El beso se prolongó un momento más hasta que por fin Wilson se separó, confundido.. House en cambio sonreía.. -No puedes negar.. Que eso fue lindo..- murmuró el Nefrologo sin dejar de mirarlo con una sonrisa tan encantadora que hacía sentir al oncologo que se volvería loco.
-E-eso fue un experimento.. Que... No se repetirá.. Que jamás pasó.. Que..- intentó decir Wilson negando con la cabeza.
-Oh vamos Jimmy... Que no se repetirá?- preguntó con voz de decepción House haciendo una de sus caritas de fingida tristeza que en realidad siempre le habían parecido adorables al oncologo aunque no fueran más que las bromas crueles de un cretino..
-Eres.. Un idiota...- concluyó Wilson zanjando el asunto con un movimiento de su mano, parecido al que hacía siempre cuando discutía con House y llegaba a esa conclusión.
-Por besarte? Sabes que? Te haré una apuesta aquí y ahora.. Cincuenta dólares a que terminarás pidiéndome que te vuelva a besar antes de que termine la semana- dijo House extendiendo una mano con la expresión seria que tenía siempre para cuando realizaba alguna ridícula apuesta.
James se lo quedó mirando un momento con una ceja ligeramente enarcada... -Realmente crees que en algún momento de mi vida llegaré a pedirte algo como eso? Y además.. Lo acortas a "dentro de esta semana"?-
-Si.. Andamos cortos de tiempo.. Así que tendré que poner en marcha todos mis planes...- replicó House volviendo a ser el cretino de costumbre con sus comentarios tan poco delicados.
-No sólo eres un idiota si no que además eres un engreído, prepotente..- empezó a enumerar el oncologo antes de ser silenciado por otro suave y corto beso de House.
-Que? Todavía no me diste la mano para sellar la apuesta.. Puedo besarte todo lo que quiera..- replicó Gregory House mirando con descaro a su mejor amigo que se había vuelto a quedar un poco en blanco.. Sin embargo.. Esto no era más que otro de los jueguitos de su mejor amigo.. Y si eso lo mantenía acuerdo mientras estaban en ese lugar desolado esperando a la fatalidad entonces lo dejaría ser feliz.. Además había otra ventaja, si acordaba la estúpida apuesta y le demostraba a House que no le pediría nunca un beso entonces seguramente el nefrologo no volvería a molestarlo con el tema.. Y mientras Wilson pensaba House aprovechó y le dio un tercer beso, eran besos castos, suaves, sólo roces de labios pero de todos modos aceleraban la respiración del oncologo y los latidos de su corazón... Y estaba House por darle un cuarto beso cuando Wilson puso de golpe su dedo sobre los labios de House, apartándolo suavemente, tanto que hasta podría decirse que lo provocaba. -Muy bien.. Apostamos. Son 50 dólares a que no te pido que me beses.. Nunca. Pero si tu me besas sin mi consentimiento pierdes automáticamente, me deberás 100 dólares y tendrás que limpiar la casa todo el tiempo que estemos aquí..- le advirtió Wilson con una sonrisa que daba a entender que el ganaría y eso fastidio bastante a House aunque se sentía curiosa y ridículamente más concentrado en ese dedo sobre sus labios que en las palabras de su amigo.. Estaba claro que haría a Wilson pedirle que lo besara otra vez y que no lo besaría sin su consentimiento.. Además.. Ni que él quisiera tanto besarlo.. Vale su iniciativa y esos tres besos tal vez si dijeran que lo deseaba pero ja! Por ganar una apuesta... Era capaz de todo.
-Bien.. Tenemos un trato..- replicó House con una voz que sono demasiado rara hasta para Wilson.. Conocía a su mejor amigo sabía que algo se traia entre manos pero de todos modos el oncologo se sentía más que favorecido por la apuesta así que ambos hombres estrecharon sus manos y las sacudieron mirándose con una media sonrisa, estuvieron así un rato hasta que House miro su mano. -Ya puedes soltarla Jimmy...- se burló socarrón.
-Eres tu el que no suelta la mía Greg..- replicó Wilson con idéntico tono mientras seguían estrechándose la mano.
House lo miro con una intensidad que hizo palidecer a Wilson por un momento. El nefrologo soltó su mano y para sorpresa de su amigo se acercó más a él en la cama, rodeando su cintura con un brazo de golpe para atraerlo hacia si. -Q-que haces?!- exclamó James al sentirse de pronto tan cerca del cuerpo de su mejor amigo.
-Los términos de la apuesta decían que no podía besarte.. Pero no dijiste nada de tocarte..- replicó House mirándolo a los ojos de una manera tan intensa que está vez sonrojo por completo al castaño.
-Pido reformular la apuesta y...- empezó a decir Wilson tratando de alejarse un poco de su amigo.
-No no.. Una apuesta ya sellada es una apuesta que no tiene posibilidad de cambiarse ni una sola palabra..- dijo House negando con la cabeza para luego mirar a su mejor amigo con una media sonrisa -Además, si no puedo tocarte como voy a conseguir que me pidas que te bese?-
-No se.. La idea era que usarás tu imaginación, queria ver a Gregory House en acción y todo eso..- trató de bromear Wilson hasta toparse con la sería mirada del oji-azul.
-Oh.. Lo verás.. Claro que si..- susurró House casi en su oído.. -Por donde quieres que empiece?-
Wilson se estremeció al sentir ese aliento cálido tan cerca de su cuello, quería alejarse de allí y de esas palabras pero de pronto se sentia estúpidamente inmovilizado...
-Ya que no escucho una respuesta clara.. Supongo que tendré que provocarla yo...- repitió House con el mismo susurro que estaba trastornando la mente de Wilson, lo tenía tan cerca, su brazo rodeaba su cintura mientras estaban sentados en esa cama. Wilson mirando al frente con las manos convertidas en puños sobre las rodillas y House de costado muy inclinado hacia el de una manera que seguro tenía que ser incómoda y dolorosa aunque no parecía interesarle eso, sólo miraba la piel del cuello de Wilson, de pronto se sentía ansioso por probar su sabor, por dejar que su lengua lo tocará que sus labios lo recorrieran.. Pero había dicho que nada de besos.. Sin embargo.. Un lenguetazo no contaba como beso no?
No se contuvo más y dejó que su lengua se deslizara dejando un rastro húmedo sobre el cuello de Wilson que dio un sobresalto bastante fuerte al sentir eso. Sentía una presión terrible en el estómago y le faltaba el aire -H-House!! E-eso rompe la..- pero no podía hablar más, estaba demasiado sonrojado, su corazón latía demasiado rápido.. Incluso se sentía un poco mareado. Pero no como si se sintiera mal.. Si no como si se sintiera increíblemente bien..
-Una lamida no es un beso y lo sabes..- murmuró House que en ese momento se sentía bastante igual que su amigo pero podía mostrarse mucho más calmado.. -Me cuesta respirar..- apenas susurró Wilson avergonzado..
-Eso es porque quieres que te bese..- se burló House un poco aunque preocupado.
-No es eso... Eso no tiene sentido.. Pero.. Tampoco es que me sienta mal.. Tal vez sólo deba dormir..- dijo al fin el oncologo con esfuerzo y empezando a separarse de su amigo.
-No estas mal.. Tampoco quieres que te bese.. Entonces lo que te pasa es que mi lamida te.. Excitó..- conjeturó House con una brillante sonrisa y Wilson volvió el rostro para quedarse mirándolo, estaba jugando rudo para conseguir el maldito beso, pero entonces él haría que House lo besara a la fuerza, o más bien sólo incitándolo a hacerlo, sin darle el permiso.. -Tal vez...- respondió al fin James mirándolo fijamente, está vez fue el turno de House de sentir una enorme descarga de adrenalina recorriendo todo su cuerpo. Acarició un segundo el cabello de su amigo repitiéndose mentalmente que nada de besos pero Wilson paseaba suavemente su lengua sobre sus propios labios, dejándolos tan húmedos.. Tan rojos... Que House sintio que moriría allí mismo.. Que rayos le pasaba? Sólo era un juego no? Si.. Sólo estaban jugando y tenía que ganar el juego a como diera lugar.. No eran sólo los 50 dólares.. Ansiaba escuchar a Wilson pidiéndole un beso..
Movió sus manos hasta los hombros de su amigo y comenzó a darle un suave masaje, no quería dejar pasar la oportunidad de tocarlo todo lo que pudiera ahora que estaban en esa lucha de voluntades que no hacía más que ... Declarar que básicamente se sentían atraídos el uno por el otro.. Aunque ambos se negaran a reconocerlo.
-Entonces... Me dijiste.. Que te excito.. Verdad..?- susurro House otra vez a su oído sin detener el masaje en los hombros del oncologo.
Wilson cerró los ojos poniendo su mejor expresión de placer -Ummm.. Si...- ronroneo mientras sentía las manos de House paralizarse en sus hombros por un segundo. Donde rayos había quedado su vergüenza? Suponia que se la había dejado olvidada en algún momento entre que House lo había besado y ese preciso instante en que le daba un masaje que era tan relajante y placentero.
House por otro lado sólo podía observar apenas boquiabierto la cara de placer de su amigo y como se dejaba tocar.. Estallaba del deseo de besarlo, de seguir tocándolo más y más, de hacerlo suyo sobre esa cama...
Que necio! Que estaba pensando?! Sexo con su mejor amigo?
No es que no lo deseara pero... En estas circunstancias...
Al demonio, lo deseaba y punto.
No, nunca lo había hecho con otro hombre. Posiblemente Wilson tampoco. Eran dos hombres maduros, amigos desde.. Casi desde que podían recordar.. Así que, que demonios había disparado estos deseos? House no tenía ni la menor idea solo podía pensar en el cuerpo de Wilson debajo de sus manos, retorciéndose de un placer que el se sabía muy capaz de darle... Su corazón latía tan rápido que de pronto tenía la odiosa sensación de que había perdido el control, de que el oncologo lo tenía en sus manos sólo dejándose tocar... Pero.. Sabía cómo asustarlo.. Si un masaje sólo lo hacía volverse más provocativo posiblemente poniéndose a si mismo como una trampa.. Entonces haría algo que lo asustaría de verdad..
House volvió a lamer suavemente el cuello de su mejor amigo, disfrutando de cómo lo hacía estremecer y deslizó su mano por el pecho de James hasta llegar a su vientre y de allí colocarla con suavidad en su entrepierna. Pero para su sorpresa Wilson no se separó gritándole de todo, si no que en cambio... Soltó un gemido suave.. Tan provocador... Tan delicioso... Que mandó al infierno toda la lógica que House pudiera aplicar en un momento así. Acaso lo estaba disfrutando? En serio? Sólo podía pensar que si mientras su respiración cobraba la cadencia de un jadeo y su mano apretaba más fuerte la entrepierna de James... Se sentía.. Caliente.. Se sentía... Dura... El mismo ya sentía una ereccion presionando en sus pantalones, y parecía hacerse más grande y dolorosa cuantos más gemidos le arrancaba al oncologo..
House siguió moviendo su mano, embebiendose de los gemidos que salían de la boca de Wilson, ya había perdido por completo la razón, ya se había olvidado hasta de porque estaban así, o incluso por que estaban allí.
Y Wilson giró su rostro hacia él, dejando salir suaves suspiros de placer entre sus labios carnosos y húmedos mientras House lo tocaba, tenía los ojos cerrados y esos labios más tentadores que nunca.. Y el nefrologo simplemente no pudo acordarse de nada, se olvidó de todo, sencillamente respondió a la provocación colocando sus labios con intensidad encima de los de su mejor amigo.
Wilson solo sonrió y entreabrio los ojos para mirar como había puesto a House.. Increíble... El hombre más lógico e invencible de todos acababa de perder frente a él. Wilson se separó y lo miró un segundo mientras su amigo lo miraba totalmente desconcertado, prácticamente como si hubiera perdido toda noción del tiempo y hasta de quien era..
-Señoras y Señores.. Tenemos un ganador.. El formidable.. James Wilson!- exclamó Wilson con una sonrisa enorme mientras House lentamente parecía caer en el hecho de que había sido enredado en una elaborada trampa o no tan elaborada... Pero Wilson estaba loco si se pensaba que esto se quedaría así.
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