Luego de viajar a la isla Kerry, el avión los llevo a Dublín, en el aeropuerto, Loise llevo a los magos hasta los baños del aeropuerto, en el cubículo que decía “Baño en reparación, precaución, fuera de servicio”
-¿Qué vamos a hacer?- pregunto Lily.
-Ya verás ¿Quién va primero?- dijo Loise.
Los magos se vieron entre ellos, Tom fue el primero que acepto, la mujer y el chico se metieron al baño, juntos, Loise le dijo a Tom que se metiera en el inodoro. Tom quería rehusarse, no era algo higiénico
-Solo hazlo, estarás en el callejón Diagon en un dos por tres-
El joven introdujo los pies en la taza del inodoro, ella jalo de la palanca, y el Alpha desapareció, al abrir la puerta, ella pregunto por el siguiente. Los jóvenes magos se sorprendieron al ver que Tom había desaparecido. Uno a uno entraron a aquel baño, el último fue Regulus quien cerro sus ojos, al abrirlos, estaba parado en una chimenea, y los demás estaba esperándolo, al parecer estaban en un antiguo puesto de antigüedades mágicas, cuando salieron, como Loise había dicho estaban en El callejón Diagon.
-Era un portal- dijo Frank.
-Nos hubiera dicho eso desde un comienzo- dijo Lucius-¿Ahora qué hacemos?
-Es mejor que los llevemos a mi casa- dijo Tom –Nadie sospechara, lo que harán sus padres al verlos será informarle al ministerio, y al profeta-
-Yo debo regresar a clases, aún estoy en huelga- dijo Lily.
-¿Huelga?- dijo Severus.
La Beta se transportó a Hogwarts, los demás se fueron a la casa de Tom. En la mansión Riddle, Merope y Thomas estaban tomando el té, cuando vieron a su hijo, a los amigos de sus hijos, y a los omegas en su patio trasero.
-¡Tom! – Grito Merope -¡Regulus! La mujer corrió a abrazarlos, Thomas sonrió de orgullos, sabía que su hijo no volvería sin su omega.
En casa, el elfo domestico de los Riddle le sirvió te a los magos. Los Riddle en parte estaban sorprendidos de que los omegas estuviesen embarazados.
-¿Están bien? ¿Alguien les hizo daño? ¿Tienen hambre? ¿Tienen sueño?
-Yo tengo sueño, estoy cansado- dijo Arthur.
Merope Llevo a Arthur a una habitación para que descansara, Severus y Remus tenían mucha hambre, últimamente lo tenían, pidieron, piña, chocolate, tostadas y miel para comer.
-La pasamos bien, nos quedamos con los McCarthy, ellos nos cuidaron mientras estábamos en el mundo muggle, Sean el hijo mayor nos encontró en un sendero y nos llevó a su casa- dijo Regulus
-La pasaron muy bien- dijo Tom.
-Sus Mamás los han extrañado, Hope y Eileen vienen a preguntar si tenemos noticias de ustedes- dijo Thomas a Severus y Remus.
-Yo también la he extrañado mucho, quisiera verla- dijo Severus.
-Yo también extraño a mi Mamá, aunque me duele que me haya entregado- dijo Remus.
-Remus, olvídalo, al menos tu mamá te extraña, la mía me abandono- dijo Regulus.
-¿Alguien ha preguntado por nosotros?- pregunto Rabastan.
-Sí, todos, pero tú hermano y nosotros te cubrimos, les dijimos a sus padres y a Dumbledore que estaban estudiando para sus EXTASIS, que querían estar solo- dijo Merope.
-¡Los EXTASIS! No He estudiado nada- dijo James.
-Es mejor que regresen a Hogwarts- dijo Remus.
-Nosotros estaremos bien, ya estuvimos solos en el mundo muggle, y estamos ilesos- Agrego Severus.
Los Alphas regresaron a Hogwarts, cada uno se fue a su sala común sin decir una palabra. Al día siguiente, casi todos los estudiantes de séptimo año estaban en la biblioteca, los temibles EXTASIS estaban a unos meses. James y Sirius tomaron sus libros de DCAO, y Herbologia y se fueron hasta el último rincón de la biblioteca, el lugar estaba lleno, algunos estudiantes se comían sus uñas y mordían sus lápices de los nervios.
-hubiera repasado un poco, mientras estábamos en el mundo muggle, DCAO es muy difícil, no entiendo nada, sacare una T en ese examen- dijo James.
-Mírame a mí, sufriendo con Herbologia avanzada, debe ser un chiste, mejor le pido ayuda a Xenophilius, no he hablado con él, no sé cómo nos fue en el proyecto-
-No te ofendas pero no quiero ver a tu prima, creo que le gusto, yo no puedo corresponderle, soy un Alpha que tiene a su omega… y pronto un hijo-
-Ya se le pasara, Mamá le presentara otros pretendientes, es una Black, es una caprichosa-
-Deberían estar estudiando- dijo Tom –Los EXTASIS de este año son más difíciles, si quieren ser aurores deben sacar las notas máximas.
-¿Ya llevas tiempo estudiando?- pregunto Sirius.
-Desde hace tres meses, si alcanzo una calificación excelente, el director de San mungo me dará una pasantía como asistente de medimago-
-Debo dar lo mejor de mí, Severus y el bebé merecen tener una gran vida- dijo james muy serio y muy seguro de sí mismo.
-tienes razón, pronto seremos hombres de familia, Remus necesita un hombre con trabajo, y mi hijo un padre del cual sentirse orgulloso-
Tom sonrió, la forma en la que los Alphas que tenía en frente se motivaban, era gracioso, tuvo unos recuerdos de su noche con Regulus, se preguntaba si Regulus había quedado embarazado, En el fondo el Slytherin esperaba que no fuese así.
En la sala común de Slytherin. Lucius se había despertado tarde, y aun tenia sueño, no era el único, muchos Alphas sentían los síntomas del embarazo de sus omegas. El Alpha se levantó, aunque su cuerpo quería quedarse en cama, se preguntaba cómo estaba Arthur, sabía que en la residencia de los Riddle no le faltaría nada, igual se preocupaba.
-Buenos días, ¿Sabes qué hora es?- dijo Rabastan.
-No me lo digas-
-Son las 10 de la mañana, por cierto, Narcissa no ha parado de preguntar por ti, le dije que estabas dormido, tal vez te la encuentres en el almuerzo-
-Debería decirle que Arthur está aquí-
-Entonces todos se darán cuenta y Arthur regresara a la casa omega, y a ese lugar solo ingresas con permiso de los profesores y de tus padres, y no creo que te lo den, los EXTASIS están cerca, deberías concentrarte en los exámenes-
-Cuando todo esto termine, Arthur y Yo estaremos solos, en una casa frente al mar lejos de todos, el cuidara de nuestros hijos, mientras yo esté trabajando en gringotts –
-Al menos tienes suerte, tú lograste estar con él, Frank no me dio la oportunidad-
-Tienes el fin de semana, tengo entendido que tus padres y mis padres pasaran el fin de semana en Rusia-
Aquella tarde, los estudiantes de último año no paraban de estudiar, los Ravenclaw se habían vuelto el centro de atención de las demás casas, Los alumnos caminaban de arriba abajo buscando libros, apuntes, notas, todo lo que les sirviera para estudiar. Lily se había encontrado con James y Sirius, la bruja no estaba preocupada por los EXTASIS.
-¿Ya vieron al nuevo candidato a ministro de magia?- dijo Emocionada la pelirroja con un trozo del profeta en sus manos.
-No, deberías estar estudiando- dijo James.
-Ahora no, a diferencia de ustedes yo me prepare a hace meses. Como les decía, este candidato prometió darle más derechos a los omegas, también que terminaría con el ritual, que si el gana lo prohibirá para siempre, además si el gana los omegas no necesitaran permiso de sus Alphas para trabajar o viajar-
-¿Qué? Eso es absurdo, nadie votara por el- dijo James.
-Creo que nuestra pequeña clase sobre los derechos universales de los omegas no les sirvió de nada-
-Evans, no es por molestarte pero esto es el mundo mágico, aquí todos son a la antigua, James tiene razón nadie votara por el- dijo Sirius.
-Pues él tiene mi voto, y el de varios chicos, además es el favorito, la gente no reelegiría de nuevo al antiguo ministro, ese viejo decrepito necesita unas vacaciones-
En la casa de los Riddle, los omegas leían el profeta, el nuevo candidato les había dado esperanzas, prometía muchas cosas, educación, trabajo, libertad, todas las cosas que ellos no tenían bajo el mando del ministro de magia.
-El actual ministro prometió muchas cosas en los tiempos de mi padre, prometió que los Dementores de Azkaban dejarían de torturar a los presos, y que le daría una vida más digna a los gigantes y a los centauros, sin mencionar que los Hombre lobos nunca tendrían que esconderse. Prometió mucho y no cumplió nada, todo sigue tal cual era la época de mi abuelo- dijo Merope, mientras tejía un suéter para Regulus.
-Tiene mi voto, soy un omega y un hombre lobo, tengo derecho a vivir libre, no conozco a ningún hombre lobo con un trabajo decente, las pociones matalobos son muy caras, deberían ser gratuitas- dijo Remus.
-Sin mencionar las Pociones para el celo, son muy costosas- dijo Regulus.
-Si él va cumplir lo que promete, es darle el beneficio de la duda, tendríamos que hablar con él, preguntarle lo que hará durante su gobierno- dijo Severus.
-Pues es raro que mencione los derechos de los omegas, ningún candidato ha hecho a eso, es como si fueran un cero a la izquierda- dijo Merope –tiene algo bajo las mangas-
-Habrá una ronda de preguntas y respuestas en público, deberíamos ir, así Severus puede hacer las preguntas que desee- dijo Arthur.
-Nos arriesgaríamos a ser descubiertos, nos regresarían a la casa omega, no pienso volver a ese lugar, es como estar en prisión- dijo Frank.
En ese momento uno de los elfos domésticos se apareció y le dijo a Merope que Eileen Prince y Hope Lupin estaba de visita, los omegas se quedaron dónde estaban, no querían ser descubiertos, Merope les pidió que se quedaran, Hope y Eileen no eran las mismas desde que Remus y Severus habían desaparecido. La mujer les abrió las puertas a sus amigas, no dijo ni una palabra, simplemente llevo a las brujas hasta donde se encontraban los omegas.
Eileen y Hope no lo podían creer sus hijos estaban ahí, frente a ellas, unas lágrimas salieron de sus ojos, ellas se acercaron a abrazar a sus hijos, los omegas habían olvidado el enojo que tenían hacia sus madres, la sorpresa de todo fue cuando ellas sintieron unos bultos en sus estómagos.
-Voy a ser abuela, no lo puedo creer- Eileen tocaba el la barriguita de Severus, los ojos de Eileen estaban llenos de ternura.
-Tienen como 3 meses, los demás omegas tienen el mismo tiempo- dijo Hope.
-No sabes lo mucho que te extrañe, te vas y vuelves con un regalo- dijo Eileen.
-Yo también te extrañe, Walburga es tan cruel, quería dejar de buscarte, dijo que ya no valía la pena, que buscaría otro omega para su hijo- dijo Hope.
-Los Black siempre han sido tan malos?- preguntó Severus.
-En especial las mujeres- dijo Regulus.
-Narcissa y Andromeda han estado persiguiendo a James y Lucius- dijo Eileen.
Severus y Arthur al escuchar esas palabras por priemra vez en su vida se sintieron celosos e inseguros.