“Dulce”
— ¿Qué..? - el impacto se apoderó de todo su ser, mientras procesaba lo que su amigo había dicho.
— Soo.. Ay esta bien, te lo diré - Baekhyun suspiró. —JongIn no me agrada, pero ayer pude ver con el amor con el que ese maldito te miraba.- tomó la mano de su amigo y lo observó con pena.
Kyungsoo miró sus manos y se soltó lentamente.
— No Baek... Ellos están juntos. Vi el anillo en el dedo de Luhan..
— ¿Has visto el de JongIn?
— No..
— ¿Ves? No tienes pruebas de que ellos están juntos.
— Tampoco tengo pruebas de que no lo están.- frunció el ceño. — Él esta bien como esta, y durante las dos semanas que estaré aquí, voy a mantenerme lo mas alejado de él, ni siquiera quiero verlo de casualidad- se cruzó de brazos firme. —Si Jin Soo quiere ir a jugar, Chanyeol lo llevará, pero por mi parte no quiero volver a encontrarme con..
— ¿Con quien?- al escuchar aquella voz, Kyungsoo se paralizó, y lentamente fue volteando encontrándose con la brillante sonrisa de JongIn.
“Después de todo lo que le dije, como es posible que siga sonriendo de esa forma?”
— JongIn...
— Hola Kyung- respondió contento.
— ¿Que haces por aquí?- preguntó lo mas calmado que pudo.
— Tenia que alcanzar a Sehun que se había olvidado sus llaves- enseñó las llaves y Kyungsoo miró de reojo a BaekHyun que estaba mas que tenso. Disimuladamente miró un poco hacia atrás y vio que venían de vuelta Luhan y Sehun.
—¿Se-Sehun? ¿Tu amigo?
—Si! Recuerdas el que rechazó a Baek en secun...
—Kyungsoo porque no vas con Kai a tomar algo?- Baekhyun interrumpió dando vuelta el cuerpo de JongIn como pudo y comenzó a empujarlos a ambos con su cuerpo ya que no podía por su brazo.
—¡Que buena idea!- el menor de los tres comentó feliz. —Vamos Kyung- tomó su mano y antes de que pudiera reaccionar, se lo estaba llevando. Sorprendido giró su cabeza y vio a BaekHyun guiñándole el ojo. Definitivamente su amigo luego las pagaría.
—Hay un lugar que te gustará conocer...- comentó el moreno. Kyungsoo no respondió, tan solo se quedó viendo fijamente sus manos tomadas.
Podría soltarse, decirle un rotundo "No" e irse, con sus sentimientos y rencor a flor de piel, pero no lo hizo. En cambio solo se sonrojó y se dejó guiar por aquel moreno.
“Si tan solo tuviera una prueba de que no esta casado...”
Sacudió su cabeza y se golpeó mentalmente, como podía pensar en si quiera estar otra vez con aquel chico que lo abandonó?
— Es aquí- JongIn se volteó y le sonrió, antes de abrir la puerta y entrar ambos a aquella cafetería tan agradable.
— Huele delicioso.- por primera vez en tanto tiempo, fue Kyungsoo quien le sonrió al menor, que había quedado sorprendido y encantado con ese gesto que tanto hacia acelerar su corazón.
En el fondo él sabia que las palabras hirientes de Kyungsoo no eran ciertas, pero debía tener una razón para haberlas dicho.
—Si, es muy agradable, aquí sirven el mejor té y café de todo Beijing- sin soltar la mano del mayor lo guió hasta una mesa frente a un gran ventanal, que daba vista hacia un jardín hermosamente floreado.
—Me encanta- pronunció asombrado por tanta belleza.
—Me encanta que te encante- corrió una de las sillas invitándolo a sentarse. Ese gesto caballeroso hacia volar la mente de Kyungsoo, y todo sonrojado hasta las orejas, tomó asiento. —Iré a pedir- sonrió amablemente antes de irse.
Kyungsoo dejó salir todo el aire que tenía almacenado en sus pulmones, y con la carta sobre la mesa comenzó a hacerse aire en la cara.
No entendía porque JongIn fue personalmente a pedir sus ordenes, ni siquiera le había dicho lo que quería, pero en el fondo agradecía ese pequeño momento donde podía respirar.
Mientras esperaba a que llegara JongIn, sacó su celular para enviarle un mensaje a su amigo.
Su rostro se tornó completamente rojo a leer un comentario de su amigo, pero debía disimular su nerviosismo, no podía pensar esas cosas en una cafetería.
Inconscientemente una risa escapó de sus labios cuando vio una foto de su pequeño angel dormir, Baekhyun si que sabia como calmarlo.
—Sin duda aquella sonrisa, es la mas bella de todo el mundo.- levantó su vista encontrándose a JongIn con una bandeja con cosas sobre ella. —Tu sonrisa fue lo primero que me enamoró de ti.- dijo dejando todo sobre la mesa.
Kyungsoo sentía aquel calor tan reconocido en sus mejillas al escuchar aquello. —De que reías?
—Hum.. Es que Baek me envió una foto de Jin Soo durmiendo.- mostró su celular con la imagen de su hijo durmiendo.
Los ojos del moreno brillaron al contemplar tan dulce imagen, sintiendo de nuevo aquella inquietud cuando se trataba de Jin Soo.
—Tienes un hijo maravilloso- comentó pasándole una taza de cappuccino con crema, el favorito de Kyungsoo. —En un momento traen el pastel...- dijo con una sonrisa. —Como decía, Jin Soo es un niño sumamente especial- suspiró relajándose. —Me gustaría tener un hijo como él.
—¿Hijo? Pero ya tienes a Z...
—Disculpen, les traigo lo que ordenaron- una mesera traía con ella dos platos, en uno había una rebanada de pastel de chocolate y crema, y en el otro uno de fresas y crema.
—Gracias- JongIn agradeció y le tendió el plato con el pastel de chocolate y crema. —Se que es tu favorito.
—Si... Aun lo recuerdas- murmuró tímidamente olvidando completamente el tema anterior.
—Nunca podría olvidarme de tus gustos- sonrió mirando su taza de café —Nunca podría olvidar detalles que tengan que ver contigo, Kyungsoo.
Otra vez este sentimiento...
Llevó una mano a su pecho, aferrándose a su chaqueta, aguantando las ganas de llorar que habían llegado de pronto.
¿Porqué aun seguía enamorado de él?
—Gra-gracias por todo- bajó su mirada para dar un sorbo a su delicioso cappuccino. —Sabe muy bien.
—¿Verdad? Siempre vengo a este lugar, me encanta realmente. Ahora prueba el pastel.- asintió tomando el cubierto para tomar un trozo y llevarlo a la boca.
—Mmm... Esto es genial- expresó con sus ojos cerrados. —Me encanta- ambos se sonrieron y comenzaron a comer y tomar, en un espacio cómodo para los dos.
—Entonces... Cuantos años tiene Jin Soo?
—Hum... Cuatro recién cumplidos- respondió con su boca un poco llena, limpiándosela después de tragar.
—Genial- comentó antes de dar el último trago a su café. —Esto estuvo delicioso.
—Totalmente de acuerdo- Kyungsoo rió contagiando al contrario. —Antes de volver a Corea debería traer a Jin Soo aquí.-
Aquello le dio un trago amargo a JongIn, que sonrió con pura tristeza. Era cierto que en algún momento Kyungsoo iba a volverse a Corea, y quizás no volverlo a ver nunca.
—Estoy seguro que le gustará mucho...
—Disculpen otra vez- la misma mesera de hace un momento volvió.
—Ya pagué en caja.
—No, no, no. Venia a traerles esto por cuenta de la casa, ya que es un cliente habitual.- le entregó un pack de pockys a lo cual JongIn miró con curiosidad. —Con permiso.
—¿Qué dijo?
—Nos regalaron esto- movió el pack para mostrárselo.
—¿Pockys?
—Si- abrió el paquete sacando una varita y se la tendió a Kyungsoo, para luego llevarse una a la boca.
Soltó una carcajada al ver la forma en la que Kyungsoo comía, le recordaba a un conejito. Riendo se levantó llevando su varita de pocky a la boca de Kyungsoo, riendo aun mas cuando este comenzó a comer de su mano.
—Eres adorable- dijo entre sonrisas mirándolo como comía. Tomó otro y también se lo dio en la boca pero antes de que pudiera acabarse, posicionó su boca en el otro extremo, comiendo ligeramente hasta que sus labios chocaron, paralizando todo el cuerpo de Kyungsoo, con tan solo aquel dulce contacto.
—¿Recuerdas que asi fue nuestro primer beso?