Cap. 79: Tranquilo, te tengo!
Tanto y tanto ruido, mamá! Sid! Layla! Ayuda!
Dónde estoy? Dónde estás Sid? Mami... Tengo miedo!
Mire mis manos mugrosas, todo era una mezcla de todo y nada, parecía que en mi cabeza todo estaba desordenado por completo, trate de enfocar la vista y me vi, solo con una camisa enorme que me daba hasta las rodillas, dónde? Qué? Yo.....
Una ráfaga de viento me hizo ponerme en cuclillas hacía frío y el piso estaba duro y mojado, seguramente había llovido.
Me quede así algunos minutos hasta que sentí un dolor en la barriga, era acaso hambre? Si... tenía hambre pero también sed y desesperación, luces por aquí y por allá una voces en mi cabeza.
Me levante y con el primer paso caí sobre un charco sucio, me entro agua a los ojos y me senté como pude a tallármelos , que comezón. Mamá ... Sid... no puedo más , llore , no puedo más , quiero creer que algún día vendrá a mi su paz pero es que ya no puedo.... Un recuerdo vino a mi, un cumpleaños salte una reja , corrí por la oscuridad, quería encontrarle como hoy.
Me volví a meter a gatas mas al fondo de ese pequeño callejón, me senté y lloré, solo tenía mi llanto.
Estaba mareado.... Cerré los ojos y le vi....
" Qué voy a hacer contigo Stephan? Siempre dándome preocupaciones, debes regresar a tu casa, sigue y no te detengas, que yo estaré esperándote "
La luz....La luz me hería los ojos ....
- Hey tu!
Un hombre enorme uniformado de una manera chistosa me señaló.
- Hey! Ven acá !
Proferí un alarido del susuto y salí corriendo quizás era sirviente de Nereo, Nereo? Ese era el? Era su nombre?
En mi huida derribe unos botes de basura y salí directo a una avenida, yo sabía dónde, un flash, otro y otro, las luces de Picadilly Circus....Un festival al que fui con mi mama, la reina.... Estaba en Londres, había llegado al fin, estaba parado a mitad de la avenida de Picadilly Circus. Un coche me paso a toda velocidad y otro , sonaron sus bocinas y me gritaron palabrotas, un rechinido de llantas y justo a un metro de mi se frenó un taxi, causando que todos los demás frenaran de la misma manera... Un autobús freno del otro lado casi a unos centímetros de mi y yo comencé a dar la vuelta lentamente viendo como todo a mi alrededor era caos y furia, mi nombre ? Cual era mi nombre ? Por que nadie decía mi nombre?
- Quítate maldito estúpido!
- Quítate loco de pacotilla!
El caos se hacía más grande hasta que vi como dos patrullas se acercaban lo más que podían entre ese trafico de vehículos y algunos policías se dejaban venir a pie.
- Hey chico manos a la cabeza!
Di media vuelta pero me vi rodeado, comencé a temblar....Dijiste que me protegerías... Te necesito!
Di un paso hacia atrás y entonces gire pero la vista me falló y tropecé , creí escuchar como mi cuerpo golpeaba el pavimento; como mi cabeza azotaba contra uno de los rines de un vehículo, como finalmente todo mi ser estrellaba en el pavimento mojado y frío.... Como el extendía su mano y me alcanzaba. Su mano .....Me alcanzaba.....
- Tranquilo Stephan te tengo.
Alce la vista y lo vi, sabía que no era la primera vez que lo veía pero no recordaba de donde... Mi cabeza era un caos.
-Ehhh...
- Tranquilo Stephan te tengo.
El me apretó contra su cintura y entonces sus cabellos negros y largos atados por una cinta en la nuca me recordaron a una criatura que no sabía yo donde había perdido.
-Tranquilo Stephan yo te voy a cuidar te lo prometo.
Con su brazo me alzó y yo solo pude decir en una voz muy baja ...
- Whip....
Como es que sabía su nombre? Yo me sentí familiarizado con este chico pero ....De donde?
- Tranquilos!- Grito el - Nadie debe tocarle.
- Pero látigo.... El chico....
- Yo me encargaré!
El traía un uniforme de policía, la camisa blanca y la corbata negra, se miraba apuesto pero a mi pez le hubiera quedado mejor.
El me levanto en sus brazos y yo seguí viéndole como un idiota. Esos ojos contenían el mar pero no eran los ojos del mar, quien era este chico?
Me subió a su vehículo brillante en el asiento del copiloto, era acaso uno de esos caballeros modernos? Subió en el lugar del piloto y entonces recordé que mi bestia me había enseñado a manejar, esa bestia que recorría mi ser....
- Sid te necesito- Dije en voz baja pero no escapó esta frase a sus oídos.
- Quien es Sid ?
- Ah? ! Sid es .....Sid es mi....Mi amor.
- Ah?
El prendió el auto y comenzamos a desplazarnos.
- A donde vamos?
- Te llevo a casa. El es tu novio entonces?!
Él me dedico una mirada de curiosidad y yo me sonroje .
- Es mi secreto no me preguntes - Dije juntando las manos de forma nerviosa.
- Bien nene.
Su postura firme al conducir, un recuerdo , un carro blanco y mi bestia mítica conduciendo .
Conocía y desconocía al mismo tiempo el camino que el tomaba y yo podía sentir como mi corazón se iba tranquilizando.
Quizás el estuviera en casa esperándome, la ansiedad comenzó a tomarme preso así que tenía que lograr una distracción.
El policía era muy guapo, alto quizás tanto como Sid pero menos que Kanon, mucho menos... Kanon? Donde estaría? Yo .... Su cabello negro, su tez blanca sus manos grandes y su nariz fina.... Era el sin ser el.
Yo me hundía en un mar de imágenes de su rostro, sabía que si dejaba de recordarle lo haría como las cosas que olvidamos y vamos creciendo ignorando que sucedieron alguna vez. Mamá yo quería quererle, pero él no dejo mas que su ausencia.
La voz de aquel chico me llevó de regreso.
- Vas a estar bien nene, y cuando te recuperes te voy a invitar a salir eh?!
Sus palabras y su tono de voz eran amables pero sin relevancia para mí, este se metió en la primera entrada que seguía a un enorme muro hecho de bloques blancos, ahí mis inseguridades salieron a la luz yo sabía que era aquel sitio, y un recuerdo vino a mi como relámpago alumbrando la media noche.
Ese castaño me estaba tomando, me había poseído cuando estuvimos a solas, yo solo quería su ayuda; pero como volvería a ver a mi pez a los ojos? Como? La entrada tenía ese letrero en letras rojas, el moreno me había traído al infierno de nueva cuenta .
- No! No! - Comencé a manotear y dar de gritos para que esté diera media vuelta - No aquí no! Quiero ir a casa, llévame a casa! Quiero ir a casa!
- Tranquilo nene, voy a chocar si sigues así.
- Sid! Sid llévame a casa! Aquí no por favor!
Le tome por el cuello pero este freno de golpe y me estrelle contra la guantera más aún así de inmediato volví a mi postura, intentaba ponerme en pie, me revolcaba pero estaba atado por el pecho y la cintura.
El moreno se bajó de inmediato y abrió la puerta de mi lado, me quito la correa de la que estaba sujeto y le pegue un puñetazo que no tuvo mucho efecto sobre el, este me saco del carro y hecho mi peso sobre su hombro.
- Tranquilo nene, ya estás a salvó!
- Bájame, no! Bájame, el mounstro está aquí! Mamá! Sid! Mamá! Mamá!
Todos mis golpes no surtieron efecto alguno, ni mis pataleos, este entro al hospital conmigo en sus hombros y hablo con una mujer que vestía de blanco, no escuché nada pues apenas si susurraban pero continúe gritando así quizás alguien se apiadaría de mi y me ayudaría.
- Bájame! Por favor sáquenme de aquí! Sáquenme de este infierno!
Debió ser muy fuerte pues espero unos minutos conmigo sobre el y aguanto mis mejores golpes, cuando volvimos a avanzar guiados por otra mujer de blanco.
Ese camino, ese camino yo sabía a donde daba.... Un flashback de sus palabras...Era el área de psiquiatría.
- No! No! Bájame Whip Bájame! Me van a encerrar de nuevo! Sid! Sid!Siiiiid!
Cuando esté me bajo dos hombres me tomaron por los brazos y me guiaron a una habitación, lo último que escuché de Whip fue.
- Por favor tratenlo bien, yo mismo me encargaré del informe a la policía pero vendré después a verle.
- Descuide oficial Whipper así lo haremos, su madre está realmente muy preocupada , toda su familia.
- Bien? Por favor cuide muy bien de el.
Mi familia? Mi ...Mamá? Mamá?
- Mamá! Mamá! Ayúdame !
Comencé a gritar cuando esos hombres me despojaron de mi camisa y me dejaron desnudo, un chorro de agua fría me hizo la idea de desistir de pelear, en serio estaba muy fría.
- Lava bien su cabello.
- De cualquier manera habrá que cortarlo, es una maraña de suciedad.
- No podemos cortarlo, son órdenes del director.
- Mamá! Déjenme! Déjenme ir!
- Tranquilo chico.
- Mamá! Mamá!
El agua helada me quito el ánimo de seguir peleando y me acurruque en el piso del baño a llorar y pedir que alguien se apiadara de mi.
Estos me sacaron de ahí y me secaron sin nada de cuidado, sus manos eran toscas y me dolía cuando tocaban los rastros de sus huellas que aún estaban tatuadas en mi piel.
Me pusieron una bata de color blanco y me llevaron a rastras a una habitación , yo no cooperaría nunca con ellos. Aún sentía el frío del agua pero aún así volvía luchar y a pedir ayuda.
En la habitación ya estaban esperando un par de enfermeras que los ayudaron a contenerme y me ataron a la cama.
- Malditos! Malditos! Cuanto les dio ese mounstro de Ephy?!
Ese nombre, Ephy, el ....No podría volver a ver a Sid a los ojos gracias a Ephy.
- Tranquilo chico, debes descansar ! El director vendrá a verte más tarde, ya le avisamos que ya estás aquí.
Comencé a gritar más y más , entonces las mujeres comenzaron a cuchichearse algo que me pareció sospechoso. Una de ellas asintió y checo una tablilla que traía en la manos con instrucciones.
- Que sea una dosis muy baja .
dijo una mientras la otra fue de inmediato a donde había un carro con medicamentos y comenzó a preparar una jeringa.
- Que es eso? Veneno?! Me van a envenenar? - Solté de repente y una de ellas se acerco.
- No te va a doler pequeño esto te va dar un poco de descanso, te vas a dormir un ratito nada más.
- Dormir?! Me quieren drogar?!No! Mamá! Mamaaaaaa!
Comencé a intentar patalear y a gritar con todas mis fuerzas; mientras uno de los hombres me sujetaba de lado intentando que las correas no me lastimaran el otro me descubría el trasero luego entonces una de ellas me picaba. Solté tremendo alarido pues ahora sí estaba perdido.
Sentí el poder del sedante de inmediato, comencé a perder las pocas fuerzas que me quedaban y mis ojos se cerraron pero no por eso dejé de escuchar.
- Vaya está delgado pero es fuerte.
- Vaya que si luchó!
- Lo peor fueron los gritos, que demonios le habrá pasado para haber terminado así tan joven.
Sentí las mantas sobre mi y luego escuché como se alejaban, intenté abrir los ojos pero apenas si pude abrirlos una línea que dejó entrar la luz que me cegó y me rendí.
Me quedé en ese estado tan pasivo quien sabe por cuanto tiempo , escuchando sonidos pero sin poder abrir los ojos , sintiendo sin poder moverme, en una paz perturbadora hasta que escuché como la puerta se abría pero no escuché pasos .
-Mi pobre Stephan, que te sucedió?
Sentí su caricia fría en mis mejillas e intenté abrir los ojos pero esa persona me calmo.
- Shhh, tranquilo, debes descansar ya estás en casa amor mío!
Casa? Mi casa era el mar, mi casa eran sus brazos y no conocería la paz hasta que el volviera.
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