Tic-Tac Tic-Tac
Observó por enésima vez aquel molesto reloj de pared, no cesaba.
La sala era espaciosa y blanca en su totalidad, con algunos cuadros con paisajes pintorecos situados estratégicamente para darle un un toque más jovial a una habitación que parecía apagada.
Sostuvo con fuerza sus rodillas en un intento fallido de que dejaran de temblar, era imposible.
Tic-Tac Tic-Tac
Volvió a sonar. Estaba molest, molesto y nervioso y ese maldito aparato no lo estaba ayudando. Hace unos instantes atrás había llegado y parecía que estaba hace horas, estaba impacientandose. Juró que si una vez más sonaba ese reloj, no le importaba si lo tachaban de loco; lo tiraría por la primera ventana que encontrara, oh sí lo haría.
El chirrido de la puerta al abrirse, lo asustó, una mujer había entrado.
-Buen día- respondió a un saludo hecho por la nueva paciente, así como todos los que estaban en la sala.
Tic-Tac Tic-Tac
Era un hecho, tiraría ese aparato. Hizo ademán de pararse cuando la puerta se abrió. Un hobre de bata blanca salía de la sala con una paciente.
_Uzumaki Naruto- Llamó.
El se puso de pie.
_Yo
_Pase
El lo siguió cerrando la puerta tras de sí.
El doctor tomó asiento al igual que él.
Observó el exámen, con un rostro preocupado.
_¿Q-qué pasa Doctor?, acaso..es algo grave..
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A paso lento se dirigía por la plaza hacia su casa, esto no podía estarle pasando. El doctor le había dicho qie tenía una enfermedad terminal y que le quedaba poco tiempo de vida, de seis meses a un año. Se sentó en una de las bancas del lugar, entonces se permitió llorar, las lágrimas inundaron su rostro. El llanto de un niño al caer de su bicicleta y la forma en que era consolado por su padre lo hizo llorar más. ¿Qué haría ahora? ¿Con quén dejaría a su hijo, asu pequeño? , tan solo tenía seis años, seguro sufrería mucho con su partida.
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Como pudo llego a su apartamento, se secó su rostro húmedecido por las lágrimas. Abrió la puerta.
_Estoy en casa!- Llamó
_Papí!- un niño pelinegro y de ojos azabaches corrió a su encuentro, abrazandolo.
_Hola Sanosuke, me estrañastes.
_Sí!-Dijo abrazándolo más fuerte- No le abrí la puerta a nadie- Pronunció orgulloso.
_Me alegro Sanosuke, me alegro- Revolvió su cabello.
_Ah! lo olvidaba, mira lo que te hice- Se soltó de su agarre corriendo hacia una mesita de centro, agarrando una hoja de papel. Naruto observó, era unas montañas con un hermoso sol, lleno de nubes y flores, y bien en el centro de la imagen estaban ellos dos tomados de la mano; con una pequeña dedicación "te amo papí". Entonces lloró.
_¿Qué pasa papi? ¿hice algo malo?
_No!, no, claro que no!_ Se secó su rostro-Es que papi llora de emoción- Sonrió.
El niño sonrió.
Ding-dong
El timbre sonó. Abrió la puerta.
_Hola- Pronunció el recién llegado
_Hola Sasori
Un pelirojo de ojos café estaba parado en la entrada.
_¿Puedo pasar?
_Pasa
_Lamento no poder cuidar a Sanosuke, estaba muy atariado con el papeleo, ya sabes-se disculpó
_No pasa nada, no te preocupes
_Tío Sasori!- corrió a su encuentro
_Hola enano-Saludó, revolviendole el cabello.
_No soy un enano- hizo un mohín
-Ah! lo olvidaba que habías crecido ¿cuánto? cinco centímetros- Se burló
_Sí! ya soy grande, no le abrí la puerta a nadie-Pronunció con emoción.
_Que bueno! eso merece un premio, que te parece si vamos los tres por un helado
_Sí!
_Entonces, pidele a tu papi
-Podemos papi, podemos-rogó n forma de rezo
_Mmm- fingió pensar- Está bien! vamos.
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_No te vayas lejos- Dijo Naruto a su hijo que se dedicaba a jugar con un niño que estaba en la plaza.
_Esta bien papi!
_¿Estás bien? - Se preocupó el pelirojo
_Ah! sí
_No me has dicho que te dijo el doctor.
_No era nada- Espresó
_¿Seguro?
_Sí! no te preocupes- Sonrió
_Mañana iré a Londres por asuntos de trabajo, no quiero dejarte solo
_Ve, estaré bien
_Eso espero
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Ya habían llegado a su apartamento, despues de mirar la tv y cenar, el rubio se encontraba leyendole un cuento a su pequeño, Peter Pan era su favorito. Pronto se durmió. No se despegó de él en ningún momento, lo abrazó y lloró. ¿Que haría?. Después de mucho pensar, llegó a la única idea, Sanosuke conocería a su padre, conocería a Sasuke Uchiha, su primer y único amor.