo, hay sitios donde no puedes nadar, podrías ahogarte
-Ah… -Exclamó aburrido- Que mal. ¿Ah? –Reaccionó y miró al moreno que no lo veía a él- Ne ¿Te estás preocupando de que pueda morir?
-Claro –Lo miró sorprendiendo al rubio- No quiero tener que pagar después por llevar tu cadáver de vuelta –Dijo como si nada-
-¡Teme! –Gritó molesto, Sasuke en cambio rió-
-Jaja, que sensible usuratonkachi –El rubio bufó mirando a otro lado, lo que no se esperó después fue que el moreno le lanzara lo último de líquido que quedaba en su vaso-
-¡Ah! ¡Sasuke!
El moreno salió corriendo y el rubio corrió detrás de él, pero paró un momento y agarró algo de agua… Sasuke sin querer y por andar en medias resbaló y cayó, Naruto llegó sentándose sobre su estómago y sosteniendo sus muñecas, entonces sonrió Sasuke sudó frío y lo siguiente que sintió fue el agua sobre su rostro, el rubio hasta hace poco tenía las mejillas infladas de agua
-¡Usuratonkachi! ¡Ah, qué asco Naruto! –Gritó pero no logró levantase, Naruto en cambio se carcajeo-
-¡Uno por uno no es trampa!
-¡Yo no te escupí!
-Me arrojaste tu vaso –Siguió riendo pues le daba gracia que Sasuke estuviera tan molesto y empapado, el moreno notó que ya el rubio no lo sostenía con fuerza pero no se levantó, ver al rubio reír desde esa perspectiva era una buena imagen- ¿Por qué me ves así? –Preguntó al notar al moreno sonriente, lo siguiente fue sentir su cabeza golpear contra el suelo, ahora Sasuke estaba arriba- ¡Teme!
-¿No decías que no era trampa? –Preguntó burlón, pero no se esperó lo siguiente, Sasuke simplemente se dejó caer sobre él-
-¿Pero qué? –Tembló al sentir al moreno pasar su nariz por su cuello- ¡Eso da cosquillas! –Sasuke sonrió y no pudo evitar depositar un beso en el cuello del rubio, Naruto abrió los ojos sorprendido y empujo al moreno alejándose- ¡No hagas eso! –Llevó una mano a su cuello, Sasuke no dijo nada solo le mostró la mano al rubio- ¿Qué?
-Ayúdame, ayudémonos mutuamente para levantarnos –Se tomaron las muñecas y se levantaron al mismo tiempo, Naruto pasó de él saliendo a la popa, Sasuke suspiró frustrado y esperó un momento antes de ir tras el rubio- ¡Naruto!
Gritó alarmado al ver al rubio con medio cuerpo sobre el borde del yate, corrió hasta el devolviéndolo adentro y Naruto lo miro sorprendido y algo molesto
-¿¡Que crees que haces!? –Preguntó alarmado-
-¡Cálmate! –Gritó alejando al moreno- Te dije que me gusta ver como rompen las olas, quería ver como se veía con el yate detenido –Sasuke suspiró llevando una mano a su pecho y otra a su cabeza, Naruto alzó una ceja ¿Se habría preocupado tanto?- Lo siento
-¿Hm? –Sasuke abrió los ojos sin comprender, el rubio miraba hacia otro lado-
-Lo siento si hice que te preocuparas
-… -Sasuke sonrió sinceramente, ¿Naruto había notado su preocupación? El rubio al notar aquello le sonrió de vuelta-
Sai esperó mientras escuchaba que el teléfono repicaba, ¿Estaría ocupado? Pero entonces escuchó su voz
-Dime
-Gaara, ¿Cómo estás?
-Bien ¿Y tú? ¿Pasa algo?
-No, no nada –Sai caminó por el jardín de la casa sintiendo el césped bajo sus pies- Solo quería hablar con alguien, estoy algo… Aburrido y nostálgico
-¿Nostálgico? ¿Y eso por qué?
-Es… Es solo que extraño a mi papa y hermano, acabo de hablar con ambos –Gaara volteó observando a su hermana y hermano a lo lejos hablando tranquilamente-
-Te entiendo, estamos igual. Excepto que yo estoy junto a mis hermanos ahora
-¿Interrumpo?
-No, solo estábamos hablando como si nada. Yo también tenía tiempo sin ver a mi familia y pasaré el fin de semana con ellos
-¿Estás fuera de la ciudad?
-Si de hecho. –Sai se sintió más solo aún-Pero solo será el fin de semana
-Ya veo… -Gaara notó el cambio en el humor del moreno-
-¿Seguro que estás bien?
-Sí, mejor vuelve con tu familia. Hablamos después
-Sai…
Pero no pudo decir más, el moreno había colgado
-¿Está todo bien? –Preguntó Kankuro acercándose a él-
-Sí, eso creo –Una sensación de inconformidad le quedo en el pecho-
Sai en cambio se recostó en el césped, ¿Cómo Sasuke soportaba estar todos los días solo en esa casa tan grande? El ya se sentía quizás hasta claustrofóbico y por eso estaba afuera, no quería dormir, no quería comer, no quería dibujar, no tenía donde ir, ni con quién hablar…
Deidara e Itachi estaban de viaje, Gaara estaba con su familia, Naruto la llamada ni siquiera caía, Sasuke había salido hace mucho y tenía el teléfono apagado ¿Es que acaso aún no tenía más amigos? Solo una persona pasó por su mente
-Hola –Sonrió lo mejor que pudo-
-Sai, hola pasa… -Sakura abrió mejor dejando entrar al moreno- Vaya no esperaba verte
-Espero no estar molestándote
-No, para nada. Ven…
-Me sentía algo solo
-Que mal, no es una sensación linda –Sai asintió y luego sintió la mano de la chica en su mano, la miró- ¿Pasa algo? Te ves un poco triste
-Estoy algo nostálgico… Hace poco hablé con mi papa y hermano, están lejos y bueno, quedé un poco triste supongo –Sonrió-
-Ya veo, pero no te pongas triste, sabes que están bien y pudiste hablar con ellos –Sonrió- Entiendo esa sensación, mis papas viven lejos a veces me hacen falta
-¿Y cómo se te pasa?
-Hablo con ellos, saber que están bien es suficiente y además aquí tengo mi vida hecha, mis amigos, mi trabajo no puedo solo quedarme sentada viendo a la nada
-Tienes razón –Sonrió- ¿Te importa si me quedo un rato?
-Para nada, ponte cómodo. Yo tampoco tengo mucho que hacer hoy jaja
El resto de la tarde Sai y Sakura se la pasaron hablando, salieron a caminar a comer un poco y cuando se dieron cuenta la noche ya estaba sobre ellos.
-Mm, una pregunta… Un poco personal quizás –Sakura ladeó el rostro sin comprender-
-Dime
-Tu… ¿Sientes algo por alguien? ¿Tienes a alguien especial? –La chica se sorprendió de la pregunta y el sonrojo saltó a su rostro junto con una sonrisa nerviosa, Sai comprendió-Entonces si
-Sí, hace mucho que estoy enamorada de un hombre –Sai la miró como queriendo saber más- No soy muy buena para hablar de estas cosas –Rió- El siempre ha sido bueno conmigo, me quiere mucho, me escucha el único problema es que no me corresponde
-¿Ah no?
-No, pero es mi mejor amigo –Sonrió, no notó que el rostro del moreno demostró que se sentía mal- Ese es mi consuelo, tal vez algún día pueda enamorarme de alguien más…
-Mejor amigo…
-Sí, -Suspiró- Naruto siempre me verá como su mejor amiga y una hermana
-¿Naruto? –Sakura notó la completa sorpresa en el rostro del moreno-
-Sí claro Naruto, el hombre que amo
-Es que… Bueno, creo que malinterpreté todo –La mujer no comprendió- Yo creí que tu y Gaara tenían algo –Ella se sorprendió y comenzó a reír, Sai no comprendió-
-Jaja, lo siento pero ¿Gaara? ¿Por qué creíste que teníamos algo?
-Son muy unidos –Movió los hombros como restándole importancia- Lo supuse
-Jaja, y yo que creí que era muy obvia cuando Naruto estaba cerca, todos me decían eso pero ¿Gaara? No –Sonrió- No, Gaara es solo un muy buen amigo. Sí, nos llevamos bien, somos cercanos y nos tenemos confianza pero eso es normal entre amigos ¿No crees?
-Tal vez es Gaara el que siente algo y no lo sabes
-¿Por mi? Jaja no
-Te ves muy segura
-Lo estoy –Lo miró fijamente deteniéndose un momento- Gaara y yo solo somos amigos y jamás ha existido algo entre nosotros, tampoco creo que pase.
-Sí pero ¿Cómo sabes que no está enamorado de ti?
-Porque eso se nota –Sonrió, Sai no entendió- Cuando amas a alguien se nota, y Gaara me ama pero como una amiga, no como novia. Jamás he visto a Gaara con alguien si te soy sincera pero estoy casi segura de que el día que se enamore, lo sabré –Sonrió- Lo conozco
-…
-Sai, ¿Tú no tienes a alguien? –Volvió a caminar-
-… -Se lo pensó un momento- No, yo jamás me he enamorado
-¿En serio? –Ella parecía incrédula, él sonrió asintiendo- Entonces ustedes tienen algo en común, estoy segura que cuando te enamores, al igual que Gaara, entregarán todo de si por hacer felices a su pareja –Sonrió- ¿O no?
-Sí, eso supongo –Sonrió igual- ¿Y por qué Naruto?
-Vaya podría darte tantas razones jaja, Naruto es romántico cuando se lo propone, es detallista, siempre está pendiente de quienes le importan, entrega todo de sí, es un muy buen hombre…
Sai no comprendió por qué de aquellas emociones en su interior. Tristeza cuando creyó que sus sospechas sobre Gaara y Sakura eran reales, alegría cuando Sakura afirmó amar a Naruto, Anhelo de algún día amar a alguien como la chica amaba al rubio porque ahora se daba cuenta que era verdad, la forma en la que ella se sonrojaba, su sonrisa y mirada resplandecían como toda ella de repente se volvía tan alegre. ¿Podría él algún día amar como pareja a alguien? Ojala sí…
Naruto recostado en el borde del yate observó la luna reflejarse en el agua, las olas calmadas golpear el navío y la brisa fría soplar contra su cuerpo
-Es una linda vista –Volteó un poco el rostro al escuchar al moreno cerca, Sasuke miraba el horizonte igual que él- ¿No?
-Si… ¿Por qué aún no volvemos?
-Toma –El rubio observó la copa que el moreno le entregaba, él tenía una igual en mano- ¿Te quieres ir? –Naruto le restó importancia, parecía no importarle- ¿Es que tienes que volver con tu hermano? ¿Debo pedirle permiso para pasar tiempo contigo? –Bromeó, el rubio sonrió-
-No. Además eso sería raro –Rió bajo- Ni que fuera chica y tuviera un novio prohibido. Solo preguntaba ¿Me tendrás secuestrado otra vez por el fin de semana?
-¿Secuestrado? Vaya, fuertes palabras –Sasuke caminó alejándose y el rubio lo siguió hasta que volvieron al balcón del yate- Si te sientes secuestrado puedes irte, no sabía que te molestaba tanto compartir conmigo –Sasuke no pudo ver la mueca del rubio ¿Así se sentía él cuando el rubio decía que quería volver? Fue la forma en que lo dijo que lo hizo sentirse mal, parecía que el moreno solo intentaba ser bueno con él ¿Por qué tan reacio Naruto?-
-¿Quién dijo que me molesta? –Sonrió cuando el moreno le dirigió la mirada, ambos tomaron asiento- Solo era una duda.
-Ya veo… -Dirigió la vista a la luna lejana y sonrió, el rubio se dio cuenta- ¿Quieres saber algo? –Preguntó como si nada, el rubio asintió y Sasuke lo miró fijamente- Mañana es mi cumpleaños
-¿¡Que!? –Gritó causando que el moreno hiciera una mueca de disgusto- ¿En serio? –El moreno asintió- ¡Qué bien! –Sonrió- ¿Y qué harás? –El moreno volvió la vista al horizonte-
-¿De qué? Lo mismo de siempre, nada. Es solo un día más, después de todo no tengo familia con quien compartirlo –La tristeza salió con cada palabra del moreno y su mirada se volvió lastimera, el rubio se sintió mal y se sentó junto a él, con una mano golpeó a modo de ánimo su hombro-
-Pero tienes amigos, personas a quienes les importas y que se alegran que tengas un año más con ellos –Sonrió- Para eso son los cumpleaños ¿No? Para celebrar un año más disfrutando de tus seres queridos
Sasuke no miró al rubio pero se sorprendió, sonaba como… “Los cumpleaños son para festejar un año más con tus seres queridos Sasuke” Mikoto. ¿Naruto pensaba igual? No se dio cuenta y giró el rostro cuando sintió las lágrimas inundar sus ojos, Naruto intentó mirar su rostro pero no pudo. Sasuke se tragó todo y volvió la vista al horizonte
-¿Dije algo malo?
-No… Dijiste lo que pensabas y tienes razón. Eso hago
-¿Hacer qué?
-Disfrutar con quien me importa –Mostró su copa esperando que el rubio chocara la suya y le sonrió- Celebro contigo
-Salud –Sonrió el rubio, si en verdad Sasuke se sentía tan mal, él sería quién le hiciera apreciar ese día y le demostraría que le importaba. Porque sí, Sasuke Uchiha le importaba-
-Salud
Sin que Sasuke lo notara el rubio estuvo pendiente de la hora solo esperando la medianoche, ninguno tenía sueño y se quedaron bebiendo y hablando como si nada. Pero la bebida les dio sueño y no pudo ver cuando se hicieron las 12. Se despertó temprano cuando sintió el sol golpearlo con fuerza, “Joder, me quedé dormido aquí, por Dios” pensó dándose cuenta que se quedaron dormidos en el inmenso sofá en forma de U. Observó a Sasuke del otro lado del sofá, se recordó de repente que era el cumpleaños del moreno y sonrió gracioso.
¿Sería Sasuke de sueño ligero o profundo? Solo había una forma de saberlo, lo movió un poco y el moreno no dio razones de despertar, pero al levantar su brazo abrió los ojos asustando al rubio
-¿Qué crees que haces?
-Nada… -Mintió- Nos quedamos dormidos aquí ¿No te molesta el sol? A mi si, iba a llevarte adentro… -Sasuke se lo pensó un momento y se levantó con cuidado-
-Tienes razón… -Bostezó levantándose, el rubio fue detrás de él y apenas estuvieron en la cubierta empujó al moreno que no se esperó aquello y no pudo hacer nada, cuando se dio cuenta…- ¡Naruto, maldito usuratonkachi! –Estaba dentro del agua, apenas salió a la superficie ya despierto completamente observó al rubio carcajearse de risa en el yate-
-Si vieras tu cara… Jajajaja
-Sí, ¡Búrlate! ¿¡Te dio risa!? ¿¡Por qué carajos hiciste eso dobe!?
-¡Feliz cumpleaños! –El moreno se sorprendió, era su cumpleaños… Solo entonces recordó que se lo había dicho al rubio, rodó los ojos- Y buen baño por cierto
-¡Ayúdame a subir y deja de reír!
-¿Me crees tan idiota? –Preguntó al observar la mano estirada del moreno- Sube tu solo
-Me las pagas
-Uy que miedo… Si te queda bien el look jajajaja –Sasuke estaba obviamente empapado y el cabello se pegaba a su rostro, Naruto por reírse apenas se pudo alejar unos metros cuando el moreno subió y pasó sus manos por su cabello para quitarlo del rostro- Jajaja
-Tsk…
Sasuke se quitó la camisa exprimiéndola, el rubio se quedó a unos pasos. Solo hasta ahora se daba cuenta del físico del moreno, por primera vez… Lo estaba examinando, no se dio cuenta cuando el moreno de reojo lo notó y sonrió orgulloso y aprovechando aquello tomó el brazo del rubio y lo jaló hasta empujarlo pero el rubio apretó su brazo llevándoselo también al agua.
-¡Sasuke! –Gritó-
-¡Me llevaste contigo! –Se quejó-
-¿Y me iba a caer solo? No gracias
-¡Si me empujaste, tu empezaste!
-Fue una broma –Bromeó- Para despertarte por tu cumpleaños…
-No fue buena… -Mintió, no se dio cuenta que le dio gracia la acción del rubio. Pero su vista se detuvo sobre la mueca de desagrado del rubio- ¿Qué? ¿Qué pasó?
-Creo que me golpee al caer… Me duele la pierna
-¿Mucho? –El rubio lo miró extraño cuando Sasuke se acercó de repente mirándolo-
-No… -Se alejó un poco- Solo un poco –El moreno volvió a nadar cerca de él y Naruto a alejarse, Sasuke sonrió-
-¿Qué? ¿Te doy miedo? –Se burló-
-Claro que no
-¿Y entonces? ¿Por qué te alejas? –Con cada brazada con la que Sasuke se acercaba, Naruto se alejaba igual-
-No lo hago
-En serio… No me digas jaja
-… -Otra vez, Sasuke lograba ponerlo incomodo pero esta vez no había dicho nada aún ¿Por qué entonces se alejaba?- Me gusta mi espacio, deja de seguirme
-¿Eres dueño del océano? Puedo nadar donde yo quiera
-¿Y tiene que ser justo donde yo voy?
-Tal vez –Sonrió con clara lujuria, Naruto no pudo evitar comprender esa sonrisa traviesa y se alteró, lo único que se le ocurrió fue arrojarle agua al moreno que rápidamente perdió toda risa-
-¡Jajajaja! –Pero eso le había causado gracia al rubio y volvió a hacerlo-
-¡Naruto, basta! ¡Pareces un niño!
-Por lo menos no tengo 28
-Con que si…
Sasuke le siguió el juego y antes de darse cuenta también se estaba riendo. Pero notó que la distancia entre él y Naruto se hacía menor para cuando el rubio reaccionó Sasuke ya lo había tomado por el brazo y lo había acercado a él. Ninguno se movió, todo paró, el juego, las risas, todo excepto sus respiraciones y latidos. Naruto fue el primero en notar que ya llevaban segundos observándose fijamente y alejó la vista, Sasuke volvió entonces en sí y soltó al rubio alejándose, Naruto lo miró sin comprender Sasuke solo nadó hasta volver a subir.
Naruto observó la habitación, para estar en un yate tenía muy buen tamaño, había una sola cama ¿Habría otra habitación? ¿Eso podría ser? Un sofá, la vista por una gran ventana era maravillosa, el armario rebosaba de ropa ya Sasuke le había repetido que tomara e hiciera lo que quisiera, y una vez más todo parecía nuevo… Todo olía a nuevo, todo tenía pinta de ser costoso, tomó un pantalón corto y una chemise, luego se dirigió a la ducha.
Sasuke colocó ambas manos en su nuca y se mordió el labio ¿Qué acababa de pasar? ¿Qué fue eso? Llevó una mano a su boca, el recuerdo de cuando probó por fin los labios del rubio en aquella fiesta volvió de repente a él pero de una forma totalmente diferente que no lograba descifrar, por primera vez no comprendía su mente ni sus reacciones. Los ojos fijos del rubio estaban grabados en su memoria, azules, destellantes bajo la luz del sol de la mañana, vivos, claros… Sacudió la cabeza ¿Qué con esos pensamientos? Para cuando se decidió a entrar encontró a Naruto dormido en el sofá de la habitación ¿Cuánto tiempo pasó? Aún había una toalla cerca del rubio, su cabello goteaba…
Lo veía claramente, ahí… Frente a él, si bajaba un poco la vista lo podía ver bien, podía sentir su rostro arder y su respiración volverse difícil, su pecho se sentía oprimido, hacía calor, tenía escalofríos… Pero se sentía bien… Naruto… Susurró.
Abrió los ojos de repente, su respiración estaba acelerada y tenía calor ¿Dónde? Observó al rubio en el sofá aún dormido, él estaba en la cama y un dolor bajo lo alarmó, se inmediato se dirigió al baño y entró a la ducha aún con la ropa puesta. Se sorprendió ¿Eso? ¿Eso había sido un sueño húmedo donde el rubio le practicaba sexo oral? La punzada en su miembro respondió por él, mala jugada de su imaginación.
Colocó una mano en la pared frente a él y los suspiros salieron de él, el caer del agua sobre él ayudaba a disipar el sonido. “Maldición” pensó frustrado, se sentía como un adolescente por despertar así. Salió del baño con una toalla en su cintura y buscó algo nuevo para ponerse, luego observó al rubio dormir ¿Qué hora era? Apenas las nueve de la mañana, suspiró.
Naruto estaba tan absorto, estaba dormido y verlo así solo traía el recuerdo del pequeño sueño de hacía unos momentos, tuvo que alejar esos pensamientos rápidamente pues hacían efecto en su anatomía. Tal vez era hora de volver.
Algo sonaba lejano cuando Naruto despertaba, ¿Se estaba moviendo? Entonces se dio cuenta, estaba en movimiento ¿Estaban volviendo? Se levantó lentamente y se dirigió donde Sasuke, el moreno escuchó sus pasos acercarse pero no se movió ni un poco
-¿Volvemos? –Preguntó estirándose-
-Aja… -El tono de voz el moreno alertó al rubio-
-¿Pasa algo?
-No
-… -Eso significaba si-
Pero no pudo decir nada más hasta que llegaron, bajaron y el moreno habló con un hombre en el muelle antes de alejarse con el rubio, ¿No estaba el Ferrari ahí?
-¿Y tu auto?
-Se lo llevaron… No creerías que lo dejaría aquí hasta hoy
-¿Qué te pasa?
-Nada –La actitud reacia de Sasuke comenzaba a molestarlo. Cuando se dio cuenta el Mercedes del moreno estaba ahí- Entra… -Sasuke subió del lado del piloto y el rubio del otro lado, podía sentir el ambiente extraño ¿Por qué? ¿Estaría Sasuke aún enojado porque lo empujó del yate?-
-¿Me dirás que te pasa? –Sasuke bufó- No pienso rendirme, te pasa algo y quiero saber que es
-Necio
-Y tú terco, orgulloso
-Tsk…
-¿Qué? ¿Es porque te empujé? ¡Lo siento! –Exclamó ya frustrado, Sasuke era imposible y además confuso- ¿Feliz?
-Aja, ¿Ya?
-Vaya humor para un cumpleañero
-¡Deja de recordar que es mi cumpleaños! –Gritó frenando de repente-
-¿¡Estás loco!? ¡Ten cuidado! ¿Y qué tiene de malo? Es tu cumpleaños tu lo dijiste
-Solo olvídalo –Volvió a arrancar- Es un día más
-Cuán poco te quieres… -Sasuke se sintió dolido-
-¿¡Y que te importa!? ¿Qué más da si no me quiero? ¿Por qué habría de quererme? ¡Igual nadie más lo hace! –Naruto se sorprendió, el moreno estaba en crisis de repente estaba dejando salir todo- Olvida el tema, dime dónde vives y te llevaré
-…
-¿Y bien? Estoy esperando
-No
-¿Qué?
-No. –Sentenció- No iré a casa, no necesito que me lleves, no quiero que me lleves. Quiero que disfrutes tu cumpleaños y si depende solo de mí, pues yo haré que tu cumpleaños sea entretenido
-… Estas actuando como idiota
-No, tu actúas como idiota –Sasuke se estacionó, no podía seguir esta pelea mientras conducía-
-¿Cómo me llamaste?
-¡Teme! ¡Como un teme! Oíste bien ¿Qué te dio de repente? Ya me disculpé por lanzarte al agua
-¡No es el agua! ¿No entiendes?
-Entonces explícate
-¡Eres tu maldita sea! –El rostro del rubio se volvió sorpresa e incomprensión- ¿Qué quieres? ¿Seguirme torturando? Joder si yo lo que quiero es tener sexo contigo –El rubio se alejó aún en su asiento- ¿¡Y así quieres pasar el día conmigo!? No me hagas reír, no puedo tenerte cerca ¿Okay? –Se tiró hacia atrás en el asiento con fuerza y rabia, luego suspiró sin ver al rubio- Deberías estar feliz, dejaré de fastidiarte ¿No es eso lo que querías? Si no quieres que te lleve bien, ahora bájate y déjame solo. ¿Qué no entiendes? –Preguntó ya más calmado debido al silencio del rubio- Bájate
-No –Sasuke rodó los ojos, que terco- No puedo
-…
-No puedo dejarte solo en tu cumpleaños, menos con esa actitud, aunque tampoco puedo corresponderte y eso lo sabes… Ne, teme en serio ¿Es por eso que de repente actúas así?
-¿Así? ¿Así como?
-… Le estás dando largas, sabes que estás actuando raro desde que decidiste volver. No puedo ni quiero ser tu amante teme, pero soy tu amigo –Naruto no se daba cuenta que el moreno solo se sentía peor con cada palabra- Y quiero estar contigo hoy, tal vez a ti no te importe pero a mí sí, quiero que celebres tu cumpleaños y que la pases bien
-Bájate –Fue lo único que el moreno dijo, Naruto se dio por vencido-
-Y me llamas a mi terco. Tienes razón –Abrió la puerta- Es solo un día más, porque así lo has decidido tu –Bajó y comenzó a alejarse, Sasuke golpeó el volante-
-¡Maldita sea! ¡Joder! –Gritó sabiendo que nadie lo escuchaba-
Otra vez su mente le jugó en contra al recordar cada cumpleaños cuando sus padres aún vivían, y aún cuando ellos murieron como Itachi se las ingeniaba para sacarle al menos una sonrisa, y ahora Naruto, recordándole todo solo con sus palabras, el rubio quería hacer su día especial y él no quería dejarlo…
-Teme… -Se dijo a sí mismo y puso el auto en marcha