Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

ESPECTRO ....DE AMOR L1 por Lory Backon

[Reviews - 79]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

Proximo capitulo:

La verdadera historia de Glenn y Sid y que dice la carta que Sid le escribio a Steph?


- Debes comer bien bebé, si no, no te vas a recuperar pronto.
- Lo se mamá pero estoy lleno.
- Vamos un par de cucharadas más y ya.
Hice una mueca, pero la voluntad de mi mamá se había vuelto de acero, así que en contra de mi voluntad me metió un par de cucharadas más y luego me dio a beber un enorme vaso de jugo.
Layla entro luciendo uno de sus hermoso vestidos franceses de época color dorados, y se hizo cómplice de mi madre de inmediato.
- Hola Steph, como estas? Hola, Cathy! Dime, comió bien Steph?
- No, se ha vuelto muy quisquilloso Layla- Dijo mi madre acusatoriamente.
Layla me escrutó con rudeza y dijo.
- Debes de comer bien Steph, que acaso no quieres mejorarte?
- Layla, si quiero pero ya estaba muy lleno.
- Apenas estas recuperando tu peso, y dijo el doctor que tenías que comer bien- Me regaño mi madre y Layla asintió.
Yo puse los ojos en blanco y mi madre preparo sus cosas para irse , Layla en tanto ordenaba a las enfermeras que preparasen el baño. Hacía tres meses que había vuelto en mi, me había enterado de que había actuado como desquiciado estos dos años y había hecho sufrir con esto, a muchas personas, también había hecho muchas tonterías y gastado el tiempo de manera boba, pero aunque había cometido muchos errores de alguna forma había aprendido a confiar, un poco más en mi, en Sid y en todas las personas que estaban a mi alrededor y eso era invaluable, sonaría tonto pero así era para mi.
El estar tanto tiempo en ese estado me había ocasionado muchos problemas de salud, por ejemplo de principio no podía moverme nada, el dolor en mis articulaciones era mucho, también no podía hablar muy bien pero Layla contrató un terapeuta del habla que me compuso en un mes y también todo un equipo de fisioterapeutas para poder volver a moverme con libertad y a pesar de que aún no podía caminar, al menos ya era capaz de moverme de la cintura hacia arriba con más libertad.
- Steph, debes comer bien- Dijo está, de manera refunfuñona en cuanto mi madre se marchó a su trabajo.
- Layla, ya fuiste a Norfolk? La tienes?
- Steph, no te salgas por la tangente!
- Estoy comiendo bien, es solo que mi mamá quiere que me termine todo y me siento satisfecho con facilidad.
-Lo entiendo Steph pero Yuri mando esas porciones, necesitas recuperar fuerzas.
- Lo se, pero dime, la tienes?
- Primero tomarás un baño Steph .
Infle los cachetes de disgusto y entro de inmediato Kuri.
- Steph, como te sientes hoy?
Se miraba tan guapo en ese traje de Cachemira y luciendo como un joven doctor apuesto.
- Bien Kuri.
- Supongo Layla te fastidia mucho, es como una vieja amargada y regañona, no es así?
- Ah?!
Layla salió detrás de Kuri con esos ojos encendidos y dijo.
- A quien dijiste vieja amargada y regañona, ruso imbécil?!
- Ahhhh, bueno... No es que fuera a ti, ni nada, pero es de buenos cristianos decir siempre la verdad y en honor de esta se podría decir que la vejez se traduce en experiencia.
- Basta Kuri sus ojos sacan fuego- Le dije asustado mientras esté me levantaba en sus brazos para llevarme a la tina.
- Escúchame bien Kuri Steklov te voy a enseñar lo que significa estar vieja y amargada!
Kuri emprendió la huida hasta la bañera conmigo en sus brazos muy a tiempo, ellos se habían dividido el trabajo de cuidar de mi Layla y Kuri estaban presentes las tardes conmigo, Layla era la encargada de todo excepto de los asuntos que concernían a las partes personales, como bañarme o cambiarme. De esas cosas se ocupaba Kuri, por otro lado estaban en la noche Elliot y Yuri que hacían las mismas funciones solo que todo el mundo había prohibido a Elliot tocarme. Desde que desperté Samael había venido un par de veces a verme para poder buscar libremente en mi mente las cosas que deseaba saber, ahí se dio cuenta de que el que me había enseñado a cerrar mi mente con una noble intención había sido Suri, y no su pupilo como todo el mundo creía, pero este no venía mucho pues tenía que cuidar de Theobald, por lo poco que me había enterado, ahora el era cien porciento dependiente de su amo.
En cuanto a Kanon el seguía aun dormido, lo cual decían en el lo fortalecía de sobremanera, aunque yo estaba preocupado por el; los demás miembros de la asamblea estaban más preocupados por la ansiedad sexual de Elliot .
De Ephy no se sabía nada , o quizás nadie me había dicho y yo tampoco quería saber.... Pero había alguien más, una mujer de nombre June W. que me enviaba flores al hospital cada semana, de donde había yo conocido a esta dama? Por lastima, la tarjeta firmada con su bella letra no traía un teléfono o una dirección a dónde dirigirse y mis espectros no estaban interesados en el tema.
Ya casi era octubre cuando Kanon despertó, yo estaba en el solario con Yuri cuando esté se levantó y se quedó viendo a la nada.
- Yuri?
-Es Kanon!
-Que sucede?
-Se ha despertado!
- Yuri llévame de inmediato con el por favor!
El asintió y me tomo en sus brazos, no tardamos más que un par de segundos en llegar a su habitación cuando le vi, Elliot estaba mirando a la nada en la ventana con un gesto terrible en tanto Kanon estaba sentado en la enorme cama que le había acunado todo este tiempo.
En cuanto llegamos, yo le señalé a Yuri que me dejara a los pies de la cama de Kanon y este obedeció.
Los ojos negros de Kanon estaban serenos y muy hermosos, mis ojos eran negros también; pero me hubiese gustado que se parecieran a los del moreno. Gateando y arrastrandome me acerque a Kanon despacio y este me regaló esa mirada benevolente, pero le tome por sorpresa echando me sobre el.
- Muchas gracias Kanon, gracias por protegerme con tu hermosa voz, gracias por nunca dejarme solo, nunca tendré como pagártelo!
Elliot volteo a vernos y su gesto se ablando un poco, Kanon me acarició las mejillas y sonrió tímidamente. Elliot camino hacia donde estábamos, se paro frente a nosotrosr03; mostrando al moreno de nuevo ese gesto vacio, sus miradas chocaron violentamente así que decidí tomar partido aunque estaba asustado.
- Elliot?
Este me miro de forma fría y yo alargue mi mano para tomar la suya, y la guíe hasta mi entrepierna, donde la puse sobre mi sexo. Esto desconcertó al niño y a los demás espectros.
- Perdón! Por mi culpa has tenido que reprimir tus deseos sexuales con Kanon y se que estás molesto con ello pero no te molestes con Kanon, no es su culpa, es mía por ser un tonto, así que no te desquites con el, si....- La voz me abandono por instantes y luego tartamudee-- Si.... Si quieres yo te compensaré sin oponer resistencia, soportaré lo que quieras!
Elliot me miro primero asombrado y luego divertido.
- Jajajaja!- Estalló en risas.
- Ah?!
Luego Yuri estalló en risas y finalmente Kanon me dio unas palmaditas en la cabeza mientras se cubría la sonrisa.
- Jajaja Steph, no digas tonterías, esta bien, hoy no me cobraré la abstinencia Kanon.
- Ah?
- Si deseas puedes quedarte hoy con el Steph yo iré a la casa a preparar todo!
- Quedarme con el?
Elliot se marchó aún riendo y yo me quedé ignorante de lo que había sucedido.
- Pero...
- Es buena idea Steph, no quieres dormir con Kanon hoy?
- Puedo?
- Si, además si duermes con Kanon ten por seguro que descansaras muy bien.
- Ah?- Mire a Kanon y este asintió, siempre era tan amable conmigo- Pero... No se enojara más Elliot?
- Elliot no está enojado contigo, ni con Kanon, solo está hambriento de deseos sexuales pervertidos.
- Pero....
- Elliot ha estado en abstinencia todo este tiempo, es lógico que la bestia parezca feroz cuando tiene hambre no lo crees?
- Ah? Si bueno pero...Es todo mi culpa.
- Jajaja no lo entiendas así Steph, Elliot te ama mucho más de lo que crees.
- Pero...
- Es verdad que algunas ocasiones o casi siempre Elliot es muy celoso y posesivo con Kanon pero, el jamás podría enojarse contigo. Tiene razones muy especiales para amarte como a un hijo o a un nieto...
Yo no comprendí sus palabras pero Kanon me tomo por las axilas y me jalo hacia las almohadas, coloco unas cuantas a mi lado izquierdo y se recostó conmigo. Aún estaba poniéndose el sol pero me acurruque junto a Kanon y me quede bien dormido, la verdad es que aún tenía un poco mal mis patrones de sueño, pero dormir junto a él fue tan natural y placentero que no cabía duda que el era un hijo de Belfegor.
La semana siguiente mi mamá tenía que salir de viaje pues mi tío James había sufrido un pre infarto y necesitaban que mi madre le ayudase a mi prima a cuidar de el al menos quince días, ella se había intentado negar pues decía que no quería separarse de mi lado pero la persuadí de que fuera y Layla me ayudó en ello.
- Descuida Cathy, ve y no te apures, yo cuidare de Steph bien.
- Pero...
- Mamá, vamos estaré bien!
- Pero el tío de Layla dijo que en esta semana te podrían dar de alta.
- Si eso sucede, no dudes que lo llevaré a mi casa Cathy, ahí recibirá todas la atenciones que necesite.
- Pero...
- Mamá si no vas con el tío, estaré muy preocupado además de triste, yo estoy bien, y estaré bien si tú me dices que el tío lo está.
- Ay bebé, no quiero dejarte solo.
- No lo harás, regresaras y ya veraz que cuando lo hagas quien sabe....Quizás te lleves una sorpresa!
Mi mamá sonrió y me dijo.
- Prométeme que comerás muy bien y terminarás todo el plato.
- Mamá!- Protesté.
- Promételo!- Repitió ella.
- Está bien lo prometo- Dije poniendo los ojos en blanco.
- Ese es mi bebé!
Mi mamá partió por la noche rumbo a Whitby.
Esa misma semana Yuri me dio de alta y se decidió que iría a la casa de Kanon y Elliot, ya que en la casa de los hermanos espectro estaba Theobald y Samael, y Layla quería evitar todo enfrentamiento, yo había aprendido a obedecer en cuanto a esto, así que no rechiste; por el contrario, deseaba muchísimo dormir en la cama de Kanon nuevamente así que me instalaron ahí, pero como era de esperarse Layla y los gemelos también se mudaron para allá. Se instalaron en las habitaciones de huéspedes.
Para el cumpleaños de Sid yo di mis primeros pasos de nueva cuenta; ese día los espectros y yo organizamos una pequeña reunión en ausencia del festejado, quizás me puse un poco melancólico debido a que extrañaba a Sid pero sabía que era cuestión de tiempo en lo que mejoraba para salir a buscarle.
- Steph?
Layla se sentó a mi lado y saco un objeto que me hizo muy feliz.
- La....Layla!
Era mi bolso! El bolso que había dejado en Nortfolk.
- Había ido por ella desde que me dijiste, pero no sabía si sería bueno dártela, después pensé en qué has sido muy valiente y muy buen chico, y que debemos tener más fe en ti, así que en cuanto estés mejor podremos partir.
Ella sonrió de manera tan natural y hermosa que la luz que irradiaba me dejó perplejo.
- Gracias Layla.
Me abrace a la bolsa y pensé.
" Esa carta puede que sea un rechazo de Sid o todo lo contrario, pero... Ya no tengo miedo, ahora solo quiero intentar ser feliz"
Kanon volteo y me sonrió como si hubiera leído mis pensamientos.
-------------------------------------------------------
Del libro de Elliot.
Del triste conejo de la luna.
Los primero rayos de luna caían sobre la hermosa figura de Kanon, mi amado niño.
- No es hermoso Steph?
Me senté al lado de mi bisnieto y este me miro sin comprender.
- No es Kanon lo mas hermoso que has visto? Míralo, ahí parado bajo la luz de la luna.
Kanon estaba parado dentro del pequeño riachuelo del jardín trasero de su habitación, solo vestía una bata de seda color guinda con estampado de flores y estaba practicando con una espada de madera, intentaba controlar su fuerza pues este aún no la dominaba al cien.
- Estás muy enamorado verdad Elliot?
- No sabes cuánto. Has escuchado su voz verdad?
- Si!
- Dime, no es mi Kanon una criatura magnífica?
- Si.
- Desde que le vi por primera vez le amé, ame a ese niño pequeño hambriento y en harapos que mendigaba en los campos de arroz. Le ame más cuando le encontré en aquel hospital, toda una belleza de cabellos negros y mirada perdida, un ser entre la vida y la muerte, algo humanamente no humano; por mucho que intentaron silenciar su poder, esa hermosa voz que tu escuchaste nadie pudo callar ese hermoso timbre creado por Dios, nadie pudo silenciar la belleza de su poder interior o romper su corazón. No, ningún humano o espectro pudo.
Yo hablaba de Kanon de esa manera en la que se creería que el amor era el que hablaba por mi, pero objetivamente era cierto, la voz de Kanon era la voz más hermosa del mundo, Steph ya la había escuchado un par de veces antes; pero apenas fue que cayó en cuenta de eso. Mire a Kanon, tan erguido alto y fuerte.
- Estaba desesperado Steph, a punto de entregarme a mi padre, buscaba esas señales que la misma desesperación te hace crear, buscaba una pista de un mundo nuevo que nadie me había dicho donde quedaba, una forma de sentirme nuevo y no el espectro que soy. Un espectro atrapado en este cuerpo, un anciano con la cara de un niño, lo más horrible que puede existir, lo más brutalmente asqueroso creado por Dios, no hay nada en mi que no sea brutalmente ofensivo en todas las formas posibles, entonces atrapado en ese patrón bajo la luz de la luna de Japón y mientras las sombras de la noche miraban como yo cometía un delito imperdonable, un par de ojos negros curiosos también miraban mi vergüenza.
Un delito? Pensó mi rubio bisnieto pero no dijo más, solo fijo su mirada en Kanon que lucía como uno de esos dioses míticos de las leyendas, Kanon era Hércules y Aquiles.
- Llegue muy lejos, intenté tanto para poder acabar conmigo que cuando al fin tenía de algún modo la muerte en mi bolsillo, me tope con el, dime acaso no es irónico? Me enamore de inmediato de sus ojos negros, de alguna manera me había enamorado; no de alguien que me había entregado a costa de algún favor su alma, si no todo lo contrario, me había enamorado a costa de la mía propia, sentí que no deseaba aún hacerme a un lado del mundo humano y lo que pareció que me liberaba del control divino, de mi destino demoniaco; de alguna manera me puso unos grilletes más gruesos dejándome anclado a este mundo y todo gracias a esos ojos oscuros, bese su frente aún con la marca de mi pecado y me largue de ahí, no volví hasta unos años después de la segunda guerra mundial, cuando el motivo de mis afectos ya había sido torturado para pagar mi pecado. Regresé a terminar lo que no había hecho la vez pasada, regresé a buscar a una asamblea muy especial que podía darme lo que yo necesitaba y me encontré con el resultado de mi pecado atado a un amor al que fui completamente arrastrado.
- Elliot- Sentí su miedo de mi expresión y yo sonreí con amargura mientras no le quitaba la vista a mi Kanon- Que hiciste? Cual fue ese pecado?
- Yo solo quería medir el valor de mi existencia sabes? Pero dime, no es simplemente hermoso?
Un rayo de luz de luna atino a iluminar a Kanon, se miraba tan masculino que sentí mi excitación.
- Sabes que lo hace hermoso Steph?
Este negó.
- Su fragilidad, a pesar de ser un espectro, la humanidad que sigue impresa en su piel, en su mirada, en cada uno de sus gestos, Kanon es aún un muy joven espectro y eso lo hace tremendamente humano, puede cometer errores simples, Kanon conserva ciertos miedos humanos y de su niñez.
- Miedos? Pero que podría darle miedo ?
- Le da miedo el quedarse solo, los fuegos artificiales...Eso entre muchas otras cosas, es por eso que Kanon es tan hermoso a la vista de todos, por que el es de alguna manera un niño humano.... Excesivamente alto- Sonreí al verle, Kanon que estaba distraído, dejo que la amable luz le bañara el rostro mientras esté dirigía su mirada al cielo oscuro de Londres.
- Entonces es eso...- Dijo su bisnieto y se le formó una sonrisa en los labios.
- Que?
- Es por eso que Kanon es tan amable, si es solo un niño bueno. Me gustaría ser así...
Sonreí, en definitiva Stephan tenía mucho del carácter sumiso de Kanon.
Por la madrugada y mientras estos dormían yo salí al balcón, necesitaba recibir las bondades de la luz de la luna, que aunque insuficiente era de cierto modo un tipo de luz que al menos podíamos recibir.
Me volví la espalda y mire a Kanon y a Stephan dormidos pasivamente en la cama de mi pequeño espectro.
Si, bisabuelo y bisnieto, mi familia, eso tranquilizó mi sangre pero no mi conciencia, yo había dicho a Stephan que había cometido un pecado pero lo triste es que quizás eso iba más allá del libre albedrío o de cualquier cosa, mi pecado era tan inconfesable que a excepción de un antiguo maestro mío que era el único que sabía de este; pero ni el mismo Kanon, que su voz recorría mi alma, ni el mismo, sabía sobre esto.
Una brisa helada círculo por el balcón y yo me senté en el alféizar de este para poder observar con más amplitud la vista de la cuidad y a los dos ángeles que descansaban en aquella cama, cerré mis ojos y la vi de nueva cuenta.
Usaba esa yukata andrajosa, parchada, remendada a más que le pintaba una figura esbelta y hermosa, esa mujer que tenía recogido el cabello con un par de ramas de cerezos como ostentando su belleza, definitivamente eso pintaba para ser una provocación, a la espalda ese sombrero tan detestable de recolectora de arroz; no era mas que una vulgar campesina y tenía esos ojos, ojos negros como esa noche, se estaba quitando la ropa para darse un baño, cantaba aquella tonada, no parecía importarle en absoluto que hubiera alguien en las cercanías. La vi y me sentí extasiado, de inmediato sentí esa lujuria que me quemaba, que me ponía duro y que era algo incontrolable, lujuria de celos. Salí de mi escondite sin intentar ser silencioso ni nada, en ese instante ya yo estaba cayendo en mis propios instintos demoníacos y le tomaría, de esa manera todo este desastre terminaría , yo tomaría una última víctima más para saciar mi lujuria y luego sería vengado del rechazo de esa mujerzuela real de Japon, seguro iría corriendo predicando que había hecho, como había violado yo el libre albedrio.
Esta estaba tan ensimismada en si que apenas si con mi toque helado noto que alguien estaba a su lado.
- Oh Dios! Me asustaste pequeño!
Yo guarde silencio.
- Que sucede? Te has perdido? No pareces ser de por aquí.
Levante los brazos para que me alzará y está cayó en la trampa.
Me fui directo a su cuello propinándole una mordida y la mande al agua de un empujón, sus gritos se hicieron presentes, y esas muecas de horror al ver mi verdadera identidad; eso me fastidio; así que le tome por el cuello y se lo rompí con una mano, su rostro aterrado cuando murió fue lo último que pude guardar en mis recuerdos, me había propasado, era yo un imbécil! Pero no todo estaba perdido, un hombre venía gritando apresuradamente .
- Keiko! Keiko!
Cuando al fin llegó a donde estábamos el cadáver y yo, nos encontró en una posición demasiado comprometedora.
Yo había hecho girones el vestido de aquella mujer y me estaba dando un gusto y un placer al máximo.
- Keiko!!!! Que hiciste demonio?
Este hombre era alto como mi pequeño Kanon, muy alto y sus facciones masculinas también se parecían demasiado.
El hombre intento irse sobre mi para castigarme pero el hombre se me antojaba tanto como la mujer y lo quise para mi, este intento abatirme con sus puños; pero era muy lento y yo de una patada le rompí la mandíbula y de otra el brazo izquierdo. Mas aún así se levantó y siguió con sus intentos ya muy mermados de atacarme.
- Maldito demonio! Te mataré! Mataste a Keiko!
- Keiko? Quien es Keiko?!
- Mataste a mi esposa!
- Lo que quiero es a ti- Dije calmado y este volvió a intentar embestirme; pero yo di un salto y de una tercera patada le rompí la espalda. Sus gritos fueron tales que despertaron a la aldea que estaba a lo lejos, pues las filas de casas comenzaron a prender sus fuegos. Pobre Japón pobre, pensé.
Como el hombre no se podía mover me di un festín rápido entre su esposa y el, pero este aún vivo me fastidiaba gritando y tirando de mi cabello así que le metí la mano en el pecho y saqué si corazón para engullirlo de un bocado, a diferencia de la mujer su gesto fue más dulce, murió con más dolor; pero con una mirada más hermosa.
Los aldeanos estaban a unos pasos más pero yo quería darme más gusto, así que los espere y me di gusto con todos aquellos que vinieron a mi encuentro, una verdadera lastima que los humanos sean tan débiles, que ninguno soporto el embate contra mi, demasiado débiles y aburridos, antes de la madrugada hice una pira con sus restos y les prendí fuego en una enorme hoguera, salí desilusionado de ahí, pues mi venganza contra su líder no había sido tan efectiva; a casi medio kilómetro escuché una voz, era un niño pequeño, cantaba, cantaba con la voz de un ángel en el sentido más literal, si voz me hizo ponerme en guardia, quizás podría ser un enemigo de luz. Me acerque con sigiló, era un vulgar bebé de apenas tres años de edad, mugroso, hambriento y por su pinta seguro hijo de campesinos, ojos negros, pero su voz, si voz era una marca, no supe de que pues me dejo aturdido. Al fin este noto mi presencia me miro con curiosidad, luego se acercó a mí y toco la sangre de mi rostro, no había reparado en el aspecto tan terrible que podía yo tener, estaba cubierto de la sangre de las personas que había matado.
- Haha?
Haha era la palabra que significaba mamá. Yo me encogí de hombros y le dije.
- Haha?
-Anata no okāsan wa doko ni aru nodeshou ka?
( Dónde está tu madre?)
El pequeño me señaló el arrozal donde yo había dejado todos esos cadáveres y dijo.
- Haha no namae Keiko! Chichi no namae Yuki!- Dijo con entusiasmo.
Sus padres habían sido mis primeras víctimas, había violado a su madre y me había tragado el corazón de su padre. El amanecer estaba a unos minutos así que bese su frente dejándole la marca de advertencia, la marca de sangre de todas las personas que había matado esa noche, la marca que decía....
" Cuidado, aquí yace el bien o el mal, cualquiera que despierte primero"
Regresé a Londres apenas para intentar sobrevivir a una desesperanzada eternidad.
Lo que pasó después de eso me lo conto mi maestro...
En cuanto el sol se puso y llegaron el resto de los pobladores, vieron al pequeño con la marca de sangre en forma de beso en su frente, estaba ahí sentado frente a la pirámide funeraria, miraba con atención como se achicharraban los cuerpos soltando un hedor terrible.
Los aldeanos que eran más que supersticiosos creyeron que un demonio había poseído al pequeño y el niño había matado a todos; este no hablo para defenderse debido al miedo que tenia y a su joven edad, los hombres de la aldea lo asociaron a que el había invocado al demonio y le propinaron una paliza, quemaron su hogar y le despojaron de sus pertenencias dejándolo en la calle, lo echaron de la aldea confinándolo a vivir en la miseria de la calle y por si no hubiese sido suficiente le quemaron las cuerdas bucales, como estigma de que con esa hermosa voz no volvería a invocar a los demonios. Ese niño crecería con el estigma del silencio, por donde fuera, no sería bien recibido y sobre todo con la carga sobre sus hombros de que sería un recipiente para la esencia de Belfegor sin saberlo. Hay bondad en el corazón de cada hombre, incluso de hombres rotos; pero Kanon no encontró nada de esto en ningún hombre.
El quizás ya lo haya olvidado, por que se que es una parte de su vida humana a la cual no puede acceder, pero podría yo hacerlo? Podría yo olvidar que una venganza dejo indefenso a Kanon?
La voz de Kanon ahora solo es un recuerdo que atesoro en mi memoria, algo que nunca nadie volverá a escuchar.
Kanon significa sonido de flores, mire la luna, el viento agito el jardín y mis cabellos que se perfumaron de las esencias de las flores y el eco que dejaron atrás me hizo falta en mi interior.

 

Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).