Los McCarthy, Lily y los omegas se dirigieron a un restaurante, ahí debido a la condición de los embarazados, ordenaron la comida rápidamente.
-Este Bebé definitivamente será enorme, me hace comer demasiado- dijo Severus dándole una mordida enorme trozo de filete de res asado que tenía en su tenedor.
-Cuando estaba embarazada de los gemelos, trabajaba en una pastelería en Dublín, una noche me comí un pastel de bodas de dos pisos, tuve que volver a hacerlo- dijo Brenda.
-¿En serio?- dijo Arthur.
-Sí, tenía 7 meses de embarazo, y comía como si no hubiera mañana. Cuando nacieron Sean y Sullivan pesaron 10 y 9 libras y media, era como sacar dos sandias de mi cuerpo-
Los omegas hicieron un gesto de dolor, Arthur palideció, el esperaba gemelos, y recordó al omega dando a luz en el mundo mágico. Unos minutos después llegaron Los Alphas.
-¿Cómo les fue?- pregunto Brenda.
-Bien y Mal- contesto Loise –Pudimos haber venido dos horas antes, si ciertas personas no se hubieran quedado jugando videojuegos-
-Estoy de acuerdo- dijo Lucius molesto de que Sirius y James se quedaran jugando ese juego muggle.
-Pero era increíble, ese pacman es tan divertido, como perseguía a los fantasmas, ¿Cómo hacían para volverse azules?-
-¿Magia?- dijo Rabastan.
Los McCarthy se rieron de la respuesta de Rabastan, obviamente no era magia. Los magos se apresuraron en ordenar, tenían hambre, ni siquiera habían comido, todo era culpa de James y Sirius.
-El viaje fue increíble, nos subimos al ferri, luego a un autobús, luego fuimos a comprar los boletos, Loise nos llevó al centro comercial, ahí fue donde James y Yo vimos los juegos Árcade- dijo Sirius.
-Se quedaron varias horas jugando, por eso vinimos tarde- dijo Rabastan.
-Es que no sabíamos utilizar el juego- contesto James – y los fantasmas siempre me alcanzaban-
-Es culpa de los fantasmas- dijo Sirius.
-Chicos ¿Ya han pensado en los nombres de los bebés?- pregunto Brenda.
-Si es niño me gustaría que se llamara como mi Papá, Lyall, si es niña me gustaría que se llamara Felicitas como la diosa de la felicidad- dijo Remus.
-Yo quería que se llamara como yo, si fuera niño, seria Sirius III-
-Ya hay muchos Sirius en tu familia, además es mi bebé, yo le llevo en mi vientre-
-Es mi hijo también-
-Que tal Sirius Lyall, suena bien- contesto Brenda al notar que Remus iba a entrar en discusión.
-Voy a pensarlo- los ojos de Remus mostraban molestia, como si estuviera listo para pelear.
-Nuestros Papás, ya pensaron el nombre del Bebé, Neville Rabastan III Lestrange Longbottom- dijo Frank.
-¿Y te gusta?- pregunto Lily.
-Mi bisabuelo se llamaba Neville, dice que era un gran Alpha, era muy inteligente- dijo Frank.
-Yo quiero que mi hijo se llame Fleamont James Potter- dijo James.
-¿Cómo tu papá y como tú? ¿En serio? ¿Qué hay de mí? No me has preguntado cómo quiero que se llame- dijo Severus.
-Si es niña puedes ponerle el nombre-
Sean se levantó de su silla. Le pidió a James que lo acompañara al baño, el Alpha no entendía porque el beta le pedía eso. En el baño, Sean vio a James y suspiro.
-¿Qué te pasa? ¿Quieres que Severus te mate?-
-¿De qué hablas? Solo hablábamos de nombres de Bebés-
-Obviamente Severus no quiere que el Bebé tenga el nombre que tú escogiste, Deberías preguntarle qué nombre le gusta, no pienses las cosas por tu cuenta, recuerda que ahora son pareja-
-No lo había notado, ¿Estaba enojado?-
-No le pediste su opinión, además esta embrazado, se molestara por nada, los cambios de humor serán frecuentes, además ¿no viste a Remus? Quería arrancarle la cabeza a Sirius-
Los dos jóvenes salieron del Baño. Severus se veía relajado, Tener lejos a James le había hecho cambiar de humor.
-Si es niño se llamara Harry James y si es niña se llamara Harriet Lily– dijo Severus, listo para atacar todo lo que James dijera.
-Está bien Sev, pero deberías considerar cambiar el Lily, a nadie le gusta ese nombre- dijo James.
-Para que Sepas las Lilys somos hermosas, inteligentes, y muy amistosas, lo que lamento es que si es niño se llamara James, yo molestaría a alguien con un nombre tan tonto-
-Pelirroja del demonio-
-tarado-
-Basta- dijo Severus.
-¿Y ustedes ya pensaron en algún nombre?- pregunto Sullivan a Arthur y Lucius.
-como son gemelos tenemos las opciones más abiertas, si son dos niñas, yo quiero que una se Llame Elizabeth- dijo Lucius
-A mí me gusta Ginebra, como mi bisabuela- dijo Arthur.
-Si son niño, uno de ellos se llamara Draco-
-A mi gusta Ronald, pero mi hermano Bill me hizo prometerle cuando era niño, que a mi primer hijo le pondría su nombre-
-Yo elegí el nombre de mis hijos con dos de mis ex novios, y el nombre de mis perros cuando era niña. Sean Ray y Sullivan Duncan-
-¡Mamá! ¿Nos llamaste como tus perros?- dijeron los gemelos, ganándose la burla de todos los presentes en la mesa.
-Es que quise mucho a eso perros, eran mis mascotas favoritas, cuando era niña me seguían a todos lados y dormían en mi cama, pero los de la perra se los llevaron porque no tenían collar, nunca los volví a ver, llore varios días-
-Mamá, nos has traumado por el resto de nuestras vidas - dijo Sean.
Edmund estaba rojo, soltaba carcajadas. Sean y Sullivan se molestaron con su hermano, sabían cómo vengarse.
-¿Y Edmund? ¿Por qué se llama así?- pregunto Sean.
-Por mi gato Ed Y mi Papá, Marcus,- contesto Brenda.
Las risas no terminaban, Regulus pensaba en el dragón que tenía cuando era pequeño, se llamaba escarlata, debido a su color de piel, el omega se acercó a Tom y le susurro.
-Nuestro hijo se llamara Nagini escarlata, como tu serpiente y mi dragón-
Tom rodo los ojos, le envió una dulce sonrisa a su pareja –Estoy seguro que podemos pensar algo mejor-
Esa noche después de la cena, los Alphas y Loise se quedaron en la casa de los McCarthy, partirían al día siguiente, por la tarde. Remus, Sirius, James y Severus se quedaron en una habitación. Rabastan, Frank, Arthur, y Lucius en otra.
A media noche. James se sentía mal, no sabía porque, no podía dormir, al despertarse noto que Severus no estaba en la cama. Empezó a olfatear y sintió en el aire el dulce aroma de su omega, lo siguió hasta la cocina, pero Severus no estaba ahí, James siguió el olor hasta que salió de la casa, unos metros más adelante se encontró a Severus.
-Sev ¿Qué haces aquí? A esta hora, te vas a resfriar.
-James ¿Qué haces despierto?-
-No podía dormir, luego no te vi en cama, y te olfatee –
-No podía dormir, mi espalda me incomoda un poco, Salí a caminar, además no tenía sueño-
-Entonces te acompaño-
Severus se sonrojo, igual acepto. Ambos jóvenes caminaron, Severus llevo a James en dirección a los establos, no sabía la razón, quería estar solo con él.
-James, quiero disculparme por mi comportamiento, en el restaurante, no sabía lo que me pasaba simplemente estaba molesto-
-No importa, Sean me dijo que es normal, el embarazo, las hormonas, además debí haberte pedido tu opinión, ¿Por qué escogiste ese nombre? No me digas que era una mascota-
-Escogí Harry por el chico de Slytherin que me gustaba-
-¡Sev! ¡No puede ser!-
Severus se estaba riendo –Es broma-
-Sev, no me des esa clase de bromas, sabes que soy celoso-
-Lo sé, igual, me gusta Harry porque así se llamaba mi tátara abuelo, Harrison Prince, era un beta muy inteligente, era el mejor pocionista de la gran Bretaña mágica, yo siempre lo admire-
En los establos, los jóvenes se sentaron sobre una pila de heno.
-¿Por qué elegiste mi nombre?- pregunto sonrojado.
-Eres su Papá, y la mayoría de los Papá Alphas y betas les ponen su nombre a sus hijos, mi Papá me puso Tobías cuando nací, creyó que yo era un Alpha-
-No te imagino como Alpha, eres demasiado lindo-
Alpha y omega se vieron, James se acercó a Severus y le dio un beso, el omega le correspondió. Empezaron a besarse, James se separó de los labios de Severus para concentrarse en su cuello, en donde le daba pequeños besos húmedos, y chupones.
-Sev te amo- susurro James.
Severus sonrió tímidamente, James se acostó en el heno, Severus le quito la camisa, y empezó a darle besitos en el pecho. El Alpha estaba erecto, era incomodo ya que traía puesto su bóxer y sus pantalones, quito a Severus un momento para sacarse la ropa molesta, el omega le siguió.
Ambos estaban desnudos, uno frente al otro. James vio la barriguita de Severus, la acaricio, luego bajo al miembro y empezó a masturbarlo, Severus cerró sus ojos, James volvió a acostarse, Severus sentó sobre él, empezó a Rebotar, hasta que ambos no aguantaron, James termino dentro de su omega, y Severus en su vientre, no tardaron en caer dormidos.
Apenas salió el sol, James se despertó, se vistió y llevo a Severus hasta la casa. Unas horas después, los omegas, Lily, Loise y los Alphas estaban listos. Los McCarthy los llevaron a tomar el ferri, ahí la familia se despido de sus visitantes. Brenda lloro, al igual que Regulus, ella le dio un peluche d Winnie Pooh, Sullivan le dio un peluche de perro a Remus, Sean le dio unas flores a Severus, Edmund le dio su llave inglesa a Arthur y unos chocolates a Frank.