¿En que momento se apareció Matt por aquí?, hace demasiadas preguntas y me mira con insistencia, no me gusta, no me gusta para nada.
“Deja de mirarme Matt”
- Near fue solo una pregunta, no tienes por que molestarte.
- No estoy molesto.
- ¿Seguro?
- Realmente no me importa eso Matt – lo que me incomodaba era que me mirara de esa forma insistente, ¿No podía simplemente dejar de averiguar y preguntar cosas?
- ¿Entonces por que estas enojado?
- No puedo concentrarme si me sigues haciendo preguntas.
- Está bien, me callare
“¡Al fin!” -si quieres puedes ayudarme a armar.
Matt comenzó a montar las piezas una sobre otra, lentamente, hubiera agradecido que se fuera, pero al menos había logrado que guardara silencio. Aun me seguía preguntando que era lo que Matt estaba haciendo ahí.
“La última vez lo encontré en la cocina husmeando, y ahora esto, y después Mello con, sus abrazos y… ¿De que va todo esto? ¿Me toman como un objeto para desahogar sus frustraciones o algo así?”
Tenia que dejar de pensar en todo eso, que a final de cuentas no me beneficiaba en nada, tenia que recordar cual era mi prioridad, después de tanto luchar no podía dejarme llevar por algo que no tenía lógica ni razón de ser.
- Sabes Near… – dijo Matt interrumpiendo el silencio y haciéndome salir de mis pensamientos.
- Dime
- ¿Crees que haya alguien mas que le guste a Mello?
Una pieza cayo de mis dedos, Matt me miro.
- No lo sé ¿Por que no se lo preguntas?
- Near, es lógico que el no me dirá nada.
- ¿Y por que pretendes que yo te responda?
- No pretendo que me respondas, solo fue como un comentario.
- Sonó como si fuera una pregunta.
- Lo siento si te incomode.
- Esta bien no me importa.
- Realmente no te importa nada – comentó Matt un tanto irritado.
- Hay cosas que si me importan.
- ¿Cómo cuales? – me miro un tanto emocionado.
¿Que se pensaba?, ¿Qué fácilmente le contaría todo? Desde el principio pude deducir las intenciones de Matt respecto a su “amistad”, lo que realmente traba de hacer era averiguar lo que había pasado entre Tu y yo.
“Un momento, ¿Lo que había pasado entre Mello y yo? Tal vez el pudo habernos… ¿visto?, No, no había nadie ahí, ¿o si?”
Comencé a preocuparme por aquello.
“Tranquilízate Near, tienes que pensar de manera neutral, no puedes dejarte llevar, no de nuevo”
- ¿Near?
- Dime.
- Esta bien olvídalo, ya no importa – decía Matt dejando de insistir.
De pronto la puerta se abrió de golpe, ambos volteamos hacia ella para saber que sucedía.
- ¡M-Mello! – dijo Matt levantándose del lugar en el que estaba.
Entraste al salón, estabas enojado y te dirigías hacia nosotros, empujabas y pateabas cada cosa que se te atravesaba en el camino hacia donde estábamos, era evidente que estabas furioso.
- ¿Ahora que sucede? ¿Por qué estas enojado?
- ¿Y me lo preguntas tan tranquilamente? – Decías mientras volteabas a verme - ¿Qué significa esto dime?
- ¡No significa nada!
- ¿Y pretendes que te crea?
Comencé a pensar que realmente no tenia nada que hacer ahí, no tenía lugar en aquella discusión y comencé a recoger unos cuantos juguetes del suelo, después podría regresar por los demás, guarde unos cuantos pequeños en mis bolsillos y salí del salón, no me gustaban las discusiones y mucho menos el ruido.
Camine por el pasillo, aun se escuchaban tu voz reclamando algo que no pude entender, sentí un poco de compasión por Matt, realmente no había pasado nada pero eso no lo entenderías tan fácilmente
Me dirigí hacia la biblioteca, ese lugar realmente era silencioso y tranquilo, además ahí podía pasar un buen rato leyendo.
Camine entre los anaqueles buscando algo interesante, tome varios libros y me senté ahí mismo para empezar a leerlos.
Me gustaba aquella sensación, comenzaba a leer y me perdía totalmente de todo, solo era yo y el libro, ni tu, ni Matt, ni nadie mas, era como olvidar todo lo que acababa de suceder e irme a otro lugar Simplemente me encerraba en mi esfera y no prestaba atención a nada que no fuera el ruido de las páginas al darles la vuelta.
No se por cuanto tiempo fue que permanecí así, pero un brusco movimiento me hizo salir de mi trance, mi espalda chocó con la estantería, apenas pude reaccionar y levantar mi rostro para observar a mi atacante, cuando sentí unos labios sabor a chocolate apoderándose de los míos, haciéndome soltar al instante lo que tenia en manos.
Unos cuantos libros cayeron desde arriba, pero no te importo, trate de separarme pero aprisionaste mis manos a ambos lados.
De golpe gire el rostro obligándote a separarnos, me soltaste de los brazos y colocaste los tuyos a ambos lados de mi cuerpo antes de posar una de tus manos sobre mi mejilla.
- Near… - pronunciaste casi en un susurro.
No tenia salida, no podía correr, me aprisionabas por ambos lados con tus brazos, volví la vista para mirarte a la cara y te acercaste de nuevo a mi rostro, tratando de besarme.
¡No podía!, ¡no debía dejarme llevar de nuevo! necesitaba hacer algo y pronto.
Lleve mis manos hacia tu pecho, acercando también mi rostro hacia el tuyo sintiendo tu aliento sobre mis labios, desvié la mirada y coloqué mis brazos a tu alrededor, abrazándome a tu pecho y escondiendo mi cara en tu hombro.
Al instante correspondiste al abrazo, acariciando mi cabello.
- ¿Near?
- ¿Por qué haces esto? – pregunté.
- ¿Hacer que? Tú fuiste quien me abrazo
- ¡Me besaste!
- Ya te lo dije, me gustas
- ¡Eso no es cierto!
- ¡Claro que lo es!
Me separe un poco, quería irme de ahí, quería que dejaras de confundirme, pero huir sería algo estúpido y no podía esconderme de el toda la vida.
- Solo estas confundido Mello
- ¡¡No estoy confundido maldición!!
Adentraste tus dedos en mi cabello y te acercaste a mi para besarme de nuevo, y de nuevo te rechacé escondiendo mi rostro y abrazándome a tu cuerpo.
- ¿Por qué me rechazas Near?, ¿no dijiste que yo te gustaba?
- Eso fue algo…
- ¿Algo que?
- Momentáneo, solo me deje llevar.
- ¿Entonces por que me estas abrazando ahora?
- Para evitar que me beses.
- ¿Solo por eso?
- Si.
- ¡Mientes!
- Yo nunca miento.
- Pues ahora lo estas haciendo.
Me separe de nuevo - ¡Claro que… – acerco su rostro al mío peligrosamente – …no
- Lo vez, estas mintiendo, tu cara esta roja – besaste mis labios aprovechandote de mi distracción – no mientas Near.
Mi corazón latía fuerte, y aquella sensación de nuevo recorriendo mi cuerpo, parecía como si fueran pequeñas descargas eléctricas que hacían que mi estomago revoloteara y mi corazón se acelerara.
En aquel momento estaba libre de los brazos de Mello, y con espacio suficiente para poder escapar, pero de alguna manera la sensación de querer huir había desaparecido.