Por muy estúpidas que sonaran mis excusas, Matt había creído todas y cada una de las palabras que le dije.
Alegaba que no debía hacer algo como ello, que tenia que disculparme con Near, que mis bromas iban demasiado lejos.
Comenzaba a preocuparme, por un lado ya no podía darle más evasivas a Matt, por otro las palabras de Near.
Me había dejado llevar por mi orgullo y mi enojo, ¿Cómo podía Near decirme algo así? Creí que si le daba tiempo vendría a mi por su cuenta, viéndome actuar como si nada pasara tendría que venir a mi.
Al parecer no resulto de esa manera, al contrario, Near esta convencido de que me decidí por volver con Matt, y también termine mintiéndole a Matt, dándole pretextos estúpidos.
Suspire, mientras me recargaba en el marco de la puerta, viendo a Matt revolver los cajones de su buró.
- ¡Date prisa Matt!
- ¡Ya voy! – decía sacando su videoconsola del cajón.
- ¿Para que llevas eso? creí que querías ayudar
- Es por emergencias
- Alcánzame después si quieres – comencé a caminar hacia el pasillo.
- ¡No espera! – lo escuche decir mientras metía todo de nuevo a toda prisa.
- ¡Ya te dije, alcánzame después!
- ¡Ya no es necesario! – pronuncio corriendo para alcanzarme mientras se escuchaba cerrarse la puerta bruscamente.
- No hace falta que me acompañes.
- Yo quiero hacerlo, además tengo que asegurarme que cumplas con tu obligación – me miraba seriamente – seré tu supervisor te guste o no.
- ¡Oh! Creí que habías dicho *te ayudaré con el castigo* no recuerdo que hayas mencionado la palabra *supervisar*
- Como sea – dijo haciendo un puchero muy gracioso tratando de parecer serio – te comportaste muy irresponsable al dejarle todo el castigo a Near – me miro serio - no estuvo para nada bien.
- ¡Ya basta con eso! ¿Quieres?
Tenía suficiente cargo de conciencia ya, y Matt seguía reprochándome. El hecho de no ver a Near ni en la cena, no era novedad, pero aun así seguía preocupándome.
Me imaginaba a Near, solo en la cocina… y a oscuras ¡Estaba enloqueciendo! Solo faltaba que lo imaginase…
- … Llorando
- ¿Eh? – la voz de Matt me hizo salir de mis pensamientos
- ¿No estás escuchando lo que digo?
- La verdad no
- ¡Siempre es lo mismo contigo!
- ¿Qué era lo que estabas diciendo?
- ¡Olvídalo! Ya no importa
- Bien como quieras
Su rostro reflejaba molestia, pero no me hizo ningún reproche, cosa que me pareció algo extraño en el, camino un tramo en silencio y después comenzó a parlotear de nuevo mientras yo no le prestaba ni la más minima atención.
Mi mente divagaba. Pensaba que dirías viéndome llegar junto a Matt.
- ¿No crees? – decía deteniéndose frente a mi
- Mmm… si tal vez – conteste sin siquiera saber de que estaba hablando.
Lo aparte de mi camino y abrí la puerta de la cocina. Al entrar, lo primero que divise fueron torres de platos apilados unos sobre otros, algunos todavía mojados.
- ¿Qué es esto? ¿Una muralla? – decía Matt acercándose hacia la pila de platos mas cercana mientras a lo lejos sumergías en agua unos cuantos platos mas - ¿Qué rayos estas haciendo Near?
- Lavar.
- Que extraña forma de lavarlos – observaba Matt un tanto sorprendido.
Mientras tu seguías tu labor sin siquiera mirarnos, tallando, sumergiendo y apilando platos. Era curioso ver como dedicabas tiempo en formarlos, parecía como si se tratara de tus piezas de lego.
Además estabas sumamente mojado, tu cabello se pegaba a tu rostro soltando pequeñas gotas de vez en cuando, tu camisa estaba completamente mojada, ni que decir del suelo, había que caminar con cuidado para no resbalarse. Era una escena realmente graciosa y aunque sonara tonto te veías tan lindo.
- Jajaja, si haces esto nunca vas a terminar, Matt ayúdame – tome unos cuantos platos y los acomode en su lugar debido – tu sécalos, yo los guardo
- No hace falta que hagan eso, además ya falta poco para terminar.
- Si pero aun hay mucha agua regada por el piso y muchos platos por secar, además Mello tenia que ayudarte desde el principio.
- ¡Cállate y sigue secando!
Era sumamente extraño tenerlos a los dos al mismo tiempo a mi lado, a Matt parecía no molestarle, trataba de entablar plática contigo mientras tu ni siquiera le mirabas y contestabas de manera cortante. A pesar de ello no se rendía y seguía tratando de conversar.
Al mismo tiempo me dirigía miradas extrañas, tratando de que yo también formara parte de sus conversaciones, sin lograr ningún progreso.
Si que Matt era insistente, por ello era una de las pocas personas que podía lograr aplacar mi enojo y al mismo tiempo provocarlo.
Sabia perfecto que lo que hacia era para tratar de animar el ambiente, sin embargo me estaba poniendo de nervios. No falto mucho para que empezáramos a discutir por cualquier pequeñez.
- ¡Me canse! – le grite saliendo de la cocina
Definitivamente necesitaba alejarme de ahí, aunque fuera solo un momento para calmar mis ansias.
Las intenciones de Matt no eran malas, era simplemente que en ese momento no tenia ni la más minima pizca de paciencia. Por otro lado actuabas como si no estuviera allí y eso me enfurecía.
Me dirigí hacia el cuarto de limpieza, tome un trapeador y camine de regreso, aun enfadado. Tenia que calmarme, si no las cosas podrían ponerse feas.
Me detuve frente a la puerta, cerré los ojos y respire profundo antes de abrir.
Al entrar te observe tratando de secar el agua del suelo con un trapo mientras Matt ya se encontraba sentado con el videojuego en mano. Camine hasta donde estaba y me detuve frente a el.
- Matt… Matt…- le llame sin obtener respuesta - ¡MATT!
- ¿Qué? – decía apartando la vista del aparato
- ¡Si no vas a ayudar vete!
- Ya ayude lo suficiente, ahora estoy en papel de supervisor.
- ¿Supervisor? ¡Ni siquiera estas supervisando nada!
- Claro que si, si no lo notas es por que hago bien mi trabajo – y regreso la vista al molesto aparatejo.
- ¡vete a hacer tu trabajo a otro lado! El suelo esta mojado, tenemos que secar y no podemos hacerlo si estas a media cocina.
Matt no respondió, solo se levanto de su silla y la jalo hasta una esquina libre de humedad, después volvió a sentarse. Y de nuevo, esa sensación de enojo, sinceramente tenía unas ganas inmensas de golpearlo.
Tal vez adivinaste lo que sentía en ese momento, te acercaste hasta mi y jalaste mi brazo.
- Déjalo así, era nuestro castigo, ya nos ayudo demasiado – mire a Matt y suspire resignado, no se iba a ir, eso era seguro.
- ¡Bien! Ya me desquitare después.Tu deberías ir a descansar, yo terminare de limpiar esto.
- También es mi obligación.
- ¡Pero estas empapado!
- No importa
Y esa terquedad tuya que también me sacaba de mis casillas, opte por no decir nada y continuar con la labor. Por ratos hacia comentarios al aire que no dudabas en responder, en ocasiones me mirabas al hacerlo, en otras simplemente seguías con lo tuyo. Una vez que terminamos deje todo lo que tenia en mano y me acosté sobre el suelo, en ese instante solo pensaba en dormir, me sentía cansado, y el suelo estaba tan frío.
- Creo que Matt se quedo dormido – te escuche decir.
Inmediatamente me levante de ahí y fui hacia Matt comprobando que, efectivamente estaba dormido, su respiración era lenta y profunda, y sus ojos completamente cerrados.
- Si, esta dormido – respondí mientras tomaba una pequeña toalla que suponía utilizaban para secarse las manos y me acerque hacia ti – ¿No tienes frío?
- No – pronunciaste volteando hacia un lado.
Tome tus manos y comencé a secarlas, trataste de apartarlas haciendo que me detuviera.
- Puedo hacerlo solo – dijiste mientras apartabas tus manos.
- Déjame hacerlo Near.
Volví a tomarlas, mientras las observaba detenidamente. Tus dedos estaban arrugados por el agua y tu ropa aun estaba húmeda.
- Acabaste todo mojado.
- Nunca había hecho esto.
- Lo sé, pero parece que te bañaste mientras lavabas – comente divertido.
- Entonces ya no necesitare un baño.
- jajaja – no pude evitar reír ante tu comentario
- ¡shhh! – me callaste haciendo cara de preocupación.
- Lo siento – respondí susurrando.
Ambos volteamos la vista hacia Matt, pero al parecer seguía en lo suyo, sumergido en su sueño.
- Tiene el sueño pesado – me observaste.
- No entiendo por que se durmió.
- Tal vez se canso, ayudo bastante.
- No lo creo, seguramente se aburrió.
- Aburrirse...
- Si, aunque si tenia sueño debió haber ido a dormir.
- Tal vez solo quería estar cerca de ti – agachaste la cabeza al decir aquello - Esta saliendo contigo después de todo.
Tristeza en tus palabras, fue lo que percibí. Tal vez estaba equivocado pero, de alguna manera te sentí abatido pronunciando aquello. De la misma manera en la que yo me sentí al observarte así y escuchar esas palabras salir de tu boca.
Era cierto, mi relación con Matt aunque ya no era la misma, seguía estando ahí, no había tenido el valor de terminarle. Cada vez que estaba decidido a decirle, aparecía con esa sonrisa que me hacia desistir, en ocasiones llegaba a pensar que jamás volvería a sonreír por mi culpa.
“mañana, mañana sin duda le pondré en claro todo” pero ese mañana aun no llegaba. No quería perderte pero tampoco quería dañarle, ¿Por qué todo tenia que ser tan complicado? Nunca me he detenido por nadie, sin embargo Matt…
- ¿Crees que sea algo… tan doloroso como para no volver a sonreír?
- ¿A que te refieres?
- A Matt
- Sigo sin entender
Acaricie tu mejilla con una de mis manos mientras que con la otra entrelazaba mis dedos con los tuyos.
- A esto me refiero – me acerque lentamente a ti y bese tu boca suavemente.
Te quedaste inmóvil, ni siquiera trataste de oponerte o reclamar. Me miraste con los ojos muy abiertos y pude notar un leve sonrojo en tus mejillas.
- Desde hace algunos días, he tratado de aclarar las cosas, sin embargo…
- Tienes miedo, de que no pueda volver a sonreír… - me interrumpió
- Se que le he dado demasiadas vueltas ya, pero simplemente…
- No quieres lastimarlo
Asentí con la cabeza y me separe un poco de tu lado, detestaba pensar en ese problema.
- Pero tu… te ves tan contento a su lado ¿Estas tomando la decisión correcta? – tus palabras sonaron totalmente frías.
- ¿Qué? Near, mi decisión ya la sabias
- Yo deduzco el pensamiento de las personas mediante su comportamiento, y tu comportamiento me decía…
- ¡Déjalo ya! – le interrumpí molesto – ¡Odio que hables de esa forma!
- Solo trataba de…
- ¡Shh! Ya basta de hablar de deducciones – interrumpí colocando un dedo sobre tus labios – quiero que me escuches.
Asentiste levemente con la cabeza. Todas las palabras estaban revueltas en mi cabeza, suspire antes de hablar para ponerlas en orden.
- Cuando me pediste que no me acercara a ti, me enfade, me enfade mucho – te observe serio – decidí que dejaría que te sintieras un poco celoso para que desistieras ¡Pero no lo hiciste!
- ¿Y por eso fingiste si quiera conocerme?
- ¡Claro que no! Te busque a pesar de que me pediste que no lo hiciera, pero parecía que te escondías de mi - comenzaste a rizar tu cabello con tus dedos como de costumbre y bajaste la mirada
- No me gustan los problemas, por eso…
- ¿Soy un problema para ti? – interrumpí, acariciando tu mejilla.
- No me refiero a eso
- ¿Entonces?
- Si solo pretendemos que nada paso, no tendrás que preocuparte por que Matt deje de sonreír.
- Near… - acaricie tus cabellos – es cierto que no quiero dañarlo, pero también es cierto que te quiero, y no puedo reprimir mis sentimientos.
Tome tu barbilla y acerque tu rostro hacia el mío entreabriendo tu boca, roce tus labios despacio y te bese. Seguiste mi ritmo sin oponerte. Como había extrañado el sabor de tus labios, era tan placentera aquella sensación, sentía como si todo alrededor hubiera desaparecido.
- ¿¡Qué significa esto!?
- ¡Matt! – me separe inmediatamente de ti.
Todo había pasado tan rápido, que me había olvidado por completo de que el estaba allí ¿Pero, desde cuando estaba despierto? ¿Cuánto de nuestra conversación habría podido escuchar?
- Es-estabas despierto…
- ¡Te lo dije, te lo advertí Mello! ¡Ya fue suficiente! – grito amenazándome
- ¡Tranquilízate! ¡No es como crees!
- Escucha Near - decía aproximándose hasta nosotros – no creas absolutamente nada de lo que te diga.
Lo observaste con cara de interrogación y luego volteaste la mirada hacia mi.
- ¡Basta Matt! – le grite
- ¡Solo trata de asegurar su lugar como primer sucesor!
- ¡Cállate!
- ¡No voy a callarme!
No pensé que Matt fuera a decir algo como eso ¡Todo estaba mal! Te giraste hacia mí, con una mirada fría y seria.
- ¡Ah! Entonces esa es la verdadera razón
- ¡No, estas equivocado! – trate de excusarme
- ¿Ahora vas a decir que soy mentiroso, Mello? – decía Matt enfadado - ¡Tu mismo lo dijiste! ¿Ahora te haces el desentendido?
- ¡Cállate Matt!
- ¡Tienes que dejar de jugar sucio! ¡Di la verdad de una buena vez!
por primera vez las palabras no salían de mi boca, sentía que si decía algo alguien podría salir herido
- ¡Habla maldita sea! – gritaba Matt enfadado
- ¡Es mentira! – respondí con el mismo tono que el usaba - ¡Todo es mentira!
- ¿Qué? – decía Matt confundido bajando el tono de su voz
- Todo lo que te dije, todo es mentira Matt.
Sus ojos y los tuyos se abrieron enormemente, contuve la respiración por un momento. Ya no había marcha a atrás.
- Yo no estoy haciendo esto por el titulo de sucesor, yo… me enamore de Near.
Lo había hecho, por fin le había dicho la verdad pero… Me sentía terriblemente mal. No hubiese querido que fuera de esta manera, sin embargo, ya estaba hecho.
Matt solo estaba parado frente a mí, sin decir nada y me miraba con gesto de incredulidad.
- ¿Estas… bromeando?
- ¿Realmente te parece que es una broma?
Los ojos de Matt comenzaron a humedecerse, mientras sentía tanto coraje conmigo, me sentía despiadado. Se dio la vuelta y salio rápidamente de la cocina. Lloraba, aunque no le vi hacerlo, lo presentía.
Observe la puerta por la que había salido. Yo no quería esto, dañarle era lo último que pretendía hacer pero termine haciendo exactamente todo lo contrario.
“Perdóname… Matt”