Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

LAS CONSECUENCIAS DE UN SI por AliceDConcordia

[Reviews - 22]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

¡Hola!

Aquí les traigo el nuevo capítulo, pero antes quiero agradecer a quienes comenzaron a seguir mi historia, me animan a continuar. En fin aquí esta la continuación donde se revelan algunas de las consecuencias de la noche de aniversario de esta pareja.

¡Disfrutenlo!

Valery caminaba a toda prisa desde que salió del departamento, tenía una sonrisa de oreja a oreja, no podía estar más feliz, acababa de cortar llamada con Maria, era tanta su felicidad que necesitaba contárselo a alguien, la expresión de sorpresa de la chica al otro lado del teléfono fue de película, casi se queda sorda cuando gritó cuestionando lo que acababan de contarle, sonriendo le dio todos los detalles de su noche de aniversario.A los pocos minutos se encontraba tocando el timbre de la casa de sus padres, no podía esperar para contarles.

-¿Qué?- preguntó emocionada su madre.

-Leo me pidió matrimonio- repetía mostrando la sortija que lucía en su dedo- ayer por la noche y le dije que sí-Su madre gritó al mismo tiempo que la abrazaba.

-oh cariño, estoy tan feliz por ti- tomó su rostro entre sus manos- mi niña va a casarse-

-espero verla aquí pronto, tengo que asegurarme que hará feliz a mi pequeña- hablaba su padre mientras se levantaba para unirse en aquel abrazo.

-¡claro que si! Organizáremos una cena, llamaremos a todos y les daremos la noticia- decía la joven con una sonrisa.

-¿cuando será eso? Recuerda que tu tía Edna vive en Nueva York y sólo viene una vez al año-

-Trataremos de que sea en ese tiempo, después de todo aún no tenemos una fecha- 

-¿fecha para qué?- se escuchó una cuarta voz en la puerta.

-Para mi boda- respondió Valery luego de unos momentos, la sonrisa se le había borrado del rostro, incluso sus padres estaban ahora muy serios, el nuevo visitante de inmediato exigía una explicación de la supuesta locura, según él, que acababa de escuchar.

***


El viernes por la noche Valery llegó a casa de Leonora, ésta aún no salía del trabajo así que decidió preparar una cena especial, apenas llegó su enamorada notó que el ambiente era en verdad romantico y sensual, las lámparas estaban cubiertas por pañuelos de seda rojos, dando una iluminación tenue al lugar, la mesa exquisita, con velas rojas, su castaña se había lucido esta vez y ella tenía el regalo perfecto que aguardaba en la bolsa de su abrigo, la cena era igual que las demás, conversaban sobre su día, sobre lo felices que eran juntas, hicieron más de un brindis con el vino que Valery había elegido para la ocasión.

La castaña tenía todo preparado, despues de la cena puso a reproducir una memoria de música, con todas las canciones que había bailado con la morena, y algunas que en más de alguna ocasión, cuando lograba sacar a flote su lado romántico, le cantaba al oído luego de hacer el amor. Leonora no necesitó invitación para tomarla de la cintura y moverse al compás de la suave melodía, era como viajar en el tiempo, dejar de lado todo lo que había, todo lo malo, sólo eran ellas dos y la música, a pesar de las críticas, de los insultos, de las miradas con desprecio que sufrían a diario, era reconfortante el tenerse una a la otra, Valery se sentía más segura entre los brazos de la que fuese su maestra, Leonora se sentía más fuerte al tenerla a ella, la música seguía y el vino también, se amaron, se demostraron una vez más el amor que se tenían, bajo el cobertizo de cristal en la habitación de aquel departamento, cobijadas por las estrellas y a la luz de la luna, los besos sabían a alcohol, a la morena la vista se le nublaba, estaba feliz, feliz con la mujer que amaba ¿por qué no estarlo para siempre?

Valery estaba recostada sobre su espalda, cubierta por la sabana mientras miraba el filamento, acariciaba el cabello negro de su amante que estaba recostada en su pecho, había sido una noche mágica, la música aún se escuchaba en la sala, se sentía mareada por el vino, y Leonora no estaba mejor, balbuceaba cuanto la quería, besaba sus manos, decía que no merecía a una mujer como ella, de un momento a otro sintió como se movió hasta salir de la habitación, al volver tenía algo oculto tras la espalda.

-Valery ¿eres feliz conmigo?- preguntaba arrodillándose frente a ella.

-claro que si, muy feliz-

-¿No te arrepientes de haberte enredado con una profesora?-

-Jamás me ha pasado tal pensamiento por la cabeza, más que maestro y alumna somos dos mujeres que cayeron en el amor, no hay nada de malo con eso-

-Te amo- 

-Yo amo más- 

Se unieron en un suave beso, delineando sus bocas, saboreando una a la otra.

-Casate conmigo-dijo Leonora en un susurro, sin alejarse mucho del rostro de la castaña, esta podía sentir su respiración caliente y el aliento a alcohol que salía de su boca.

-¿qué?-

-Casate conmigo- repetía mostrando ahora el bello anillo, Valery estaba más que sorprendida, estaba conmovida, feliz, aquello era inesperado, la mujer que más amaba en el mundo ahora le pedía que unieran sus vidas para siempre, un par de lágrimas salieron de sus ojos al repetir una y otra vez que sí, abrazo a su morena llenándola de besos mientras esta le ponía el anillo en el dedo, besando su mano y volviendo a amarse una vez más.

***

Leonora seguía con la cabeza sobre la mesa, al escuchar lo que Maria habia hablado con su novia, pudó recordar algunas partes, como sacó del estuche el anillo y dejó la caja en la sala donde la vio en la mañana, entonces si lo había hecho, le había pedido matrimonio a Valery.

-Si compraste el anillo era tu intención hacerlo- Habló Arturo, uno de los que estaba ahí.

-No esa no era la idea- respondió sin levantar la cabeza

-La idea era darle algo por su aniversario- hablaba Maria molesta- pero esta borracha le propuso matrimonio a su mujercita-

-No tiene nada de malo, la amas ¿no?- le preguntó Diane- es normal que dos personas que se aman se casen, ¿entonces cual es el problema?- las palabras de Diane tenían mucho sentido, no había nada de malo.

-Su hermano- Dijo en seco Carmen.

-¿su hermano? ¿Su hermano que tiene que ver?- decía Leonora ahora levantando el rostro extrañada por el comentario de la pelirroja.

-Su hermano esta aquí- 

Todos dirigieron la mirada a la entrada del bar por donde entraba el hermano mayor de Valery, Cárter, alto y de buena figura, también era abogado de hecho de la misma generación de Leonora, habían sido compañeros de clase, no eran precisamente los mejores amigos pero eran buenos compañeros y esa relación de camaradería llego a su fin cuando supo de la relación que mantenía con su hermana; no sabían bien si su molestia era más bien intolerancia hacia la orientación sexual de su hermana o el que ella fuese su pareja, aunque ella creía que eran ambas,  siempre le hacia saber lo desacuerdo que estaba con eso, en más de una ocasión llevaba a sus amigos a la casa para que pretendieran a su hermana, incluso estando ella presente hacia de casamentero, al contrario que la familia de Valery que aceptaron de buena gana y apoyaron a su hija sin importar nada, y cuando llevó por la casa a su pareja no hicieron ninguna objeción, era una familia unida y tolerante, muchas veces hacia comentarios sobre Cárter, pues parecía que el no era de aquella familia, era muy muy diferente.

-¿quién demonios te crees?- dijo acercándose a la mesa, dirigiendo una mirada asesina a la morena.

-Leonora, un placer-dijo con sarcasmo, independiente de la situación no iba a dejarse mangonear por aquel hombre.

-¿qué es esa idiotez de que vas a casarte con mi hermana?

-Pues la misma que tu hiciste el casarte con tu mujer, aunque la que cometió la idiotez fue ella ¿cómo fue a casarse contigo?- Leonora no se levantó ni mostró estar molesta como su cuñado, que le faltaba poco para echar espuma por la boca.

-No dejaré que mi hermana haga semejante locura- soltó un golpe en la mesa y fue cuando la morena se puso de pie.

-¿qué te molesta Cárter? ¿Todavia te cuesta creer que tu hermana es homosexual? ¿O lo que te molesta es que este conmigo?-

-Ambas cosas son inaceptables, ella no sabe lo que hace-

-Ya tiene 22 años Cárter, puede decidir por ella, ya está grande y bastante bien desarrollada- 

El hombre se ofendió por aquel comentario, estaba por soltarle un golpe pero se detuvo, no era muy buena idea y ella misma se lo hizo notar.

-¿vas a pegarme? ¿Otra vez? ¿En mi propio local? Hay gente de seguridad que en un momento de dejara en la calle, o ¿quieres que nos trencemos otra vez? La última vez no te fue muy bien-

En una ocasión no había podido contenerse y se le fue a los golpes, pero para su desgracia Leonora había sufrido desde la secundaria de malos tratos y abusos por parte de sus compañeros debido a su orientación sexual, por lo que había practicado varios deportes para poder defenderse, a pesar de su delgada y envidiable figura era más hábil que cualquier hombre musculoso y no le tomó ni cinco minutos el dejar a su pobre cuñado como un trapo viejo.

-esto no acaba aquí, no permitiré que esa boda ocurra-

-Buena suerte- dijo simplemente, siguiendo con la mirada al tipo salir del local y tras los muros de vidrio observar como daba vuelta en la esquina, fue cuando pudo respirar y dejarse caer en la butaca nerviosa por lo que acababa de hacer, entonces y toda la familia de Valery lo sabía.

Las cosas iban de mal en peor, no era que no amara a Valery, al contrario si dejaba de lado todo lo que la atormentaba ahora, la idea de casarse con ella no era tan descabellada, tarde o temprano hubiesen llegado a ese punto, entonces seguia sin entender cual era el problema con aquella propuestas de matrimonio.

-Aquí la señorita no ha hablado con sus padres- decía Maria, su amiga estaba en serios problemas, ella mil veces se lo había hecho notar pero nunca le hizo caso, ahora tenía que estar ahí como buena amiga diciendo "te lo dije".

-Bueno no es nada que con una visita mañana no se solucione- comentaba Arturo.

-Bueno, eso tampoco- Respondia Leonora- mi familia, ellos, no saben nada-

-¿de tu relación con Valery?- preguntaba Diane.

-De mi orientación sexual- 

-Eso es lo complicado de todo esto- dijo resignada Maria, sentía lástima por su amiga.

-No es sólo eso- había un nudo en la garganta de Leonora- es todo esto, jamás me paso por la cabeza que pudiera casarme con ella, con alguien, mi vida es un completo despilfarre, y ahora resulta que debo unirla con otra persona, mis padres no lo saben, en cada esquina hay intolerancia hacia nosotros-

-eso ha comenzado a cambiar- Diane, la más optimista y que siempre buscaba el lado bueno de las cosas trataba de levantar su animo- sabes que ya son menos las personas que están en desacuerdo-

-No me interesan las otras personas- Respondia Leonora- no se si pueda soportar, que me señale mi familia-

Hubo un momento de silencio, podría ser que Leonora tenía razón, conocían a sus padres eran personas muy conservadoras, por algo ella no se había animado a contarles. La familia de Valery lo aceptaba de buena manera y eso hacia más difícil las cosas, ¿como se habrá sentido Leonora entre aquellas personas que aceptaban y amaban a su hija a pesar de las diferencias? Mientras ella no podía ser ella misma frente a su propia familia.

- no es el mundo donde puedo ser feliz, y luego ella, tan sonriente, ilucionada- se quedó callada mirando al vacío, cuando se dio cuenta de que lloraba tomó su abrigo y se fue.

Camino por la acera lo más rápido que pudo, no quería que la alcanzaran y seguir diciendo idioteces, había cometido error tras error, la noche se estaba haciendo más fresca, amenazando con llover, se detuvo en un parque, el pequeño lugar era de sus favoritos, recién lo había conocido cuando llegó a Londres, y cuando deseaba estar sola se iba ahí, nadie más lo sabía, se detuvo en una banca viendo a las otras personas pasar, para el colmo enamorados, iban de las manos, sonriéndose uno al otro, se regalaban traviesos besos en la mejilla y uno que otro en los labios, ella sonrio con nostalgia, de repente podía verse a si misma con Valery paseando por el parque, recordando la primera vez que se tomaron de la mano, que se dieron un beso, que se dijeron "te quiero".

La amaba si, como nunca pensó en amar a nadie, pero no estaba lista, si su familia lo supiera, lo aceptara, otra cosa sería, la situación sería totalmente diferente, estaría igual que su bella prometida, contándole a todos, planeando seguramente ya la fiesta y hasta la luna de miel, sonaba bien, " su prometida " planeando "su boda", se imaginaba a su bella castaña vestida de blanco y sonríendo.

Tenía que hacer algo, no iba a renunciar a su felicidad, tenía que hablar con su familia, hablar con Valery, si bien aceptó su propuesta no significaba que se casarían la semana entrante, tenía que primero calmar su mar de tempestades, si deseaba navegar en un barco de felicidad junto a ella. Ese pensamiento la hizo sonreír, si estaba por casarse, no iba a arrebatarle esa ilusión a la pequeña, elegir su vestido, las invitaciones, el pastel, miles de cosas, ella misma comenzaba a pensar en lo que haría, daría todo por tener el apoyo de su familia, que su madre le ayudará a elegir su ropa, su padre la acompañaría, sus hermanas le ayudarían con los arreglos de las flores, su hermano a elegir una casa, sus sobrinos, toda su familia a su lado tal y como era con Valery, pero la realidad era muy diferente.

Permaneció ahí un par de horas, la noche ya había comenzado su jornada, ella seguía en el mismo lugar pensando en todo lo que le atormentaba, cuando un hombre se sentó a su lado, por unos minutos no dijo nada, hasta que ella se decidió a hablar.

-Todo es tu culpa- dijo sin mirar a su acompañante.

-Era una broma- le respondía su acompañante masculino- no pensé que seguirías mi consejo.

Luis era una de las primeras personas que había conocido en Londres, se habían hecho más que mejores amigos, cómplices, confidentes, se contaban todo y se tenían mucha confianza, semanas antes del aniversario Leonora estaba moliendose la cabeza pensando en el regalo perfecto, cuando Maria le propuso un anillo, la última vez que habían salido de compras, Valery se había enamorado de una sortija de oro blanco con un zafiro, buscaron por cielo mar y tierra pero no lograron encontrar uno igual, fue ahí donde apareció Luis, no sabía bien como pero ese hombre era capaz de encontrar lo que sea donde y cuando sea, pero ni el pudo conseguir el hermoso anillo, por ello decidieron comprar uno en la joyería de la familia de Maria.

-¿qué tiene de especial el anillo?- preguntó Luis en aquellos días.

-Quería que fuese un regalo de aniversario-

-¿en serio?- preguntó con la confusión reflejada en su cara- ¡vaya! Yo pensé que sería el anillo de compromiso-

Después de una mirada asesina por parte de su morena amiga, le aclaró que después de todo no era mala idea, ambas mujeres se amaban y ya era tiempo de que su amiga rompecorazones sentara cabeza.

-yo sólo hize una sugerencia, tu actuaste por voluntad propia- se defendía

-claro, bajo los efectos del alcohol- Respondia con ironía

-no me lo digas a mi, ve a decírselo a ella, y problema resuelto-Su amiga le dirigió una mirada, igual a la de un niño que acababa de hacer una travesura- tu quieres casarte con ella- afirmó

-si-

-¿entonces cual es el maldito problema?-

La misma explicación salió de los labios de la morena, Luis escuchaba atentamente, el ya sabía aquella situación, más de una vez le dijo que tenía que hablar con sus padres pero al parecer ese consejo era del único que no seguía.

-Eres una idiota- 

-lo se-

Luis se puso de pie, acomodando su abrigo dispuesto a marcharse.-vamos- le indico a su compañera.

-¿a donde?- preguntó 

-por una copa,necesitamos pensar y planear una boda-

Con una sonrisa con un quedo de tristeza y resignación Leonora se puso de pie y comenzaron a caminar, sus amigos debieron llamar a Luis, si alguien podía hablarle con franqueza y hacerla reaccionar era él, sonrió al reconocer que tenía buenos amigos, tenía que disculparse con ellos por la forma que dejó el bar, después de todo necesitaría toda la ayuda posible.

Notas finales:

Y son sólo el comienzo de las complicaciones, el siguiente capítulo estará listo en miércoles, no se lo pueden perder :)

Gracias por leer.

¡Saludos! Y bonito inicio de semana.


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).