El manager del grupo guio a los chicos a una de las salas de ensayo, en el camino les comentaba las tareas que les tocaría hacer como asistentes del grupo, entre ellas estaba el manejo e instalación de los instrumentos, la limpieza de la sala de ensayo, y la más importante: cubrir las necesidades de los miembros, ya que Jongdae sólo no podía con cuatro complicadas personas.
Cuando abrieron la puerta, un olor a cigarrillos y alcohol emano desde dentro y un montón de risas se escuchaban.
- ¡¡Chanyeol, deberías ver tu cara!! -Gritó burlón un chico rubio de grandes ojos brillantes.
- ¡Cállate, maldito Luhan! ¿A caso tú nunca has tenido una resaca? -preguntó el gran joven.
- Cállense, par de inútiles, ¿no deberíamos estar hablando sobre él nuevo álbum? -intimidó el guitarrista y líder Kris.
- Tienes razón, preferiría estar en mi casa haciendo mejores cosas que oír a Chanyeol gritar -añadió Yixing, el baterista.
Todo era una confusión entre risas, gritos, maldiciones, groserías, etc.
- Chicos - interrumpe Jongdae, pero nadie lo escucha -Chicos... - nadie parece importarle-¡¡CHICOOOOOOOOOS!!
Los famosos chicos se quedaron sin hablar. Jongdae hizo pasar enfrente de la mesa en donde ellos estaban reunidos a los adolescentes, los cuales no entendían nada.
- Escuchen bien chicos, ya que no puedo seguir siendo asistente personal de ustedes, les traje a estos niños los cuales serán de gran ayuda para ustedes. -informó Jongdae.
- ¡¡¡HAHAHA!!! ¿Estás de coña? Estos pobres Niñatos aún no sabe ni limpiarse el culo solos -Se burló Kris.
- Kris, cállate. -siguió explicando- Son chicos de intercambio, vienen de Sudamérica.
-Se nota, mira lo moreno de ese chico -apuntó Luhan a Jongin.
- Silencio, Luhan. -retomó el tema- Cuando ellos estén en su escuela, yo seré su asistente, y por las tardes nos dividiremos, eso quiere decir que cada uno tendrá un asistente personal.
Los adolescentes no entendían muy bien la situación, su nivel de coreano aún no era muy bueno, más aún no sabían entender todas las palabras ofensiva que este grupo de matones decía.
- OK... -Jongdae comenzó a mirar a los chicos- Sehun, tú serás asistente de... Luhan, Baekhyun, tu ayudarás a Chanyeol y por último Jongin tú con Kris, y yo me quedare con Yixing.
Antes de que Jongdae siguiera explicando, Chanyeol se paró y exclamó:
- Quien quiera que sea Baekhyun, que venga, tenemos una larga tarde y noche.
- Yeol, por favor, no se metan en problemas. -advirtió el manager.
El joven Baekhyun sólo siguió al alto guitarrista, mientras que los demás miembros ayudaban a los niños a entender sus itinerarios.
En una sala de grabaciones, Chanyeol y Baekhyun ordenaban unos papeles que contenían letras de canciones. El pequeño Baek no entendía fluidamente el coreano, pero aun así captaba la idea principal.
- Señor... ¿acaso usted escribe sólo sobre sexo y drogas? -preguntó tímido Baek.
- Escribo sobre lo que vivo, así que recurrentemente utilizo sexo drogas y alcohol.
Ambos estaban sentados alrededor de una mesa redonda, Chanyeol tomó su guitarra y comenzó a improvisar, mientras que Baek organizaba unos papeles. Luego de un rato, Chanyeol gruñó como bestia y le pidió al menor ir a por unos bocadillos para comer mientras él seguía componiendo.
Baek corrió raudo hacia la tienda y miró por todas las tiendas qué bocadillo podría llevarle, se le olvidó completamente preguntar qué es específicamente lo que le gusta, así que pensando en que la suerte le ayudaría, escogió una tarta de manjar lúcuma, corrió nuevamente hacia la agencia y le entregó el postre al guitarrista.
- Señor, le traje una tarta... espero que le guste... -Baek la dejo en la mesa lista para comer.
Chanyeol dejó a un lado su guitarra, se paró al lado de su nuevo asistente, miró detenidamente la tarta suavemente comentó:
- ¿Le preguntaste a Jongdae qué sabores me gustaban?
- No... Solo la compré ¿por qué?
La tarta voló de la mesa y termino en el pecho de Baekhyun, manchando toda su ropa, desde su camiseta hasta sus zapatos.
- ¡¡YAAA!! ¡¿Qué haces maldito demente?! -exclamó Baek .
- No hay cosas que más me desagrade que las cosas dulces, ¿te falla algo o qué? Esto pasa por traer a gente mierda. Limpia eso y v a comprar otra cosa, y que está vez me guste.
- ¿Mierda? -Baek respira y cuenta mentalmente hasta 10- Me cambiaré la camiseta primero, ¿Dónde hay una que pueda ocupar? -preguntó el chico más bajo sacándose su camiseta sucia y con una mirada de odio hacia Chanyeol.
- En algún cajón debe haber alguna de la promoción del tour pasado, y apurar por favor, tengo mucha hambre. Al encontrar una camiseta nueva, Baek se colocó en el piso en sus cuatro extremidades a limpiar con su ya sucia camiseta. Chanyeol iba a regañar pero quedó cautivado en la parte trasera del pequeño e ingenuo adolescente. Miró fijamente a Baekhyun mientas se levantó, y con su mirada dibujo la curvilínea figura de este. Por su mente pasaron todas las personas con las que había estado, sexualmente hablando y ninguna tenía aquellas caderas tan curvilíneas.
Baekhyun salió molesto a comprar y Chanyeol quedó componiendo u nueva canción titulada: Curvas peligrosas.
Chanyeol encontró un nuevo juguete.
Sehun miraba fijamente como Luhan limpiaba las cuerdas de su bajo, en toda la tarde no habían hecho nada distinto a limpiar, ordenar y ver como Luhan tocaba el instrumento.
- ¿No hay algo que pueda hace mientras tu trabajas? -Preguntó Sehun.
- Mm... No te entiendo. ¿No puedes hablar mejor coreano?
- No, llevamos menos de un mes aquí, hago mi mejor esfuerzo. -Se excusa frustrado el pobre Sehun-
- ¿Qué?
- No.puedo.hablar.mejor. -modula muy lento-
Luhan sólo lo miraba sin aún entender, dejo su bajo en su estuche, busco sus cigarrillos y le ofreció una al muchacho al cual no entendía.
Ambos salieron del edificio fumando, Luhan le pidió Sehun que lo siguiera, y este como buen trabajador sólo le hizo caso. Se subieron al auto de Luhan y partieron hacia un destino desconocido para Sehun.
Pasaron unos cuantos minutos antes de llegar a un pequeño café, era un lugar tranquilo, no había mucha gente, se hacía de noche y siendo día de semana en un café tan exclusivo hizo que el ambiente del lugar fuese cálido y tranquilo.
Ambos chicos delgados ordenaron un par bebidas calientes y algo para comer, mientras esperan, Luhan saca un pequeño cuadernillo que estaba repleto de partituras, tomó una hoja en blanco y escribió palabras y su pronunciación.
-¿Intentas ayudarme a hablar mejor? –Escribió Sehun con dificultad.
- Será mejor que aprendas rápido, desde ahora en adelante pasaremos mucho tiempo junto. –Ahora escribió Luhan.
- ¿Por qué te esfuerzas tanto en ayudarme? ¿No es más fácil pedir que me cambien por otra amor?. –Escribió con dificultad el latino.
Luhan miró por unos segundos a Sehun y comenzó a reír a carcajadas.
-Sehun-ah, escribiste mal la última palabra, pero no importa, te entendí de todas formas. La palabra amor y hombre son muy similares.
Después de reír con la anécdota, estuvieron toda la tarde practicando coreano básico, el joven Sehun entendió cosas que en su curso intensivo no captó, confesó que pasó el curso gracias a Baekhyun, ya que fue el único en estudiar y comprender apropiadamente.
Luhan le confesó que él no es coreano, si no que chino, vino a este país en busca de fama, y fue en esos caminos en donde conoció a Chanyeol.
De esa forma, al parecer sólo al chico Sehun le iría bien con su trabajo.
Jongin fregaba sus últimos platos, luego le faltaba el baño y la sala de la casa de Kris, este último estaba en su habitación arreglándose para una cita.
- Jongin, ¿puedes apurar el paso? Mi novio está por llegar y no conoces lo furioso que puede ponerse al ver todo sucio. –Gritó Kris.
Jongin gruñó y pensó en responderle de vuelta, pero recordaba que no estaba solo en esto, así que calmó sus ansias y fue a ordenar la sala.
Pasó una hora aproximadamente cuando Kris volvió a gritar.
- ¿Jongin, qué hora es?
- Faltan cinco minutos para las ocho. –Gritó de vuelta
- ¡Mierda! Mi novio debe estar por llegar, si te ve limpiando por mí, me mata, así que ándate y mañana nos vemos en la tarde.
Jongin sólo aceptó, arregló sus cosas y cuando iba saliendo vio como un auto se estacionaba, caminó hacía la entrada y se encontró con un chico como de su edad, ambos se saludaron por cortesía siguieron su camino.
En la noche después de cenar con Minseok, los chicos exhaustos pensaban cómo mierda decirles a los demás que tal vez esta fue la peor idea que había pasado por sus mentes, pero nadie habló, ya que no querían destruir los sueños de sus amigos.
Lo que los jóvenes latinoamericanos no sabían, es que muchas sorpresas estaban por llegar.