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Monster: You're my lucky one (OT12 KAISOO) por Ranamai

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Notas del capitulo:

Ya llegué!!

Con nuevo capo....

 

Ahora las cosas se ponen interesantes jajajaja

2. Unidos por la música

El negro cabello de Jongin se balanceaba junto a él mientras tocaba apasionadamente una pieza extremadamente rápida y difícil. Desde hacía un par de días, no había tenido ningún contacto con Kyungsoo y no lo había visto, principalmente porque se empeñaba en no hacerlo.

Jongin se sorprendió al darse cuenta que su dolor emocional era un perfecto aliciente para su habilidad musical. Mientras más recordaba a Kyungsoo y más le dolía el haber sido rechazado, mejor era su interpretación sentando al piano. Su profesora incluso le había felicitado muchas veces después de una pieza perfectamente presentada con el peso de un corazón roto en el pecho.

En cuanto terminó de tocar para su práctica, se puso de pie para ir por algo de beber. Estaba física y emocionalmente cansado en ese momento y un descanso era más que necesario si no quería afectar su rendimiento. Lentamente, apartó su asiento y se dio la vuelta para encontrar el inconfundible estuche de un chelo en la puerta de su sala de prácticas. Sorprendido, miró alrededor y sus ojos se encontraron con los de Kyungsoo, que lo miraba desde una esquina, sonrojado.

-Fue hermoso- sentencia el mayor con lágrimas en los ojos- Realmente eres impresionante. Estabas tan inmerso en tu música que ni siquiera te diste cuenta que entré.
-Lamento eso- es lo único que Jongin responde y el otro chico niega con la cabeza- No tienes nada por qué disculparte. Yo debo hacerlo, en realidad. Fue totalmente infantil  mi actitud y quisiera ser yo quien pida perdón por dejarte con la palabra en la boca. Jamás se me habían declarado... fue difícil para mi y, como soy muy malo con estas cosas, yo... te escribí esto- el chico le extiende un papel cuidadosamente doblado. Fue impactante para Jongin darse cuenta de que acababa de recibir una respuesta positiva.

El pianista, conmovido por las palabras del joven violonchelista, estaba tan emocionado y concentrado en el detalle que acababa de recibir, que no fue capaz de verlo venir. De puntillas, por culpa de la diferencia de altura, y con una de sus manos apoyadas en el hombro del menor, Kyungsoo se atrevió a poner sus labios sobre los de Jongin y presionarlos hasta casi sentir dolor. Aprovechó  la sorpresa del otro para prácticamente salir corriendo, dejando hasta a su chelo en el camino para poder huir con facilidad.

El pianista estaba ahí, en medio de la sala de ensayos, parado con una expresión indescifrable cuando uno de los maestros del conservatorio entró y segundos después un Kyungsoo totalmente sonrojado lo hizo también. El profesor les explicó que debía reunirlos, porque parte del concurso incluía un seguimiento de los ensayos y un guía asignado, que en caso del dúo de Kyungsoo y Jongin, era él.

  *   *

El amable maestro resultó ser muy exigente al momento de las prácticas. Ambos eran de los mejores estudiantes en sus especialidades y Kyungsoo había propuesto una pieza complicada de dominar. Iba a ser muy duro, pero rendirse no estaba en sus planes.

Salieron agotados y muchísimo más tarde de lo que esperaban. Jongin estaba ligeramente molesto por la intrusión mientras que Kyungsoo estaba encantado con las ideas y la iniciativa del hombre y pensaba en lo beneficioso que sería para su presentación.

Caminaron en silencio, raramente interrumpido para hacer algún comentario sin mucha relevancia. Jongin estaba ansioso mientras Kyungsoo nervioso. Ninguno era capaz de empezar o mantener una conversación relativamente normal. Cuando llegaron a la parada del autobús no tuvieron que esperar casi nada ahí y Jongin logró hacer el primer contacto físico colocando una mano en su espada al momento de subir en el transporte.

Fueron hasta la parte de atrás y se sentaron, apartados de los demás. Rápidamente, Jongin ayudó a Kyungsoo con sus cosas, porque afortunadamente no llevaba el enorme chelo con él y las mochilas quedaron sobre sus manos, fuertemente entrelazadas durante todo el camino.

  *   *

Su relación empezó de manera extraña. De un momento a otro, ambos empezaron a demostrar su cariño con actos más que con palabras y simplemente terminaron siendo una pareja sin tener que hablarlo o discutirlo todo el tiempo, bastaron un par de situaciones para entender que se sentían cómodos estando juntos. Ambos estaban cómodos de esa manera. Estaban en institutos distintos, pero al estar dedicados a la música y sus constantes ensayos los hacían increíblemente unidos. Empezaron a verse con frecuencia y visitarse en sus casas, en donde estudiaban, salir juntos y muchas otras cosas típicas de los jóvenes.  

El momento que más los unió, fue cuando ganaron el concurso, con una brillante e impecable presentación que conmovió y encantó a los jueces. Fueron con su director de viaje y se presentaron en varios escenarios, muchos de ellos prestigiosos que estaba impulsando de manera definitiva su carrera musical, siendo un orgullo para muchos.

Al volver, el talentoso dúo estaba en su mejor momento. Jongin tenía miedo de haberse adelantado demasiado y que eso pueda perjudicar a su noviazgo, pero nada de eso sucedió, todo era perfecto incluso si a veces los padres del pianista no se sentían muy cómodos con el repentino entusiasmo de su hijo con otro muchacho, algo que iba en contra de sus creencias religiosas, pero Jongin era independiente y apenas si les hacía saber cosas acerca de su nuevo amigo, lo llevaba a casa con cierta frecuencia, pero no hacían nada que pudiera hacerlos dudar de ellos. Era un secreto perfectamente guardado tras su compartido amor y pasión por la música que era lo que los había unido en primer lugar.

Como regalo por su primer mes juntos, Kyungsoo preparó un montón de cosas para celebrar y llenó de regalos y detalles a su novio para demostrar su cariño y su interés, pero Jongin hizo algo muchísimo más significativo, algo que conmovió a Kyungsoo hasta las lágrimas.
El pianista agradeció todo lo que el chico había hecho y, tras cinco años, se sacó un collar que llevaba siempre colgado al cuello y se lo pone a Kyungsoo. El mayor sabía la  historia detrás de ese objeto y lo importante que era para Jongin, ya que era un colgante que habían hecho con una pieza de su primer piano cuando este se había dañado sin remedio y habían tenido que comprar uno nuevo. Ninguna torta o peluche superaría el tener en su cuello ese pequeño dije con la correa de cuello que tenía impregnada la colonia tan deliciosamente reconocible de su novio.

La sala de ensayos donde tenían su piano y su chelo se había convertido en su refugio, ya que la mayor parte del tiempo juntos se la pasaban ahí. Comían, venían vídeos, practicaban, todo tenía como escenario el pequeño cuarto de música. Y ese lugar sería testigo de eso y mucho más.

Agradecido y emocionado, Kyungsoo deja al lado todo y se acerca para atrapar los labios de Jongin, que habían estado tentándolo desde hacía ya un buen rato. Tomo el rostro del menor y luego lo abrazó por el cuello. Como habían estado sentados en el piso, enseguida terminaron recostados, con Kyungsoo encima, devorándolo con ansias. Repentinamente, Jongin se puso de pie, dejando a Kyungsoo confundido y deseoso en el suelo. Caminó hasta la puerta y en un ágil movimiento, estaban encerrados, sin nadie que pudiera interrumpirlos. La casi diabólica sonrisa que se pintaba en el rostro del pianista hizo que una electricidad recorriera la espina de Kyungsoo.

Como todavía permanecía sentado, Jongin aprovechó para acercarse a gatas y recostarlo. Tomó una muñeca con cada mano y las extendió libremente por el piso mientras se aprovechaba de los carnosos labios del violonchelista. Kyungsoo movía las  piernas para liberar toda la tensión y ansiedad que los mordiscos de Jongin provocaban en su cuerpo. No quería gritar, no podía hacerlo, porque si los encontraban estarían en grandes problemas. Pero no hacerlo era todo un reto, porque Jongin ahora estaba desabrochando su pantalón. Sus manos estaban frías y eso sólo intensificó todas las sensaciones que provocaba en su cuerpo el ser tocado por el otro chico.

Cansado de la pose, Kyungsoo logró impulsarse y terminó rodeando el cuerpo de Jongin con brazos y piernas, sentado sobre él. En ese punto, los besos se volvieron más salvajes y profundos. Jongin no tenía cuidado y tocó todo el cuerpo de Kyungsoo que tenía al alcance, sin miedo ni vergüenza de nada mientras este ahogaba gemidos e intentaba concentrarse en no gritar.

-Kyungsoo... ¿tú?- la pregunta no fue formulada, pero de todas formas fue entendida y el aludido negó con la cabeza.
-Ese no es un problema para mi... otro día podré estar yo arriba... hoy simplemente te necesito dentro.

Las palabras tranquilizaron al menor quien siguió con sus labores y Kyungsoo se puso rojo como un tomate después de darse cuenta lo que había dicho y todas sus posibles implicaciones. Y ese momento no era para pensar, además tampoco podía pensar. La estimulación de Jongin estaba haciendo un trabajo excelente para disimular y disminuir el tremendo dolor que significaba ser penetrado. En parte, se sintió un poco mal al darse cuenta que esta no era la primera vez para Jongin, cuando si era la suya. Prefirió no hacer preguntas y disfrutar. Algún día podría arruinar un buen momento, pero hoy no era ese día.
Kyungsoo fue empujado contra el piso una y otra vez, sus pechos estaban juntos y era emocionante sentir sus fuertes latidos sincronizarse. Las expresiones de Jongin eran la gloria, con los ojos semi cerrados, la boca ligeramente abierta para poder morderse el labio inferior y el sudor en su frente por el esfuerzo. Era tan adictamente atractivo.
Pero él no se quedaba atrás, sus rojos labios más hinchados de lo normal, su expresión de placer y sus ojos cerrados por completo hacían que Jongin no pudiera concentrarse en su totalidad, era demasiado hermoso.
Al terminar, Jongin tuvo que tapar su boca y suavizar los gritos de su pareja a besos,porque al parecer no era muy bueno manteniendo la calma cuando llegaba al orgasmo. Increíble.

Kyungsoo se sintió avergonzado cuando se dio cuenta de dónde habían estado juntos por primera vez, pero después de imaginarse ese lugar como su pequeño escondite para el amor, decidió que era hora de estar él “arriba” y acorraló a Jongin contra la pared. Le haría sentir tan deseado y amado como él lo había hecho.

  *   *

-Hoy no- el violonchelista peleaba contra las inquietas manos de Jongin un martes en la tarde, cuando debían estar practicando.
-No me hagas esto... Soo.. desde hace tres días que no lo hacemos- se queja el menor con un puchero, mientras metía las manos en su pantalón, para lograr convencerlo.
-Muy gracioso, tenemos práctica hoy. Si terminamos pronto te dejaré hacer lo que quieras- Kyungsoo retira las manos de su cuerpo y se acerca para besar los labios de Jongin y terminar mordiendo con fuerza, para vengarse.
-Eso no es justo... Soo... no es justo. Ya dijiste eso ayer... y nada- Jongin hace un nuevo intento, pero falla miserablemente.
-Sabes que en estos días pueden llegar a ver que cumplamos con los horarios en cualquier momento. No nos podemos arriesgar.

El pianista se rinde y finalmente acepta, sentándose en el banco frente a su piano e improvisando un rato hasta que Kyungsoo esté listo con su propio instrumento. No habían pasado ni cinco minutos de práctica cuando alguien golpeó la puerta. Era uno de los maestros confirmando que estaban trabajando.

-Soo... ahora que lo pienso... nunca te agradecí por tu carta.
-¿La leíste?- Kyungsoo se pone rojo, como tenía como costumbre e intenta cambiar de tema, pero no puede.
-Es realmente bonita y la leo con frecuencia. La conservaré para siempre
-¡Qué vergonzoso! No lo digas... La hice porque me comporté como un tonto contigo aquella vez ¿cuánto tiempo ha pasado? ¿por qué lo dices ahora?
-No lo sé, pero de todas formas... gracias.- Jongin deja su piano por un instante y deposita un delicado y casto beso antes de sentarse otra vez a seguir con la práctica.
-No, gracias a ti... Jongin.

  *   *

Kyungsoo se mordía el labio inferior, preocupado. La voz de la contestadora automática volvió a repetir que dejara su mensaje y eso le frustró. ¿Qué pasaba con Jongin? ¿Por qué no contestaba el teléfono? ¿Por qué faltaba a clase?  Tenían una practica importante esta tarde y desde el día anterior no había señales de su novio.

-Kyungsoo-ssi ¿has visto a Jongin?- la maestra de piano del chico se veía igual de consternada y se decepcionó al oír la negativa del muchacho.
-Le he estado llamando, tenemos una práctica hoy y no ha dicho nada a nadie. Intenté llamar a su casa, pero tampoco he logrado comunicarme.
-Es extraño, debía darme unas partituras, pero no lo hizo y estoy preocupada. Siempre es muy responsable. Llamé al colegio, pero dicen que tampoco ha ido. Tal vez esté enfermo.
-Hoy iré a ver- asegura Kyungsoo y regresa a la sala, con la esperanza de que Jongin llegara tarde, pero llegara.  Jongin nunca lo hizo. Kyungsoo fue a su casa y nadie estuvo ahí. Intentó llamarlo, pero no consiguió nada. estaba asustado ahora. ¿Y si algo había pasado?


*   *   *

Jongin:

Realmente no sé cómo empezar esto, tampoco sé como decir lo que está en mi mente. Lamento mucho haberme ido así, tenías razón de estar molesto y de mal interpretar mi actitud, realmente lo siento.
No soy bueno con las palabras pero intentaré decirte de esta forma lo que tal vez nunca pueda decirte de frente.
Primero, quiero agradecerte por tu valentía. También me gustas y si no fuera porque tuviste el coraje de decírmelo, jamás hubiera sido capaz de demostrar nada.

¿Sabes? Siento que somos iguales, pero diferentes al mismo tiempo. No sé si sabes qué intento decir, pero en resumen, siento que nos complementamos.
Admiro la seguridad con la que puedes decir que te gusto, jamás pensé que sería capaz de poder estar con alguien sin tener que preocuparme de lo que digan los demás, pero a ti no te importa y eso me da fuerza para que a mi tampoco.

Quiero conocerte, déjame conocerte y disfrutar a la primera persona con la que me gustaría empezar “algo”. Creo que eso es todo, por favor, no hables de esta carta conmigo porque me sentiré muy avergonzado.

También me gustas,
Kyungsoo

Notas finales:

Muy bien....

 

Qué opinan?

jajjajajj estoy muy ansiosa


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