En la residencia Lestrange, Rodolphus se había despertado temprano, se preparó para ir con los demás Alphas y contarles lo que había visto, el único problema era que al parecer su hermano había tomado alguna poderosa poción de dormir y aun no se despertaba, para pasar el rato Rodolphus hizo su tarea, practico algunos hechizos, hasta que se hizo mediodía, llego a creer que Rabastan estaba muerto, posiblemente se había suicidado, el menor de los Lestrange entro a la habitación de su hermano solo para encontrarlo roncando.
-La señorita Bellatrix Black ha venido a visitarlo- Aviso un elfo a Rodolphus.
-¿Bellatrix? ¿Vino a verme?-
Rodolphus bajo las escaleras, Bellatrix era una psicópata, la mayoría de los chicos la evitaban, cualquiera que había sido su novio,se enteraba que la Bella Slytherin era muy celosa, posesiva y paranoica.
-Bella ¿Ha que debo tu visita?- pregunto nervioso Rodolphus.
-Mis tontas hermanas no quisieron llevarme a su boba doble cita, me aburrí en casa y vine a visitarte-
-Querrás decir a mi hermano-
-Yo no recojo sobras, me gusta las cosas que no han sido tocadas- dijo Bellatrix, de forma coqueta –Además no hay nada peor que un Alpha deprimido por su omega, son insoportables-
-Así que…-
-Vine a que me lleves a una cita-
-Yo no puedo, estoy esperando a mi hermano para…-
-Alístate, llévame a Hogsmeade, yo esperare, pero no mucho- dijo como orden.
Rodolphus sabía que Bellatrix estaba loca, pero no para tanto.
-No puedo, mi hermano y Yo…-
-5 minutos- dijo en tono burlón
Rodolphus suspiro, no tenía más opción, subió a su habitación a prepararse, molesto con su hermano, se acercó y grito.
-¡Rabastan! ¡Rabastan! ¡Despierta! ¡Es medio día!-
Por ultimo le dio unas patadas a la puerta. Rabastan se despertó, había tratado de despertarse desde las ocho de la mañana, por alguna razón tenía mucho sueño, se dejó caer en las manos de Morfeo, hasta que su hermano logro que abriera los ojos. Tomo su varita.
-Tempus-
Era medio día, Rabastan tenía su cuerpo endurecido, le dolía la cabeza y tenía un antojo de Tarta de Manzana con Atún y coco. Sirius estaba en el enorme comedor de su casa, una mesa para desayunar con espacio para 12 personas, algo absurdo ya que desde la muerte de su Papá había prácticamente 3 miembros en la familia.
Estaba comiendo pepinillos con tentáculos de pulpo, acompañado de una bebida de limonada sin nada de azúcar.
-Sirius, cierra la boca y mastica la comida- dijo Walburga.
-Mamá, basta, déjame comer en paz-
-Soy tu madre, mis consejos son para tu bien, me di cuenta que James y Lucius salieron con Andrómeda y Narcissa-
-Sí, Malfoy quería matar a su padre por comprometerlo de esa forma, a él nunca le gusto Narcissa, sigue pensando en Arthur-
-Ya veo, parece que tengo que comprometerte a una cita con una linda chica de la familia-
-¡No!, no con alguien de la familia, eso es asqueroso-
-La pureza de la sangre…-
-Remus era mestizo, y le diste una casa a su madre, además a mí no me gustan las mujeres, y no me gustan los hombres betas tampoco-
-Un omega será entonces-
-Los omegas dicen que apesto a Alpha deprimido, por eso ninguno se nos acercaba en la fiesta-
-Prácticamente me deja sin opciones, ¿Acaso no piensas en la memoria de tu padre?, Regulus no está aquí, tú eres el único que debe seguir el linaje familiar, no tienes que casarte, solo o dame un heredero, un nieto-
Sirius dejo caer los cubiertos en el plato, se retiró de la mesa, cuando paso al lado de su madre dijo
–Usar la memoria de Papá, fue un golpe bajo-
James, Andrómeda, Narcissa y Lucius fueron a Hogsmeade, y se encontraron en las tres escobas con Bellatrix y Rodolphus.
-Bella ¿Qué haces aquí?- pregunto Narcissa.
-Rodolphus me invito a salir, y como ustedes estaba teniendo una cita, pues no quería quedar excluida-
-“Esta chica está loca, prácticamente me obligo a venir”- pensó Rodolphus.
-¿Cómo esta Rabastan?- pregunto Lucius.
-Cundo me fui, a medio día, aún seguía en cama-
-¿Está enfermo?-
-No creo, es más, tengo excelentes noticias, incluso iba a buscarlos para contarles sobre un traidor y una traidora-
Los Alphas entendieron el mensaje.
-Creo que debemos regresar a casa, debemos ver a Rabastan- dijo James apresurado –Además Rodolphus quiere contarnos algo-
-Ni siquiera lo pienses, Rodolphus me llevara al callejón Diagon a comprar unos libros- dijo Bellatrix.
-Dijo que tiene algo importante que decirnos-
-Pues te enteras mañana-
Los Alphas gruñeron en señal de enojo, Bellatrix tomo del brazo de Rodolphus y lo llevo al callejón Diagon.
-Esa chica es insoportable- dijo James.
-Esa es mi hermana- dijo Andrómeda. –Además que puede ser tan importante que no lo pudo decir frente a nosotros-
-Es algo nuestro, cosas de Alphas, ustedes los Betas no entenderían- dijo Lucius como Excusa.
Luego de pasar su día con las hermanas Black, James y Lucius regresaron a sus respectivas casas, debían prepararse para regresar a Hogwarts al igual que las hermanas Black. Andrómeda le hizo prometer a James que tendrían otra cita, James acepto aun sabiendo que era mentira.
En el mundo muggle…
Los cinco omegas, Lily, Tom y Loise, estaba en una habitación.
-Yo soy una bruja nacida de Muggles, fui a Hogwarts hace muchos años, quede en la casa de Hufflepuff, pero no termine mis estudios, el ritual ocurrió en mi tercer año, pensé que era una broma, hasta que se llevaron a mi mejor amigo, le dije a Dumbledore que eso estaba mal, que lo acusaría con el ministerio, al llegar ahí se burlaron de mí, les explique cómo era en la sociedad muggle, y me dijeron que mis costumbre eran absurdas, me prohibieron volver a Hogwarts- dijo Loise.
-Eso es terrible, lo han hecho desde siempre, ¿acaso callan a todos los que no están de acuerdo con ellos?- dijo Lily
-No podemos volver, no quiero volver- dijo Frank –Yo sé que Rabastan no tuvo la culpa de violarme, si regreso, no podré hacer nada, no termine mis estudios, yo quería se auror, pero tendré un Bebé, y lo único que nos enseñaron en la casa omega era que lo único que haremos el resto de nuestra vida será cuidar a los muchos niños que nuestras familias y nuestros Alphas quieran que tengamos-
Todos vieron a Frank. No lo habían visto desde ese punto, al principio la meta de los omegas era huir de sus violadores, ahora si regresaban pasarían el resto de su vidas teniendo Bebé y criarlos hasta que sus útero no pudieran más.
-En ningún lugar nos darían empleo, a menos que nuestros Alphas nos dieran permiso- dijo Remus
-Y si dejas a tu hijo, eres un mal padre- agrego Regulus.
-Sin mencionar que somos adolecentes que no han vivido la vida, y Ya seremos padres- dijo Severus.
Lily sintió el ambiente negativo, ella quería ver a Severus, el dilema que se le presentaba era entre la libertad de su amigo o dejarlo e irse al mundo mágico.
-Mi mamá no me quiere- dijo Regulus.
-Yo te quiero, y mis padres también, el problema es que si regresas, tu madre querrá un heredero, y creo que somos muy jóvenes para…-
-¿Sexo?- termino Lily.
-¡No!- grito Sonrojado Tom –Para ser padres-
-Sí, y Yo quiero ir a Disneylandia, con un Bebé no podría subir a todos esos maravillosos juegos que Brenda y Edmund me contaron-
-¿Qué es Disneylandia?- pregunto Tom.
-Creo que deberían ir a dormir- dijo Lily –Mañana en la mañana hablaremos de todo-
Tom y Regulus fueron a una habitación separada, Lily y Severus se quedaron en una cama, Frank y Arthur en otra cama, Loise y Remus se fue a otra habitación.
-Reg, ven- dijo Brenda.
-¿Qué pasa Mamá?-
Brenda le dio algo a Regulus en la mano.
-Todo con precaución- susurro Brenda.
-Mmm… está bien, Buenas noches Mamá-
-Buenas noches Reg, y buenas noches Tom-
Tom y Regulus regresaron a la habitación.
-¿Qué es esto?- Pregunto Regulus.
-No sé, déjame ver- Tom leyó lo que decía aquel raro objeto que nunca había visto. Se sonrojo –Es un condón-
-¿Y qué es?-
-Es látex, al parecer los Alphas y betas Muggles lo ponen en sus miembros para no embarazar a una beta, u omega-
Regulus, tomo el condón y lo abrió, la forma que tenía era rara, era un pequeño círculo, luego lo expandió y la forma que tomo le dio risa.
-¡Oh! Ya sé dónde va esta cosa- dijo Regulus entre risas. -¡Ya entendí! Mamá pensaba que tú y Yo haríamos el amor-
-¿Por qué llamas Mamá a la Sra. McCarthy?-
-Ella nos trató bien desde que llegamos aquí, además ha sido mucho más positiva que mi madre, me ha dado buenos consejos, incluso me dejo ver sus vhs de películas de Disney, Mi madre me hubiese arrancado la cabeza si tocara sus cosas-
Tom y Regulus se acostaron juntos, se dieron unos cuantos Besos antes de dormir, la tentación de tener relaciones con su pareja era grande para Tom, aunque fuera su pareja, Regulus era muy joven, Tom lo entendía y esperaba que el su Alpha interior lo entendiera.
-¿Piensas volver al mundo mágico?- le pregunto Lily a Severus.
-No lo sé, debería, estoy embarazado, James merece saberlo-
-James ha estado muy mal sin ti, está más delgado-
-Solo necesito pensar, eso es todo, Frank me dio razones para hacerlo-
-Lo resolveremos, ya veras, Lily Jr. vivirá en un mundo mágico mejor-
-¿Lily Jr.?- dijo Severus entre risas
-Soy tu mejor amiga, si es una niña se llamara Lily Jr.-
-¿Y si es niño?-
-¿Lilo?-
Lily y Severus rieron, a los pocos minutos cayeron dormidos.
En casa de los Malfoy, Lucius se acostó en su cama esperaba que Rodolphus tuviera buenas noticias del paradero de Arthur, cayo dormido. En su sueños Lucius caminaba por un campo, al principio caminaba sin dirección, hasta que escuchó una voz.
-¡Ed! ¡Ed! ¡Ed! ¡Espera!-
Era Arthur y perseguía a un chico. El rubio se echó a correr detrás de su omega, como si un león fuera detrás de su presa.
-¡Arthur! ¡Arthur! ¡Arthur!- Gritaba Lucius.
Arthur se detuvo, el otro chico desapareció, el pelirrojo se dio la vuelta, para su sorpresa Lucius se hecho sobre él.
-Lu- Lu-Lucius-
-Arthur-
-¿Cómo llegaste aquí?-
Arthur no hablo más, pues Lucius ya tenía sus labios sobre los suyo, el beso era simple, al comienzo, luego Lucius invadió la boca de Arthur con su lengua, Arthur estaba quieto, en vez defenderse, rodeo el cuello de Lucius. El momento era agradable, hasta Dobby despertó a Lucius, quien regreso a la realidad de golpe, se tocó los labios, sonrió, ahora nada lo detendría de encontrar a su omega.