Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Embarazo por accidente por Arteemisse

[Reviews - 192]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

¡¡Hola a todos!!

Gracias por leer, y no desesperarse conmigo... creo...

Perdonen la tardanza, digamos que mi cuñado se casara la semana próxima y me esta volviendo loca con todos los preparativos...
Aunque también le agradezco un poco, ya que cuando via mi cuñado ser besado por su novio (Si, leyeron bien) Me inspire para hacer este capítulo...

¡¡¡Los quiero un montón, y espero que se encuentren de maravilla!!!

¡¡¡Les envio muchos abrazos y besos...!!!

¡¡Espero sus comentarios!!
¡¡Saludos!!

Mamá salió corriendo de ahí; solo escuche el sonido de un auto que arrancaba a toda velocidad.
Ahora tendremos que comprar portón nuevo… y pagarle terapia al guardia de seguridad.

Mire la sonrisa burlona de Deidara; estaba seguro de que lo hizo a propósito.

--¿Que? Ustedes arruinaron mi vida, pues yo arruinare las de ustedes…--cargo a Naruto en sus brazos con una fuerza desconocida; y salió de ahí dando brinquitos.

--Estoy muerto…--

--Estamos muertos…--

Y esto solo era el comienzo…

---***---***---***---***---***---***---***---***---***---***---

Un mes después…

--¡Ahh! Otro día más…--me levante de la cama con pesimismo, ya va un mes desde que volvimos a la casa de mis padres; y digamos que la vida se ha hecho un poco difícil.

--¿Sabías que roncas mientras duermes? —decía mi hermano, ese pedazo de idiota; el tambien se había despertado, y se lo tiene merecido.

--No me digas, ¿Y sabias tu que eres un IMBECIL? —

--¿Yo imbécil? ¿Entonces tu que eres, pedazo de cosa? —

--Si Deidara no te mata, yo lo hare; ¡¡¡AAAAHHHH!!!--

Y así era el pan de cada día…

Me despertaba, peleábamos y luego alguien venía a calmarnos…

Hermoso…

--Amm… ¿Sasu-chan, Ita-nii? —ambos escuchamos como alguien tocaba suavemente la puerta; nos miramos fijamente y dejamos de lado lo que hacíamos.

--Mmhg… Adelante…--

--B-buenos d-días, d-dice la señora Mikoto que el desayuno está listo—mi pequeño rayo de sol abrió la puerta lentamente, con los ojos cerrados, se veía algo sonrojado… ¡tan dulce!

--Iremos en un minuto—

--B-bien—¡¡Waaa!! ¡Tan lindo!

--Levántate, desgraciado; mamá nos está hablando para ir a comer—trate de mover a Itachi, pero este se volvió a dormir.

--No quiero, no hasta que Dei-chan venga a darme un beso de buenos días—y vuelvo a repetirlo, Imbécil.

--Lo que Deidara te va a dar será un beso de buenas noches, y no creo que te guste dormir en el cementerio—

--Bien, bien; ¡¡¡YO VOY PRIMERO!!!—no sé cómo, pero tomo su ropa y cerró la puerta del baño.

--Ahhh… ni siquiera lo vi entrar…--

Mamá nos había “convencido” de quedarnos a vivir junto a nuestras “parejas”; bueno, en realidad se dio cuenta de la situación de Naruto y nos obligó a quedarnos aquí.
Y digo nos “obligo” porque un día despertamos atados a la cama, literalmente, para que no nos fuéramos.

Aparte de quedarme, agregue otras cosas a la lista de “Cosas por las que temer de Mikoto Uchiha”; su tendencia secuestradora y facilidad para atar nudos.

Después de quedar atrapados aquí, supuestamente dormiríamos en la misma habitación (O sea Naruto y yo, Deidara e Itachi), pero Deidara se adueñó de la habitación de Naru y a mí me saco a patadas (literalmente, aún tengo marcas de zapato en el trasero) de la misma.

Tuve que quedar con mi hermano para no levantar sospechas de mi madre, cosa que irónicamente no habíamos hecho.

Si, estupendo, a mis 35 años sigo compartiendo cama con mi hermano…
Que orgullo…

--Buenos días, mamá—salude entrando a la cocina, dándole un beso en la mejilla a mi madre y sentándome al lado de Naruto, saludándolo del mismo modo.

--Buenos días, cariño… ¿Dormiste bien? Te vez algo cansado…--

--Solo un poco, la verdad; estos últimos días me he sentido mal, tengo náuseas y mareos… veré si Tsunade tiene tiempo para revisarme—

--¿No se supone que tu tambien eres doctor? —dijo el imbécil de mi hermano, dándole un beso corto a Deidara.

--Yo estudie medicina general, y la especialidad que practico es la de cirugía plástica, ¿Crees que yo solo puedo decirme que es lo que tengo? —

--Pues yo digo que estas embarazado…--

--Imbécil, ¡¡YO NO…!!—

--¡Basta, dejen de pelar! —

--Si mamá…--

--No puedo creer que sigan peleando como niños pequeños, deberían aprender a mis rubiecitos que si se comportan como deben…--bueno… podría decirse que si…

--Ahora que lo pienso… Naru, ¿Tú has tenido algún mareo o nausea? —cuando Itachi pensaba, lo hacía bien.

--Mmm… si… pero hace mucho que no pasa eso… solamente tengo los antojos raros…--bueno, raro no era poco; ayer estaba comiendo galletas con crema batida, tomate, mostaza y un vaso de refresco de lima-limón.

--Mi Naru ya va por el segundo mes de embarazo, ¡¡QUE FELIZ ESTOY!!—y mi madre no ha dejado atrás la adolescencia sobre-hormonal…--Aún no puedo esperar a que te digan que van a ser, ¿Niños? ¿Niñas? ¿Mellizos? ¡¡DIGANMELO AHORA!!—

--Tranquilícese, Miko-chan; iremos al médico dentro de dos meses, y ahora si nos dirán que van a ser—Deidara se veía feliz, pero sus ojos daban miedo.

--¡Ahhh! ¡Ya quiero ver a mis nietecitos! ¿Cierto, mi amor? —mamá abrazo a mi padre, que estaba algo excluido de la conversación.

--Si cariño, ya casi seremos abuelos…--mi padre sonrió… que miedo…

--Bueno, bueno; ya terminen de desayunar, todos tenemos un grandioso día por delante…--

Comimos tranquilamente, bueno, si llamas tranquilamente a que un zorrito anaranjado se la pase mordisqueando tus zapatos… si… fue algo tranquilo…

--Sasuke, te quiero ver en mi oficina antes de que te vayas…--uso su tono serio, era una orden.

--Si, papá—

Algo estaba mal, lo aseguro…

---***---***---***---***---***---***---***---***---***---***---

---Entonces… ¿Cuándo va a ser la boda? —mi padre era testarudo a veces; ya llevaba un mes rogándome que me casara, y yo nunca le daba una buena respuesta.

--No lo sé, Naruto y yo lo hemos hablado; y queremos esperar hasta que nazcan los bebes, digo, sería muy malo para sus nervios el estar organizando una boda durante el embarazo—era una completa mentira, pero lo convencía un poco.

--Espero y así sea, Sasuke; sabes muy bien que no me gustaría que ese tierno rubio saliera de esta casa—dijo eso, y se fue; se notaba algo enfadado, pero supongo que estaba bien.

Mis nervios iban de mal en peor.
Primero estaba el riesgo de una demanda total, después, el estúpido de mi hermano creo mentiras de las que no puedo salir; y ahora mi padre quiere que me case con una persona que no conozco bien, esta embarazado y ni siquiera soy el padre.

--Ahhh… ¿Y ahora como puedo cambiar todo esto? —

--¿Todo bien, cariño? –sentí una mano sobre mi hombro, y vi como mi madre me sonreía con una taza de té en la mano—Toma, te vez algo cansado; ¿sucedió algo con tu padre? —

--Sigue insistiendo en que me case con Naruto, y sabes muy bien que no quiero apresurar mucho las cosas—

--Entiendo, tienes miedo ¿cierto? —

--¿Eh? —

--Yo también tenía algo de miedo; pensaba que pasaría si tu padre no me amaba o cosas así, ¿Y sabes qué? Seguimos siendo muy felices durante muchos años—

--Yo no hablo de eso, mamá; hablo de otra cosa…--

--Se nota que ese rubiecito está loco por ti; solo de preguntarle o mencionar tu nombre se pone todo rojito--¿Qué? ¿Naruto podría sentir algo por mí?

--Ahhh… ya no sé qué hacer…--

--Piensa que es lo que quieres; y veras que todo tiene una respuesta…--me dio un beso en la mejilla, y salió de nuevo de la sala.

Necesito vacaciones…

---***---***---***---***---***---***---***---***---***---***---

--Después deben de colocar la mezcla en un molde, y ponerla al horno a 350º C durante 15 minutos—no sé por qué hago esto, pero es algo divertido.

--¿Así? —la señora Mikoto observo detenidamente lo que estaba haciendo, y dio un pequeño saltito de felicidad.

--¡Perfecto, Naru-chan! ¡Puntuación perfecta! –

--G-gracias…--

Así era mi vida desde que entre a esta enorme casa.

Me despertaba por las mañanas, tomaba una ducha y me vestía para bajar a desayunar; después me quedaba prácticamente solo con la señora Mikoto (El señor Fugaku se encerraba en su oficina, así que casi nunca lo veía); así que me deje llevar y participaba con ella en esas cosas que hacen las personas ricas para perder el tiempo.

Tomaba clases de canto, piano, cocina, manualidades, tejido; en serio, tenía bufandas en todos lados, lo único bueno es que Kurama tendrá muchos suéteres para pasar el invierno.

--¿En qué piensas, querido? —dijo la señora Mikoto, mirándome un poco preocupada.

--E-en nada… s-solo pensaba si Sasu-chan está pasándola bien en el hospital—

--Debe estar bien, cariño; seguro está pensando en ti—ella guiño un ojo, y yo solo trataba de verme tranquilo ante lo que dijo,

--N-no lo creo…—

--Espero que Ita y Dei me den nietos pronto, al igual que tú y Sasuke—dijo con brillitos en los ojos, a veces Mikoto-san da miedo--¡Ahhhh! ¡Ya quiero que me den nietos! —creo que será difícil ver eso.

Digamos que Ita-nii y Dei-nii se llevaban cada vez peor; hace poco casi tenían un accidente automovilístico; y si no hubiera sido que Dei-nii también resulto herido en ese accidente, se le hubiera acusado de intento de homicidio, y en verdad así era.

--¿De qué color quieres la nata? --

--Mmm… no sé, ¿Amarillo? –

--Buena elección…--

Decoramos más de 30 magdalenas, dos pasteles de merengue y nos comimos una charola entera de mini-pizzas.

--¡Mmm! ¿Qué huele tan delicioso? —vi que entraba el señor Fugaku por la puerta de la cocina, y se acercó rápidamente a la señora Mikoto, dándole un beso en la mejilla.

--¡Oh! Naru y yo hicimos magdalenas, ¿quieres una? –

--Ahora no cariño, esperare hasta la cena…--

--Bueno, espero que queden algunas para la cena; al parecer a los tres les gustan los pastelillos de naranja—ambos me miraron con una sonrisa, mientras le daba una mordida a mi quinto muffin.

--L-lo siento…--me sonroje hasta mas no poder, me sentía muy avergonzado.

--No te preocupes, cariño; yo sé que mis nietecitos tienen mucha hambre—

--Sigue comiendo, Naru; supongo que harán más para la cena—dijo, señalando al horno, donde aún había dos charolas llenas de magdalenas.

--Jejeje, supongo que si—

--Bueno, iré a la oficina; tengo que terminar algunas cosas—se despidió dándonos un beso en la mejilla, y se fue de ahí a pasos rápidos.

--¡Anda, anda! Ya casi es hora de la cena y nosotros no hemos hecho nada… --Mikoto-san se veía muy consternada, parecía como si se fuera a caer la casa o no sé qué.

--Sí, sí, no hay problema; ¿Que hará de cenar? —tenía hambre, y mucha.

--¿Hare? Haremos, querrás decir; tu y yo cocinaremos la mejor comida que se haya hecho en esta casa—vi los ojos brillantes de Mikoto-san.

--Pues ya que…--

Esto va a doler.

---***---***---***---***---***---***---***---***---***---***---

--¡Wow! ¡Te luciste con la cena, mamá! –enserio que todo se veía delicioso, parecía un enorme festín.

--Gracias cariño—dijo, dándome un pequeño beso en la mejilla; mientras cargaba con su bolso y se arreglaba el peinado—Volveré hasta el fin de semana, tu padre y yo saldremos a pasear—

--¿Iras con papá? —qué raro, papá no era de esas personas que les gustara salir.

--Si, solo estarán tú y Naru solos—vi cómo me lanzaba una mirada insinuante, como si lo hubiera hecho a propósito.

--¡Ahhh! ¿Ya se van? —sonreí con ironía, viendo como mi madre salía por la puerta, dándome un guiño—Debo mudarme pronto…--

---***---***---***---***---***---***---***---***---***---***---

La cena fue… tranquila…

Al parecer Deidara y mi hermano salieron a pasear, y eso significaba dos semanas más para Itachi en el hospital.

Solo éramos Naruto y yo solos, demasiado para mi gusto.
Era lindo ver sus sonrojos cuando nos tocábamos accidentalmente, o su linda voz al pedir las cosas, o su bella manera de comer… moviendo sus labios de esa manera tan sensu…

¡Dispérsate apetito carnal! ¡Dispérsate apetito carnal! ¡DISPÉRSATE APETITO CARNAL!

--L-lo siento…--oí la dulce voz de mi niño, pidiéndome disculpas una vez más…--Yo no…--

--No pidas perdón por algo que no causaste, es más culpa mía por no haber podido evitarlo…--

--Pero…--

--Sé que no quieres estar aquí, pero lo hago por tu bien… no quiero que te pase algo malo…--acaricie suavemente su mejilla, como lo había hecho desde hace poco tiempo.

--Y-yo no quiero molestarte… sé que desde que llegue te has sentido mal… y que has tenido que comprar zapatos nuevos por culpa de Kurama…--vi como lagrimas corrían por sus mejillas, y me acerque suavemente a quitárselas con mis labios--¿Q-que…? —

--Siento si no te gusto que hiciera eso… yo…--

--N-no te preocupes… N-no m-me molesta… --su sonrojo se hizo más profundo, alcanzando casi un color tomate.

--Y si no te molesta eso, puedo hacer esto…--tome su rostro entre mis manos, y bese sus labios con una suavidad infinita.

Yo pensé que no respondería, pero me sorprendió que tratara de seguir mi paso con el beso; aunque era notorio que no tenía maestría en esto.

Perdimos el paso del tiempo, pero el aire que faltaba comenzó a reclamar paso a los pulmones; obligándome a separar de sus labios sabor a miel…

 --S-Sasuke…--

--Naruto… ¿Me harías el honor de ser algo más que amigos? —

--¿Q-que dices? —

Me puse de rodillas y tomé sus manos, dándole un beso en los nudillos.

--¿Querrías ser mi novio? —

Notas finales:

También público esta historia en Wattpad, si quieren, el link esta en mi perfil...


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).